Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
es
Manuel Jaén
1. INTRODUCCIÓN
Las relaciones entre la UE y el Magreb se mueven dentro del amplio marco de la
globalización y la integración regional. Mientras que la globalización como ideología,
línea de pensamiento y motor de la economía predica la existencia de un único mercado
mundial con amplia libertad de movimientos de empresas y capitales en los distintos
países, la integración regional es un concepto más solidario pues lo que se busca es,
dentro del marco de sistemas políticos democráticos y con fuerte predominio del sector
privado en sus economías, una relación que permita a los países más desarrollados de la
región, mediante acuerdos políticos, culturales o económicos, empujar hacia delante a
los menos desarrollados utilizando diversos mecanismos de ayudas directas,
subvenciones a fondo perdido, préstamos a bajo tipo de interés, etc.
En este trabajo se analizan los diversos acuerdos de la Comunidad Económica
Europea (CEE) inicialmente y posteriormente la Unión Europea (UE), con los
denominados países terceros mediterráneos (PTM) en general y, en particular, con los
países del Magreb.
En la primera parte se consideran los conceptos de globalización e integración
regional mientras que la segunda estudia las relaciones de la UE con el Magreb,
finalizando con unas breves conclusiones.
1
Globalización e integración regional: http://laberinto.uma.es
El caso del Magreb y la Unión Europea
precios de las materias primas producidas por aquéllos se fijan en los mercados de
Chicago o Nueva York. Este principio sólo se quiebra en el caso de recursos
difícilmente sustituibles en los que los diferentes países productores toman acuerdos
cartelísticos de fijación de precios y cuotas de mercado como ocurre en el caso del
petróleo.
El comercio mundial no es, en términos relativos, superior, en este momento, al que
se producía en los siglos XVIII y XIX imperialistas, y el signo es muy parecido. Salvo
excepciones, las antiguas metrópolis exportan bienes de equipo y productos elaborados
a sus antiguas colonias de las que reciben, esencialmente, materias primas.
La diferencia fundamental entre esa situación y la actual es el fuerte desarrollo de la
economía financiera y la telemática. A diferencia del comercio en el que se tiene que
producir el transporte físico de la mercancía, en la economía financiera el dinero se
“mueve” de un país a otro en décimas de segundo (sólo un mínima parte (5%) de las
transacciones financieras tienen soporte en operaciones de industria y comercio). Los
grandes fondos de inversión mueven billones de dólares que colocan en los países que
les ofrecen mayor rentabilidad con el mínimo riesgo posible. Dinero que se mueve con
gran facilidad por pequeños diferenciales de interés. Este enorme movimiento de
capitales puede provocar, ya lo ha hecho varias veces, crisis financieras que tienen
inmediata repercusión en la economía real con su secuela de quiebra de empresas, paro
y perturbaciones sociales. Ejemplos muy recientes de estas situaciones los tenemos en la
crisis del tequila, la de los tigres asiáticos o la provocada en 1992 en Europa por la
especulación contra la libra esterlina.
Mientras que existe una clara delimitación política entre los diferentes países con
legislaciones que afectan a sus ciudadanos y a los residentes de otros países, las
fronteras económicas se van diluyendo cada vez en mayor medida. Se produce así una
ruptura entre el ámbito político, limitado al estado, y el económico, que abarca varios
países y diferentes continentes.
Esta ruptura entre el ámbito político y el ámbito económico plantea nuevas
dimensiones para las relaciones entre los individuos que han caracterizado al Estado
vigente:
1) El poder de decisión se escapa de los límites marcados por la organización
política estatal. Dicho poder se sitúa por encima de leyes y Constituciones.
2) Se segmentan los procesos productivos: se usa la mano de obra donde es más
barata, se tributa en los lugares con régimen fiscal más favorable, se invierte el
capital en los países que se muestran más propicios y se castiga a los que no se
atienen a la regla de que todo funcione sin reglas.
3) Quiebra de la alianza histórica entre sistema democrático, economía de mercado y
Estado asistencial, con la consiguiente deslegitimación de éste.
4) Sustitución del poder político por unos oscuros “poderes económicos” que no
están organizados jerárquicamente.
5) Establecimiento de una nueva división de competencias entre los Estados y
dichos poderes económicos con subordinación de los primeros a los segundos si
quieren mantenerse.
6) Nueva escala de valores: difusión de las telecomunicaciones, el papel de la
ecología, reorganización del trabajo, reordenación de la sociedad civil, etcétera.
2
Laberinto 4 http://laberinto.uma.es
i) Aumento de la desigualdad
Puede suponer una trampa para la democracia. Difícilmente será aceptable para la
población una situación en la que el 20% de la misma bastará para mantener la
producción mundial y dejar al restante 80% fuera del mercado. La realidad global actual
es que 358 multimillonarios son, en conjunto, tan ricos como 2.500 millones de
personas, casi la mitad de la población mundial. La quinta parte más rica de todos los
Estados decide sobre el 84,7% del PIB mundial y posee el 85,5% de todos los ahorros
internos. El 20% acomodado consume el 85% de la madera, el 75% de la siderurgia y el
70% de la energía.
1
En palabras de Michel Camdessus: “la mano del mercado deberá ser compensada por la mano de la
justicia del Estado”.
2
Schumpeter, Joseph (1994): “Historia del Pensamiento Económico”. Ariel. Madrid.
