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Propietarios y arrenderos en
su lucha por el territorio y la
identidad. Santa Catalina .
Cristina Serapio.
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Propietarios y arrenderos en su lucha por el territorio y la identidad. Santa
Catalina – Jujuy.
Autor: Cristina Serapio
Palabras claves: grupos domésticos – comunidad aborigen – territorio - puna
Institución: Instituto Interdisciplinario Tilcara (UBA)
cristina_ser@hotmail.com
Resumen
1
El pueblo se encuentra situado a 3.750 msnm, en la Puna jujeña que es la continuación del altiplano boliviano. Es una meseta alta,
árida, seccionada verticalmente por montañas bajas; está cubierta por espacios dispersos de pastura natural de arbustos pequeños
(Rutledge, I. Cambio Agrario e Integración (1987), pp 65). Las lluvias estivales oscilan los 300 mm anuales, por ello se explica la
aridez del territorio.
2
La cantidad de habitantes del Municipio es de 1.350 y la población del Departamento es de 2.500 habitantes (Censo 2001).
3
Grupos sociales que se caracterizan por situarse en un determinado espacio-temporal, en similares posiciones y que comparten
determinados intereses. Pierre Bourdieu.
4
Se reconocen ambos grupos sociales como categorías analíticas que nos permiten comprender mas adecuadamente sus diferencias
y relaciones y por otra parte delinear las oposiciones al interior de cada uno, reflexionando sobre su heterogeneidad y sus posibles
transformaciones en la dinámica de la vida social.
directo y personal en el espacio local. Ante esta amenaza, los propietarios reaccionan
apropiándose de la estrategia de los rivales: la conformación de la Comunidad Aborigen
de “propietarios”.
Tierras
En este espacio, comprendido como un campo de conflictos y competencias, la disputa
por la propiedad de las tierras se remonta a tiempos coloniales.
Según el historiador G. Paz (1991) en la época colonial la puna fue apropiada a través
de mercedes reales y fraccionadas en grandes fincas, que se vinculaban al mercado
potosino y a la minería de Lípez en cuanto proveedora de animales de carga. Esta
articulación se debilita durante la guerra de la independencia y los propietarios se
concentran en el cobro de una renta (arriendo) a los grupos domésticos, como su
principal fuente de ingresos. (Madrazo, G. 1982)
Estas familias arrendatarias deben producir un excedente para pagar dicha renta. Según
Madrazo, eran antiguos encomendados trasladados desde sus campos a estas haciendas
y otros habían mantenido su posesión, pero ahora se veían presionados por el pago de la
renta y a trabajar determinados días (15) para el propietario. Tanto Madrazo como G.
Paz suponen que estos arrenderos pertenecen a la sociedad indígena y que conservan su
integridad y cohesión aunque en forma más desleída en Santa Catalina5.
G. Paz nos ofrece un cuadro sobre el estado de las propiedades rurales y propietarios en
el departamento de Santa Catalina en 1855 (1991, pp 68):
A esta información se puede agregar la proporcionada por E. Cardozo (2000) para 1876.
“En el departamento de Santa Catalina: 1.- Fernández Campero era dueño de la finca de Yoscaba, que
abarcaba una gran extensión: los distritos de Yoscaba, Río Grande, Puesto Chico, Hornillos, Rodeo
Chico, Cóndor, Canchuelas, Oratorio, Timón Cruz, Tolar, San Juan de oros y Altarcito. 2.- El prebístero
Ignacio Marquiegui, de la Finca de Cieneguillas, Tafna, Toquero y Cerrillos, que enmarcaban además
los distritos de pasajes, Yangaso y Corral Blanco. 3.- pedro Pablo Aramayo era dueño de la Finca de
Santa Catalina de gran extensión tomando los distritos de Calahoyo, Puesto Grande, Carayoc, Santa
5
Madrazo, G. (1982), pp 143
Catalina, Piscuno, San Francisco y La Cruz. 4.- Calixto Esquivel era propietario de la Finca de Merco,
San León y San Juan, que encerraba además a los parajes de Cabreras, La Ciénega y el Angosto”.
Cardozo, E. (2000), pp 55.
“Dueño del comercio local, de los cargos políticos y en algunas casos de la tierra, la pequeña elite de
comerciantes y terratenientes funcionarios era el sector mas favorecido”.
G. Paz. (1991), pp 71.
Gustavo Paz afirma que frente a estas prácticas de opresión los arrenderos también
generaron estrategias (de adaptación o resistencia siguiendo a S. Stern), como quejas y
reclamos ante los gobiernos provinciales, negativa a pagar el arriendo, moras e inclusive
motines, prácticas que quedaron documentadas.
Aproximadamente a fines de 1872 los arrenderos de Cochinoca elevan un pedido formal
al gobierno provincial en el cual reclaman que la propiedad de las fincas de Cochinoca y
Casabindo pertenece al estado y no al propietario privado (Fernando Campero), porque
la encomienda (argumento del propietario) implicaba un control sobre la mano de obra,
pero no sobre los títulos de propiedad.
En los primeros juicios legales, los arrenderos no reclaman la propiedad de la tierra para
ellos, sino que cuestionan a los terratenientes sobre la veracidad/legitimidad de sus
títulos y sus pedidos apuntan al reconocimiento de las tierras como fiscales. Aunque en
1873 los arrenderos de Granadas y San Juan y Yoscaba reclaman las tierras como
propias, pero no es tomada en consideración (G. Paz. Op cit. pp. 81). En ese mismo año
se levantan los indígenas de Yavi, encabezados por Anastacio Inca y reclaman esas
tierras como fiscales. La medida de protesta que plantean por lo general es el no pago de
arriendo.
Frente a éstos reclamos, el gobernador de Jujuy (Sánchez de Bustamante) en vista de
réditos políticos y la tensión social (Berdeja, 1997), decide considerarlos pertinentes y
decreta el traspaso de las fincas de Cochinoca y Casabindo como tierras del estado
provincial, decisión que perturba a los terratenientes y elites locales, desatando una
confrontación mayor.
El contexto nacional tenía una connotación política muy fuerte. Era un año electoral y
oponía como rivales políticos a Avellaneda y Mitre, contraposición que fraccionó a la
elite jujeña y local. La disputa a nivel nacional repercute en la provincia. El gobernador
provincial (Sánchez de Bustamante) aliado de Mitre es “volteado” por las Tropas
Nacionales y depuesto como autoridad. Asume Álvarez Prado quien tiene un intenso
compromiso con los propietarios locales, y como primera medida decreta la restitución
de los territorios de Cochinoca y Casabindo a su antiguo dueño (Fernando Campero).
Estos sucesos incentivan y agudizan un enfrentamiento armado entre los arrenderos
puneños y el nuevo gobierno provincial, lo que va a desembocar en la batalla de Quera.
Se organiza el movimiento de arrenderos indígenas -encabezado por A. Inca- y se suma
Laureano Saravia, un comerciante importante de Santa Catalina, proveniente de la “elite
local”, que ocupó distintos cargos estatales (comisario de policía, juez de paz, etc), que
es conectado por Sánchez de Bustamante. La presencia de Saravia crea un escenario
paradójico por su posición en el campo social y económico, inclusive éste había sido
denunciado por los mismos arrenderos (de Santa Catalina) por el aumento de los
impuestos y de la violenta forma en que exigía a las familias el pago de los mismos6.
