Nombre: Gabriela Lizeth García Briceño

Maestro: Mao Fidel

Libro: Es a ti a quien buscas.

Ensayo semana: 6

Autora: Valerie Bertschin.

Semestre: Cuarto

Grupo: E

Carrera: Lic. Ciencias de la comunicación

Lugar: Cd. Victoria Tamaulipas

Si llenamos nuestra vida de sonrisas sinceras, abrazos acogedores y besos cálidos,
también adquirimos seguridad y confianza, compartir momentos con las personas que
son importantes son recuerdos y experiencias que perduraran y nos acompañaran para
siempre, escuchar con entusiasmo sus proyectos, planes y sueños, así como ayudarlos
a realizarnos también nos dará un lugar en su corazón y mente.

Estar presente en la vida de quienes nos rodean nos hará sentir más completos y
felices otro vinculo que también es importante estar conscientes son los que
generamos con nuestro planeta tierra, no solo a través del cariño que le damos a
nuestros animales de compañía, a nuestras plantas y flores, sino que también al
cuidado y al respeto que tenemos por los entornos naturales y la biodiversidad del
planeta.

Puedes reciclar o cuidar la forma en la que generas basura de forma innecesaria y ya

estarás sumando en este aspecto si comenzamos a ver nuestro entorno como parte de
un gran todo, como varios caminos separados se unen, será más fácil comprender la
importancia de la generosidad y la compasión. Así podremos tomar decisiones y
acciones más simples y responsables a beneficio de todos.

Cultivando la empatía es muy posible que, ante una misma situación, las personas
tengan reacciones y expresen sus emociones de formas distintas a las nuestras. Sin
embargo, eso no hace que su sentir sea menos válido, pues todos tenemos nuestra
propia escala de valores y sistemas de creencias. Lo que es importante para ti, quizá
no lo sea para mí, entender a los demás es todo un arte es una capacidad sumamente
enriquecedora.

La empatía nos abre la oportunidad de aprender las experiencias de otros, gestionar el

conflicto, apoyar a la gente que queremos, construir relaciones más sólidas profundas y
enriquecedoras, además abrir nuestro corazón a la compasión y la generosidad, la
empatía es el grado de identificación que un sujeto tiene con el estado de ánimo de
otro a nivel mental y afectivo, podemos sentir profundamente el dolor de los padres al
perder un hijo, así como enternecernos con el nacimiento de una nueva vida.

Podemos sentirnos perturbados al presenciar un acto de violencia, pero también

emocionarnos hasta las lágrimas al ver que se hace justicia. Ese torbellino de
sensaciones que nos mueve internamente a causa del sentir ajeno lo podríamos
clasificar como empatía, todos podemos desarrollar esta habilidad una de las claves
para lograrlo es aprender a escuchar sin emitir juicios u opiniones. Sin involucrar
nuestro sistema de creencias. No es necesario que estemos de acuerdo con el otro, lo
primordial es la disposición de ver la situación o sentir de la forma en que el otro lo
comparte.

Las emociones ajenas son tan poderosas y reales como las nuestras. Si aprendemos a
escuchar dejaremos de poner nuestros sentimientos por encima y tomaremos posturas
más neutrales sobre las situaciones dándonos a nosotros mismos la oportunidad de ver
fuera de nuestra burbuja, la empatía es terreno fértil, el sentimiento de que hay algo
más allá de mi propia vida que también debe ser observado y atendido, y que no solo
tiene que ver con mi bienestar sino con el de los demás.

Y es que una vez que la empatía se hace presente en tu cotidianidad, el impulso de ser
generoso también se presenta como una necesidad, es una sociedad donde nos
enseñan desde pequeños a competir entre nosotros y a perseguir el éxito individual a
costa de los demás, pareciera que la generosidad la solidaridad son actos de rebeldía.

La empatía es uno de los sentimientos que se consideran cruciales porque nos llama a
querer mejorar nuestro entorno y hacer un mundo mejor en beneficio de todos, la
empatía es tierra fértil para que se gesten otros dos rasgos bondadosos del ser
humano: la generosidad y la solidaridad. Algunos la practican mediante pequeños actos
ya sea donando ropa o dando alimento a los hospicios .

No importan cuan pequeño pueda ser un gesto de generosidad, si es impulsado por la

empatía se convierte en algo muy poderoso. La emoción que nos mueve por procurar
el bienestar del otro es la misma que nos guía a comprender que necesitamos trabajar
a mayor escala en favor del mundo en el que vivimos. Esto incluye no solo a los seres
humanos, sino también a otras formas de vida que son parte importante del entorno
esto quiere decir a las especies tanto animal, vegetales y a los recursos naturales que
la tierra nos regala.