3
Globalización e integración regional: http://laberinto.uma.es
El caso del Magreb y la Unión Europea
3
Krugman (1997) ha demostrado, para EE.UU., que “las industrias de alta tecnología, descritas
comúnmente como sectores de valor elevado de hecho tienen mucho menor valor añadido por trabajador
que las industrias tradicionales de elevado volumen, la industria pesada”.
4
Un ejemplo no baladí es la revuelta que se produjo en Los Angeles en 1992.
5
Beck, U. (1996): “Kapitalismus Ohne Arbiet”. Der Spiegel.
4
Laberinto 4 http://laberinto.uma.es
entender, de la ventaja absoluta, búsqueda que está basada en la idea de que el comercio
internacional es un juego de suma cero.
Cabe preguntarse con Krugman (1997) si el crecimiento en un país afecta a la renta
real en otros países. “El impacto del crecimiento de la productividad extranjera sobre el
bienestar nacional puede ser tanto positivo como negativo, dependiendo de cuál sea el
sesgo de ese incremento de la productividad; es decir, dependiendo de los sectores en
que tal crecimiento ocurre. El daño potencial a las economías avanzadas por el
crecimiento económico del tercer mundo reside en la posibilidad de reducción de los
términos de intercambio de los países avanzados. Pero eso no ha ocurrido. El
incremento de la productividad en el tercer mundo conduce a mayores salarios en el
tercer mundo”.
6
“A Proposal for International Monetary Reform”. The Eastern Economic Journal 3-4. Julio-Octubre.
5
Globalización e integración regional: http://laberinto.uma.es
El caso del Magreb y la Unión Europea
6
Laberinto 4 http://laberinto.uma.es
7
Globalización e integración regional: http://laberinto.uma.es
El caso del Magreb y la Unión Europea
8
Laberinto 4 http://laberinto.uma.es
Según la opinión de diversos expertos magrebíes, la apuesta por la apertura es, sin
duda una apuesta inevitable, pues cualquier otra vía estaría destinada al fracaso y no
llevaría más que a profundizar los retrasos acumulados por la economía de la región.
Sin embargo, se trata de una apuesta de alto riesgo. La apertura puede revelar un
potencial de adaptación y dinamismo y estimular la inversión nacional y extranjera.
Pero también puede quedarse en torpezas y bloqueos, devastar capas enteras del tejido
productivo y agravar el problema del paro y, por lo tanto, los incentivos para emigrar.
La puesta a punto competencial del sistema productivo requiere una auténtica
reestructuración industrial, la adaptación del sistema fiscal al nuevo orden, la atracción
de inversión directa extranjera y el acercamiento de la legislación a los estándares en
vigor en la UE.
Para la UE, los acuerdos forman parte de un amplio esfuerzo para ampliar y
profundizar sus relaciones con los PTM. Esto se logra mediante acuerdos que incluyen
cooperación económica, financiera, cultural y política, incluyendo cuestiones tales como
inmigración, medio ambiente, adaptación de la legislación e infraestructuras. En el
campo económico, el propósito es construir un área económica euro-mediterránea como
parte de una amplia estrategia europea para forjar varias alianzas comerciales. La UE
tiene un interés político basado en razones de política exterior en este acuerdo de
asociación en concreto y en la instauración de un espacio euro-mediterráneo en general.
Sin embargo, a largo plazo, la UE puede sacar provecho de la ampliación y la expansión
de los mercados del sur con fuerte crecimiento demográfico y capacidad de mejora en
los niveles de vida, gracias a la reestructuración de los sectores económicos que
acompañan a los acuerdos de asociación multilaterales y bilaterales.
5. CONCLUSIONES
Los países de ambas orillas del Mediterráneo comparten su preocupación por el
futuro de este mar, por su equilibrio ecológico fuertemente amenazado y su situación
como vía de comunicación privilegiada con unas orillas muy cercanas y pobladas. Sin
embargo, los países de la ribera sur se encuentran sumidos en graves problemas de
desarrollo, una presión demográfica creciente con repercusiones directas en los niveles
de empleo y autosuficiencia alimentaria y un deterioro global del medio ambiente que
abarca tanto problemas de desertización como de urbanización deficiente y polución.
La asociación euro-mediterránea representa un auténtico desafío para los PTM, en la
medida en que les exige una adecuada respuesta a las nuevas exigencias derivadas de
los procesos de globalización y regionalización, la adopción de una política económica
coherente con un marco caracterizado por economías cada vez más abiertas, una
profunda reforma de las Administraciones públicas, el concurso activo del sector
privado, una amplia colaboración entre las empresas del Norte y el Sur del Mediterráneo
y la creación de un clima de confianza, credibilidad y estabilidad. Los costes a corto
plazo para los países del Magreb pueden ser muy elevados en términos de pérdidas de
empleo y empobrecimiento general de la población y, aunque se vislumbran beneficios,
éstos se producirán a más largo plazo. La exclusión de los productos agrícolas de la
ZLC pone de manifiesto la preponderancia y la prepotencia de la UE en el proceso de
negociación, pues es en este sector, fundamentalmente en la hortifruticultura, donde los
países del Magreb tienen ventajas comparativas con respecto a la UE. Asimismo las
ayudas financieras prometidas no parecen suficientes para ayudar a estos países a hacer
frente a los retos de modernización de sus industrias que supone la ZLC.
Mención especial merece el problema de la emigración, fundamentalmente de
jóvenes marroquíes y argelinos, de aquéllos que en busca de un mundo mejor se
9
Globalización e integración regional: http://laberinto.uma.es
El caso del Magreb y la Unión Europea
10