Es en este punto de inflexión donde los investigadores se interrogan y debaten acerca de
la existencia de conexión del movimiento puneño (indígena) y el conflicto nacional,
incitado por Sánchez de Bustamante y localmente por L. Saravia.
Independientemente de la conexión que pudo existir, coincido con G. Paz en que no
consideramos que haya habido una desviación (Bernal, I) o un cambio de los objetivos
del movimiento de los arrenderos por la participación de L. Saravia, si no que aprovecha
el espacio de conflicto para introducir otros reclamos o enfrentamientos, y a la vez los
indígenas refuerzan los el apoyo del ex gobernador y de algunos miembros de la elite,
para fortificar la legitimidad del reclamo de tierras.
“Inca y Saravia combatieron juntos, pero con motivaciones diferentes. Con Inca el movimiento era
espontáneo, de profunda raíz nativa (…) Con Saravia se incorporaba el paternalismo articulador de la
política criolla, con expectativas sobre la tierra en las que los indígenas no tenían cabida”
G. Madrazo (1981), pp 173
“Después de la batalla, los indígenas cambian la táctica y pelean con las armas de la inteligencia y el
saber” Cardozo, 2000, pp 57.
6
Son varios los interrogantes que se plantean en torno a su presencia. Para E. Cardozo no es una presencia
conflictiva, sino justamente es reconocido como el líder y héroe de la batalla de Quera, representación que se
extiende a las elites locales. G. Paz sugiere, según los documentos analizados, que al parecer Saravia estaba siendo
buscado por las nuevas autoridades de la municipalidad, porque no había rendido un dinero de su ejercicio anterior y
también mantenía una lucha interna por el control del comercio local, factores que impulsaron a que aproveche la
conmoción y se sume a la lucha de los arrenderos, con el apoyo del ex gobernador.
después de Fermín Grande, Finca Santa Catalina de Pedro Aramayo (de Bolivia) y la
cuarta mas pequeña Finca Merco-San León y San Juan de Calixto Esquivel.
Una de las primeras haciendas que se logra negociar es Yoscaba, quien es adquirida por
varios arrenderos en 1886 y deslindada en parcelas privadas en 1903 (G. Paz, 1992, Pp
227). Según los documentos históricos, los arrenderos se organizaron en Yoscaba bajo
la representación de P. Maidana (ex comandante de la Batalla de Quera). Se organizan,
gestionan los permisos y trámites legales para la compra, recolectan el dinero y piden un
préstamo al Banco Nación para alcanzar el monto total. Los arrenderos que compran la
finca son: Pedro Cari, Agustín Gutiérrez, León Maidana, Cipriano Bruno, José
Maidana, Estanislao Bautista, Dámaso Huanco, Asencio Esteban, Prudencio Alberto,
León Alberto, Domingo Polo, José Bautista, Melchor Flores, Pascual Cardozo, Juana
Bautista, Tomás Chorolque, María Choque, Carmen Chorolque, Martín Alberto,
Pascual Alberto, Mariano Polo, Tomás Bautista, Basilia Maidana, Jorge Maidana, Juan
Calizaya, Eusebio Maidana, Tomás Adrián, Juana Maidana, Pedro Maidana, Idelfonso
Jerónimo, Polonia Jerónimo, Antonia Rojas, Mauricio Julián, Bautista Alberto, Isidro
Calisaya, Pedro Cruz, Lorenzo Calisaya, Francisca Calisaya, María Alberto, Rafael
Julián, Pablo Mamaní, José Calixto Calisaya, Buenaventura Calisaya, Rumualda
Gutiérrez, Mariano Julián y Cristónomo Peñaloza (Cardozo, pp 104).
Los datos aportados por G. Paz (1992):
Si bien Cardozo despliega una lista con mayor cantidad de nombres, podemos observar
que los apellidos son los mismos y la cantidad de familias también.
A partir de estos datos, nos parece necesario señalar la cantidad de tierras que compra
cada familia. Si consideramos el grupo Maidana, observamos que compra
aproximadamente unas 40.000 hectáreas, después la familia Peñaloza compra unas
6.500 hectáreas, Julián unas 3.800 hectáreas y las familias restantes menos de 2.501
hectáreas, inclusive la familia Huanco, Bautista, Calisaya y Navarro menos de 700
hectáreas, diferencia que nos parece significativa y que analizaremos posteriormente.
En 1903 el agrimensor deja establecido legalmente las divisiones en fracciones de cada
familia.
La Finca de Cieneguillas se vende en 1887 a un solo dueño y va pasando de mano en
mano hasta que en 1904 es adquirida mediante la compra comunal por los arrenderos
(Solís, Maidana, Mamaní, Ramos, Cayo). La venta de la finca de Santa Catalina es
diferente, los herederos de la misma venden cada uno su parcela de manera individual
(sin la intervención del estado) a I. Wayar, quien acapara la finca para después revender
los lotes a las familias arrenderos (Navarro, Calisaya, Farfán, Rueda, Puca, Cruz,
Choque, Bautista, Pacci) casi a 60 familias (Cardozo, 2000). Así también lo confirma
los propietarios entrevistados:
“si, quien adquirió en la familia es él (Fructuoso Farfán). El terrateniente que vivía en Bolivia, don
Aramayo, don Aramayo compra toda la finca , las fincas de Santa Catalina, después la va fraccionando y
vendiendo tierras”Entrevista Propietario 1, 2007
Y la Finca de Merco y San León también es vendida a las familias arrenderas (Farfán,
Cardozo, Navarro, Rueda) (Cardozo, 2000, pp 114).
Este proceso de compra de tierras privadas por parte de los arrenderos del departamento
de Santa Catalina constituye un caso muy particular en el territorio de la Puna. En otras
localidades, a pesar de la intervención del estado, las tierras privadas son vendidas a
foráneos que especulan con el mercado de la tierra, o a los mismos ex terratenientes, lo
que reprodujo la situación de opresión en la exigencia de arriendos.
Sin embargo las familias que logran comprar las tierras, son aquellas que manejan cierto
capital económico7. A medida que transcurre el tiempo algunas familias logran mejorar
su posición en el campo económico y social por su participación y acceso a los cargos
políticos y concentración del poder local y su integración a través de redes de alianza y
parentesco con las familias comerciantes de la elite. Algunas compran y anexan parcelas
de aquellas familias que no pudieron afrontar las deudas (por la compra) o que por otras
circunstancias económicas se vieron imposibilitadas de mantener sus parcelas. Se
reacomodan las posiciones en el campo de fuerzas, hay una re-acaparamiento de tierras
que arroja nuevos y viejos grupos domésticos al arrendamiento. El arriendo sigue siendo
en la actualidad el ingreso principal de algunas familias propietarias.
Esta lucha histórica por la apropiación de las tierras, no solo se plantea en el campo
económico, en la apropiación y distribución de los recursos naturales (tierras, agua,
minerales) sino que juega y atraviesa el campo simbólico, plasmado en la violencia
simbólica del discurso, del acto lingüístico, de la construcción de la historia oficial, la
apropiación de la “verdadera identidad”, de la “legitimidad”.
Del análisis de las entrevistas realizadas se revela que ambos grupos reconocen y
remarcan estas diferencias, sostienen estas percepciones, según los hablantes, como la
“gente de arriba” y “gente de abajo”, “pueblo nuevo-pueblo viejo”.
