Resumen 207-214

Temple por inducción

En años recientes la corriente eléctrica inducida ha sido aceptada por la industria. Las
principales aplicaciones de este método de calentamiento incluyen la fusión de metales,
temple y otras operaciones de tratamiento térmico, precalentamiento de metales para trabajo
en caliente y calentamiento para sinterización, soldadura y operaciones similares. Para estos
calentamientos se utilizan corrientes de alta frecuencia obtenida por generadores. El
calentamiento por inducción ha probado ser satisfactorio para muchas operaciones de
endurecimiento superficial, como las que se requieren en cigüeñales y otras piezas con
superficies de desgaste similares. La dureza obtenida en el temple por la inducción es la misma
que se obtiene en el tratamiento convencional y depende del contenido de carbono. Una
importante ventaja de este método es su rapidez de acción, ya que requiere solo algunos
segundos para calentar un acero a una profundidad de 3.2mm. El tiempo efectivo dependerá
principalmente del temple requerida. Aunque el costo del equipo es alto, se compensa por las
ventajas del proceso entre las que se incluyen operación rápida, ausencia de oxidación
operación limpia, distorsión pequeña, no intervención manual en piezas calientes y bajo costo
de tratamiento.
Temple por flama
Como el proceso de temple por inducción está basado en un rápido calentamiento y un
temple en la superficie de desgaste. La profundidad de la dureza de la capa depende
completamente de la templabilidad del material por tratar, ya que ningún otro elemento se
agregará durante el proceso. El calentamiento por oxiaotetileno, la que se aplica por tiempo
suficiente para calentar la superficie arriba de la zona de temperatura critica del acero. En el
cabezal de la flama están integradas las conexiones para el agua que enfrían la superficie
rociándola tan pronto se alcanza la temperatura prevista. Se emplean varios métodos para
este proceso. En el método estacionario de temple local, tanto la antorcha como la pieza son
estacionarios y el efecto el local. En el temple progresivo, la flama y la pieza se mueven una
con respecto a la otra. Según avanza la flama, la pieza queda inmediatamente templada
delante de la flama. La pieza algunas veces gira, de tal forma que se dirigían hacia ella una o
más flamas. Tan pronto como la pieza alcanza la temperatura adecuada, es templada mientras
gira. Este método es más usado en piezas pequeñas cuando el tiempo de calentamiento es
corto. Con este proceso se obtienen superficies duras con un núcleo dúctil.
Procesos de Endurecimiento por Precipitación
A menudo llamado endurecimiento por envejecimiento, puede lograrse solamente con
aquellas aleaciones en las cuales hay una solubilidad decreciente de un material en otro,
según se reduzca la temperatura. Tal situación se ilustra en la figura 7.20 donde se muestra
una parte amplificada de un diagrama de fase aluminio cobre. Si la aleación se enfría
lentamente desde la temperatura en A, el material Al2 Cu se precipita fuera de la solución
sólida, ya que la solubilidad del cobre decrece grandemente a baja temperatura . Una aleación
en esta condición no reacciona a un tratamiento de temple. Para endurecer la aleación de la
figura 7.20, son necesarios dos tratamientos, en primer lugar, la aleación debe calentarse
hasta A arriba de la línea CD de solubilidad, para permitir que los componentes formen pares
hasta que se obtenga una solución homogénea. Se enfría entonces rápidamente hasta la
temperatura ambiente Figuradejando
7. 20 la aleación en
un estado sobresaturado e inestable. En este
estado la aleación es suave, pero por ser
inestable los componentes en exceso se
precipitarán fuera de la solución con el
transcurso del tiempo. En este proceso si se
completa a la temperatura ambiente se conoce
como envejecimiento natural. Las partículas
que se precipitan de la solución sólida, se
acomodan alrededor de los granos y los planos
de deslizamiento, produciendo una acción de
cuña que reduce el deslizamiento entre los
cristales. La dureza resultante es influida por el
tamaño de las partículas precipitadas.
El envejecimiento artificial difiere ligeramente
en que se utiliza un tratamiento térmico adicional. En este caso la aleación se calienta a una
temperatura elevada, la que acelera la precipitación de algunos componentes de la solución
sobresaturada. Según se incrementa la temperatura son más rápidas la precipitación y el
aumento de dureza. Se alcanza finalmente una condición de equilibrio, la que reduce
resistencia debido al gran tamaño de los cristales precipitados. Esta condición, que debe
evitarse se conoce como sobre añejamiento. Numerosas aleaciones son de una composición
que puede ser endurecida por envejecimiento, siendo el único requisito que la solubilidad
decrezca con la reducción de la temperatura, permitiendo la formación de una solución solida
sobresaturada. En este grupo de metales, los metales no ferrosos, que son los más
importantes incluyen la mayoría de las aleaciones de aluminio, cobre, níquel y magnesio.