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FUNDAMENTACIÓN
La llamada “guerra contra las drogas” propuesta y promovida por las potencias
mundiales, según confirman las series estadísticas nacionales e internacionales, no
solo no ha sido eficaz en la disminución del narcotráfico sino que ha generado una
criminalización de los usuarios de sustancias, independientemente del contexto y de la
relación particular que cada persona mantiene con ellas. Consecuencias similares se
han advertido desde la estrategia y visión estrictamente médica, de la cual nuestro
país también ha sido testigo. Así, desde la mirada de la medicalización, el entonces
“criminal” pasó a ser considerado un “enfermo”, obscureciendo nuevamente la
capacidad y ejercicio de derecho de los mismos.
Desde hace algunos años a la fecha y en particular con una nueva mirada político-
sanitaria en el tema, que tuvo su manifestación en la Ley N° 26.657 de Salud Mental y
la ley que establece el Plan Integral para el Abordaje de los Consumos Problemáticos -
Ley N° 26.934 - “IACOP”; el paradigma constituido es el de la Salud Social y
Comunitaria, entendiendo al sujeto en su contexto, con sus relaciones interpersonales
y sus problemáticas particulares y su consecuencia en los consumos.
Por ello, resulta necesario que las personas formadas en este campo del conocimiento
y de la práctica y que acompañan y cuidan a personas atravesadas por el consumo
problemático de sustancias también puedan conocer nuevas herramientas
conceptuales de enseñanza y aprendizaje en sintonía con este paradigma actual.
OBJETIVOS
• Brindar el soporte teórico del paradigma de la inclusión social y del Modelo Ético y
Social para el abordaje de la problemática
MARCO GENERAL
En el abordaje que se realiza desde esta mirada la teoría (los conceptos y las
abstracciones) están en constante comunicación y retroalimentación con la práctica
(las situaciones concretas que se nos presentan). Asimismo, desde el paradigma de la
educación popular, tomamos como supuesto de que el conocimiento no se concibe
desde una relación asimétrica, entre un sujeto que conoce y un sujeto carente
totalmente de saberes. Sino que por el contrario, el otro ha de ser concebido como un
facilitador en la construcción colectiva de conocimientos teóricos y prácticos y que
además es posible el desarrollo de un proceso de intercambio considerando los
saberes previos de las demás personas. Desde esta perspectiva, es muy difícil
concebir el conocimiento en compartimentos estancos que no se nutran de la realidad
de cada una de las personas que conviven en la sociedad. A su vez, problematiza
respecto de la funcionalidad exclusivamente “técnica” de los acompañantes y agentes
que asisten a personas atravesadas por el consumo problemático. Y fundamenta el
concepto de mayor “acercamiento” a las realidades concretas de las personas, sus
situaciones y a la comprensión de las mismas desde otra lógica inscriptas
marcadamente en el modelo Ético-Social.
CONTENIDOS MINIMOS:
MARCO GENERAL
El objetivo de esta parte de la materia es que los cursantes adquieran las herramientas
necesarias para poder debatir acerca de la relación entre el conocimiento legitimado o
académico y el conocimiento popular desde una perspectiva crítica y que, a su vez,
puedan reconocer y armar estrategias vinculadas a la pedagogía de la presencia a la
hora de planificar una intervención teniendo en cuenta los contextos en los que puede
desenvolverse un acompañante. Para esto será central hablar de la medida del
Vínculo que establecen dichos acompañantes con las personas atravesadas por el
consumo problemático de sustancias reconociendo al otro en su integralidad y
potencialidad y no solamente en el aspecto psicopatológico de la persona. Esto en
ningún aspecto minimiza la problemática patológica de la persona asistida pero
también le reconoce su dignidad como ser humano y su potencial de recursos para
posicionarse frente al síntoma adictivo siguiendo las premisas del Modelo Ético-Social
presentado en clases anteriores.
CONTENIDOS MINIMOS
MARCO GENERAL
Esta temática específica tiene como objetivo reformular el rol de los agentes que
acompañan a personas atravesadas por el consumo problemático de sustancias. El
contexto actual presenta un nivel de complejidad que nos pone en la tarea de rever los
postulados clásicos respecto del rol de los acompañantes y cuidadores de personas
atravesadas por el consumo problemático de sustancias como así también
problematizar incluso este último concepto. El pasaje de la idea de adicción al de
consumo problemático dentro de un nuevo paradigma de inclusión social desarrollado
en los últimos años instala indefectiblemente una nueva mirada en el abordaje del
tema y en el Vínculo con aquellas personas que los agentes de salud acompañan. El
rol del acompañante tiene la necesidad de actualizar sus funciones y generar el
anclaje de los elementos teóricos y técnicos con las necesidades concretas de los
territorios en un mundo en permanente movilidad y turbulencia. De lo contario, dicho
rol producirá un desfasaje con la realidad de los territorios que incluirá un riesgo en
términos de su legitimidad como carrera. En ese sentido, esta parte de la materia se
propone realizar un acercamiento al sentido del rol del acompañante en consumos
problemáticos y transmitir algunos métodos y conceptos específicos de su trabajo,
reconociendo la importancia de su presencia y su desarrollo técnico en el territorio y en
la vida de los sujetos.
CONTENIDOS MINIMOS
BIBLIOGRAFÍA
Ryan, S. Prevención del consumo problemático de drogas. Desde el lugar del adulto
en la comunidad educativa. Ministerio de Educación de la Nación.