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Hace uno días, mientras impartía un curso presencial en investigación educativa.

Cuando una señorita al terminar la clase se acercó para preguntarme cómo había
estado yo todos estos años, su pregunta me sorprendió al mismo tiempo que aclaró
mis dudas acerca de la familiaridad que me representaba su cara. He tenido a los
largo de mi carrera de casi 20 años cientos de estudiantes y ella era una de las
primeras que atendí en una secundaria de una comunidad de alta marginación, hace
11 años. Dijo nunca haber olvidado la nota que dejé en una de sus tareas, donde
confiaba en su capacidad y agradecía el esfuerzo que había puesto en esa tarea. Ese
tipo de notas es sólo una manera técnica de incentivar a mis alumnos que adopté de
una maestra que tuve el bachillerato, sin embargo, la joven nunca lo olvidó y me dijo
que ese tipo de cosas la motivó a esforzarse para poder estudiar una carrera a pesar
de las adversidades económicas y de infraestructura que padecía su familia.
«Casi todo se levanta o se viene abajo a causa del liderazgo» y es que realmente no
somos conscientes la mayoría de las veces como una serie de acciones y las palabras
pueden lograr sacar los mejor de las personas.
Para despojar al liderazgo de ciertos mitos que se han construido a su alrededor, y
construir un concepto que reúna las características más idóneas según las más
actualizadas teorías, nuestra concepción y experiencia de vida.
Un líder existe siempre y cuando tenga seguidores. El líder por medio de la
enseñanza y el ejemplo genera un ambiente propicio para que quienes lo siguen
emprendan el camino de la mejora personal y común, pero ¿Cómo podemos lograr
eso?
Será de vital importancia para la consecución de los objetivos del módulo, estar
atentos a lo que nos dicen quienes han estudiado a profundidad este tema y poder
asociarlos a nuestros contextos inmediatos. Te animamos a dejar de ver el liderazgo
como un don de “gente extraordinaria”, y te des la oportunidad de pensar, imaginar
y reflexionar cuáles son las posibilidades reales que tú misma y tú mismo tienes para
desarrollar esta habilidad y pueda ser usada sabia y éticamente en el logro de tus
metas.
La manera más sencilla de comprobar si una persona tiene influencia, y por tanto ser
capaz de desarrollar un liderazgo funcional, es logrando que le sigan de forma
voluntaria sin necesidad de esperar nada a cambio. Apuesto que esto lo has
experimentado muchas veces en tu vida, tanto como líder que como seguidor.

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