Capítulo 5
Ética de las nuevas tecnologías de información
y comunicación. Confidencialidad y TIC
Miguel Melguizo Jiméneza y Enrique Moratalla Lópezb
aEspecialista en Medicina Familiar y Comunitaria. Centro de Salud Almanjáyar. Distrito Sanitario Granada Metropolitano. Servicio Andaluz de Salud.
Granada. España.
bEspecialista en Medicina Familiar y Comunitaria. Centro de Salud Cartuja. Distrito Sanitario Granada Metropolitano. Servicio Andaluz de Salud.
Granada. España.
Puntos para una lectura rápida
O La intimidad es el ámbito donde los seres humanos
gestionan sus valores más esenciales. Su contenido es
información altamente sensible y requiere protección ética,
deontológica y legal.
O La confidencialidad y el secreto médico tratan de proteger
el valor “intimidad”. Todo acto médico está impregnado de
manejo de información y datos relacionados con la intimidad.
O La prudencia debe ser la base de toda asistencia sanitaria y
más si cabe cuando se haga uso de las nuevas tecnologías.
El riesgo de vulnerar la confidencialidad de la información
es máximo.
O La Telemedicina ha de entenderse como una herramienta
más. La atención ofrecida mediante las nuevas tecnologías
o sistemas de comunicación se concibe como un verdadero
acto de asistencia sanitaria.
Palabras clave: $POGJEFODJBMJEBE
t
²UJDB
UFMFNFEJDJOB
t
1SPUFDDJØO
EF
EBUPT
Intimidad, secreto médico
y confidencialidad
Intimidad
Es el ámbito en el que los seres humanos gestionan sus valo-
res más trascendentales (morales, ideológicos, religiosos, se-
xuales, de salud, etc.). La intimidad es propia e intransferi-
ble, otorgando dignidad, derechos y singularidad a cada
persona. La intimidad es más fácil de describir que de defi-
nir, pero en último término se refiere al control de los pro-
pios valores personales y los datos referidos a este ámbito,
entre otros al cuerpo, a la sexualidad, a la salud y la enfer-
medad o a la vida y la muerte.
La palabra y el concepto intimidad ha ido evolucionando
en castellano en los últimos siglos, con significados cam-
O El uso de medios tecnológicos corporativos (teléfono fijo de
la consulta, correo electrónico corporativo, aplicaciones
propias del sistema de salud) debe ser una de las
principales medidas de seguridad.
O Los problemas éticos de la telemedicina no han hecho más
que empezar. Los problemas irán presentándose con la
generalización del uso y el desarrollo de nuevas
capacidades.
O La identificación de quienes intervienen en el proceso de
comunicación con las nuevas tecnologías ha de ser clara y
fehaciente.
O Es imprescindible dotar de un tiempo específico y
suficiente en la agenda asistencial, para que la consulta
telemática reúna los requisitos de calidad y calidez.
biantes. En el siglo xvi se circunscribía a un ámbito religio-
so y ascético. Refería el lugar del alma en el que nos comu-
nicamos con Dios. En el siglo xix pasó a denominar las
relaciones amorosas y sexuales. Finalmente, en el siglo xx
aparece como fundamento y origen de un derecho funda-
mental. Intimidad hace referencia además a un ámbito dife-
renciado de lo privado, que en la legislación española deli-
mita, entre otras cosas, el hogar familiar, el lugar de trabajo
o posesiones patrimoniales.
La preservación de la intimidad es el núcleo del secreto
médico y la confidencialidad.
Secreto médico
Es el deber del personal sanitario de guardar la información
obtenida durante el proceso asistencial con los pacientes. Su
utilización data de la época hipocrática. Durante siglos fue
FMC. 2022;29(Extraordin 1):39-45 39
Melguizo Jiménez M y Moratalla López E et al. Ética de las nuevas tecnologías de información y comunicación. Confidencialidad y TIC
una obligación de determinadas profesiones (medicina, abo-
gacía, sacerdocio, etc.) en relación con sus propios códigos o
normas deontológicas. El secreto profesional correspondería
al deber de determinadas profesiones que conocen ciertos
datos íntimos o privados de no revelarlos sin la autorización
de sus clientes.
El secreto médico también tiene sus límites; entre otros
los daños a terceras personas, necesidades de salud pública,
requerimientos de la autoridad judicial o cuando la persona
afectada lo autorice.
Confidencialidad
Es el derecho de las personas a que aquellas que hayan en-
trado en conocimiento de datos íntimos suyos no puedan re-
velarlos sin su autorización expresa. Es un concepto que
aparece por vez primera como derecho en la Constitución
Española de 1978. Corresponde a una palabra de origen in-
glés (confidentiality).
La confidencialidad protege toda la información relacio-
nada con la intimidad de la persona, es decir lo más “valio-
so” de la misma. De modo natural el derecho de una persona
(confidencialidad) siempre está relacionado con el deber
profesional (secreto médico), con la excepción de que sea la
propia afectada quien autorice la difusión de sus datos.