Un análisis del uso del espacio nos permite comprender (aportar) al estudio. La
topografía del pueblo es despareja, tiene unos relieves muy pronunciados y se pueden
diferenciar dos secciones, una parte baja (pueblo viejo) y la otra como una meseta alta
(pueblo nuevo). El pueblo tiene aproximadamente 150 casas, las primeras se
construyeron alrededor de la Iglesia 8 y la plaza en la parte baja. Posteriormente se
edifican en este espacio el municipio, el registro civil, la biblioteca, el correo y se van
levantando las casas de los “propietarios” de fincas y haciendas.
Según el discurso de los propietarios, las familias asentadas en Pueblo Nuevo vinieron
hace poco tiempo desde los otros distritos y desde Bolivia. Según datos de las
7
C
8
Según Fortunato Farfán la iglesia fue construida en 1650. En la parroquia de La Quiaca se guardan los
primeros Libros de Bautismo y Casamiento de Santa Catalina del año 1780.
entrevistas realizadas en campo, estas familias se comienzan a instalar desde hace 30
años aproximadamente. Esos terrenos eran (son) privados y su propietario (Farfán) las
dona a la municipalidad, pero nunca ejecuta el traspaso legal.
En la parte de arriba del pueblo se concentran las casas de los grupos domésticos que
viven diariamente en el pueblo, se construyen las canchas, el galpón para los deportes o
los bailes, el cementerio.
Las familias aquí asentadas arriendan parcelas a los propietarios, en las cuales crían
ovejas y llamas y a veces cultivan en una pequeña chacra (papa, habas, trigo), hilan la
lana y tejen prendas. Muchas familias accedieron a un Plan Trabajar y desarrollan tareas
como limpieza y cocina en dependencias de la municipalidad, la escuela, el albergue, y
una cantidad menor de habitantes son empleados municipales. Según datos del Censo
2001, sobre la población ocupada (mayores de 14 años) del Municipio (234 habitantes)
el 67,5% es obrera o empleada del sector público. Esta población puede ser empleada
municipal o adjudicataria de un plan social. Según información proporcionada por
representantes de la Comisión municipal en la localidad hay aproximadamente 15
empleados municipales (4,5% de la población TOTAL) que trabajan en el albergue
municipal, la municipalidad, la telefónica, la biblioteca; y entre 25 y 30 planes de
trabajo (8% de la población TOTAL) con Plan jefe y jefa de hogar y Plan Familia9.
Sin embargo la mayoría de las familias que tienen un Plan de trabajo siguen trabajando
en sus tierras arrendadas.
En el municipio sólo el 2% es patrón (sobre la población ocupada) y el 23% es
trabajador por cuenta propia o trabajador familiar (censo 2001).
La mayoría de las familias argumentan que su traslado se debe principalmente a la idea
de mejorar la calidad de vida de su grupo, a través del acceso a servicios (luz, agua,
educación). Pero a la vez señalan la paradoja de la “modernidad”, ya que en este espacio
es necesario poseer capitales económicos, tener plata-efectivo para pagar los impuestos,
comprar mercadería, pagar transporte, mientras que en el campo “mal que mal uno tiene
su carnecita, su papita, su queso, su leña, sus llamas”. Al asentarse en el pueblo deben
jugar con otros capitales y dispositivos, y comenzar a posicionarse con muy escaso
capital y gran capacidad estratégica.
Reconocen fuertemente a las “familias propietarias” como aquellas que se apropiaron
(compraron) desde hace años las tierras y fueron anexando otras parcelas. Son
conscientes de los pagos de arriendo que vienen realizando a través de generaciones,
pero no sólo reconocen su posición dominada en el campo económico, sino que también
en lo simbólico “los de Abajo que se creen dueños de todo”.
Arrenderos - puesteros
La mayoría trabajaba como puestero o cuidador de las fincas privadas en el campo, en
tierras de las familias “propietarias” del pueblo. El resto eran arrenderos, arrendaba
parte de estas tierras.
Se conforman al menos dos formas distintas de uso de la tierra, según las relaciones que
se establecen con el propietario: Los cuidadores y los arrenderos.
Cuando se entabla una relación de “cuidadores-propietarios”, se negocia o más bien se
imponen por parte del propietario, los pagos, las condiciones de trabajo, etc. El grupo
domestico se asienta en la finca-hacienda y por lo general su actividad principal es
cuidar el ganado menor de los propietarios, a cambio de una retribución salarial y/o
9
Se están implementado los planes para las amas de casa, pero no nos proporcionaron mayor
información.
permiso para el uso de las tierras para que también pasten animales (de propiedad de los
cuidadores) y puedan mantener una pequeña chacra.
Aquellas familias que arrendaban las tierras se encontraban inmersas en una relación un
poco más “independiente” en cuanto a la cría de ganado, ya que pagan un arriendo a los
propietarios por el uso de determinadas parcelas. Al igual que con los cuidadores, los
propietarios imponen un monto a pagar por el uso, puede ser el pago en efectivo (la
mayoría de las veces) o con animales.
Estas distintas situaciones se acomodan según los capitales a jugar por los grupos
domésticos. Cuando tienen a disposición capital económico que pueda amortiguar el
alquiler (arriendo) y el capital social suficiente para conocer y negociar con el
propietario (o su encargado), quizás alguna conexión con otra familia asentada en esa
finca que interceda por ellos, aunque este uso de capital social es mas fuerte en aquellas
relaciones en que se asientan como cuidadores, y necesitan una “recomendación”.
10
Feria Comunal de la Fiesta Patronal de Santa Catalina, 25 de noviembre (2007)
precio de la lana en los últimos años ha caído. Antes en la feria 5 kilos de lana equivalía
a una bolsa de harina de 50 kg, ahora la equivalencia es una bolsa de harina por casi 20
kilos de lana.
La lana es muy preciada para confeccionar tejidos para la venta y para el hogar.
Frazadas, pulloveres, chalecos, medias, sacos, ponchos, gorros, etc. Aunque según los
comentarios de las tejedoras del pueblo (2008), no tienen un mercado o a quien vender
sus productos. artesanales.
En las actas de matrimonio y Bautismo de los años 1889/1891, de 31 matrimonios 28
personas se identifican como teleros o hilanderas en cuanto a su ocupación, la mayoría
residía en el campo: en Cerrito, Timón Cruz, Hornillos, Puesto, Canchuelas, Yoscaba,
San Francisco, la Cruz, Tafna, La ciénega, Peña Blanca, Minas Azules, en Bolivia
Toquero, Esmoraca. Según el censo de 1895 la población total era de 2.454, de las
cuales sólo 179 vivían en el pueblo (0,7%), el resto en la zona “rural”.
De los padres de los matrimonios, también al menos hay 31 que declaran ser teleros o
hilanderos. Son cifras significativas (no para sacar porcentajes) sino que nos brindan un
panorama de la presencia e importancia de esta actividad en aquellos años.
En el año 1900, de 20 matrimonios, 16 personas son teleras o hilanderas, lo que sigue
reflejando la alta importancia de la actividad.
Pero para 1950 -si bien no todos los matrimonios registran su ocupación en estas actas
como lo hicieron anteriormente- ya no figura ningún hilandero o tejedor, y en las actas
de 1960 sólo se registran tres tejedoras/hilanderas..
