Aprende A Ser Rico-Ebook

Walter Queijeiro
Cristian Abr atte

.
.
.
APRENDE A
SER RICO
.
.
.
.
.
Las enseñanzas
del gurú más famoso
de las finanzas personales
En agradecimiento por la compra de
nuestro libro
te obsequiamos un bono de descuento por valor
de US$ 100.-
para el próximo evento
“Aprendiendo a Ser Rico - Un viaje al Éxito”
Actívalo ahora suscribiéndote en nuestra Web

http://www.AprendeaSerRico.com
Queijeiro, Walter Mario
Aprende a ser rico : las enseñanzas del gurú más famoso de las finanzas personales
/ Walter Mario Queijeiro y Cristian Omar Abratte. - a ed. - San Isidro : Triskel Press,
2011.
E-Book.
ISBN 978-987-26968-3-2
1. Superación Personal. 2. Desarrollo . I. Abratte, Cristian Omar II. Título
CDD 158.1
Fecha de catalogación: 29/11/2011
APRENDE A SER RICO

© 2011 Hojas del Sur S.A. para la edición en papel.
© 2011 Triskel Press para la edición digital
Diseño de Interior: versión gráfica: Noelia Pepe
Diseño de Interior: versión e-book: Triskel Press
Diseño de Tapa versión gráfica: arte@hojasdelsur
EDICIÓN DIGITAL
Diseño de Tapa versión e-book: Triskel Press
Fotografía de Tapa: Ivana De Santis
Editado por: TRISKEL PRESS. Chubut 1045, San Isidro, Bs. As. – Argentina (1642)
Tel. (54 11) 4723-1739 - rom@triskelpress.com / www.triskelpress.com
ISBN 978-987-26968-3-2
Queda hecho el depósito que establece la ley 11.723
Todos los derechos reservados. Ninguna parte de este libro podrá ser reproducida,
archivada o transmitida en forma alguna o por ningún medio electrónico o mecánico,
incluyendo fotocopiado, digitalizado, grabado, ni por cualquier otro tipo de almace-
namiento de información o sistema de recuperación u otros, sin previo consentimien-
to escrito del editor. La infracción a esto está penada por las leyes 11.723 y 25.446.
Dedicamos este libro a todos los que están buscando
una vida mejor y no se conforman con lo que ofrece hoy
nuestra sociedad.
Agradecimientos
Para un periodista deportivo, escribir su primer libro so-

bre un tema que no le es habitual a su público, no es tarea senci-
lla. Por tal motivo quiero agradecer a todos los que me motivaron
a hacer este trabajo, en una área a la cual le dediqué gran parte de
mi tiempo libre en los últimos años.
A mi esposa Andrea y a mis hijas Delfina y Alma Carmen,

quienes me soportan durante las noches en las que me quedo
leyendo hasta altas horas de la madrugada.
A mi papá que me regaló mi primer libro, y a mi mamá que

siempre confió en mí.
A mis abuelos Alfredo, Carmen (Ita), Mario y Delfina. Al-

guna vez, Truett Cathy dijo: “Para saber qué tan buena persona
eres, tienes que mirar la conducta de tus nietos”; espero día a día
poder reflejarlos a ellos en mis actos y continuar su legado de
buenas personas.
A Kim y a Robert Kiyosaki que en su visita en Argentina,

me permitieron aprender de ellos, me animaron a escribir este
libro, y según sus palabras, me consideraron “su amigo”.
A todos los telespectadores de mis programas de TV, y se-

guidores de Facebook y Twitter, que con sus palabras de aliento
me inspiran permanentemente. Espero que este libro sea de su
agrado.
Walter Queijeiro
9
Agradecimientos

A Robert Kiyosaki, quien nos abrió la mente a una reali-

dad distinta.
A Jim Rohn quien a través de sus seminarios, audios y li-

bros nos abrió un mundo de posibilidades por medio del desa-
rrollo personal.
A mi esposa, Verónica quien en silencio y con gran com-

prensión, me ha apoyado en esta aventura de lograr Libertad
Financiera y también de contar mi experiencia en este libro.
A mis hijos, Melina, Micaela y Gian Franco quienes son

una increíble fuente de motivación para lograr nuestras metas
y sueños.
A mis padres, Omar y Susana, quienes me apoyaron en

todo momento para lograr mis objetivos.
A los cientos de personas que participaron en los encuen-

tros de Cashflow, seminarios y talleres aportando sus ideas, vi-
siones, experiencias, expectativas y que han logrado enseñar a
la vez que aprender.
A Fernando González, Julián Sbano, Daniel Lanteri, Cris-

tian Yarde Buller, Juan Cruz Bozzetti, Claudio Parra, Fernando
Bliman, Abel Cortese, Gabriela de Marinis, Gustavo Ibañez Pa-
dilla, Ricaurte Samaniego, Alejandro Marino, Germán Moreno,
10
Agradecimientos
Miguel Toma, Diego Repetto, Cristian Olivero, Rubén Durán,

Bismarck Echeverría, Dina Guillén, Xochitl Palacios, Federico
Zabala, Silvio Favero, Abraham Y. Ponce, William Martinez,
Leonardo Alonzi, Luis Salomón, Ramiro Reyes, Wilfredo Law-
son, Hector Cardona, Horacio Terzaghi, Marcos Mazzocco, Elio
Duarte, Ricardo Pizzichini, Daniel Orellana, Saulo Flores, Ce-
cilia Larrosa, Raul Mazzeo y todos quienes han colaborado en
el desarrollo y crecimiento de Escuela de Riqueza al sumarse
activamente como líderes de club, asesores, instructores y staff
en tareas de apoyo y difusión.
Cristian Abratte
11
12
Introducción
Hace unos meses leí algo sobre un empresario colombiano

de esos que Kiyosaki llama “Empresarios del Siglo XXI”,
llamado Giovanni Perotti, que me impactó y que creo, re-
sume la paradoja en la que nos encontramos. El título del
artículo era: “La Ironía del Siglo XXI” y decía así:
Es impactante ver, como cientos de miles de personas no

se dan cuenta de sus grandes capacidades de liderazgo al
haber sido adormecidos por un sistema que, hoy por hoy, se
denomina la ironía del siglo XXI.
Actualmente, cientos de miles de profesionales viven en

una permanente desilusión con el ingreso que le generan
sus profesiones. Cientos de miles pasan decenas de curri-
culums esperanzados en una llamada que no llegará. Cien-
tos de miles no hallan respuesta a la permanente pregunta
en sus mentes: “¿Por qué estoy desempleado? ¿No es que soy
considerado por el sistema como mano de obra calificada?”
Hoy por hoy, un gran número se cuestiona, si valió la pena

haber invertido tantos años de universidad para terminar
en trabajos mal pagos, o haciendo algo completamente
diferente de lo que estudiaron, sencillamente porque fue
imposible encontrar una opción que tenga que ver con sus
profesiones.
13
Introducción
Otros, no pueden comprender la irónica respuesta del siste-

ma: “Estás sobre-calificado”, cuando precisamente ese fue
el motivo por el que estudió más, gastó más y se esforzó
más que otro para tener una supuesta “ventaja competiti-
va” que, paradójicamente se convierte en una injusta des-
ventaja.
Miles no pueden entender por qué la tierna edad de treinta

y cinco años se convierte en el gran obstáculo para poder
seguir desarrollándose en sus vidas profesionales cuando,
precisamente tienen la experiencia que un recién egresado
aún no tiene y ve cómo esa gran verdad de “la experiencia
no se improvisa”, no es más que una fábula en el arte de ser
tenido en cuenta para un empleo, máxime cuando se tiene
el pecado de tener treinta y cinco o más.
Los más afortunados, cuentan con la bendición de tener un

empleo, pero a un costo muy alto en términos de calidad
de vida. Cientos de miles de empleados se ven sometidos a
extenuantes jornadas de labor. Otros, diariamente se ven
sometidos a presiones y tratos de sus superiores que bien
podrían formar parte del más ordinario régimen anarquis-
ta. Otros tantos, llegan al trabajo con la angustia de no ser
ellos los próximos despedidos ante la reciente fusión de la
empresa. Es interesante observar, como el sistema se ha en-
cargado de incorporar palabras ante cuya pronunciación la
situación parece no ser tan caótica. Palabras como “outsou-
rcing” o “freelance”, no son otra cosa que nuevos términos
14
Introducción
para decir “despedido”, pero con una refinada hipocresía

característica de un capitalismo deshumanizado.
Toda esta realidad ha hecho que el hombre se desenfoque
de sí mismo, de su relación con sus semejantes, de su cali-
dad de vida conyugal y familiar. Frases como “no tengo
tiempo”, “estoy trabajando”, “aquí…en la lucha”, “pero con
esta situación”, han ido creando una especie de resignación
en el poderoso espíritu humano. Para cientos de miles tiene
que ser así porque “no nos queda otra”.
Esto me trae una reflexión: Que por otro lado y de manera

contrastante hoy por hoy, miles de personas decidieron no
seguir siendo víctimas de este sistema y han encontrado en
la educación financiera la solución a su problemática, y el
vehículo hacia la realización de todos sus sueños en la vida.
Día a día miles se están uniendo a esta corriente, motivados

por un deseo de cambio, una nueva esperanza, una manera
de descubrir su verdadera misión, una profunda intención
de crecer y de dejar un legado ante millones que hoy se aho-
gan en un mar de depresión, impotencia, estrés e incerti-
dumbre. Por todo esto, en este libro, quisimos compartir de
manera sencilla y práctica las herramientas necesarias para
llegar a la libertad financiera basadas no sólo en nuestras
propias experiencias, sino también en la de muchos otros
alrededor del mundo que ya lo han logrado. Además de
explicar en detalle los conceptos sobre finanzas de aque
15
Introducción
llos autores de los cuales nos hemos nutrido y de incluir
algunos testimonios personales muy inspiradores, presen-
tamos un formato de preguntas y respuestas entre Walter y
Cristian que resumen todos los conocimientos adquiridos
por ambos a lo largo de estos años.
Quienes decidan pertenecer a esta élite del logro huma-

no, bastará con creer en sí mismos, comprometerse con una
misión y querer realizar sus más anhelados sueños en la
vida, mientras ayudan a otros a lograrlos. Miles lo están
haciendo y tú puedes ser el próximo triunfador en esta lu-
cha. Recordemos que una de las definiciones de éxito es:
“estar preparado cuando aparece la oportunidad”… y esa
oportunidad puede traer tu nombre.
¡Gracias por leernos y que disfruten el camino a la libertad,

tanto como nosotros!
¡Por tu éxito!
Cristian Abratte y Walter Queijeiro
16
Capítulo I
.
.
Historia Personal de Walter
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
Capítulo I Historia Personal de Walter
“La condición humana debería ser un alegre vuelo entre

águilas; no una loca carrera entre roedores.”
Mark Yarnell y Rene Reid Yarnell
1. ÉRASE UNA VEZ...
L
a idea de escribir este libro surgió como consecuen-
cia de transformar una indignación en una oportuni-
dad. Esto se explica fácilmente desde la mirada del
Coaching, que considera que “la suerte” se nos presenta
cuando frente a un hecho que de algún modo nos afecta, si
nuestra forma de pensar es positiva, se nos abre un espacio
para la acción que da lugar a que nuestra interpretación –lo
que “nos contamos” o lo que “nos decimos” sobre lo sucedi-
do– nos permita ver una oportunidad. Siempre hay una, o
más de una si estamos receptivos frente a ellas y podemos
distinguirlas.
¿Qué quiero decir con esto? Paso a contarles:
Era una calurosa tarde de febrero cuando, luego de hacer

el programa de TV Fútbol para Todos, que se emite a diario
por la cadena Fox Sports, iba de regreso a casa. Justo en el
momento en que estaba a punto de dejar Buenos Aires en
dirección sur hacia Quilmes, la ciudad donde vivo, recibí
un mensaje de texto de mi compañero Fernando Carlos que
19
Aprende a Ser Rico Capítulo I
decía: “Prendé la radio, La Metro, que están ‘matando’ a

Padre Rico Padre Pobre (o Kiyosaki)”.
Como los que me conocen saben de mi admiración por Ro-

bert Kiyosaki, cualquier noticia que aparezca sobre él me
convierte en el punto de referencia para comentarla.
De modo que sintonicé la emisora sugerida y en ese mismo

momento estaba en el aire uno de los programas de radio
más escuchados de la Argentina, justo en un interesante
tramo de una de sus secciones llamada Nuevos Autores, des-
tinada a promover las novedades editoriales del país.
El invitado del día era un especialista en planificación de

finanzas personales. Así fue como comencé mi viaje de
regreso a casa escuchando al “experto”, quien arrancó la
promoción del libro de su autoría no promocionando los
beneficios que obtendría el lector al leer su obra, sino di-
ciendo algo como: “Lo que dice Robert Kiyosaki en su libro
Padre Rico Padre Pobre es imposible de aplicar en Argentina”.
Al escuchar esto, mi primera reacción fue enojarme mucho.

Pero con el correr de los minutos comencé a pensar que
tal vez ese hombre estaba “atacando” a Kiyosaki como
estrategia de promoción; después de todo ese recurso ya
había sido utilizado anteriormente por otros expertos
financieros en todo el planeta. Casi sin pensarlo, llamé a
Cristian Abratte, director de “Escuela de Riqueza”, con
quien aprendí mucho de la filosofía Padre Rico, para que
también él escuchara la entrevista.
20
A medida que la entrevista avanzaba, sus argumentos me

resultaban cada vez menos convincentes, por lo que me
pareció que este autor no había leído mucho sobre la filo-
sofía Padre Rico Padre Pobre o si lo había leído, no lo había
entendido o, lo que era peor, si lo había leído y entendido,
quizás nunca había intentado aplicarlo verdaderamente.
Y más importante aun, nunca mencionó la filosofía detrás
de los consejos financieros de Kiyosaki. Quienes lo hemos
estudiado, sabemos que su mensaje y sus conceptos sirven
para cualquier individuo que busque no sólo el crecimiento
económico, sino también un crecimiento a nivel personal
en todas las áreas de la vida. Fue en ese preciso momento
cuando nació la idea de este libro. Llamé a Cristian nueva-
mente y le propuse que volcáramos en un libro todo lo que
nosotros sabíamos; creo firmemente que es posible aplicar
estos conceptos y lograr resultados, pues lo vimos en mu-
cha gente.
Ya a mitad de camino y mientras circulaba por la Autovía

del Acceso Sudeste, puse un poco de música en mi auto para
relajarme. Sé que cuando la mente está relajada es más fácil
conectar con el subconsciente, el lugar de nuestra mente
donde almacenamos la información. Y fue apenas un rato
después, cuando circulaba lateral a la ciudad de Wilde, que
vino a mi mente algo que había leído en los libros de la serie
Padre Rico:
21
“Hablar es fácil. Aprende a escuchar con los ojos. Los hechos

hablan más que las palabras. Observa lo que una persona
hace, más que escuchar lo que dice.”
Como hablar es más fácil que hacer, pero escribir viene bien
para contar, quiero contarles aquí algo acerca de mi vida, a
propósito de este tema.
2. ¡SE HIZO LA LUZ!
Hace unos años, precisamente en enero del 2008, fui con-

tratado desde Colombia por una conocida empresa mul-
tinacional para realizar la conducción de un evento espe-
cial para su personal, nada más y nada menos que en la
espectacular isla de Aruba. La empresa en cuestión tiene
la costumbre de reunir anualmente a sus empleados más
eficaces en los mejores lugares de nuestro continente, para
hacer un balance del año transcurrido y fijar nuevas metas
de cara al futuro.
Esta experiencia, además de permitirme conocer ese paraí-

so que es Aruba, me sirvió para muchas otras cosas. Una de
ellas fue la de observar la importancia que tiene el que una
empresa retribuya el esfuerzo de sus empleados a lo largo
del año, y cómo esto tiene incidencia en los resultados; como
así también, el poder sentirse partícipe del diseño de nue-
vas estrategias para superar metas individuales y grupales.
Eso dignifica a la persona, lo hace sentir importante, le otor-
ga un sentido de pertenencia único, lo que comúnmente
podemos llamar “ponernos la camiseta”.
22
“La consecuencia de no pertenecer a ningún partido

será que los molestaré a todos.” (Lord Byron)
Y otro hecho relevante que pude observar es lo importan-

te que es armar los grupos de trabajo de cada empresa o
institución como si fuesen equipos deportivos; sin olvidar
las relaciones personales entre cada uno de sus integrantes,
como fortalecimiento para lograr objetivos.
También en ese viaje, casi de casualidad, me topé con un

libro que iba a marcar un antes y un después en mi modo
de ver las cosas referidas a las finanzas personales, en todos
sus aspectos. En el vuelo de ida, leí en American Way, la re-
vista de a bordo de American Airlines, un artículo acerca de
un libro sobre economía personal que desde hacía tiempo
venía batiendo records de ventas. El mismo instaba a bus-
car la tan ansiada “libertad financiera”.
¿Quién no pensó en alguna oportunidad, en poder dejar su

empleo y convertirse uno mismo en su propio jefe?
¿Quién no soñó con poder manejar su propia agenda, sin que

otros nos indiquen el horario de entrada y de salida?
Seguramente muchos de los que están leyendo este libro.

La necesidad de aumentar mi cuenta bancaria sumada a mi
habitual deseo de aprender cosas nuevas y a la motivación
que había recibido en el evento de Aruba, hicieron que a mi
23
regreso, leer Padre Rico Padre Pobre se convirtiera en una de

mis prioridades.
3. SOÑANDO CON UN MUNDIAl
Debo decir acá que, ser periodista deportivo en Argentina

y vivir de esta profesión, se asemeja bastante en promedio
a la situación de ese número de jóvenes que juegan al fútbol
en las divisiones inferiores de nuestro país y luego logran
llegar a la Primera División. Ocurre que, la gran cantidad
de alumnos que se inscriben en la carrera de Periodismo
Deportivo con la esperanza de poder llegar a relatar, a tra-
vés de los medios, los hechos más importantes del mun-
do del deporte, entran en un “embudo imaginario”, donde
muy pocos salen por el extremo angosto logrando convertir
esta pasión en una profesión. Incluso, una vez sorteado ese
filtro, hay que pasar por otro “embudo” mucho más angos-
to, que es el que te convierte en un “elegido” de este métier:
cubrir un mundial de fútbol.
Menciono este mega-evento deportivo porque es muy co-

mún entre quienes nos gusta el fútbol, tomar los mundia-
les como punto de referencia para situarnos en el tiempo y
ubicarnos rápidamente en el repaso de hechos de nuestra
vida. Por ejemplo, en mi caso, enseguida me ubico mental-
mente en mi primer año de Periodismo Deportivo si pienso
en el Mundial de Estados Unidos ’94. O me veo saltando en
el patio de la escuela secundaria luego de las hazañas del
genial arquero Goycochea en Italia ‘90. Imposible olvidar el
gol de Diego [Maradona] a los ingleses, las caravanas de au-
tos con los vecinos saliendo a festejar y los abrazos con mis
24
compañeritos de 6to grado por el título de México ‘86. Fue

un lujo ver la final de España ‘82 en el televisor a color que
mi abuela había comprado recientemente como un equipo
de alta tecnología. Y aunque parezca mentira, con tres años
y medio de edad, acumulé recuerdos y festejos por el centro
de mi ciudad, Quilmes, cantando aquel inolvidable “el que
no salta es un holandés”, para celebrar nuestra Copa Mun-
dial del ’78, en Argentina.
Pero para los periodistas deportivos, los mundiales de

fútbol no sólo sirven como unidad de medida del tiempo
sino que, también, estar trabajando en lo que se considera el
evento deportivo más importante para todos los medios del
mundo, es una oportunidad para hacer una pequeña dife-
rencia en dinero, en comparación con el resto de los meses
de nuestro cronograma laboral.
Adelantándome un poco, diré que más tarde iba a leer en

el cuarto libro de Robert Kiyosaki, Guía para Invertir, el si-
guiente concepto: “… el 10% de la gente tiene el 90% del di-
nero. En el mundo de las películas, 10% de los actores ganan
el 90% del dinero; también lo es en el mundo del deporte y
en la música. La misma regla del 90-10 se aplica al mundo de
la inversión…”. Y mientras leía ese párrafo asentía con la ca-
beza, aprobando este concepto también para mi profesión.
Me refiero a que para la mayoría de esa pequeña cantidad
de periodistas que cubrimos un mundial de fútbol, la bue-
na administración de los viáticos, el evitar algunas com-
pras en las tentadoras ciudades donde se desarrolla cada
torneo –haciendo caso al concepto de “postergar la gratifi-
cación inmediata”– sumado a que al estar fuera de casa se
25
acumula parte del sueldo no gastado por la reducción de

algunos gastos fijos durante los días que dura el viaje; todo
eso hace que el saldo de ese mes sea un poco más “digno”
que el habitual. Lo que por supuesto luego termina hacien-
do una diferencia en ese año.
Por eso me considero un privilegiado de esta profesión por

haber cubierto en el lugar de los hechos todos los mundia-
les de fútbol desde que egresé como Periodista Deportivo
hasta el día de hoy; mis pequeños pero firmes progresos
económicos se dan… ¡cada cuatro años!
Y fue así como luego de Francia ’98 logré reunir el pago

inicial de mi primer auto, con un saldo de veinticuatro cuo-
tas, aunque en la cuota quince me lo robaron y, mientras lo
seguía pagando como corresponde, mi seguro recién me
devolvió el saldo acumulado en la cuota veintidós. Es decir
que, durante meses seguí pagando el auto que seguramente
ya habrían desarmado los ladrones mientras yo viajaba en
el colectivo 159, eso sí, en “servicio diferencial”.
Con el Mundial de Corea-Japón 2002 pasó algo muy par-

ticular. La gran crisis económica que vivió la Argentina a
finales de 2001 y comienzos de 2002, hizo que estar presente
en el partido inaugural entre Francia y Senegal en Seúl, sea
casi un milagro para un cronista argentino. A pesar de ello
fui seleccionado para hacer base en Corea del Sur como par-
te de una comitiva compuesta por un productor, un cama-
rógrafo, Carlos Bilardo y “quien relata”, para la cobertura
de tres canales de televisión. Durante esa Copa del Mundo
ocurrieron dos hechos negativos para la gran mayoría de
26
los argentinos: uno tenía que ver con nuestra dolarizada

economía, y fue la cotización que alcanzó el dólar, que pasó
en pocas semanas de $ 1 peso a casi $ 4 (el martes 25 de junio
de 2002 el dólar libre cerró a $ 3,95).
El segundo hecho negativo fue deportivo y se trató de la

eliminación de la Selección Argentina en la primera fase
del certamen. Estas dos situaciones que de algún modo fue-
ron un “drama” para casi todos, con el correr de los días se
transformaron en algo positivo para mis finanzas perso-
nales. Al ser eliminada la Selección Argentina que tenía
base de entrenamiento en Japón, el resto de los periodistas
que seguía al equipo de quien entonces dirigía a nuestro
seleccionado, Marcelo Bielsa, tuvo también que regresar a
Buenos Aires. Por lo tanto el equipo periodístico designado
en Corea -¡el mío!- quedó a cargo de la cobertura del resto
del Mundial. Además, la acumulación de viáticos en dóla-
res durante cuarenta y dos días, con una alta cotización del
mismo en el “micro centro porteño”, hizo que al regresar
a casa yo tuviera otra vez un saldo positivo en mi cuenta
bancaria, esta vez, un poco más alto que el habitual. Fue así
como, a pocas semanas de que una selección alzara la Copa
de la FIFA (lamentablemente esa vez fue Brasil), pude dar otro
“saltito” en mi vida económica.
4. TIEMPOS DE CAMBIOS
Si bien esperar un mundial era como un sueño, también lo

era el enamoramiento con mi novia. Después de siete años
éste perduraba y crecía, y como la prueba piloto de nuestra
convivencia había dado buenos frutos, le di a mis ahorros
27
mundialistas un destino para que se forme otra pareja ar-

gentina: decidimos casarnos, con fiesta incluida. Así fue
como entre salón, catering, cotillón, álbum de fotos, luna
de miel y todos los otros gastos que hacen a la cuestión,
mi saldo bancario rápidamente volvió a su estado normal:
“cero”. Bueno, por lo menos luego que Andrea me colocara
la alianza yo no tenía deudas, aunque mi estado financiero
volvía a 1974: rodeado de afecto y listo para volver a empe-
zar. Después de todo, con apenas veintiocho años de edad
y luego de la peor crisis económica de todos los tiempos,
haber llegado al altar con mi primera novia, festejar dicho
acontecimiento con familia y amigos, tener algunos centa-
vos de saldo y ninguna deuda, no estaba nada mal.
El 2003 fue un año de despegue económico para Argentina.

Luego del caos económico ocurrido en el sistema bancario
y con las medidas económicas que se tomaron entonces,
como el corralito, el híper-corralón, la pesificación y la cir-
culación de bonos de emergencia que pasaron a formar par-
te de nuestra billetera, el país de a poco comenzó a tener una
situación más estable desde el punto de vista financiero.
Para quienes no teníamos deudas, era un excelente momen-

to para intentar probar suerte con algún emprendimiento.
Un día regresando desde la provincia de Santa Fe, donde
había viajado para la cobertura de un partido entre los equi-
pos de Unión y Boca, mi mejor amigo “me tiró” la idea de
poner un bar temático en la ciudad de Quilmes. Obviamen-
te por mi perfil y contactos, orientado a un público joven y
con ambientación deportiva.
28
Desde un principio me pareció una buena idea. En Quilmes

no había buenos lugares para ver los clásicos del fútbol ar-
gentino que, por ese entonces, se televisaban por el sistema
codificado. El problema era mi falta de tiempo para poder
dedicarme personalmente a la administración del negocio
y también, el cálculo de la inversión inicial para comenzar
el proyecto. Después de varias charlas con mi amigo, siem-
pre en un marco de entusiasmo y haciendo proyecciones de
lo que podría resultar a futuro el emprendimiento, no hice
otra cosa que aceptar el desafío.
Luego de buscar el local que reuniese el espacio y las carac-

terísticas que deseábamos para nuestro bar, encontramos
uno en una buena ubicación del centro quilmeño. Estaba
bastante bien situado, rodeado de escuelas, a dos cuadras
de la Catedral y el Paseo Peatonal, a metros del bingo más
importante de la zona y con cierta influencia de varios edi-
ficios públicos del lugar. Es decir que teníamos movimiento
de gente asegurado, por lo menos durante dieciocho horas
del día.
Para la puesta en funcionamiento nos demoramos dos me-

ses más de lo planeado y gastamos más del doble de lo es-
tipulado, lo que nos obligó a salir a buscar un tercer socio
para no quebrar antes de inaugurar. Pese a las dificultades
para lograr la habilitación municipal, las refacciones edili-
cias, los trámites administrativos, los errores en el presu-
puesto inicial y el desgaste en la relación entre los socios,
Fanáticos Bar, abrió sus puertas con una notable fiesta de
inauguración a la que asistieron figuras del deporte, del
espectáculo y personalidades de la vida de la ciudad. La
29
estrella del sitio era una súper pantalla gigante que le ha-
bíamos adquirido a un ciudadano francés de la localidad
de Martínez por 3.000 “patacones”, una de las monedas de
reemplazo del peso emitidas en aquel año. En tiempos don-
de los plasmas, LCDs y equipos de HD en nuestro país, sólo
podían imaginarse en películas de ciencia ficción, nuestra
pantalla estaba entre las mejores del Gran Buenos Aires, lo
cual, yo intuía, era una garantía de éxito.
Sumado a eso, una serie de resultados deportivos nos ve-

nían como “anillo al dedo” para el impulso inicial: el ascen-
so inesperado del club Quilmes a la Primera División y la
Copa Libertadores que ganó Boca en Brasil frente al Santos
en el Estadio Morumbí, hicieron que ver partidos de fútbol
rodeado de amigos e hinchas del mismo club se convirtiera
en una necesidad e impulsara el consumo.
Sin embargo, el buen destino deportivo de la temporada, la

buena reputación de las primeras semanas, el boca a boca
de la gente que pasaba por el lugar y el impacto logrado en
los medios de prensa no fueron suficientes para que nuestra
empresa alcanzara el éxito.
Una mala administración del flujo de efectivo diario, la falta

de control de nuestros ingresos y egresos, el débil equipo
de trabajo formado, la ausencia de liderazgo y el desgaste
en las relaciones personales que sufríamos a diario los “tres
amigos”, que intentábamos torcer el rumbo de la situación,
hicieron que aquella aventura gastronómica durara muy
pocos meses. Con la pantalla casi apagada para ahorrar
los minutos que consumía la lámpara especial que le daba
30
vida, con los socios cada uno por su lado y con un pésimo
balance contable, “Fanáticos Bar” cerró sus puertas muy
pocos días después de que Boca ganara la Copa Intercon-
tinental en Japón, frente a Milán en diciembre. Ya ninguna
proeza futbolística nos podía salvar del destino que en rea-
lidad se veía venir desde el día número uno.
Si bien la experiencia del bar no fue próspera en cuanto a

los ingresos adicionales que yo intentaba lograr con el em-
prendimiento, sí fue para mí uno de los sucesos más ricos
en cuanto a aprendizaje y a lecciones asimiladas de cara al
futuro. No sólo me di cuenta de que para progresar como
empresario se necesitaban habilidades especiales, sino
también, de algo fundamental que tiene que ver con la vi-
sión, los hábitos y los pensamientos. Como cita un sabio
anónimo: “Lo que hago, lo hago muy bien, y lo que no hago
bien, no lo hago.”
Una madrugada luego de una jornada donde los ingre-

sos no habían sido de los mejores, alguien del entorno de
nuestro bar, asomándose por la ventana y mirando hacia la
vereda dijo: “Esta esquina está muerta”, culpando a la ubi-
cación del local por nuestra floja performance en la caja regis-
tradora. Pero meses después de que abandonáramos dicha
ubicación, justo enfrente de donde estaba nuestro negocio
se instaló uno de los mejores restaurantes del Gran Bue-
nos Aires, que además de inaugurar ese local, abrió otras
dos sucursales en el distrito. Además, su dueño compró la
esquina opuesta, donde en la actualidad abrirá otro restau-
rante y edificará una torre de departamentos para vender
y alquilar. Evidentemente tenía ese “don especial” que los
31
expertos llaman visión de negocios, es decir, personas que

tienen la capacidad de ver lo que los demás no ven.
Tras algunos meses bastantes movidos, con un lindo trajín

en mi primer año de casado y sin poder establecer una di-
ferencia en mi balance económico personal, luego del bar,
otra vez me quedaba esperar lo único que ya me había “sal-
vado” en dos oportunidades: un mundial de fútbol. Pero
si lo pensaba bien, Alemania 2006 estaba a un poco más de
dos años.
5. ¿QUÉ HACER PARA HACER UNA BUENA CAJA?
A medida que transcurría el tiempo hasta una nueva Copa