No obstante, la doctrina del secreto médico ha seguido al
menos tres fases muy diferenciadas. En una primera fase el
secreto médico se identificaba con el deber de sigilo (del vo-
cablo sigilum que significa sello), evocando el sello de lacre
que cerraba cartas y documentos secretos. En una segunda
fase, ya entrado el siglo xx el secreto se entiende como co-
rrelativo a un derecho ciudadano dado que solo este puede
eximir al médico de revelar datos relativos a su persona. En
la tercera fase, desde hace dos décadas, nos encontramos en
un nuevo escalón de exigencia y es la propia sociedad quien
ha considerado que existen determinados datos que deben
gozar de una especial protección jurídica. Se trata de datos
“sensibles” relacionados con la enfermedad, la sexualidad,
el cuerpo o la salud que precisan una defensa específica y
que se identifican con lo que hemos denominado intimidad
personal. Lógicamente la profesión médica trabaja específi-
camente con estos datos sensibles y se ve obligada a entrar
dentro del mundo de la intimidad en una interacción con ca-
da uno de sus pacientes (fig. 5-1).
La mayor protección hacia los datos “sensibles” es fruto
de una mayor sensibilidad social hacia el derecho a la confi-
dencialidad, pero también a que el gran avance tecnológico
ha derivado en una fragilidad extrema en la defensa de aque-
lla.
Nunca ha habido más conciencia social para preservar la
intimidad y nunca antes los pacientes han sido más vulnera-
bles. Ante este novedoso escenario, en lo desconocido y pe-
ligroso, debemos intentar desvelar algunos factores determi-
nantes de esta complejidad:
40 FMC. 2022;29(Extraordin 1):39-45
Historia
clínica
digital
MÉDICO
Íntimo DE Otros
colegas
FAMILIA
Privado
Público Redes
sociales
Figura 5-1. Espacios de lo íntimo, lo privado y lo público.
La relación particular médico–paciente se ha ido abriendo
a responsabilidades compartidas y lo habitual es que los pa-
cientes tengan varios referentes profesionales de diferentes
especialidades y ámbitos de atención.
El proceso de digitalización permite el acceso a una cuan-
tiosa información por parte del personal sanitario, tanto para
gestionar la atención a sus pacientes como para incorporar
herramientas de actualización. La privacidad, el derecho a la
imagen y la propia intimidad se están diluyendo en un mun-
do hiperconectado, ansioso por compartir contenidos (infor-
mativos y visuales) y con interacciones múltiples. Asistimos
a una banalización y descrédito de la confidencialidad en
nuestra sociedad. La virtualidad de la comunicación multi-
plica los riesgos de filtraciones en el intercambio de infor-
mación, aunque traslada una sensación de falsa privacidad.
La frontera entre lo profesional y lo social puede ser difícil
de diferenciar en el mundo virtual.
Recomendaciones generales de
preservación de la confidencialidad
con las nuevas tecnologías
La evolución de las tecnologías de la información y comuni-
cación (TIC) en el ámbito sanitario ha dado lugar al fenóme-
no actual de la e-Health o e-Salud, términos equivalentes al
concepto de espacio virtual, pero referido exclusivamente a
la salud. Nos encontramos frente a una verdadera revolución
social y profesional ante la que es imposible permanecer al
margen. La forma de comunicación entre profesionales y pa-
cientes, y de los profesionales entre sí, se ha modificado pa-
ra siempre.
En la década de los 80 se inició la introducción de la in-
formática en los sistemas de salud. Ahora se trata de un
cambio mucho más profundo; el uso de las TIC en la
atención de la salud, incluida su aplicación en sistemas y he-
rramientas para el manejo de pacientes, investigación,
educación de profesionales de la salud, seguimiento de en-
fermedades y vigilancia de la salud pública. Si en los mo-
mentos iniciales la telemedicina aplicada con TIC se centra-
ba en teleconsultas interprofesionales y telediagnósticos, en
 Melguizo Jiménez M y Moratalla López E et al. Ética de las nuevas tecnologías de información y comunicación. Confidencialidad y TIC
la actualidad hay un debate ético sobre si las herramientas
de la telemedicina pueden convertirse en una alternativa a la
práctica de la relación clínica convencional.
En el mundo de los servicios sanitarios esta generaliza-
ción de la telemedicina se acompaña de dos grandes riesgos.
Por un lado, la transformación de la relación interpersonal
entre personal sanitario y paciente y por otro la dificultad de
preservar la intimidad y gestionar la confidencialidad de la
información clínica.
En relación a ambas, el Código de Deontología Médica
de la Organización Médica Colegial de España de 2011, en
su artículo 26, aborda el problema de los riesgos de la tele-
medicina (relacionales y de confidencialidad) y establece re-
comendaciones que se pueden sistematizar en las siguientes
reglas:
r
&M
FKFSDJDJP
DMÎOJDP
EF
MB
NFEJDJOB
NFEJBOUF
DPOTVMUBT