Los conocimientos sobre esta ocupación eran transmitidos oralmente. Don E.L. siente
como esas prácticas se fueron perdiendo y en la actualidad no son revalorizadas ni
cultural ni económicamente.
En San Juan y Oros a través del Proyecto “Tejido Artesanal” con la municipalidad
(2006), se comenzaron a dictar cursos de Tejido en telar y a dos agujas. El objetivo es
recuperar una práctica económica social ancestral , revalorizar el sentido del tejido, del
hilado, aprovechar el acceso a la lana de los propios animales.
CHACRA
Estas prácticas son complementadas con otras también en el campo, con el interés de
tejer una red estratégica ante la vida cotidiana.
Muchas familias tienen su chacra para autoconsumo, una parcela pequeña donde cultiva
habas, papas, zanahoria, muy poco maíz, trigo, etc. Es una chacra pequeña que lleva
bastante trabajo, porque hay que cuidarla diariamente de los animales y de las
inclemencias del tiempo. Estas chacras se presentan más regularmente en las localidades
de La Ciénaga y El Angosto, cerca de las derivaciones del río san Juan y oros y San
Francisco.
Al igual que los demás productos obtenidos, algunas verduras o el maíz y trigo son
intercambiadas en las ferias y encuentros.
Practicas migratorias
Según las entrevistas hasta principios de l año 80, muchos hombres migraban
estacionalmente para trabajar en la zafra. La mayoría se dirigía para Ingenio Ledesma,
mediados por un contratista
Lavadores de oro
El lavado de oro es una práctica ancestral que la realizan los grupos domésticos de
manera artesanal e intima. En grupo de tres o cuatro hombres se aproximan a la orilla
del río a buscar oro aluvional.
Según las distintas entrevistas recogidas en campo, las exploraciones auríferas se
realizan desde tiempos pre-coloniales. Los conocimientos prácticos vienen desde
generaciones pasadas.
Durante el trabajo de campo (2006), pudimos encontrarnos y entrevistarnos con los
“lavadores de oro”, rompiendo con mitos y deshilvanando fantasmas.
En la actualidad todavía se sigue realizando esta actividad, con los mismos
instrumentos y conocimientos locales. Estos trabajadores buscan de manera precaria y
rústica oro aluvional a la orilla del río (San Felipe) con una batea y un balde.
Esta practica se extiende a las localidades de Oratorio, San Juan y Oros, Misa Rumi,
Timón Cruz y una parte de Santa Catalina; en los ríos Río Grande de San Juan de Oros
y sus afluentes como San Felipe, arroyos que unidos al San Juan de Oros, sigue su
recorrido hacia el norte hasta encontrarse con el Río Pilcomayo, río que atraviesa la
mitad de la Argentina y va a servir al río de La Plata (Cuenca Alta del Río Pilcomayo).
Los rios Orosmayo, Granadas, Queñoal y sus afluentes forman un curso de importancia,
el río San Juan Mayo, denominado Camblaya en Bolivia y que es afluente del
Pilcomayo (Sgrosso, pp 94).
Este trabajo pertenece al grupo doméstico, a la esfera personal y privada. Se arman
equipos de tres o cuatro hombres – la mayoría de las veces parientes- locales, residentes
del lugar, hombres de distintas edades (menos los extremos). El trabajo es realizado por
todos juntos, no hay especialización de tareas y todo lo obtenido es vendido y repartido
en partes iguales (en términos generales).
Los agentes sociales se acercan a los arroyos, en lugares históricamente trabajados por
sus padres y abuelos, y jugando su sentido práctico determinan el lugar donde van a
trabajar ese año.
La difíciles condiciones de trabajo y del medio - recorrer casi 3 kilómetros a pie para
llegar al aluvión, con ropa inadecuada, con botas comunes metidos en el agua casi 10
horas, sin casco, ni chaquetas, sumado al bajo (y a veces nulo) volumen de mineral
obtenido, son factores que hacen a esta actividad poco redituable y de poca proyección.
A partir del año 2000 se van conformando las comunidades aborígenes: Comunidad
aborigen Santa Catalina Aucapiña-Chambi11, Comunidad Aborigen La Ciénega,
Comunidad Aborigen Cabrerías, Comunidad Aborigen El Angosto, Comunidad
Aborigen de Oratorio, Comunidad Aborigen San Juan y Oros, todas del departamento
de Santa Catalina. Estas comunidades están formadas por las familias que viven en el
campo, la mayoría arrenderas desde la antigüedad.
A pesar de la apertura de las políticas estatales para contemplar las situaciones o los
pedidos administrativos-burocráticos de los sectores mas marginados, para la
presentación de su pedido de reconocimiento se manifiesta la alta complejidad y los
niveles de exigencia de los papeles, lo que exige un uso de capitales específicos que
muy pocos integrantes poseen lo que dificultad la competencia en este campo
burocrático y se hace imprescindible la ayuda del INAI y otros organismos.
11
Esta comunidad aborigen de la localidad Santa Catalina reivindica la imagen de los dos guerreros
indígenas que participaron activamente de la Batalla de Quera y que fueron asesinados en la plaza
principal como muestra de escarmiento y terror para los insurrectos, y que la historia oficial invisibilizó,
imponiendo la imagen de los agentes del sector de propietarios como los héroes de la batalla.
Además de estas problemáticas administrativas-burocráticas, en este proceso se
despliegan otros conflictos al interior del grupo. Son muy remarcados los problemas y
dificultades de organizarse, de convocar a los vecinos y que participen:
E: Por eso yo, los que estamos viendo ahora, hay muchas cosas....de poder hacer se puede, el asunto es
que juntarse cuesta, cuesta juntarse, si cuesta cuesta..
Y: Sí? cuesta organizarse
E: pero si escucha cuando hay... pero si cuando hay algo, que hay en la reunión? Dicen, si hubiera un
banquete bajan todos perro y gato
Risas
E: yo digo así, yo les digo así, yo iría y directamente compraría una bolsa de huesos, y bajen ala reunión
de los aborígenes hay asado!!!! Y pondría ahí todos los huesos, y ahí bajarían todos, si así es (Risas) Es
así, así les digo yo en verdad les digo así, no así son, pero sabes que yo cuando se trata reunión de
aborigen o cuando se trata de reuniones, que están cansados, que están con sueños, que tengo
compromiso.
Representante Comisión Aborigen 2, 2008
Estas afirmaciones si bien pueden resultar un poco duras por parte de los enunciadores,
reflejan la problemática sobre la convocatoria y participación de los vecinos y su
heterogeneidad al interior, remarcando que no todos los agentes tienen la misma
convicción, los mismos intereses, la misma intensidad y las mismas expectativas. Así
también remarca la necesidad de capital económico para mantener y dinamizar el
movimiento.
Estos análisis y observaciones nos confirman que la organización aborigen, como todo
campo social, no es homogénea, sino que también se suscitan luchas y posiciones al
interior de la misma.
Comunidad - argumentos
El principal argumento para presentarse como Comunidad es su historia ancestral,
relatar sus actividades y practicas ancestrales. Se adjunta al expediente de solicitud de
reconocimiento la historia oral de sus abuelos mayores, que recuerdan “el antes”,
cuando no había provincias ni fronteras y las familias se ayudaban entre ellas, a través
de estrategias como la Minga:
E: minga, minga, minga. Claro, en ese tiempo no se ...no hacía falta plata, voy por ejemplo y ya te
ayudaban, ayudan a con la minga, con la turno-vuelta, como le dicen turno-vuelta se llama
Y: eso le contó su abuela?