Mundial, yo seguía abocado a uno de mis objetivos: “la re-
facción de mi casa”. Ésta llevaba más de cinco años y, si bien
es cierto que había avanzado en las obras, cuando me po-
nía a pensar en lo mucho que me faltaba, sentía escalofríos
por todo el cuerpo. El aumento constante del costo de los
materiales de construcción más los confusos presupuestos
de la mano de obra, hicieron que establecer costos reales y
plazos de obra así como terminar las comodidades básicas,
sólo fuese posible si los determinaba alguien con algo así
como un postgrado en Planificación, Proyectos y Ejecución
de Obras Civiles.
Además, a eso se agregaba la noticia de mi vida: la llegada

de mi primera hija, Delfina, lo que hacía que cambiasen to-
talmente mis prioridades sociales y económicas. El amor
hacia la niña se había adueñado de mi hogar que, por cierto,
32
también sufría un notable incremento en la columna de los

gastos.
No hay nada más lindo que ver crecer a una hija feliz, ver a
una mamá orgullosa de su crianza y a un padre que pueda
satisfacer las necesidades y gustos de ellas. Pero créanme
que Sancor, Huggies, Mimo y Cheeky, que como todos sa-
ben son marcas de productos de consumo infantil, se con-
virtieron en mis enemigos financieros.
A medida que fueron pasando los meses llegó otra vez

el momento de saldar algunas cuentas pendientes y,
por qué no, pasar a “saldo acreedor” para así terminar
con la refacción de mi casa, por lo menos las habitacio-
nes, y adquirir el material de trabajo que para un perio-
dista es un activo imprescindible: una computadora.
Cansado de ir a un locutorio y que “el de al lado” fumara
y me tirara el humo o se pusiera a “chusmear” las páginas
Web que yo visitaba, el turno de la privacidad informática
había llegado.
Ya en el Mundial de Alemania 2006, la fórmula para los asa-

lariados como yo era clara:
Trabajar mucho, gastar poco.
Los viáticos en Euros pasaron a ser un tesoro a cuidar, evi-

tando todo tipo de tentaciones en las vidrieras de los nego-
cios de las principales ciudades alemanas.
33
Es común que a medida que va transcurriendo un mun-

dial, uno se vaya acostumbrando al estilo de vida del país
anfitrión y la sensación térmica de los precios baje, hacien-
do que uno vea las tarifas cada vez más a su alcance. Pero,
créanme, esa sensación desaparece rápidamente a la vuelta,
al aterrizar en el Aeropuerto de Ezeiza.
“No fue el dinero lo que hizo que mi padre rico fuera

más rico. Fue su habilidad para expandir su realidad.”
(De Retírate Joven y Rico)
Un amigo dijo: “Hay tres partes para armar un negocio. Una es

encontrar la gente adecuada. La segunda es encontrar la oportu-
nidad adecuada. Y la tercera es encontrar el dinero. Rara vez las
tres cosas llegan juntas.” (De Antes de Renunciar a Tu Empleo)
Pero veamos varias frases más del libro Antes de Renunciar

a Tu Empleo:
• “Las estadísticas muestran que el 90 por ciento de todos los

nuevos negocios fracasan en un lapso de cinco años. Muchos
empresarios tienen un producto o servicio excelente, pero no
tienen las habilidades comerciales suficientes para construir
un negocio exitoso en torno a su producto.”
• “Una de las razones principales de la alta tasa de fracaso

de los negocios pequeños es el agotamiento. Es difícil hacer
dinero y seguir adelante cuando tu tiempo está atado en acti-
34
vidades que no te dejan nada de dinero o que te cuestan dinero

sin generar ingresos.”
• “La mayoría de las personas que tienen negocios pequeños,

entran en la categoría de ser dueños de un empleo en lugar de
ser dueños de un negocio.”
• “Trata de buscar socios que no estén financieramente nece-

sitados.”
• “La habilidad número uno de un empresario es su habilidad

para vender. Si no logras pasar por esta parte del proceso, es-
tarás mejor como empleado.”
• “La combinación de habilidades escolares y habilidades de

la calle te ayudarán a construir un negocio exitoso. Pero la
verdadera fórmula del éxito es tener habilidades de equipo.”
• “Si contratas gente simplemente porque te cae bien o porque

son parientes, y no puedes despedirlos cuando necesitan irse,
entonces tienes habilidades endebles.”
Volviendo a mi historia, si bien el día tiene la misma can-

tidad de minutos para todos, para los que trabajamos en
televisión, por momentos la vida parece que adquiere otra
velocidad y los cambios de realidades y contextos son dife-
rentes de los de otras profesiones. Así es como el cronogra-
ma de mi vida marcó que un miércoles estuviera solo en
Aruba, como mencioné al inicio, y cuarenta y ocho horas
más tarde me encontrara de vacaciones junto a mi familia a
35
5.800 Km. de distancia, bastante más al sur, en la ciudad de

Claromecó, Provincia de Buenos Aires.
De esas vacaciones recuerdo dos cosas: el contraste del tibio

Mar Caribe con la hermosa, pero ventosa, costa bonaerense.
Y mi búsqueda del libro Padre Rico Padre Pobre en las pocas
librerías de la tranquila Claromecó donde, cuando por fin
encontré una bastante bien surtida, la respuesta fue que ese
libro lo tenían, pero debían traerlo desde su local central,
ubicado a 70 Km. de allí en otra ciudad, Tres Arroyos.
Pero mucho antes de todo lo anterior, recuerdo mi primer

empleo en ventas, que conseguí cuando tenía diecisiete
años. En realidad, consistía en ser un simple promotor que
tenía la misión de cautivar clientes puerta a puerta para una
empresa de servicios médicos que ofrecía a sus asociados
un servicio de asistencia en urgencias y emergencias con
sus “unidades de terapia intensiva móviles”.
“Si no puedes vender, no puedes ser empresario.

Si no puedes vender, no puedes reunir dinero.”
(De Antes de Renunciar a Tu Empleo)
Para ese entonces no me daba cuenta, pero en ese tiempo

de mi vida, estaba recibiendo una de las lecciones más im-
portantes. No sólo se trataba de una lección financiera sino
que, además, ese trabajo me estaba impermeabilizando
para recibir críticas y evitar el rechazo, así como entrenan-
do para responder objeciones, persuadir a la gente, cerrar
36
operaciones y soportar presiones, ya que sin darme cuenta,

día a día todas esas cosas me hacían más fuerte mental y
financieramente.
“[Comúnmente] No hay programas de acción detallados ha-

cia la riqueza. En lo que respecta al dinero, la mayoría de las
personas sigue el plan financiero de sus padres, y ese plan con
frecuencia consiste en trabajar duro y ahorrar dinero.” (De
Retírate Joven y Rico)
Reflexionando sobre los conceptos de Robert Kiyosaki, me

puse a pensar en tanta gente que trabaja esforzadamente
día tras día, año tras año, pero que no tiene un incentivo ex-
tra cada cuatro años, como ocurre en mi caso con los mun-
diales de fútbol. Y reflexioné sobre el concepto en que él se
basa cuando habla de libertad financiera como la opción
para salir de lo que se conoce como “carrera de ratas”. ¿A
qué se refiere con esto?
No sólo Kiyosaki emplea la expresión Carrera de Ratas,

también lo hacen otros autores del área de finanzas perso-
nales y búsqueda de libertad financiera. Posiblemente sea
una analogía de la epidemia de peste negra que asoló a In-
glaterra a mediados del siglo XIV, que acabó con la mitad de
la población de entonces.
En aquella oportunidad ocurrió algo que hasta es desagra-

dable de relatar: miles de ratas salieron a la vista de todos a
competir por la basura y los restos de cosechas desechadas.
37
Pero la feroz competencia no era para asegurarse una larga

vida, sino apenas para vivir un día más. Y mientras más
ratas hacían lo suyo, la peste se diseminaba y más personas
morían. Quienes tienen como mascota un hamster pueden
ver la Carrera de la Rata con claridad, ya que este animali-
to se pasa el día entero girando en la rueda…para llegar a
ningún lado.
Actualmente la expresión es utilizada en el ámbito profe-

sional y en la escalera corporativa de ascensos, dada la com-
petitividad que existe en el saturado mercado laboral de
hoy. Alude particularmente a quienes trabajan en relación
de dependencia, viviendo, como se suele decir, de sueldo
en sueldo, sintiéndose en general insatisfechos en un em-
pleo que no les permite vivir como desearían, con poco o
nada de tiempo libre para dedicar a sus seres queridos, gus-
tos y proyectos personales. Y con la mayoría de sus sueños
postergados o, peor aún, olvidados.
38
“Las personas que no pueden controlar el flujo de su

dinero en efectivo, trabajan para las que sí pueden.”
Robert Kiyosaki
De hecho, las ratas viven al día, no son animales con orga-

nización de acopio para el futuro, si tienen cerca una fuente
de sustento no buscan otra y pueden competir fieramente si
el alimento escasea. Es su naturaleza. Algo que no pueden
modificar porque, a diferencia del hombre y al igual que el
resto de los animales, carecen de conciencia e imaginación.
Esa gran diferencia –ese atributo exclusivamente humano–
es lo que nos permite soñar, inventar, diseñar, crear. Y esto
va desde cualquier elemento básico de uso cotidiano que
alguien diseñe y fabrique, hasta una vida nueva que poda-
mos soñar… y llegar a vivir. Todo parte de un sueño y ése es
precisamente el tema de un próximo capítulo.
39
Capítulo II
.
.
Historia Personal de Cristian
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
Capítulo II Historia Personal de Cristian
“Cuando sos rico en tu mente toda tu realidad exterior termi-

nará obedeciendo a tu realidad interior.”
Bernardo Stamateas
1. VISUALIZANDO MI CAMINO.
C
reo que siempre quise ser rico; provengo de una fa-
milia de maestros, mi padre fue maestro, mi madre
es maestra (está jubilada y sigue trabajando), mis
hermanos son maestros, mis tíos son maestros. Por supues-
to que mi madre pretendía que yo siguiera los pasos de la
familia, por la seguridad que ese trabajo brinda. A pesar
de ello, una situación que viví en mi infancia me llevó a la
riqueza…
Mi padre militaba en la política y recuerdo que una vez

cuando era pequeño, fuimos con toda la familia a pasar el
día en casa de un compañero de mi padre. Este hombre,
médico de profesión, vivía en un chalet lujoso, inmenso;
tenía dos autos (que para la época era signo de status y bien-
estar financiero), e incluso contaba con personal de servi-
cio. Pasamos un día increíble y disfrutamos de una mesa
abundante en compañía de sus hijos, rodeados de juguetes.
43
Aprende a Ser Rico Capítulo II
Al terminar el día y ya de regreso a casa, le pregunté a papá

por qué nosotros no teníamos las cosas que habíamos visto
en aquella casa. Su respuesta fue sencilla y contundente:
“Porque él es rico”. Creo que desde ese momento quise ser
rico, pues asocié “buena vida” con riqueza. Imagino que
si me hubiera dicho: “Porque es médico o político”, habría
optado por alguna de esas ocupaciones… pero su respuesta
fue otra.
Pasaron los años y por complacer a mi padre, estudié en la

escuela técnica de San Fernando, la ciudad donde vivía-
mos. Pero a mis 17 años, en 1983, imagino que también in-
tentando acercarme a mi papá, me enrolé en la Escuela Na-
val Militar, donde sólo estuve un año porque me di cuenta
de que la vida militar no tenía mucho que ver con mi sueño
de riqueza. Observaba que los militares que tenían años
de carrera, pero no grandes fortunas; por lo que terminé
ese año sólo para no hacer el Servicio Militar Obligatorio
(todavía lo era en esa época), y decidí terminar mis estudios
como Técnico Constructor Naval en la escuela secundaria.
Al cumplir 18 años ya estaba viviendo solo y como tenía que

mantenerme, incursioné en temas relacionados con las ven-
tas. Años antes había escuchado que “el vendedor es una
persona que fija su propio sueldo”, ya que al ganar comi-
siones, normalmente no hay techo para sus ingresos. Para
entonces, ya había incursionado en un par de aventuras; a
los15, por ejemplo, con mi amigo Fabián D.M. vendimos 3
pares de medias por $10. Recuerdo que juntos íbamos a la
localidad de José León Suárez, en el Gran Bs. As. con dos
bolsos vacíos, comprábamos medias y las vendíamos casa
44
por casa, dividiéndonos una vereda cada uno. Nos alentá-

bamos en una sana competencia por ver quién vendía más.
A mis 17 años, en la época de vacaciones ingresé en

una empresa llamada SIMSA (Sistema Integral Me-
dico SA) como vendedor, era el más joven y desde ya, el
que despertaba más rumores. Durante tres meses tra-
bajé vendiendo planes médicos y ganando buen dinero.
Estas experiencias fueron la base para que a mis 18 años
me encaminara hacia la libertad financiera vendiendo en
muchas empresas, o en emprendimientos de cualquier tipo
que me ofrecieran la mejor paga. Era simple: ofrecer, acep-
tar el rechazo y buscar alguien más a quien ofrecer.
A los 22 años tuve la oportunidad de trabajar en ventas en

el que en ese momento era el “Banco Español” ; cuando éste
se fusionó pasé un corto tiempo en el “Banco Comercial del
Norte”.
Cuando cumplí 25 años comencé a vender tarjetas de cré-

dito para American Express y luego para Diners Club y el
Citibank. Corría el año 1989 y Movicom se acababa de ins-
talar en Argentina. Me enteré que dicha empresa contaba
con una muy selecta fuerza de ventas y sin mucho más que
coraje, le propuse a un gran amigo con quien habíamos
trabajado en American Express, que aplicáramos para un
puesto en ventas. En aquel momento, el gerente de ventas
era Ronnie Walker y fue él mismo quien nos recibió; luego
de varias entrevistas más, yo logré ingresar a este grupo de
14 vendedores que buscábamos clientes para las “valijas”
de casi 4kg de peso y un costo aproximado de u$3000, que
45
pagaban al contado. Lo que allí gané fue lo que me permi-

tió alejarme de ese trabajo para iniciar mi primer negocio
propio legalmente establecido, llamado “Cellular One”.
Vendíamos antenas para estos teléfonos, ya que la escasez
de antenas repetidoras generaba muchos problemas para
comunicarse y tener una “antena magnética o de gotero”
era muy fundamental. Así fue como durante muchos años
estuve vinculado a la telefonía celular, y hasta llegué a tener
una agencia de la extinta “Miniphone”, con casi 300 emplea-
dos, logrando en algunas oportunidades el primer puesto
en ventas.
De todo esto obtuve una experiencia increíble, ya que mi

soberbia e ignorancia consiguió que nos dejaran fuera del
mercado. Pero como no hay mal que por bien no venga, esta
experiencia negativa hizo que volviera a estudiar, ya que
creí por un momento que había quedado fuera del negocio
por carecer de educación formal. A partir de allí comencé
una alocada carrera por obtener el título de, en primer lu-
gar Administrador de Empresas, luego de Licenciado en
Comercialización, y más tarde varias maestrías, como por
ejemplo una Maestría en Administración de Negocios.
Finalmente cuando leí Padre Rico Padre Pobre allá por sep-
tiembre del 2005, me di cuenta de que la educación formal
no haría la diferencia en mi vida financiera. Recién enton-
ces supe que estaba dentro de la “Carrera de la Rata”, y que
trabajar sin descanso todo el día, no me conduciría hasta
dónde quería llegar: ¡la buena vida!
46
A partir de ese momento me esforcé por leer todos los libros

de Kiyosaki que llegaron a mis manos, fue como un desper-
tar que me permitió encontrarle sentido a las cosas.
En febrero del 2006 sentía desesperación por jugar el juego

Cashflow, pero los clubes que aparecían en la página de
Padre Rico que operaban en Argentina, no respondían mis
mails. De modo que hice traer un juego desde EE.UU. con
un amigo que viajaba frecuentemente y así pude empezar
mi propio club: “Club de Cashflow Padre Rico Argentino”,
en las oficinas donde funcionaba la consultora con un éxito
increíble. Tal fue el éxito que tuve que conseguir más juegos
dada la demanda que tenía cada mes. También di comienzo
a la página Web: www.padrericoargentino.com.ar, la única es-
pecializada en el tema; y en septiembre del 2006 realizamos
nuestro primer gran encuentro en un bar de Recoleta para
unas 50 personas. Fue un evento maravilloso que generó
más encuentros mensuales, para luego extenderlo a otras
provincias y países. Para el 2008 estábamos presentes en 12
países de Latino América y España, y en varias provincias
con 25 clubes de Cashflow. La experiencia, sin duda, fue
más que fructífera. Doy fe de que con este juego, ¡verdade-
ramente se aprende! Mucha gente se incorporó a los clubes
y muchos contribuyeron al crecimiento, lo cual nos llevó a
relacionarnos con la editorial de los libros, Aguilar, quienes
se mostraron muy bien dispuestos a apoyarnos en nuestras
actividades. De esta manera generamos una buena sinergia
juntos, lo que hizo posible llegar a conocer al propio Robert
Kiyosaki y su esposa Kim, cuando la editorial los trajo en el
año 2009 y me permitieron participar de todos los eventos
del Padre Rico. Lo mejor de todo fue la cita de quince mi-
47
nutos que me consiguieron para hablar en privado; la cual

se transformó en una larga charla de casi tres horas que
derivó en una invitación para participar del encuentro con
su equipo de expansión en sus oficinas de Phoenix. ¡Qué ex-
periencia! Conocer a las 25 personas que trabajaban con Pa-
dre Rico en “Educar Financieramente a la Humanidad”; ser
parte de este grupo me marcó profundamente y reafirmó
más aún mi sueño y mi misión, de ver vidas transformadas
al poder poner en práctica las enseñanzas aprendidas para
lograr la Libertad Financiera.
2. LIDERANDO MI PROPIO CAMINO
Hoy, casi seis años después de leer por primera vez un libro
de Kiyosaki, y tres de comenzar seriamente a trabajar por
mi libertad financiera, puedo afirmar que Kiyosaki tenía
razón: es posible llegar a la riqueza si se tienen los elemen-
tos necesarios, sueños claros, un plan a seguir y determina-
ción para alcanzarlos y no abandonar. Al momento de que
este libro sea editado, ya habré conseguido el primer esca-
lón que nos lleva a la libertad y que Padre Rico denomina:
“riqueza”, es decir, salir de “La Carrera de la Rata” que es
cuando los ingresos pasivos superan a los gastos. Esto es lo
que se trabaja una y otra vez en el juego Cashflow, para lue-
go llevarlo a la vida real. Hoy recibo ingresos pasivos y resi-
duales de varios sistemas empresarios (a través de una red
de mercadeo, de una franquicia, en % de participaciones en
comercios y negocios de otros), bienes raíces, negocios en
Internet, regalías de propiedad intelectual, etc.
48
Lo que yo, y muchos otros hicieron, es lo que cualquiera

puede hacer: construir múltiples fuentes de ingresos que
den tranquilidad financiera. Esto mismo se aprende en la
Escuela de Riqueza.
¿Están todos tus sueños claramente identificados? ¿Sabes a qué

nivel de riqueza quieres llegar? ¿Aspiras a ser una persona finan-
cieramente libre?
El plan lo encontrarás en este libro, así como en los libros

de Padre Rico, pero la determinación de alcanzarlo es sólo
tuya y depende del tamaño de tus sueños.
En el libro “La Conspiración de los Ricos”, Kiyosaki recuer-
da que su Padre Rico le decía: “Los sueños son regalos per-
sonales de Dios, nuestras propias estrellas en el cielo que
nos guían en el camino de la vida”. De no ser por los sueños,
nunca se hubiese convertido en un hombre rico. También
solía decir: “Si le arrebatas a una persona sus sueños, tam-
bién le quitas la vida”. Es por eso que el primer paso en mi
juego Cashflow, es la selección de un sueño. Mi esposa Kim
y yo, diseñamos este primer paso del juego en memoria de
mi Padre Rico”.
Te animo a que sueñes libremente, a que seas 100% humano,

a que seas todo lo que fuiste diseñado a ser, a que alcances
tu máximo potencial… y esto sólo se logra si tienes sueños.
Y por favor, ¡no dejes que otros te los roben! Los que dicen
que algo no se puede hacer, es sólo la medida de su propia
incapacidad de soñar y de ponerse en acción.
49
Capítulo III
.
Si Puedes Soñarlo,
Puedes Lograrlo
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
Capítulo III Si Puedes Soñarlo, Puedes Lograrlo
“Mi primer sueño es jugar el Mundial y el segundo… ¡salir

campeón!”
Diego Maradona, a sus 14 años de edad
1. SUEÑOS Y PERSEVERANCIA
C
omo dijo Walt Disney, si tenemos la capacidad de
soñar algo, podemos lograrlo. Mi sueño personal
era lograr la libertad financiera, de modo que fui
perseverante para conseguir el libro Padre Rico Padre Pobre.
Volviendo al momento en que lo encontré en una librería de

la ciudad de Claromecó, quiero contarles que hasta poder
sentarme a leerlo tuve que esperar un poco, soportando la
ansiedad… ¿Por qué?
Porque el local estaba cerrado, así es como muchas veces
nos suele pasar, lo que queremos tarda un poco en llegar,
pero cuando viene, lo disfrutamos mucho más. Al otro día
volví a pasar pensando que abrirían el local, pero para mi
sorpresa seguía cerrado.
Cuando pude contactarme con el dueño de la librería, el li-

bro estaba agotado y así fue como ¡seguí esperando! Tarda-
53
Aprende a Ser Rico Capítulo III
ron un par de días más en conseguírmelo e incluso cuando

llegó el momento, debí aguardar hasta la tarde cuando por
fin abrieron y me entregaron mi ejemplar. Esa misma noche
lo empecé a leer.
“En el colegio no te enseñan como lo hace la vida, y diría que

la vida es el mejor de todos los maestros. La mayor parte del
tiempo la vida no te habla. Es como que te va empujando y cada
empujón es la vida diciendo:
‘despierta, hay algo que quiero que aprendas’.”
(De Padre Rico Padre Pobre)
Sólo con haber leído esta historia, esta frase que cuenta en el
inicio del libro la manera en que los niños querían inventar
dinero de la nada, fabricando moldes con el plomo recolec-
tado de los pomos de dentífrico desechados por los vecinos,
supe que este libro me atraparía y que me llevaría a una
forma distinta de vida y de pensamiento.
“Para ser exitoso necesitas superar tu miedo a ser

rechazado y dejar de preocuparte
por lo que otros dirán sobre ti.”
(De El Cuadrante del Flujo de Dinero)
Desde el comienzo encontré que Kiyosaki presentaba en

el libro nociones claras que incluían los conceptos sobre fi-
nanzas personales que yo estaba buscando, incluyendo por
54
supuesto algunas de las puntos que los críticos mencionan

de él; como por ejemplo, que las cosas de las que habla ya
se saben, que ellos las han vivido y por ende objetan que no
son aplicables en nuestro país, que conocen esas ideas, etc.
Y, si bien es cierto que la mayoría de las personas pueden
conocer los conceptos, es también cierto que él los presenta
de un modo sencillo, con términos fáciles de entender para
cualquiera. Su modo claro y conciso permite una compren-
sión y posterior asimilación rápidas. Y hay algo más: los
conceptos se conocerán pero, ¿cuántas personas los apli-
can? ¿Cuántos se ocupan de instruirse y crecer para ser, y
luego hacer lo que haya que hacer para tener lo que querrían
tener? Admito que puede que todo el mundo conozca los
conceptos, pero yo creo que no los aplican.
Ocurre lo mismo en muchas disciplinas, la mía incluso, el

periodismo deportivo. Hay muchísimos periodistas y en-
tre ellos no son pocos los que se dedican a mi rubro. Pero,
¿cuántos logran obtener buen dinero de su actividad? Y
esto aplica a todas las actividades y profesiones. Es como la
diferencia entre un deportista amateur y uno profesional.
Para vivir de lo que uno hace, y quiero decir vivir muy bien,
hay que tener una disciplina férrea, buenos hábitos incul-
cados a fuerza de voluntad y tesón, una conducta aplicada,
cumplir los horarios que fueren, planificar objetivos, ser un
hacedor.
Todo eso es necesario y seguramente podríamos agregar

más pautas a esa lista. Pero hay algo antes que todo, sin lo
cual ninguna de esas cosas serviría de mucho ni llegaría-
mos muy lejos. Hablamos del sueño.
55
No existe autor de libros de motivación, autoayuda o creci-

miento personal que no esté de acuerdo con esto. Más aun,
detrás de un final de éxitos siempre hay un inicio de sue-
ños. Dicho de otro modo, cada vez que alguien alcanza el
éxito, en cualquier ámbito de la vida, hay inicialmente un
sueño que motivó a esa persona a ponerse en movimiento,
a superar obstáculos, a buscar alternativas si el camino se
le puso difícil. Y, si llega a la meta, es porque se mantuvo
enfocada en su sueño sin detenerse con las distracciones
del recorrido ni dejarse vencer por los desafíos o abatir por
las dificultades.
“El sueño es el motor y es la vela, es el viento y a la vez es la ma-

rea. Es timón y es el destino. Sin él, no hay dirección y así cual-
quier camino es bueno para cualquier cosa… o para nada.”
Cecilia Larrosa
“Si no sabes adónde quieres ir, ningún

viento es favorable.”
Séneca
2. ROMPIENDO PARADIGMAS
A partir de tener el libro en mis manos, mis vacaciones fue-

ron con mi esposa y Kiyosaki. Leía al despertarme, en la
playa, antes de dormir. Terminé Padre Rico Padre Pobre en un
par de días y, ¿qué creen que hice luego? Volví a la librería a
56
buscar el libro siguiente, El Cuadrante del Flujo de Dinero. Y,

si bien siempre me había gustado leer, pasar el tiempo en la
playa leyendo no había sido algo tan habitual para mí has-
ta ese momento. Empecé a comentar algunas de las cosas
que iba aprendiendo en esos libros, primero a mi mujer; y
cuando las vacaciones terminaron y volví a casa, me sentía
tan entusiasmado que quise compartir las nuevas nociones
financieras también con mis amigos. ¿No te pasó que cuan-
do sientes que descubriste algo que te cambiará la vida se lo
quieres contar a todo el mundo?
Pero entonces noté que aunque mucha gente decía tener

idea de todo lo que enseña el libro, no cambiaban el contex-
to en el cual se movían. No cambiaban sus rutinas, ni sus
hábitos. Observé que la mayoría de las personas no suelen
tener definidas sus metas, objetivos y sueños.
“Locura es hacer siempre lo mismo y pretender

obtener resultados distintos.”
Albert Einstein
El Cuadrante del Flujo de Dinero es un libro excelente para

tomar conciencia de cuáles son las posibilidades reales
que tenemos para alcanzar la libertad financiera, de acuer-
do con nuestro modo de generar u obtener el dinero. De
acuerdo a ello divide a las personas en “empleados”, “auto-
empleados”, “dueños de negocio” e “inversionistas”. Cada
categoría constituye una parte de un cuadrante (el del flujo
del dinero, precisamente). A la izquierda del mismo se ubi-
57
can los que podríamos definir diciendo que cambian tiem-

po por dinero: los empleados, que son quienes trabajan para
otro (para el sueño del dueño); y en el segundo cuarto del
mismo lado del cuadrante, se ubican los auto-empleados,
categoría que incluye a dueños de negocios pequeños, pro-
fesionales en general y cualquier persona que trabaje de
manera independiente.
Es decir, todos aquellos que si no trabajan, no cobran. Así

de sencillo. Los casilleros de la derecha están ocupados por
los dueños, ya sea de empresas tradicionales (dice Kiyosaki
de 500 o más empleados) o sistemas empresariales como
las franquicias, el network marketing, del que hablaremos
más adelante. En esta categoría encontramos personas de
espíritu emprendedor y hacedores, empresarios en gene-
ral. Muchos de ellos han logrado que su emprendimiento
trabaje para ellos, es decir que el flujo mensual de dinero se
siga generando aunque se ausenten un poco de su empresa.
Y el último cuadrante lo ocupan los inversionistas. Son los
que han logrado generar un flujo de dinero a través de sus
inversiones, sean éstas en bienes raíces, participaciones en
empresas, bolsa de valores u otras opciones.
58
¿Cómo lo han logrado?

