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INSTITUTO POLITÉCNICO NACIONAL

ESCUELA SUPERIOR DE INGENIERÍA Y


ARQUITECTURA
Unidad Ticomán “Ciencias de la Tierra”

ESTUDIO MAGNETOTELÚRICO BIDIMENSIONAL DE


LA PORCIÓN CENTRAL DEL PROSPECTO
GEOTÉRMICO DE ACOCULCO, PUEBLA.

TESIS
Que para obtener el título de:
INGENIERO GEOFÍSICO

Presenta:
YASMIN HERNÁNDEZ ABURTO

Asesor interno:
DR. AMBROSIO AQUINO LÓPEZ
Asesor externo:
DRA. CLAUDIA ARANGO GALVÁN

Ciudad de México, México. Marzo, 2021


Dependencia
Escuela Superior
Escuela,deCentro
Ingeniería
o
y Arquitectura
Unidad
Unidad Ticomán

Folio
EP Y T/011/2021.

APROBACIÓN

CDMX, 23 de febrero de 2021.

ING. FERNANDO RODRÍGUEZ CHÁVEZ


SUBDIRECTOR ACADÉMICO
PRESENTE

Por este conducto, hacemos constar que el Tema, por la opción de Tesis Individual, “ESTUDIO MAGNETOTELÚRICO
BIDIMENSIONAL DE LA PORCIÓN CENTRAL DEL PROSPECTO GEOTÉRMICO DE ACOCULCO, PUEBLA” presentado por la
pasante del Programa Académico de Ingeniería Geofísica, C. YASMIN HERNANDEZ ABURTO, fue revisado y aprobado por los
suscritos considerándolo ampliamente desarrollado, por lo tanto, esa Subdirección a su cargo, puede señalar fecha para
realizar el Examen Oral.

TITULARES

M en C. LEOBARDO SALAZAR PEÑA ING. ROBERTO HERNANDEZ ZUÑIGA

ING. IRAIS MARÍA LIZETTE ORTIZ PRIETO ING. ALEJANDRO MENDOZA MARAVILLAS

ING. AMBROSIO AQUINO LOPEZ

Nombre de Calle, No. 000, Colonia, C.P. 00000, Municipio o Alcaldía, Estado.
Tel: (00) 0000 0000 ipn.mx
Av. Ticomán
Nombre de Calle,No.
No.600,
000,Colonia SanC.P.
Colonia, José00000,
Ticomán, C.P. 07340,
Municipio Alcaldía
o Alcaldía, Gustavo A. Madero,
Estado.
Ciudad de México.
Tel: (55) 0000 0000. Tel: (55) 5729 6000 Ext. 56001, www.esiaticipn.mx
Ipn.mx
Agradecimientos

A mi asesor interno, Dr. Ambrosio Aquino López, y a mis sinodales, M. en C.


Leobardo Salazar Peña, Ing. Roberto Hernández Zúñiga, Ing. Alejandro Mendoza
Maravillas, Ing. Irais María Lizette Ortiz Prieto, por revisar este trabajo y por los
comentarios que ayudaron a complementarlo.

Quiero agradecer a mi asesora externa, la Dra. Claudia Arango Galván, por darme
la oportunidad de realizar la tesis con ella, por compartirme su conocimiento y por
las críticas constructivas para este escrito.

Al M. en C. José Luis Salas Corrales por ser parte fundamental en el desarrollo de


este trabajo, por el tiempo, paciencia y dedicación que quedan plasmados en este
proyecto de investigación.

A mis padres, Enrique y Rosa, y a mis hermanas, Liliana y Marisol, porque sin su
apoyo, confianza y cariño no habría llegado a esta etapa, porque son el motivo y
razón para seguir adelante y por haber estado presentes en todo momento. Los
amo.

A mis amigos, que me apoyaron y me dieron ánimos para seguir adelante, por la
convivencia y experiencias de la vida universitaria.

A popi por acompañarme en cada desvelo, por ser la alegría en días no tan buenos,
por ser una amiga incondicional.

A la vida por permitirme llegar hasta este momento, por tener salud y estar rodeada
de gente a la que quiero y me aprecia, por todo lo bueno que está por venir.

GRACIAS
Esta tesis fue realizada en el marco del proyecto GEMex: Cooperación México-
Europa para la investigación de sistemas geotérmicos mejorados (EGS) y sistemas
geotérmicos supercalientes (SHGS), financiado por el Fondo de Sustentabilidad
Energética SENER-CONACYT, No. de Proyecto 2015-04-268074, así como por el
esquema Horizon 2020 de la Unión Europea bajo el acuerdo No. 727550. Para más
información consultar http://www.gemex-h2020.eu.

La infraestructura fue proporcionada por el Grupo de Exploración Geofísica del


Instituto de Geofísica de la UNAM.
Resumen

La energía geotérmica ha cobrado mayor importancia en las últimas décadas


por el alza en la demanda de combustibles fósiles debido al aumento acelerado de
la población y al cambio climático asociado, lo que impulsa a utilizar energías limpias
y renovables. En el presente trabajo se implementó un estudio magnetotelúrico con
el propósito de caracterizar geoeléctricamente la porción central del prospecto
geotérmico de Acoculco, Puebla y poder inferir las principales estructuras asociadas
a la posible existencia de un yacimiento geotérmico. La adquisición total consistió
en 71 sondeos, de los cuales sólo se tomaron 15 y se distribuyen en dos líneas: un
perfil con dirección NE-SW y otro en dirección NW-SE, para poder inferir las
estructuras principales. El flujo de trabajo consiste en un análisis de las series de
tiempo, estimación del tensor de impedancias a partir de las cuales se generan las
curvas de resistividad aparente y de fase que posteriormente serán modeladas,
análisis direccional y dimensional utilizando el tensor de fase, y finalmente el
modelado a partir de una inversión 2D basada en el algoritmo de gradientes
conjugados no lineales. Como resultado se obtuvo la unidad conductiva UC1 sin
continuidad lateral asociada con una zona de alteración hidrotermal, una unidad
conductiva UC2 con resistividades de 20 a 90 Ωm. La unidad resistiva UR1 presenta
valores superiores a 450 Ωm la cual podría estar relacionada con el intrusivo
responsable del metamorfismo hallado en el Pozo EAC-1, finalmente, la unidad UR2
con resistividades de 200 a 300 Ωm.

i
Yasmin Hernández Aburto
Abstract

Geothermal energy has become relevant in recent decades because of the


rise in demand for fossil fuels due to the exponential increase in population and the
associated climate change, which encourages the use of clean and renewable
energy such as geothermal energy. In the present work, a magnetotelluric study was
implemented with the aim of perform the geoelectrical characterization of the central
portion of the Acoculco geothermal prospect, located in the state of Puebla, and to
infer the main structures associated with the possible existence of a geothermal
reservoir. The total acquisition consisted of 71 surveys, of which only 15 were taken
and distributed over two lines: one profile in NE-SW direction and other one in NW-
SE direction, to infer the major structures. The workflow consists of time series
analysis, impedance tensor estimation to generate apparent resistivity and phase
curves, directional and dimensional analysis using the phase tensor scheme, and
finally 2D inversion modeling based on the nonlinear conjugate gradients algorithm.
The results show a conductive unit, UC1, associated to hydrothermal alteration zone.
Another conductive unit, UC2, with resistivities ranging from 20 to 90 Ωm. A resistive
unit, UR1, showing higher resistivity values (>450 Ωm) possibly associated to an
intrusive which is responsible for the metamorphism found in the EAC-1 Well. Finally,
a UR2 resistive unit with resistivities 200 to 300 Ωm.

ii
Yasmin Hernández Aburto
ÍNDICE

Resumen ...................................................................................................... i
Abstract ...................................................................................................... ii
Introducción ................................................................................................ 1
Objetivo General ...............................................................................................................5
Objetivos Particulares .......................................................................................................5
Capítulo I Área de estudio. .......................................................................... 6
1.1 Localización .................................................................................................................6
1.2 Geología ......................................................................................................................7
1.3 Evolución Volcánica .....................................................................................................8
1.4 Tectónica de la zona de estudio ................................................................................16
1.5 Estratigrafía ...............................................................................................................19
1.6 Estudios Previos ........................................................................................................23
Capítulo II Fundamentos teóricos del método magnetotelúrico. ............... 26
2.1 Teoría Electromagnética............................................................................................27
2.1.1 Ecuaciones de Maxwell .......................................................................................28
2.1.2 Relaciones constitutivas .....................................................................................29
2.1.3 Ecuaciones de onda electromagnética ...............................................................31
2.2 Fundamentos del método magnetotelúrico ..............................................................32
2.2.1 Clasificación y Variantes .....................................................................................32
2.2.2 Fuentes de campo EM ........................................................................................34
2.2.3 Asunciones Teóricas ...........................................................................................35
2.3 Tensor de impedancias..............................................................................................36
2.4 Profundidad de penetración .....................................................................................38
2.5 Tipper o función de transferencia geomagnética ......................................................39
2.6 Tensor de fase ...........................................................................................................40
Capítulo III Adquisición y procesamiento de datos magnetotelúricos. ....... 44
3.1 Ubicación de los sondeos ..........................................................................................44
3.2 Diseño de adquisición ...............................................................................................45
3.2.1 Equipo Utilizado ..................................................................................................47
3.3 Procesamiento de datos Magnetotelúricos...............................................................49
3.3.1 Análisis de las Series de Tiempo .........................................................................49
3.3.2 Estimación del tensor de impedancias................................................................50
3.3.3 Análisis Dimensional y Direccional ......................................................................51
Capítulo IV Modelado bidimensional de datos magnetotelúricos. ............. 55
4.1 Procedimiento de modelado de datos MT ................................................................60
Capítulo V Discusión de resultados. ........................................................... 63
Conclusiones ............................................................................................. 67
Bibliografía ................................................................................................ 68
Anexos ...................................................................................................... 74
Introducción

El actual sistema energético a nivel mundial está basado en la generación de


energía a partir de combustibles fósiles como el petróleo 33.6%, el carbón 27.2% y
el gas 23.9%, representando el 84.7% de total (Statistical Review of World Energy
2019, 2020). La generación de energía a partir de estas materias está siendo
ampliamente replanteada por varias razones: son recursos limitados que se
encuentran en puntos específicos del planeta, su uso a escala mundial está
provocando efectos en el medio ambiente y la salud de los seres humanos; en el
verano de 2003 en Europa se registró un exceso de mortalidad de 70,000
defunciones ligadas a una ola de calor que provocó enfermedades cardiovasculares
y respiratorias de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS) en 2018,
asimismo se están agotando las reservas naturales comprometiendo el futuro de las
nuevas generaciones.

La Organización de las Naciones Unidas (ONU) consta que el crecimiento de


la población mundial va de 2 600 millones de personas en 1950 a 7 300 millones
para el 2015, este aumento ha ocasionado cambios en nuestro planeta. Por
ejemplo, se ha comprobado que la temperatura media de la Tierra ha sufrido un
aumento durante el siglo XX de 0.6 ± 0.2 °C, además de que existe una disminución
real de la cobertura de hielo ártico y un aumento de la frecuencia e intensidad de
los desastres naturales como huracanes, sequías y lluvias torrenciales, siendo
resultados de la existencia del cambio climático. Esto ha ocasionado que cada vez
haya más conciencia sobre la necesidad de proteger el medio ambiente y emplear
energías renovables como lo es la energía geotérmica (Semarnat, 2014).

La producción de energía geotérmica comenzó con los experimentos de


Conti en Italia entre 1904 y 1905. La primera planta geotérmica se construyó en
1913 en el yacimiento Lardarello, Italia, cabe mencionar que en la actualidad este
yacimiento sigue activo. Posteriormente se instaló otra planta en Nueva Zelanda en
1958, con el yacimiento Wairakei, mientras que en México fue hasta 1959, con el

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Yasmin Hernández Aburto
Introducción

yacimiento Pathé y un año después en Estados Unidos con el yacimiento los


Géisers. A finales de 1973 se produjo la crisis del petróleo, dando pauta a que la
geotermia tuviera un impulso más grande, incorporándose países como Japón,
Indonesia, Islandia, Suecia, Finlandia, El Salvador, Costa Rica, principalmente.
(Instituto Geológico y Minero de España, 2019).

Un yacimiento geotérmico de alta entalpía es aquel lugar que cumple con las
condiciones para contener un fluido en un área delimitada a temperaturas mayores
a 100°C. Para ello se necesitan tres componentes importantes, un foco de calor
activo, una roca almacén que es altamente permeable para que permita la
circulación del fluido y el flujo de calor desde el interior de la Tierra, y una roca sello,
que es prácticamente impermeable, lo cual impide o limita el escape del fluido.
Cuando se dan estas condiciones, se puede decir que estamos tratando con la
existencia de un yacimiento geotérmico.

Hasta el año 2015, México era el cuarto país del mundo con mayor capacidad
instalada para la producción de energía geotérmica, con una capacidad de 958 MW
que aportaban 1.84% de la generación de electricidad en México. Actualmente se
encuentra en el sexto lugar a nivel mundial por su capacidad instalada, operando
con los campos de Cerro Prieto en Baja California, Los Azufres en Michoacán, Los
Humeros en Puebla, Tres Vírgenes en Baja California Sur y Domo San Pedro en
Nayarit (Jorquera, 2018).

Los mapas de los proyectos P01 y P02 del Centro Mexicano de Innovación
de Energía Geotérmica (CeMIEGeo) corresponden al mapa de gradiente
geotérmico y flujo de calor para la República Mexicana y al mapa de provincias
geotérmicas de México a partir de la geoquímica de fluidos y distribución de
acuíferos, muestran que, salvo la península de Yucatán, el resto del territorio
mexicano tiene un gran potencial geotérmico por la actividad tectónica y volcánica
que caracteriza al país.

Las regiones donde la CFE ha ubicado mayor factibilidad para estos


proyectos son Cerritos Colorados en Jalisco, El Ceboruco en Nayarit, Piedras de

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Yasmin Hernández Aburto
Introducción

Lumbre en Chihuahua y Tulechek en Baja California, así como Acoculco en Puebla


cerca de la frontera con Veracruz e Hidalgo (Meana, 2014).

La mayoría de los campos geotérmicos del mundo explotados en la


actualidad están asociados con la actividad volcánica y/o actividad tectónica
reciente y comúnmente se han descubierto a través de manifestaciones en
superficie, como aguas termales, manantiales y fumarolas. Se han encontrado
algunos campos geotérmicos a pesar de que no se presentaban manifestaciones
superficiales a través de estudios geofísicos, geológicos, de geoquímica, entre
otros, se infiere que otras áreas tienen un alto potencial geotérmico sobre la base
de datos conocidos de flujo de calor. Para explorar tales áreas y depósitos con más
detalle y establecer mejor su potencial y alcance, se aplican tanto los métodos
geológicos como los geofísicos (Huenges, 2010). Los métodos geológicos son
directos y se enfocan principalmente en la composición, procesos, eventos e historia
de las rocas, mientras que los métodos geofísicos son indirectos, y estudian las
propiedades físicas de la Tierra a profundidad, dicho de otro modo, determina la
estructura de la Tierra a partir de diversas propiedades físicas características de las
rocas que la forman.

Los métodos geofísicos han jugado un papel clave en la exploración


geotérmica por muchos años, generalmente están destinados a proporcionar
información sobre un posible yacimiento geotérmico, la fuente de calor y la situación
hidráulica. Adicionalmente ayudan a obtener información precisa sobre la
configuración estructural y tectónica, campo de tensión regional y local, y muchos
otros parámetros en un rango de profundidad de kilómetros, la profundidad de
investigación está relacionada con el tiempo de registro de la señal y puede llegar
hasta los 250 km, que son críticos para posteriores procedimientos de estimulación
(Huenges, 2010).

En el presente trabajo se utilizó el método magnetotelúrico de fuente natural


debido a su alcance en profundidad. El principio físico consiste en registrar de forma
simultánea las variaciones del campo eléctrico y magnético naturales de la Tierra.

