Ensayo: Disyuntiva entre el camino de la vocación o el de la rentabilidad

Ensayo: Disyuntiva entre el camino de la vocación o el de la rentabilidad

Jheferson Smit Galeano Bedoya

Código: 1094728719

Docente: Lina María Rodríguez Idrobo

Universidad del Quindío

Facultad Ciencias de la Salud
Seguridad y Salud en el Trabajo
Uniquindianidad
Armenia 2023
 Título: Disyuntiva entre el camino la vocación o el de la rentabilidad
Introducción
El presente trabajo expone la Teoría de Aprendizaje propuesta por el autor David
Kolb, aquella de carácter experiencial, donde las personas construyen conocimientos y
afinidad por ciertos temas con base en lo que van viviendo, con el fin de darle sentido a lo
que les rodea, también señala que, para cualquier proceso de aprendizaje, es necesario
disponer de cuatro capacidades básicas: experiencia concreta (EC); observación reflexiva
(OR); conceptualización abstracta (EA) y experimentación activa (EA), adicionalmente
plantea que los estilos individuales de aprendizaje emergen debido a tres factores causales:
la genética, las experiencias de vida y las exigencias del entorno, el aprendizaje
experiencial es intencional si por ejemplo, se asiste a un programa creado específicamente
para una finalidad o puede ser no intencional cuando, se aprende a no comer alimentos que
nos producen alergias, a través de un suceso que tuvimos y nos enfermó o nos generó
malestares. En ese orden de ideas, la autora Virginia Galilea estudió el concepto
Orientación Vocacional, argumentando que la ausencia de experiencia laboral, el
desconocimiento de las propias habilidades y capacidades, la falta de conocimientos sobre
el mercado laboral y el auto-concepto de persona no empleable, son algunos de los factores
que conducen a una orientación vocacional desajustada.

Ahora bien, es pertinente describir cómo se relaciona la Teoría del Aprendizaje

Experiencial con la Orientación Vocacional, en primera instancia hay predisposición a
querer imitar a los padres en la infancia, por ejemplo, si crecí viendo como mi madre es una
talentosa docente y mi padre un militar o médico, los tengo en un concepto de sublimidad,
son mis héroes, pero posteriormente, al llegar al colegio, me doy cuenta que tengo
habilidad para las manualidades, el arte y me voy autodescubriendo, termino el bachillerato
y las exigencias de mi entorno departamental me indican que si estudio música o pintura,
no están bien aspectados económicamente, no producirán una cantidad significativa de
dinero que me ayude a mí y a mi familia, entonces, esas experiencias en el trasegar de la
vida van transformando mi vocación, al final terminamos adaptados no tanto a nuestras
cualidades, aptitudes, actitudes y competencias laborales propias sino a las necesidades del
mercado de trabajo.
 Otro problema, podemos identificar nuestros talentos, tenemos autoconcepto de
personas empleables y haber tenido la oportunidad de haber estudiado algo que nos
apasiona, con el patrocinio de nuestros padres, pero al graduarnos de la universidad
llegamos al campo laboral y nos exigen años de experiencia, hay 2 opciones, ser un
desempleado más en un departamento con bastante vulnerabilidad económica o buscar
otras opciones productivas de trabajo, estudiar otro tema o aprender algún oficio.

Si nos centramos en el contexto del departamento del Quindío, está afectado por el
flagelo de la corrupción, el nepotismo en muchas empresas públicas es tan cruel que no
miran méritos en la Hoja de Vida sino ¿qué padrino o familiar político tiene?, la tasa
general de suicidio es en promedio de 8,9/100 000 habitantes, y oscila entre 5,8 y 10,56, la
depresión es un problema de salud pública atribuido a las pocas oportunidades laborales,
hay pocos matrimonios y familias nucleares, se observan muchas madres cabeza de hogar
que requieren que sus hijos sean un ingreso y no un gasto más, entidades como el Servicio
Nacional de Aprendizaje SENA, nos dan la oportunidad de realizar estudios técnicos y
tecnológicos y en la etapa práctica, los contratos de aprendizaje representan un salario
mínimo que ayuda a solventar los gastos de la casa, muchos como yo, no tuvimos la
oportunidad de salir del colegio directo hacia una universidad, sino hacia al SENA y de ahí
fue necesario trabajar para poder pagar los estudios profesionales, muchos no somos lo que
queremos sino lo que podemos.

