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INTRODUCCION………………………….
CAPITULO I
1.2.2.1.1.- ATMÓSFERA:
1.2.2.1.2.- HIDROSFERA:
1.2.2.1.3.- LITOSFERA:
CONCLUCION……………………………….
BIBLIOGRAFIA………………………………….
ANEXOS………………………………………
INTRODUCCION
Los ecosistemas que forman a nuestro mundo se encuentran ligados a una serie de
fenómenos que se les conoce como “ciclos ecológicos” los cuales pueden ser
definidos como: una serie de eventos que se repiten con cierta frecuencia en un
periodo de tiempo determinado y que son de gran relevancia para todos los seres
vivientes.
Un ciclo geológico se refiere al origen y variación del material que constituye la corteza
terrestre. La Tierra sufre continuamente modificaciones debido a presiones
provenientes del magma del planeta y que se expresan a través de los movimientos
masivos de la tierra, los cuales originan la separación de los continentes y de los
fondos oceánicos, formación de montañas, nacimiento de volcanes y temblores de
tierra.
Se refiere básicamente a los fenómenos que guardan una estrecha relación con los
movimientos periódicos de la Tierra y que le han servido al hombre para poder medir
el tiempo.
• El día y la noche. Producto del movimiento en la mitad del globo que ve el Sol es
día, mientras la otra mitad está de noche. En la medida que se mueve, va avanzando
el día o la noche según corresponda. Esto determina el ritmo de muchos fenómenos a
los que responden las plantas, los animales y también los seres humanos, como por
ejemplo, los períodos de descanso, trabajo o ejercicio y alimentación.
La llegada de las estaciones está determinada por los solsticios y los equinoccios.
Cuando es el polo norte el que se inclina hacia el Sol (de marzo a septiembre), los
rayos solares llegan con intensidad al Hemisferio Norte, lo que determina la sucesión
de la primavera y el verano, mientras en el Hemisferio Sur están en otoño y en
invierno, el polo sur está en oscuridad. La situación se invierte cuando es el Hemisferio
Sur el que se inclina hacia el Sol, de septiembre a marzo.
Los climas de la zona intertropical son isotermos, es decir, que presentan escasas
variaciones de temperaturas a lo largo del año (de 2º a 5º C). Como resulta lógico, si
durante las 12 horas de sol (aproximadamente) las temperaturas pueden llegar a subir
bastante, a lo largo de la noche intertropical da origen a un notable descenso de las
temperaturas por irradiación. Dentro de la zona intertropical, es la lluviosidad y no la
temperatura, el elemento climático que presenta mayor variabilidad anual. De hecho,
los climas isotermos no presentan verdaderas estaciones térmicas a lo largo del año,
la característica climática más importante de la zona intertropical es su extraordinaria
estabilidad a lo largo del tiempo, como lo demuestra la presencia en la actualidad de
helechos arborescentes, plantas muy primitivas que no han sufrido cambios evolutivos
importantes desde la Era Paleozoica.
La luna
La luna es el único satélite natural de la Tierra y el único cuerpo del Sistema Solar que
podemos ver en detalle a simple vista o con instrumentos sencillos.
La Luna refleja la luz solar de manera diferente según donde se encuentre. Gira
alrededor de la Tierra y sobre su eje en el mismo periodo: 27 días, 7 horas y 43
minutos. Esto hace que nos muestre siempre la misma cara.
Fases lunares
Según la disposición de la Luna, la Tierra y el Sol, se ve iluminada una
mayor o menor porción de la cara visible de la luna.
La Luna Nueva o novilunio es cuando la Luna está entre la Tierra y el Sol y
por lo tanto no la vemos.
Mareas Solares: la fuerza del sol para crear mareas es un 46% menor que la Luna.
Durante los períodos de Luna nueva y llena, cuando el Sol, la Luna y la Tierra están
alineados, las ondas solar y lunar coinciden. También conocido como mareas de
primavera.
Mareas Lunares: Por acción de la fuerza gravitatoria tierra y luna forman un sistema
que gira alrededor de un centro de rotación.
Mareas muertas: Son mareas menos intensas que se producen cuando la Luna y el
Sol forman un ángulo recto con la Tierra, porque las atracciones de ambos, al ser en
direcciones opuestas, se restan entre sí en vez de sumarse. Desde luego, a pesar de
su menor tamaño, la atracción de la Luna es superior por encontrarse más cerca.
