Está en la página 1de 1

Separación de poderes

Ir a la navegaciónIr a la búsqueda
La separación de poderes o división de poderes es un principio político en
algunas formas de gobierno, en el cual los
poderes legislativo, ejecutivo y judicial del Estado son ejercidos por órganos de
gobierno distintos, autónomos e independientes entre sí. Esta es la cualidad
fundamental que caracteriza a la democracia representativa.12
Montesquieu argumentaba que «todo hombre que tiene poder se inclina por
abusar del mismo; va hasta que encuentra límites. Para que no se pueda abusar
de este, hace falta disponer las cosas de tal forma que el poder detenga al
poder».3 De este modo, se confía la vigilancia de los tres poderes entre ellos
mismos ya que cada uno vigila, controla y detiene los excesos de los otros para
impedir, por propia ambición, que alguno de ellos predomine sobre los demás.
Puede contrastarse con la fusión de poderes y separación de funciones en
los sistemas parlamentarios, donde el poder ejecutivo y el poder legislativo están
unificados, debido a que el legislativo nombra al ejecutivo.
Esta doctrina no se refiere solamente a la separación y al equilibrio de los tres
clásicos poderes del Estado, sino a la necesidad de dividir el poder político donde
se encuentre, sea en la esfera municipal, regional o nacional, para así garantizar
la libertad política y evitar los abusos de poder, mediante la vigilancia y control
recíproco de los poderes separados.

También podría gustarte