exclusivamente por carta, teléfono, radio, prensa o Internet
es contrario a las normas deontológicas. La actuación co-
rrecta implica ineludiblemente el contacto personal y directo
entre el médico y el paciente.
r Es éticamente aceptable, en caso de una segunda opi-
nión y de revisiones médicas, el uso del correo electrónico u
otros medios de comunicación no presencial y de la teleme-
dicina, siempre que sea clara la identificación mutua y se
asegure la intimidad.
r
-PT
TJTUFNBT
EF
PSJFOUBDJÓO
EF
QBDJFOUFT

NFEJBOUF
DPO- profesional dentro de organizaciones
sulta telefónica o telemedicina, son acordes a la deontología
médica cuando se usan exclusivamente como una ayuda en
la toma de decisiones.
r
-BT
SFHMBT
EF
DPOGJEFODJBMJEBE

TFHVSJEBE
Z
TFDSFUP
TF
Orgánica 3/2018 de Protección de Datos Personales y garan-
aplicarán a la telemedicina en la forma establecida en este
código.
Todos los requisitos anteriores deberían ser condiciones
obligatorias que las organizaciones sanitarias deben garanti-
zar al establecer programas de telemedicina. Corresponde a
estas organizaciones hacerse responsables de la seguridad,
protección de datos, actualización y mantenimiento de las
herramientas tecnológicas utilizadas. La responsabilidad
médica debería limitarse a las intervenciones estrictamente
profesionales derivadas de la práctica de la medicina con-
vencional.
La regulación jurídica diferencia dos tipos diferentes de
situaciones que deben ser tratadas de forma diferenciada:
Uso de telemedicina de forma voluntaria
desde el ámbito privado y particular
de los médicos
Las actuaciones de los profesionales médicos utilizando ele-
mentos de la telemedicina en su ámbito privado y personal
constituyen una práctica de alto riesgo. El uso de dispositi-
vos privados para el almacenamiento o transferencia de in-
formación sanitaria plantea serios problemas de legalidad y
posibilidad de responsabilidades penales. El correo electró-
nico privado, los mensajes de móvil desde un número parti-
cular o el WhatsApp contravienen de entrada las normas de
seguridad reguladas por la Ley Orgánica 15/1999 de Protec-
ción de datos de carácter personal (LOPD) y su posterior ac-
tualización a través de la Ley Orgánica 3/2018 de Protección
de Datos Personales y garantía de los derechos digitales
(LOPDGDD). 
El uso de dispositivos como teléfonos móviles, tabletas
u ordenadores sin procedimientos de cifrado o medidas
de seguridad afecta seriamente también al estándar básico de
seguridad del paciente. Pese a que pudiera argumentarse la
autorización de las personas involucradas; salvo que pueda
demostrarse que el médico ha recibido el consentimiento ex-
preso y pudiera tener pruebas de ello, está práctica es clara-
mente incorrecta. Además, al tratarse de prácticas privadas
el sistema sanitario, como empleador del profesional sanita-
rio, queda exento de cualquier responsabilidad si se produje-
ra un evento lesivo para el paciente. El sistema de salud
nunca podrá respaldar una actividad asistencial o relacional
no conocida ni autorizada de interacción electrónica (tele-
medicina en cualquiera de sus formas) con dispositivos no
regulados y sin sistemas de protección de seguridad.
Uso de telemedicina en el ejercicio
sanitarias
A la espera de que la regulación del ciberespacio se lleve a
cabo a través de leyes específicas, en este momento la Ley
tía de los derechos digitales (LOPDGDD) regula aspectos
importantes de la actividad asistencial con implicaciones en
la garantía de la confidencialidad de la información y el tra-
tamiento de datos digitales. La LOPDGDD adapta a la legis-
lación española el Reglamento General de la Unión Europea
sobre protección de datos (Reglamento UE 2016/679 de 27
de abril). Esta regulación es imprescindible dada la singula-
ridad de los datos sanitarios, la complejidad organizativa de