E: si, si , si con mis abuelos, y con mi madre
Y: Era como una ayuda...?
E: Hoy trabajo para ... para mi vecino, la otra semana trabaja para mi, en la siembra, en la siembra, en la
ayuda que vos podías, entonces para mi era bueno, ahora ya no, ahora ya no ...
Representante Comunidad Aborigen 1, 2007
Se recurre a las historias sobre las prácticas que evidencian lazos de solidaridad y ayuda
mutua.
Estos capitales simbólicos basados en la historia oral, en los principios de solidaridad,
en los lazos de compañerismo y ayuda mutua, se transforma en un arma para reclamar
su legitimidad como comunidad.
El territorio implica el espacio social, cultural y económico que atañe a sus economías
de reproducción económica y social de tiempos inmemorables. Por ello afirman la
necesidad de recuperar sus tierras, no como una reivindicación de los pueblos indígenas
sino también para controlar la explotación de los recursos naturales y el accionar de las
empresas mineras, los recursos extraídos, su destino, el uso del río, etc.
“ Tierras privadas, mas que todo las tierras privadas, porque sabes que esta pasando, hay muchos que
están entrando porque hay tierras privadas que permite el dueño, si eso fuera de la comunidad no sería no,
no , no sería tanto, nos paramos ahí nomás en la ruta...” Representante Comunidad Aborigen 1, 2007
Planes de trabajo
Los representantes de la comisión aborigen señalan las graves consecuencias sufridas
por la implementación de los planes de trabajo e interpretan su política como un plan
instalado desde los centros de poder para anular las percepciones sobre la solidaridad y
el trabajo de las familias y como una política que tiende a despreciar las prácticas y
capacidades de los grupos domésticos (a pesar de que también se fomenta “rescatar y
mantener prácticas ancestrales como el hilado, pero desde una política
descontextualizada, individualista y paternalista). Apuntan fundamentalmente a
despojar de independencia y quedar subyugadas al diagrama de las políticas externas.12
Consideran que es una estrategia peligrosa de los sectores hegemónicos que penetra
sigilosamente en las percepciones de los arrenderos, quienes se centran en el reclamo de
aumento de planes de trabajo antes que en el reclamo por la tenencia de tierras.
“mucha mas fuerza y la gente se da cuenta, pero aquí no, no , no , esperando por los planes trabajar
nomás, esperando nomás me hacen dar rabia... tan pocas becas para aquí una bequita, una bequita para
mi,... una beca, por dios digo!
12
Los propietarios también están en descuerdo con la política de los planes sociales, pero bajo otra
mirada que condice sus posicionamientos. Los planes de trabajo fomentan la
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según sus intereses propios o del partido y de ninguna manera trabajan por las
necesidades de la población, menos por los sectores marginados.
el político jamás defiende y no va a defender nunca, si, te va a decir pero vota para mí, vota para mí, eso
es lo político que buscan votante. Representante Comunidad Aborigen 1, 2007
“pero ya cuando viene un político están parando la oreja hasta que se congelen las orejas siguen ahí de
pie, no les importa, a quien mas creemos? a los políticos o a los que trabajan por la tierra? Porque
quiere su tierra? No, a ellos le importa la política, te traigo un regalito, quizás que están por un vaso de
vino están toda la noche, no... yo veo eso, la gente no ha aprendido a madurar, no ha aprendido a
madurar desgraciadamente” Representante Comunidad Aborigen 1, 2007
Ante este escenario las familias propietarias planean elaborar una estrategia que
resguarde sus intereses ante estas nuevas amenazas.
Embargados en este juego, soslayan sus diferencias expresadas en las luchas simbólicas
a su interior y se unen para formar una “Comunidad aborigen de propietarios Hallpa
Noñakaki” que en quechua significa “Nuestra Tierra”, para frenar posibles
expropiaciones por parte de las familias arrenderas.
Esta estrategia es elaborada – a nivel generacional -por los bisnietos (y nietos) de los
primeros propietarios que pudieron acceder a títulos o acciones.
Su reclamo principal es ser reconocidos como Comunidad Aborigen de propietarios.
Esta es la característica controvertida: son propietarios, dueños legales de tierras, por lo
que su reclamo no es la lucha por la tenencia de la tierra, sino que mas bien es una
estrategia que pretende cubrirlos y protegerlos legalmente de posibles procesos de
expropiación de las tierras para repartirla a las comunidades demandantes.
13
Esta dependencia estatal es la encargada de analizar y aprobar los pedidos de conformación de
comunidades aborígenes.
refiere a la entrega por parte de organismos internacionales (UNESCO?) al gobierno
nacional –INAI- mas de 30 millones de pesos para solucionar (comprar) el conflicto de
los territorios de la comunidades, a través de la ley 25.160 de “emergencia territorial
para la comunidades aborígenes”, y que hasta ahora no hubo ninguna solución ni
informe de este convenio. Por otra parte se cuestiona que se financian -o se proyectan
futuras compras de tierras- comunidades “que ellos mismos formaron”, porque antes no
había comunidades.
Esta es la crítica mas fuerte hacia las comunidades aborígenes que “no son realmente
comunidades comunitarias”, porque según sus observaciones e historias contadas por
sus abuelos
Cada uno tiene sus ovejas y su lugar para pastar de manera individual, es más...
“y cuando una oveja se pasa al campo del otro, el otro tiene derecho a retener la oveja hasta que el
dueño vaya a pagar lo que la oveja ha comido de pasto! Pasado un tiempo si no la reclama, esa oveja
pasa a ser dueño... pasa a ser propiedad de donde se la encontró, cualquier animal, ya sea llama, oveja,
burro, lo que sea, entonces desde esa época se esta viendo de que no hay comunidad”
Entrevista Propietario 2, 2007
Se pone en duda los lazos de comunidad y solidaridad, afirmando que los aborígenes y
sus antepasados no tuvieron la práctica de compartir14.
Pero esta misma crítica cae sobre ellos evidenciada en las contradicciones al interior del
discurso, porque cuestionan el sentido y la aceptabilidad del concepto de comunidad de
las comunidades “porque si es comunidad es comunidad en todo no en algunas cosas”,
se debería compartir todo (animales, pastos, herramientas, trabajo, etc), sin embargo
ellos juegan la misma moneda: ser reconocidos como comunidad propietaria, cuando su
característica principal es la tenencia de tierras privadas.
Por otra parte expresan que encima de todo, las comunidades aborígenes quieren ser
reconocidas como comunidad para acceder a las tierras, pero después “van a querer ser
propietarios individuales”
Porque ellos quieren tierras comunitarias, pensando que a lo mejor algún día puedan acceder a las
tierras privadas
porque yo te aseguro que el día que le den las tierras comunitarias yo te aseguro que mas de uno va a
querer decir “ esto es mío”, y adonde van a ir a para esas tierras?
Entrevista Propietario 1, 2007
E incluso se van a generar conflictos entre ellos en función de quien se queda con esas
tierras, porque en el fondo son individualistas.