Ésa era la pregunta que yo me hacía, la que me llevó a bus-
car ayuda y respuestas. Esa inquietud fue lo que me guió
hasta una página Web que encontré del modo en que re-
solvemos todo hoy en día cuando queremos saber algo: fui
ante el “Gran Oráculo”, esto es, Google. Confieso que “goo-
gleé” Padre Rico sin mayores expectativas y me sorprendí
al dar con algo llamado Escuela de Riqueza y, de hecho, ¡me
entusiasmé muchísimo!
Porque leyendo El Cuadrante del Flujo de Dinero me había

dado cuenta de que con mi plan de generar ingresos ex-
tra cada cuatro años gracias a los mundiales de fútbol, me
llevaría más allá de la mitad de mi vida poder concretar
mis sueños. Iba a tener que esperar por lo menos un par de
décadas antes de terminar de construir y equipar mi casa,
tener el auto soñado, hacer con mi familia algunos viajes
que ansiábamos y, en fin, cumplir mis sueños. Así que seguí
uno de los consejos que Kiyosaki da una y otra vez en todos
sus libros, que es ponerse en acción pero antes, educarse
financieramente.
Por eso me sentí entusiasmado cuando encontré la Escue-

la de Riqueza y sin dudarlo, me anoté de inmediato en un
seminario. En él había personas de Investor Time que en-
señaban conceptos de Day Trading1 presentando distintas
fuentes posibles de ingreso. Y el día terminaba jugando
Cashflow, el juego que propone Kiyosaki para entrenar la
mente y clarificar las ideas que vamos aprendiendo en sus
libros y/o en los seminarios de la gente que lo representa en
1
Day Trading se denomina a la práctica de comprar y vender instrumentos financieros, como por
ejemplo “acciones”, dentro de un mismo día, de modo tal que todas las posiciones cierran antes del
cierre del mercado ese mismo día.
59
el mundo, como es el caso del Lic. Cristian Abratte, coach

financiero, fundador en Argentina de Escuela de Riqueza y
co-autor de este libro.
Su organización, Escuela de Riqueza, tiene por misión for-

mar y desarrollar personas para que alcancen su Libertad
Financiera, a través de técnicas y herramientas basadas en
la filosofía del libro Padre Rico Padre Pobre pero abarcando
toda la obra de Robert Kiyosaki, con quien mantiene en la
actualidad una relación personal.
Fue el propio Cristian quien me informó que, en particular

en lo que al sueño se refiere, Escuela de Riqueza ofrece perió-
dicamente entre todos sus talleres, uno intensivo diseñado
especialmente para aprender a definir nuestros sueños, que
lleva el nombre de Sueños, la Base de Todo Éxito. Como verán,
no haría falta agregar demasiado al concepto, ya que el pro-
pio título deja en claro dónde se asienta el éxito.
Allí se nos invita a comprobar cómo cada persona exitosa,

antes de serlo, tenía un gran sueño que la motivó, en cual-
quier área: financiera, cultural, social, espiritual, etc. Esto
siempre ha sido así y seguirá siéndolo.
Cristian dice que “el sueño es la base de todo gran logro y
si no sabes cuál es tu sueño, ¡entonces no habrá un gran lo-
gro!” Pero lo maravilloso es que, podemos descubrir cuáles
son nuestros sueños, definirlos y vivirlos, hasta incluso los
más descabellados. Sin embargo, es necesario aprender a
encontrarlos y alimentarlos.
Detente a pensar por un momento:
60
• En la escuela o en tu hogar, o en cualquier otro ámbito, ¿te

motivaron a soñar?
• ¿Te enseñaron a imaginar todo aquello que seguramente

estás preparado para alcanzar en esta vida maravillosa?
Lamentablemente, en el noventa y nueve por ciento de los

casos, la respuesta es NO. Es por eso que es tu responsabili-
dad descubrir cuanto antes cuáles son tus sueños y el pro-
pósito de tu vida, para que llegues a alcanzar lo máximo.
Si de verdad deseas ser todo aquello para lo que has sido
creado, si de veras quieres llegar a alcanzar todo lo que pue-
des alcanzar, necesitas definir tus sueños y trazar la ruta
hacia ellos.
Volviendo a ese primer seminario al que asistí, diré que
me pareció espectacular, pero lo mejor de todo fue jugar
Cashflow, que era mi principal objetivo. Y lo jugamos
durante tres horas. Quedé impactado. Realmente considero
que participar de ese juego es un seminario en sí. Es el mejor.
Es muy didáctico. Y una de las cosas de las que me di cuenta
jugándolo, como ya dijimos, es el tiempo que toma generar
el dinero para concretar nuestros sueños.
Y ya que lo volvemos a mencionar, quisiera que quede claro

que es el sueño por excelencia la primera cosa que tenemos
que definir si queremos salir de la Carrera de Ratas. Pero,
¿de dónde nacen los sueños? ¿Qué motiva a una persona
a encarar un cambio? En su libro Las Cinco Piezas Más
Importantes del Rompecabezas de la Vida1, dice Jim Rohn:
“El cambio viene de una de dos fuentes. Primero podemos
buscarlo por desesperación… [precisamente] es esta sensa-
1
Comercializa Editorial Triskel Press - www.triskelpress.com
Tel.: (54 11) 4723-1739 - Argentina
61
ción abrumadora la que finalmente nos lleva a buscar so-

luciones. Desesperación es el resultado final e inevitable de
meses o años de negligencia acumulada, que nos trae a un
punto en el tiempo donde nos encontramos con la necesi-
dad de buscar respuestas a los retos que hemos acumulado
durante la vida.
La segunda fuente que nos lleva a hacer cambios en nues-

tras vidas es la inspiración. Esta puede venirnos en cualquier
momento y de muchas fuentes. Una canción o un libro pue-
den inspirarnos, como también puede hacerlo una char-
la efectiva y emocionante. La historia de alguien que ha
triunfado a pesar de las dificultades, puede conmovernos.
La inspiración, no importa su fuente, despierta emociones
en nosotros que reavivan la esperanza, la ambición y la de-
terminación… nos hace estar alertas de nuestro potencial.
Sentimos una chispa de deseo y nuestras mentes se abren y
van de una posibilidad a la otra; cada pensamiento cargado
con la promesa de la felicidad y el éxito futuro.”
Al igual que todos los autores de libros de crecimiento per-

sonal –para cualquier área de la vida– también Robert Ki-
yosaki nos dice que el primer objetivo, lo primero que debe
hacer alguien que juega Cashflow, es tener un sueño. Y por
supuesto que esto no se limita al juego sino que es clave en
la vida real.
62
Cristian siempre resalta que, contrariamente a lo que mu-

chos piensan, los libros de Kiyosaki no son solamente técni-
cos. Por el contrario, detrás de ellos subyace toda una filoso-
fía. De hecho, lo primero que él sugiere para cualquiera que
desee emprender su camino hacia la libertad financiera, es
que defina sus metas y objetivos con la mayor precisión po-
sible, más concretamente, tener un sueño determinado y
claro. Que el mismo sea tu fuente de inspiración en los mo-
mentos de dificultad. Que lo desees tanto que sin importar
lo que tengas que hacer para lograrlo, te motive lo suficiente
como para brindarte la fuerza para superar los obstáculos
que puedan aparecer en tu camino hacia ello, así como la
capacidad, apertura e intuición para ajustar el rumbo en el
caso de que el inicial no te esté llevando a la meta.
Kiyosaki dice que una de las diferencias entre el modo de

pensar de ricos y pobres es que los primeros siempre tie-
nen objetivos, persiguen un sueño, el cual, además, debe
ser muy personal. Y cuanto mejor definido esté, más fácil
será concretarlo.
63
“Mi padre pobre no lo era debido a la cantidad de dinero que

ganaba -que era importante-, sino debido
a sus ideas y acciones.”
(De Padre Rico, Padre Pobre)
3. CAMBIOS QUE TRAEN RESULTADOS
Algo que siempre se ve en los seminarios de Escuela de Ri-

queza es que, cuando una persona tiene un sueño que com-
parado al promedio parece muy grande, extremo o fuera de
lo común, los demás siempre le dirán que no es posible. Po-
dría ser el caso de alguien que quiere ser astronauta. Aun-
que muchas veces, es la misma persona quien suele auto-
censurarse, tilda su sueño de imposible y sencillamente, lo
olvida. Se limita a anhelarlo cada tanto como una fantasía.
Pero, ¿qué ocurre cuando se trata de un estudiante univer-
sitario con el sueño determinado de obtener el título, en me-
dio de un grupo de compañeros que, si bien también dicen
aspirar a terminar su carrera, no se consagran a estudiar
sacrificando horas libres, fines de semana y feriados para
asegurar un resultado en tiempo y forma?
El que se sacrifica tiene el norte marcado en la frente, sabe

que LA AGUDEZA DEL FOCO DEFINE LA REALIDAD.
Por lo tanto, da prioridad a su carrera y posterga salidas
y diversión por su sueño. En cambio sus compañeros co-
mienzan a relajarse y a aflojar el esfuerzo. Se dispersan
picoteando de esto y de aquello, aquí y allá. Y quizás inad-
vertidamente su realidad futura se va desdibujando. Poco
64
a poco van alejando su fecha de titulación. Desaprueban

exámenes, se desmotivan porque ahora se enfocan en los
“fracasos” y “obstáculos” y acaban atrasando su llegada a
la meta o, en el peor de los casos, abandonando.
Lo mismo aplica para quienes desean crecer en su profe-

sión o negocio. Muchos aspiran a ganar más y brillar en
su actividad, sin embargo dedican mucho de su tiempo a
divertirse y parrandear, distrayéndose de ese objetivo que
requiere energía constante para ser logrado. Algo nuevo y
diferente necesita dedicación extra. Nosotros hoy para ca-
minar, no necesitamos pensar ni ejercitarnos. No debemos
dedicar tiempo extra y esfuerzo porque ya lo logramos e
incorporamos. Sin embargo cuando tuvimos que aprender,
cada minuto del día lo dedicábamos a la consecución de ese
logro. Su adquisición nos exigió dedicación exclusiva.
No se puede construir una realidad diferente en las mismas

horas que se requieren para sostener el hoy. Para cambiar la
realidad de mañana el hoy debe ser modificado, la agenda
debe despejarse de distracciones y el foco debe centrarse
en el logro aspirado. El sueño debe tomar a la persona de
modo tal que “la lleve”, y sea a la vez el llamado y el empuje.
No significa esto dejar de dedicar horas al descanso, la fa-
milia, el cuidado de la salud e incluso el ocio creativo. Pero
si quieres más de lo que tienes hoy, o más que el promedio,
mientras el promedio se divierte, tú deberás estudiar o tra-
bajar extra y hacerlo en forma inteligente.
65
“Si quieres conocer el pasado, mira el presente, pues es su re-

sultado. Si quieres conocer el futuro, mira el
presente pues es su causa.”
Proverbio japonés
No existen límites para lo que puedes hacer si crees en ti mismo.

Si quieres hacer algo, y crees que lo puedes hacer, lo más pro-
bable es que lo realices.”
(De Padre Rico Padre Pobre para Jóvenes)
El ejercicio de “tus mundiales”:

Enfrentando tu realidad y definiendo tus sueños…
Así como yo hice con mi “plan de progreso” original –cada

cuatro años, con cada mundial de fútbol– para darme cuen-
ta de cuánto tiempo me llevaría lograr todo lo que quería, te
proponemos ahora un ejercicio que consiste en que senci-
llamente, respondas algunas preguntas. Las mismas bus-
can hacerte reflexionar sobre el recorrido por el que estás
yendo. Si el mismo podría llevarte a cumplir tus sueños (lo
cual no descartamos, por supuesto) o, si acaso estás soñan-
do en el aire, sin los pies en la tierra y sin un mapa de ruta o
plan de acción que de verdad te posibilite alcanzar tus ob-
jetivos. Porque es absolutamente posible lograrlos, ¿sabes?
Sólo tienes que conocer algunas pautas que te ayudaremos
a entender, aprender y seguir a lo largo de este libro.
66
Debes saber también que este tipo de trabajo es una peque-

ña parte de lo que realizamos en Escuela de Riqueza. Y que
toda la información que iremos compartiendo en cada capí-
tulo, ha sido extraída de los libros con los cuales trabajamos
y de los cursos especialmente diseñados para cada aspecto
de los pasos necesarios para alcanzar el éxito. Y como ya
dijimos, el primer paso es definir tu sueño.
Para ello te pedimos que te sientes cómodo en algún lugar
tranquilo e inspirador. Para algunas personas esto será un
rincón especial en su casa, escritorio, jardín o dormitorio.
Crea una atmósfera propicia a la introspección. Si es nece-
sario pon alguna música que te inspire, enciende una vela,
sahumerio u hornito de aceite. Lo que consideres apropiado
para tu relajación y conexión interior. Quizás sólo necesi-
tes sentarte en una linda cafetería especial para ti, o en un
lugar en la naturaleza. Cada uno sabrá. Lo que sí es impor-
tante es que te desconectes. Y esto significa sin celular ni In-
ternet. ¿O acaso estás llevando tu vida de un modo tal, que
no puedes tomarte unos minutos a solas contigo? (Si esto es
así, te recomendamos reflexionar sobre ello). Ahora respira
profundo unas cuantas veces, y responde:
¿Si el dinero no fuese un problema, cómo sería tu vida?
¿Cuándo crees que vas a llegar a tener libertad financiera?
¿Cuánto crees que cuesta la casa de tus sueños?
67
¿Cuánto cuesta el auto de tus sueños?
¿Cuánto necesitas para tus vacaciones o esos viajes soñados?
¿Cuánto dinero necesitas para ayudar a tus familiares, ya sean

padres, hermanos, suegros o quizás a entidades benéficas?
¿Cuánto cuesta ese colegio al que querrías enviar a tus hijos, el

curso que deseas hacer, el tratamiento para tu esposa, etc.?
(Puedes agregar todas las preguntas que desees)
Ahora suma todo lo anterior
Y luego determina:
¿Cuál es tu capacidad de ahorro anual, en dólares?
Por último, divide el resultado de tu suma por tu capacidad de

ahorro anual:
Escribe aquí el resultado de esa cuenta:
El resultado, amigo lector, es la cantidad de años que ten-

drás que trabajar haciendo lo que haces hoy, para alcanzar
68
tus sueños y/o tu libertad financiera (y siempre y cuando

no surjan cosas inesperadas, claro).
De modo que, si no te gusta el resultado que obtuviste, te

invitamos a seguir leyendo a fin de que aprendas cómo
cambiarlo. Y que puedas saber lo que tienes que hacer para
no esperar toda la vida para concretar aquello que tanto
anhelas en este momento.
“Tu futuro se crea a partir de lo que haces hoy,

no mañana.”
Robert Kiyosaki
69
Capítulo IV
.
.
Situación Financiera Actual
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
Capítulo IV Situación Financiera Actual
“Se trata más de lo que tú sabes que de lo que compras.

Invertir no es comprar. Es saber.”
(De Padre Rico, Padre Pobre)
1. “Mi hijo el doctor”…hoy no es suficiente
V
ivimos en un país que nos tiene acostumbrados a
ciclos económicos variables, los cuales traen como
consecuencia cierta inestabilidad que no resulta fa-
vorable para sus habitantes. Las fluctuaciones económicas
de la Argentina nos plantean una verdadera incógnita y
complejidad a la hora de planificar nuestras vidas financie-
ramente. Observando los últimos doscientos años de histo-
ria, pareciera ser que para hacer una proyección económica
de nuestro país, no se necesitaría ser demasiado experto,
ya que rápidamente podemos advertir una tendencia que
indica que a un ciclo de auge, le sigue uno de declinación. La
dependencia de los mercados externos, el endeudamiento
y el riesgo país se repiten; esto genera una preocupación
periódica a la que, cuando cada tanto logramos ingresar a
un período de estabilidad, se le suele sumar la incidencia
de la inflación.
73
Aprende a Ser Rico Capítulo IV
“En lugar de preguntar al Presidente [de tu país] lo que hará

respecto a la crisis económica,
mejor pregúntate: ¿Qué haré yo?”
(De La Conspiración de los Ricos)
Si analizamos las estadísticas relacionadas con la vida de

las últimas generaciones de la clase media argentina, po-
demos observar cómo las familias ubicadas en ese nivel
socio-económico han ido perdiendo notablemente su ca-
pacidad de progreso financiero. Lo que para un asalariado
décadas atrás era un proyecto difícil pero alcanzable, hoy
pareciera una utopía. La posibilidad de ascenso social ha
ido mermando.
Como ejemplo personal cito a la generación de mis dos

abuelos: mi abuelo paterno era empleado de un frigorífico,
mientras que mi abuelo materno fue hornero desde los cinco
años. Fueron los típicos trabajadores de la primera mitad
del siglo XX que, a base de sacrificio y esfuerzo personal,
lograron ver sus balances personales beneficiados gracias
a una práctica o un hábito hoy cada vez más extraño: la
capacidad de ahorro.
Para ellos, haber completado la escuela primaria ya era

un logro. Sin embargo a nuestros abuelos, tan sólo con sus
salarios les era posible solventar los gastos del consumo
doméstico, respaldar la educación de sus hijos y, con
el correr de los años, adquirir algún terreno y edificar
su propio hogar. Es verdad que tal proyecto familiar
74
demandaba perseverancia y voluntad, y quizás el avance

era lento, pero año tras año tenían al menos algo de progreso
asegurado; y aun más si alguno de los hijos lograba un
título universitario, ¡M’Hijo El Dotor!, como el título de una
obra de teatro argentina de principios del siglo XX de ��Flo-
rencio Sánchez, creían haber tocado el cielo con las manos.
En aquella generación, la capacidad y la cultura del ahorro

estaban tan arraigadas que abundan ejemplos de cómo
después de la muerte de alguno de nuestros abuelos,
muchos de nosotros encontramos guardados entre sus
pertenencias en algún cajón o ropero, billetes viejos,
la mayoría ya sin valor producto de la inflación (billetes
de otra época como por ejemplo los así llamados Pesos
Moneda Nacional, o más adelante los Pesos Ley 18.188 ó los
Pesos Argentinos).
En la siguiente generación, la de nuestros padres, el ritmo

que vivió la juventud fue más vertiginoso y la clase media
no estuvo exenta de dificultades económicas. Mientras li-
diaban con sus padres, quienes les imponían el pensamien-
to de que “sin terminar por lo menos el colegio secundario
no serás nada en la vida, y si vas a la universidad, mejor
aun”, esos jóvenes que maduraron escuchando los temas
musicales del Club del Clan1, se iban insertando de a poco en
el mercado laboral; y mediante horas extras más una bue-
na administración de sus salarios, pudieron juntar algunos
billetes que les permitieron lograr sus metas económicas.
El primer Fitito2 era el objetivo para los varones, mientras
1
Programa argentino de TV de comienzos de los años sesenta, transmitido en varios países de Améri-
ca Latina, donde un grupo de cantantes cantaban en español canciones en ritmos beat y pop. Al-
canzaron enorme difusión y tuvieron una notable influencia en los gustos musicales de una parte
sustancial de la juventud de entonces.
2
Nombre popular del automóvil Fiat 600. 75
que para las mujeres emprendedoras que trabajaban, sus

“quincenas” les venían de maravillas para “ahorrar para el
casamiento”.
Si bien en la década de los 70 “comprarse el terrenito” ya no

era tan fácil como antes, en realidad, buscando oportuni-
dades por el barrio y con un poco de paciencia, pensar en
comprar la casa propia no era algo tan descabellado para
un empleado.
Pero ya en los primeros años de este nuevo milenio, la ma-
yoría de los que intentamos constituir un hogar y formar
una familia nos tuvimos que acostumbrar a convivir con
una deuda permanente en nuestros balances contables. In-
cluso para los “afortunados” que mantenemos un empleo
y contamos con algunos beneficios laborales que nos hacen
estar un escalón arriba del promedio, llegar a la vivienda
propia depende de una estrategia un poco más sofisticada
que la de nuestros padres y abuelos.
Heredar un lote o una vivienda y refaccionarla, acceder a

un crédito bancario a 30 años, o la suma de ambas cosas fue
lo que les permitió a muchos convertirse en dueños de sus
hogares y alcanzar el sueño de la casa propia. Para otros,
“alquiler” es un término con el cual conviven, sumado a las
dudas de cómo revertir esa situación y a la espera de alguna
oportunidad, lo que agrega un sabor “especial” a sus vidas;
lamentablemente se trata de un sabor amargo.
En cuanto a la educación, las últimas generaciones creci-

mos con conceptos como “el que no aprenda computación
76
será un analfabeto; hoy el inglés es indispensable y la uni-

versidad te asegura tu futuro”.
Pero las nuevas generaciones van teniendo nuevos desafíos.
Claro que siempre ha sido así, pero ya decía Heráclito que
“el cambio es lo único permanente”. Hoy se hace necesario
mucho más que un título universitario. Especializaciones,
maestrías y postgrados son indispensables si aspiramos a
tener la oportunidad de alcanzar los primeros puestos en la
carrera corporativa, o la de ratas, según cómo se mire.
2. Comenzando mi educación financiera
Todo esto daba vueltas en mi mente, así que una de las pri-
meras preguntas que le hice a Cristian Abratte de Escuela de
Riqueza fue:
Walter: En algunos libros sobre finanzas personales, en-

cuentro que el tema de la educación financiera no es tratado con
la importancia que yo creo que tiene. ¿Qué podrías decirme al
respecto?
Cristian: La educación financiera es la que propor-

ciona la Inteligencia Financiera, y ésta es la base de la rique-
za. Hay quien nace con la inteligencia financiera adecuada
como un talento natural; para la gran mayoría, es algo que
debemos aprender y adquirir. Un tema sumamente impor-
tante en nuestra época es que el plan que servía para el siglo
pasado y la era pasada (la industrial), no aplica de ninguna
manera para esta era (la de la información) y este siglo: estu-
diar, sacarse buenas calificaciones y buscar insertarse en la
carrera corporativa o en la sociedad del siglo XX, no nos ga-
77
rantiza vivir financieramente bien y eso es algo que no ne-

cesita ser probado, lo vemos día a día con los miles de nue-
vos profesionales recibidos que pueden ser muy exitosos
académicamente, pero eso nada tiene que ver con resulta-
dos extraordinarios en lo financiero. Esta era, este siglo nos
deja claro que la buena vida tiene que ver con el equilibrio
entre el tiempo y el dinero. Ganar lo suficiente para vivir las
experiencias ricas que la vida ofrece, con quienes amamos,
dedicando tiempo de calidad en cantidad; eso requiere que
tengamos la mítica “Libertad Financiera” es decir, obtener
ingresos pasivos o residuales (aquellos ingresos de dinero
que no requieren de mi participación activa, que se generan
sin que yo deba trabajar para ello, por ejemplo: poner dinero
en el banco y cobrar intereses, comprar un inmueble y ob-
tener renta, comprar una participación en una empresa y
cobrar dividendos, etc.) que superen nuestros gastos. Todo
esto requiere entre otras cosas, conocer acerca del dinero y
sus reglas, para aprovecharlo al máximo y poder alcanzar
nuestras metas y ambiciones, por lo menos, las que están
relacionadas con el dinero.
Déjame darte un ejemplo sencillo: la mayoría de las perso-
nas conducen su automóvil sin haber hecho un curso para
aprender a hacerlo. Sin embargo, para llegar sanos y salvos
a destino y no generar un caos con otros conductores y pea-
tones, es de vital importancia conocer muy bien tanto las
reglas locales de tránsito como ciertas particularidades téc-
nicas que hacen al buen manejo de un automóvil. Ahora, si
cambiásemos de contexto y nos fuéramos a Inglaterra, por
ejemplo, deberíamos cambiar nuestras reglas y adecuar-
nos, pues allí se conduce por la mano izquierda. Si lo hicié-
ramos por la derecha como en nuestro país, no llegaríamos
78
muy lejos seguramente. La analogía que intento hacer es,

que todo el mundo puede manejar el dinero, lo que equivale
a hacer andar el automóvil. De hecho de algún modo u otro
todos manejamos nuestro dinero, pero solamente quienes
conozcan sus reglas podrán llegar sanos y salvos financie-
ramente a su destino planeado, ya sea vivir mejor, lograr
sus sueños, jubilarse con verdadero júbilo o lo que deseen.
¿Qué puede esperar alguien que sin conocer las reglas de
tránsito locales se lanza a las calles con su auto? Yo diría que
puede esperar chocar, accidentarse, destruir su vehículo y
lo que sería peor aún, quizás lastimar a sus seres queridos,
a sí mismo o a otros en su intento. Pasa lo mismo con el
dinero, sólo que en esta área el equivalente a un choque no
es tan drástico y evidente como un accidente automovilís-
tico. Además, como suele sucederle a la gran mayoría de
la gente, los “accidentes” con el dinero son sencillamente
asimilados sin tanto impacto y hasta nos acostumbramos
a que sucedan.
Pero necesitamos aprender acerca del dinero, su historia,

sus usos y costumbres, qué es y cómo cambia, sus reglas,
aprender acerca de todo lo que nos lleve ‘sanos y salvos’
adonde queremos ir, financieramente hablando.
Por ejemplo, conocer la historia del dinero es fascinante y
sumamente importante para luego comprender sus leyes.
Entender cómo el dinero real pasó a ser una divisa o medio
de cambio o “dinero de confianza”, es fundamental y nos
permite saber que en nuestras billeteras o cuentas banca-
rias no tenemos más que ‘papel pintado’ (muchos recorda-
rán al Austral, o el Patacón, o el Lecop, o el… ), que además
cada día va perdiendo valor contra el dinero real (el que no
79
cambia de valor, el que se aprecia y valoriza con el paso del

tiempo).
3. Cambian las épocas, cambian las reglas
La humanidad ha estado expuesta a y se ha venido desarro-

llando en, diferentes eras o etapas desde el principio de los
tiempos. Estas etapas, a grandes rasgos y desde la perspec-
tiva de la generación del sustento, son las siguientes:
• La Era Prehistórica: fue el periodo más largo de la his-

toria, varios millones de años, con un auge muy marcado
del nomadismo y la cacería. No existía mayor riqueza que
la de “sobrevivir” sin convertirse en el almuerzo de algún
depredador.
• La Era Agraria: esta era dura unos miles de años y aquí la

riqueza se medía en tierras, que estaban en manos de quie-
nes tuvieran la fuerza y el liderazgo del lugar. Las reglas
estaban vinculadas a las tareas artísticas (no industrializa-
das) de trabajo en familia. Si bien en los períodos más cer-
canos donde ya se habían estructurado las clases sociales,
existía el equivalente a escuelas, éstas no eran “públicas,
gratuitas y obligatorias” y sólo eran educadas algunas per-
sonas de la burguesía y cercanas a los religiosos. No había
jubilación. La familia más joven se encargaba de la familia
mayor, y los ancianos eran respetados por su sabiduría.
• La Era Industrial: es un período histórico en el que se

realiza el mayor conjunto de transformaciones socioeconó-
micas, tecnológicas y culturales de la historia de la humani-
80
dad, desde el Neolítico. Se inicia a fines del año 1700 con la

invención de la primera máquina de vapor, pero toma auge
a fines del 1800 constituyendo su pico posteriormente a la
Segunda Guerra Mundial. Las reglas eran claras: estudiar,
sacarse buenas notas y tratar de ser el más “elegible” para
que una empresa se haga cargo de nuestras necesidades.
No era necesario pensar sino ejecutar lo que “el jefe” dije-
ra. Y era algo bueno en esa época, pues quien se sumara al
sistema y siguiera esas reglas, tenía la supervivencia ga-
rantizada. En los años dorados de la era industrial, cuando
alguien entraba a trabajar en una empresa, y si el empleado
así lo quería, podía seguir allí de por vida; a su retiro, la em-
presa le daba un lindo reloj de oro y una pensión vitalicia.
Por esa razón el sistema educativo los preparaba para eso:
ejecutar órdenes. El problema es que “eso” no existe más,
pero el sistema hoy nos sigue preparando para lo mismo.
Por eso nos obligan a memorizar fechas, cifras y fórmulas
que luego en la mayoría de los casos, no nos servirán para
la vida real. El objetivo es lograr “aprobar” los exámenes.
• La Era de la Información: es un término aplicado al pe-

ríodo en el cual el movimiento de información se volvió
más rápido que el movimiento físico. La denominación se
empezó a utilizar a partir de 1989, con la caída del muro de
Berlín y cuando la Internet llegó a todos los confines del
mundo. Las reglas de la era: flexibilidad y visión, pues los
cambios se suceden casi inmediatamente. Esto podemos
verlo principalmente en el área financiera y el modo en que
esto afecta la vida de cada persona. El dinero se ha transfor-
mado en un medio tan importante de vida como el agua o el
oxígeno, por eso debemos aprender a manejarlo.
81
Según la teoría económica convencional, esta última era se

caracterizó por considerar a la información como un “re-
curso” que generaba ventaja competitiva y se logró ampliar
el poder de las redes para hacer más eficiente la distribución
de este recurso, por medio de inventos como la telegrafía,
el teléfono y en las últimas décadas por supuesto Internet.
Bob Metcalfe determinó que: “El valor de una red es igual
al cuadrado del número de usuarios”. En otras palabras, el
valor de una red de comunicaciones aumenta proporcio-
nalmente al cuadrado del número de usuarios del sistema
(n2). Esto es, 2 usuarios es igual a una red de valor 4 (2°). Por
ejemplo, si tengo una computadora y la conecto a otra, la
suma de las dos va a ser más que dos, porque ahora dichos
aparatos pueden intercambiar información y pueden hacer
muchas más cosas en forma conjunta, que si trabajaran en
forma separada. Gordon Moore dijo: “El rendimiento de un
procesador se duplica cada 1,5 años o, lo que es lo mismo, su
precio se reduce a la mitad”. Es tan sencillo como decir que
cada año y medio, vamos a poder hacer el doble de cosas por
el mismo dinero. En esta etapa es cuando Microsoft forjó
su poderío a raíz de la comercialización de los mecanismos
subyacentes que facilitan la distribución de la información.
El Tecno-capitalismo o economía intangible: es producto

de la era de la información, es la era económica actual, en la
que los cuatro recursos claves para la actividad económica
y la ventaja competitiva son:
• Conocimiento: aquello que la gente sabe emplear.

