Capítulo II: “Los trabajos y los días”

Argumento:

Con quince años, la familia de Silvia debe mudarse por problemas económicos a un
barrio carenciado, debido a esto pierde contacto con sus amigos. La madre de Silvio le
pide a su hijo que busque trabajo porque, no podía mantener a él y a su hermana, la
reacción de Silvio es de rabia para con su madre, pero luego de discutirle, acepta el
hecho de tener que trabajar.
Silvio consigue trabajo en una librería de un inmigrante italiano llamado Don Gaetano y
su esposa María, donde tenía hogar y comida, aunque era muy precario y la comida le
disgustaba, y no le daban un buen trato. Tenía que humillarse sacudiendo un cencerro
en frete del local para atraer clientes.
Luego de una discusión de Don Gaetano y su mujer, Silvio decide salir del lugar e ir con
el señor adinerado que le había prometido conseguirle empleo, al llegar Silvio es tratado
con desprecio y lo echan del lugar. Al retirarse Silvio se siente defraudado por no poder
conseguir un trabajo digno con el cual pueda sustentarse.
Para Silvio, el pasar de los días en las condiciones de humillación y deterioro, le hace
creer que merecer su sufrimiento, como si le tocara vivenciar eso.

Personajes:

Silvio: En este capítulo Silvio ya cumple los quince años, debido a problemas
económicos su familia se debe mudar a un barrio carenciado, por esto dejo de tener
contacto con sus amigos Enrique y Lucio. Su madre le pide que trabaje porque no puede
mantenerlo más. Ante esta situación Silvio muestra rabia y descontento, y replica a su
madre diciéndole que no iba a trabajar, pero al ver la tristeza de su madre entra en razón
y decide buscar un trabajo. El en el desarrollo se muestra como la vida y las distintas
situaciones que vive Silvio lo van golpeando y demostrando que no iba a poder salir
adelante.

La madre de Silvio: Al tener problemas económicos se vio obligada a pedirle a su hijo

que trabaje, se sentía presionada por la situación que vivía y que no podía mantenerlos a
él y a su hermana que estudiaba.

Esposa de don Gaetano: Mujer gorda y blanca, tenía cabello castaño y ojos verdes.

Don Gaetano: Era un grandulón, de pelo ensortijado, piel morena, pestañas hirsutas,
los ojos grandes. Causaba desconfianza.

Don Miguel: Era flaco, alto, carilargo, con barba y tenía expresión lastimera.

Dio Fetente: Tenia larga nariz rojiza, frente aplanada y con arrugas, con pelos grises por
encima de las orejas.

Timoteo Souza: Tenía brillantes mejillas y vivaces pupilas. Vestía un velludo deshabillé.