Estas mareas se producen en las fases de Cuarto Creciente y Cuarto Menguante.
Un ciclo geológico se refiere al origen y variación del material que constituye la corteza
terrestre.
1.2.2.1.1.- ATMÓSFERA:
Es la cubierta gaseosa que rodea el cuerpo sólido del planeta. Tiene un grosor de más
de 1.100 Km., aunque la mitad de su masa se concentra en los 5,6 km más bajos.
Constituida por 79% nitrógeno, 20% oxígeno y 0.03% de dióxido de carbono. Existen
otros gases en concentraciones más pequeñas como helio, metano, criptón, xenón,
óxido nitroso y ozono.
Capas de la atmosfera:
1.2.2.1.2.- HIDROSFERA:
Formación: Hace unos 4600 millones de años, las altas temperaturas hacían que toda
el agua estuviera en forma de vapor. Al enfriarse por debajo del punto de ebullición del
agua, gigantescas precipitaciones llenaron de agua las partes más bajas de la
superficie formando los océanos. Se calcula que unas decenas o cientos de millones
de años después de su formación ya existirían los océanos.
Sales minerales. En las aguas dulces las sales minerales más abundantes
son los carbonatos, los sulfatos y los cloruros. Los cationes de mayor
importancia son el calcio (64%), el magnesio (17%), el sodio (16%) y el
potasio (3%).
1.2.2.1.3.- LITOSFERA:
Compuesta sobre todo por la corteza terrestre, se extiende hasta los 100 km de
profundidad. Las rocas de la litosfera tienen una densidad media de 2,7 veces la del
agua y se componen casi por completo de 11 elementos, que juntos forman el 99,5%
de su masa. El más abundante es el oxígeno, seguido por el silicio, aluminio, hierro,
calcio, sodio, potasio, magnesio, titanio, hidrógeno y fósforo. Además, aparecen otros
11 elementos en cantidades menores del 0,1: carbono, manganeso, azufre, bario,
cloro, cromo, flúor, circonio, níquel, estroncio y vanadio. Los elementos están
presentes en la litosfera casi por completo en forma de compuestos más que en su
estado libre.
Manto: Se extiende desde la base de la corteza hasta una profundidad de unos 2.900
km. Excepto en la zona conocida como astenosfera, es sólido y su densidad, que
aumenta con la profundidad, oscila de 3,3 a 6. El manto superior se compone de hierro
y silicatos de magnesio como el olivino y el inferior de una mezcla de óxidos de
magnesio, hierro y silicio.
Núcleo: Tiene una capa exterior de unos 2.225 km de grosor con una densidad
relativa media de 10. Esta capa es probablemente rígida y su superficie exterior tiene
depresiones y picos. Por el contrario, el núcleo interior, cuyo radio es de unos 1.275
km, es sólido. Ambas capas del núcleo se componen de hierro con un pequeño
porcentaje de níquel y de otros elementos. Las temperaturas del núcleo interior
pueden llegar a los 6.650 °C y su densidad media es de 13.
El núcleo interno irradia continuamente un calor intenso hacia afuera, a través de las
diversas capas concéntricas que forman la porción sólida del planeta. La fuente de
este calor es la energía liberada por la desintegración del uranio y otros elementos
radiactivos. Las corrientes de convección dentro del manto trasladan la mayor parte de
la energía térmica de la Tierra hasta la superficie.
Los elementos circulan por medio del aire, el mar y entre los seres vivos siguiendo
rutas complejas.
Los reductores del tipo de los hongos y las bacterias, presentan el sistema típico de
nutrición por absorción, de tal forma degradan la materia orgánica y dejan libre en el
ambiente el material ya mineralizado.
Existen sistemas biológicos, como los fijadores de nitrógeno, que ayudan a regenerar
la capacidad nutritiva del suelo o del agua, por la conversión química del N2
atmosférico, inerte totalmente en nitrógeno amoniacal, el cual así está disponible para
los organismos fotosintéticos.
A los ciclos biogeoquímicos como el del fósforo, que solo involucra a la estructura de
un ecosistema, se la llama local.