• Colaboración: cómo interaccionan las personas para
crear valor.
82
• Compromiso: la entrega a la empresa.

• Calidad temporal: la rapidez con la que se crea valor.
Todo lo expuesto demuestra una serie de etapas y sub-
etapas que se caracterizan y se definen entre sí por hechos
históricos relevantes; estos marcan el principio y el fin de
cada una de ellas, por lo cual sería lógico pensar que en di-
ferentes eras, el hombre debería hacer cosas distintas. Por
ejemplo, sería irracional considerar una costumbre del pa-
leolítico como una alternativa viable para enfrentar la era
agraria, o llenar mi mente de niveles exorbitantes de infor-
mación para resolver problemas de la prehistoria.
De manera que en cada era se requieren diferentes reglas,

valores, actitudes, costumbres y actividades para enfrentar
con éxito los retos existentes en cada etapa. Por eso llama
poderosamente la atención la gran cantidad de personas
que hoy en día, en la era de la información, ponen en prác-
tica lo que una vez resultó muy útil para la era industrial e
incluso lo aplican en este período del tecno-capitalismo y la
revolución de las redes.
4. Algo más sobre la historia del dinero
Otros curiosos aspectos relacionados con la historia del di-

nero que es interesante conocer es, por ejemplo, algo que
la mayoría de las personas no sabe, que al igual que casi
todos los Bancos Centrales de cada país, la Reserva Federal
de Estados Unidos –creada en 1913 contra la voluntad de
los constituyentes de esa nación, que no aprobaban la exis-
tencia de un banco nacional que controlase los suministros
económicos– no es ni federal ni estadounidense; y además,
83
no tiene reservas y tampoco es un banco. Kiyosaki en su

libro La Conspiración de los Ricos relata que, “en cuanto la Re-
serva Federal entró en funcionamiento se establecieron las
únicas dos series de reglas económicas: la primera serie es
para la gente que trabaja para obtener dinero, y la segunda serie
es para los ricos que imprimen el dinero. En 1971, cuando el pre-
sidente Nixon retiró el dólar del patrón oro, la conspiración
de los ricos se completó. Luego en 1974 el Congreso de Esta-
dos Unidos aprobó el Plan de Seguridad de Ingresos del Re-
tiro para el Empleado; con él surgieron nuevos vehículos de
jubilación (como el 401k, algo parecido a las AFJP). Este plan
logró que millones de trabajadores que gozaban de planes
de retiro de beneficios definidos (BD) proporcionados por
sus empleadores, tuvieran que cambiar a planes de retiro
de contribución definida (CD), poniendo así todo el dinero
de su jubilación en el mercado de valores y en fondos de
inversión. A partir de ese momento, Wall Street controlaba
la jubilación de los ciudadanos americanos. Las reglas del
dinero habían cambiado y se habían inclinado a favor de
los ricos y los poderosos. El boom financiero más grande del
mundo había comenzado”….Y explotó en 2009.
Kiyosaki continúa: “El dólar dejó de ser dinero en 1971 para

convertirse en divisa y, como consecuencia, los ahorristas
comenzaron a perder. El gobierno de Estados Unidos tenía
autorización para emitir dinero en mucho menor tiempo
del que se necesitaba para ahorrarlo. Cuando un banquero
se emociona hablando del interés compuesto, nunca mencio-
na el poder de la inflación compuesta o de la deflación compues-
ta, como en el caso de la crisis actual. Inflación y deflación
surgen cuando los gobiernos y los bancos intentan contro-
84
lar la economía mediante la emisión y préstamo de dinero

inexistente; es decir, dinero cuyo único respaldo económico
son ‘la fe y el crédito’ de Estados Unidos. Gente de todo el
planeta ha creído durante años que los bonos estadouni-
denses son la inversión más segura del mundo. Los ahorris-
tas adquirieron obedientemente y por mucho tiempo bonos
estadounidenses, porque lo consideraban un movimiento
inteligente. Ahora, los bonos de 30 años del Tesoro de dicho
país pagan menos de tres por ciento de interés. Para mí, es
una muestra de que en el mundo hay demasiado dinero
falso, de juguete, y de que los ahorristas van a salir perdien-
do…”
Habiendo concluido la explicación anterior, Cristian pasó

luego a hacerme estas preguntas para ayudarme a reflexio-
nar:
• ¿Qué te enseñaron en la escuela acerca del dinero?

• ¿Qué te enseñaron tus padres y tu entorno sobre el dinero?
• ¿Qué aprendiste en la universidad sobre el dinero y/o sus
leyes?
Haz estas preguntas a quien quieras. Vas a encontrarte con

que prácticamente nadie sabe nada sobre el dinero y, en
general, tampoco les interesa saberlo. Al menos ésa fue la
experiencia que he recogido hasta ahora en mi contacto con
la gente. Pero debido a los problemas económicos que esta-
mos atravesando a nivel global, empieza a ser una cuestión
de supervivencia saber más acerca del dinero y cómo éste
afecta nuestras vidas.
85
En relación con esto, hay un libro que echa luz sobre la pro-
gramación obsoleta que recibimos en la escuela. Se trata
del primer libro de Robert Kiyosaki, que no fue Padre Rico
Padre Pobre como cree la gran mayoría de sus lectores y se-
guidores, sino una excelente obra que habla sobre distintos
temas relacionados a la educación y cómo ésta nos afecta,
programa e incluso determina, en la mayoría de los casos,
un futuro en el que a muchos se les hace muy difícil triunfar
y prosperar. El libro se titula Si Quiere Ser Rico y Feliz… ¡no
vaya a la escuela! 1 De ningún modo propone dejar de estu-
diar sino todo lo contrario. Advierte a sus lectores que no es
posible buscar progreso, satisfacción o riqueza a través de
lo que se aprende en el colegio, pues no lo encontraremos
allí.
En este fabuloso libro, Kiyosaki dice que la educación es

una de las áreas más atrasadas respecto de nuestras necesi-
dades actuales, justamente por lo que mencionamos antes:
hoy en día en casi todos los niveles nos siguen preparando
para una era que ya pasó –la era industrial– con la propues-
ta de estudiar, obtener buenas notas y ser un excelente tra-
bajador para conseguir un buen empleo en alguna empre-
sa. Así nos asegurábamos antes el futuro, con un ingreso
aceptable y una jubilación decorosa que nos permitía vivir
los “años dorados” del retiro en forma digna. Nada de eso
puede lograrse hoy, el concepto ha quedado obsoleto, como
ya dijimos pero consideramos importante recalcar. Porque
a pesar de que esto está comprobado, cada vez hay más uni-
versidades que se propagan como fuego en una llanura y
las personas siguen buscando obtener un título tras otro,
1
Publica editorial Triskel Press, San Isidro, Bs. As., Argentina.
86
con la esperanza de que eso les permita “ser elegidos” por la

gran empresa que “asegure” su futuro. Seguimos operan-
do con las reglas de las décadas de 1950 y 1960, como si hoy
aún fueran válidas. Ese mundo ya no existe. Hoy todo es
veloz y variable. Lo que se necesita ahora es tener un conoci-
miento general y alineado con los sueños que cada persona
tenga, a fin de ayudarla a cumplirlos.
¡Es hora de despertar! Necesitamos hacernos cargo de

nuestra propia educación y de la de nuestros hijos porque el
mundo en el que vivíamos ha cambiado y sigue cambiando
a gran velocidad. A la mayoría de nosotros la escuela no nos
preparó para enfrentar los desafíos del mundo actual. Al-
gunas características del sistema antiguo plantan en noso-
tros semillas de fracaso emocional… ¡y económico! Con los
años esas semillas germinan, saboteando nuestros intentos
de progreso. Una de ellas es que se castiga el error con una
mala nota, lo que nos programa negativamente con respec-
to a equivocarnos. Eso nos hace temer al error, cuando en
realidad es el aprendizaje de cómo algo no debe hacerse. Y
para empeorar las cosas, luego a los jóvenes les termina im-
portando más obtener buenas calificaciones que aprender.
“La razón por la que sé tanto es porque he cometido

muchos errores.”
R. Buckminster Fuller
Otra característica negativa del sistema educativo, que se

menciona en Si Quiere Ser Rico y Feliz… ¡no vaya a la escuela!,
87
es que nos enfrenta a unos con otros en una lucha trágica

donde sólo los que son definidos como “más aptos” parecen
tener la oportunidad de sobrevivir. El calificativo de “gana-
dor” es aplicado solamente al quince por ciento, mientras el
resto queda con su autoestima seriamente dañada.
Kiyosaki expone estas y otras nociones igualmente escla-
recedoras en ese primer libro, que además ofrece conceptos
para ayudar a revertir el daño, enseñándonos cómo identi-
ficar y cambiar la programación perjudicial recibida en cla-
se de manera inconsciente; a la vez que describe el modo de
adquirir habilidades y conocer los principios que nos ase-
guran el progreso, aun en medio de tiempos turbulentos.
Pero volviendo a mis interrogantes planteados a Cristian,

de Escuela de Riqueza, luego de escuchar todo lo anterior le
hice la otra pregunta:
Walter: ¿Qué cosas fundamentales debemos tener en

cuenta, cuando hablamos de educación financiera?
Cristian: Creo que hay algunos temas básicos en la

educación financiera que vale la pena revisar, aprender o
mejor aún, aprehender. Uno de ellos es el que comenté antes:
tener en claro que el objetivo es conseguir Libertad Finan-
ciera, es decir ingresos pasivos y residuales que superen
nuestros gastos. Otro tema a tener en cuenta será ordenar-
se financieramente, ya que muchísima gente gasta más de
lo que gana. Es natural que ocurra, dada la facilidad para
lograr los créditos al consumo, la búsqueda continua de
mejorar el nivel de vida a través de compras superfluas y la
falta de orden en el manejo del dinero. La gran mayoría de
88
la gente tiene una única fuente de ingresos pero docenas de

fuentes de gastos, y sólo llevamos la cuenta de “los grandes
gastos” pero no los pequeños que hacemos a diario. Otro
tema básico es PAGARSE A UNO MISMO PRIMERO y es
un principio que Robert Kiyosaki ha extraído del libro El
Hombre Más Rico de Babilonia. Este libro es un clásico mo-
derno en materia de ahorro y planificación financiera. Des-
cribe las claves para adquirir, mantener y reproducir el di-
nero, en un lenguaje sencillo, informativo y motivador. Su
autor, George Clason, emplea parábolas e historias babi-
lónicas que muestran cómo esa antigua civilización logró
acumular riquezas y alcanzar un desarrollo económico sin
comparación para su época. El libro muestra un verdadero
camino hacia la prosperidad, que relaciona con la felicidad,
ofreciendo análisis y soluciones prácticas para los proble-
mas financieros personales que todos enfrentamos a dia-
rio. Dado que toda persona tiene ambiciones y sueños por
cumplir, para lograrlos es necesario aprender a ser exitosos
con el dinero.
El principal principio que muestra este libro es PÁGATE

A TI MISMO PRIMERO, y es algo que nunca nos han en-
señado ni nos enseñarán, pero que es fundamental en el
camino a la riqueza. Piensa en esto: la mayoría de nosotros
trabajamos por un sueldo o ciertos ingresos. Y en cuanto
cobramos el cheque, ¿qué es lo primero que hacemos? Pa-
gar las cuentas pendientes: hipoteca o renta, colegio de los
niños, seguros (auto, casa, medicina privada, etc.), cuotas
de compras adeudadas, resúmenes de tarjetas de crédito,
etc., y la lista puede ser mucho más larga. Luego, si nos que-
da dinero, vienen los gustos que nos damos, porque nos
89
decimos que no trabajamos ‘como burros’ todo el mes para

no darnos ni un solo gustito, ¿verdad? Y si no nos queda
efectivo, el gusto nos lo damos a crédito, ¡después de todo,
para algo se vive! Si aún queda algún resto de dinero recién
ahí es cuando ahorramos, normalmente para cubrir una
necesidad u otro gusto como vacaciones o quién sabe qué,
depende de cada persona. Pero nunca pensamos en noso-
tros como ‘Yo, S.A.’, ya que aunque no parezca, ‘yo soy mi
propia empresa y soy mi único trabajador’. Al menos esto es
así mientras nos mantengamos en los cuadrantes E y A del
Cuadrante del Flujo de Dinero, e incluso es válido mientras
estemos en el camino de transformarnos en dueños de un
sistema empresarial (D) o en inversor (I), si es que todavía
no hemos conseguido la libertad financiera.
¿Y qué pasa si yo no trabajo? ¿Qué pasa si falto? Bueno, si

soy empleado (E) de alguien, quizás cierto número de días
puedan considerarse como parte de una enfermedad, pero
no me pagarán mucho tiempo enfermo. Si soy autoemplea-
do (A), esto es, profesional independiente o comerciante,
día que no trabajo es día que no cobro. Por eso es tan im-
portante trabajar el concepto de PAGARSE A SÍ MISMO
PRIMERO pues ese porcentaje que me pagaré será preci-
samente el que primero ahorraré. Y luego, con la educación
financiera adecuada, lo podré invertir para llegar a tener un
respaldo y alcanzar la independencia. No hacerlo así, hoy
es casi un suicidio financiero.
90
“En lugar de temer a las tormentas que vendrán en el futuro,

las espero ansioso, convencido de que nos hacemos más fuertes
enfrentando los desafíos de la vida.”
(De La Profecía del Padre Rico)
Yo, Walter, iba reflexionando sobre todos estos conceptos a

medida que los iba leyendo u oyendo, según fuese el caso.
Sentía cómo mi mente se expandía y lejos de angustiarme,
la información me generaba entusiasmo y expectativa posi-
tiva. Mi sensación era la de estar frente a una puerta que se
abría a cosas buenas, o la de estar en los primeros peldaños
de una escalera ascendente. ¿Y qué habría más allá? Empecé
a vislumbrar que en el extremo más alto me esperaban mis
sueños alcanzados.
De modo que seguí formulándole preguntas a Cristian.

Esta vez me limité a pedirle que me hablara sobre algún
concepto que él considerase clave. Eligió hablar sobre la
diferencia entre un activo (inversión, valores) y un pasivo
(obligación, compromiso), y la importancia de generar ac-
tivos. Yo ya había leído sobre ello en Padre Rico Padre Pobre,
pero fue muy bueno recordarlo.
Cristian: Kiyosaki dice que conocer el concepto de

activo y pasivo es la regla número uno, si no la única. Que
si deseamos ser ricos, ésta es la regla que es indispensable
conocer. Es bien simple y sin embargo la mayoría no com-
prende su importancia.
91
“Las personas ricas adquieren activos. Los pobres y la clase

media adquieren pasivos (obligaciones) pensando que son ac-
tivos.”
(De Padre Rico Padre Pobre)
Kiyosaki deja a un lado las definiciones de diccionario y

las que podrían aportar contadores y administradores, no
porque las subestime o las desprecie, sino sencillamente
porque para la persona promedio, suelen resultar confusas.
Lo importante no es que memoricen una definición acadé-
mica, sino que el concepto les quede bien claro. En ese sen-
tido, basta saber que ‘un activo es lo que pone dinero en los
bolsillos’. Obviamente, por oposición, ‘un pasivo es lo que
saca dinero de los bolsillos’. Siempre citando a Kiyosaki,
esto es todo lo que necesitas saber. El camino a la riqueza
se construye adquiriendo activos. Por el contrario, contraer
obligaciones te mantendrá en las clases media o pobre. Las
dificultades financieras del mundo real, son mayormente
causadas por el desconocimiento de esta diferencia sustan-
cial, que a veces se deja de lado por su simpleza. Es por eso
que muchas personas se sienten respaldadas al adquirir la
vivienda propia, pensando que están realizando una in-
versión, cuando en realidad están adquiriendo un pasivo
que entre impuestos y mantenimiento hará que salga mu-
cho dinero de sus bolsillos cada mes. Esta confusión suele
provenir del concepto contable de activo y pasivo. Conta-
blemente un activo es todo aquel bien y/o derecho que sea
propiedad de una empresa o persona, mientras que pasivos
son todas sus obligaciones o deudas. Pero Kiyosaki insiste
en que para ser ricos sólo hay que recordar que los activos
92
deben producir un flujo de efectivo positivo, mientras que

los pasivos harán lo contrario: que salga dinero de nuestras
cuentas.
El siguiente concepto a tener en cuenta es el del Flujo de

Efectivo Positivo: es cuando la diferencia entre la cantidad
de dinero que se genera por los activos es mayor a la canti-
dad de dinero que egresa por los pasivos. Por ejemplo, uno
de los principales objetivos de vida de las personas de clase
media o pobre, es tener su casa propia. Lo interpretan como
algo que da seguridad. No saben que dentro del juego del
dinero la casa es un pasivo que les quitará efectivo de sus
bolsillos. En cambio los ricos, primero concentran sus ener-
gías en adquirir lo que en el juego del dinero se considera
un activo, para que posteriormente ese activo ‘les compre’
la casa.
En este punto, en mis talleres siempre hay alguien que dice:

‘pero la casa tiene plusvalía’. Si eso sucede, yo respondo que
no necesariamente, pues la plusvalía depende del mercado
y eso es algo que no controlamos nosotros; el valor de la
propiedad puede incrementarse y generar una ganancia o
aumento de capital, pero también pueden ocurrir cambios
de zonificación por razones sociales, comerciales, etc., que
hagan que el valor de la propiedad se deprecie. Por ejemplo:
alguien vive cerca de unos hermosos terrenos vacíos, don-
de hay mucho verde y árboles antiguos. Eso es algo bueno
y saludable, pero un día se ponen en venta y acaban po-
niendo allí un cementerio privado, por citar algo negativo.
Esto es una muestra de algo que haría bajar el valor de las
propiedades que se encuentran alrededor.
93
Además, siendo la propiedad una inversión, la persona

debe tener en cuenta los aspectos básicos de cómo adqui-
rirla y también, tal como lo hacen los ricos, considerar que
siempre se gana en la compra y no en la venta. Además, que
en el tema de las inversiones es más importante una estra-
tegia de salida que de entrada. Se deben considerar siempre
los efectos fiscales, cosa que muy pocas personas conocen y
saben manejar, y mucho menos controlar. Los ricos siempre
tienen control sobre sus impuestos, es más, Padre Rico dice
que los impuestos son la vía más rápida a la riqueza y no es
necesario ser contador público para aprovecharlos, pero si
hay que educarse en el tema (de hecho tenemos un semina-
rio que trabaja en todos estos temas). En cuanto a la diversi-
ficación, debes saber que es una estrategia para apostar a no
perder y por lo tanto, con ella estarás apostando a no ganar.
Recuerda, más que la ganancia contable lo importante es el
flujo de efectivo.
“El dinero es una forma de poder. Pero lo que es más poderoso

aun es la educación financiera. El dinero viene y va, pero si
usted cuenta con la educación acerca de cómo funciona, gana
poder sobre el dinero y puede comenzar a generar riqueza.”
(De, Padre Rico Padre Pobre)
Veamos un ejemplo específico sobre todo esto: cuando

alguien quiere realizar una inversión como comprar una
casa, ¿qué es lo primero que hace? Busca anuncios en perió-
dicos, Internet, visita distintos barrios para ver las propie-
94
dades en venta. Algunos contratan a una agencia inmobi-

liaria o a un especialista en bienes raíces.
De contar con dinero en mano se puede regatear y obte-

ner mejor precio. Pero la gran mayoría de la gente lo hace
mediante préstamos. Esta modalidad de compra no sólo
hace que no haya margen de negociación, sino que también
incrementa los costos de adquisición debido a los intereses,
y por ende luego la venta deberá ser retrasada para poder
generar algún tipo de ganancia, incluso contable.
En otras palabras, se suele apostar a ganar en la venta y no

en la compra. Por supuesto que esta situación está expre-
sada desde una perspectiva de inversión. Sin embargo, lo
que es peor es que la mayoría de la gente lo hace porque este
proceder le ha sido inculcado socio-culturalmente, ya sea
como medida para sentir seguridad o por diversos factores
que usualmente ‘los pobres’ consideran correctos. Y aclaro
que no estoy invalidando sus razones, lo que sucede es que
no son útiles como estrategia hacia la libertad financiera, si
eso es lo que la persona busca.
“Hoy, el conocimiento es el nuevo dinero.”

(De, La Conspiración de los Ricos)
En Escuela de Riqueza se ofrece periódicamente un semina-

rio llamado Aprendiendo a Ser Rico –UN VIAJE AL ÉXITO-.
Fue creado especialmente pensando en el concepto presen-
tado anteriormente, de que toda la vida nos han enseñado
95
que debemos estudiar para trabajar y trabajar para conse-

guir dinero. Pero nunca nos enseñaron cómo despertar
nuestra inteligencia financiera para manejar el dinero que
recibimos por nuestro trabajo. La mayoría sigue el patrón
de vivir para trabajar, y de trabajar para saldar nuestras
deudas.
La estadística del analfabetismo financiero en Latinoamé-
rica sorprende y habla por sí sola, ya que la cifra asciende al
noventa y cinco por cierto. Es hora de despertar. Escuela de
Riqueza ha desarrollado herramientas que ayudan a las per-
sonas a salir de ese paradigma y a trabajar para hacer sus
sueños realidad. En particular el seminario mencionado en
el párrafo anterior, está diseñado para mostrarnos cómo
manejar la mente y el dinero de la manera correcta, a fin de
que se puedan cumplir las metas personales de indepen-
dencia financiera. Durante el mismo las personas apren-
den a: planificar su libertad financiera con los ingresos que
tienen al día de hoy; reprogramarse para el éxito; reconocer
los pensamientos que crean limitaciones en relación con el
dinero; gastar menos dinero cada mes, sin desmejorar su
calidad de vida y generar dinero cuando lo requieran, en la
cantidad que necesiten, incluso partiendo de cero.
Ejercicio 1:
Responde estas preguntas:
Libertad Financiera significa que tengo ingresos ___________ y

___________ que superan mis ____________
¿Según tu estilo de vida, en qué era crees que estás operando?
96
¿Agraria, industrial o de la información?
¿Qué cosas te enseñaron en la escuela acerca del dinero?
¿Qué te enseñaron tus padres y tu entorno sobre el dinero?
¿Qué aprendiste en la universidad sobre el dinero y/o sus leyes?
¿Crees que tienes la educación adecuada para la era en la que vi-

ves?
¿Están ordenadas tus finanzas personales?
¿Te pagas a ti mismo primero, cada vez que cobras?
¿Ya cuentas con activos en tu vida que crean dinero para ti cada
mes, o sólo tienes pasivos?
Ejercicio 2:
97
Calculando mi Índice de Progreso Económico:
a) Mi patrimonio neto es: ________ (todo lo que tengo y que

puedo vender al mejor precio realista de mercado, descon-
tando las deudas que tengo actualmente)
b) La edad en que empecé a trabajar fue a mis _____años
c) La edad que tengo actualmente es_____años
d) Pretendo retirarme a los_____ años
e) El tiempo que llevo trabajando es_____años (b-c)
f) Patrimonio propio/tiempo de actividad económica:

u$s_____
g) Índice de progreso actual: ____ _(f)
Monto con el que me retiraré: _____[(d-c) x f]
98
Capítulo V
.
.
Educación Financiera:
.
“La Diferencia que Marca la
Diferencia”
.
.
.
.
.
.
.
.
.
Capítulo V “La Diferencia que Marca la Diferencia”
“El dinero está hecho para descartar lo obvio y apostarle a lo

inesperado.”
George Soros
1. El saber no ocupa lugar
A
quellas personas que quieran gozar de indepen-
dencia financiera (generar ingresos pasivos y re-
siduales que superen sus gastos), deberían tomar
muy en serio lo que dijimos tantas veces: “la educación fi-
nanciera es una materia clave, básica y fundamental”. La
falta de educación financiera es la causa del sufrimiento y
los apremios por los que pasa tanta gente, tal como lo afirma
Robert Kiyosaki en toda su obra, y lo enfatiza especialmen-
te en uno de sus últimos libros, La Conspiración de los Ricos1:
“…la educación financiera se ha vuelto hoy más importan-
te que antes, y mientras no forme parte del tronco común
de materias, las escuelas continuarán dañando al país y al
mundo, y seguiremos sin preparar a los niños para la vida
real”.
En este libro, Kiyosaki menciona un programa de quince

lecciones que él incluiría como material de estudio, si fuera
director del sistema escolar.
1
Edita y distribuye Editorial Aguilar.
101
Aprende a Ser Rico Capítulo V
Walter: ¿Cuáles son los aspectos que resalta Kiyosaki en

relación con la educación financiera?
Cristian: Comienza hablando sobre la importancia

de conocer la historia del dinero, tema que analizamos an-
tes en este libro. Recordemos que el dinero fue evolucionan-
do junto con los seres humanos. Al principio consistía en el
intercambio de productos en forma de trueque. Luego se
convirtió en objetos específicos de intercambio, como por
ejemplo cuentas de colores, y más tarde monedas de me-
tales tales como el cobre, la plata o el oro. Actualmente el
dinero que conocemos es papel moneda que no tiene valor
en sí mismo, sino que su valor le es asignado por decreto de
los gobiernos.
Hasta el año 1971 contaba con respaldo en oro, pero a partir

de entonces eso dejó de ocurrir por un decreto del presiden-
te Richard Nixon. Desde entonces, el dólar estadounidense
pasó a ser un derivado de la deuda de ese país y no del oro
de sus reservas.
Cuando la moneda está vinculada a la deuda de un país,

surge el problema de que la economía sólo crece si crece esa
deuda. Esa relación hizo que las empresas se endeudaran
y los gobiernos tuvieran que intervenir para su rescate. Los
montos de esos rescates fueron cada vez mayores, década
tras década. En los años ochenta eran millones de dólares,
pero en los noventa pasaron a ser miles de millones; hoy ya
superan varios billones y siguen en aumento.
102
Kiyosaki señala este hecho como uno de los acontecimien-

tos financieros más importantes de la historia, el cual cam-
bió las reglas en que se movía el dinero. Esto hizo que Es-
tados Unidos imprimiera dinero a su antojo, dando lugar
a un suceso mundial inédito: todas las divisas internacio-
nales pasaron a tener como respaldo la deuda de una úni-
ca nación. Esto significa que las monedas del mundo están
supeditadas a una moneda de confianza que no tiene otro
respaldo que esa confianza.
La crisis actual se inició en el 2007, cuando los beneficia-

rios de hipotecas subprime dejaron de pagar sus créditos y
la expansión de la deuda se detuvo. El término subprime es
un anglicismo para las hipotecas consideradas “de riesgo”,
dado que los prestatarios no poseen las condiciones que las
entidades bancarias comunes aceptarían: un trabajo esta-
ble, antigüedad en el empleo, ingresos comprobables, etc.
Al detenerse la expansión de la deuda, entonces el mercado
de desplomó.
Si las naciones que compraron deuda estadounidense,

como China, Japón y algunos países europeos, dejaran de
confiar en Estados Unidos, la crisis podría agravarse. Tam-
bién, si los consumidores dejaran de invertir en la compra
de propiedades y de usar sus tarjetas de crédito. Y algo de
esto vivimos hace pocos meses en 2011 cuando las califi-
cadoras de riesgo bajaron la nota (la confianza) a Estados
Unidos, y el acuerdo de una nueva emisión maratónica de
deuda, y billetes que inundan el mundo, estuvo a punto de
no ser aprobado.