los servicios de salud y el gran volumen de información que
tratan los centros sanitarios.
Para la medicina de familia los elementos esenciales a te-
ner en cuenta serían:
Estas disposiciones diferencian dentro de los datos sani-
tarios los referidos a: a) datos genéticos, b) datos biométri-
cos y c) datos relativos a la salud.
Los datos sanitarios de personas fallecidas solo podrán
ser facilitados a familiares, personas herederas y allegadas
con las mismas limitaciones que si la persona estuviera viva.
Se mantiene la excepción de las anotaciones subjetivas, da-
tos sobre intimidad de terceras personas (referido a informa-
ción de la historia clínica cuyo conocimiento por familiares
o allegados puede dañar o lesionar derecho a la confidencia-
FMC. 2022;29(Extraordin 1):39-45 41
Melguizo Jiménez M y Moratalla López E et al. Ética de las nuevas tecnologías de información y comunicación. Confidencialidad y TIC
lidad de una persona diferente al paciente) y privilegio tera-
péutico (situación en que el médico, amparándose en la cer-
teza absoluta de que la información médica puede causar un
daño psicológico importante al paciente, no lleva a cabo el
proceso del consentimiento informado).
Los datos personales, y especialmente los de carácter sa-
nitario, están sujetos al deber de confidencialidad por parte
de las personas responsables y encargadas del tratamiento,
así como por todas aquellas que intervengan en cualquier fa-
se de este.
En el ámbito sanitario el deber de secreto es particular-
mente importante. Hay graves responsabilidades penales en
los casos de descubrimiento o revelación de secreto, acceso
indebido a la historia digital (sea cual sea la vía) o la revela-
ción de datos sanitarios a terceras personas.
La LOPDGDD legitima el uso de datos sanitarios a las
organizaciones sanitarias en base al tratamiento de datos
para el cumplimiento de una misión realizada en interés pú-
blico y la necesidad del ejercicio de poderes públicos para el
responsable de dicho tratamiento.
La Ley en su artículo 7 fija en 14 años la mayoría de edad
en relación con la protección de datos de carácter personal,
de modo que el tratamiento de los datos personales de una
persona menor de edad únicamente podrá fundarse en su
consentimiento cuando sea mayor de 14 años.
La LOPDGDD regula los derechos de las personas en re-
lación a la protección y tratamiento de sus datos personales
y que son, de conformidad con el reglamento europeo, los
siguientes: acceso, rectificación, supresión, oposición, dere-
cho a la limitación del tratamiento y derecho a la portabili-
dad (estos dos últimos añadidos a lo regulado por la
LOPD). La descripción de estos derechos se detalla en la ta-
bla 5-1. Se establecen especificidades para los datos sanita-
rios, uno de ellos es la gratuidad en la solicitud de ejercicio
efectivo de dichos derechos.
Se establecen dos nuevas obligatoriedades en relación a la
anterior LOPD:
La designación por las organizaciones sanitarias de un
Delegado de Protección de Datos para todos aquellos cen-
tros sanitarios obligados al mantenimiento de historias clíni-
cas digitales de pacientes.
La responsabilidad “proactiva” de las organizaciones sa-
nitarias que les obliga a adoptar medidas técnicas y organi-
zativas que garanticen y acrediten un tratamiento de los da-
tos sanitarios acorde al reglamento comunitario y a la
LOPDGDD.
Respecto a la utilización de datos con fines de investiga-
ción la LOPDGDD establece que ha de exigirse siempre el
consentimiento de las personales interesadas. Añadiendo
como requisitos que se realice una evaluación del impacto
que determine los riesgos derivados del tratamiento de los
datos, un sometimiento de la investigación científica a nor-
mas de calidad y la adopción de garantías para que los in-
42 FMC. 2022;29(Extraordin 1):39-45
Tabla 5-1. Derechos de las personas en relación a la protección
