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Bienes comunes en la práctica: Experiencia en el parque Saval y los

habitantes de Valdivia.

Estudiantes: Pablo Figueroa Schöbitz


Matías Ramos Quinteros

“Las ciencias que aspiran a interpretar y explicar la acción y el


pensamiento humano deben comenzar con una descripción de las
estructuras fundamentales de lo precientífico, la realidad que
parece evidente para los hombres que permanecen en la actitud
natural. Esta realidad es el mundo de la vida cotidiana. Es el
ámbito de la realidad, en el cual el hombre participa
continuamente, en formas que son al mismo tiempo inevitables y
pauteadas. El mundo de la vida cotidiana es la región de la
realidad en que el hombre puede intervenir y que puede
modificar mientras opera en ella mediante su organismo
animado. (Schutz y Luckmann, 2003, p. 25).”
Cuando hablamos de bienes comunes (en inglés, commons) hacemos referencia a la
idea de recursos y bienes limitados gestionados a través de una acción colectiva. Los
bienes comunes suponen un cumplimiento de reglas acordadas de los individuos para
mantener en funcionamiento el bien común (Ostrom, 2015). Los individuos insertos en
esta red institucional hacen operativo al recurso de uso común; esto es, la idea de que el
bien común no se agote. La teoría tradicional, apelando a la teoría de elección racional,
asocia la idea de compartir la extracción de recursos comunes a un interés propio
(Olson, 1971), donde los individuos buscan la no-explotación del bien común (como la
recolección de bancos de peces marinos) a una idea de maximización de utilidad. En el
caso de que el bien común se encontrase con el dilema de la tragedia (esto es, la
hipótesis de que el bien común se agote debido al mal manejo de éste), lo ideal sería o
que se expropiase para que el bien común sea manejado por el estado o, en su defecto,
privatizarlo para que el bien común sea manejado por una firma.
Sin embargo, esta idea ha sido profundamente cuestionada a través del paso del tiempo.
La crítica más conocida son los trabajos de campo y experimentales realizado por Elinor
Ostrom, donde descubre que un abanico amplio de instituciones no-estatales y no-
privadas que han trabajado por años (y por siglos) en conjunto sin la idea de la
maximización de utilidades. Los recursos de uso común estudiados por Ostrom (2000)
tienen como base la autoorganización y la autogestión, marcando una “tercera vía” para
la tragedia de los bienes comunes. En este plano, Antonio Negri y Michael Hardt aluden
al concepto de ecología del común, “una ecología centrada asimismo en una dinámica
de interdependencia, cuidado y transformación mutua (2011, p.183)”.
Marco Teórico
Los espacios ecológicos urbanos juegan un papel importante para el desarrollo de las
ciudades. Estos bienes comunitarios, conocidos específicamente como Reservas
Naturales Urbanas (RNU) son responsables de ser centros de igualdad, convivencia y
del compartir un espíritu ciudadano en común. Puede existir como un centro, con la
misma función posible que se encontraba en el ágora griega.
Diferentes estudios han encontrado una relación importante entre las personas y los
parques. Martinez et al (2020) señalan el uso del parque urbano con un trasfondo
socioespacial muy significante, teniendo una dimensión simbólica y una narrativa
colectiva; que alienta la idea de encuentro entre iguales y de identidad, donde el
trasfondo va más allá de una experiencia de felicidad. Lo que hace recordar al concepto
de Lebenswelt presentado en la obra de Alfred Schutz y Thomas Luckmann. El
Lebenswelt es la idea del mundo común del individuo, construido por las experiencias y
la acción social intersubjetivo, donde fluyen diversas formas particulares de
comprensión. La fenomenología, por tanto, es la herramienta útil para la comprensión
de los fenómenos sociales que existen en un espacio común como son las reservas
naturales urbanas.
En el caso de nuestra investigación, nos centramos en analizar las relaciones (y posibles
dependencias) encontradas con la población local de Valdivia con el espacio que supone
el parque Saval. El parque Saval (sociedad agrícola y Ganadera de Valdivia) funciona
como un lugar de encuentro para los habitantes de la zona, donde se realizan diferentes
actividades, sean deportivas o de entretención en general. Aquí se encuentra una vasta
reserva ecológica en el plano urbano valdiviano.
Objetivos de la investigación
Objetivo General
Analizar las relaciones y experiencias de los ciudadanos con el cuidado del parque
saval, enfocándonos en la idea de que existe una relación más allá de la recreación,
tratando de encontrar “experiencia vital” entre los individuos y el recinto.
Bibliografía
Negri, A., Hardt, M. (2011). Commonwealth: El proyecto de una revolución del común.
Madrid: Ediciones Akal, 2011
Olson, Mancur. (1971). La lógica de la acción colectiva Bienes Públicos y la Teoría de
Grupos: Limusa Noriega Editores.
Ostrom, Elinor. (2015). Comprender la Diversidad Institucional. Ciudad de México:
Fondo Económico de Cultura.
Ostrom, Elinor. (2000). El Gobierno de los Bienes Comunes: La evolución de las
instituciones de acción colectiva. Ciudad de México: Fondo Económico de Cultura.
Shutz, A. Luckmann, T. (2003). Las Estructuras del Mundo de la Vida. Buenos Aires:
Amorrortu.

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