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Este documento describe cómo viejos patrones y creencias sobre el amor pueden resurgir inesperadamente y llevar a cuestionar relaciones actuales. La autora cuenta cómo una conversación con una amiga la ayudó a ver la situación desde una perspectiva más positiva, entendiendo que estos momentos sirven para crecer espiritualmente. También habla de la importancia de sanar emociones dolorosas del pasado y crear un presente basado en el amor propio y el amor incondicional.
Este documento describe cómo viejos patrones y creencias sobre el amor pueden resurgir inesperadamente y llevar a cuestionar relaciones actuales. La autora cuenta cómo una conversación con una amiga la ayudó a ver la situación desde una perspectiva más positiva, entendiendo que estos momentos sirven para crecer espiritualmente. También habla de la importancia de sanar emociones dolorosas del pasado y crear un presente basado en el amor propio y el amor incondicional.
Este documento describe cómo viejos patrones y creencias sobre el amor pueden resurgir inesperadamente y llevar a cuestionar relaciones actuales. La autora cuenta cómo una conversación con una amiga la ayudó a ver la situación desde una perspectiva más positiva, entendiendo que estos momentos sirven para crecer espiritualmente. También habla de la importancia de sanar emociones dolorosas del pasado y crear un presente basado en el amor propio y el amor incondicional.
En este camino en el que estamos transitando llámese despertar la conciencia o espiritualidad,
en el que siempre hemos hablado de dejar atrás el pasado, que no debemos aferrarnos a patrones o creencias sean familiares, culturales o sociales; pero cuando inesperadamente llegan personas, emociones o situaciones que nos conectan inmediatamente con esos recuerdos, con ese pasado… que te llevan a cuestionar esa relación esa persona y vuelves y caes a en ese rollo, que sientes que ya habías solucionado o al menos trabajado. ¿a qué viene todo esto? hace unos días pase por uno de esos momentos de confrontación con viejos patrones y creencias sobre el amor, pararme ante esos espacios en los que no me he sentido amada, donde volví a emociones del pasado y conecté nuevamente con esa expectativa (llámese miedo) y empecé a cuestionar ciertas relaciones de mi vida, a revisarlas nuevamente pero desde el dolor, sin recordar en ese momento que todo lo que sucede es neutro no es blanco o negro, simplemente es, yo soy la que le doy el matiz.. esto también me llevo a esos espacios en los que no he sabido entregar amor al otro, de la manera perfecta en la que él/ella se sienta amad@ …. En este momento de “crisis emocional” conecté con una amiga, que me cuestiona y me lleva a cuestionarme desde el amor, a lo largo de nuestra conversación ella dice más o menos lo siguiente “en toda historia siempre hay un villano” esta frase me sacudió y me llevó a ver la situación desde donde la tenía que ver y que muchas veces en nuestras conversaciones la han escuchado de mi “el ser con el que más conflictos tienes aquí, es el alma que más te ama y acepta este papel en tu vida sin reparo alguno para ayudarte a crecer, a evolucionar.” Y desde este espacio empiezo a confrontarme y entender que está bien escuchar y enfrentarme nuevamente a este ruido, a este sentir, a estos pensamientos distorsionados sobre el amor y desde ahí conectar con la creación de mi realidad. Y aunque estos hechos generaron desequilibrio, después de esta conversación (por la que doy infinitas gracias) me senté a verlos, integrarlos y comprenderlos desde la gratitud, la abundancia, el amor y la comprensión amorosa que, si esto está sucediendo y se manifestó nuevamente, es para mí más alto bien y el del otro ser, esto es muy fácil de decir, pero en la práctica tendremos que volver a espacios dolorosos y retomarlos desde el amor. Y en cada paso preguntarme que estoy modificando en mi realidad sobre el amor, que estoy sanando, que estoy dejando ir. Silenciar ese ruido externo para escuchar mi ser, mi alma, para crear mi presente. Y desde ese silencio interno me pregunté qué debo hacer y la respuesta llegó así “cuando tu deseas tener una planta hermosa, que haces primero limpias el terreno de malezas, del mismo modo debes limpiar, sanar tus emociones, mira desde el amor y la gratitud ¿qué te está haciendo daño? ¿Por qué? ¿de dónde viene? ¿que es eso que, desde la gratitud, agradeces, pero quieres soltar? ¿cuál es esa relación de pareja, profesional, laboral, con el dinero que ya no quieres mantener? ¿Qué patrón de comportamiento sigues repitiendo? ¿Qué aprendizaje familiar agradeces, pero ya no es parte de ti? Quizás tienes que repasar varias veces para tener una tierra fértil y apta para sembrar, pero no importa, limpia y agradece, con tu terreno limpio ya podrás sembrar, porque será un espacio libre y en este momento y antes de sembrar pregúntate ¿que necesito cosechar? ¿qué es eso nuevo que, si quiero traer y sembrar? y en este proceso antes de ver frutos tienes que abonar, regar. Por eso escúchate en el silencio y desde ese silencio reconócete, ámate. Cuando hablamos de reconocer es que veas lo que estás haciendo por llegar a ese amor primero, a ese amor DIVINO, valora no solo las cosas que haces con éxito, si no también esas que no han salido como querías, que te han llevado a revelarte, a enojarte, a sentir y causar dolor porque esas también son parte de tu crecimiento de tu evolución. Sigue trabajando en tu luz, en tu energía, en tú amor, en reconocerte. Cada paso que das te lleva más cerca” Hoy te quiero invitar a amarte, a disfrutar tu esencia, a disfrutar de esos seres que están a tu alrededor a valorar su existencia, su sabiduría, su amor y sobre todo el ser ese gran maestr@ que Dios, el universo ha puesto en tu vida para recordarte que viniste a trabajar, desde dónde y cómo conectar con tu amor primero, ha recordarte que no te debes perder en el otro y no esperar que el otro se pierda en ti. El amor primero es ese amor incondicional, libre, respetuoso, cómplice, sincero… el que nos dio el libre albedrio de ser y estar aquí, y esa creo que es nuestra misión aquí, recordar, conectar y vivir en este plano ese amor DIVINO, ese amor primero. RECUERDA: “Amar no es dar, no es esperar recibir es simplemente ser y dejar ser”. En este momento en que estoy escribiendo me permito dar gracias por este espacio vivido, por el movimiento que genero esta crisis porque también me llevo a conectar con esa esencia que me recuerda que estamos en un momento energético que nos invita a crecer, a amarnos, cuidar nuestra esencia, nuestra luz, nuestro cuerpo. Medita, aliméntate bien, ora desde el corazón, deja que esta oración sea sincera, espontanea… recuerda” tú eres el único gestor de tu presente y tu futuro”. Con infinito amor les envió un abrazo cálido cargado de bendiciones de amor, paz y felicidad. Martha