3
Yasmin Hernández Aburto
Introducción

Las variaciones del campo eléctrico y magnético se relacionan mediante el


tensor de impedancia. Este tensor constituye la respuesta del medio y de él se
obtiene la resistividad de subsuelo y las diferencias de fase entre ambos campos, a
diferentes frecuencias. Cuando la estructura eléctrica del subsuelo es simple (un
medio estratificado), el tensor de impedancia se reduce a una sola componente; a
mayor complejidad, por ejemplo, un medio bidimensional (una estructura regional
con orientación preferente, como una falla), el tensor tiene dos componentes. Con
la ayuda de procedimientos de técnicas de inversión geofísica y modelos
unidimensionales, bidimensionales y tridimensionales (cual sea el caso), se obtiene
la resistividad del subsuelo a diferentes profundidades. Estos modelos deben ser
congruentes con el conocimiento que se tenga de la geología del subsuelo
(Fernández et al. 1987).

El método magnetotelúrico se ha aplicado con excelentes resultados para la


caracterización de yacimientos geotérmicos alrededor del mundo, por ejemplo, en
España Piña et al. (2014), en Islandia Gasperikova et al. (2015), Páll et al. (2018),
en Estados Unidos de América Cumming y Mackie (2007, 2010), Newman, et al.
(2008), en Iran Oskooi (2015), en Japón Mogi y Nakama, (1993), Ushijima et al.
(2005), en Colombia Rojas-Sarmiento (2014), Almaguer (2013) e Italia Oskooi
(2010) entre otros.

Particularmente en México también se han realizado algunos trabajos que


aplican el método magnetotelúrico en la caracterización de yacimientos
geotérmicos, por ejemplo, el de González (1982), Carrillo (2016), Oliver et al. (2017),
Arango-Galván et al. (2013), todos ellos con resultados satisfactorios.

Con todos estos antecedentes, el objetivo general de este trabajo de investigación


se enfoca en:

4
Yasmin Hernández Aburto
Introducción

Objetivo General

Caracterizar geoeléctricamente una porción del prospecto geotérmico de Acoculco,


a partir de datos magnetotelúricos para inferir las principales estructuras asociadas
a la posible existencia de un yacimiento geotérmico.

Objetivos Particulares

Para poder alcanzar el Objetivo General es necesario proponer objetivos


particulares, que son:

• Evaluar la calidad los datos magnetotelúricos obtenidos en la zona de interés.


• Realizar un análisis dimensional y direccional de los datos con la finalidad de
obtener las direcciones principales de las estructuras.
• Corregir los datos por efectos de distorsión galvánica con datos de transitorio
electromagnético, que se obtuvieron de forma simultánea a MT.
• Generar modelos geoeléctricos bidimensionales a lo largo de dos perfiles de
interés.
• Interpretar los resultados obtenidos a partir de la correlación con información
geológica disponible.

5
Yasmin Hernández Aburto
Capítulo I Área de estudio.

En cualquier estudio geofísico es de suma importancia realizar una


recopilación de información existente de la zona de estudio, esto es para tener una
idea de la respuesta geofísica a obtener de acuerdo con las condiciones geológicas
del sitio.

En este capítulo se abordará la localización del área de estudio, así como


aspectos geológicos a nivel regional y local de la zona, evolución volcánica,
tectónica de Placas, estratigrafía y estudios previos.

1.1 Localización

Figura 1. Localización de la zona geotérmica Acoculco, Puebla

El complejo caldérico de Acoculco (ACC) está localizado en la parte este del


cinturón volcánico Trans-Mexicano, muy cerca de los límites con la Sierra Madre
Oriental, en la zona norte del estado de Puebla colindando con el estado de Hidalgo
(Figura 1), en el municipio de Chignahuapan, Pue., a 85 km al noroeste de la ciudad

6
Yasmin Hernández Aburto
Área de estudio

de Puebla y a 65 km al sureste de la ciudad de Pachuca, Hidalgo. La localidad de


Acoculco se localiza entre las coordenadas 19°47‟ y 20°02‟ de latitud norte y 97°55‟
y 98°20‟ de longitud oeste. Su elevación está entre los 2800 y 2900 msnm.

1.2 Geología

La zona geotérmica de Acoculco se caracteriza por una Caldera volcánica de


18 km de diámetro y una actividad volcánica representada por domos riolíticos,
conos de escoria y derrames andesíticos. A nivel regional el área queda
comprendida en los límites de la Sierra Madre Oriental y el cinturón volcánico Trans-
Mexicano, ocupando un área de 1290 km2 aproximadamente (De la Cruz Martínez
y Castillo Hernández, 1986). El origen del vulcanismo del cinturón volcánico Trans-
Mexicano es atribuido a la subducción de la Placa de Cocos debajo de la Placa
Norteamericana (Nixon et al.1987) junto con una fuerte contribución del manto
litosférico (Verma, 2001).

Los manantiales que afloran en ella son relativamente fríos, algunos de ellos
con abundante desprendimiento de bióxido de carbono, así como algunas zonas de
alteración hidrotermal (caolinización y silicificación) con elevadas concentraciones
de boro (hasta 226 ppm) (Hiriart, 2011).

A nivel regional las rocas que afloran alrededor de la zona son sedimentarias
y volcánicas. Las rocas sedimentarias corresponden principalmente a calizas de la
Sierra Madre Oriental, la mayoría de ellas del Cretácico y Jurásico. En general, las
rocas se encuentran muy plegadas y dislocadas por fallas laterales y cabalgaduras,
como consecuencia de los esfuerzos compresivos originados durante la Orogenia
Laramide.

Subyaciendo discordantemente a las rocas sedimentarias se encuentran


rocas volcánicas representadas por andesitas, riolitas y productos piroclásticos
asociados a las mismas, cuyas edades se estimaron del Mioceno al Cuaternario,

7
Yasmin Hernández Aburto
Área de estudio

esta relación estratigráfica se puede observar en los límites del cinturón volcánico
Trans-Mexicano con la Sierra Madre Oriental.

En la zona el límite oriental entre las rocas volcánicas y sedimentarias lo


constituye el río Axajalpan. Se ha documentado que el cauce de este río
corresponde a una importante estructura regional, ya que existe un fuerte desnivel
de 500 m entre las calizas de ambas márgenes del río, adicionalmente, en el cauce
del río brotan cuatro manantiales termales entre los poblados de Chignahuapan y
Zacatlán (De la Cruz Martínez y Castillo Hernández, 1986). Las aguas de los
manantiales son de tipo sulfatado ácido y bicarbonatado sódico, probablemente
originados por la mezcla de ácido sulfhídrico de origen geotérmico con agua
superficial, y con temperaturas de fondo de casi 240°C según el geotermómetro de
potasio-sodio. En algunos manantiales termales (49°C) de alrededor, a unos 18
kilómetros de las zonas alteradas, la temperatura de fondo se calculó en 273°C;
estos manantiales se consideran como una probable descarga lateral del yacimiento
geotérmico del subsuelo (Hiriart, 2011).

Al oriente del río Axajalpan hay un bloque rectangular de rocas sedimentarias


que se prolonga meridionalmente hasta el límite occidental del graben Libres-
Oriental, dicho bloque semeja, a nivel regional, el pilar flanqueado por dos fosas
tectónicas, ubicándose la zona termal de la Caldera de Acoculco en la depresión
tectónica occidental, mientras que en la depresión oriental se ubica la Caldera de
los Humeros (De la Cruz Martínez y Castillo Hernández, 1986).

1.3 Evolución Volcánica

De acuerdo con López-Hernández (2009), la actividad volcánica se puede


agrupar en cuatro eventos volcánicos principales: el primero, relacionado con el
vulcanismo previo al colapso de la Caldera, el segundo, asociado con la generación
del colapso, el tercero, ligado a la actividad volcánica post-Caldera y el cuarto y más

8
Yasmin Hernández Aburto
Área de estudio

reciente relacionado con la reactivación de la falla del borde caldérico con el


emplazamiento de conos monogenéticos.

Primer evento de Acoculco. Actividad volcánica pre-Caldera (1.7-1.6 Ma)

El vulcanismo de Acoculco se inició después de un hiato volcánico de 0.9 Ma


que ocurrió sólo dentro de la Caldera de Tulancingo mientras que en las
inmediaciones se emplazaban volcanes monogenéticos. Se inició con actividad
efusiva que dio origen a la acumulación de cuatro unidades de diferente
composición química. En el N se derramaron lavas más antiguas de composición
andesítica-basáltica conocidas como Los Laureles. En el centro y E, sobre la unidad
anterior se acumularon las lavas dacíticas de Cruz Colorada (1.6 Ma). En el S
fluyeron las lavas basálticas que formaron una extensa mesa hace 1.6 Ma, y al W
se emplazaron los primeros domos riolíticos a los 1.7 Ma (Anexo 2).

Segundo evento de Acoculco. Colapso de la Caldera (1.4 - 1.26 Ma)

En general, las unidades inferiores contienen mayores cantidades de líticos


de andesita que disminuyen hacia la cima, incrementándose los líticos de riolita. El
volumen total de la ignimbrita Acoculco se estimó en 7.8 km3, los depósitos se
acumularon principalmente en los valles, dentro del borde caldérico, lo cual produjo
un colapso tipo “trap door” (López-Hernández, 2009), con mayor subsidencia en la
zona N. En el NE se observan evidencias de este colapso, existe un conjunto de
fallas normales que afectaron a las rocas más antiguas (andesitas Los Laureles) y
las partes bajas de la ignimbrita Acoculco. Esto demuestra que el fallamiento ocurrió
simultáneamente con la acumulación de la ignimbrita (Anexo 2).

Tercer evento de Acoculco. Actividad post-Caldera (1.3 – 0.8 Ma)

Durante la sedimentación lacustre y como resultados de un reajuste de la


presión en la cámara magmática se produjo una ligera surgencia que tuvo su centro
al W del poblado de Acoculco. En este sitio debido al empuje vertical se generó un
esfuerzo de tensión que formó un conjunto de fallas normales escalonadas de
dirección E-W que dieron lugar a un graben apical. Como resultado de este

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Yasmin Hernández Aburto
Área de estudio

fenómeno, los sedimentos lacustres se bascularon y deformaron. La inclinación de


estos depósitos con diferentes orientaciones muestra que el levantamiento no se
concentró en un solo sitio (Anexo 2).

Evento terminal de Acoculco

Después de un lapso de 0.5 Ma de inactividad, el ciclo volcánico de la Caldera


concluye con el emplazamiento de un cono monogenético en el NW, conocido como
La Paila NW, de composición andesita basáltica a los 0.24 Ma. Actualmente, esta
Caldera se encuentra en la etapa hidrotermal que constituye la fase terminal del
ciclo volcánico. Este fenómeno ha originado que se depositen minerales
secundarios, disminuyendo la permeabilidad y dando lugar al auto sellamiento del
sistema hidrotermal. Esto impide la formación de manifestaciones termales
superficiales y en su lugar sólo se liberan a la atmósfera gases fríos de origen
magmático que logran ascender a través de fisuras muy reducidas, perdiendo casi
toda su temperatura (Anexo 2).

Estudios más recientes realizados por Sosa-Ceballos et al. (2018) de


petrografía, geoquímica, procesos magmáticos, experimentos hidrotermales, entre
otros, explican cuatro procesos volcánicos en el área de estudio (Anexo 3): erupción
de formación de la Caldera, vulcanismo temprano post-Caldera, vulcanismo tardío
post-Caldera y vulcanismo extra Caldera, con la conclusión que, el complejo de la
Caldera de Acoculco estuvo en actividad magmática durante el periodo de 2.7-
0.0006 Ma y actualmente presenta actividad hidrotermal.

Esta actividad es una consecuencia indirecta de la evolución del yacimiento


bajo la estructura de la Caldera, dicha actividad está asociada al constante
movimiento tectónico y es la fuente de calor que mantiene activo al sistema
geotérmico de Acoculco (Anexo 3).

Avellán et al. (2018) refuerzan la propuesta por Sosa-Ceballos et al. (2018)


que explican cuatro procesos volcánicos en el área de estudio, describiendo una
sección estratigráfica para cada evento (Figura 2), en el cual detalla la edad, las
unidades geológicas y renombra estos eventos: pre-Caldera, Syn-Caldera, post-

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Yasmin Hernández Aburto
Área de estudio

Caldera temprana, y post-Caldera tardía, así mismo, considera un evento más, no


ligado directamente, pero asociado al campo volcánico de Apan Tezontepec que
representa la etapa temprana del mioceno del CVTM.

Figura 2. Unidades volcánicas de formación de la Caldera de Acoculco y la extra-Caldera del


campo volcánico de Apan Tezontepec (Avellán et al. 2018).

11
Yasmin Hernández Aburto
Área de estudio

Las rocas de ACC fueron divididas en 30 unidades formadas en diferentes


etapas de la evolución volcánica de la Caldera, pre, syn, temprana-post, final-post
Caldera y extra-Caldera del complejo volcánico Apan-Tezontepec como se muestra
en la Figura 2.

Formación de la Caldera (∼2.7 Ma)

Antes de la formación de la Caldera, los domos de lava el Puente y Terrecillos


habían sido extruidos en el área (Figura 3). Estos domos de composición andesítica
y dacitica fueron emplazados durante el Pleistoceno entre 3.9 y 3 Ma. después de
0.3 Ma una larga cantidad de magma andesítica estancada a profundidad se
preparaba para una erupción mayor. Este magma calco-alcalino bajo presión
provoca que la roca confinada inicia la emisión de piroclásticos andesíticos
(Ignimbrita Acoculco). Esta emisión continua de ignimbrita eventualmente disminuyó
la presión magmática y debilitó el techo de la cámara magmática provocando su
colapso, formando una Caldera asimétrica de 18 x 16 km. (Figura 4). Este colapso
siguió estructuras antiguas, como la falla Manzanito NW-SE en el oeste-suroeste y
norte del interior de la Caldera porque en otros lugares estaba cubierto por depósitos
más jóvenes (Avellán et al. 2019).

Figura 3. Etapa de Vulcanismo Pre-Caldera. (Avellán et al. 2019).

12
Yasmin Hernández Aburto
Área de estudio

Figura 4. Erupción de la formación de la Caldera (Avellán et al. 2019).

Fase temprana-post Caldera

Después de la formación de la Caldera, seguido de un corto periodo de


tiempo (∼0.1 Ma) se desarrolló un lago con sedimentación lacustre (Figura 4). El
vulcanismo temprano-post Caldera está representado por erupciones que
ocurrieron principalmente en el interior de la Caldera con un volumen mínimo de 27
km3 (Figura 5). Este vulcanismo ventila sobre el borde de fallas, fallas normales
intra-Caldera que formaron o actuaron durante el colapso de la Caldera o fueron
reactivadas por el movimiento tectónico extensional, que siguen afectando en la
actualidad. Dichas modificaciones del campo de esfuerzos locales permitieron el
ascenso de basalto peralcalino y magmas basálticos tracandesiticas que fueron
generadas por un derretimiento parcial del manto, genéticamente no relacionado

13
Yasmin Hernández Aburto
Área de estudio

con magmas cal-alcalinas que dominan en actividades pre-Caldera y Caldera.


(Avellán et al. 2019)

Figura 5. Vulcanismo temprano post-Caldera del complejo de Acoculco. (Avellán et al. 2019)

Fase final-post Caldera

Alrededor de 0.2 Ma la Caldera entró a una nueva fase de vulcanismo cerca


del borde de la Caldera por emisiones de domos y flujos de lava, dos ignimbritas y
cuatro conos de escoria (Figura 6). En un periodo extendido de vulcanismo
intermitente ocurrido entre 2 y 1.3 Ma con ocurrencia de 13 erupciones efusivas del
borde de la Caldera. Durante este periodo final-post Caldera, el magma peralcalino
gradualmente dominó sobre el magma calco-alcalino. El volumen total de magma
emitido durante la fase final post-Caldera fue de ∼90 km3. Acoculco ha estado en un
sitio con vulcanismo persistente desde 2.7 Ma que incluye la presencia de
intrusiones jóvenes (183 ± 36 ka) sobre la cima del Pozo EAC-1. Este magmatismo

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Yasmin Hernández Aburto
Área de estudio

intenso, así como también explosiones hidrotermales y manifestaciones


geotermales, indican que el complejo aún sigue activo y podría representar un sitio
para desarrollar un campo geotérmico (Avellán et al. 2019)

Figura 6. Vulcanismo final post-Caldera y Extra-Caldera del complejo de Acoculco. (Avellán


et al. 2019)

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Yasmin Hernández Aburto
Área de estudio

1.4 Tectónica de la zona de estudio

La Caldera de Acoculco está localizada al este del Cinturón Volcánico Trans-


Mexicano (CVTM). El CVTM está directamente ligado a la subducción de las Placas
de Rivera y Cocos debajo de la Placa Norteamericana (Demant,1978; Avellán et al.
2018,2019), (Figura 7). El CVTM es un arco de 1000 km de longitud con una
orientación transversal ∼E – W que se extiende desde el Estado de Nayarit (hasta
al oeste) al Estado de Veracruz (al este). La Placa de Cocos que está debajo de la
región de Acoculco se encuentra a profundidades entre 260 y 320 km; y el espesor
de la corteza está entre 45 y 50 km (Urrutia-Fucugauchi y Flores-Ruiz, 1996; Avellán
et al. 2018).