y tratamiento de sus datos personales. Ley Orgánica de
Protección de Datos y Derechos Digitales
Derecho de acceso
El derecho de acceso es el derecho de la persona afectada a
obtener información sobre si sus propios datos de carácter
personzal están siendo objeto de tratamiento, la finalidad del
tratamiento que, en su caso, se esté realizando, así como la
información disponible sobre el origen de dichos datos y las
comunicaciones realizadas o previstas de los mismos
Derecho de rectificación
El derecho de rectificación es el derecho de la persona afectada
a que se modifiquen los datos que resulten ser inexactos o
incompletos
Derecho de oposición
El derecho de oposición es el derecho de la persona afectada a
que no se lleve a cabo el tratamiento de sus datos de carácter
personal o se cese en el mismo en los siguientes supuestos:
a) Cuando no sea necesario su consentimiento para el
tratamiento, como consecuencia de la concurrencia de un
motivo legítimo y fundado, referido a su concreta situación
personal, que lo justifique, siempre que una ley no disponga
lo contrario
b) Cuando se trate de ficheros que tengan por finalidad la
realización de actividades de publicidad y prospección
comercial, en los términos previstos en el artículo 51 de este
reglamento, cualquiera que sea la empresa responsable de
su creación
c) Cuando el tratamiento tenga por finalidad la adopción de una
decisión referida al afectado y basada únicamente en un
tratamiento automatizado de sus datos de carácter personal,
en los términos previstos en el artículo 36 de este reglamento
Derecho de supresión (“al olvido”)
El ejercicio del derecho de cancelación dará lugar a que se
supriman los datos que resulten ser inadecuados o excesivos,
sin perjuicio del deber de bloqueo conforme a este
reglamento
Derecho a la limitación del tratamiento
Derecho a obtener la limitación del tratamiento de los datos que
realiza el responsable, si bien su ejercicio presenta dos
vertientes: se puede solicitar la suspensión del tratamiento de
los datos o solicitar al responsable la conservación de los datos
Derecho a la portabilidad
Derecho a reforzar aún más el control de los datos personales,
de forma que cuando el tratamiento se efectúe por medios
automatizados, se reciban los datos personales en un formato
estructurado, de uso común, de lectura mecánica e
interoperable, y se puedan transmitir a otro responsable del
tratamiento, siempre que el tratamiento se legitime en base al
consentimiento o en el marco de la ejecución de un contrato
No obstante, este derecho, por su propia naturaleza, no se
puede aplicar cuando el tratamiento sea necesario para el
cumplimiento de una misión de interés público o en el
ejercicio de poderes públicos conferidos al responsable
vestigadores no accedan a los datos de identificación de per-
sonas.
Se establece la obligación de preservar los datos de iden-
tificación personal del paciente separados de los datos de
 Melguizo Jiménez M y Moratalla López E et al. Ética de las nuevas tecnologías de información y comunicación. Confidencialidad y TIC
carácter clínico asistencial cuando se produce el acceso a la
historia clínica digital con fines judiciales, epidemiológicos,
de salud pública, de investigación o de docencia.
Recomendaciones específicas de
preservación de la confidencialidad
con las nuevas tecnologías
En la actividad asistencial en Atención Primaria existen dife-
rentes tareas y actuaciones que requieren extremar la protec-
ción de la confidencialidad. Se han sistematizado las áreas
prioritarias de intervención como orientación para establecer
estrategias específicas de mejora.
Entre las más importantes se señalan:
r
6TP
EF
MB
)JTUPSJB
$MÎOJDB
%JHJUBM
r
"DDFTP
B
MB
)JTUPSJB
$MÎOJDB
%JHJUBM
QBSB
BDUJWJEBEFT
FQJ-
demiológicas, de investigación y docencia.
r
6UJMJ[BDJÓO
EF
UFMÊGPOP
GJKP
P
NÓWJM