103
Walter: Esta información es impactante y demuestra cla-

ramente la posición de fragilidad en la que nos encontramos los
consumidores y ciudadanos de todo el mundo. Cuanto más apren-
do sobre estos temas, más comprendo la importancia de conocer
las leyes del dinero y de adquirir educación financiera. A tu crite-
rio, ¿qué es lo primero que necesitamos saber?
Cristian: Lo primero que deberíamos conocer es en

qué consiste un “estado financiero”. Éste tiene tres seccio-
nes:
1) Reporte de ingresos o de ganancias y pérdidas

2) Hoja de balance
3) Estado de flujo de efectivo
Y luego algo de lo que también hablamos en el capítulo 3:

reconocer la diferencia entre activos y pasivos. A Kiyosaki
le encanta ilustrar este tema con el ejemplo de su “padre
pobre” y su “padre rico”; el primero consideraba a su casa
como un activo, mientras que el segundo siempre le repetía:
“Si tu padre tuviera una educación financiera sólida, sabría
que su casa no es un activo sino un pasivo”.
Muchas personas tienen problemas por desconocer esa di-

ferencia. Pero si buscamos mejorar nuestra administración
del dinero, es indispensable que manejemos bien los térmi-
nos de dicha ciencia.
El “padre rico” definía de un modo sencillo el activo y el

pasivo: “Un activo lleva dinero a tu bolsillo sin que tengas
que trabajar; mientras que un pasivo extrae dinero de tu
104
bolsillo, aun si estás trabajando”. Un activo es una inversión

que hace ingresar flujo de efectivo en nuestra cuenta. Es
bueno invertir en bienes raíces, pero si no obtenemos una
renta de ellos, no podemos considerarlos como “verdaderos
activos”.

Walter: ¡Está clarísimo! ¿Qué otra cosa es importante
aprender?
Cristian: La diferencia entre ganancias de capital y

flujo de efectivo. Obtenemos ganancias de capital cuando
aumenta el valor de las propiedades o las acciones que ad-
quirimos.
La gente con educación financiera invierte para obtener

tanto ganancias de capital, como flujo de efectivo. Aquellos
que no lo hacen, se deprimen cuando baja el valor de sus
propiedades o acciones.
El dinero no debería permanecer estacionado, sino fluir
desde un activo y producir así flujo de efectivo. Si eso no
sucede, el dinero invertido va perdiendo su valor. Es decir,
que no va a estar trabajando a favor de nosotros. Además,
esto implica un alto riesgo como lo es la pérdida del capital.
En cambio invertir en algo que genere flujo de efectivo, mi-
nimiza el riesgo. Kiyosaki ilustra este tema con un ejemplo
sobre sus inversiones como socio de una compañía petrole-
ra. Al principio, el valor del barril de petróleo era de US$ 25,
lo que le proporcionaba un buen flujo de efectivo cada mes.
Cuando ese valor aumentó y alcanzó los US$ 140, no sólo
pasó a obtener mayor Cashflow (término en inglés para flujo
de efectivo), sino que las ganancias de capital incrementa-
105
ron el valor de los pozos. A partir de allí el valor del barril ha

fluctuado, incluso descendió un poco, pero el efectivo sigue
fluyendo a sus cuentas, independientemente del valor de
los pozos. Por ese motivo su recomendación es invertir en
acciones que paguen dividendos, con el fin de obtener un
flujo constante de efectivo. El mejor momento para adqui-
rir acciones es aquel en que éstas caen a precios muy bajos
(siempre que se trate de acciones que pagan dividendos).
“La razón más estúpida para comprar una acción

es ver que su precio aumenta.”
Warren Buffett
Walter: Si no entendí mal, es mejor invertir tanto en ga-

nancias de capital como en flujo de efectivo, ¿verdad?
Cristian: Exactamente, al flujo de efectivo también

se lo llama “tasa de dividendo” en la bolsa de valores. Las
acciones más valiosas son las que tienen mayor tasa de divi-
dendo. Cinco por ciento representa una buena tasa. En oc-
tubre de 2007 los puntos del índice Dow Jones en la bolsa de
valores, alcanzaron la cifra de 14,164. Muchos se lanzaron
al mercado esperando obtener ganancias de capital porque
pensaron que el alza seguiría. Pero la tasa de dividendo era
bajísima: 1,8. Esto indicaba que el precio de las acciones era
muy alto. Entonces los inversionistas empezaron a vender.
El índice bajó a 6,547 puntos, y muchos volvieron al merca-
do confiando en que la tormenta había pasado. Pero la tasa
de dividendo era de 1,9 por ciento, lo que significaba que
106
el precio de la acción seguía siendo muy alto. Y hasta hoy

continúa siendo alto, por eso se cree que a largo plazo los
inversionistas podrían perder más dinero, si éste empezara
a migrar hacia fuera del mercado.
Por ese motivo Kiyosaki aconseja invertir en aquello que

proporcione ganancias de capital y flujo de efectivo, y de-
jar de preocuparnos por las alzas y bajas de los mercados.
Podemos aprender todas estas cosas si participamos en las
sesiones de juegos Cashflow, en Escuela de Riqueza.

Walter: Sí, lo sé, ésa es mi propia experiencia. ¡Y pienso
seguir participando! Lo próximo que quiero preguntarte es: ¿Qué
consejo da Kiyosaki para quienes tienen una idea para algún pro-
ducto nuevo, o cuentan con dinero para invertir en inmuebles o
acciones?
Cristian: ¡Buena pregunta! Para estas personas él tie-

ne un consejo que está graficado en un triángulo que se
llama D-I:
107
¿Recuerdas el cuadrante del flujo de dinero? De allí pro-

viene el nombre y las iniciales del triángulo: “D” para due-
ño de empresa o negocio grande, e “I” para inversionista.
Como puedes ver en el gráfico, el producto ocupa el lugar
más pequeño. El mensaje es que debemos enfocarnos en el
resto de los aspectos; medir el lanzamiento de un producto
o el acceso a una inversión mediante los ítems señalados en
este triángulo, y comprobar la solidez de una idea teniendo
en cuenta cada aspecto. Te recomiendo Antes de Comenzar
Tu Propio Negocio, otro libro excelente de Robert Kiyosaki
que publica editorial Aguilar. Algo a destacar es que en este
libro como en muchos otros de la serie, Robert Kiyosaki re-
comienda asistir a la “Escuela de Negocios de la vida real”
(una Red de Mercadeo) para adquirir las habilidades que
todo empresario exitoso posee, para luego usar esas habi-
lidades en el propio emprendimiento y lograr una tasa de
éxito mucho más alta.
La constitución de un negocio sólido validado por este

triángulo, va a generar empresarios que ofrezcan oportu-
nidades de empleo a la gente que está en la otra mitad del
cuadrante: los empleados y los auto-empleados (profesio-
nales independientes y dueños de pequeños negocios). Es
decir, que no sólo tiene el valor del éxito propio, sino que
brinda además una contribución a la sociedad.
Walter: Tu explicación me recuerda mi experiencia con el

bar. Supongo que la elección de los socios es un tema clave tam-
bién, ¿no es así?
108
Cristian: ¡Claro! El consejo que le daba el “padre rico”

a Robert era:
“La mejor manera de encontrar un buen socio,

es encontrar uno malo.”
Una experiencia negativa al elegir a los socios, nos enseña a

reconocer a los potenciales socios buenos. Pero eso no lo va-
mos a descubrir hasta que no hagamos la prueba. Kiyosaki
dice que en su experiencia, por cada socio malo siempre
encontró luego uno excelente. Los elementos para evaluar
la calidad de aquellas personas con quienes uno se va a aso-
ciar deberían ser:
1) Los socios propiamente dichos

2) El financiamiento
3) La administración
Porque aun cuando invertimos en algo básico como un

“fondo mutuo de inversión”, los otros participantes se con-
vierten en nuestros socios. Nos conviene pensar con cuida-
do en esto, antes de entregar nuestro dinero. Con respecto
al financiamiento, deberíamos prestar atención al hecho de
que la inversión tenga una buena estructura en relación con
su potencial para obtener ganancias.
Kiyosaki no recomienda los fondos mutuos de inversión

porque considera que están diseñados para beneficio de los
bancos, y no del inversor. También cree que los gastos y el
riesgo son muy altos, y que la mayoría de las ganancias son
para la entidad administradora. Además, el gobierno cobra
109
impuestos sobre el dinero aunque no obtengamos ganan-

cia.
En cuanto a la administración, lo ideal es que alguno de los
socios conozca del tema y tenga habilidad para adminis-
trar. No saber administrar implica una disminución en los
rendimientos, y hasta puede llevar la inversión al fracaso.
“Actualmente es muy fácil para mí analizar con rapidez todas las

inversiones, sólo tengo que preguntarme quiénes son los socios;
si me gustaría asociarme con ellos; cuál es la estructura finan-
ciera –si es favorable o no- y cuán eficiente es la administración
de esa inversión.”
(Robert Kiyosaki, en La Conspiración de los Ricos)
Walter: Está clarísimo. ¿Cuáles son otros elementos fun-

damentales de la educación financiera?
Cristian: Es importante saber cuáles son los activos

en los que nos conviene invertir. Una vez que ascendemos
por la escalera hacia la riqueza y nos convertimos en in-
versores, la recomendación es invertir en ciertos tipos de
negocios como los bienes raíces, activos financieros (llama-
dos en Padre Rico “activos de papel”) y materias primas.
Toda persona cuenta con ventajas y desventajas, las cuales
podemos aprender a través del asesoramiento de expertos,
preferentemente aquellos que ya estén poniendo todo esto
en práctica; por eso en Escuela de Riqueza tenemos asesores
que hacen lo que predican y muchos de ellos transmiten
110
sus conocimientos en los distintos talleres y seminarios que

realizamos periódicamente.
Sobre este tema Kiyosaki explica en La Conspiración de los

Ricos que la gente más rica del mundo se dedica a los ne-
gocios porque ofrecen ventajas en el pago de impuestos;
mientras que por otro lado requieren habilidades para re-
lacionarse y liderar a un grupo de personas. Con respecto
a los bienes raíces, menciona que para obtener buenos re-
sultados la inversión se puede realizar con dinero del ban-
co a través del financiamiento, o de otras personas como
inversionistas; como este tipo de activo requiere de gran
inteligencia financiera para invertir, muchos lo hacen por
medio de un fideicomiso financiero en bienes raíces. Los
activos financieros o “de papel” (acciones, bonos, ahorros
o fondos mutualistas) en cambio, no presentan demasia-
da dificultad para invertir, ya que no se necesita una gran
cantidad de dinero y al principio se puede adquirir sólo
una pequeña cantidad de acciones. Su desventaja radica en
el hecho de que en cuanto el dinero se sale del mercado, es
fácil perder la inversión si no se vende pronto. Y por últi-
mo las materias primas o commodities (oro, plata, petróleo,
etc.) según Kiyosaki, son una forma de protegerse contra
la inflación porque son tangibles y se pueden comprar con
dinero; aconseja almacenarlos bien y mantenerlos resguar-
dados por ser activos en forma física.
Es muy importante también aprender cuándo enfocar y

cuándo diversificar. La mayoría de los asesores recomien-
dan la “diversificación”. Se cree que ésta da protección fren-
te a los vaivenes de los mercados. En el caso de las carteras
111
de los fondos mutuos de inversión, no es posible la diversi-

ficación porque las inversiones van todas hacia activos de
papel. La verdadera diversificación consiste en invertir en
los cuatro tipos de activos que Kiyosaki menciona: Nego-
cios (sistemas empresariales), Bienes Raíces, Activos Finan-
cieros y Commodities.
“La diversificación sirve para protegerse de la ignorancia,

pero no es muy útil para quienes realmente saben lo que ha-
cen.” Warren Buffett
Pero la recomendación inicial es seguir un único camino de

inversión hasta alcanzar el éxito con él. Estudiar, practicar
y comenzar con un monto no muy grande. Recién cuan-
do logramos el flujo de efectivo, entonces podemos aven-
turarnos en algún desafío mayor, sin olvidar nunca que
el resultado esperado es producir flujo de efectivo de las
inversiones. Actualmente, Kiyosaki confiesa que está bien
diversificado pero también, que jamás pierde su enfoque.
Walter: ¿Me equivoco al suponer que lo que más inquieta

a la gente a la hora de invertir, es el riesgo que se corre?
Cristian: ¡No te equivocas para nada! Pero no necesa-

riamente debe haber riesgo en las inversiones. El verdadero
riesgo consiste en no poseer educación financiera.
112
“Cuando yo quería aprender a volar, tomé lecciones de vuelo.

Si solamente me hubiera subido a un avión y despegado, pro-
bablemente me habría estrellado y estaría muerto.” Robert
Kiyosaki

Y siempre es aconsejable recurrir al recurso de invertir tam-
bién en algún “seguro de riesgo”. No son caros y protegen el
capital. Los profesionales siempre buscan refugio en ellos.
Por ejemplo, para bienes raíces se debe contar con seguros
contra incendios, inundaciones y otros desastres naturales.
Los costos de dichos seguros se cubren con el pago de la
renta de los inquilinos.
Walter: A quienes somos empleados, nos cuesta entender

todo este panorama porque de alguna forma “descansamos” en
que cada mes alguien va a pagar nuestros gastos por medio de
los salarios… ¿Cómo debería pensar el dueño de una empresa o
las personas que dirigen empresas al respecto? ¿Hay algo que po-
damos hacer? Muchos tienen la idea de que Kiyosaki, de alguna
manera empuja a los empleados a dejar de serlo para transformarse
en empresarios.
Cristian: ¡Un gran error de interpretación! En todos

sus libros, y en especial en Padre Rico aconseja trabajar para
aprender, no para ganar dinero. Esto es porque quienes
se enfocan sólo en ganar dinero, en su mayoría terminan
gastándolo o mal gastándolo, precisamente por la falta de
educación financiera. Todos los meses trabajan solamente
para ganar más dinero, y a mediados de mes se encuentran
113
de nuevo pidiendo un adelanto o usando algún medio de

crédito para poder cumplir con sus obligaciones. Mucha
gente que no ha leído o no ha entendido la filosofía, cree que
Kiyosaki empuja a hacerse independiente y dejar su sala-
rio cuando es justamente lo contrario; se trata de educarse,
generar un flujo de efectivo positivo habiendo ordenado los
gastos para poder iniciar la adquisición de activos que pro-
duzcan ingresos pasivos y residuales, y así obtener poco a
poco, paso a paso, la Libertad Financiera. Esto se ve muy
claramente al jugar Cashflow, pues en él cada participante
toma el rol de un empleado o autoempleado que debe se-
guir estos pasos para ganar el juego del dinero.
Walter: Entonces, ¿hay algo que puede hacer la empresa

por sus empleados en este sentido?
Cristian: ¡Claro! Cada empresa debería considerar

educar financieramente a sus empleados para que estos vie-
ran su fuente de trabajo como una “bendición”. Esto les per-
mitiría no sólo ser capaces de manejar adecuadamente el
fruto de su trabajo mensual (el sueldo) para crear su riqueza
futura, sino también entender que es su responsabilidad
velar por su jubilación y bienestar futuro al momento del
retiro. La empresa cumple con su parte, realiza los aportes
correspondientes, pero está en manos del sistema jubila-
torio de cada país hacer los pagos y ya podemos tener una
visión de cómo será ese futuro. Por ello creemos que parte
de la solución NO está en ganar más dinero, sino en saber
administrarlo teniendo un plan a seguir y objetivos de enri-
quecimiento futuro; eso debería formar parte de los planes
de formación de cualquier empresa que busque fidelizar a
114
sus empleados y lograr que dejen de pedir un adelanto cada

día 20 del mes.
Ejercicio:
Completar el siguiente párrafo con estas palabras:
¿Qué es la educación financiera?

Es la capacidad de _______ y _______ manejar el _________
de manera ________ para poderlo _________, _________
y __________ hacía el infinito como lo hacen los grandes
millonarios y filántropos del mundo, para de esta forma te-
ner _____________________ y poder vivir cómodamente
como _________frugal.
Rico, dinero, hacer, duplicar, inteligente, triplicar, multiplicarlo, saber, libertad financiera.
Respuestas:
115
Capítulo VI
.
Comienza la Acción
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
Capítulo VI Comienza la Acción
“No puedes contratar a otra persona para

que haga abdominales por ti.”
Jack Canfield
1. Pasión + acción = resultado extraordinario
U
na de las razones por la cual muchas personas no
tienen éxito en la vida, es la falta de acción. El te-
mor al fracaso nos impide avanzar en diferentes
aspectos de nuestra vida. Quizás te ocurrió alguna vez que
te sentiste atraído/a hacia una chica o un muchacho, pero
el miedo a que te rechazara, te impidió acercarte a esa per-
sona. ¿Cuántos “Messi” o “Lady Gaga” habrán quedado en
el camino, por no animarse a perseguir su pasión? Forman
parte de nuestro repertorio de historias de familiares o co-
nocidos, alguna promesa empresaria, artística o deportiva
desperdiciada. El talento no fue el impedimento para que
estas personas brillaran en las portadas de los diarios, sino
la incertidumbre por no emprender la acción y correr ries-
gos cuando debían hacerlo.
119
Aprende a Ser Rico Capítulo VI
“Si encuentra una inversión en la cual quiere participar, invierta

un poco de dinero. Es sorprendente la velocidad con que la inteli-
gencia crece cuando usted está arriesgando su dinero.”
(Robert Kiyosaki, en “El Cuadrante de Flujo de dinero”)
En la educación financiera ocurre lo mismo. Los conoci-

mientos adquiridos serán sólo información en tu cerebro,
si no los pones en acción. La mejor forma de comprobar si
los consejos de escritores, gurús, expertos o como quieras
llamarlos, funcionan, ¡es probándolos! Hasta es posible que
con tu toque personal puedas innovar y multiplicar su re-
sultado. Los consejos no tienen el mismo impacto en las
personas. Así como los médicos afirman que no hay en-
fermedades, sino enfermos, podríamos decir que no hay
inversiones, sino inversionistas.
“La fórmula es sencilla: haz más de lo que funciona, haz menos

de lo que no funciona y prueba nuevos comportamientos para
ver si te dan mejores resultados.”
Jack Canfield
Para empezar te recomendamos leer varios autores sobre

finanzas personales y así poder encontrar a tu propio men-
tor, y luego aplicar los conceptos que más te gusten de cada
uno de ellos. Encontrarás varios de ellos en el apéndice
como “bibliografía recomendada.”
120
También existe una gran cantidad de seminarios sobre

cómo manejar tus finanzas. Algunos son muy útiles y eco-
nómicos, hasta incluso los hay en forma gratuita. Y para
premiarte por haber leído hasta este capítulo, registrán-
dote en www.aprendiendoaserrico.com podrás participar
gratuitamente de la conferencia “Los 5 Pasos a la Libertad
Financiera.”
La lectura de los siguientes libros sin duda, tendrá un fuerte
impacto positivo en tu educación financiera:
• “Padre Rico Padre Pobre”, de Robert Kiyosaki

• “El Cuadrante de Flujo de Dinero”, de Robert Kiyosaki
• “Múltiples Fuentes de Ingreso”, de Robert Allen
• “El hombre más rico de Babilonia”, de George S. Clason
• “La semana laboral de 4 horas”, de Timothy Ferris
• “Millonario en un minuto”, de Mark V. Hansen y Jack Canfield
• “Los principios del éxito”, de Jack Canfield
• “Guía para invertir en oro y plata”, de Michael Maloney
•“El ABC para construir un equipo de negocios exitoso”, de Blair
Singer
• “El ejecutivo al minuto”, de Kenneth Blanchard y Spencer Jo-
hnson
• “El monje que vendió su Ferrari”, de Robin S. Sharma
•“Economía 3D”, de Martín Lousteau
“No hay inversión más rentable que la del conocimiento.”

(Benjamín Franklin)
“Si piensas que la educación es cara, prueba con la igno-

rancia.” (Derek Bok)
121
Aprende a Ser Rico Capítulo VI
“No hay una fórmula mágica, sólo trabajo duro y educa-

ción.” (Robert Kiyosaki, “La Conspiración de los ricos”)
Si eres una persona que vive quejándose de que en la so-

ciedad no hay procesos a “largo plazo”, te instamos a que
hagas una reflexión sobre cómo está tu vida en el aspecto fi-
nanciero. Si eres de los que se quejan de que en su ciudad los
políticos no tienen las cuentas claras en su administración,
o si estás cansado de que en tu equipo de fútbol no lleguen
los resultados deportivos esperados, se vendan las grandes
figuras y no traigan refuerzos de calidad, te proponemos
que seas el Intendente, Presidente o Administrador de tus
estados financieros.
La escalera hacia la libertad financiera comienza con la edu-

cación y puesta en acción de los conocimientos adquiridos.
Si arrancas de cero, permítenos acompañarte en tu viaje. Si
estás más avanzado, no olvides repasar los conceptos bási-
cos. ¡El saber nunca ocupa lugar!
Ejercicio:
¿Podrías definir tu pasión en no más de 30 palabras?
¿Cómo podrías hacer que tu pasión se transforme en dinero?
122
¿Cómo podrías hacer que tu pasión genere ingresos pasivos y re-

siduales?
¿Qué necesitarías aprender para lograr que tu pasión se convierta

en ingresos?
123
Capítulo VII
.
Trabajo en Equipo
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
Capítulo VII Trabajo en Equipo
“Los negocios y las inversiones

son deportes de equipo.”
Robert Kiyosaki
1. Equipos de Primera
E
l trabajo en equipo es la herramienta más poderosa
de apalancamiento de ideas y recursos de la cual dis-
ponemos con mayor facilidad, pero que paradójica-
mente más nos negamos a utilizar.
Por nuestra formación educativa, tanto en la escuela como

en nuestros hogares, no nos inculcaron la cultura de inter-
cambiar información o tareas con otras personas. Para la
mayoría de nosotros, incluidos nuestros propios familia-
res, no está bien visto consultar a alguien que sepa más que
nosotros a la hora de tomar una decisión importante. Nor-
malmente pedimos consejo a personas que no han pasa-
do con éxito por la experiencia que queremos pasar, o bien
buscamos “robar” un consejo a un profesional del tema,
café de por medio o en un ascensor, esperando que dicha
asesoría sea de calidad. Es por eso que en el libro Padre Rico
127
Aprende a Ser Rico Capítulo VII
Padre Pobre, Kiyosaki recomienda “pagar bien a los asesores

profesionales para que nos den consejos que multipliquen
los beneficios económicos que conseguiremos con ellos”.
Según Robert Kiyosaki y una gran cantidad de autores, el

sistema educativo no está diseñado para la formación de
equipos en sus aulas que puedan afrontar los momentos
más difíciles del proceso educativo, con la suma de los co-
nocimientos de los alumnos. En nuestros días de escuela,
si bien algunas actividades se realizaban en grupo, eran un
porcentaje minúsculo, si tomamos como referencia la gran
cantidad de exámenes orales y escritos que tuvimos que
afrontar a lo largo de varios ciclos lectivos.
No sólo no se fomenta la sinergia grupal, sino que además

se limita nuestra expresión con la temida división de temas
para un examen.
Hoy a la distancia, yo Walter, estoy convencido de que mis

calificaciones habrían sido más altas si en los exámenes de
la escuela primaria, hubiera podido consultar algunas pre-
guntas con mis compañeritos Ariel H., Leonel R., Martín V.
o Silvia D.R. Ni hablar en la secundaria cuando los temas o
problemas a resolver eran mucho más complicados, hubie-
se sido vital la ayuda de Valeria C., Natalia M. o Christian
C. Ellos sabían cosas que yo desconocía, y viceversa, o en
ciertos días uno de nosotros contaba con una inspiración
mayor que el resto de la clase.
Sin embargo, una vez que dejamos la educación formal e

intentamos insertarnos en el mundo laboral, ya sea en rela-
128
ción de dependencia o en forma independiente, seguimos

arrastrando la “mentalidad” de intentar resolver todo solos.
Incluso en la mayoría de los casos, en situaciones donde no
tenemos un maestro o profesor que nos impida una inter-
consulta con alguien de confianza.
“No sabemos a qué nos enfrentamos, pero es más fácil que
sobrevivamos si peleamos juntos.” (Máximo Décimo Meri-
dio, Gladiador)
“Un equipo son muchas voces, pero un solo corazón.” (Lord

Chesterford)
“La vida de la mayoría de la gente es un reflejo de su grupo

de iguales.” (Anthony Robbins)
“La formación de un equipo no es una tarea sencilla ni rá-

pida. Toma bastante tiempo.” (Robert Kiyosaki, “La Conspi-
ración de los Ricos”)
Para convertirse en líder, primero se debe aprender a ser

parte del equipo es por eso que en casi todos los libros de la
serie Padre Rico, Kiyosaki recomienda formar parte de una
red de mercadeo, ya que en una buena empresa de Network
Marketing el liderazgo y la formación en esta área deben
ser como la sangre que corre por las venas. Esto se lo enseñó
su padre rico cuando le dijo: “El liderazgo es la única habilidad
no opcional para transformarse en empresario exitoso.”
Robert Kiyosaki cree que para lograr la integridad finan-

ciera, es fundamental la construcción del Triángulo D-I con
sus ocho integridades. La base tiene que ver con la misión
129
Aprende a Ser Rico Capítulo VII
de la empresa y los lados del triángulo con nuestro equipo

y su liderazgo; por ello, lograr que la gente trabaje como un
equipo y haga lo que se necesita hacer, es lo más difícil para
quien tiene una empresa.
“El negocio es fácil. Manejar a la gente es difícil.”