Figura 7. Tectónica regional de la parte centro de México, mostrando la subducción activa de


las Placas de Rivera y Cocos debajo de la Placa Norte Americana, localización de la Caldera
de Acoculco (AC) y los Humeros (LH) (Avellán et al. 2019).

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Yasmin Hernández Aburto
Área de estudio

Las rocas del área de Acoculco están deformadas en promedio por tres
sistemas de fallas (Figura 8): el sistema de fallas Tenochtitlán-Apan con un rumbo
NE, y el sistema de fallas Tulancingo-Tlaxco con rumbo NW.

Localmente el sistema de fallas Tenochtitlán-Apan está representado por las


fallas de Apan-Tlaloc y Chignahuapan, y el sistema de fallas Tulancingo-Tlaxco está
representado por la falla el Manzanito. El rumbo NE y NW del sistema de fallas
normales se intercepta con otras creando una configuración de grabens, mitad
grabens y horsts (Avellán et al. 2018) (Figura 8).

La Caldera de Acoculco está localizada en el horst de Rosario-Acoculco NE-


SW (García-Palomo et al. 2017; Avellán et al. 2018) que está delimitado al oeste
por la falla de Apan-Tlaloc, y al este por la falla de Chignahuapan (Avellán et al.
2018) (Figura 8).

Tiene longitud de 65 km, ancho de 22 km, altitud de 3200 m, y con inclinación


22 ° hacia el SE. Este horst consiste en rocas del mioceno (Riolita de Matamoros,
las andesitas Apan y El Peñón), y el Plioceno Caldera Acoculco (López-Hernández,
2009).

17
Yasmin Hernández Aburto
Área de estudio

Figura 8. El mapa de relieve gris muestra la delimitación de la Caldera de Acoculco por los
sistemas de fallas y villas de la región (Avellán et al. 2018).

De igual manera la sucesión de la Caldera de Acoculco está intercalada con


depósitos del campo volcánico Apan-Tezontepec, que consiste en 280 conos de
escoria, 10 escudo volcanes y 5 domos (García-Palomo et al. 2002; Avellán et al.
2018) La mayoría de los volcanes están formados de lavas andesíticas basálticas
con fenocristales de olivino y plagioclasas, y domos dacíticos.

La edad del campo volcánico Apan-Tezontepec se expande desde los


últimos 2.25 ± 0.004 Ma del Holoceno. (García-Tovar et al. 2015; Avellán et al.
2018).

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Yasmin Hernández Aburto
Área de estudio

1.5 Estratigrafía

La secuencia estratigráfica de la zona de estudio puede ser descrita si se


consideran los datos obtenidos por los Pozos exploratorios EAC-1 y EAC-2 (Figura
9), los cuales fueron perforados por la CFE en el centro del complejo de Acoculco.

A) B)

Figura 9. A) Columna estratigráfica del Pozo EAC-1 (López-Hernández, 2009). B) Columna


estratigráfica del Pozo EAC-2 (Lorenzo-Pulido et al. 2011).

El Pozo EAC-1 fue perforado en 1995 en la zona geotérmica de Acoculco,


con el objetivo de verificar la presencia de altas temperaturas a profundidad y
estudiar las condiciones de permeabilidad en el subsuelo. Es un Pozo vertical con
una profundidad de 2000 m, del cual se obtuvo una descripción litográfica con la

19
Yasmin Hernández Aburto
Área de estudio

siguiente información: de 0 a 800 m de profundidad las unidades encontradas están


formadas, desde la base hacia la cima, por riodacita Las Minas, la ignimbrita Los
Azufres, la dacita Cruz Colorada y toba vítrea, esta secuencia volcánica cubre el
Plioceno-Cuaternario. Posteriormente de 800 a 1600 m de profundidad hay una
secuencia de rocas metamórficas compuesta principalmente de skarn y una zona
delgada de mármol, esta unidad es parte de los sedimentos cretácicos de la Sierra
Madre Oriental localmente metamorfoseados y otra zona delgada de aplita.
Finalmente, de 1600 a 2000 m de profundidad se localiza el granito seguida de una
capa delgada de mármol (Torres et al. 1995).

Después de terminado el Pozo EAC-1 se tomó una serie de registros de


temperatura hasta 1970 m de profundidad (Tabla 1). En estos registros se observan
zonas de cambio de pendiente asociadas a zonas convectivas a 1250 y 1650 m
(Figura 10). Así mismo, al dejar al Pozo en calentamiento (registros T-14 y T-15) se
observó un incremento en la línea de temperatura indicando flujo de calor
conductivo, correspondiendo a una roca caliente impermeable. (Lorenzo-Pulido et
al. 2011).

El Pozo EAC-2 se perforó en 2008, en la misma zona geotérmica, también


es un Pozo vertical con una profundidad de 1900 m, del cual se obtuvo que de 0 a
450 m de profundidad se presentan Ignimbritas, dacitas y calizas con
intercalaciones de andesitas. Después se encuentra un bloque de 450 a 1580 m
correspondiente a hornfels, metamorfismo de calizas silícicas del Cretácico
producido por el intrusivo subyacente. Finalmente, de los 1580 a 1900 m se
encuentra granito de hornblenda que intrusiona al hornfels (Viggiano-Guerra et al.
2011). Una vez terminada la perforación del Pozo EAC-2 se tomó una serie de
registros de temperatura hasta la profundidad de 1900 m. (Tabla 1) En estos
registros se observan zonas con cambio de pendiente a 1550 y 1850 m (Figura 10).
(Lorenzo-Pulido et al. 2011). Hasta la fecha no se han realizado registros de
temperatura en fase de calentamiento, los cuales permitirían observar si el
comportamiento de la temperatura es semejante al del Pozo EAC-1 (Lorenzo-Pulido

20
Yasmin Hernández Aburto
Área de estudio

et al. 2011). En el Anexo 4 se pueden observar los registros geofísicos de Pozo


obtenidos en el Pozo EAC-2.

A) B)

Figura 10. A) Registros de temperaturas medidos en reposo durante la perforación del Pozo
EAC-1 A 6 horas la línea amarilla, 12 horas la línea azul, 12 horas línea negra, 18 horas línea
café, los registros de la línea roja y línea naranja corresponden a temperaturas del Pozo en
calentamiento a 312 horas de reposo; se indican también las zonas de cambio de pendiente
asociadas a una zona de convección. B) Registros de temperaturas medidos después de
terminado el Pozo EAC-2 a 6 horas línea verde, 12 horas línea amarilla, 18 horas línea naranja
y 24 horas línea roja, se indican las zonas de cambio de pendiente (Lorenzo-Pulido et al. 2011).

Tabla 1. Temperaturas registradas en los Pozos

Pozo Profundidad Temperatura Temperatura (°C)


(m) (°C) calentamiento
EAC-1 1800 251.52
EAC-1 1970 307.31
EAC-2 1900 263.77

21
Yasmin Hernández Aburto
Área de estudio

Los dos Pozos exploratorios están en una estructura de graben y a


profundidad se observó en muestras de núcleo y ripios evidencias de fallas y
fracturas naturales selladas total o parcial.

En las muestras de núcleos para el Pozo EAC-1 se midieron fracturamientos


con 80°, 84°, 75°, 70° y 74° de inclinación y estratificaciones de 48°, 54°, 50°, 56° y
45°, todos con referencia a la vertical del Pozo (Rocha et al. 2006). A una
profundidad de 600 a 603 m se presenta un fracturamiento bajo con inclinación
preferencial de 37°, sellado; de 850 a 853 m hay fracturas y microfracturas rellenas
por calcita y pirita muy compactas (Gama Villegas et al. 1995).

Para el Pozo EAC-2 se identificaron varios intervalos con presencia de


fracturamiento: 1520 a 1560m parcialmente sellado; 1570 a 1950 m abierto con
presencia de cristales de epidota bien formados; 1828 a 1842 m evidencia de falla
y fracturamiento relleno por cuarzo, pirita y cristales de epidota bien formados; 1834
a 1836 m se observó el cruce de dos fallas con movimiento lateral izquierdo en una
de ellas (Lorenzo-Pulido et al. 2011). Los rasgos estructurales obtenidos en este
Pozo se reportan en la Tabla 2.

Tabla 2. Descripción estructural megascópica del Pozo EAC-2

Profundidad (m) Descripción


1520 – 1560 Fracturamiento parcialmente sellado.
1570 – 1950 Fracturamiento abierto con presencia de cristales de epidota.
1828 – 1836 Evidencia de falla (estrías, fragmentos con superficies planas
y brecha hidrotermal, una fractura de 6 mm).
1834 – 1836 Cruce de dos fallas con movimiento lateral izquierdo en una
de ellas.
1836 – 1838 Fracturas rellenas por cuarzo y pirita con caras planas
1838 – 1839 Estrías y planos de falla con presencia de cristales de cuarzo
y epidota bien formados
1839 – 1841 Fracturas con cristales de epidota bien formados

22
Yasmin Hernández Aburto
Área de estudio

Por otro lado, Avellán et al. (2018) presenta una descripción litológica con 40
unidades, 31 que pertenecen al complejo de la Caldera de Acoculco relacionados a
pre-Caldera, syn-caldera, post-caldera temprana, y post-caldera tardía (Anexo 5).
Estos eventos corresponden a diferentes fases de la formación de la Caldera y están
definidas acorde a su distribución, posición estratigráfica, edad y composición
mineralógica. También describe una unidad representativa del Mioceno, en edad
temprana del CVTM y 7 unidades asociadas a campo volcánico Apan Tezontepec,
las cuales son descritas como extra-Caldera por su origen no relacionado con la
formación de la Caldera de Acoculco.

1.6 Estudios Previos

La zona ha sido estudiada desde 1981, principalmente por la Comisión


Federal de Electricidad, con el objetivo de evaluar la posibilidad de explotar los
recursos geotérmicos, iniciaron con el mapa geológico de Acoculco (De la Cruz y
Castillo Hernández, 1986) quienes sugirieron que la actividad geotérmica está
relacionada al magmatismo que dio lugar al complejo volcánico.

Posteriormente se realizó un trabajo de prospección dirigido a la búsqueda


de recursos geotérmicos en el estado de Puebla. Resultados de este trabajo fueron
la identificación de la zona de Acoculco y de extensas áreas de alteración
hidrotermal acompañadas de manantiales fríos ácidos y emisión de gases, el interés
geotérmico se confirmó con la medición de altos cocientes de 3He/4He que sugieren
un origen magmático (Polak et al. 1982).

Se continuó la exploración geotérmica con estudios geoquímicos de fluidos


en manantiales (Tello-Hinojosa, 1986) y exploración geofísica utilizando sondeos
eléctricos verticales tipo Schlumberger. Un año antes, en 1987 el Instituto de
Geología de la UNAM publicó la carta geológica de Calpulalpan que cubre parte de
la zona estudiada (Ledezma-Guerrero, 1987).

23
Yasmin Hernández Aburto
Área de estudio

López-Hernández y Castillo-Hernández (1997) realizaron estudios de


exploración gravimétrica donde la anomalía de Bouguer mostró contornos con
orientaciones NW-SE, y altos gradientes NE-SW disminuyendo hacia el SW.

Estos trabajos sirvieron para perforar el primer Pozo exploratorio EAC1


(Gama Villegas et al. 1995). Con el propósito de comprender mejor los resultados
del Pozo perforado se realizaron otros estudios complementarios, que incluyeron un
estudio vulcanológico regional (López-Hernández y Martínez, 1996), la
reinterpretación de los datos geofísicos (García-Estrada, 2000; Palma-Guzmán,
1995) y estudios gravimétricos regionales (García-Estrada, 2000). Con la
integración de esta información se propuso la localización del segundo Pozo EAC-
2.

Posteriormente, otros estudios se centraron en la estratigrafía volcánica y


geofísica, intentaron entender la historia eruptiva y la estructura interna de la
Caldera (Campos-Enríquez et al., 2003; López-Hernández, 2009). Como resultado,
López-Hernández, (2009) definió dos estructuras de Caldera, una de 32 km. Caldera
ancha llamada Tulancingo (3.0–2.7 Ma) y un ancho interior de 18 km Caldera
llamada Acoculco (1.7 y 0.24 Ma). Todos los estudios realizados, incluyendo los
informes internos de la CFE, clasificaron el ACC como una roca seca y caliente. La
prospección geotérmica en el área de Acoculco encontró fumarolas y descargas de
agua (Polak et al., 1982; Peiffer et al., 2014)

En un trabajo independiente usando datos MT, Arango-Galván et al. (2013)


identificaron una unidad conductiva sin continuidad lateral probablemente asociada
a la presencia de alteración argílica; subyaciendo este horizonte detectan una
unidad de resistividad intermedia con valores menores a 300 Ωm y la relacionan con
la secuencia volcánica asociada con la actividad del complejo Tulancingo-Acoculco;
observan además una capa de resistividades mayores a los 500 Ωm, posiblemente
correlacionada con la roca metamórfica correspondiente al skarn o mármol, así
como a intrusivos de tipo andesítico y riodacítico.

24
Yasmin Hernández Aburto
Área de estudio

En este capítulo se concluye que el prospecto geotérmico de Acoculco,


Puebla está constituido por rocas volcánicas y sedimentarias, la actividad volcánica
está ligada a la subducción de las Placas de Rivera y Cocos debajo de la Placa
Norteamericana, por lo que la fuente de calor se asocia a origen vulcano-tectónico.
El análisis de esfuerzos establece que los sistemas de fallas tienen una orientación
preferencial NW-SE y E-W como los principales en la zona. Los registros de
temperatura de los Pozos EAC-1 Y EAC-2 son de 263.8°C y 307.3°C. Los dos Pozos
exploratorios están en una estructura de graben y se observó a profundidad que el
basamento está constituido por calizas que han sufrido metamorfismo de contacto
debido al emplazamiento de un intrusivo (granito de hornblenda) identificado en la
columna litológica de ambos Pozos. Con base en lo anterior, la zona geotérmica de
Acoculco, Puebla es considerada con potencial para ser desarrollada bajo un
esquema de Roca Seca Caliente.

Así como es importante saber acerca de la geología de la zona de estudio,


también es importante conocer el funcionamiento físico del método de exploración
geofísico a utilizar, en el caso particular de este trabajo se hablará del método
magnetotelúrico, por lo que en el siguiente capítulo se abordarán los fundamentos
teóricos del método, teoría electromagnética, tensor de impedancias, profundad de
penetración, función de transferencia geomagnética y tensor de fases.

25
Yasmin Hernández Aburto
Capítulo II Fundamentos teóricos del método magnetotelúrico.

El método magnetotelúrico es una técnica de exploración geofísica, que


utiliza las variaciones que se dan de forma natural en el campo electromagnético de
la Tierra para mapear eléctricamente estructuras geológicas hasta profundidades
del orden de kilómetros, esto se debe a que utiliza bajas frecuencias. Este método
mide simultáneamente las variaciones del campo magnético y el campo eléctrico,
los cuales producen señales magnetotelúricas que son adquiridas por medio de
dipolos y sensores magnéticos (Figura 11) sobre un amplio rango de frecuencias
(Fernández et al. 1987).