DPSSFP
FMFDUSÓOJ- sensible
co, fax y redes sociales (particular o corporativa).
r
$JSDVJUP
EF
EPDVNFOUPT
NÊEJDPMFHBMFT
FO
TPQPSUF
QBQFM

(incapacidad temporal, informes clínicos, recetas, visados,
EDO, consentimientos informados y partes judiciales).
r
"SDIJWP
Z
EFTUSVDDJÓO
EF
EPDVNFOUPT
DPO
JOGPSNBDJÓO

clínica o personal.
r
3FDMBNBDJPOFT
Z
TVHFSFODJBT
FTQBDJPT
Z
EPDVNFOUBDJÓO

r
$POTVMUBT
QSFTFODJBMFT
DPO
QSPGFTJPOBMFT
FO
GPSNBDJÓO

(estudiantes, residentes).
r
$POTVMUBT
DPO
QBDJFOUFT
DPO
CBSSFSBT
EF
DPNVOJDBDJÓO

(representantes, traductores o mediadores culturales).
r
"UFODJÓO
B
NFOPSFT
EF
FEBE
Z
QBDJFOUFT
DPO
EJTDBQBDJEBE
En relación con las implicaciones de las nuevas tecnolo-
gías en la custodia de la confidencialidad, las áreas más
afectadas serían las relacionadas con la historia clínica digi-
tal, el uso de teléfono y correo electrónico, el trabajo con re-

DBUFHPSÓB
Z
DFOUSP

des sociales y el tratamiento de datos en investigación y do-
cencia. Las recomendaciones específicas para las mismas se
detallan en las tablas 5-2 a 5-5.

DPOGJSNBS
TV

Al margen de ellas interesa destacar los dos elementos
que más preocupan a los profesionales de la medicina de fa-

WFSJGJDBS
MB
SFMBDJØO
DPO

milia, su encaje organizativo en la agenda de trabajo y la se-
guridad jurídica.
Por ello, es imprescindible dotar de un tiempo específico
y suficiente en la agenda asistencial, para que la consulta te-
lemática reúna los requisitos de calidad y calidez. Basar su
implementación solo en criterios de “eficiencia”, demora y
accesibilidad de la ciudadanía ponen en riesgo la seguridad
del paciente y la buena praxis médica.
Asimismo, es obligatorio dotar de seguridad jurídica el
desarrollo de la telemedicina. Actualmente, surgen no pocos
interrogantes jurídicos y deontológicos en relación con los
Tabla 5-2. Recomendaciones para preservar la confidencialidad.
Historia clínica digital
Identificación y acceso
t
"DDFTP
B
MB
IJTUPSJB
DMÓOJDB
EFM
QBDJFOUF
TPMP
QPS
QBSUF
EFM

profesional que sea autorizado por el paciente
t
"DDFTP
EF
PUSPT
QSPGFTJPOBMFT
FO
MPT
DBTPT
EF
෯Ser imprescindible para mantener la continuidad asistencial
෯Estar implicado más de un profesional en el proceso
asistencial
t
"DDFTP
DPO
OPNCSF
EF
VTVBSJP
Z
DMBWF
QFSTPOBMJ[BEB
Contenido
t
3FGMFKBS
FO
MB
IJTUPSJB
DMÓOJDB
BRVFMMB
JOGPSNBDJØO
RVF
TFB

relevante para sus necesidades y problemas de salud,
incluyendo las dimensiones clínica, psicológica, laboral y
sociofamiliar del proceso asistencial
t
1FSNJUJS
MB
QPTJCJMJEBE
EF
CMPRVFP
EF
FOUSBEBT
EF
JOGPSNBDJØO

que solo el profesional responsable del paciente puede leer o
mediante espacio privado de anotaciones subjetivas
t
&MJNJOBS
JDPOPT
P
JNÈHFOFT
EF
QSPHSBNBT
P
QSPDFTPT

asistenciales vejatorios o identificatorios de información
t
&WJUBS
BOPUBDJPOFT
EF
BTQFDUPT
QSJWBEPT
P
ÓOUJNPT
EFM

paciente sin relación con su situación clínica o estado de
salud
t
&TUSBUJGJDBS
FM
BDDFTP
B
MB
JOGPSNBDJØO
DPOUFOJEB
FO
MB
IJTUPSJB

clínica según perfil profesional y necesidades de información
Tabla 5-3. Recomendaciones para preservar la confidencialidad
Consulta telefónica
Entorno de la entrevista
t
&M
NÏEJDP
EF
GBNJMJB
EFCF
SFBMJ[BS
MB
FOUSFWJTUB
FO
TJUVBDJØO