A los ciclos gaseosos se les llama globales, ya que al presentarse una fase gaseosa
establece un intercambio dinamito entre el ecosistema y la atmosfera.
1.2.3.1.- TIPOS DE CICLOS BIOGEOQUÍMICOS
El carbono es esencial para construir las moléculas orgánicas que caracterizan a los
organismos vivos.
La principal fuente de carbono para los productores es el CO2 del aire atmosférico, que
también se halla disuelto en lagos y océanos.
Además, hay carbono en las rocas carbonatadas (calizas, coral) y en los combustibles
fósiles (carbón mineral y petróleo).
Durante la fotosíntesis, las plantas verdes toman CO2 del ambiente abiótico e
incorporan el carbono en los carbohidratos que sintetizan. Parte de estos
carbohidratos son metabolizados por los mismos productores en su respiración,
devolviendo carbono al medio circundante en forma de CO2. Otra parte de esos
carbohidratos son transferidos a los animales y demás heterótrofos, que también
liberan CO2 al respirar.
El ciclo completo del carbono requiere que los descomponedores metabolicen los
compuestos orgánicos de los organismos muertos y agreguen nuevas cantidades de
CO2 al ambiente. A todo lo anterior debe sumarse la enorme cantidad de CO2 que
llega a la atmósfera como producto de la actividad volcánica, la erosión de las rocas
carbonatadas y, sobre todo, la quema de combustibles fósiles por el hombre.
El oxígeno es el elemento químico más abundante en los seres vivos. Forma parte
del agua y de todo tipo de moléculas orgánicas. Como molécula, en forma de O2, su
presencia en la atmósfera se debe a la actividad fotosintética de primitivos
organismos. Al principio debió ser una sustancia tóxica para la vida, por su gran
poder oxidante. Todavía ahora, una atmósfera de oxígeno puro produce daños
irreparables en las células. Pero el metabolismo celular se adaptó a usar la molécula
de oxígeno como agente oxidante de los alimentos abriendo así una nueva vía de
obtención de energía mucho más eficiente que la anaeróbica.
La reserva fundamental de oxígeno utilizable por los seres vivos está en la atmósfera.
Su ciclo está estrechamente vinculado al del carbono pues el proceso por el que el
C es asimilado por las plantas (fotosíntesis), supone también devolución del oxígeno
a la atmósfera, mientras que el proceso de respiración ocasiona el efecto
contrario.
Otra parte del ciclo natural del oxígeno que tiene un notable interés indirecto para los
seres vivos de la superficie de la Tierra es su conversión en ozono. Las
moléculas de O2, activadas por las radiaciones muy energéticas de onda corta, se
rompen en átomos libres de oxígeno que reaccionan con otras moléculas de O2,
formando O3 (ozono). Esta reacción es reversible, de forma que el ozono,
absorbiendo radiaciones ultravioletas vuelve a convertirse en O2.
Fijación. Puede ser atmosférica, realizada por la influencia de los rayos descargas
eléctricas que transforman el N2 atmosférico inerte en formas de tipo nitritos y nitratos,
o ambos. La fijación también puede ser industrial, mediante el proceso de Haber-
Bosch, el N2 de la atmosfera puede transformarse en amoniaco. Otro es la biológica,
los organismos involucrados son los del reino mónera, bacterias y actinomicetos.
Existen bacterias de vida libre, aerobias y anaerobias. Rhizobium, se asocian con
leguminosas.
La mayoría de las plantas obtienen el oxígeno que necesitan para crecer de los suelos
o del agua donde viven. Los animales obtienen el nitrógeno que necesitan
alimentándose de plantas u animales que contienen nitrógeno. Cuando los organismos
mueren, sus cuerpos se descomponen y hacen llegar nitrógeno hacia los suelos o
tierra, o hacia el agua de los océanos. Las bacterias alteran el nitrógeno para que
adquiera una forma que las plantas pueden usar.
Ciertas acciones de los humanos están causando cambios en el ciclo del nitrógeno y
en la cantidad de nitrógeno que es almacenado en la tierra, agua, aire y organismos.