Las señales electromagnéticas de baja frecuencia (MT) menores a 1 Hz se


generan por la interacción entre la magnetosfera de la Tierra y el viento solar. Las
señales en el rango de audio de alta frecuencia (AMT) mayores a 1 Hz son
generadas por tormentas eléctricas que ocurren de manera global (Zonge, 2015).

Las observaciones en frecuencias bajas (MT) están asociadas a grandes


profundidades dentro de la Tierra, mientras que las observaciones realizadas en las
frecuencias altas (AMT) corresponden zonas más someras (Zonge, 2015).

Figura 11. Ilustración del método magnetotelúrico (dominio público)

26
Yasmin Hernández Aburto
Fundamentos teóricos del método magnetotelúrico

2.1 Teoría Electromagnética

Los métodos electromagnéticos dependen de la respuesta de la Tierra a la


penetración de energía electromagnética hacia el subsuelo, por lo mismo es de
suma importancia conocer las bases de la teoría electromagnética y su aplicación
bajo las condiciones de los métodos geofísicos. El método magnetotelúrico conjunta
conceptos básicos de teoría electromagnética, análisis de series de tiempo y teoría
de sistemas lineales, como objetivo principal de cuantificar las variaciones de
conductividad eléctrica de la Tierra en función de la profundidad.

En un principio Hans Christian Oersted descubrió que una aguja magnética


podía ser desviada por una corriente eléctrica (Museo Virtual de la Ciencia del CSIC,
2004). Este descubrimiento, que mostraba una conexión entre la electricidad y el
magnetismo, fue desarrollado por Ampere, que estudió las fuerzas entre cables por
los que circulan corrientes eléctricas. Faraday descubrió que el movimiento de un
imán en las proximidades de un cable induce en éste una corriente eléctrica; este
efecto era inverso al hallado por Oersted. Así, Oersted demostró que una corriente
eléctrica crea un campo magnético, mientras que Faraday demostró que puede
emplearse un campo magnético para crear una corriente eléctrica. La unificación de
las teorías de la electricidad y el magnetismo se debió a Maxwell, que predijo la
existencia de ondas electromagnéticas e identificó la luz como un fenómeno
electromagnético.

James Clerk Maxwell desarrolló las bases de las leyes de la teoría


electromagnética y estableció un conjunto de cuatro ecuaciones diferenciales
parciales que describen las propiedades del campo eléctrico y del campo
magnético, así como su relación con su fuente, densidad de carga y densidad de
corriente, las cuales reciben el nombre de ecuaciones de Maxwell.

27
Yasmin Hernández Aburto
Fundamentos teóricos del método magnetotelúrico

2.1.1 Ecuaciones de Maxwell

Los fenómenos electromagnéticos se rigen por las ecuaciones de Maxwell


(ecuaciones 1-4), estas ecuaciones permiten comprender cómo los campos
eléctrico y magnético interactúan con la materia (Simpson y Bahr, 2005). Las
ecuaciones quedan expresadas como se muestran a continuación:

∂𝐁𝐁
∇ x 𝐄𝐄 = − 𝐿𝐿𝐿𝐿𝐿𝐿 𝑑𝑑𝑑𝑑 𝐹𝐹𝐹𝐹𝐹𝐹𝐹𝐹𝐹𝐹𝐹𝐹𝐹𝐹 (1)
∂t
∂𝐃𝐃
∇ x 𝐇𝐇 = 𝐣𝐣f + 𝐿𝐿𝐿𝐿𝐿𝐿 𝑑𝑑𝑑𝑑 𝐴𝐴𝐴𝐴𝐴𝐴𝐴𝐴𝐴𝐴𝐴𝐴 (2)
∂t
∇ ∙ 𝐁𝐁 = 0 𝐿𝐿𝐿𝐿𝐿𝐿 𝑑𝑑𝑑𝑑 𝐺𝐺𝐺𝐺𝐺𝐺𝐺𝐺𝐺𝐺 (3)
∇ ∙ 𝐃𝐃 = 𝜂𝜂f 𝐿𝐿𝐿𝐿𝐿𝐿 𝑑𝑑𝑑𝑑 𝐺𝐺𝐺𝐺𝐺𝐺𝐺𝐺𝐺𝐺 (4)

Donde 𝐄𝐄 es el campo eléctrico, 𝐁𝐁 es la inducción magnética, 𝐇𝐇 es la


intensidad magnética, 𝐃𝐃 es el desplazamiento eléctrico, 𝐣𝐣f es la densidad de
corriente eléctrica debido a las cargas libres y 𝜂𝜂f es la densidad de carga eléctrica
debido a las cargas libres. El rotacional ∇ x y divergencia ∇ ∙ son expresiones de
cálculos vectoriales.

La ecuación (1) corresponde a la ley de Faraday y establece que las


variaciones temporales en el campo magnético inducen fluctuaciones
correspondientes en el campo eléctrico, es decir, que a partir del campo eléctrico
podemos deducir el campo magnético.

La ecuación (2) es la ley de Ampere la cual dice que cualquier espira cerrada
de corriente eléctrica tendrá un campo magnético asociado de magnitud
proporcional al flujo total de corriente, es decir, las corrientes de desplazamiento
están para explicar la conducción en materiales dieléctricos. Si se asume que las
corrientes de desplazamiento son invariantes con el tiempo (ecuación 5), la ley de
Ampere se reduce a la expresión:

28
Yasmin Hernández Aburto
Fundamentos teóricos del método magnetotelúrico

∇ x 𝐇𝐇 = 𝐣𝐣f (5)

La ecuación (3) es la ley de Gauss para campos magnéticos, que establece


que los monopolos magnéticos no existen. La ecuación (4) es la Ley de Gauss para
campos eléctricos, que muestra que el campo eléctrico es el resultado de la
distribución de cargas eléctricas.

Estas cuatro ecuaciones explican la relación entre el campo eléctrico y el


campo magnético, los cuales existen al mismo tiempo y cuando uno varia en el
tiempo se genera el otro, conociéndose esto como el campo electromagnético.

2.1.2 Relaciones constitutivas

Es cierto que las ecuaciones de Maxwell describen el comportamiento de los


campos electromagnéticos, pero así mismo se necesitan expresiones que apropien
las ecuaciones originales para establecer una relación del comportamiento de los
campos con las propiedades eléctricas y magnéticas particulares del medio de
propagación, en el caso aplicado en geofísica, nuestro medio de propagación se
refiere al subsuelo.

A dichas expresiones se les llama Relaciones o Leyes Constitutivas y su


función es relacionar dos campos vectoriales por medio de parámetros, que en
general, son tensores dependientes de la posición y de la dirección, para medios no
homogéneos y anisótropos respectivamente, mientras que para medios
homogéneos e isótropos estos parámetros resultan escalares dependientes de la
frecuencia.

Si consideramos la Tierra con características homogéneas e isótropas,


podemos aplicar estas relaciones a las ecuaciones de Maxwell y obtener un
conjunto de ecuaciones simplificadas, en donde las constantes son la conductividad
eléctrica σ, permitividad eléctrica ε y permeabilidad magnética µ.

29
Yasmin Hernández Aburto
Fundamentos teóricos del método magnetotelúrico

La conductividad eléctrica σ, se refiere a la capacidad que tiene una


sustancia o material para permitir el paso de corriente eléctrica a través de sí, es
decir, de transportar electrones (Paul, 2004).

La permitividad eléctrica ε , es un parámetro físico de los materiales, que


describe qué tanto es afectado por un campo eléctrico. Está determinada por la
tendencia de un material a polarizarse ante la aplicación de un campo eléctrico
(Paul, 2004).

Se le denomina permeabilidad magnética µ, a la capacidad que tienen los


materiales, medios o sustancias de afectar o ser afectados por un campo magnético,
así como la capacidad de convertirse en fuentes de éste sin necesidad de corrientes
externas (Paul, 2004).

Estos tres parámetros son función del campo eléctrico 𝐄𝐄 o inducción


magnética 𝐁𝐁. Además, la permitividad y la conductividad eléctricas son funciones
complejas de la frecuencia angular, mientras que la permeabilidad magnética es
real e independiente de la frecuencia.

Primera relación constitutiva

Relaciona linealmente la densidad de corriente eléctrica con la intensidad del


campo eléctrico, la cual se le conoce también como ley de Ohm (ecuación 6). Aquí
la conductividad eléctrica es una medida de la respuesta de las cargas libres de un
medio en presencia de un campo eléctrico externo (Vozoff, 1972).

𝑱𝑱 = 𝜎𝜎𝐄𝐄 (6)

Segunda relación constitutiva

Es conocida como la ley de Gauss (ecuación 7), que relaciona linealmente el


campo magnético 𝐁𝐁 con el vector de inducción magnética 𝐇𝐇 a partir de la
permeabilidad magnética μ. (Orellana, 1974).

𝐁𝐁 = 𝜇𝜇𝐇𝐇 (7)

30
Yasmin Hernández Aburto
Fundamentos teóricos del método magnetotelúrico

Tercera relación constitutiva

La relación constitutiva de la Ley de Ampere (ecuación 8) relaciona el vector


de desplazamiento eléctrico 𝐃𝐃 con el campo eléctrico 𝐄𝐄 a través de la permitividad
eléctrica ε de acuerdo con (Orellana, 1974):

𝐃𝐃 = 𝜀𝜀𝐄𝐄 (8)

Los valores relativos de la permitividad eléctrica y permeabilidad magnética


tienen a un valor cercano a 1 para la mayoría de los materiales que se encuentran
en el subsuelo.

2.1.3 Ecuaciones de onda electromagnética

Las ecuaciones de Maxwell bajo las tres relaciones constitutivas quedan


expresadas de la siguiente manera:

∂𝐇𝐇
∇ x 𝐄𝐄 = −𝜇𝜇 (9)
∂t
∂𝐄𝐄
∇ x 𝐇𝐇 = σ𝐄𝐄 + ε (10)
∂t
𝑞𝑞𝔢𝔢�
∇ ∙ 𝐄𝐄 = 𝜀𝜀 (11)
∇ ∙ 𝐇𝐇 = 0 (12)

Aplicando el rotacional a las ecuaciones (9) y (10) se obtienen las ecuaciones


de onda para el campo eléctrico 𝐄𝐄 y la inducción magnética 𝐇𝐇, y como son vectores,
las ecuaciones de onda son validadas para cada componente a lo largo de sus ejes
coordenados (Kalyan, 2008).

Las adaptaciones a las ecuaciones de Maxwell para el método MT se pueden


explicar a partir de la ley de la inducción y la ley de las corrientes. Al variar el campo

31
Yasmin Hernández Aburto
Fundamentos teóricos del método magnetotelúrico

magnético sobre la superficie se inducirán corrientes telúricas sobre las capas de la


Tierra que a su vez generarán campos inducidos secundarios, los cuales contienen
información de las variaciones de resistividad eléctrica de las capas en el subsuelo
a diferentes profundidades.

2.2 Fundamentos del método magnetotelúrico

Dentro de los métodos electromagnéticos de exploración geofísica se


encuentra el método magnetotelúrico (MT). Que tiene la cualidad de caracterizar las
propiedades eléctricas del suelo, especialmente la conductividad eléctrica, la cual
tiene un amplio rango de variación con los distintos materiales que conforman el
subsuelo. El principio físico de éstos se basa en el fenómeno de inducción, es decir,
si una fuente EM o campo primario induce corrientes secundarias en el subsuelo,
dichas corrientes generan campos secundarios, los cuales se pueden medir en
superficie con sensores adecuados. En general la intención de emplear métodos
EM es analizar la interacción del campo magnético y eléctrico con el subsuelo para
deducir sus propiedades eléctricas.

2.2.1 Clasificación y Variantes

Los métodos electromagnéticos pueden ser clasificados por el tipo de fuente


que utilicen o por el rango de frecuencias adquiridas. Se presenta un ejemplo (Tabla
3) de clasificación de los diferentes métodos electromagnéticos dependiendo del
tipo de fuente incluyendo una estimación de la profundidad de investigación de cada
uno.

32
Yasmin Hernández Aburto
Fundamentos teóricos del método magnetotelúrico

Tabla 3. Clasificación de métodos electromagnéticos de acuerdo con el tipo de


fuente empleada y profundidad de investigación

Método Frecuencia (Hz) Profundidad de Fuente


penetración
Magnetotelúrico (MT) 1𝑥𝑥10−4 − 1𝑥𝑥101 1 - 250 km Natural

Audiomagnetotelúrico
(AMT) 1𝑥𝑥101 − 1𝑥𝑥104 0.1 - 5 km Natural

Audiomagnetotelúrico
con fuente artificial 1𝑥𝑥104 − 1𝑥𝑥105 0.01 – 1.5km Controlada
(CSAMT)
Radar de penetración
del subsuelo (GPR) 1𝑥𝑥101 − 1.2𝑥𝑥109 0.01 – 0.1 km Controlada

Radiomagnetotelúrico
(RMT) 1𝑥𝑥105 − 1𝑥𝑥106 0 – 1.5 km Controlada

Electromagnéticos en
el dominio del tiempo 0.01 – 1.5 km Controlada
(TEM)

A continuación, se ilustra (Figura 12), la cobertura de frecuencias útiles para


cada una de las variantes de MT de acuerdo con la información de la Tabla 3.

Figura 12. Rango de frecuencias [Hz] para métodos electromagnéticos

33
Yasmin Hernández Aburto
Fundamentos teóricos del método magnetotelúrico

2.2.2 Fuentes de campo EM

Dado su principio físico las señales electromagnéticas se generan de forma


natural, en la mayoría de las veces, entre la superficie terrestre y la atmósfera.

Para Viljanen (2012), la región de la atmósfera entre el suelo conductor y la


ionosfera se considera como una cavidad de resonancia, en ésta se origina un
fenómeno denominado resonancia de Schumman, el cual causa que toda la energía
electromagnética producto de las tormentas eléctricas sufra resonancia a lo largo
del planeta en frecuencias particulares 8, 14, 20, 26, 33, 39, 45 Hz con ligeras
variaciones diurnas.

El espectro de la señal en frecuencias alrededor de 1 Hz presenta un mínimo


(Figura 13), a este decremento en la intensidad de la señal se le llama banda muerta
(Simpson y Bahr, 2005) en el cual tal pérdida de energía ocasiona dificultades en la
estimación de la respuesta magnetotelúrica (Viljanen, 2012).

Figura 13. Espectro de potencia “características 1/f” de variaciones magnéticas naturales


donde se muestra a detalle la banda muerta alrededor de 1 Hz (Simpson y Bahr, 2005).

34
Yasmin Hernández Aburto
Fundamentos teóricos del método magnetotelúrico

2.2.3 Asunciones Teóricas

Con la finalidad de poder implementar las bases teóricas a los principios de


aplicación del método MT, es de suma importancia tomar en cuenta algunas
suposiciones que ayudan a llegar a una solución particular de las ecuaciones de
Maxwell. De acuerdo con Simpson y Bahr (2005):

1. Las ecuaciones Maxwell se satisfacen.


2. La Tierra no genera energía electromagnética, solo la disipa o la absorbe.
3. Todos los campos se asumen conservativos sin importar su fuente.
4. El campo electromagnético natural que funciona como fuente se genera
por grandes corrientes ionosféricas y se encuentra muy alejado,
relativamente, de la superficie terrestre, debe considerarse uniforme y el
comportamiento de ondas electromagnéticas como ondas planas. Esta
asunción no es válida en regiones polares o ecuatoriales.
5. No existe acumulación de carga libre en las estructuras. En un modelo
multidimensional, las cargas se pueden acumular a lo largo de las
discontinuidades, dando origen un fenómeno no inductivo conocido como
static shift.
6. La carga se conserva, y la Tierra se comporta como un conductor óhmico,
por lo que la ecuación 6 se satisface.
7. El campo eléctrico de desplazamiento es cuasi estático para todo el
espectro de frecuencias. Por lo que, las corrientes de desplazamiento
variantes en el tiempo son nulas comparadas con las corrientes de
conducción.
8. Cualquier variación en las propiedades electromagnéticas se asumen
nulas respecto de la variación de la conductividad de las rocas.