Por otra parte afirman que las comunidades aborígenes son “formaciones políticas”
construidas por extraños-foráneos, con el fin primero de beneficiar a éstos agentes
estatales (Inai y funcionarios), en segundo lugar para generar conflictos y
enfrentamientos entre sectores “que antes eran armónicas”, y por ultimo perjudicar a
los propietarios.
14
A pesar de que en otros contextos discursivos cuando relatan temas mas “despolitizados” o la historia
“pintoresca” de Santa Catalina, por ejemplo en sus relatos sobre la siembra y la Señalada surgen
referencias hacia la MINGA, como el trabajo solidario (ayuda mutua), el trabajo de señalar a los
animales, como un trabajo de vecinos solidarios, ante el ofrecimiento generoso de comida y bebida. No
interiorizan estas prácticas en su esencia y como parte de su historia, sino más bien como relatos pasados
y de dimensiones místicos.
legitimación y reconocimiento y a la vez mantener sus posiciones objetivas (en el
campo económico), conservar las formas de distribución de los capitales materiales, y
para afianzar aún mas esta situación, pujan por reforzar su posición en la dimensión
simbólico y posicionarse jerárquicamente.
Nosotros “tenemos raíces mas profundas” o mejor dicho son los verdaderos dueños
legítimos de la historia y de las tierras, son las “verdaderas raíces” en contraposición a
las familias arrenderas recién asentadas del pueblo, porque en realidad vienen de
Bolivia.
claro ahora todas la gente que esta viviendo en Santa Catalina se han venido de los alrededores, de los
distritos, todos se han ido casi la mayoría, el único que queda de acá de santa catalina, de los
tradicionales, somos nosotros,
Entrevista Propietario 1, 2007
Según sus discursos la historia de sus antepasados es muy rica y esta muy bien
“documentada”, fueron los primeros en asentarse en estas tierras, en trabajarla
duramente, en impulsar el progreso, en hacer crecer a Santa Catalina, dedicaron su vida
y su esfuerzo a estas tierras. Sus antepasados fueron los fundadores de escuelas,
tuvieron cargos políticos y administrativos, lucharon en la batalla de Quera, escribieron
la historia del pueblo. Su capital simbólico intenta un mayor peso frente al de las
familias arrenderas.
y nuestra comunidad aborigen tiene mucho más antecedentes y antepasados y árboles genealógicos que
son oriundos de esta zona, que todas las comunidades que se han formado políticamente, porque es gente
que viene de Bolivia a establecerse en esta zona.
Tierras legales
Frente a la problemática expresan sus conclusiones más lógicas: estas tierras fueron
adquiridas de manera legal por sus antepasados y la ley (código civil) ampara sus
derechos como ciudadanos propietarios privados. Si bien este argumento no se esboza
ante el pedido a los organismos estatales.
porque lo que que pasa es que acá se corre la voz de que los propietarios no son propietarios, que esas
tierras van a quedar para los que están ocupando ahora, y no es así!! Nosotros tenemos nuestras
escrituras, nuestros papeles en regla y ...Entrevista Propietario 1, 2007
Esas tierras son el fruto del esfuerzo de sus bisabuelos, quienes adquirieron esas tierras
por su trabajo cotidiano y duro, por lo que es justo y legal que estén en manos de sus
bisnietos. Es necesario valorar y reivindicar el sacrificio de sus ancestros, porque se ha
de quitar propiedad a quien con tanto esfuerzo lo consiguió?
porque vamos a regalar algo que ha sido el sacrificio de antepasado, porque vamos a resignar ese
esfuerzo!!!? Así como ellos se han preocupado por sus hijos, sus hijos por sus nietos, así nos tenemos
que preocupar nosotros por los que nos siguen. Entrevista Propietario 2, 2007
Se trasladan al subcampo legal – derecho civil- y se animan a jugar con los principios
regulatorios impuestos por el propio estado, son dueños de hacer lo que quieran con su
propiedad privada porque la ley los avala. Como un ejemplo representativo, comparan
la situación de las tierras con una casa: si el dueño se quiere ir a vivir a otra parte, y más
si es por una necesidad de progreso, de estudios y capacitación, porque no se va a poder
ir y cerrar la casa? Es dueño, es su casa, es su derecho, el ciudadano tiene derecho de
vivir donde le plazca. La enunciación de este derecho es relacionada a la necesidad de
“capacitación y progreso” de los propietarios que debieron trasladarse a Jujuy.
Se asocia el “trabajo” a la posibilidad de adquirir “propiedad”, por lo tanto es fruto del
esfuerzo. Esta asociación trabajo-propiedad es también usada cuando se desdobla el
discurso y afirman que en realidad no les interesa tanto cobrar el arriendo, porque no es
casi nada de plata, si no que es para que los arrenderos sepan y valoren su esfuerzo. Una
afirmación muy fuerte que refleja las relaciones asimétricas y condescendientes, son
ellos los dueños legítimos del conocimiento y deben enseñar y guiar el camino al resto
de los pobladores –familias pobres e ignorantes-.
Con respecto al cobro de los arriendos, también se escudan en el código civil y leyes
derivadas, como la ley de aparcería. Todo ciudadano que vive o trabaja con una
propiedad que no es suya, sino que tiene un dueño legal, debe pagarle un tipo de
alquiler o arriendo, es lógico y totalmente legal en este sistema.
pero yo me pregunto, en que lugar del mundo la gente vive gratis! sin pagar impuestos, Sin pagar
arriendos, el arriendo es como un alquiler!! hay una ley que en este momento no me acuerdo el número,
pero que se llama ley de Aparcería rural, donde te reglamenta como es el aparcero y el arrendero,
cuanto tienen que pagar por arrendar un campo. Entrevista Propietario 2, 2007
Sus derechos sobre la tenencia de la tierra es legal y el pago de arriendo también lo es,
son mecanismos coherente con el sistema en el que vivimos. Por el uso de algo que no
es nuestro debemos pagarle al dueño. Es claro.
Luchas y enfrentamientos
entonces que es lo que se logró con esto? Se logró enfrentar gente y enfrentamientos serios de los que
tienen y no tienen!! Ahora yo me pregunto, a río revuelto gana el pescador, quienes van a ganar?? Van a
ser los abogados del INAI que están fomentando el despelote entre nosotros!! y desgraciadamente se
aprovechan de la ignorancia de la gente, para decir que esto va a ser suyo
Los propietarios afirman que anteriormente las relaciones mal que mal eran llevaderas.
antes convivíamos, mal que mal, bien que bien, pero estábamos conviviendo en paz, pero con esto …de
que nos van a quitar las tierras eso es más.. mas ya nos estamos…
tenso.. Entrevista Propietario 1, 2007
Sostienen que los conflictos estallados se deben a la intervención del Inai y también por
el respaldo de la iglesia. Las familias propietarias quedaron desorientadas frente a los
consejos de los representantes de la iglesia de Santa Catalina a los arrenderos sobre “no
pagar los arriendos” hasta que se tomen nuevas decisiones, desorienta porque éstas
familias siempre intentaron monopolizar el perdón/bendición de la iglesia, participan en
los eventos mas importantes en los primeros lugares, realizan donaciones y ayudas
económicas, para de esta manera monopolizar el perdón y ser reconocidas como las
“buenas familias”.
si, de la iglesia que les esta dando manija y que ellos creen que los propietarios los están explotando con
los (arriendos¿) agropecuarios, que están cobrando excesivos arriendos, que los hacen trabajar a látigo,
que le hacen trabajar y no le pagan o por un plato de mote y montón de cosas, y siguen y siguen…
Entrevista Propietaria 3, 2007
Las medidas
Una de las medidas tomadas por las comunidades es el “no pago de arriendos”, decisión
que enfurece a los propietarios y por lo tanto responden en primer lugar con la
organización de la comunidad propietaria, pero además con la expulsión compulsiva de
las familias de sus fincas
entonces los tengo que sacar, antes que ellos me saquen a mí!!
