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SANTA ROSA DE VITERBO

1. Nacimiento: Nació en la ciudad de Viterbo, Italia el año 1234. Sus padres Juan y Catalina la bautizaron en la parroquia de
Santa María del Podio, con el nombre de Rosa.
2. Virtudes: Sus virtudes eran su santidad, la piedad, caridad, devoción, elocuencia, sabiduría, obediencia, amor por lo divino. A
los 3 años hizo votos de perpetua castidad, paciencia, mansedumbre, compasión y otros.
3. A los 3 años Resucita a su tía: Viendo Rosa tanta aflicción por el fallecimiento de la hermana de su madre, en momentos que
iban a sepultarla, tras una breve oración, levantó sus ojos a Dios, tocó el frío rostro de su tía llamándola por su nombre y ella, al
momento se reincorporó, haciéndose más tarde anunciadora de las virtudes de su sobrina.
4. Su retiro: Después de estos sucesos, la Santa Niña se dio cuenta de algo: que tantas alabanzas y aplausos para ella, ponían en
peligro sus virtudes y, previniendo su temor decidió por el retiro. VUna Una . Así lo quiso Dios, pues le tenía deparada mayores
tareas. Buscó la soledad del retiro en su misma casa al lado de sus padres; durante 3 años vivió en continuas oraciones, ayunos,
mortificaciones y penitencias; visitada solo por sus padres, su confesor el cura del Convento de Santa María del Podio y su tía
quien fuera resucitada.
5. Padece de grave enfermedad a los 9 años: Los rigores de su retiro penitente hicieron que cayera enferma durante un año.
Cuando la creían ya sin esperanzas de vida, la Santísima Virgen la visitó, la reconfortó y le ordenó que al día siguiente visitase las
Iglesias de San Francisco de Asís, la de Juan Bautista y de Santa María del Podio; vistiese el humilde hábito de San Francisco,
celebrase dichosos desposorios (casarse) con su dulcísimo Hijo y, saliese a las calles de Viterbo a exhortar a los pobladores a
enmendarse y arrepentirse de sus corrompidas costumbres; le dijo que no se acobarde de las persecuciones, que tendría su apoyo
en todo momento y dicho esto la bendijo y desapareció.
6. Viste el hábito de la Tercera Orden de San Francisco y celebra dichosos Desposorios con Cristo: Rosa que había estado
tan grave, se encuentra ahora en perfecta salud, debido a la protección de la Santísima Virgen María, cuyas órdenes comunicó a
su Madre. La vistieron con bonitas galas, adornos y joyas con el hábito que le indicó la virgen, el cual apareció debajo de su
almohada, bien doblado y a su medida. Así salió de su casa, seguida de la gente devota, visitó las Iglesias enunciadas, su confesor
ofició una misa en donde recibió en su corazón a Jesús, al final de la misma dio gracias a su Divino Esposo por haberla elegido.
Se despojó de todas las joyas y galas, ya de rodillas, su madrina le cortó su cabello y, con el crucifijo en la mano hizo los tres votos
simples de Obediencia, Pobreza y Castidad.
7. Su padre cambia de actitud: Su Padre, por obra del demonio muy furioso castigó a Rosa, por las frecuentes prédicas y
exposiciones en plazas y calles de Viterbo. Pero luego, en su Padre obró un cambio, que pidió perdón a su hija de 10 años de vida.
El Señor, atendiendo los amorosos deseos de Rosa, se le aparece en la Cruz vertiendo sangre y desfigurado su rostro, diciéndole
que el amor a los hombres lo llevó hacia la Cruz. Visión que le causó honda pena; más queriendo consolarla se le aparece
nuevamente, pero esta vez con el rostro dulce, benigno y hermoso. Rosa de 10 años, que jamás manejó libros, tiene ahora una
sabiduría incomparable, gracia de Dios con la que convertía masivamente a la fe a muchas personas pecadoras e incrédulas.
8. Su destierro: Las masivas conversiones de herejes y cismáticos (personas que se separaron de la Iglesia y buscaron dividirla)
en Viterbo eran frecuentes y numerosas. El Gobernador del lugar cautelosamente arrestó a la Niña y a sus padres, temeroso de que
se repitiese la sublevación anterior por parte de los creyentes. Imponiéndose ante la Niña y sus padres les dijo que cambiaran su
actitud y que dejara de evangelizar, pero al no conseguirlo, estuvo a punto de ordenar su ejecución, mas, sus acusadores disuadieron
al tirano proponiéndole ocultarla. De todas maneras, se ordenó su prisión, dictaminando finalmente el Juez su destierro (arrojarla
fuera y lejos de su tierra) y la confiscación de bienes. Fue así, que una tarde helada de invierno fue sacada con sus padres en
dirección de la ciudad de Soriano; la Santa Niña disimulando su dolor por no afligir más a sus ancianos padres, pues consolándolos
les decía: "Ahora sí se conoce cuanto Dios nos ama, porque estas penas son momentáneas, en cambio el premio es eterno",
palabras que disminuyeron en parte sus sufrimientos y de no ser por la protección Divina, habrían muerto de frío aquella noche en