35
Yasmin Hernández Aburto
Fundamentos teóricos del método magnetotelúrico

2.3 Tensor de impedancias

En un principio se suponía la Tierra como un medio homogéneo o un medio


isótropo de capas planas horizontales, (Cantwell, 1960) reconoció la importancia de
la anisotropía en la resistividad (o bidimensionalidad), de ahí introdujo el concepto
de tensor de impedancias el cual fue útil para la determinación de la resistividad
aparente como una función de la orientación angular. Un resumen del
procesamiento del tensor de datos MT y de la función de respuesta de la Tierra que
se pueden derivar del tensor de impedancias fue escrito por Vozoff (1972).

A partir del tensor de impedancias (ecuación 13) se puede definir la


resistividad aparente y la fase de cada elemento del tensor y que matemáticamente
se define como la matriz de coeficientes de acoplamiento lineales que relacionan
las componentes horizontales del campo magnético en un punto con las
componentes horizontales del campo eléctrico en el mismo punto de medición. El
tensor 𝐙𝐙 es una matriz cuadrada de 2x2 elementos. En la aplicación para datos de
MT, para campos de onda plana, las componentes horizontales del campo eléctrico
𝐄𝐄 y magnético 𝐇𝐇 se relacionan de forma lineal con la siguiente ecuación matricial:

�𝑬𝑬⃗ = 𝒁𝒁𝑯𝑯
���⃗ (13)

La cual puede extenderse como la ecuación 14:

𝐸𝐸𝑥𝑥 𝑍𝑍𝑥𝑥𝑥𝑥 𝑍𝑍𝑥𝑥𝑥𝑥 𝐻𝐻𝑥𝑥


�𝐸𝐸 � = � �� � (14)
𝑦𝑦 𝑍𝑍 𝑦𝑦𝑦𝑦 𝑍𝑍𝑦𝑦𝑦𝑦 𝐻𝐻𝑦𝑦

Las componentes del tensor 𝑍𝑍𝑖𝑖𝑖𝑖 se calculan para diferentes bandas de


frecuencias, a partir de productos cruzados entre las componentes del campo,
utilizando complejos conjugados. Con la impedancia se puede obtener la
resistividad aparente (ecuación 15) y la fase de la impedancia (ecuación 16) (Vozoff,
1972).

36
Yasmin Hernández Aburto
Fundamentos teóricos del método magnetotelúrico

2
1 𝐸𝐸𝑖𝑖 (𝜔𝜔) 1 2
𝜌𝜌𝑎𝑎𝑖𝑖𝑖𝑖 (𝜔𝜔) = � � = �𝑍𝑍 (𝜔𝜔)� [Ω𝑚𝑚] 𝐸𝐸𝐸𝐸𝐸𝐸𝐸𝐸𝐸𝐸𝐸𝐸ó𝑛𝑛 𝑑𝑑𝑑𝑑 𝑟𝑟𝑟𝑟𝑟𝑟𝑟𝑟𝑟𝑟𝑟𝑟𝑟𝑟𝑟𝑟𝑟𝑟𝑟𝑟𝑟𝑟𝑟𝑟 𝑎𝑎𝑎𝑎𝑎𝑎𝑎𝑎𝑎𝑎𝑎𝑎𝑎𝑎𝑎𝑎 (15)
𝜇𝜇𝜇𝜇 𝐻𝐻𝑗𝑗 (𝜔𝜔) 𝜇𝜇𝜇𝜇 𝑖𝑖𝑖𝑖

𝐼𝐼𝐼𝐼𝐼𝐼𝐼𝐼 (𝑍𝑍𝑖𝑖𝑖𝑖)
∅𝑖𝑖𝑖𝑖 = 𝑎𝑎𝑎𝑎𝑎𝑎𝑎𝑎𝑎𝑎𝑎𝑎 � � 𝐸𝐸𝐸𝐸𝐸𝐸𝐸𝐸𝐸𝐸𝐸𝐸ó𝑛𝑛 𝑑𝑑𝑑𝑑 𝑓𝑓𝑓𝑓𝑓𝑓𝑓𝑓 (16)
𝑅𝑅𝑅𝑅𝑅𝑅𝑅𝑅 (𝑍𝑍𝑖𝑖𝑖𝑖 )

La fase provee información de la conductividad de las estructuras (Naidu,


2012) y la resistividad aparente es un promedio de la resistividad de un volumen de
la Tierra en un particular periodo (Castells, 2006) y si el medio no es homogéneo
varía con la dirección de medición (𝐸𝐸𝑥𝑥 𝑜𝑜 𝐸𝐸𝑦𝑦 ) ya que dependen de su distribución, es
decir, de las estructuras geoeléctricas localizadas en el subsuelo. Como el campo
𝐸𝐸𝑥𝑥 se debe en parte a 𝐻𝐻𝑦𝑦 , pero también a corrientes inducidas por 𝐻𝐻𝑥𝑥 , y lo mismo es
cierto para 𝐸𝐸𝑦𝑦 , sus relaciones se pueden escribir como (Vozoff, 1972):

𝐸𝐸𝑥𝑥 = 𝑍𝑍𝑥𝑥𝑥𝑥 𝐻𝐻𝑥𝑥 + 𝑍𝑍𝑥𝑥𝑥𝑥 𝐻𝐻𝑦𝑦 (17)

𝐸𝐸𝑦𝑦 = 𝑍𝑍𝑦𝑦𝑦𝑦 𝐻𝐻𝑥𝑥 + 𝑍𝑍𝑦𝑦𝑦𝑦 𝐻𝐻𝑦𝑦 (18)

Cuando la conductividad de la Tierra sólo varía en función de la profundidad,


es decir, se comporta como modelo unidimensional (ecuación 19) o de capas
planas, los elementos de la diagonal principal son igual a cero 𝑍𝑍𝑥𝑥𝑥𝑥 = 𝑍𝑍𝑦𝑦𝑦𝑦 = 0 y los
elementos de la antidiagonal tienen valores iguales de amplitud, pero con signo
opuesto 𝑍𝑍𝑥𝑥𝑥𝑥 = −𝑍𝑍𝑦𝑦𝑦𝑦 . En forma general tendríamos un tensor de la siguiente forma:

0 𝑧𝑧
𝑍𝑍𝑖𝑖𝑖𝑖 = � � = 𝑍𝑍𝐼𝐼𝐼𝐼 (19)
−𝑧𝑧 𝑜𝑜

Si la conductividad varía también a lo largo de una dirección lateral, se dice


que tenemos un modelo bidimensional (ecuación 20). Cuando uno de los ejes del
sistema coordenado 𝑥𝑥 ó 𝑦𝑦 es paralelo a la dirección de cambio de la conductividad,
los elementos de la diagonal principal serán igual a cero, y los elementos de la anti
diagonal resultan diferentes (Krivochieva et al, 2003), y el tensor adopta la siguiente
forma:

37
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Fundamentos teóricos del método magnetotelúrico

0 𝑍𝑍𝑥𝑥𝑥𝑥
𝑍𝑍𝑖𝑖𝑖𝑖 = � � = 𝑍𝑍2𝐷𝐷 (20)
𝑍𝑍𝑦𝑦𝑦𝑦 0

Ahora, si no hay una coincidencia entre los ejes de medición y la dirección de


cambio de la conductividad (ecuación 21), tendremos que 𝑍𝑍𝑥𝑥𝑥𝑥 ≠ 𝑍𝑍𝑦𝑦𝑦𝑦 y 𝑍𝑍𝑥𝑥𝑥𝑥 ≠ 𝑍𝑍𝑦𝑦𝑦𝑦 ,, lo
cual es la forma general, se le conoce como modelo tridimensional.

𝑍𝑍𝑥𝑥𝑥𝑥 𝑍𝑍𝑥𝑥𝑥𝑥
𝑍𝑍𝑖𝑖𝑖𝑖 = � � = 𝑍𝑍3𝐷𝐷 (21)
𝑍𝑍𝑦𝑦𝑦𝑦 𝑍𝑍𝑦𝑦𝑦𝑦

2.4 Profundidad de penetración

La profundidad de penetración de los campos electromagnéticos en la Tierra


está inversamente relacionada con la conductividad de la roca. En una Tierra
uniforme 𝐄𝐄 y 𝐇𝐇 decaen exponencialmente con la profundidad, mientras más
conductiva sea la roca menor será la profundidad de penetración de acuerdo con la
ecuación 22. La profundidad a la cual los campos decaen su valor en superficie se
denomina profundidad de penetración (Skin Depth) y está dada por la siguiente
expresión (Vozoff,1972):

1 𝜌𝜌
𝛿𝛿 ≈ � 𝑘𝑘𝑚𝑚 (22)
2 𝑓𝑓

Dónde 𝑓𝑓 es la frecuencia y 𝜌𝜌 es la resistividad.

38
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Fundamentos teóricos del método magnetotelúrico

2.5 Tipper o función de transferencia geomagnética

El tipper (ecuación 23) depende de la conductividad del medio y puede


ayudar a conocer la dimensionalidad y direccionalidad geoeléctrica.

El tipper relaciona la componente vertical 𝐻𝐻𝑧𝑧 del campo magnético con las
componentes horizontales 𝐻𝐻𝑥𝑥 y 𝐻𝐻𝑦𝑦 (Vozoff, 1972), expresándose:

𝐻𝐻𝑥𝑥
𝐻𝐻𝑧𝑧 = �𝑇𝑇𝑥𝑥 𝑇𝑇𝑦𝑦 � �𝐻𝐻 � (23)
𝑦𝑦

𝑇𝑇𝑥𝑥 y 𝑇𝑇𝑦𝑦 son magnitudes vectoriales complejas adimensionales, expresadas en las


ecuaciones 24 y 25:

𝑇𝑇𝑥𝑥 = 𝑅𝑅𝑅𝑅(𝑇𝑇𝑥𝑥 ) + 𝐼𝐼𝐼𝐼 (𝑇𝑇𝑥𝑥 ) (24)

𝑇𝑇𝑦𝑦 = 𝑅𝑅𝑅𝑅�𝑇𝑇𝑦𝑦 � + 𝐼𝐼𝐼𝐼 �𝑇𝑇𝑦𝑦 � (25)

𝑇𝑇𝑥𝑥 y 𝑇𝑇𝑦𝑦 tendrán la misma fase si se asume que los datos están libres de ruido,
además 𝑇𝑇𝑥𝑥 / 𝑇𝑇𝑦𝑦 es un número real. El ángulo para conocer la separación de las
componentes horizontales con la componente vertical se representa en la ecuación
26 como:

𝑇𝑇𝑦𝑦
∅ = 𝑎𝑎𝑎𝑎𝑎𝑎𝑡𝑡𝑡𝑡𝑡𝑡 � � (26)
𝑇𝑇𝑥𝑥

En caso de un modelo tridimensional 𝑇𝑇𝑥𝑥 y 𝑇𝑇𝑦𝑦 , tienen diferentes fases y ∅ puede


ser definido de otra manera (Vozoff, 1972).

Con la información del tensor se puede generar un modelo que se ajuste a


los rasgos geológicos generales del área de estudio. Una vez que se analiza y
después de un estudio dimensional se ejecuta un estudio direccional, el cual indica
la dirección preferencial de la estructura geoeléctrica respecto de la profundidad en
el subsuelo (strike) y dicha variación se puede correlacionar con diferentes
estructuras y procesos que ocurren en el subsuelo, siempre y cuando sea un modelo
bidimensional (2D).

39
Yasmin Hernández Aburto
Fundamentos teóricos del método magnetotelúrico

2.6 Tensor de fase

El tensor de fase es una propiedad de la impedancia magnetotelúrica el cual


expresa como cambian las relaciones de la fase con la polarización subyacente. El
análisis del tensor de fase permite conocer la dimensionalidad y direccionalidad
geoeléctrica. El tensor de fase (ecuación 27) es un número complejo que se define
como la relación entre la componente real e imaginaria del tensor de impedancia 𝐙𝐙
(Caldwell et al. 2004).

𝛷𝛷 = 𝑋𝑋 −1 𝑌𝑌 (27)

Donde 𝑋𝑋 −1 es el inverso de la componente real de 𝐙𝐙 y 𝑌𝑌 es la componente


imaginaria de 𝐙𝐙, y 𝛷𝛷 es real. En forma matricial queda expresada como la ecuación
28:

𝛷𝛷11 𝛷𝛷12 1 𝑋𝑋 𝑌𝑌 −𝑋𝑋12 𝑌𝑌21 𝑋𝑋22 𝑌𝑌12 −𝑋𝑋12 𝑌𝑌22


� �= � 22 11 � (28)
𝛷𝛷21 𝛷𝛷22 det(𝑋𝑋) 𝑋𝑋11 𝑌𝑌21 −𝑋𝑋21 𝑌𝑌11 𝑋𝑋11 𝑌𝑌21 −𝑋𝑋21 𝑌𝑌12

Donde det(𝑋𝑋) = 𝑋𝑋11 𝑌𝑌22 −𝑋𝑋21 𝑌𝑌12 es el determinante de 𝑋𝑋

El tensor de fase se puede definir por medio de tres invariantes rotacionales


y un ángulo 𝛼𝛼 (ecuación 32). Las invariantes utilizadas en la representación de Bibby
(1986) son los valores máximos 𝛷𝛷𝑚𝑚𝑚𝑚𝑚𝑚 (ecuación 29) y mínimo 𝛷𝛷𝑚𝑚𝑚𝑚𝑚𝑚 (ecuación 30)
del tensor y el ángulo Skew 𝛽𝛽, que es dado por la ecuación 31.

1�
𝛷𝛷11 + 𝛷𝛷22 2 𝛷𝛷12 − 𝛷𝛷21 2 2
𝛷𝛷𝑚𝑚𝑚𝑚𝑚𝑚 = �� � +� � �
2 2
1�
𝛷𝛷11 + 𝛷𝛷22 2 𝛷𝛷12 − 𝛷𝛷21 2 2
+ �� � +� � − (𝛷𝛷11 𝛷𝛷22 − 𝛷𝛷12 𝛷𝛷21 )� (29)
2 2

1�
𝛷𝛷11 + 𝛷𝛷22 2 𝛷𝛷12 − 𝛷𝛷21 2 2
𝛷𝛷𝑚𝑚𝑚𝑚𝑚𝑚 = �� � + � � �
2 2
1�
𝛷𝛷11 + 𝛷𝛷22 2 𝛷𝛷12 − 𝛷𝛷21 2 2
− �� � +� � − (𝛷𝛷11 𝛷𝛷22 − 𝛷𝛷12 𝛷𝛷21 )� (30)
2 2

40
Yasmin Hernández Aburto
Fundamentos teóricos del método magnetotelúrico

1 𝛷𝛷12 − 𝛷𝛷21
𝛽𝛽 = tan−1 � � (31)
2 𝛷𝛷11 + 𝛷𝛷22

1 𝛷𝛷12 + 𝛷𝛷21
𝛼𝛼 = tan−1 � � (32)
2 𝛷𝛷11 + 𝛷𝛷22

Este ángulo 𝛽𝛽 puede ser visto como una rotación y como una medida de
asimetría del tensor. Mientras que el ángulo 𝛼𝛼 expresa la dependencia del tensor
con el sistema coordenado (Caldwell et al. 2004).

En la ecuación 33 el tensor de fase se expresa en términos de las cantidades antes


expresadas 𝛷𝛷𝑚𝑚𝑚𝑚𝑚𝑚 , 𝛷𝛷𝑚𝑚𝑚𝑚𝑚𝑚 𝑦𝑦 𝛽𝛽 ∶

𝛷𝛷𝑚𝑚𝑚𝑚𝑚𝑚 0
𝛷𝛷 = 𝑹𝑹𝑻𝑻 (𝛼𝛼 − 𝛽𝛽) � � 𝑹𝑹(𝛼𝛼 − 𝛽𝛽) (33)
0 𝛷𝛷𝑚𝑚𝑚𝑚𝑚𝑚

Donde 𝑹𝑹(𝛼𝛼 − 𝛽𝛽) es la matriz de rotación, expresada en la ecuación 34:

cos(𝛼𝛼 + 𝛽𝛽) sin(𝛼𝛼 + 𝛽𝛽)


𝑹𝑹(𝛼𝛼 − 𝛽𝛽) = � � (34)
− sin(𝛼𝛼 + 𝛽𝛽) cos(𝛼𝛼 + 𝛽𝛽)

Y 𝑹𝑹𝑻𝑻 es la matriz inversa de rotación.