de la privacidad
t
&TQBDJP
DFSSBEP
&WJUBS
SVJEPT
P
JOUFSSVQDJPOFT
"
TPMBT
P
DPO

autorización del paciente cuando hay otro profesional
(habitualmente médico residente o estudiante de grado)
Identificación del profesional
t
1SFTFOUBDJØO
DPO
OPNCSF
Z
BQFMMJEPT
sanitario desde el que se llama
Identificación del paciente
t
4J
OP
DPOPDFNPT
BM
QBDJFOUF
P
UFOFNPT
EVEBT
identidad con nombre y apellidos
t
4J
TF
USBUB
EF
PUSB
QFSTPOB
BVUPSJ[BEB
el paciente (cuidadora, familiar, allegada, etc.)
Intercambio de información
t
3FBMJ[BS
MB
MMBNBEB
EFMBOUF
EF
MB
IJTUPSJB
DMÓOJDB
t
3FHJTUSBS
FM
DPOUFOJEP
EF
MB
FOUSFWJTUB
FO
MB
IJTUPSJB
DMÓOJDB

t
%JTQPOFS
TJFNQSF
EF
MB
PQDJØO
EF
BUFODJØO
QSFTFODJBM
FO
FM

Centro de Salud o en el domicilio
actos sanitarios realizados mediante telemedicina y a la res-
ponsabilidad profesional sanitaria ante un diagnóstico no
presencial erróneo (o ausencia del mismo).
FMC. 2022;29(Extraordin 1):39-45 43
Melguizo Jiménez M y Moratalla López E et al. Ética de las nuevas tecnologías de información y comunicación. Confidencialidad y TIC
Tabla 5-4. Recomendaciones para preservar la confidencialidad.
Correo electrónico
Cuenta de correo
t
&M
NÏEJDP
EF
GBNJMJB
EFCF
EJTQPOFS
EF
VOB
DVFOUB
EF
DPSSFP

corporativa personal (nunca de equipo o unidad asistencial),
diferente del correo electrónico particular
t
/PNCSF
EF
VTVBSJP
Z
DMBWF
EF
BDDFTP
QFSTPOBMJ[BEB

y confidencial
Equipo
t
&M
BDDFTP
B
MB
DVFOUB
EF
DPSSFP
EFCF
IBDFSTF
EFTEF
FM
NJTNP

ordenador o terminal de entrada a la historia clínica digital
t
&M
FRVJQP
EFCF
QFSNJUJS
USBCBKBS
TJNVMUÈOFBNFOUF
DPO
FM

correo y la historia de forma privada sin posibilidad de ser
visualizado por otras personas
t
-B
SFE

FM
FRVJQP
Z
MPT
QSPHSBNBT
VUJMJ[BEPT
EFCFO
GVODJPOBS

de acuerdo con los requisitos de fiabilidad, actualización
y protección antivirus
t
&M
BDDFTP
B
MB
IJTUPSJB
UBNCJÏO
EFCF
SFBMJ[BSTF
DPO
OPNCSF
EF

usuario y clave de acceso personalizada y confidencial
Contenidos
t
&M
JOUFSDBNCJP
EF
JOGPSNBDJØO
EFCF
HP[BS
EF
MB
NJTNB

protección que la historia clínica digital, tanto en texto como
en ficheros (imágenes, copias, etc.)
t
&M
DPOUFOJEP
EFCF
WFSTBS
TPCSF
HFTUJPOFT

EVEBT
P
historia clínica.
aclaraciones. No debe sustituir a la actividad clínica
presencial
Tabla 5-5. Recomendaciones para preservar la confidencialidad.
Redes sociales
Identificación
t
"TFHVSBS
RVF
MPT
QBDJFOUFT
FTUÈO
TVGJDJFOUFNFOUF

anonimizados en imágenes y datos personales
t
"TFHVSBS
MB
JEFOUJGJDBDJØO
EFM
QSPGFTJPOBM
RVF
USBTMBEB

información a las redes
Contenidos
t
%JTQPOFS
EF
BVUPSJ[BDJØO
FYQSFTB
EF
MPT
QBDJFOUFT
QBSB

la difusión de sus datos anonimizados
t
%JTQPOFS
EF
BVUPSJ[BDJØO
FYQSFTB
Z
QSFWJB
FYQMJDBDJØO
EF