Blair Singer
No tengas temor de trabajar en equipo, como cita Stanley

C. Gault: “No trabajamos unos para otros; lo hacemos unos
con otros”. Nadie podrá quitarte el lugar que tengas en el
equipo, al contrario anhelarán poder contar contigo al ha-
berte identificado como una persona con un liderazgo mo-
tivador y audaz. Maxwell dijo: “Los mejores jugadores lo
hacen a usted un mejor jugador”.
Si quieres ganar, desarrolla una mente de equipo y las ha-

bilidades que ello conlleva. ¡Conviértete en líder! Bernardo
Stamateas cita: En la mente del egoísta, existe el paradigma
de que hay gente que gana y gente que pierde, por lo que se
dice a sí mismo: “Yo no quiero perder, sino ganar”; de ma-
nera contraria, la persona que ayuda, piensa: “Yo ganaré
porque tú vas a ganar”, porque hay ganancia para todos. Un
egoísta no ayuda al otro a triunfar, piensa: “Tu triunfo es mi
derrota”, pero los que saben ayudar dicen: “Tu triunfo es mi
victoria y, cuando triunfas, todos ganamos”.
Eres grande no sólo cuando triunfas, sino cuando eres ca-
paz de abrir camino a otros. No se es grande cuando uno es
nombrado jefe de una empresa, sino cuando somos capaces
de ser puentes para los demás1.
130
Si estamos capacitados para maximizar nuestro equipo,

lo estaremos haciendo con nuestra propia vida y mientras
tanto todos ganaremos.
Ejercicio:
¿Estoy vinculado en actividades que me permiten desarrollar mi

liderazgo?
Mi actividad laboral ¿me permite desarrollar mis habilidades para

trabajar en equipo?
¿Qué puedo hacer ahora para empezar a crecer en estas áreas?
Página 56 del libro Quiero un Cambio de Bernardo Stamateas

de Editorial Vergara, edición 2010
131
Capítulo VIII
.
Escalera hacia
La Libertad Financiera
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
Capítulo VIII Escalera Hacia la Libertad Financiera
“Es importante tener el sueño de retirarte joven y rico pero,

para poder cumplirlo, necesitas tener un plan que construya
el puente desde el sueño a la realidad.”
Robert Kiyosaki, Retírate Joven y Rico (Ed. Aguilar)
1. Juego y aprendizaje van de la mano
A
medida que fui aprendiendo sobre los temas rela-
cionados con el dinero y la educación financiera, y
mientras participaba de los seminarios en Escuela
de Riqueza, me fui dando cuenta de que en Argentina mu-
chísimas personas habían leído los libros de Robert Kiyo-
saki. Mucha gente había sido influenciada por sus enseñan-
zas e incluso lo conocían personalmente. Más personas de
las que me había imaginado en un principio, tenían inquie-
tudes sobre su futuro financiero. De modo que ingresé en
un ámbito nuevo que antes de leer Padre Rico Padre Pobre 1,
desconocía totalmente.
Una de las primeras cosas que hice fue jugar Cashflow. Ki-
yosaki sugiere que consideremos a este juego como una
“maestría en finanzas personales y contabilidad”, por eso
su práctica forma parte de todos sus programas. Tanto
en la “Diplomatura en Educación Financiera” como en el
1
Publicado y distribuido por Editorial Aguilar.
135
Aprende a Ser Rico Capítulo VIII
“Coaching Financiero”, y en todos los eventos de Kiyosa-

ki, se invita a la gente a jugar Cashflow para poder conocer
sobre finanzas personales. En su libro Si Quiere Ser Rico y
Feliz… No Vaya a la Escuela, él dice claramente que hoy es-
tamos aprendiendo de un modo equivocado y que debe-
ríamos entrenarnos como lo hacen los niños: jugando. En
su opinión es de suma importancia que el aprendizaje sea
vivencial.
Walter: ¿Por qué aprendemos mejor jugando?
Cristian: A través de su “cono de aprendizaje”, el pe-

dagogo Edgar Dale demostró que, en términos de aprendi-
zaje, la experiencia activa supera a la pasiva. De modo que
la mejor manera de aprender algo es experimentándolo.
Pero ocurre que a la hora de invertir, aprender a hacerlo con
nuestro dinero puede resultar muy costoso y riesgoso.
136
La segunda mejor forma de aprender es haciendo una si-

mulación de la realidad. Mediante la práctica de juegos de
estrategia financiera, como Cashflow, las personas pueden
desarrollar habilidades y competencias muy útiles para la
vida real, sin poner en riesgo su dinero. Precisamente, Ki-
yosaki crea el juego para que la gente aprenda a ordenar sus
finanzas y a invertir con dinero de juguete, sin arriesgarse.
En el juego se simulan inversiones, negocios, movimien-
tos de las finanzas personales, avances, ingresos, egresos,
mejoras y demás. Pero siempre, lo primero que se nos pide
simular, aun en el juego, es nuestro sueño. En Coaching Fi-
nanciero, se le pide al coachee1 que elija su propio sueño para
el juego, lo escriba en un papel y luego lo coloque sobre cual-
quiera de los casilleros del tablero.
Todo sueño es válido: la casa propia o una casa con mayor

comodidades; un auto en especial o un segundo o tercer
auto; viajes; ayuda para familiares o instituciones; trata-
mientos médicos; estudios en el exterior; un postgrado; etc.
Recordemos que el sueño es la motivación que nos permite
escapar de la “Carrera de la Rata”.
Algunos autores de libros sobre finanzas personales, afir-

man que las enseñanzas de Kiyosaki no se pueden aplicar
en Argentina. Pero omiten ese primer paso del sueño, que
nosotros consideramos de vital importancia. A dichos tex-
tos los vemos como material que carece de sustancia. Y es
que sin un sueño, no hay posibilidades reales de éxito como
enseña Kiyosaki. Sin duda, como ya mencionamos, es un
primer paso que no puede faltar. Ésta es una de las razones
1
La palabra coachee no se traduce. Coachee es el cliente del coach, la persona
a quien el coach ayuda o guía.
137
por las que creemos que el mensaje de Kiyosaki tiene una

filosofía detrás que lo sustenta.
Walter: Insisto una vez más con el tema de la educación

financiera porque, el que quiere ser médico debe ir a la Facultad
de Medicina, y el que desea ser abogado, a la de Derecho. Allí es-
tudiarán los programas curriculares hechos por expertos en cada
materia. Así que pienso que la persona que quiere ser rica, debe
conocer las vidas y mensajes de aquellos que ya lo han logrado, es
decir, seguir “su escuela” y aprender sobre las leyes y el juego del
dinero y las finanzas.
Cristian: Efectivamente, así es. Es muy importante

darse cuenta de esta necesidad. El primer paso es tomar
conciencia de la situación personal real, que cada uno de
nosotros piense en qué condición económico-financiera se
hallaba hace una cierta cantidad de años, cinco, diez o más.
La idea es comprobar si logré avances, como tener un auto
(uno más moderno, uno totalmente pago, etc.); lo mismo
con la casa, si he llegado a la vivienda propia y si ésta ya
está paga (porque si aún la estoy pagando, la casa es del
banco que me otorgó el crédito hipotecario). ¿Tengo dinero
ahorrado? ¿Otros bienes, negocios, inversiones, etc.? O por
el contrario, ocurre lo opuesto y mi situación económica
personal de antes era mejor que hoy. ¿Tengo hoy ingresos
pasivos que lleguen a mi vida? Y si llegan… ¿pagan mis
gastos con holgura? Lamentablemente, una declinación fi-
nanciera es algo que ocurre a veces y puede deberse tanto
a circunstancias personales, como del mercado en el que
nos movemos. Incluso puede deberse a movimientos en los
138
mercados internacionales como consecuencia del mundo

globalizado en el que vivimos.
Por ejemplo, el actual proceso inflacionario en Argentina

(junio-noviembre de 2011) nos está afectando y juega en
contra de nuestro progreso financiero. Si prestamos aten-
ción a los informes que se publican en la sección de econo-
mía de los diarios, notaremos que el argentino promedio
intenta ganarle a la inflación adquiriendo bienes en cuotas
a pagar en un año, dos o más. Pero, ¿podemos saber con
certeza que dentro de ese período de tiempo dispondremos
del dinero para pagar esas cuotas? Porque a lo largo de los
meses, en la vida de cada uno van surgiendo nuevas situa-
ciones a resolver, como así también nuevas necesidades. Y
por lo general comprometemos el presupuesto de hoy con
los compromisos de las cuotas de lo que compramos ayer; o
bien, complicamos nuestro mañana con las cuotas compro-
metidas hoy, sin saber lo que ocurrirá en el futuro.
Walter: Recuerdo la anécdota que mencionas en tus char-

las sobre Chesterton, el famoso ensayista inglés, que cuenta que
en cierta oportunidad, él toma un tren en Inglaterra. Y cuando el
guarda le pide el boleto, Chesterton no lo encuentra y su cara de-
muestra la angustia y desesperación que siente. Al verlo, el guarda
le dice que se tranquilice, que no le hará pagar un boleto nuevo. A lo
que Chesterton responde: “No es pagar otra vez lo que me molesta,
sino no saber dónde estoy yendo.”
Cristian: La anécdota, de sutil humor inglés, sir-

ve como introducción a la siguiente reflexión: la causa de
nuestro actual estado financiero debemos buscarla cinco
139
años atrás, o diez. Aquellos que hoy se sienten agobiados,

estresados o consideran que están mal pagos, deben saber
que están atrapados en la carrera de la rata. Muchas perso-
nas, aunque estén conformes con lo que ganan, se sienten
abrumadas y están estresadas porque pagan un alto precio
para ganar lo que ganan. Ese precio se mide en términos de
cansancio, problemas de salud y falta de tiempo libre para
disfrutar incluso hasta con su familia. Para esas personas,
el día comienza muy temprano y termina demasiado tar-
de. Los aparatos modernos de telefonía celular e interco-
nectividad, lejos de simplificarnos la vida, nos han sumado
demandas, exigencias y requerimientos que nos llevan a
sacrificar nuestros momentos de intimidad o privacidad.
Los celulares suenan hasta en el baño, pero lo peor es que
¡no dejamos de atenderlos! La conexión actual no respeta
feriados ni fines de semana. Esto lo sufren nuestra salud y
nuestras familias que en muchos casos, se resienten. Si te
sientes identificado con alguna de estas situaciones, debes
saber que eso significa que estás en la carrera de la rata.
¿Por qué decimos esto? Porque una vez más, la educación

actual nos ha preparado para ser empleados, para traba-
jar para otros y para ganar dinero. No nos formaron para
ser emprendedores ni tampoco inversores que saben cómo
hacer para que el dinero trabaje a favor de ellos. Nos forma-
mos con el programa curricular de la “era industrial”, que
oficialmente terminó en 1989 con la caída del Muro de Ber-
lín cuando Internet logró llegar a todo el mundo. Al estar
todos conectados, comenzó la “era de la información” y las
reglas cambiaron. Pero la educación no acompañó ese cam-
bio. Al menos, no en la mayoría de los casos y en aquellos
140
que sí, no lo hizo con la velocidad necesaria. En las grandes

corporaciones no se precisa pensar sino ejecutar lo reque-
rido. Insistimos con esto porque es un concepto clave para
poder realizar un cambio de perspectiva que nos permita
incorporar el nuevo paradigma.
Si observamos las carreras universitarias disponibles, ad-

vertiremos que no existe una opción de “Licenciatura en
Creación de Empresas”. Podemos formarnos en administra-
ción pero no en creación. Recientemente se han empezado
a dictar cursos y diplomaturas de “emprendedurismo”
(entrepreneurship en inglés), pero aún no hay una carrera
completa. En el sistema tradicional de educación actual,
podemos sumar maestrías y postgrados en finanzas, con-
sultoría de empresas, invertir dinero y dedicar más tiempo
a estudiar, pero nada nos garantiza que ganaremos más. Y
en caso de ganar bien, tampoco se nos garantiza que ten-
dremos el tiempo para disfrutarlo. La situación se está agra-
vando ya que el número de personas en el mundo crece, al
tiempo que disminuyen las oportunidades de empleo.
Walter: ¿Por qué estamos entonces en la “Carrera de la

Rata”?
Cristian: Porque no tenemos educación financiera.

No sabemos cómo manejar el dinero ya que no nos lo en-
señaron. Recibimos muchos estímulos y facilidades para
ganarlo y gastarlo, pero nadie nos dijo cómo administrarlo.
Ni siquiera nos han enseñado la verdad elemental de que
“si gastamos más de lo que nos ingresa, pronto estaremos
en problemas”.
141
El subtítulo del libro Padre Rico, Padre Pobre es: “Qué les en-
señan los ricos a sus hijos, que las clases media y pobre,
no”. ¿Conoces alguna persona a quien sus padres hayan
llamado a los dieciséis años para decirle: “Ven hijo/hija,
voy a enseñarte cómo ganar y administrar tu dinero para
que puedas ser rico cuando seas adulto”? ¿Sabes de algún
colegio o universidad donde se dicten materias como For-
tuna I, Sueños II o Visión III? No nos enseñaron educación
financiera porque el programa que siempre se aplicó y se
sigue aplicando, es para educar empleados. Y además de
esto, hemos perdido la “cultura del ahorro” para incorporar
la del consumo. Esto lo vemos especialmente en épocas de
inflación.
Menos aun aprendimos la “cultura de la inversión”, en pro-

medio lo más alocado que podemos hacer es invertir en un
plazo fijo. Las personas que logran ahorrar no van mucho
más lejos que del colchón al plazo fijo. Así que tampoco te-
nemos educación para invertir, pero sí para consumir y gas-
tar. Todo el mundo compra, consume, aprovecha ofertas y
paga en cuotas. ¿Adónde nos lleva todo esto? Nada más ni
nada menos que a ser esclavos del dinero. Porque no sabemos
qué es lo mejor que podemos hacer con el dinero que nos
ingresa. Gastamos sin saber que hay algo mejor. Y menos
aun sabemos cómo multiplicar el dinero ganado y hacer
que trabaje para nosotros.
El último libro de Robert Kiyosaki que ha editado Editorial

Aguilar se llama La Conspiración de los Ricos. Allí amplía
y profundiza los conceptos presentados en sus primeros
títulos. Nos dice que a pesar de que cuando éramos chicos
142
nos inculcaron que el dinero, o el amor al dinero, es la raíz

de todo mal, él considera que en realidad lo malo es la igno-
rancia de las pautas que deberían regir su manejo. Porque
bien administrado, el dinero puede ser derivado a donacio-
nes para las causas más diversas y nobles, o a brindarnos a
nosotros y nuestros seres queridos una buena vida, o a lo
que se nos ocurra. El dinero por sí mismo no es ni malo ni
bueno. Entonces, ¿cuál es la causa de semejante omisión en
nuestro sistema educativo? Porque actualmente, con excep-
ción de algunas pautas básicas de contabilidad, la educa-
ción financiera brilla por su ausencia en las escuelas.
Kiyosaki se pregunta si esto no es parte de una conspiración
mayor: la “conspiración de los ricos”. Es decir, de aquellos
que realmente manejan los destinos financieros de la gran
mayoría. Porque tanto adultos como niños, ricos y pobres,
todos utilizamos dinero. Por lo tanto, todos deberíamos sa-
ber cómo hacerlo. Si profundizáramos en el tema, quizás
descubriríamos efectivamente algo como una “conspira-
ción de los ricos”. Pero sin llegar a pensar eso, es claro que
entendemos poco o nada acerca del manejo del dinero. ¿No
es hora de dar un salto, salir del lugar donde estamos atra-
pados y empezar a mejorar nuestras vidas?
Walter: ¿Qué podemos hacer al respecto?
Cristian: Como ya hemos dicho, lo primero es definir

un sueño. El sueño es lo que moviliza a los emprendedores
y a los ricos. Así ocurrió con los dueños de empresas de la
era industrial. Pero hoy es necesario que todos tengamos
un sueño, y éste será nuestra fuente de inspiración y moti-
vación. Y lo mantendremos a resguardo de los roba-sueños,
143
los que nos dicen que no volemos, que no divaguemos, en

una palabra, que no aspiremos a algo más y/o mejor. La-
mentablemente, esas son muchas veces las personas que te-
nemos más cerca y como consecuencia muchos se encuen-
tran “durmiendo con el enemigo”. Es también el caso de
algunos autores o bloggers que no han probado el método,
pero lo invalidan desde la teoría. De modo que lo primero
es definir qué queremos para nuestra vida. Dónde nos gus-
taría estar dentro de cinco, diez o quince años.
Walter: ¿Existe un plan de acción para poder alcanzar

nuestros objetivos?
Cristian: Sí, en realidad hay muchos, tantos como

personas que han alcanzado la libertad financiera y lo ex-
plican en sus libros o guías. Nosotros proponemos uno lla-
mado la Escalera a la Libertad Financiera. La misma tiene
cinco escalones, a saber:
1. EDUCACIÓN FINANCIERA: Leer libros, asistir a

cursos y seminarios, jugar Cashflow, etc.
2. REDES DE MERCADEO: También conocidas como

“marketing multinivel” o “network marketing”, son
negocios que ofrecen información actualizada, brin-
dan educación y formación, proveen flujo de caja y pro-
porcionan crecimiento personal.
3. NEGOCIOS BURSÁTILES: Conocimiento y posterior

participación (inversión) en los mercados de capitales,
operaciones bursátiles, mercado de divisas, etc.
144
4. SISTEMAS EMPRESARIALES: Desarrollo o adquisi-

ción de franquicias comerciales.
5. NEGOCIOS INMOBILIARIOS: Inversiones en bie-

nes raíces.
Recordemos que, para crear su fortuna, Robert Kiyosaki

tardó diez años en la década de 1980. Pero él afirma que
hoy, gracias a los avances tecnológicos, se puede obtener
un excelente resultado en cinco años. Y cuando hablamos
de resultado, nos referimos nada más ni nada menos que a
escapar de la carrera de la rata.
La secuencia tiene una lógica que está dada por el tiempo y
el dinero que lleva cada paso. Es necesario invertir TIEM-
PO y DINERO, si lo que se espera ganar es tiempo y dinero.
Los libros tienen un costo, al igual que los cursos y semina-
rios. Desde un libro de $ 80 hasta una maestría de $ 200.000,
todo es educación financiera. Pero cada peso invertido irá
dando sus frutos.
Por ejemplo, en Escuela de Riqueza se dicta un curso sobre

Impuestos. ¿Por qué? Porque la mayoría de la gente no está
conciente de que entre impuestos directos e indirectos,
paga aproximadamente un cincuenta por ciento de sus in-
gresos al año. Es decir que de cada cien pesos, cincuenta se
los lleva el gobierno. Pero la buena noticia es que, parte de
esos impuestos se pueden poner a trabajar para nosotros co-
menzando así a generar nuestra riqueza. Por supuesto que
hay que saber cómo hacerlo. Aprender es medianamente
fácil y hacerlo es posible. Y podemos lograr una diferencia
si de cada cien pesos, veinte los ponemos a trabajar a nues-
145
tro favor, acumulando el resultado año tras año. Pero para

saber cómo hacerlo, lógicamente hay que invertir. No sola-
mente el dinero del costo del curso, sino también el tiempo
de un día que toma asistir al seminario. Es decir, aprender
cómo beneficiarse del pago de los impuestos, implica una
pequeña inversión de dinero y de tiempo.
En otro seminario se aprende cómo adquirir bienes raíces

sin anticipo y sin poner dinero propio. Esto es algo absoluta-
mente posible, de hecho nosotros lo hacemos. Por ejemplo,
acabamos de comprar varios departamentos de un edificio
sin dar anticipo y financiado por su dueño. Pero para llegar
a eso, hay que aprender, y eso se hace fuera de las horas de
trabajo, en el tiempo libre.
“Una de las grandes diferencias entre ricos y pobres,

es lo que hacen con su tiempo libre.”
Robert Kiyosaki
2. Para ganar: Establecer orden y estrategias
Si la elección de qué hacer el sábado consiste en comer un

asado en la quinta de un amigo, ese día no nos estaremos
ocupando de nuestro crecimiento financiero. Y lo mismo si
llueve y elegimos dormir, ver películas o si andamos siem-
pre de fiesta. De ese modo, no habrá diferencia en nuestra
vida financiera futura. Para lograr algo distinto en nuestra
vida, será necesario hacer algo distinto de lo que venimos
haciendo.
146
En cuanto a las redes de mercadeo, se puede comenzar un

negocio con apenas US$ 500, o aun menos en algunos casos.
Son sistemas donde se brinda una formación moderna y en
constante actualización, que permiten un gran desarrollo
personal. Hay opciones con inversiones mayores que pue-
den llegar hasta US$ 5.000. Pero aun así, sigue siendo poco
para iniciar un negocio que además de una oportunidad de
ganar dinero, nos brinda educación, formación y flujo de
efectivo, además del know how (saber cómo hacerlo), dado
que el negocio está probado y funcionando.
En el tercer escalón, el mercado bursátil, el dinero para em-
pezar a invertir está en el orden de los US$ 3.000 en adelante.
En el cuarto escalón, ya sea que se desee crear un sistema

comercial propio para franquiciar o adquirir una franqui-
cia ya desarrollada, la inversión irá de los US$ 25.000 en
adelante.
Por último, en el caso del quinto escalón, los bienes raíces,

para empezar este tipo de inversión se debe contar con más
de US$ 250.000, para que genere flujo de caja y nos permi-
ta salir definitivamente de la carrera de la rata. Ese será el
momento en que el Cashflow ingrese de modo pasivo o re-
sidual, es decir, sin que tengamos que trabajar linealmente
para que el dinero llegue a nosotros.
Walter: Mencionaste los conocimientos necesarios para po-

der acceder a cada escalón… ¿Qué necesitamos saber al respecto?
147
Cristian: Es importante que hagamos una auto-eva-

luación realista de nuestro nivel de educación financiera, y
nos hagamos dos preguntas básicas de coaching financiero:
• ¿Cuánto es lo que sé?

• Con lo que sé, ¿adónde voy a llegar, financieramente
hablando?
En del camino del aprendizaje que tenemos que transitar,

hay conceptos muy importantes a incorporar. El primero
es: poner orden en nuestras finanzas personales. Esto no es
ni más ni menos que, no gastar más de lo que se gana. Todos
los autores que escriben sobre cómo lograr independencia
financiera mencionan esto como algo básico y clave. Es el
caso de Jean Chatzky, una de las coaches financieras más
reconocidas de Estados Unidos, editora de la revista Money
y de temas de finanzas en el show de la cadena NBC, Today.
En todas sus apariciones y escritos, lo primero que Chatzky
recomienda una y otra vez es, “gasta menos de lo que ga-
nas”. Ella considera que hay cuatro pasos básicos en el ca-
mino hacia el primer millón. El primero es gastar menos
de lo que se gana y los otros tres son: ganar como para vivir
bien, invertir lo que no gastamos haciendo que ese dinero
trabaje para nosotros y aprender a proteger el patrimonio
que estamos creando, de manera que un eventual desastre
–pequeño o grande– no nos deje sin nada. En su libro Gana
Dinero Sin Más Excusas1 Chatzky explica muy bien cómo
poner en práctica cada una de esas cuatro cosas a las que se
refiere como “los cuatro pilares de la economía personal”.
Afirma que, de comenzar hoy a hacerlas, mañana mismo
1
Publicado por editorial Triskel Press, San Isidro, Buenos Aires, Argentina.
148
empezaremos a enriquecernos. Su mensaje se sustenta en

la idea de que cuando estamos asentados financieramente,
podemos enfocar en las cosas de la vida que de verdad im-
portan.
Ordenar las finanzas personales es vital para lograr salir de

la Carrera de la Rata, ya que no hay forma de escapar de ella
si no se “emparejan” las cuentas. ¿Qué es lo que hace que
muchas personas no puedan poner orden en sus finanzas
y se encuentren asfixiados por las deudas? Lo que ocurre
es que todos sabemos cuánto ganamos, porque normal-
mente tenemos un ingreso fijo. La gran mayoría de la gente
tiene un solo ingreso: su sueldo. Y los comerciantes o los
profesionales, tienen un promedio anual de ingresos que
les permite hacer sus cálculos mensuales. Pero el proble-
ma es que muy pocas personas saben cómo hacer un plan
de gastos. Casi todos tienen un solo ingreso, pero muchos
gastos. Cuando le preguntamos a la gente cuánto ganan, en
un ejemplo de “1000” dirán que gastan alrededor de “600”.
Entonces la deducción lógica sería pensar que les quedan
400 para ahorrar. Pero si se les pregunta cuánto ahorran, la
respuesta casi siempre es: “Nada, ni siquiera logro llegar
bien a fin de mes”. El problema es que sólo tienen en cuenta
los números grandes y omiten incluir los pequeños. Nadie
tiene idea dónde va a parar ese dinero que aparentemente
sobra. No se dan cuenta de que cada vez que salen de su
casa con, por ejemplo $ 50, vuelven con $ 10, o nada. ¿Qué
pasó? No lo saben, porque no llevan control de los gastos ni
elaboran un presupuesto. En general tienen registro de los
gastos fijos y los de montos mayores. Por ejemplo, si un día
salen con $ 300 para pagar alguna cuota o servicio de $ 200,
149
al volver sabrán dónde se han ido esos $ 200, pero probable-

mente no tengan tan claro el destino de los $ 100 restantes.
Los pequeños gastos cotidianos suelen quedar sin control
y a lo largo del mes acaban sumando mucho.
Es como agua que se escurre entre los dedos. Y ese flujo de

dinero que se va perdiendo mes tras mes, es lo que lleva a
las personas a endeudarse y a echar mano de los instru-
mentos de crédito disponibles hoy en día, como tarjetas
de crédito, ampliación del límite de crédito y de sobregiro,
créditos fáciles, créditos preadjudicados, adelantos de efec-
tivo, etc. El problema es que al asumir el compromiso de un
crédito, se sabe que indefectiblemente las cuotas deberán
ser pagadas, pero lo que no se sabe es si se dispondrá del di-
nero necesario para hacerlo. Porque a medida que el tiempo
pasa van surgiendo nuevas necesidades o situaciones que
requieren de más efectivo, lo que a veces genera un efecto
de “bola de nieve”, que cuanto más rueda, más nos tapa y
nos ahoga. Así que hasta que no nos “ajustemos el cinturón”
y empecemos a acomodar nuestras finanzas dentro de un
presupuesto, a fin de poder crear una cuenta de ahorro e
inversión –con el dinero que nos sobre cada mes– no nos
será posible salir de la carrera de la rata.
Walter: ¿Qué hacemos luego de ordenar las finanzas?
Cristian: Lo que sigue es, planear el escape. Planifi-

car el avance para salir de la trampa en la que nos hallamos
inmersos. ¿En qué piensa alguien que está recluido, priva-
do de su libertad? Su mente está afuera, su visión es clara
y su sueño poderoso: sólo piensa en salir. Y así deberíamos
150
sentirnos nosotros, con ese deseo, ese anhelo y esa pasión.

Si bien no estamos tras barrotes físicos, lo que nos tiene pri-
sioneros tiene igual o mayor fuerza o peso. Estamos presos
en una cárcel financiera, motivo por el que tantas personas
llegan a su jubilación en quiebra.

Walter: En relación con esto, existen estadísticas que
muestran por ejemplo, que en Estados Unidos el 73% de la pobla-
ción, cuando llega a la edad de jubilarse, o ya está muerto o bien
está en bancarrota. Quiere decir que para vivir, esa persona necesi-
tará la ayuda de familiares o del gobierno. ¡Si eso ocurre en uno de
los países mas desarrollados del mundo, imaginemos lo que pasa
en el nuestro!
Cristian: Resulta irónico que se siga usando la pa-

labra “jubilación” que deriva de “júbilo”, un sinónimo de
alegría, más precisamente, una alegría viva que se exte-
rioriza. Al pensar en la jubilación se la suele asociar a una
buena vida, viajar, ayudar a los hijos, consentir a los nietos
y pasarla bien. Pero la realidad enseguida desmiente esa
idealización. Por eso, la imagen de la persona privada de su
libertad debería tocarnos en lo más profundo, e inspirarnos
para crear un amparo para esos años en que deberemos
dejar de trabajar. O si el sueño es mayor, retirarnos jóvenes
y empezar a disfrutar antes de la vida.
Si deseamos escapar de la carrera de la rata lo siguiente

que debemos pensar es, si lo haremos solos o pediremos y
aceptaremos ayuda. Esto último es lo ideal. Obviamente,
hacerlo con ayuda siempre es más fácil. La ayuda puede
consistir en elegir mentores, es decir, personas que ya han
151
pasado por donde queremos ir, y han llegado donde quere-

mos llegar. Es decir que saben algo que nosotros no, y están
dispuestos a compartirlo con nosotros. Otro tipo de ayuda
puede ser, ingresar a un sistema ya probado. Si queremos
escapar de la carrera de la rata, es más inteligente utilizar la
rueda ya inventada que ponerse a inventar una nueva.
James Prochaska, profesor e investigador de la Universidad

de Rhode Island, Estados Unidos, dice en su libro Cambian-
do Para Mejor que, “cuando la gente quiere hacer algo para
triunfar, si lo hace solo tiene un diez por ciento de probabi-
lidades de triunfar, mientras que si lo hace en equipo esa
misma probabilidad asciende al noventa por ciento”. Pero
ocurre que muchas personas parecen tener el “complejo de
Rambo”, aquel personaje de película que, como recordarán,
iba luchando solo contra el mundo. Entonces, si es mejor ha-
cerlo en equipo, con el conocimiento y la estructura adecua-
dos, esto nos lleva al segundo escalón de la Escalera hacia la
Riqueza, que son las redes de mercadeo.
En este capítulo ya mencionamos la teoría que respalda la

validez del aprendizaje vivencial, desarrollada por el pe-
dagogo estadounidense Edgar Dale en su cono de la expe-
riencia o del aprendizaje. La misma está representada en
un cuerpo geométrico cónico con varios niveles o pisos. En
la cúspide se encuentra la representación oral (descripcio-
nes verbales, escritas, etc.). Pero la mayor profundidad de
aprendizaje está representada en la base del cono, donde
Dale ubica a la experiencia directa: realizar uno mismo la
actividad que se desea aprender. Vivir la experiencia es la
mejor opción. En las redes de mercadeo es posible aprender
152
de manera vivencial. El aprendizaje se vuelve más rico y efi-

caz y va ocurriendo de forma natural y gradual. El mismo
sistema lleva a los participantes a desplegar capacidades de
liderazgo, ventas, comunicación, administración, finanzas,
trabajo en equipo, manejo de las emociones y de las relacio-
nes humanas, etc. Los miembros, que forman una célula
empresarial unipersonal con proyección de crecimiento
exponencial, se rodean de personas con espíritu ganador,
cuentan con mentores que los guían y ayudan –que son
quienes ya han logrado éxito en la actividad– y acceden a
un negocio que genera ingresos residuales.
En cuanto a los costos para montar un negocio tradicional,

que en valores actuales rondan los US$ 15.000 ó 20.000, en la
redes de mercadeo se reducen drásticamente porque se evi-
tan los gastos de alquiler, decoración, armado, inversión en
mercaderías, etc. Un negocio de network marketing funcio-
na como una franquicia, pero sin la inversión. Es decir que
se accede a un sistema ya organizado y en funcionamiento
y, a lo largo de su avance, la persona va aprendiendo a desa-
rrollar la mentalidad empresarial, creando un negocio con
potencial para generar ingresos residuales. Y en la mayoría
de los casos, según la empresa a la que elija asociarse, ten-
drá alcance global. Por su importancia en el plan, ampliare-
mos este tema en el próximo capítulo.
Con respecto al ingreso residual versus el ingreso lineal,

este último es el que se obtiene del modo tradicional, es de-
cir, cambiando tiempo por dinero.
153
Walter: En mi caso, en mi trabajo en televisión yo cobro

por las horas que estoy allí, si no estoy, obviamente no cobro nada.
Cuantas más horas trabajo más gano, y viceversa. Dependo de
terceros que me contraten y me paguen. Si me enfermo y no puedo
estar, no cobro. En ese caso cesa el ingreso de dinero pues ni mi
esposa ni mis familiares pueden hacerse cargo de mi espacio en
el programa. Por lo tanto tampoco es heredable. La libertad de
tiempo se va perdiendo de modo inversamente proporcional a la
inversión: cuanto más tiempo dedico a trabajar, menos tiempo me
queda libre. Es decir que no hay libertad de dinero ni de tiempo. Es
lo que me ocurrió cuando me encontré inmerso en la carrera de la
rata.
Cristian: En cambio, ingreso residual es el que se ob-

tiene cuando hacemos algo bien, y luego seguimos cobran-
do siempre. Es el caso de los escritores con sus libros y los
cantantes y músicos con sus creaciones musicales. Para que
un mayor número de personas accedan a la información
sobre finanzas personales, nosotros decidimos plasmar
algunas de nuestras ideas y conceptos en un libro. Enten-
dimos que es algo que se hace una vez, para seguir cobran-
do por mucho tiempo después. Son emprendimientos que
implican esfuerzos extra. Yo inicio mi día muy temprano,
el tuyo termina muy tarde. Sin embargo tratamos de in-
cluir en nuestra agenda tiempo para el proyecto del libro,
combinando los distintos horarios de ambos. Son trabajos
que se hacen en un período de tiempo, esperando obtener
un beneficio a futuro. Aunque no hay certeza del resultado,
confiamos en un éxito que nos permita obtener ingresos
residuales. Escribir un libro es una opción para generar ese
tipo de ingreso pero, no todos quieren o pueden hacer algo
154
así. No todas las personas tienen algo para comunicar ni sa-

ben cómo hacerlo. Un ingreso residual o pasivo es algo que
se hace una vez y se sigue cobrando por ello durante varios
años, a veces de por vida. Incluso se hereda.
Con respecto al libro, aspiramos a traducirlo a otros idio-
mas, lo que lo convertiría en un negocio de alcance global
y probablemente le daría un crecimiento exponencial. Ci-
tando algunos ejemplos de esto, los herederos de Michael
Jackson cobran más hoy que cuando él vivía; una funda-
ción recibe ingresos actualmente por las ventas de cada
ejemplar de El Quijote; y hasta Donald Trump ha publicado
libros por los que recibe “regalías” (otra denominación para
ingresos residuales). Uno de sus libros es en co-autoría con
Robert Kiyosaki, donde ambos recomiendan el network
marketing. De hecho, Trump ha iniciado su propio negocio
de comercialización por redes, aunque aclara que lo hace
por considerar que es una oportunidad para muchas per-
sonas, incluso utiliza la palabra “salvación”. Durante diez
años se dedicó a recomendar ese tipo de negocios a todos
lo que le pedían consejos para desarrollar una mentalidad
empresarial y ganar más dinero. Muchos querían hacer ne-
gocios con él, pero obviamente no todos tenían la capacidad
ni el dinero. De modo que creó un sistema de red de mer-
cadeo y ahora, quien así lo desee, puede asociarse e iniciar
su propio crecimiento dentro de ese sistema ya armado, y
con la mentoría de nada menos que Donald Trump. Por el
momento su negocio sólo funciona dentro de los Estados
Unidos.