El uso de fertilizantes ricos en nitrógeno puede agregar demasiado nitrógeno a vías
acuáticas cercanas, a medida que los fertilizantes caen en corrientes y pozos. Los
restos asociados con la ganadería también agregan gran cantidad de nitrógeno a la
tierra y al agua. Los crecientes niveles de nitrato hacen que las plantas crezcan muy
rápido hasta que agotan los suministros y mueren. El número de animales que comen
plantas aumentará cuando aumente el suministro de plantas y se quedan sin alimento
cuando las plantas mueren, por lo que destruirá la cadena trafica le ecosistema.
Como veremos su mal uso en la zona rural también produce, a veces, problemas de
contaminación en las aguas: la eutrofización que son dañinas para la salud si se
consumen. La sobrecarga del ciclo del nitrógeno en el medio urbano puede generar
lluvia ácida.
El agua es el solvente universal para casi todos los materiales]; transporta la mayor
parte de nutrientes necesarios para los seres vivos como lleva los nutrientes que
requiere un vegetal fotosintético son transportados desde el suelo en un caudal
acuoso. El 90% de cualquier célula está construida por materiales acuosos.
Las propiedades específicas del agua hacen ser una sustancia muy especial en la
naturaleza.
La gran cantidad de calorías requeridas para vaporizar un gr. de agua (540 cal)
garantiza la temperatura de los organismos homotérmicos.
El agua presenta su mayor densidad a los 4ºC; como el hielo se forma a los 0ºC es
menos denso que el agua líquida y, por lo tanto, flota en ella; si esto no fuera así los
océanos se congelarían de abajo hacia arriba y el hielo flotaría sobre su superficie
como sucede en realidad.
Casi el 100% del agua corresponde a la de mar, ya que sólo 0.75% es agua dulce y es
2.25% es el agua congelada de los glaciares; por tanto, el agua salina representa 97%
del total. En la atmosfera como vapor sólo existe el 0.001% de agua.
Al año se evaporan 500.000 km3 de agua, lo que da un valor medio de 980 l/m2 o
milímetros. Es decir, es como si una capa de 980 mm (casi un metro) de agua que
recubriera toda la Tierra se evaporara durante el año. Como en la atmósfera
permanecen constantemente sólo 12.000 km3, quiere decir que la misma cantidad de
500.000 km3 que se ha evaporado vuelve a caer en forma de precipitaciones en el
mismo periodo. Aunque la media, tanto de la evaporación como de la precipitación sea
de 980 mm, la distribución es irregular, especialmente en los continentes. En los
desiertos llueve menos de 200 mm y en algunas zonas de montaña llueve 6.000 mm o
más.
Ríos
Los ríos nacen en manantiales en los que surgen a la superficie aguas subterráneas o
en lugares en los que se funden los glaciares. A partir de su nacimiento siguen la
pendiente del terreno hasta llegar al mar.
Un río con sus afluentes drena una zona que se conoce como cuenca hidrográfica. La
separación entre cuencas es la divisoria de aguas.
Lagos
Los lagos se forman cuando el agua recogida en una zona no sale directamente al mar
sino que pasa o acaba en una depresión. En muchos casos del lago sale un río que va
al mar, pero en otros las aguas se evaporan a la atmósfera directamente desde el
lago.
Aguas subterráneas
Parte del agua que cae resbala sobre el terreno hasta llegar a ríos y lagos (agua de
escorrentía), pero otra parte se infiltra, bien directamente cuando llueve, o desde los
ríos y lagos. Desde el suelo parte del agua sale por evapotranspiración, o por
manantiales o alimenta ríos y lagos a través de su lecho.
Glaciares
Los glaciares son grandes masas de hielo que se forman cuando la nieve que cae va
acumulándose de un año a otro, sin que le dé tiempo para fundirse. Por la presión la
nieve va perdiendo el aire y acaba formándose primero hielo lechoso y luego hielo
azul, tan transparente como el cristal.
Océanos y mares
Llamamos océanos a las grandes masas de agua que separan los continentes. Son
cinco. El más extenso es el Pacífico, que con sus 180 millones de km2 supera en
extensión al conjunto de los continentes. Los otros cuatro son el Atlántico, el índico, el
Antártico o Austral y el ártico.
Dentro de los océanos se llama mares a algunas zonas cercanas a las costas,
situados casi siempre sobre la plataforma continental, por tanto, con profundidades
pequeñas.