La disyuntiva entre el camino de la vocación o el de la rentabilidad surge de

acuerdo con la solvencia económica de las familias y que tan pleno me voy sintiendo
cuando pasan los años, se basa en el interrogante ¿estudio lo que a mí me gusta o lo que
realmente está siendo apetecido por las empresas?, claro está que hay que aprender a ser
agradecidos, si en muchos casos no logramos estar en un trabajo que nos llene
espiritualmente, pero representa estabilidad económica, se pueden usar algunos recursos
monetarios para ahorrar e invertir un una carrera o un hobbie que nos llene de satisfacción,
se puede convertir en un medio para llegar a aquello que nos haga más felices, cada
debilidad se puede trasformar en oportunidad.
 Somos seres humanos en mejora continua, no podemos quedarnos en una zona de
confort, si lo que estamos experimentando académica y laboralmente llena de orgullo a
Dios (o como le denomine su espiritualidad), a nosotros mismos, a nuestros seres queridos
y no afecta la integridad física ni mental de nadie, significa que es algo fructífero, ese
trabajo “bien habido” como expresan coloquialmente los abuelitos, debe ser motivo de
alegría, levantarse hacia el Alma Mater, ser parte de los estudiantes y estar escribiendo este
ensayo, hacer parte del capital humano de una empresa, nos va dignificando, en mi caso,
tuve que estudiar a distancia para poder trabajar y no deja de ser una experiencia que ha
construido mucho aprendizaje, me llena de motivación lo que he logrado y estoy por lograr
en la vida, he aprovechado cada oportunidad a pesar de los limites.

Conclusiones
Son pocos los seres humanos que logran hacer lo que aman y aman lo que hacen, la
brecha económica siempre será un paradigma que cohíbe la posibilidad de desarrollar la
vocación y los sueños en países subdesarrollados por la urgencia de satisfacer necesidades
básicas (alimento, techo, vestido)

Es un privilegio y toda una fortuna llegar a desempeñar el trabajo para el que

incluso teníamos vocación cuando éramos niños y que nos paguen muy bien por ello, es
frecuentemente una utopía en un país tercermundista como el que habitamos.

La piedra: El distraído tropezó con ella, el violento la usó como proyectil, el

emprendedor construyó con ella, el campesino cansado la utilizó como asiento, para unos
niños fue un juguete, David mató a Goliat y Miguel Ángel le sacó una bella escultura, en
todos los casos, la diferencia no estuvo en la piedra, sino en la persona. No existe piedra en
nuestro camino que no podamos aprovechar para nuestro crecimiento, cada experiencia nos
enriquece y nos va ilustrando sobre nuestra vocación.
 Bibliografía
Educar Chile. (2013, Noviembre 29). Serie Orientación Vocacional: Descubre tu vocación.
Consultado el 10 de marzo de 2023, en: https://www.youtube.com/watch?
v=YLvwxQxYXSw

Gómez, J. (s.f.) El Aprendizaje Experiencial. Recuperado el 2023, 03, 10, en:

https://www.ecominga.uqam.ca/PDF/BIBLIOGRAPHIE/GUIDE_LECTURE_5/1/3
.Gomez_Pawelek.pdf

Video: Kolb y estilos de aprendizaje, Pérez, C. (2023, 03, 10). Kolb y Estilos de
Aprendizaje. Recuperado el 9 de julio de 2018, en:
https://www.youtube.com/watch?v=6ju-tq4KJT8

Virgilia, G. (s.f.) Orientación vocacional. Recuperado el 2023, 03, 10, en:

http://www.crlnuevavida.es/crl/images/articulos_pdf/Orientacion_vocacional.pdf
PROGRAMA SEGUIRDAD Y SALUD EN EL
TRABAJO
Tel: (60) 6 735 9300 Ext 373
Carrera 15 Calle 12 Norte
Armenia, Quindío – Colombia