Entrevista Propietario 1, 2007
Según las entrevistas realizadas, por ejemplo en una finca hasta hace dos/tres años
residían alrededor de casi cien familias, en la actualidad viven 30. es complicado
realizar un seguimiento lineal de la cantidad de familias expulsadas de manera directa,
porque muchas familias arrenderas se trasladaron en los últimos años al pueblo, sin
embargo los fines de semana se dirigen al campo a cuidar sus tierras arrendadas,
controlar sus animales, su chacra, etc. Una instancia más que contribuye a la
complicación del seguimiento estadístico es el dinámico flujo migratorio que se
despliega en el territorio, en el cual las familias se siguen desplazando entre el pueblo y
las casas adentro.
Pero según las entrevistas y conversaciones informales con los pobladores nos señalan
la importante cantidad de familias que fueron expulsadas de sus casas en las fincas,
familias cuidadoras o puesteras y familias arrenderas.
En otra finca quedaron tres familias de casi veinte que eran, y siguen resistiendo ante las
presiones de los propietarios.
No, son tres. Pero había muchas, y poco a poco se han ido yendo. Pero ahora esos tres se creen dueños y
ya no quieren pagar, hay una familia que…Entrevista Propietaria 3, 2007
En otra entrevista una mujer cuenta como su abuela que sigue viviendo en el campo, en
la finca privadas es presionada violentamente ante su posición de no pagar el arriendo.
Es interesante como se toma una medida -no pagar arriendos- de trayectoria histórica,
todavía en la actualidad tiene sus fuertes consecuencias. Esta medida es tomada por
muchas familias, sin embargo a veces ante las amenazas e intimidaciones, sostenidas en
una intensa relación asimétrica con los dueños, algunas las abandonan.
… Los arriendos igual es porque uno le dice que o tiene, y lo mismos igual entra y ….saca algo a las
familias … Entrevista Trabajadora Municipal, 2007
Si, el es el único que cobra. va y cobra, va y cobra a la gente y si no cobra (¿??) va y carga nomás,
directamente, y saca las ovejas que él quiera!!
Si, eso me decía la señora. Que si no tiene plata ahí nomás carga las llamas
No le importa si son chiquitas, si son hembras, nada. A mi abuela le hace así.
Entrevista Trabajadora independiente, 2006
E: Si, en pueblo viejo si, si, en parte para arriba muy poco, pero yo le digo los propietarios son unos
aprovechadores, unos atrevidos, que los putean cuando quieren a la gente pobre, los manejan como ellos
quieren, cuando quieren les pagan, cuando no quieren les pagan, pagan renegando, pagan una
miseria.... la aprovechan en el trabajo, no le pagan y cobran los arriendos hasta!! no les importa si ha
llovido, si no ha llovido, si ha habido ! No les importa, ellos quieren que le paguen y listo! Eso es lo que
pasa. Representante Comunidad Aborigen 2, 2007
siempre hay algunos pícaros que van y va a apuntar siempre al mas débil, el dueño, mira yo te voy a
cobrar tanto y vos dame tanto y arregla, y lo manda al frente. Representante comunidad Aborigen 2,
2007
y con los arrenderos, los arrenderos no quieren pagar, ya se hacen lo de… no acatar lo que uno dice, por
ejemplo si la tierra no está alambrada ellos igual pisotean el pasto de uno y del otro, y no puede ser ya!
Ya es buscar.. es buscar pelea.. buscar conflicto, entonces por eso entonces por eso habíamos formado
esa comisión y ver lo que pueden hacer.. Entrevista Propietario 1, 2007
No solo desafían estas posiciones sino que no acatan, no admiten algún tipo de
negociación sino que se enfrentan con sus “propias armas intentan jugar a las
transformaciones de las estructuras
pero mientras tantos esta gente que está así como arrendero ya se hace la idea de que nosotros no
tenemos ningún derecho y … y ellos quieren hacer lo que les da la gana, y no es así.. así que, pero ellos
ya tienen metido eso. Entrevista Propietaria 3, 2007
E: Si, yo digo, Cabrerías esta bien, había una chica, una flaquita, le van a cobrar la tierra y dice mira
uds son dueños de la tierras? dice, sabes que? Váyanse ya antes de que los quememos! así dice, váyanse
ya antes de que los quememos, y el hombre ha tenido que irse porque si no se ponía en riesgo de que le
quemen todo, tiene su titulo? A ver su titulo? esta inscripto en la DGI? Esta inscripto en inmuebles?
Donde esta la factura para que yo pague arriendo? y no tenía nada y lo corrieron
Entrevista Representante Comunidad Aborigen 2, 2007
Ya hemos pagado arriendo, venia yo soy el dueño, pagame arriendo, se paga tanto por año. Un día se
reniega mi tío, ha renega dice que... bueno de tanto pone, dice vos ya te hemos dado muchos años te
comer, te he dado de tragar!! así de frente le ha dicho, no? yo te he dado tantos años de tragar, mi papá
te ha seguido dando de tragar, de ha dado de comer y le has seguido cobrando arriendo y te ha dado de
tragar, y ahora me seguís cobrando a mi!!! Y después le vas a seguir cobrando a mis hijos y a mis nietos
le vas a seguir cobrando!! Que quieren uds? A ver los títulos de las propiedades. Porque de quien es
esta tierra? Quien ha comprado la tierra? “no, mi papá ha comprado la tierra”, el papá de quien ha
comprado la tierra? “no, no, de mi abuelo es” y tu abuelo a quien le ha comprado la tierra? Ahí está, de
quien, como? ¿?????????????? Vayan a traer un papel, andate y no aparezcas mas, porque no tenes
nada de papel, yo te voy a demandar, te voy a demandar los años que nos has robado a nosotros,
quitando el hambre de nosotros, te voy a demandar le dijo, te voy a demandar jurídicamente te voy a
demandar!!! Por vivir quitando el hambre de mis hermanos, el hambre de mi, el hambre de mi papá, y
que hemos comido con sopa! y con eso no ha vuelto mas!!! Por ahí pasa y mira y no dice nada
Entrevista Representante Comunidad Aborigen2, 2007
S: si, en el campo. En el campo porque a veces se dicen que son los dueños de la tierra , pero al final los
mismos que viven hace años ahí nunca lo han visto ni nunca los conocieron a los dueños, y dicen porque
nos vienen a cobrar, con que papel nos dicen que somos los dueños y esto
Entrevista Trabajadora Independiente, 2006
“No importa el dinero, porque al fin y al cabo es muy poco lo que pagan en arriendo, no alcanza para
nada” Entrevista Propietario 2, 2007
Estas expresiones son recurrentes en los descendientes de las familias mas tradicionales
“benefactoras y constructoras” de la imagen del pueblo, que reproducen la concepción
de “los pobrecitos”, “los ignorantes”. Incluso ellos no tienen problema en regalarle “los
espacios del pueblo”, pero porque le han de regalar el resto? Por supuesto que solo
queda en un discurso frente a aquellos foráneos (como yo) que preguntan sobre el tema
Aunque sostienen que el pago del arriendo es necesario, aunque sea el mínimo, porque
ellos -gente de la elite- “no es que viva” de los arriendos de los pobres, pero es
necesario porque hay una ley que cumplir y una soberanía que ganar, aunque sea lo
mínimo, aunque sea simbólico (¿) pero que paguen como debe ser.
nosotros acá le cobramos el 5% del valor de .. las cabezas, para decirte, para decirte el mínimo, mínimo,
para mantener la soberanía, (¿) para que no estén abandonadas, porque si están abandonadas si ellos
están ahí. Entrevista Propietario 2, 2007
Minería
A esta situación se suma otro factor de problema La minería. El territorio de la Puna por
sus propiedades geológicas-mineras es considerado como un territorio rico en
minerales, fundamentalmente por sus grandes salares, boratos y los yacimientos de oro,
plata y estaño.