Walter: Siguiendo con la Escalera hacia la Riqueza, ¿cuál
es la recomendación en el siguiente paso?
155
Cristian: Al llegar al tercer escalón estamos en condi-

ciones de acceder a invertir en la Bolsa de Valores. Se reco-
mienda un tipo de operación que se conoce con el nombre
de trading intra-día. Consiste en la compra-venta de acciones
en el momento, en el mismo día o quizás en una semana.
Esto nos protege de situaciones como la que les ocurrió a
quienes en el 2005 invirtieron en acciones de General Mo-
tors, pensando que esa empresa “era Estados Unidos”, por
lo tanto nunca caería. Pero como recordarán, en 2008 y 2009
sobrevino la gran crisis y las acciones de General Motors se
desplomaron y tuvo que ser salvada por su gobierno para
evitar la quiebra. El trading intra-día evita ese peligro y care-
ce de riesgo a mediano o largo plazo.
Un excelente libro titulado Hágase Rico: Gane el 5% Diario1,

de Ariel Rodríguez Flaquer, explica muy bien los beneficios
del trading intra-día: “Los flujos de efectivo adicionales se
obtienen en dólares; se trabaja con la Bolsa de Nueva York
y la inversión está exenta de impuestos para todos aquellos
que viven fuera de Estados Unidos; las operaciones tienen
mejores rendimientos que los bancos y que la bolsa local,
y se pueden aplicar estrategias para ‘tradear’ (operar) ape-
nas unas horas a la semana. Tiene la ventaja de que se gana
dinero tanto al alza como a la baja, es decir, tanto si el valor
de la acción asciende como si desciende. Además permite
tener más tiempo libre; de hecho, aquellas personas que se
dedican profesionalmente a esta modalidad de inversión
lo hacen en apenas unas horas al día; y también ayuda a
incrementar las ganancias de capital”. Pero como cualquier
156
otra actividad, el trading no es para todos. Requiere un gran

entrenamiento en el área emocional.
Walter: Kiyosaki afirma que la educación emocional
es más importante aun que la financiera. Daniel Goleman es
el psicólogo estadounidense doctorado en la Universidad de
Harvard, que investigó profundamente ese tema. Publicó sus
conclusiones en un libro que fue best-seller por muchos años,
titulado precisamente, La Inteligencia Emocional2. En éste resalta
la importancia del control de las emociones y el impacto de su
equilibrio o desequilibrio en los asuntos de la vida, ya sea en el
orden personal o comercial.

Cristian: Además, el trading es una actividad que debemos
aprender de un profesional del área. No se trata de simple-
mente lanzarse a la Bolsa a comprar y vender. Y sumado
al conocimiento y la guía de un experto, se necesita dedi-
carse a ello en ciertas horas específicas, ya que se trabaja
con el horario de la bolsa de Nueva York y no es posible
acceder fuera del mismo. También es necesario contar con
algo de capital de riesgo dado que se estará comprando y
vendiendo, lo que siempre implica cierto riesgo. Otra de sus
desventajas es que no genera ingreso residual o pasivo. El
resultado es ganancia de capital. A lo largo de los días, se
puede ir generando algo de dinero extra si el resultado es
exitoso. Pero por poco que sea lo que se va ganando, es un
dinero extra que servirá, una vez acumulada una cantidad
suficiente, para invertir en alguna otra cosa que sí genere
ingresos residuales.

Walter: El cuarto escalón de la Escalera hacia la Riqueza
son los sistemas empresariales y las franquicias.
1
Publicado por Editorial Aguilar.
2
Edición en español publicada por Vergara Editor S.A.
157
Cristian: Al comenzar a hablar de este tema en mis

conferencias, siempre le pregunto a la audiencia: “¿Quién
tuvo alguna vez una idea y pensó, ‘con ésta me salvo’?”; y
“¿A quién se le ocurrió o inventó algo que bien podría haber
sido un éxito, pero no lo echó a rodar? Y si no lo hizo y al ver
que otro lo llevó a cabo terminó diciendo, ‘pensar que lo
podría haber hecho yo’.” Muchos de los presentes levantan
la mano. Porque casi todas las personas han tenido “alguna
idea del millón”. El problema es que, como dice Kiyosaki,
además de una buena idea hay saber cómo llevarla a la prác-
tica, ser capaz de hacerlo y luego transformarla en un siste-
ma empresarial que genere ingresos pasivos. También hay
que ser inteligente y amar el aprendizaje. ¿A qué se refiere
con “amar el aprendizaje”? A que no hay manera de ser exi-
toso en un emprendimiento si no se tiene en claro que ha-
brá que atravesar varios fracasos. La probabilidad de tener
éxito en un primer emprendimiento, sin tener experiencia
ni preparación, es la misma que la de comprar un billete de
lotería y ganar el primer premio. Las probabilidades reales
son de fracasar, incluso más de una vez. Pero lo ideal es
aprender de esos fracasos y eso es lo que significa “amar el
aprendizaje”. Si aprendemos algo, no hubo tal cosa como
un fracaso porque al menos hubo aprendizaje. Esto es una
interpretación diferente de una situación aparentemente
adversa. Eso ocurre cuando se modifica el lenguaje con el
que uno se comunica consigo mismo.
¿Qué nos estamos diciendo si a un error le llamamos fraca-

so? ¡Que fracasamos! No se trata de lo que nos pasa sino de
158
lo que nos decimos sobre lo que nos pasa. La interpretación

que apliquemos y el provecho que obtengamos de cada ex-
periencia, abrirán espacios de crecimiento para nosotros.
Cuando algo nos va mal, simplemente debemos decirnos
que por allí no era y empezar de nuevo.
Todos habrán escuchado alguna vez el caso de Edison y la

lamparita o bombilla de luz. Cuentan que lo intentó más de
mil veces sin éxito y siempre decía que no le había ido mal,
sino que seguía avanzando, aprendiendo una nueva forma
en la que no se debía hacer lo que intentaba. Muchos autores
afirman que un fracaso es el mejor espejo donde uno pue-
de mirarse. Si estamos avanzando estaremos transitando
algunos fracasos, nos estaremos probando y fortaleciendo.
Nos permitirá descubrir si tenemos esa garra emprendedo-
ra que tarde o temprano nos llevará hacia el éxito.
Si uno decide armar su propio sistema a partir de una idea,

es mejor buscarse un mentor o asistir a alguna escuela de
negocios.
“Los perdedores evitan el fracaso, y es el fracaso lo que convier-

te a los perdedores en ganadores.”
Robert Kiyosaki

Walter: ¿Cuáles son las desventajas de armar un sistema
empresarial propio?
159
Cristian: Hay estadísticas internacionales y también

locales, que nos dicen que de cada diez emprendimientos
que se inician, al cabo de cinco años sólo uno perdura. Los
otros nueve fracasan. No es que fracasan los pequeños
empresarios porque, de hecho, también lo hacen negocios
millonarios. Recordarán por ejemplo el caso de Nativa, un
refresco a base de yerba mate (Ilex Paraguayensis) lanzado
por Coca-Cola Company. A pesar de los millones que invir-
tieron, les fue mal y, si le puede ir mal a una de las mayores
multinacionales, ¿por qué no podrá irnos mal a nosotros?
Para saber si el negocio va a funcionar o no, hay que esperar
bastante tiempo. Es decir que una de las desventajas, es que
al iniciar un emprendimiento propio tendremos que espe-
rar varios años. Probablemente traspasar la barrera de los
cinco o diez años para saber si alcanzaremos el éxito.
No habrá flujo de efectivo inmediato. No ocurrirá que al

abrir el negocio se forme una larga fila de personas con di-
nero en la mano, ansiosas por entrar a comprar. Tendremos
que esperar mientras se comienza a trabajar, se van ganan-
do clientes, se da a conocer el negocio o el producto, se va
ganando respeto por la marca, y esto aplica tanto a un nego-
cio y a un producto, como a la actividad de un profesional.
Sería por ejemplo el caso de médicos y abogados. Porque a
menos que sus padres sean del rubro y tengan montado un
estudio o consultorio en marcha al que puedan sumarse,
para lograr reputación y buen número de clientes deberán
recorrer una larga trayectoria. Toda actividad requiere el
desarrollo de una cartera de clientes.
160
Luego, se corre el riesgo de consumir los ahorros de toda

la familia, los amigos y los tontos (lo que en inglés llaman
FFF=Family, Friends and Fools: familia, amigos y tontos).
Porque son esas las personas a las que se les pide dinero
prestado y de buena fe apuestan al emprendimiento sin
conocimiento y sólo por intuición. Por supuesto hay que
contar con bastante dinero para alquilar el local u oficina,
equiparlo, decorarlo, llenarlo de mercadería y promocio-
narlo. En caso de tener que tomar empleados, la inversión
será más grande todavía. Nuevamente recomiendo el ex-
celente libro de la serie Padre Rico “Antes de renunciar a
tu empleo”, que es ideal para quienes quieren emprender y
convertir una idea en un negocio exitoso.
Pero si se cuenta con un capital mayor, entonces se puede

adquirir una franquicia que normalmente es un emprendi-
miento de éxito probado. Allí, si se hace lo debido tal como
suele estar pautado en el contrato, se trabaja primero un
tiempo como gerente y al cabo de un tiempo cuando los in-
gresos lo permiten, el gerente se convierte en el dueño. Pero
debemos contar con el dinero para comprarla.
Walter: En el quinto escalón de la Escalera Hacia la Rique-

za, Kiyosaki nos habla de la inversión en bienes raíces, ¿no es así?
Cristian: Exacto. Las inversiones en bienes raíces

tienen muchas ventajas: nos dan control, flujo de efectivo,
apalancamiento, amortización, depreciación, creatividad,
expansión, previsión, impuestos diferidos, plusvalía, etc.
Quizás muchos de esos términos no sean conocidos por
todo el mundo pero se explican muy bien en distintos libros
161
y cursos. Hay varios seminarios donde se enseña cómo po-

ner todos esos recursos y potenciales a nuestro favor. Las
ventajas son muchísimas, pero hay que tener en cuenta que
son inversiones lentas, de largo y no de corto plazo. Debe-
mos tener en cuenta que los bienes raíces siempre son, en
última instancia, del estado, por eso en inglés se llaman
Real State. Si alguien duda de que esto es así, no tiene más
que dejar de pagar los impuestos sobre sus propiedades, y
comprobará que no tardarán demasiado en llegarle la inti-
mación y el embargo de las autoridades correspondientes.
Como para todo, también aquí se necesita aprendizaje,

dedicación y conocer el mercado. No es lo mismo comprar
que invertir en una propiedad, aunque ambas cosas con-
sistan en una adquisición. Para llegar a generar un gran
flujo de efectivo, se necesita mucho dinero. Todo depende
del mercado dónde se realicen las operaciones. A veces una
suma como US$ 70.000 u 80.000 permiten adquirir un de-
partamento para ofrecer en alquiler, pero con ese monto es
probable que la ubicación no sea de las más rentables. Es
decir, que la ganancia no tendrá relación con la inversión.
Se habrá inmovilizado una gran suma de dinero para obte-
ner poco Cashflow. Para lograr tener mayor flujo ¡habrá que
tener varios departamentos! La estrategia no es mala. Pero
requiere que dispongamos de grandes sumas de capital.
Walter: ¿Qué puedes contarme acerca de la Inversión en

Commodities?
Cristian: Como explica el asesor Juan Cruz Bozzetti,

lo que ha producido esta crisis es interesante. Hay una pa-
162
labra que puede describir las consecuencias y por lo tanto

estigmas que hoy existen en esta crisis que todavía conti-
núa. La palabra es “desconfianza”. Existe en los mercados
una creciente desconfianza, hoy por hoy creciente, por el
sistema financiero internacional. Esto se ve reflejado en lo
que se denomina la “crisis de deudas soberanas”, donde los
inversores comienzan a desconfiar de invertir en la deuda
de países del primer mundo. Las bajas en las calificaciones
de las deudas tanto europea como de Estados Unidos, ha
dado una señal de alerta más.
Durante la historia monetaria han existido ciclos en los

cuales se producen momentos de grandes transferencia de
riqueza, producto del pánico con el abandono de aquellos
lugares que se consideraban “refugios de valor”, hasta que
dejan de serlo repentinamente.
Lo extraño de todo esto, es que pese a lo que nos ha enseña-

do la historia, pocos hemos aprendido de ella: nos encontra-
mos en un mundo tremendamente conectado, pero nuestro
sistema monetario internacional tiene como moneda de re-
serva mundial una moneda sin respaldo. Nunca ha pasado
en nuestra historia que estemos tan interconectados como
ahora y a su vez, vivamos bajo un esquema así.
El papel moneda sin respaldo vuelve a estar en el centro de

la escena mundial.
El dólar, lentamente está perdiendo su lugar como moneda

de reserva mundial. Múltiples actores económicos están
demandando una transición hacia un “nuevo orden mo-
163
netario”, lo que equivaldría a una gran transferencia de ri-

queza.
La historia nos enseña que es en estos momentos de incerti-

dumbre, excesos fiscales y monetarios que los activos tan-
gibles son los que triunfan, por encima de “las promesas de
papel de gobiernos sin compromiso de pago”.
La historia también nos enseña que el oro fue, es y seguirá
siendo dinero como lo muestra su trayectoria a lo largo de
los siglos.
Los commodities se convierten ahora en más que una
moda. Con la creciente aparición de nuevos vehículos para
invertir en ellos, una nueva tendencia está surgiendo: in-
versores pequeños ahora pueden acceder a invertir en com-
modities de tantas formas como nunca antes y de manera
más conveniente.
El declive del dólar y de las monedas sin respaldo exige que

se tenga en cuenta a los commodities como una alternativa
más a la hora de preservar el patrimonio.
Es clave dominar entonces, el arte de invertir en commodi-

ties, para mejorar nuestra inteligencia financiera y aprove-
char las grandes oportunidades que nos presenta nueva-
mente la historia, como en estos momentos de inestabilidad
global.
2. Las Leyes del Dinero
Walter: Para aquellos que quieran ser financieramente li-

bres, en Escuela de Riqueza se propone un plan a cinco años basa-
164
do en los pasos de la Escalera Hacia la Riqueza que ya analizamos.

Y se enseña cómo hacerlo. ¿Qué podrías agregar al respecto?
Cristian: Vivimos en la era de la inmediatez. Todo es “ya”.

Todo es para ahora. Pero no hay recetas para hacernos ricos
de inmediato. Lo único que llega de la noche a la mañana es
la luz. No hay recetas de “éxito en el horno de microondas”.
Lo que sí hay es un plan. Tal como hicimos en la escuela o la
universidad. Seguimos un plan trazado previamente por
otros, donde se nos decía qué materias cursar primero, qué
secuencia seguir, qué libros leer, qué trabajos prácticos pre-
sentar, cuándo rendir exámenes, etc. Y al cabo de un tiempo
también pre-pautado, si seguíamos el plan y cumplíamos
los requisitos, aparecíamos en una foto vestidos con una
toga negra y lanzando al aire el birrete.
Hemos dicho una y otra vez que lo primero es tener un sue-

ño grande que sostenga lo que vamos a construir, así como
un buen cimiento es capaz de sostener un edificio. Cuan-
to más grande es el cimiento, más alto puede construirse
encima. Y luego recién debemos iniciar nuestra educación
financiera que nos permitirá seguir el plan que nos llevará a
salir de la Carrera de la Rata. Pero hay algunos otros aspec-
tos a tener en cuenta que constituyen lo que se conoce como
Leyes del Dinero.
El Hombre Más Rico de Babilonia1 es un excelente libro en el

que su escritor, George Clason, presenta Siete Leyes del Di-
nero, en el contexto de la historia de un hombre que supues-
tamente llega a ser el más rico de la ciudad de Babilonia, la
más prolífera de la antigüedad. Siempre con un sustento
1
Publicado por Ediciones Obelisco.
165
filosófico detrás, cada ley es un principio desarrollado por

el protagonista del libro.
“Las 7 reglas del hombre más rico de Babilonia:
• Comience a llenar su bolsa primero.

• Controle sus gastos.
• Haga dar frutos a su dinero.
• Impida que sus tesoros se pierdan.
• Haga que su propiedad sea una inversión rentable.
• Asegúrese ingresos para el futuro.
• Aumente su habilidad en la adquisición de bienes.”
Antes que nada dice que si no nos pagamos primero a no-

sotros mismos, nos estamos olvidando de la persona más
importante que ha generado esos ingresos… ¡nosotros!.
Otro principio del dinero a tener en cuenta, es el control

de las deudas. Ya hemos hablado de esto antes. Poner en
orden las finanzas personales es un requisito ineludible
si queremos llegar a ser libres financieramente. De modo
que es importante salir de las deudas pronto. Si no sabemos
cómo hacerlo, necesitaremos buscar ayuda. Ése es el trabajo
de un asesor o un coach financiero. De todas maneras, es
oportuno recordar que hay deuda buena y deuda mala, tal
como dice Kiyosaki. Él llama deuda mala a aquella que con-
traemos pero no nos brinda ningún beneficio impositivo o
financiero, como lo hace la llamada deuda buena. Todo eso
se aprende, pero algo nos debe quedar clarísimo: salir de las
deudas es clave e indispensable.
166
Luego de esto y como también ya mencionamos varias ve-

ces, es importantísimo educarse financieramente (a través
de libros, seminarios, cursos, maestrías, etc.).
Walter: Siendo estas estrategias que presentas tan senci-
llas, ¿por qué no hay tanta gente rica?
Cristian: Es que son sencillas pero no fáciles. Hay

que determinarse a ponerlas en práctica. Y tenemos una
programación mental acerca del dinero que muchas veces
nos impide ver lo que deberíamos y sabemos que tenemos
que hacer. Solemos ilustrar esto con el ejemplo que segura-
mente muchos habrán escuchado, de esa niña que visita un
circo y ve un elefante amaestrado atado con una fina soga a
una estaca clavada en el suelo. Le pregunta a su padre cómo
puede ser que un animal tan grande sea controlado por algo
tan pequeño. El padre la lleva a hablar con el adiestrador,
quien les cuenta cómo de chiquito el elefante fue acostum-
brado a estar atado con una soga fuerte. De esa manera se
acostumbró a no poder soltarse. Primero no tenía la fuerza,
lo intentaba y no podía. ¿Qué ocurrió entonces? En algún
momento dejó de intentar y ya no fue necesaria una gran
soga o cadena. En la mente de ese animal quedó grabado
que no podía escapar.
Y así estamos nosotros atrapados en la Carrera de la Rata.

En algún momento nos pusieron eso en la mente. Ya sea el
tipo de programación sobre el dinero con frases como: “el
dinero no crece en los árboles”, “el dinero no se encuentra en
las calles” o “en la vida todo cuesta”. Nos formaron dentro
del modelo de la era industrial, de estudiar y trabajar mu-
cho para así conseguir riqueza y felicidad.
167
Por eso una de las primeras cosas que le enseña el Padre

Rico a Robert es: “trabaja para aprender, no para ganar di-
nero”. Ésa es una de las primeras enseñanzas que leemos
en Padre Rico Padre Pobre. Es probable que muchos de noso-
tros estemos hoy como ese elefante del circo de la historia,
encadenados a una vida que no es la que deseamos. Pero
al igual que al elefante, lo que nos ata no es algo que no se
pueda modificar. Está en nuestra mente. Aquel que se sienta
de ese modo y no se sienta satisfecho con la vida que está
viviendo, no debe resignarse ni lamentarse. Simplemente,
es hora de tomar la decisión, definir el sueño, empezar a
educarse, poner en orden las finanzas y buscar ayuda para
aprender cómo subir uno a uno los escalones de la Escalera
a la Libertad Financiera.
Necesitaremos seguir un plan probado y trazado por quie-

nes ya lo han hecho. Y comenzar a disfrutar la visión de que,
en lo alto de esa escalera, se encuentra nada menos que el
cumplimiento de nuestros sueños, incluso los más difíciles
e imposibles.
Ejercicio:
¿En qué escalón de la escalera a la Libertad Financiera me encuen-

tro?
¿Qué podría hacer para comenzar a subir por ella?
168
Capítulo IX
.
Redes de Mercadeo:
.
La Escuela de
Negocios al Alcance de Todos
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
Capítulo IX La Escuela de Negocios al Alcance de Todos
“Por fin encontré un negocio con un interés auténtico en las

personas.”
Robert Kiyosaki
1. Partes de un entero
E
n todo el mundo son varios los autores sobre finan-
zas personales, que recomiendan las redes de mer-
cadeo como una fuente de ingresos adicionales para
aquellos que ya cuentan con un sueldo fijo. La sugerencia
no está basada sólo en la cuestión económica, sino también
en el hecho de que este tipo de negocio es un método de
aprendizaje de valores, experiencias y conocimiento de sus
sistemas de retribución y por sobre todas las cosas, de la
verdadera vivencia del trabajo en equipo.
Donald Trump, quien incluso creó su propio negocio de net-

work marketing, Jim Rohn, Robert Allen, Jack Canfield, Ran-
dy Gage, Stephen Covey, Paul Zane Pilzer, Jean Chatzky,
Tony Robbins Camilo Cruz y Blair Singer, son sólo algunos
de los muchos autores que promueven permanentemente
el mercadeo en red. Además del potencial de ingresos pa-
sivos y residuales, en la recomendación dan relevancia al
171
Aprende a Ser Rico Capítulo IX
nivel de los sistemas educativos de las empresas de distri-

bución por redes y, por ende, al crecimiento personal que
conlleva su desarrollo.
“A menudo me preguntan si el mercadeo multinivel es un esque-

ma piramidal. Mi respuesta es que las empresas son esquemas
piramidales. En las empresas sólo hay una persona en la cima,
el presidente, y todos los demás abajo.” Donald Trump en
“Queremos que seas Rico”
Walter: ¿Cómo describirías la situación de las redes de

mercadeo en Argentina?
Cristian: En Argentina, y me atrevería a decir que

en toda Latinoamérica, las redes de mercadeo todavía no
han sido totalmente aceptadas por los críticos y el públi-
co en general, a pesar de ser un método de intercambio de
productos o servicios que crece día a día en todo el mun-
do. Obviamente la ignorancia del tema y la comodidad de
evitar conocerlo en profundidad, hace que sea mucho más
fácil rechazar el “network marketing” que investigarlo y/o
experimentarlo.
Walter: Kiyosaki las recomienda en sus libros, ¿verdad?
Cristian: Robert Kiyosaki ha sido, sin ninguna duda,

un gran difusor de las redes de mercadeo desde mediados
de la década de 1990, siendo éste uno de los pocos temas que
están presentes en la mayoría de sus libros. En El Cuadrante
172
de Flujo de Dinero, él define este tipo de negocio como una

“franquicia personal”. También menciona y recomienda las
redes de mercadeo en Guía para Invertir, Retírate Joven y Rico,
Incrementa tu IQ Financiero, Queremos que seas Rico El Juego
del Dinero, La Conspiración de los Ricos, etc. Además, enfatiza
el compromiso a largo plazo que debe tener toda persona
que se sume a la red como así también el compromiso de la
organización.
Kiyosaki también escribió dos libros dedicados enteramen-

te al tema de redes, uno de ellos es La Escuela de Negocios y el
otro El Negocio del Siglo XXI. El apoyo y soporte que le da al
“network marketing” se debe enteramente a las habilidades
que puede lograr cualquier persona que tome seriamente
este negocio en sus manos. Sin duda que podrá experimen-
tar las mismas vivencias que cualquier empresario en su
camino al éxito; además, realizará un aprendizaje acelera-
do de temas de liderazgo (recordemos que el Padre Rico le
decía a Robert que el liderazgo es la única habilidad no op-
cional para convertirse en empresario). En su último libro,
El Negocio del Siglo XXI, él explica de manera detallada cómo
han mutado los negocios en este nuevo milenio y cómo una
persona debe adaptarse empresariamante, para sobrevivir
y triunfar… y todo esto se consigue a través de las redes de
mercadeo. Como si fuera poco, por añadidura, se crea una
fuente muy importante de ingresos pasivos y residuales, lo
cual es muy difícil de conseguir en el plazo en que se logran
con este tipo de negocios.
Walter: Lo sé, por eso teniendo en cuenta las reco-

mendaciones de Robert, tanto en El Cuadrante de Flujo de
173
Dinero como en Padre Rico Padre Pobre, a comienzos del año

2008 decidí unirme a una compañía de mercadeo en red
dedicada al turismo. Mientras mis amigos, familiares y
compañeros de trabajo pensaban que estaba loco, durante
un año y medio me dediqué a promover servicios turísticos
y, lo más importante, a liderar mi propia organización.
En los últimos años trabajar en la televisión me había lleva-

do a varios lugares de lujo del mundo y a entrevistar a gran-
des figuras del deporte internacional, pero al sumarme al
mercadeo en red volví a vivir experiencias ricas en contacto
con conocidos y extraños, que me sirvieron para expandir
mi organización. Durante varios meses invertí parte de mi
tiempo libre en asistir a seminarios, capacitaciones en ven-
tas, reuniones en antiguos bares de Buenos Aires y muchas
otras vivencias que merecerían un libro aparte para ser con-
tadas.
Así como desde mi propia experiencia recomiendo las artes

marciales para todo deportista o persona que busque mejo-
rar cuerpo y alma, mis vivencias en redes de mercadeo me
sirvieron para incorporarme a la lista de quienes las reco-
miendan a todo aquel que sueñe con la libertad financiera.
Me atrevería a afirmar que son una lección que no debería
eludir todo aquel que desee llegar a ser un buen empresa-
rio. De la misma manera que un director técnico de fútbol
de Primera División debería dirigir divisiones inferiores
antes de dirigir un plantel profesional, todo aquel que tenga
personas a su cargo en cualquier empresa tradicional de-
bería adquirir conocimientos en alguna red de mercadeo.
174
Cristian: ¡Muy cierto! El liderazgo que se consigue

en este tipo de negocios es excelente, pues la gente que se
suma a una red lo hace por propia voluntad y con el deseo
de cumplir sus sueños; y quien la lidera, lo hace a partir de
ese voluntariado y no con la imposición de un sueldo o la
autoridad de un puesto. En las redes encontramos lideraz-
go 100%.
Walter: El subtítulo del libro La Escuela de Negocios,

dedicado como ya dijimos al tema de redes, es: “Para per-
sonas que gustan de ayudar a los demás”. En esta obra hace
un resumen de lo que se aprende al emprender este tipo de
negocio, con constancia y durante un tiempo razonable:
• Una actitud triunfadora.

• Habilidades de liderazgo.
• Habilidades de comunicación.
• Habilidades para tratar con la gente.
• Cómo superar miedos, dudas y falta de confianza.
• Cómo superar el miedo al rechazo.
• Habilidades para administrar el dinero.
• Habilidades de inversión.
• Habilidades para ser responsable.
• Habilidades para administrar el tiempo.
• Cómo imponerse metas.
• Cómo prepararse para el éxito.
Además de alentar el aprendizaje de estas doce habilidades

que resume Kiyosaki, permítanme contarles qué destrezas
y reflexiones pude sumar durante mi propia experiencia
en redes:
175
• El trabajo en equipo por sobre todas las cosas.