· Las mareas negras, ocasionadas por el vertido de petróleo crudo sobre el mar,
principalmente como consecuencia de accidentes de los grandes buques petroleros o
como resultado de limpieza.
Contaminantes físicos.
· La contaminación del agua del mar: Los mares y océanos, al disponer de un gran
volumen de agua, poseen una capacidad de autodepuración mucho mayor que la de
los ríos, lagos y aguas subterráneas.
Entre los efectos más destacados está la muerte de organismos marinos por
hundimiento al perder la flotabilidad, o pérdida de calor al alterarse el aislamiento
térmico por la impregnación de crudo en las plumas y pelos.
Para combatir las mareas negras podemos aplicar medidas de carácter preventivo
como la elaboración de reglamentaciones y leyes; exigencia para el transporte de
crudo y sustancias peligrosas, de buques con doble casco; y medidas correctoras que
permitan eliminar el crudo y paliar sus efectos.
Influencia humana en el ciclo hidrológico: El agua disponible destinada a cubrir
necesidades del ser humano se localiza principalmente en los continentes en estado
líquido. Las acciones más destacadas en la actualidad son:
· La recolección del rocío mediante rampas y canales que van a parar a depósitos
subterráneos.
· La cobertura de presas para evitar las grandes pérdidas de agua por evaporación.
· La formación de lluvia artificial a través de estructuras como el “acelerador
hidrológico” o el empleo de aviones que “siembran las nubes” con sales de plata para
originar núcleos que permitan que el vapor del agua se condense sobre ellos y se
genere lluvia.
La lluvia ácida se forma cuando la humedad en el aire se combina con los óxidos de
nitrógeno y el dióxido de azufre emitidos por fábricas, centrales eléctricas y vehículos
que queman carbón o productos derivados del petróleo. En interacción con el vapor de
agua, estos gases forman ácido sulfúrico y ácidos nítricos. Finalmente, estas
sustancias químicas caen a la tierra acompañando a las precipitaciones, constituyendo
la lluvia ácida.
Otra parte es absorbida por el plancton que, a su vez, es comido por organismos
filtradores de plancton, como algunas especies de peces. Cuando estos peces son
comidos por aves que tienen sus nidos en tierra, devuelven parte del fósforo en las
heces (guano) a tierra.
Es el principal factor limitante en los ecosistemas acuáticos y en los lugares en los que
las corrientes marinas suben del fondo, arrastrando fósforo del que se ha ido
sedimentando, el plancton prolifera en la superficie. Al haber tanto alimento se
multiplican los bancos de peces, formándose las grandes pesquerías del Gran Sol,
costas occidentales de África y América del Sur y otras.
El hierro es otro de los elementos indispensables para el desarrollo del ser vivo, entre
otras funciones es necesario para la génesis de los glóbulos rojos por su presencia en
la hemoglobina, también es necesario para determinados seres vivos como pigmento
transportador de del oxígeno. En la biosfera aparece como hierro orgánico, hierro
inorgánico bien soluble o en sedimento. La aparición de sedimentos de hierro lo
desencadenan los cambios en el pH del medio al igual que algunos microorganismos,
a este grupo de bacterias se le denominan ferro bacterias - Gallionella, Siderocapsa y
Sideromonas -.
El hierro orgánico pasa a formas de mayor o menor estado de oxidación. El ion ferroso
puede transformarse en ion férrico y viceversa pasando finalmente de nuevo hierro
orgánico.
Es necesario para determinados seres vivos como pigmento transportador del oxígeno.
Las bacterias desempeñan un papel crucial en el ciclo del azufre. cuando está
presente en el aire, la descomposición de los compuestos del azufre (incluyendo la
descomposición de las proteínas) produce sulfato (so4=). bajo condiciones
anaeróbicas, el ácido sulfhídrico (gas de olor a huevos podridos) y el sulfuro de
dimetilo (ch3sch3) son los productos principales. cuando estos dos últimos gases
llegan a la atmósfera, son oxidados y se convierten en dióxido de azufre. la
oxidación ulterior del dióxido de azufre y su disolución en el agua lluvia produce
ácido sulfhídrico y sulfatos, formas principales bajo las cuales regresa el azufre a
los ecosistemas terrestres.