UNIVERSIDAD METROPOLITANA DE EDUCACION CIENCIAS Y TECNOLOGIA

LICENCIATURA EN DERECHO Y CIENCIAS POLITICAS

DERECHO COMERCIAL

PRINCIPIO DE AUTONIMIA DE LA VOLUNTAD DE LAS PARTES Y SUS

LIMITES

PROFESOR: MARIANO NUÑEZ

INTEGRANTES: ELSY ATENCIO

MAYRA DE FRIAS
MARIA DE LOS ANGELES RAMIREZ
MELQUIADES CORTEZ

LA CHORRERA 25 DE MARZO DE 2023

La autonomía de la voluntad de las partes

Para comenzar vamos a definir las tres palabras claves del término, para
poder entender de manera clara su significado:

Podemos decir por voluntad, es un acto de querer, un acto guiado por las
intenciones o conocimiento propios de la persona. provenientes del latín
(voluntas-atis) que es querer.

Entonces entendiendo esto podemos mencionar así que autonomía es la

que permite que esa voluntad sea puesta en función de manera libre e
independiente de factores externos a esta.

Siendo así entonces la autonomía de la voluntad de las partes, el poder

otorgado por la ley que las partes que disponen de un contrato puedan
disponer por sí mismos, sin intervención de ningún tipo, el contenido, la
forma y las obligaciones que se impongan dentro del mismo.

A sabiendas ya que la autonomía de la voluntad de las partes no es

meramente estipulada en las normas panameñas, mencionaremos un
articulo mediante el cual se le otorga el poder de libertad contractual a las
partes, siempre y cuando acepten ambas sus términos.

Artículo 1106. Los contratantes pueden establecer

Los pactos, clausulas y condiciones

Que tengan por conveniente, siempre que no sea

Contrario a la ley, a la moral ni al orden público.

Este articulo no habla expresamente sobre este principio de Autonomía de
la voluntad de las partes, pero si deja a disposición de interpretación dicho
principio.

Entonces luego de lo dicho podemos decir que aceptados los términos

puestos por la propia autonomía de las partes y aceptados bajo la voluntad
intrínseca de cada uno, el artículo 976 del código civil nos dice:

Las obligaciones que nacen de los contratos

tienen fuerza de ley entre las partes contratantes,

y deben cumplirse al tenor de estos.

Dejando claro que la autonomía de la voluntad de las artes entra en

cualquier sea la rama del derecho donde sea utilizado, planteado así que
luego de aceptado tiene fuerza de ley.

La corte suprema de justicia de la nación considera la voluntad de las

partes, como un principio con el que opera todo el derecho, como una forma
de garantizar el libre desarrollo de los seres humanos.

Sin embargo. Coma no puede llegar a afirmarse que un contrato es válido

simplemente porque concurra la voluntad de las partes. Hola, para que la
voluntad causa efecto entre los contratantes es preciso que la misma se
encuentre también reconocido en el ordenamiento jurídico. Hola, por lo
tanto, coma deberá tenerse en cuenta. Qué prohibiciones impiden que la
voluntad de las partes despliegue plenos efectos. Hoy y Que con qué
carácter general coma no podrá pactarse aquello que sea contrario a la ley,
la moral y el orden público.

Sin embargo, es relevante mencionar que existen enmarcados en nuestro

código civil nulidades que pueden restringir los contratos y estas son;
 Artículo 1141: hay nulidad absoluta en los Hoy, actos o contratos:

1-Hola, cuando falta alguna de las condiciones esenciales para su

formación o existencia.

2-Hoy, cuando falta algún requisito o formalidad que la ley exige para el
valor de ciertos actos o contratos, coma en consideración a la naturaleza
del acto o contrato. Y no a la calidad o estado de la persona que en ello
interviene.

3-Hoy, cuando se ejecuten o celebren por persona absolutamente

incapaces, entendiéndose únicamente por tales los dementes, los
sordomudos que no pueden darse a entender por escrito y los menores
impúberes.

Este artículo, en especial en su numeral 2, nos ratifica Que pese A la

voluntad Que exista entre las partes Y el tenor que puede existir de entre
sus cláusulas. Tiene que estar apegado. A lo establecido en la ley y a la
naturaleza o al acto del contrato mismo, ratificado esto también por la Corte
Suprema de Justicia, como lo hemos mencionado anteriormente.

En conclusión, y para no caer en redundancias, podemos decir que el límite

de la autonomía de la voluntad de las partes, aunque no sea declarado
expresamente en nuestro código civil, no es más que todo que sea contrario
a la moral y al orden público o que cause así daño a algunas de las partes
pudiendo caer El contrato previamente firmado y aceptado En nulidad
como lo explica el artículo 1141 del Código Civil.