Cualquier tensor 2D no simétrico de segundo rango puede ser representado


gráficamente por una elipse y tienen una simple interpretación en términos de las
propiedades de la elipse del tensor. En particular, él eje mayor y menor de la elipse
representan el eje principal y valores del tensor con una orientación del eje mayor
especificada por el ángulo 𝛼𝛼 − 𝛽𝛽 (Caldwell et al. 2004). Se muestra en la Figura 14.

41
Yasmin Hernández Aburto
Fundamentos teóricos del método magnetotelúrico

Figura 14. Representación gráfica del tensor de fase (Caldwell et al. 2004)

Si las coordenadas invariantes 𝛷𝛷𝑚𝑚𝑚𝑚𝑚𝑚 , 𝛷𝛷𝑚𝑚𝑚𝑚𝑚𝑚 son iguales, se tiene definido el


caso 1D y en la representación gráfica se vería un círculo. Para el caso 2D el
parámetro 𝛽𝛽 debe ser cero y los parámetros 𝛷𝛷𝑚𝑚𝑚𝑚𝑚𝑚 , 𝛷𝛷𝑚𝑚𝑚𝑚𝑚𝑚 diferentes, por lo que se
tendría una elipse (Figura 14) donde el eje mayor representa la dirección paralela o
perpendicular al strike. Y para el caso 3D el parámetro 𝛽𝛽 es diferente de cero.

Como resumen de este capítulo se tiene que, las ecuaciones de Maxwell


rigen los fenómenos electromagnéticos y permiten comprender como el campo
eléctrico y magnético interactúan con la materia, explican que ambos campos
existen al mismo tiempo y cuando uno de ellos varia en el tiempo se genera el otro,
conociéndose esto como campo electromagnético. Las relaciones constitutivas con
las ecuaciones de maxwell acondicionadas a un medio de propagación en particular,
considera la Tierra homogénea e isótropa, tomando estas consideraciones las
ecuaciones de maxwell tiene tres constantes: conductividad eléctrica, permitividad
eléctrica y permeabilidad magnética. La ecuación de onda electromagnética se
refiere a las ecuaciones de maxwell bajo las relaciones constitutivas. Entre la
ionosfera y la superficie terrestre se considera como cavidad de resonancia que
origina que toda la energía electromagnética, producto de tormentas eléctricas,

42
Yasmin Hernández Aburto
Fundamentos teóricos del método magnetotelúrico

tenga resonancia a lo largo de todo el mundo. La banda muerta se refiere al rango


de frecuencias alrededor de 1 Hz donde hay poca señal MT de la iteración de la
energía solar y la ionosfera, este decremento de energía dificulta la estimación de
respuesta MT. Las asunciones teóricas son las suposiciones para llegar a una
solución particular de las ecuaciones de Maxwell, en este caso al subsuelo/Tierra.

El tensor de impedancias es importante para reconocer la dimensionalidad


del medio. Es útil para determinar la resistividad aparente como función de
orientación angular. A partir de él se puede definir resistividad aparente y fase de
impedancia para cada elemento del tensor. La fase provee información de la
conductividad de las estructuras. La resistividad aparente es un promedio de la
resistividad de un volumen de la Tierra en un periodo particular. Sí el medio no es
homogéneo varia con la dirección de medición. Se considera un medio 1D cuando
la conductividad varia solo en fusión de la profundidad, si la conductividad también
varia a lo largo de una dirección lateral entonces es 2D, sino hay coincidencia entre
los ejes de medición y dirección, entonces es un 3D ya que varía en todas
direcciones. El tipper depende de la conductividad del medio y puede ayudar a
conocer la direccionalidad y dimensionalidad del medio. Relaciona la componente
vertical del campo magnético con las componentes horizontales del mismo campo.
Finalmente, el tensor de fases permite conocer la direccionalidad y dimensionalidad
del medio geoeléctrico, es un numero complejo (cociente de un número real e
imaginario), puede ser representado por una elipse.

Todos estos términos son esenciales para comprender el procesamiento de


datos magnetotelúricos, que es el tema por abordar en el siguiente capítulo.

43
Yasmin Hernández Aburto
Capítulo III Adquisición y procesamiento de datos magnetotelúricos.

3.1 Ubicación de los sondeos

Los sondeos adquiridos se distribuyen en dos perfiles (Tabla 4) en la cual se


marca con negritas el sondeo que pasa por ambos perfiles, el primero con una
dirección NE-SW con una longitud de 2,333 m. el cual cuenta con un total de 7
sondeos, el segundo perfil con una dirección NW-SE y longitud de 3,017 m el cual
cuenta con un total de 8 sondeos. La ubicación y distribución de estos se muestran
en la Figura 15.

Figura 15. De color verde se localiza el Perfil NE-SW y de color amarillo el Perfil NW-SE, ambos
con sus respectivos sondeos. Se logra apreciar que los perfiles se intersecan en el sitio AC027,
de color rojos de ubican los Pozos exploratorios EAC-1 y EAC-2.

44
Yasmin Hernández Aburto
Adquisición y procesamiento de datos magnetotelúricos

Tabla 4. Desglose de los sondeos pertenecientes a cada perfil

Perfil NE-SW Perfil NW-SE


AC023 AC005
AC024 AC016
AC025 AC027
AC026 AC038
AC027 AC049
AC028 AC060
AC029 AC061
AC071

Los sondeos no se encuentran alineados totalmente a su perfil, por lo que la


información de cada sondeo se correlacionó a su perfil correspondiente.

3.2 Diseño de adquisición

La adquisición consiste en medir las componentes del campo


electromagnético, 2 eléctricas y 3 magnéticas (Figura 16), la finalidad es relacionar
linealmente las componentes perpendiculares para determinar la distribución de la
conductividad eléctrica en el subsuelo y la función de transferencia geomagnética.

Algunas de las características del sitio que preferentemente se deben tener en


cuenta son:

• Hallarse despejado de fuentes de ruido, por ejemplo: líneas de alta tensión,


mallas eléctricas, motores en funcionamiento, vías de ferrocarril, carreteras,
tuberías, entre otros.
• Asegurarse de la horizontalidad de las bobinas magnéticas.
• Procurarse de la horizontalidad de los dipolos eléctricos.
• Asegurar una baja resistencia de contacto en los electrodos.

45
Yasmin Hernández Aburto
Adquisición y procesamiento de datos magnetotelúricos

Para llevar a cabo el levantamiento en campo, se determinó la orientación de los


perfiles de acuerdo con la información disponible sobre las estructuras conocidas
en la zona de estudio, por lo que se realizaron los sondeos con una orientación de
NE-SW y NW-SE. Los parámetros de adquisición que se utilizaron se resumen en
la tabla 5, simultáneamente al levantamiento de MT se tuvo una estación remota en
la zona de Los Humeros, que midió de manera continua la frecuencia de 128 Hz.

Este método de referencia remota fue propuesto y verificado por Gamble et al.
(1979) en un trabajo realizado en Bear Valley, California, el cual consistió en montar
dos estaciones magnetotelúricas y obtener Ex, Ey, Hx, Hy y Hz de tal manera que las
dos estaciones midieran simultáneamente. Los magnetómetros en cada sitio se
usaron como referencia para las señales MT en el otro sitio. Se compararon las
resistividades aparentes del análisis con referencia remota con las resistividades
aparentes a partir de la impedancia estándar. Los resultados para el análisis de
referencia remota no son afectados por ruidos que no están correlacionados sobre
la distancia que separa el magnetómetro de referencia y la estación base.

Tabla 5. Parámetros de adquisición utilizados

Parámetros de adquisición MT

Longitud de los dipolos 90 m

Arreglo En cruz, bobinas a lo largo de los ejes

Dirección X Norte magnético

Tiempos de medición 4096 Hz – 30 min, 128 Hz – mínimo 20 hrs.

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Adquisición y procesamiento de datos magnetotelúricos

Figura 16. Distribución ilustrativa de los electrodos y bobinas magnéticas para un


levantamiento de MT. La Figura muestra una separación de dipolos de 100m y en el estudio
realizado fue de 90m (dominio público).

3.2.1 Equipo Utilizado

En cada sitio MT fueron realizadas las mediciones de los campos eléctrico y


magnético en las componentes horizontales y en la componente vertical,
respectivamente, para los tiempos y frecuencias establecidas en la Tabla 5. Las
bobinas de inducción que se utilizaron en el levantamiento en campo fueron de
banda ancha MFS-06e (Figura 17) que cubren un amplio rango de frecuencias
desde 0.0001 Hz hasta 10 kHz, el equipo utilizado fue ADU-07e (Figura 18), y
electrodos EFP-06 (Figura 19) (Metronix, 2019).

A) B)

Figura 17. Bobinas de inducción MFS-06e, A) Bobina colocada en campo para la medición
de la componente vertical del campo magnético, B) Disposición en campo de una bobina
para la medición de una componente horizontal del campo magnético.

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Adquisición y procesamiento de datos magnetotelúricos

Algunas de las características más importantes del sistema de registro de ADU-07e,


son:

• Conversión Analógico/Digital de 24 Bit


• Sincronización a través de GPS
• Calibración automática
• Compensación automática de las entradas, elimina el potencial propio de los
electrodos
• Alimentación por batería de 12 V.
• Opera en un amplio rango de temperatura desde -40°C hasta 70°C

Figura 18. Equipo de medición ADU-07e

Los electrodos EFP-06 son de tipo Pb/PbCl2 sellado, sus principales características
son:

• Rango de frecuencia DC…. 100 kHz


• Resistencia de contacto 50-500

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Adquisición y procesamiento de datos magnetotelúricos

• Superficie efectiva 27 cm2


• Potencial DC unos pocos mV, auto-ruido nivel: 0.01-0.001 mV
• Rango de temperatura -10 a 50°C

Figura 19. Electrodo EFP-06 y su disposición en campo

3.3 Procesamiento de datos Magnetotelúricos

Cada metodología tiene una serie de pasos a seguir para poder llegar a un
resultado, en el caso del método magnetotelúrico antes de llegar a los modelos
finales de contrastes de resistividad en el subsuelo, se tiene un largo proceso en el
cual la información obtenida en campo pasa por controles de calidad antes de ser
procesados en diferentes programas. De forma general, el Diagrama 1 muestra un
flujo de trabajo para datos MT.

3.3.1 Análisis de las Series de Tiempo

La peculiaridad del método MT es que, la información obtenida del


levantamiento en campo, son series de tiempo por cada sitio medido. Estas series
de tiempo se someten a un control de calidad, el cual consiste en eliminar
manualmente los picos de gran amplitud de acuerdo con su tendencia y se analiza
la continuidad y consistencia de estas.

49
Yasmin Hernández Aburto
Adquisición y procesamiento de datos magnetotelúricos

Análisis de Estimación Análisis


las series de del tensor de Dimensional Modelado
tiempo impedancias y Direccional

Diagrama 1. Flujo de trabajo para el procesamiento de datos magnetotelúricos

3.3.2 Estimación del tensor de impedancias

A partir de las series de tiempo se realiza la estimación del tensor de


impedancias, con el cual se obtienen las curvas de resistividad aparente y de fase
(Figura 20). Para realizar este paso, fue necesario utilizar el programa “ProcMT ®”.

Figura 20. Curvas estimadas de resistividad aparente y de fase de AC023, AC024, AC026,
AC027, AC028 y AC029 del perfil NE-SW, en la cuadricula superior se muestran las curvas de
resistividad aparente y en la cuadricula inferior son las curvas de fase. De color rojo se
observan las curvas de la componente xy mientras que las de color azul son las curvas de la
componente yx. Los puntos son los datos obtenidos en campo y las líneas continuas son las
curvas estimadas por el programa.

50
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Adquisición y procesamiento de datos magnetotelúricos

3.3.3 Análisis Dimensional y Direccional

Una vez obtenidas las curvas de resistividad y fase, el siguiente paso consiste
en un análisis de dimensionalidad y direccionalidad. El análisis de dimensionalidad
permite conocer la complejidad geoeléctrica del medio (1D, 2D o 3D). El análisis de
direccionalidad geoeléctrica da a conocer la dirección del strike (dirección
preferencial de la estructura geoeléctrica) cuando se está en un medio 2D, de ser
así, se estima el ángulo de rotación entre la de los datos medidos y la dirección de
la estructura geoeléctrica, que permita obtener una representación 2D de la
respuesta MT. Para ello se han desarrollado diversos métodos de análisis, la
mayoría de estos dependen del análisis de los invariantes a rotación de la respuesta
magnetotelúrica (Swift, 1967; Bahr, 1988; Weaver et al. 2000).

En el presente trabajo se utilizó el método de tensor de fase, ya que este se


ha convertido en una herramienta importante debido a que no se ve afectado por la
distorsión galvánica, el Skew (𝛽𝛽) es cero cuando la estructura regional es 1D o 2D,
el strike regional se extrae fácilmente y no hace suposiciones acerca de cómo los
campos eléctrico y magnético interactúan con la estructura subyacente según
Caldwell et al. (2004). Esta clasificación se hizo de acuerdo con los valores de las
invariantes del tensor (ecuaciones 29-31), si 𝛷𝛷𝑚𝑚𝑚𝑚𝑚𝑚 y 𝛷𝛷𝑚𝑚𝑚𝑚𝑚𝑚 son iguales entonces se
denomina como un medio 1D y se representará mediante cuadros de color azul. Si
los valores de 𝛷𝛷𝑚𝑚𝑚𝑚𝑚𝑚 y 𝛷𝛷𝑚𝑚𝑚𝑚𝑚𝑚 son diferentes y además el parámetro 𝛽𝛽 es igual a cero,
entonces se considera un medio 2D, el cual se representará por cuadros de color
verde. Si los valores de 𝛷𝛷𝑚𝑚𝑚𝑚𝑚𝑚 y 𝛷𝛷𝑚𝑚𝑚𝑚𝑚𝑚 son diferentes y además el parámetro 𝛽𝛽 es
diferente de cero, entonces se dice que corresponde a un medio 3D, que se
mostrara mediante cuadros de color rojo.

Se cuenta con 2 perfiles a los cuales se les aplicó el análisis de tensor de


fase para poder identificar la dimensionalidad del medio (Figura 21 y 22 ), se puede
observar en el eje y la frecuencia (Hz) y en el eje x los diferentes puntos de medición,
se puede apreciar que en la parte superior la mayoría de los sondeos se comporta
como un medio 1D mientras que en la parte central hay cuadros color verde que

51
Yasmin Hernández Aburto
Adquisición y procesamiento de datos magnetotelúricos

representan un medio 2D, a frecuencias bajas se puede ver que hay cuadros rojos
representando un medio 3D pero no se observa este comportamiento en todos los
sondeos, por lo que se concluye que la mayoría de los sondeos tienen un patrón
bidimensional, lo que indica que la información es apta para poder realizar un
modelado 2D.

Figura 21. Representación gráfica de la dimensionalidad del Perfil NE-SW

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Yasmin Hernández Aburto
Adquisición y procesamiento de datos magnetotelúricos

Figura 22. Representación gráfica de la dimensionalidad del Perfil NW-SE

Realizado el análisis dimensional, se verificó el comportamiento


bidimensional de la estructura, por lo que se procede al análisis direccional, para
cada perfil se encuentra el ángulo de dirección de la estructura geoeléctrica
denominado strike (Tabla 6) que garantice la posibilidad de aplicar un modelado 2D.

Tabla 6. Ángulo de strike obtenido en cada perfil

Perfil Strike (°)


NE-SW 45
NW-SE 50

Para el levantamiento en campo la longitud de los dipolos fue de 90 m con


un arreglo en cruz con las bobinas a lo largo de los ejes, la dirección en x fue
orientado al norte magnético y el tiempo de medición para 4096 Hz fue de 30 min y
para 128 Hz fue de un mínimo de 20 horas.

53
Yasmin Hernández Aburto
Adquisición y procesamiento de datos magnetotelúricos

El flujo de trabajo para el procesamiento de datos magnetotelúricos consistió


en el análisis de las series de tiempo para la estimación del tensor de impedancias,
posteriormente se realiza el análisis de dimensionalidad y direccionalidad y
finalmente es el modelado.