medio de la tempestad, porque iban escasos de abrigo y la Niña descalza. Así, tras una larga peregrinación llegaron a la ciudad de
Soriano donde tuvieron un feliz recibimiento.
9. Triunfos en la ciudad de Soriano: Esta ciudad estaba plagada de herejes y cismáticos, Rosa llevando las maravillas de su
conocimiento acerca del Evangelio logró convertirlos a la fe. En esta ciudad anunció el fallecimiento de Federico II, cruel
Emperador perseguidor de la Santa Iglesia y desobediente al Sumo Pontífice (el Papa); en efecto, días más tarde, en el año 1250,
murió ahogado con una almohada por manos de su propio hijo poseído por la codicia y la ambición de ocupar el trono. Este anuncio
maravilló a toda la ciudad.
10. Rosa predica en la ciudad de Vitorchiano: De Soriano prosigue a Vitorchiano. Aquí los pocos católicos que había, estaban
atemorizados y oprimidos por una hechicera llamada Maliarda, instrumento del demonio, a quien Rosa opacó con sus sabias y
elocuentes prédicas sobre el Evangelio. Con sólo sus 13 años de edad alcanzó gran número de conversiones; pero la finalidad de
Rosa era convertir a la hechicera, antes que despreciarla por el mal que había ocasionado en este pueblo.
11. Rosa convierte a Maliarda: Como decíamos, Rosa quería ganar para Dios el alma de la hechicera Maliarda y dejar burlada
la astucia del demonio. Así que tanto a católicos como a cismáticos les pareció necesario una contienda de Rosa contra Maliarda
en el Templo Principal de la ciudad; pues, luego de unas palabras nada convincentes de Maliarda, Rosa contestó que ella predicaba
las enseñanzas del Salvador escritas en el Sagrado Evangelio y que Dios la había puesto a vista de todos para alumbrar tanta
ceguera en ellos. Al día siguiente entraría en una hoguera para que todo el que viere las llamas y luces dé testimonio de la verdad;
la Santa Niña, luego de orar y encomendarse, subió y entró a la hoguera encendida, saliendo luego de ella sin ningún daño. Luego
de este hecho, la bruja se convirtió y los habitantes se sujetaron a la obediencia del Sumo Pontífice y la Santa Iglesia.
12. Rosa cura a una niña: Rosa cura a una niña cuyo nombre era Delicada, quien sufría de una ceguera congénita (natural),
imponiendo sus manos, toca los párpados con sus dedos y pronuncia en voz alta: “Delicada, en nombre del Dulcísimo Jesús, te
doy la vista” y luego de hacer la señal de la Cruz, se abrieron sus ojos, como dos bellas estrellas. Este milagro en presencia de
tanta gente fue una noticia muy sonada.
13. Rosa solicita vestir el hábito de las Damianitas y se la niegan: A Rosa le pareció que ya convenía tomar otro modo de vida
más apropiado a su vocación. Al haber observado notoria mejoría en el estado espiritual de la ciudad de Viterbo, con menos herejes
y cismáticos, decidió nuevamente estar encerrada y amar a Dios de esa manera pero los habitantes le pedían que saliera de allí para
ver sus milagros y prodigios, así que Rosa decidió pedir el hábito de las Damianitas en el Convento de Santa María de las Rosas,
para estar encerrada y alabar a su Señor ante tanto acoso de los pobladores, pero su petición fue denegada por segunda vez; ya no
con la excusa de su minoría de edad, sino por falta de vacancia (no había lugar para ella). Pero conoció luego que la causa de no
ser admitida era otra y respondió: "No me admiten viva, pero tiempo vendrá en que me admitirán muerta", lo cual se cumplió
tal y conforme lo había anunciado. Resolvió entonces no predicar más y vivir en soledad, sepultando así las voces de su fama.
14. Su muerte: Rosa, envuelta en su amada soledad se prepara para morir. Avisada y revelada por una luz del Cielo, días antes,
previno a sus padres con gran discreción, consolándolos por su pronta muerte. Su acentuada debilidad, producto de sus fervorosas
penitencias, dio lugar a su fallecimiento el 06 de marzo de 1252, antes que cumpliera sus 18 años. Su cadáver quedó hermosísimo
como si sólo durmiese. Su confesor, que la había asistido con la Santa Unción, dijo que debían darle sepultura en el Templo de
Santa María del Podio, su parroquia.
15. Día de su conmemoración y celebración: El Papa Alejandro IV hizo colocar su cuerpo en la iglesia de Santa María de las
Rosas (convento de Santa Clara, donde había sido rechazada cuando estaba viva) el 4 de septiembre de 1258; por ser esta la fecha
de la solemne traslación de los restos de la Santa, se designó este día como el día de su conmemoración o celebración en la Iglesia.
Su cuerpo se conserva incorrupto a más de siete siglos de su muerte. Muchos son los ciudadanos y peregrinos de otras partes del
mundo que la veneran con especial devoción.

Canonización: Santa Rosa de Viterbo fue canonizada por el Papa Calixto III en el año 1457.

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