objetivos en el caso de utilización de imágenes (fotos,
pruebas complementarias, etc.)
t
-B
MFHJUJNJEBE
EF
EBUPT
F
JNÈHFOFT
FO
SFEFT
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otorga el beneficio para el propio paciente o el interés
académico y docente; nunca el prestigio del médico o el
morbo del caso
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médicos
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sanitaria ofrecida en redes sociales
Finalmente señalar la propuesta de la Comisión Central
de Deontología de la OMC en su documento “E-consulta.
La Telemedicina en el acto médico. Consulta médica no pre-
sencial, e-consulta o consulta online”. Si bien fue redactada
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en plena pandemia COVID-19 sus planteamientos tienen
pleno vigor y sirven de orientación sobre el reto ético que
puede suponer para el futuro.
La asistencia médica ofrecida mediante las nuevas tecno-
logías o sistemas de comunicación se concibe como un ver-
dadero acto médico que completa la atención presencial del
médico.
En determinadas circunstancias, como la actual pande-
mia de COVID-19, la e-consulta puede sustituir y otras ve-
ces completar el acto médico presencial porque este no sea
posible, aconsejable o porque la ponderación del benefi-
cio/riesgo para el paciente así lo sugiera. En cualquier ca-
so, en situación de normalidad, la opción de usar la e-con-
sulta deberá ser consensuada con el paciente.
En cuanto a la introducción de los nuevos modelos de
consulta en la gestión médica y telemedicina, se deberán de-
sarrollar medidas necesarias para la instauración de siste-
mas médicos telemáticos que aseguren la privacidad de la
comunicación.
El uso de medios telemáticos es conforme a la Deontolo-
gía Médica, siempre que haya voluntad y consentimiento in-
formado del paciente, del que debe quedar constancia en la
Siempre ha de ser clara y fehaciente la identificación de
quienes intervienen en la comunicación.
El médico debe tener conocimiento directo de la historia
clínica del paciente o bien acceso a la misma en el momento
de la atención médica.
Se debe hacer constar por escrito en la historia clínica el
medio de teleasistencia por el que se ha realizado la consul-
ta, así como el tratamiento médico pautado y recomendacio-
nes dadas.
Bibliografía general
“E-consulta. La Telemedicina en el acto médico”. Comisión Central de
Deontología de la Organización Médica Colegial de España. Madrid
2020. Disponible en: https://www.comv.es/wp-content/uploads/2020/06/
informe_e-consulta_ccd_10_06_2020.pdf
Informe de gran actualidad sobre los retos éticos que impone la telemedici-
na en la actuación de los profesionales de la medicina.
Gracia D. Intimidad, confidencialidad y secreto. Guías de ética en la prácti-
ca médica. Fundación de Ciencias de la Salud. Madrid 2006. Disponible
en: https://www.cgcom.es/sites/default/files/guia_confidencialidad.pdf
Guía útil de fundamentación para entender conceptos de secreto médico y
confidencialidad. Numerosos casos clínicos de situaciones frecuentes
con aplicación del método deliberativo.
Muñoz-Fernández L, Díaz-García E, Gallego-Riestra S. The responsibilities
arising from the use of information and communication technologies in
health professional practice. An Pediatr (Barc). 2020;92:307.Disponible
en: https://analesdepediatria.org/en-the-responsibilities-arising-from-
use-articulo-S234128792030065X
Magnífica revisión sobre las consecuencias del uso de TIC en el mundo sa-
nitario. Refleja muy bien la situación del sistema sanitario español.
Bibliografía de interés
Antomas J, Huarte S. Confidencialidad e historia clínica. Consideraciones
éticas – legales. Anales Sis San Navarra. 2011;34;1. Disponible en:
https://scielo.isciii.es/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1137-
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co/files/assets/common/downloads/codigo%20de%20etica.pdf
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Ética y redes sociales. Manual de estilo para médicos y estudiantes de me-
dicina. Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos de España.
Madrid 2014. Disponible en: https://www.cgcom.es/sites/default/files/
u183/Manual%20Redes%20Sociales%20OMC.pdf
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personal. Disponible en: https://www.boe.es/eli/es/lo/1999/12/13/15/con
Ley Orgánica 3/2018, de 5 de diciembre, de Protección de Datos Personales
y garantía de los derechos digitales. Disponible en: https://www.boe.es/
eli/es/lo/2018/12/05/3
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tos personales y garantía de los derechos digitales, desde la perspectiva
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la-ley-proteccion-datos-personales-garantia-los-derechos-digitales-
desde-la-perspectiva-sanitaria
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