Mediante la estimación del tensor de impedancias se obtuvieron las curvas


de resistividad aparente y de fase, en el análisis dimensional y direccional se
concluye que se trata de un medio bidimensional para el cual se obtuvo un ángulo
de strike de 45° correspondiente al perfil NE-SW y de 50° para el perfil NW-SE.

Con todo lo anterior y siguiendo el flujo de trabajo para el procesamiento de


datos magnetotelúricos, se procede a realizar el modelado, en este caso particular
se trata de un medio 2D, por lo que se calculará un modelo bidimensional que se
abordará en el siguiente capítulo.

54
Yasmin Hernández Aburto
Capítulo IV Modelado bidimensional de datos magnetotelúricos.

Los métodos geofísicos están basados en el estudio de diferentes campos


físicos y la propagación de estos en el interior de la Tierra. Los más importantes son
el gravitatorio, el magnético, el electromagnético y el de ondas sísmicas. Los valores
observados de estos campos dependen, principalmente, de las propiedades físicas
de las rocas.

La aproximación convencional al análisis de datos geofísicos consiste en la


definición de modelos geológicos y la comparación de los datos teóricos calculados
según esos modelos con los datos observados en campo. El modelado de los datos
a partir de modelos propuestos a priori es conocido como problema directo; por lo
tanto, la solución del problema directo hace posible la predicción de los datos
geofísicos para un modelo geológico dado (Zhdanov, 2002).

El objetivo de la observación geofísica es la determinación de estructuras


geológicas a partir de los datos observados. Debido a la complejidad de la estructura
interna de la Tierra, el problema propuesto tiene una muy difícil solución, lo que
conlleva a una simplificación (modelado) de la geología real para poder obtener
alguna solución práctica. El problema que plantea la determinación de un modelo
geológico a partir de una serie de datos observados se le conoce como problema
inverso. La calidad de los resultados en la interpretación geofísica depende de la
habilidad a la hora de aproximar la geología real mediante los modelos propuestos,
es decir, de la solución de un problema inverso (Zhdanov, 2002).

Los problemas directo e inverso están acoplados (Diagrama 2). No hay


solución del problema inverso en términos cuantitativos si no existe la solución del
problema directo.

55
Yasmin Hernández Aburto
Modelado bidimensional de datos magnetotelúricos

Problema Directo

Modelo Datos

Problema Inverso

Diagrama 2. Diagrama del Problema Directo y Problema Inverso

En la solución de cualquier problema inverso se plantean tres preguntas


importantes:

1. ¿La solución existe?


2. ¿Es única?
3. ¿Es estable?

La existencia de la solución está directamente relacionada con la formulación


matemática del problema inverso. Desde el punto de vista físico debe existir una
solución, ya que el objetivo de estudio es una estructura que existe realmente en el
interior de la Tierra. Sin embargo, desde el punto de vista matemático podría no
existir ningún modelo numérico que represente adecuadamente la estructura real y
que, a su vez, se ajuste de forma adecuada a los datos observados (Zhdanov,
2002).

La unicidad de la solución puede ilustrarse dando un ejemplo en el cual se


asumen dos modelos diferentes a partir de los cuales se genera el mismo conjunto
de datos, en este caso es imposible distinguir un modelo del otro a partir de los
datos obtenidos. Esta es la razón por lo que la pregunta de la unicidad de la solución
es muy importante en el planteamiento del problema inverso (Zhdanov, 2002).

56
Yasmin Hernández Aburto
Modelado bidimensional de datos magnetotelúricos

En cuanto a la estabilidad de la solución, ésta es crítica en cualquier


problema de inversión. Cualquier dato procedente de la observación en campo está
siempre contaminado por un cierto nivel de ruido. La cuestión es determinar si la
respuesta en el proceso de inversión de diversos conjuntos de datos que se
diferencian en un cierto nivel de ruido es acorde con ese nivel de perturbación
(Zhdanov, 2002).

Considerando la importancia de estas tres preguntas para la solución del


problema inverso, el famoso matemático francés Hadamard expreso la opinión de
que un problema matemático certero fuera formulado correctamente si las tres
preguntas tuvieran una respuesta positiva. Dicho en otras palabras, que el problema
matemático estuviera bien planteado (well-posed), que la solución existe, es única
y es estable. Un problema mal planteado (ill-posed), es aquel en el que la solución
no existe, o no es única, o si no es una función continua de los datos. Hadamard
consideró que un problema matemático mal planteado carece de significado físico
o matemático (Zhdanov, 2002).

Sin embargo, resulta que la mayoría de los problemas matemáticos, físicos y


geofísicos son mal planteados. Afortunadamente, más tarde se encontró que la
opinión de Hadamard era incorrecta, los problemas mal planteados, física y
matemáticamente, podían resolverse. A mediados del siglo XX, el matemático ruso
Andrei N. Tikhonov desarrolló los fundamentos de la teoría de soluciones de
problemas mal condicionados. Él introdujo un método de regularización en la
solución de un problema inverso, que fue basado en la aproximación de un
problema mal planteado por un número de problemas bien planteados (Zhdanov,
2002).

Un ejemplo de problema inverso usando métodos electromagnéticos es la


determinación de la conductividad eléctrica, mientras que el problema directo
implica tomar un modelo asumido y calcular cuales deberían ser los valores
observados (Diagrama 3).

57
Yasmin Hernández Aburto
Modelado bidimensional de datos magnetotelúricos

Problema Directo Problema Inverso

Entrada: Modelo de la Respuesta


Tierra electromagnética

Proceso: Modelado Inversión

Salida: Respuesta Modelo de la


electromagnética Tierra

Diagrama 3. Problema Directo e Inverso para métodos electromagnéticos

De acuerdo con el Diagrama 3, el problema inverso requiere de un proceso


de inversión que ayuda a obtener un modelo a partir de los datos observados en
campo. Existen varios métodos de inversión que ayudan a resolver el problema
inverso. En el presente trabajo se utilizó el algoritmo de gradientes conjugados no
lineales propuesto por Rodi y Mackie (2001), el cual es un algoritmo de inversión,
que hace uso de una discretización del medio en bloques de tamaño y resistividad
variables, las heterogeneidades se representan mediante la variación del valor de
resistividad de un bloque a otro, después se consigue una aproximación de las
ecuaciones de Maxwell aplicando diferencias finitas al medio discretizado.

El problema inverso se describe a través de la ecuación 35:

𝒅𝒅 = 𝐹𝐹(𝒎𝒎) + 𝒆𝒆 (35)

58
Yasmin Hernández Aburto
Modelado bidimensional de datos magnetotelúricos

Donde 𝒅𝒅 representa el vector de datos observados, como son la resistividad


y fase o los valores de las funciones de transferencia para cada frecuencia. 𝒆𝒆 es el
vector de errores, 𝐹𝐹 es una función de modelado directo y 𝒎𝒎 es el vector de
parámetros del modelo.

La solución del problema inverso consiste en minimizar la función:

𝑇𝑇
𝛾𝛾(𝒎𝒎) = �𝑑𝑑 − 𝐹𝐹(𝒎𝒎)� 𝑉𝑉 −1 �𝑑𝑑 − 𝐹𝐹(𝒎𝒎)� + λ𝒎𝒎𝑇𝑇 𝐿𝐿𝑇𝑇 𝐿𝐿𝒎𝒎 (36)

En la ecuación 36 λ es el parámetro de regularización, el cual tiene un


significado bastante importante dado el mal planteamiento del problema inverso MT.
Este parámetro sirve para controlar el desajuste entre los datos observados y
predichos además de la rugosidad del modelo. 𝑉𝑉 es la matriz de covarianza de los
errores 𝒆𝒆.

El segundo término de la ecuación 36, es una función de estabilidad en el


espacio del modelo. La función 𝐿𝐿 escoge como un operador de diferencias de
segundo grado de tal forma que, bajo una malla uniforme, 𝐿𝐿𝒎𝒎 se aproxima al
laplaciano del logaritmo de la resistividad. 𝛾𝛾 es el modelo estimado regularizado.

El parámetro de regularización λ describe la relación entre el mejor ajuste y


la estabilización más razonable. En el caso en que se selecciona un λ demasiado
pequeño, la minimización de la ecuación 35 sería como si no hubiésemos utilizado
regularización y obtendremos una solución inestable e incorrecta. Cuando λ es
demasiado grande, la minimización de la ecuación 35 es equivalente a la
minimización de la función de estabilización y la solución se verá forzada al modelo
a priori, llegando a darse el caso de que el modelo calculado se ajuste
perfectamente al modelo a priori, ignorando por completo los datos observados. Por
lo tanto, una cuestión crítica en la inversión es la elección del parámetro de
regularización óptimo.

Finalmente, el problema inverso se soluciona aplicando el método de


optimización de gradientes conjugados no lineales de forma iterativa.

59
Yasmin Hernández Aburto
Modelado bidimensional de datos magnetotelúricos

4.1 Procedimiento de modelado de datos MT

Para empezar el modelado de datos MT lo primero a realizar es una malla


para segmentar el semi espacio (Figura 23), se definió una malla mucho más fina
en superficie para garantizar un buen ajuste a las altas frecuencias donde se
encuentran los sondeos, es decir, hacer la malla más fina en donde tenemos
información certera. A mayor profundidad se incrementó el espesor de las celdas,
haciendo estas de mayor tamaño que corresponde a frecuencias bajas, para ello
fue necesario utilizar el programa “WinGLink®”.

Figura 23. Mallado para la discretización del medio en bloques.

Posteriormente se procede a hacer un análisis para encontrar el valor del


parámetro de regularización λ. Este análisis se realiza a través del método de curva
de regularización o curva L, siguiendo el criterio de Tikhonov, el cual se aplicará a
los dos perfiles que se describen en el presente trabajo.

El análisis de curva L es un método gráfico simple para la selección cuasi


óptima del parámetro de regularización. Consiste en encontrar el valor de
regularización que minimice el error residual del modelo y la rugosidad de éste
(Danda et al. 2017), se desarrolla de manera iterativa cambiando el valor de

60
Yasmin Hernández Aburto
Modelado bidimensional de datos magnetotelúricos

regularización cada vez y registrando el error RMS y la rugosidad que éstos


obtienen para realizar las gráficas.

El método se basa en la representación gráfica para los λ posibles. La curva


L ilustra la relación entre el mejor ajuste y la mejor estabilización. En el caso en que
λ sea muy pequeño el error RMS decrece mientras que la rugosidad aumenta.
Cuando λ es demasiado grande la rugosidad decrece mientras que el error RMS
aumenta. Como resultado, cuando representamos gráficamente (en escala
logarítmica) los distintos valores de λ adoptan una forma característica de L, de ahí
su nombre.

El característico punto de máxima curvatura, que separa la parte horizontal y


vertical, corresponde al valor cuasi óptimo del parámetro de regularización.

Los puntos de máxima curvatura en las curvas L (Figura 24), muestran el


menor error RMS y valores menores de rugosidad del modelo, por lo que se deduce
que estos valores son los valores óptimos de regularización para cada perfil
correspondiente.

Se puede observar que, para ambos perfiles el parámetro regularizador


ronda en 2, para el primer perfil NE-SW el valor óptimo es de 1.5 mientras que
para el segundo perfil NW-SE es de 2.

Figura 24. Curva L o de regularización correspondiente al Perfil NE-SW

61
Yasmin Hernández Aburto
Modelado bidimensional de datos magnetotelúricos

Después de que se obtienen los valores de regularización para cada perfil se


realiza la inversión en un proceso iterativo hasta determinar parámetros del modelo
que represente geológicamente las características de la zona para posteriormente
poder realizar una interpretación de las secciones resultantes.

En este capítulo se concluye que, es importante conocer cuál es el problema


directo y el problema inverso, debido a que en la geofísica es común trabajar con el
problema inverso. Para poder resolver el problema inverso, su planteamiento debe
cumplir con que tenga solución, que sea única y estable, lo cual es un poco
complicado debido a su complejidad por naturaleza. La solución del problema
inverso es posible gracias a los algoritmos de inversión, estos ayudan a
acondicionar el problema de acuerdo con el método geofísico utilizado y al objetivo
planteado. En este trabajo de investigación se implementó el algoritmo de
gradientes conjugados no lineales propuesto por Rodi y Mackie (2001). Para poder
aplicar este algoritmo se necesita obtener el valor del parámetro de regularización,
el cual se adquirió mediante el criterio de Tikhonov, análisis de la curva L, el valor
del parámetro de regularización para el perfil NE-SW es de 1.5 mientras que para
el segundo perfil NW-SE es de 2. Una vez obtenidos estos valores, el problema
inverso se soluciona finalmente aplicando el método de optimización de gradientes
conjugados no lineales de forma iterativa.

Como consecuencia de la inversión, se obtiene una sección geoeléctrica


correspondiente a cada perfil, por lo que, el siguiente capítulo presentará los
resultados y la interpretación de dichas secciones geoeléctricas.

62
Yasmin Hernández Aburto
Capítulo V Discusión de resultados.

El resultado que se obtiene a partir del método magnetotelúrico es una


sección geoeléctrica a lo largo de un perfil. Para ello los datos medidos en campo
se sometieron a un análisis temporal y se estimó el tensor de impedancias a partir
del cual se generaron las curvas de resistividad aparente y de fase, mismas a las
que se les realizó análisis direccional y dimensional el cual determinó que era un
medio bidimensional y posteriormente fueron modeladas.

Durante el proceso de inversión el programa “WinGLink®” despliega dos


pseudosecciones (Anexo 7), una de resistividades aparentes medidas con
resistividades aparentes calculadas como respuesta del modelo de inversión, y otra
con los valores de fase obtenidas en campo y las fases calculadas para el modelo
inverso. De esta forma es posible evaluar el ajuste de los datos conforme va
evolucionando el modelo de inversión.

En la Figura 25 se observa una unidad somera de resistividades


relativamente bajas, variando entre 5 y 17 Ωm (UC1), posiblemente asociada con la
capa de arcillas producto de la alteración hidrotermal. Esta capa se presenta
discontinua en el perfil, sobre todo debajo del sitio AC028. Subyaciendo se
encuentra una unidad geoeléctrica denominada UC2, con resistividades entre 20 y
90 Ωm, la cual alcanza una profundidad de aproximadamente 1500 m en el centro
del perfil. La unidad UR1, se observa justo debajo de UC2, y presenta resistividades
mayores a 300 Ωm. Finalmente, hacia el centro del perfil, se observa un decremento
discreto de la resistividad, entre 100 y 200 Ωm (UR2), comportamiento que se
conserva a profundidad.

63
Yasmin Hernández Aburto
Discusión de resultados

Perfil NE-SW

UC1 UC2

UR1

UR2

Figura 25. Sección geoeléctrica correspondiente al Perfil NE-SW

En la Figura 26, donde se muestra el perfil NW-SE, se observa la misma


unidad superficial UC1 con resistividades de 5 a 17 Ωm que presenta
discontinuidades laterales con geometría irregular, justo debajo del Pozo EAC-2,
esta unidad se presenta en los primeros 800 m de profundidad. Así mismo puede
observarse una unidad con resistividades de 20 a 90 Ωm (UC2) que se extiende
hasta unos 1500 m de profundidad aproximadamente con espesor variante,
mostrando su mayor potencia debajo del mismo Pozo. Debajo de UC2 se encuentra
una unidad con un rango de resistividades de 450 a 1024 Ωm (UR1) que es de
geometría irregular y con espesores variables que van desde 4500 a 7000 m. Por
último, se encuentra una unidad con valores de resistividad de 200 a 300 Ωm la cual
presenta una geometría irregular.

64
Yasmin Hernández Aburto
Discusión de resultados

PERFIL NW-SE

UC1
UC2

UR1

UR2

Figura 26. Sección geoeléctrica correspondiente al Perfil NW-SE.

A partir de los resultados mostrados (Figura 25 y 26) se pueden identificar


dos unidades conductivas y dos unidades resistivas que se describirán a
continuación.

La unidad UC1 (unidad conductiva uno) presenta valores de resistividad de


5 a 17 Ωm sin continuación lateral, esta unidad puede asociarse a una zona con
presencia de alteración por minerales hidrotermales.