La minería en Santa Catalina se desarrolló casi exclusivamente por la explotación de
yacimientos auríferos. Según fuentes bibliográficas, el territorio fue explorado y
explotado desde antes de la época colonial y posteriormente mantuvo una estrecha
relación con las minas del sur de Bolivia (Potosí, Lípez, etc) (Constant, 1995). El
investigador Marcelo Constant estudió la minería en el departamento que nos interesa -
Santa Catalina-, y señala que recién en las postrimerías del periodo colonial la
producción de oro en las minas era significativa, según lo evidencia los datos aportados
por Acevedo (1965)
Parajes de situación Minas corrientes Marcos que Minas corrientes de oro Onzas que Propietario
de plata Producen de oro producen
San J. Rinconada Rinconada 3..000 Lizarraga
Alfaro
F y P Dávalo
D. Rodriguez
A. López
Santa Catalina Santa Catalina 2..000 S.B. Villega
T. Cruz
J. Huergo
Curato de Humahuaca cerro Aguilar abandonada
Curato de Rinconada Cerro Pan de Azúcar abandonada
Fuente: Acevedo, E. citado en M. Constant, pp 66
15
Marcelo Constant (1995), pp 66.
16
CFI-DPMyRE Plan Aurífero (1992) pp 14
explotaciones mineras por parte de empresas privadas y por otra parte el lavado de oro
artesanal como práctica de las economías domésticas ya en tiempos de la colonia.
Durante 1850/1900 estos años la minería en Santa Catalina tiene su esplendor,
registrados en varios trabajos geológicos-mineros.
Las principales explotaciones mineras fueron impulsadas por empresas privadas con
capitales extraprovinciales que trabajaban el oro, estaño y la plata. En el año 1889 en
Santa Catalina se registraron 33 minas, controladas por las empresas Ada y Cía, Ex
Insud SA - Miguel Alabi, Bach y Cia, José Giulanotti.
La explotación minera de la Puna de Jujuy se desarrolla más fuertemente en las últimas
décadas del siglo XIX. Se forman pequeñas compañías mineras de capitales extra-
provinciales. A pesar de la cantidad de las mismas, de sus proyecciones y exploraciones,
esta actividad no se puede expandir ni fortalecer, de modo que no repercute demasiado
en la economía nacional.
Durante su desarrollo en la zona, nunca pudo afianzarse de manera regular y continua,
sino con altibajos.
Según Constant y Pascual Sgrosso, los precarios conocimientos técnicos, la escasa e
inadecuada inversión en tecnología, la ausencia de estudios previos, las dificultades de
las vías de comunicación y accesibilidad, contribuyeron a generar una baja rentabilidad
de las exploraciones. Las empresas que se habían instalado para la exploración de
aluviones auríferos fracasan, sólo quedan algunos “pirquineros” que extraen oro por
métodos rudimentarios.
La dificultad del transporte sigue siendo un obstáculo inclusive para estos años
Entre otros inconvenientes para la exploración se señala los problemas surgidos en la
prospección aluvional, (inundaciones de pozos, derrumbes, falta de agua), al igual que
los costos en maquinaria para realizar pozos profundos para explotaciones de mayor
envergadura.
Recién en 1930 se descubren los rodados de estaño y plata en cantidad considerable y
comienza la atracción con otras perspectivas. A pesar de los numerosos yacimientos
auríferos, solamente se explota de manera regular los aluviones estanníferos .
Según Pascual Sgrosso, una década mas tarde, la provincia de Jujuy era la más rica en la
Argentina en lo que se refiere a minerales metalíferos en explotación (1943- pp 88),
debido al descubrimiento de los mismos, las exploraciones auríferas siguen siendo no
redituables o explotadas de manera inconstante e irregular por pequeños “pirquineros”.
Los trabajos de investigación de 1964 sobre la zona señalan que s e trabaja poco y las
minas mas importantes El Torno y Eureka se hallan inactivas desde hace tiempo. A
pesar de que la prospección aluvional permitió comprobar la amplia distribución de oro
en los arroyos y quebradas de la Cuenca de Santa Catalina.
Reflexiones
El campo político es un campo de luchas, un espacio de conflictos y rivalidades en el
cual los propietarios y arrendatarios se oponen y enfrentan para transformar o afianzar
las posiciones objetivas e imponer los principios y regulaciones que se corresponden
con sus intereses.
Estos análisis de espacio se sitúan en una historicidad. El interés principal de ambos
grupos es la tenencia legal de la tierra, pero se desplazan y atraviesan otros campos e
intervienen otros agentes como el capital privado, que a través de negociaciones y
solicitudes con los gobiernos provinciales y nacionales, las empresas minera siguen
explotando minerales, invadiendo tierras privadas y no, monopolizando recursos como
el agua, recursos indispensables para desarrollar la vida en el pueblo.
En la actualidad el contexto socio-político permite y recrea un espacio para el
reconocimiento de los derechos aborígenes, entonces los agentes se revelan más
fuertemente y la lucha se intensifica, sumado a las experiencias y trayectorias de cada
grupo uno. El campo político se reconfigura, la ilussio de ambos grupos se acentúa y se
disponen a jugar sus capitales y enfrentarse ante el rival, con las contrariedades de sus
sentidos prácticos, “por esa sensibilidad social que los guía”.
En este campo los arrenderos y propietarios crean y se re-apropian de estrategias,
rivalizan no sólo en el campo político, sino que sus luchas afectan a otros campos,
disputan el capital simbólico, el reconocimiento de la “verdadera identidad”, los
“legítimos dueños de la historia y de la tierra”.
Pero a la vez esta discusión desplaza la atención del problema de fondo: la
contradicción real de sus condiciones económicas y sociales. La concentración de la
propiedad de la tierra (reconocida legalmente) impulsa a que las familias desposeídas de
este medio de producción no les quede otra opción mas que arrendar unas parcelas para
su autoconsumo (y excedente para la renta) o a que se emplee como cuidador o puestero
en las fincas del propietario, reproduciendo las relaciones de opresión y violencia física
y simbólica de trayectoria histórica.
Los arrendatarios indígenas de la puna arrastran una historia de avasallamiento y
dominación, sin embargo crean y re-inventan estrategias para reclamar, resistir y seguir
enfrentando a sus “patrones”, jugando en ese cierto grado de indeterminación que
permite construir la historia.
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