La unidad UC2 (unidad conductiva dos) muestra un rango de resistividades


de 20 a 90 Ωm con presencia en superficie, acorde con las curvas de temperatura
de los Pozos EAC-1 y EAC-2 esta zona se encuentra entre 200 y 250°C.

65
Yasmin Hernández Aburto
Discusión de resultados

Por debajo de UC2 se encuentra la UR1 (unidad resistiva uno) la cual


presenta resistividades de 450 hasta 1024 Ωm, ésta se asocia a un intrusivo. Dicha
conjetura concuerda con la información de la columna estratigráfica del Pozo EAC-
1 y EAC-2, donde Viggiano-Guerra et al. (2011) reportan la presencia de granito de
1600 a 2000 m de profundidad.

La unidad UR2 (unidad resistiva dos) muestra un rango de resistividades de


200 a 300 Ωm, la cual se encuentra a temperaturas mayores a 300°C, posiblemente
fracturada debido a la actividad volcánica.

Tabla 7. Descripción de las unidades presentes en los perfiles NE-SW y NW-SE


Unidad Resistividad (Ωm) Litología
UC1 5 -17 zona con alteración hidrotermal
UC2 20 - 90 Unidad conductiva
UR1 450 - 1024 Intrusivo
UR2 200 - 300 Unidad resistiva

En este capítulo se concluye que los resultados obtenidos son adecuados


con lo esperado en la determinación del prospecto geotérmico, se logró obtener una
distribución geoeléctrica a profundidad, la cual proporciona información acerca de
las posibles estructuras que se encuentran a profundidad, de esta información se
identificaron dos unidades resistivas y dos unidades conductivas, las cuales serán
de ayuda a trabajos posteriores.

66
Yasmin Hernández Aburto
Conclusiones

El estudio realizado se limitó a caracterizar geoeléctricamente la porción


central del prospecto geotérmico de Acoculco, Puebla, a lo largo de dos perfiles,
uno con dirección NE-SW y el otro NW-SE, logrando identificar la unidad conductiva
UC1 sin continuidad lateral asociada con una zona de alteración hidrotermal.
Subyaciendo se encuentra la unidad conductiva dos UC2 con resistividades de 20
a 90 Ωm, debajo de esta se encuentra UR1 que presenta valores superiores a 450
Ωm que es asociada al intrusivo. Finalmente se encuentra UR2 expuesta a
temperaturas mayores de 260°C con resistividades de 200 a 300 Ωm

Con lo anterior es posible sostener que se cumplieron satisfactoriamente los


objetivos propuestos en este trabajo, cabe mencionar que la información que se
encuentra del prospecto geotérmico Acoculco, Puebla, hasta el momento es poca
comparada con la que se cuenta de campos geotérmicos como Los Humeros, Los
Azufres, Cerro Prieto, entre otros. Debido a ello, es recomendable contribuir con
información que permita alcanzar una mejor comprensión de los fenómenos de
interés geotérmico presentes en la zona. Cabe mencionar que la información
generada del subsuelo provee a una mejor evaluación de la zona de interés, ya que
estos resultados ayudarán a la elaboración de un modelo geotérmico que tendrá
mayor certidumbre y aportará a la potencialización del prospecto geotérmico
Acoculco, Puebla.

Es importante resaltar que los trabajos previamente realizados en esta área


de conveniencia corroboran que hay evidencias de la presencia de potencial
geotérmico en la zona y sugieren la existencia de un yacimiento no convencional,
es decir, un sistema geotérmico de roca seca caliente.

67
Yasmin Hernández Aburto
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73
Yasmin Hernández Aburto
Anexos

Anexo 1. Glosario

Alteración argílica: Tipo de alteración hidrotermal caracterizada por la presencia


de caolinita y/o montmorillonita.

Campo conservativo: Es un campo de fuerzas donde el trabajo total realizado por


el campo sobre una partícula que realiza un desplazamiento en una trayectoria
cerrada (como la órbita de un planeta) es nulo. El nombre conservativo se debe a
que para una fuerza de ese tipo existe una forma especialmente simple (en términos
de energía potencial) de la ley de la conservación de la energía. Las fuerzas que
dependen solo de la posición son típicamente conservativas.

Magma calco-alcalino: Es una serie de magma que aumenta en SiO2 con la


diferenciación, con cristalización temprana de los óxidos de Fe y Ti. Sus miembros
son: Basaltos ricos en alúmina, Andesitas, Dacitas y Riolitas. Este magma se
encuentra restringido a zonas de subducción de Placas tectónicas.

Magma per-alcalino: Es un magma rico en metales alcalinos, especialmente Na, K


que se genera a partir de la fusión parcial de peridotitas en zonas profundas. Origina
basaltos alcalinos, riolitas, su porcentaje en sílice es menor del 45%

Sills (manto): Son intrusiones laminares de disposición casi horizontal, que suelen
ser concordantes con la estructura de la roca encajante. Su extensión o propagación
lateral puede ser muy grande mientras que su crecimiento en la vertical es pequeño,
dando lugar a cuerpos intrusivos sencillos. Se pueden considerar yacimientos
laminares de estancamiento del magma tras su ascenso a través de diques desde
otras cámaras magmáticas o de las propias áreas de fusión.

74
Yasmin Hernández Aburto
Anexos

Skew: Es una respuesta del tensor de fase, una cantidad matemática que es el
radio de una señal dividida por una anti-señal (Swift, 1967).

Strike: Término geológico que se define


como la dirección de la brújula en relación
con el norte, de la línea formada por la
intersección de una capa de roca con otra
característicamente plana con un plano
horizontal imaginario. La intersección de dos
planos es una línea recta y en este caso, la
línea geológica corresponde al strike. Esta
línea siempre se mide referida al norte.

Surgencia: 1. Fenómeno geológico similar a los flujos piroclásticos, pero de menor


densidad. Disponen de una capacidad mayor para sobrepasar barreras topográficas
y sus efectos son similares a los de una onda de choque producida por grandes
explosiones; 2. Ascenso de capas de agua subsuperficiales a la superficie producido
por corrientes y o fenómenos atmosféricos. Este fenómeno frecuentemente acarrea
una gran cantidad de nutrientes a la superficie del mar.

Yacimiento geotérmico de roca seca caliente: Son aquellos en los que sin previa
existencia de fluido (tan solo una masa de roca a elevada temperatura), mediante
técnicas de fracturación artificial e inyección de fluido se consigue establecer un
circuito geotérmico con inyección de agua fría y extracción de vapor que es utilizado
para la generación de electricidad. Sus características principales son: no existe
fluido, no hay materiales permeables, la profundidad puede ser de hasta 5000 m,
para la generación de energía la temperatura inicial debe ser mayor de 200°C

75
Yasmin Hernández Aburto
Anexos
Anexo 2. Evolución volcánica de la Caldera de Acoculco, Puebla de acuerdo con López-Hernández (2009)

Segundo evento de
Primer evento de Acoculco. Colapso
Acoculco. de la Caldera
Actividad volcánica propuesta por
pre-Caldera López-Hernández,
propuesta por
López-Hernández,

Evento
Tercer evento
terminal de
de Acoculco. Acoculco por
Actividad post- López-
Hernández,
Caldera 2009.
propuesta por
López-
Hernández,
2009.

76
Anexos

Anexo 3. Evolución volcánica de la Caldera de Acoculco, Puebla de acuerdo con Sosa-Ceballos et al. (2018)

Modelo esquemático de del sistema investigado de


Acoculco (ACC), no está a escala. Sólo las rocas
conocidas están representadas en superficie. A) La
erupción de la ignimbrita Acoculco produjo el colapso del
yacimiento, que modificó el campo de esfuerzos locales.
B) El colapso del yacimiento obstaculizó el ascenso del
magma a través del sistema de fallas que golpeó la
ignimbrita ACC. Magmas genéticamente no relacionados
(Peralcalino y calco-alcalino) fluyen horizontalmente y
forman nuevos depósitos. El magma calco-alcalino
combinado con diferentes cantidades de peralcalino
derretida formó los domos Epc. C) La fuente de calco-
alcalino quedó exhausta, aunque todavía se producía
algo de mezcla y calor, y el magma peralcalino se volvió
más relevante en la formación de domos Lpc y en el este
se produjo una erupción explosiva de ignimbrita Las
Encimadas. La deformación local e inconformidades
regionales promovieron el ascenso y estancamiento del
magma debajo del centro de la estructura de la Caldera.
Algunos magmas se acumularon, cristalizaron y se
enfriaron a poca profundidad (como se encontró en
perforaciones exploratorias de CFE), algunos otros
parcialmente cristalizados a pocas profundidades y luego
explotaron a superficie (como el magma usado para
experimentos) D) El depósito desarrollado después del
severo colapso como zona de sombra donde menos
magmas viscosos no pudieran ascender. Tales magmas
calientan la corteza superior y se inyectan en los depósitos
más felsicos. Los magmas ascienden al borde de la zona
de sombra y forman estructuras Apan-Tezontepec-Ec.
Esto no es evidencia de volcanismo mafico en el centro de
la Caldera, pero magmas en el borde de la zona de
sombra ascendieron para ser expulsadas de la Caldera y
ocasionalmente fueron atrapadas en el enjambre
superficial de sills y diques. Tales magmas atrapados
sirven como elementos de calentamiento para el sistema
77
Anexos
Anexo 4. Registros geofísicos del Pozo EAC-2 (Reporte del proyecto GEMEX, 2020).

Resultados de registros geofísicos del Pozo EAC-2. A) rayos gamma, B) minerales principales, C) Velocidad de onda compresional y de cizalla, D)
Módulo de Bulk y densidad, E) porosidad total y efectiva, F) resistividad profunda, G) Módulo de radio dinámico de poisson, H) Módulo dinámico
de Young, I) Fuerza compresiva no confinada
78
Anexos
Anexo 5. Tabla de las características de las unidades litoestratigráficas descritas para el complejo de Caldera
Acoculco y las áreas circundantes propuesto por Avellán et al. 2018.
Group Unit Province Acronym Rock features
Peñuela dacitic domes TMVB Pdd Porphyritic whit quartz, plagioclase, alkali feldspar, amphibole, pyroxene, and biotite phenocrysts
Pre-caldera Puente andesitic lava domes Padl Porphyritic whit plagioclase anda olivine phenocrysts
Terrecillos dacitic lava domes Tdld Porphyritic whit quartz, plagioclase, alkali feldspar and amphiobole phenocrysts
Acoculco andesitic ignimbrite Acc Aai Unsorted beds of pumice and lithic blocks and lapilli supported by a fine-ash matrix
Syn-caldera Lacustrine sediments Ls Alternating sequence of white clayed laminae, and dark-gray cm-thick, volcaniclastic beds
Huistongo basaltic andesite lava Acc Hbl Gray to greenish-gray in hand specimen aphanitic
Sayula rhyolitic lava Acc Srl Holohyaline textures partially devitrified with ligth-gray spherulites and lithophysae
Aguila basaltic trachyandesitic lava Acc Atal Aphanitic, and contains subrounded granite and sandstones xenoliths
Early post- Amanalco basaltic scoria cones ATVF Asc Scoria is aphanitic, dark-gray, poorly vesiculated with plagioclase and olivine micro-phenocrysts
caldera Viejo basaltic trachyandesite lavas Acc Vtal Porphyritic rock with plagioclase and pyroxene phenocrysts
Manzanito basaltic trachyandesite lavas Acc Mtal Porphyritic rock with plagioclase and pyroxene phenocrysts
Ajolotla trachyandesitic dome Acc Atad Porphyritic with plagioclase, orthopyroxene and clinopyroxene phenocrysts
Camelia andesitic lava ATVF Cal Aphanitic with plagioclase and olivine microphenocrysts
Colorada andesitic lava Acc Coal Porphyritic with plagioclase, amphibole, clinopyroxene and orthopyroxene phenocrysts
Altamira rhyolitic dome Acc Alrd Porphyritic with alkali feldspar, quartz, orthopyroxene, and amphibole phenocrysts
Terrecillos andesitic lava and scoria cone Acc Tal Porphyritic lava with plagioclase, olivine an pyroxene phenocrysts
Lobera rhyolitic dome Acc Lrd Porphyritic to vesicular with alkali feldspar, quartz, and amphibole phenocrysts
Cuautelolulco andesitic lava Acc Cual Porphyritic with plagioclase, clinopyroxene nd olivine phenocrysts and subrounded quartz and alkali feldspar xenocrysts
Pedernal rhyolitic lava Acc Pdl Porphyritic with alkali feldspar, plagioclase, quartz, and biotite phenocrysts
Amolo rhyolitic coulée Acc Amrc Porphyritic with alkali feldspar, quartz and amphibole phenocrysts set in a slightly devitrified groundmass
Pintada rhyolitic lava domes Acc Prld Porphyritic with alkali feldspar, quartz, and amphibole phenocrysts
Chica rhyolitic coulée domes Acc Crdc Porphyritic with alkali feldspar, plagioclase, and amphibole ohenocrysts.
Ahuacatla rhyolitic coulée domes Acc Ahrc Porphyritic with alkali feldspar, quartz, plagioclase and amphibole phenocrysts
Late post-
Togo rhyolitic coulée domes Acc Trcd Porphyritic with alkali feldspar, plagioclase and amphibole phenocrysts
caldera
Canoas rhyolitic dome Acc Crd Porphyritic with alkali feldspar, quartz, and amphibole phenocrysts
Arco rhyolitic dome Acc Ard Porphyritic with scarce alkalli feldspar phenocrysts
Encimadas a rhyolitic ignimbrite Acc Eri The matrix constains phenocrysts of alkali feldspar, plagioclase, quartz, and amphibole
Cabezas rhyolitic lava Acc Crl Holohyaline texture, devitrified with spherulites
Blanco basaltic andesite scoria cones ATVF Bsc Bombs are aphanitic, dark-gray color abd contain plagioclase and quartz, xenocrysts
Ailitla rhyolitic coulée dome Acc Arcd Porphyritic with alkali feldspar abd clinopyroxene phenocrysts
Maguey surge fall Acc Msf White-gray to greenish-gray pumice with fibrous vesicular texture and perlitic obsidian
Coatzetzengo basaltic lava cones ATVF Colc Porphyritic texture with olovine and plagioclase, phenocrysts
Minilla rhyolitic coulée dome Acc Mrcd Porphyritic with alkali feldspar, plagioclase, biotite, and orthopyroxene phenocrysts
Tetelas basaltic trachyandesite lava ATVF Ttal Aphanitic with plagioclase and olivine microphenocrysts
Tecoloquillo rhyoolitic ignimbrite Acc Trl Pumice is white, fibrous and porphyritic with quartz, alkali feldspar and amphibole phenocrysts
Moxhuite basaltic andesitic cones ATVF Msc Bombs and blocks are porphyritic with plagioclase and pyroxene phenocrysts, and quartz and amphibole xenocrysts
Extra-
Coliuca basaltic scoria cones ATVF Clc Bombs are dark-gray to black with aphanitic texture with plagioclase, quartz and amphibole xenocryst
caldera
Paila basaltic trachyandesite lava Acc Plc Porphyritic with plagioclase, olivine and pyroxene phenocrysts
The Tulimán basaltic andesite lava cone Acc Tlc Aphanitic with plagioclase, amphibole and quartz xenocrysts

79
Anexos

Anexo 6. Curvas de resistividad aparente y de fase obtenidas en el


programa “ProcMT®”

80
Anexos

81
Anexos

82
Anexos

Anexo 7. Pseudosecciones obtenidas después de la inversión en


“WinGLink®”
Los resultados mostrados en las pseudosecciones de resistividad aparente y fase,
indican que el ajuste del modelo invertido con los datos de campo es aceptable para
ambos perfiles, ya que las características importantes mostradas en las
pseudosecciones generadas con los datos, se ven bien representadas en las
pseudosecciones calculadas con el modelo de inversión.

Perfil NE-SW

Pseudosecciones de resistividad aparente y fase medidas y calculadas para el perfil NE-SW en el modo TM
(izquierda) y modo TE (derecha)

Perfil NE-SW

Pseudosecciones de resistividad aparente y fase medidas y calculadas para el perfil NW-SE en el modo TE
(izquierda) y modo TM (derecha)

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