• La importancia del liderazgo dentro de una organi-
zación.
• La influencia que tienen las relaciones humanas y el
volumen de amigos y contactos, en el progreso perso-
nal y económico.
• El desarrollo de la habilidad para conocer gente.
• El aprendizaje del control de tu mente: cuando por
ejemplo personas del grupo abandonan o tus propios
familiares te desaniman.
• La responsabilidad por tu propia vida, como así tam-
bién por el negocio.
• La adquisición de los conocimientos necesarios para
construir un negocio exitoso.
• La importancia de la presentación del negocio (la gen-
te consume por emoción).
• La observación de la reacción de las personas ante
una oportunidad.
• La observación de la actitud de muchas personas que
dicen una cosa y hacen otra.
• El disfrute de la excelencia de los planes de compen-
sación, y la influencia positiva que ésta desarrolla en el
esfuerzo diario.
Por todo lo señalado, creo que todo el que aspire a la libertad

financiera, debería considerar sumarse durante un tiempo
a una red de mercadeo. Si la empresa elegida prioriza la ca-
pacitación de sus integrantes, si no crea falsas expectativas
y sigue una planificación acorde a sus tiempos y preferen-
cias, se puede llegar a agradecer de por vida haber realiza-
do dicha experiencia.
176
Cristian: Es muy importante lo que aclaras y me en-

canta que lo hagas desde tu propia experiencia. Desde la
mía puedo decir que las redes de mercadeo son fascinantes;
éstas permiten aprender y aprehender muchísimo de las
personas, generan un gran crecimiento personal y emocio-
nal y tienen un poder enorme de crecimiento exponencial
en ingresos residuales. Desde ya, deberían ser un paso casi
obligado para todos aquellos que no dispongan del dinero
para iniciar inversiones más costosas (como la Bolsa o los
bienes raíces).
“Sin importar que usted logre alcanzar el lugar más alto del
sistema de mercadeo en red o ganar mucho dinero, el entre-
namiento será de gran valor para el resto de su vida. Si el plan
educativo es bueno, puede mejorar su vida al máximo, tal vez
para siempre.”
(Robert Kiyosaki, en La Escuela de Negocios)
Ejercicio:
“¿Puedo asistir a la Escuela de Negocios de la vida real”?
(extraído del libro “La Escuela de Negocios”, página 101)
¿En qué cuadrante se encuentran tú, tus amigos y tu familia?
Antes de avanzar al siguiente capítulo, quizás quieras to-

marte un momento para evaluar la situación de las perso-
nas más allegadas a ti y sus cuadrantes:
177
PERSONA
CUADRANTE (E, A, D, o I )
Padre____ Madre____ Esposa (Esposo) ____

Hermanos/as (lista de nombres y cuadrante en que se en-
cuentran)
________ __
________ __
________ __
Los 6 Amigos/as con los que tienes más relación (lista de

nombres y cuadrante en que se encuentran)
________ __
________ __
________ __
________ __
________ __
________ __
¿En qué cuadrante te encuentras hoy y en qué cuadrante(s)

quisieras estar el día de mañana?
Hoy:__________________________________________
Mañana: ______________________________________
¿Cuál es tu plan para cambiar de cuadrante?

_______________________________________________
¿Cómo planeas conseguir educación y experiencia, y cam-

biar tus valores esenciales?
_______________________________________________
178
Capítulo X
..
..
Historias de Éxito
..
..
..
..
..
..
..
..
..
..
..
..
Capítulo X Historias de Éxito
La definición de éxito no la dan los premios, entiendo el éxito

como el momento en que la oportunidad se encuentra con la
preparación.
Hilary Swank
1. Todo lo que propongas es posible lograrlo
C
uando concebimos la idea de este libro, nos dimos
cuenta de que el mejor respaldo que podíamos
darle a las ideas que transmitimos, no sólo eran
nuestras propias historias de vida, sino también las histo-
rias de éxito de gente común, gente como ustedes y como
nosotros que decidieron en un determinado momento
salir de la “Carrera de la Rata”, para poder organizar por
ellos mismos sus propias vidas y sus propias agendas.
Es por ello que decidimos contarte y ponerte en contacto

con estos relatos verdaderos y comprobables de personas
que han logrado salir de la Carrera de la Rata y han alcan-
zado la libertad financiera que necesitan para alcanzar sus
sueños; o tal vez, muchos de ellos ya están yendo en seguro
camino hacia esa libertad, mientras que otros ya la alcan-
zaron.
181
Aprende a Ser Rico Capítulo X
Así fue como subimos la convocatoria a la Web de Escuela

de Riqueza, solicitando los siguientes datos:
1. Nombre y apellido.
2. Seudónimo, apodo o cómo te gustaría salir mencionado en
tu historia.
3. Email.
4. ¿Quieres que tu email aparezca con tu historia?
5. País.
6. Ciudad.
7. Edad.
8. Opción A: Cuéntanos tu historia personal de éxito finan-
ciero en no más de 100 palabras.
9. Opción B: Cuéntanos tu historia de éxito con lujo de deta-
lles (texto libre).
10. ¿Estarías dispuesto a que tu historia sea publicada?
11. ¿Estarías dispuesto a que tu historia fuera editada para
una mejor redacción?
12. ¿Se puede demostrar tu historia de forma fehaciente?
Las respuestas llegaron rápido y en cantidad, lo que nos sor-

prendió gratamente. Por ese motivo hicimos una selección
algo aleatoria teniendo como objetivo presentar un grupo
heterogéneo de historias, con el fin de que nuestros lectores
tengan una mayor posibilidad de encontrar con quién iden-
tificarse, porque sabemos que eso puede proporcionarles
inspiración y motivación. “Lo semejante atrae a lo semejante.”
De modo que sin más preámbulos, aquí van las historias

verdaderas de gente real, como ustedes, como nosotros.
182
2. Sueños cumplidos
1) A.M. es hombre, tiene 46 años y vive en la ciudad

de Buenos Aires, República Argentina. En su relato expre-
só: “Nunca fui tan feliz como el día en que dejé de estudiar
medicina. Sencillamente, llegué a casa y eso mismo le co-
muniqué a mi madre, sin más. A partir de allí trabajé como
vendedor. Luego la vida me dio la posibilidad de estudiar
comercialización. En el año 1991 trabajé en un empresa de
bienes raíces para aprender ese negocio. Luego, con un ami-
go, intenté desarrollar distintos tipos de emprendimientos
inmobiliarios, todos ellos sin éxito, hasta que en una opor-
tunidad, logré comprar un terreno en sociedad con otro
amigo que es arquitecto. Construiríamos allí tres dúplex.
Así fue como él armó una maqueta y dibujó los planos con
la intención de sentarnos con todo ello frente a potenciales
inversores. Hicimos varias reuniones hasta lograr reunir
todo el dinero para la construcción. Una vez comenzada la
obra vendimos dos de los tres dúplex prácticamente en el
pozo, lo que nos permitió devolver gran parte del dinero y
dejar de pagar intereses.
Ésa fue mi primera gran experiencia. Luego de eso y hasta

la fecha no he dejado de generar emprendimientos, algunos
con éxito y otros no tanto. Desde el año 1997, además, em-
pecé a invertir en distintos instrumentos financieros, como
bonos, fondos, divisas y desde 2005 a la fecha soy operador
de la Bolsa de Nueva York. En 2001 llegó a mis manos el pri-
mer libro de Robert Kiyosaki. Allí descubrí que algunas de
las cosas que él predica, yo ya las venía desarrollando, por
casualidad o por intuición. Leer sus libros me permitió or-
183
denarme. Verdaderamente, yo puedo dar fe de que ‘Robert

Kiyosaki tiene razón’.”
2) F.D.B. tiene 32 años y vive en Buenos Aires, Ar-

gentina. Él mismo tituló su historia: “Actual vida o nueva
realidad, tú eliges”. Su relato es el siguiente: “En diciembre
de 2005, mi novia y actual esposa, Yanina, me llamó por
teléfono diciéndome: ‘Estoy leyendo un libro que es justo
para ti, ¡tienes que leerlo!’. Se trataba de Padre Rico, Padre
Pobre. Cuando nos encontramos, su gran entusiasmo al con-
tarme de qué trataba el libro me generó tal curiosidad que
comencé a leerlo de inmediato. Literalmente lo consumí en
dos días, pero aún recuerdo el impacto que produjo en mi
mente y en mi corazón. En aquel momento me había recibi-
do de Abogado y había finalizado un postgrado en Derecho
Notarial con altas calificaciones. Me había especializado
en Franquicias (Franchising) y algunas especializaciones
más, pero ningún libro hasta entonces me había brindado
una visión tan clara y reveladora como Padre Rico.
Durante toda mi vida, por intuición interna y por la expe-
riencia de algunos clientes y amigos adinerados de la fami-
lia, sentía que había algo más que trabajar todo el día. Tener
rentas era bueno pues daban prosperidad a la vida de uno,
pero Padre Rico Padre Pobre me hizo entender los hábitos de
la gente rica, el funcionamiento del sistema, la importancia
de invertir en activos, el aprendizaje y la libertad financiera
con un propósito. Todo ello me dio un panorama simple y
completo de mi realidad y lo que quería para mi vida.
Tuve la suerte de conocer a Robert Kiyosaki por primera
vez aquí en Argentina en una conferencia que ofreció, y
también de disfrutarlo en una reunión privada junto a Wal-
184
ter y Cristian (coautores de este libro) y Kim Kiyosaki. Allí,

lo primero que hice fue agradecerles por compartir públi-
camente sus conceptos y filosofía. Lo segundo, fue expre-
sarles que para mí su libro significó cambiar totalmente mi
realidad. De hecho, les conté que comparaba lo que me su-
cedió con una escena de la película Matrix, en que Morfeo,
uno de los personajes principales, le mostraba a Neo –el
protagonista interpretado por Keanu Reeves- la posibili-
dad de conocer una nueva realidad y su opción de elegir su
futuro o continuar con su actual vida vacía. Si elegía eso,
debía tomar una pastilla azul pero si decidía conocer otra
realidad, debía tomar una pastilla roja, aunque si optaba
por esta última no tendría garantía alguna ni podría volver
a su antigua realidad nunca más.
Por supuesto, yo ‘tomé mi pastilla roja’ y comencé a leer
más libros de Robert, entre los que destaco Retírate Joven y
Rico. Asistí a cursos de Inversión en Cálculo Financiero, me
reuní con personas que invertían en bienes raíces y viajé a
Estados Unidos para tomar cursos con el propio Kiyosaki,
gracias a una invitación de él mismo y de Cristian. Pero
también hice lo más importante: comencé a aplicar todo en mi
vida diaria.
Como parte de mi proceso de formación, me inscribí como
corredor inmobiliario en la IGJ (Inspección General de Jus-
ticia) e ingresé en RE/MAX, franquicia de servicios inmo-
biliarios, para mejorar mis ingresos adicionales y formar-
me en ventas con una empresa que tuviese una excelente
formación y así poder conocer más el mercado de bienes
raíces.
Hoy soy un inversor de renta en bienes raíces, ya que me
gustan los ingresos pasivos. En algunos casos he consegui-
185
do ‘apalancamiento’ de los vendedores, en otros de amigos

o familiares. Y todos en Argentina.
Brindo seminarios de Inversión en Bienes Raíces (algunos
en Escuela de Riqueza) basados en mi experiencia y en la
sabiduría de inversores sofisticados que tengo el placer de
tener como clientes.
Asimismo, busco invertir como ‘inversor ángel’, que son in-
versores que además de invertir capital, se involucran con
sus contactos, su experiencia en determinadas áreas y su
tiempo para ayudar a crecer a pequeños negocios (como
alquiler de juegos para niños, por citar un ejemplo) con em-
prendedores pequeños.
Como desarrollador, estoy en el negocio de licencias y even-
tos, llevando adelante un proyecto vinculado a entreteni-
miento deportivo cuya imagen es Walter Queijeiro. Se trata
de Show Fútbol Tenis, y lo estamos expandiendo por Latinoa-
mérica, con grandes partners (socios) en quienes confío y de
los cuales aprendo a diario a crecer comercialmente.
Me gustaría dejarlos con tres consejos prácticos y una re-
flexión del mismo Robert Kiyosaki durante su estadía en
Argentina:
Consejo 1: Comienza con saber cuánto ganas y cuánto gas-

tas y la mejor forma para ello, es haciendo tu propio Flujo de
Fondos (Cashflow) mensual. Yo tomé el modelo del juego
homónimo del mismo Kiyosaki, que recomiendo que com-
pren y jueguen.
Con el tiempo fui haciéndolo más sofisticado en una plani-
lla de Excel, y llevo años completando mi Cashflow men-
sualmente. Eso me permite conocer mucha información
valiosa de mis finanzas y aplicar disciplina financiera.
186
Consejo 2: Busca comprar activos que te generen ingresos

pasivos y, de ser posible que sea en bienes raíces. Es una
buena estrategia, no se necesita ser un genio para poder lo-
grarlo. Imagino que estás pensando que esa inversión pue-
de requerir mucho dinero, pero por ejemplo, una cochera es
un bien raíz y las hay desde US$ 10.000 en algunos barrios
de Buenos Aires.
Consejo 3: Un concepto que me enseñó el programa

Coaching in Real Estate, de Robert Kiyosaki, es que existen
tres libertades financieras:
I. LIBERTAD FINANCIERA SEGURA: Cuando tus in-

gresos pasivos son iguales o mayores a tus gastos men-
suales.
II. LIBERTAD FINANCIERA CÓMODA: Cuando tus
ingresos pasivos son iguales o mayores al doble de tus
gastos mensuales.
III: LIBERTAD FINANCIERA PARA RICOS: Cuando
tus ingresos pasivos son iguales o mayores a diez veces
tus gastos mensuales.
Por último deseo compartirles la reflexión de Robert Kiyo-

saki en la conferencia privada en que lo conocí, en el Hotel
Emperador. Alguien le preguntó si creía que en Argentina
se podía aplicar la filosofía de Padre Rico, ya que los bancos
financian muy poco la compra de bienes inmuebles, suma-
do a la inseguridad jurídica, la fuerte inflación y la devalua-
ción constante de nuestra moneda. Robert miró el hermoso
ventanal del salón por donde se veían enormes edificios de
viviendas y oficinas y dijo: ‘Absolutamente sí; viendo esos
187
hermosos y altos edificios que tienen aquí (Argentina), hay

gente que sabe cómo invertir y hacer buenos negocios’.
Espero que mi historia y consejos puedan ayudarlos. Hoy
puede ser el primer día de tu nueva REALIDAD, una más
próspera y con un propósito que le dé sentido a tu vida. En
todos los casos, TÚ ELIGES.”
3) R. S. es conductor de televisión y radio, tiene 29

años, nació en Villa Soldati y actualmente vive en Palermo
–ambos barrios de la ciudad de Buenos Aires. Su relato es el
siguiente: “Mi historia de libertad financiera comenzó un
día en que estaba cubriendo una nota con el móvil de una
radio importante, es decir, trabajando como ‘movilero’. En
esa ocasión mi amigo Marcelo Balac me invitó a sentarme
en un bar, o debería decir que ‘me sentó’, y me dijo: ‘Tú tie-
nes que leer este libro para cambiar la mentalidad de ser
sólo empleado; hay posibilidad de cambiar, de hacer otra
cosa, de ganar plata y paralelamente disfrutar de lo que uno
hace o quiere hacer’. Enseguida quise saber de qué libro me
hablaba, y no sorprenderé a nadie si digo que se trataba de
Padre Rico Padre Pobre.
Ese día yo había estado cubriendo el lanzamiento de un
candidato político en el teatro ND Ateneo, ya era tarde y las
librerías estaban cerradas. Pero no dejé pasar el tiempo y al
día siguiente cuando fui a trabajar, apenas pude lo busqué
en una librería y lo compré sin dudar. Ése fue el momento a
partir del cual cambió mi cabeza.
Obviamente, nada es mágico. Solemos luchar todo el tiem-
po para evitar el ‘Camino de las Ratas’. Creo que lo voy
cumpliendo. Hay momentos en que me cuesta más que en
188
otros. A veces lo abandono, luego lo retomo, pero leer estos

libros es el principio y por algún lado hay que empezar.
Para mí, El Cuadrante de Flujo de Dinero es un texto de con-
sulta permanente para evaluar dónde estoy. Creo que el ca-
mino que emprendí es largo e intento acortarlo, pero me re-
sulta cada vez más interesante disfrutar del recorrido para
llegar a la ‘independencia económica’. Entre otras cosas,
aprendí la importancia de contar con un consultor finan-
ciero. Es algo muy útil que ya tengo, su nombre es Máximo
Poggio – trabaja muy bien y ¡obviamente se lleva su buena
comisión!
Hace varios años que he leído Padre Rico Padre Pobre, pero
siempre está en mi biblioteca, Blackberry, iPad, etc. Consi-
dero que es un texto al cual hay que volver todo el tiempo.
Siempre me preguntan si sus enseñanzas se pueden apli-
car en nuestro país. Yo considero que quizás no todo –eso
deberán decirlo los expertos- pero rescato su aplicación tan
útil en términos de los aspectos psicológicos de la econo-
mía, que es una ciencia social y por lo tanto mucho de lo
que se ocupa es psicológico. En eso, tanto Padre Rico Padre
Pobre como todos los libros de Kiyosaki sirven muchísimo.
Incluso me fueron útiles para sugerir su lectura a muchos
amigos, a fin de que ellos también pudieran cambiar su
mentalidad.
Mi resultado es que hoy tengo dos programas de radio. Uno
en frecuencia AM llamado El Disparador, al que yo llamo ‘mi
PYME’1, porque logramos una buena facturación con pocos
empleados. Mi otro programa es en la radio Delta, en el 90.3
del dial de Frecuencia Modulada y se llama Ranking de Noti-
cias. Además, tengo mi propio programa de televisión en la
1
PYME: sigla argentina para Pequeña y Mediana Industria
–comercio o emprendimiento.
189
emisora América TV, que se emite en el mejor horario (prime

time), bajo el nombre de Cámaras de Seguridad. También par-
ticipo de otros dos ciclos televisivos: Calles Salvajes y GPS.
La importancia y la relación de lo anterior con las enseñan-
zas de Kiyosaki es que a partir de mi cambio de mentalidad,
hoy en todos los programas que participo puedo contribuir
con los conocimientos adquiridos aportando publicidad. Y
por supuesto eso me representa más dinero en comisiones,
más allá del salario pactado. En el caso de El Disparador, la
producción es toda mía junto a un socio. Es el emprendi-
miento que sumé después de leer Padre Rico Padre Pobre.
Por último, cada tanto hablo con mi Padre Rico, como lo
llamo a Marcelo Balac. Hoy él es quien a veces me sugiere
inversiones y acciones en las que invertir, busco no caer en
la ‘carrera de ratas’, dicho de otro modo, busco ser libre fi-
nancieramente y no tengo dudas de que es posible.”
4) J.S. tiene 39 años y vive en Buenos Aires. Ésta es su

historia:
Empecé a trabajar a los 11 años, empujando la calesita para
poder subir gratis. Fui lavaplatos a los 15, ayudando a mi
papá, y despachante de encomiendas a los 16; a los 17 vendí
planes de ahorro. Luego llegué a una casa de repuestos por-
que un compañero del secundario dejaba su puesto donde
al mes, ya estaba a cargo del local por cuestiones entre los
socios. Para cubrir gastos y poder pagarme el sueldo, me
dieron la posibilidad de participar en nuevos negocios. Y
así fue como con ahorros pude comprar mercadería y divi-
dir las ganancias con los dueños, incluso me permitieron
usar el local para promover mis negocios. Dichos produc-
tos terminaron siendo el 80% de la facturación del negocio,
190
y todo lo que generaba lo reinvertía, lo cual le dio aun un

mayor giro comercial a la empresa (aunque no contara con
dinero en el bolsillo).
Conocí a mi actual esposa en un recital y hablamos de pro-

yectos de vida y a largo plazo: trabajar duramente hasta los
40 años y tener un negocio propio. Con el apoyo total de ella
que me conectó con su padre, mi actual suegro, que des-
pués de escuchar mi sueño, me brindó el apoyo financiero
inicial. Iniciamos nuestro primer negocio, con casi 18 años
y en pocos meses pudimos devolver el préstamo. Como
estaba tan cansado por la actividad laboral, abandoné los
estudios en el último año de la escuela nocturna industrial.
Pero en el negocio inicié un largo trayecto de aprendizaje
integral. Formamos un gran equipo de personas del cual
me siento orgulloso y al que le brindo todo el apoyo y res-
paldo posibles. La crisis argentina de los años 2001/2 nos
golpeó fuerte, al punto de que debimos vender nuestra casa
propia para cubrir los gastos del negocio y volver a vivir a
la casa paterna.
Luego de culpar al sistema por nuestra situación personal,

me di cuenta de que en la crisis en la que nosotros perdi-
mos, muchos en cambio habían ganado; por ejemplo, aque-
llos que compraron nuestro departamento a un tercio de lo
que realmente costaba y nosotros habíamos pagado. Y en-
tonces me dije: “¿Por qué no me encuentro de ese lado?”; la
respuesta fue que me faltaba “inteligencia financiera”. Ahí
mismo comencé a investigar los temas que me permitieron
pasar de ese lado y aprovechar el próximo cambio gran-
de con las oportunidades que se presentaron. Fue en ese
191
momento cuando escuché el comentario de gente a nuestro

alrededor y de un proveedor sobre un tal “Papá rico”. Eso
fue suficiente para encender la mecha y buscar el libro Padre
Rico Padre Pobre, que encontré “casualmente” en una esta-
ción de servicio en el 2004 cuando por una visita familiar,
salí a comprar un ingrediente para cocinar. Fue el primer li-
bro que compré con mi propio dinero. Lo guardé en el auto,
volví a casa a cocinar y cuando mi familia se fue a dormir,
me encerré en el baño a leerlo; lo leí de corrido hasta el final.
Esa noche no pude conciliar el sueño hasta la madrugada, y
esa misma semana lo volví a leer dos veces más.
A la semana siguiente fui a una librería y compré todos los

libros que tenían de Robert Kiyosaki. Después de leerlos,
pasé una semana en cama, deprimido por haberme dado
cuenta de mi situación real y sobre todo, mi falta de cono-
cimiento. Pero la reflexión final fue: “O sigo aprendiendo o
sigo ignorando el tema”, pero esta última opción sería mu-
cho más costosa para mí y para mi familia. Durante el 2004
y el 2005 me dediqué a leer todos los libros de Kiyosaki y
los que el propio autor recomienda en sus libros. Asistí a
charlas, seminarios y talleres, absorbiendo mucha informa-
ción. En el año 2006 inicié el plan de acuerdo a la filosofía
de Kiyosaki. Al día de hoy cuento en mis activos con varias
propiedades en bienes raíces, adquiridas varias de ellas con
apalancamiento positivo y sin pagar anticipo; tengo activos
financieros en la bolsa de Nueva York, y también comer-
cios de venta minorista bajo un sistema empresarial. En mi
tiempo libre me dedico a seguir aprendiendo, a evaluar y a
realizar inversiones; trabajo duro para llegar a mi objetivo
192
de obtener la “libertad financiera” a los 45 años, ya que mis

planes han cambiado con la madurez personal y financiera.
5) Esta es la historia de una mujer libre financiera-

mente, ¡no es tema solo de hombres!
G. M. tiene 49 años y vive en la ciudad de Miami, en EE.UU.
Ella misma nos cuenta su historia personal:
“El aprendizaje fue progresivo, en pequeñas dosis de infor-
mación sobre finanzas personales a las que inicialmente
no presté demasiada atención porque estaba muy ocupa-
da trabajando para otra persona. Hasta que pude superar
el miedo, dejé de “leer” y comencé a “hacer”. Tuve varios
tropiezos, cometí muchos errores y pasé fines de semana
trabajando, en lugar de descansar. Hoy día, mirando hacia
atrás, estoy convencida de que absolutamente todo cobró
sentido y ocurrió para bien: las propiedades que compré
que resultaron un buen negocio; las que resultaron un mal
negocio; los inquilinos “del horror”. La independencia fi-
nanciera tiene un precio que estuve, y estoy dispuesta a pa-
gar, todos los días.
Todo comenzó con mi divorcio, el cual vino de manera in-

esperada. Irrumpió en mi vida como un tsunami, sabía que
vendría e hice cuanto pude para impedirlo, pero igualmen-
te pasó y arrasó con todo. Luego de 19 años de “mi tsunami”
puedo decir que fue lo mejor que me ha sucedido, ya que
aprendí que para construir sobre bases sólidas es necesario
destruir primero. Y en esa misma época hubo otro hecho
significativo: en medio del duelo del divorcio me ofrecieron
un trabajo durante seis meses en EE.UU. Si hubiera sabi-
do de antemano las enormes dificultades por las que iba
193
a pasar, y los momentos de profunda soledad y dolor que

atravesé, no habría aceptado esa oferta que, en apariencia,
era muy tentadora. Sin embargo, al cabo de los seis meses
iniciales como me encontraba “en el baile”, decidí seguir
bailando… y aquí estoy todavía. En un proceso de gran
crecimiento, en lo personal, en lo profesional y en lo eco-
nómico. Toda esta situación de divorcio y exilio al mismo
tiempo, no me dejó otra opción que hacerme cargo de mis
finanzas personales; para sobrevivir tuve que aprender so-
bre estos temas. No tenía quien lo hiciera por mí y estaba en
una sociedad donde no conocía las reglas de juego, así que
me atreví a hacerlo yo misma. Con tropezones, cometiendo
cantidad de errores, perdiendo y ganando dinero, traba-
jando en relación de dependencia a la vez que hacía otras
cosas “on the side”, con el sueño de que algún día pudiera
comenzar a trabajar de forma independiente.
Al principio, ni siquiera sabía que ésa era mi intención, me

di cuenta de esto con el tiempo. Comencé a hacer inversio-
nes inmobiliarias en 1998 en West Palm Beach, como for-
ma de bajar la tasa del impuesto a las ganancias que debía
pagar. Como no tenía personas dependientes a mi cargo,
una propiedad de inversión me daba la posibilidad de de-
ducir ciertos gastos de mi ingreso regular por mi trabajo en
relación de dependencia. Por aquel entonces desconocía el
concepto de ingreso pasivo, no lo tenía registrado a nivel
consciente. Pero yo seguía haciendo cosas, no sólo leyendo
y tomando cursos, sino fundamentalmente “accionando”:
compraba, alquilaba y vendía propiedades. Como no esta-
ba satisfecha con el servicio que me daban ni me brindaban
la información que necesitaba, obtuve mi propia licencia de
194
“broker inmobiliario”, primero en el estado de la Florida y

luego en el de California, donde viví durante 11 años. Co-
metí muchos errores; algunas operaciones fueron buenas,
otras no tanto, y otras fueron sin duda desastrosas. Pasé por
situaciones difíciles; tuve que gastar el dinero de las vaca-
ciones para arreglar todo lo que destruyeron inquilinos sin
escrúpulos. Compré, alquilé, remodelé y vendí más de 30
propiedades para mí.
¿Se preguntarán si finalmente logré la independencia fi-
nanciera y genero actualmente un ingreso pasivo suficien-
te para cubrir todos mis gastos? Todavía no. ¿Por qué? Por
varias razones: la crisis inmobiliaria del 2008, que hizo que
el rendimiento de algunas propiedades no fuera tan bueno
como lo previsto, y el inicio de un negocio que no funcionó y
en el que invertí tiempo y dinero. Pero de ninguna manera
me daré por vencida. De todas las lecciones aprendidas en
los últimos años, éstas son algunas de las más valiosas:
• Somos responsables de nuestra propia vida.

• Es un camino difícil pero muy gratificante.
• En todos los mercados y en todas las situaciones de la
economía, podemos hacer inversiones.
• Mis errores me ayudan hoy a asesorar mejor a mis
clientes.
• Muy poca gente admite abiertamente los errores co-
metidos, especialmente en materia de inversiones.
• El éxito no pasa por la cantidad de dinero que uno
tiene en el banco, en inversiones, en propiedades o en
ingreso pasivo; el éxito consiste en tener la firma con-
vicción de que somos capaces de salir adelante no im-
195
porta dónde estemos, la situación económica, nuestra

situación personal, ¡ni siquiera si nuestro sexo!
Nota: este último comentario se debe a la sorpresa que me

causó el hecho de que, según me comentó Cristian Abratte,
no tenían ninguna historia de éxito de una mujer para este
libro. Quizás no se atreven a compartirlo públicamente,
pero sé que hay muchas mujeres “financieramente exito-
sas” que vale la pena conocer.
Por estas historias de vida, y por la que nosotros estamos

construyendo todos los días, podemos decir que se pue-
de ser financieramente libre. Y si ellos lo pudieron hacer,
si están día a día más cerca, ¡nosotros también podemos
lograrlo!
6) N. C. tiene 46 años, vive en Salta, y nos cuenta su

historia:
Nací en Amblayo, en la provincia de Salta, en una humilde
familia de pastores. Mi infancia fue pobre pero feliz. Cursé
la primaria y la secundaria en Coronel Moldes. Me gradué
como profesor de Filosofía y Ciencias de la Educación en
La Plata, provincia de Bs. As., y trabajé como tal en Salta
hasta 1999. En 1994 me casé y como no me iba bien econó-
micamente, abrí un pequeño mercadito de venta de carne y
comestibles. Resultó un negocio floreciente y me dio un ex-
celente resultado. Eso me permitió comprar tres propieda-
des. Pero los vaivenes de la economía argentina me hicieron
pensar que no había justicia en este mundo para hombres
como yo, que trabajaban honestamente. En ese tiempo leía
muchos libros de autoayuda. El autor que más ha influido
196
tanto en mi vida económica como espiritual, es el brasileño

Lauro Trevisan, quien en su libro El Poder de Alcanzar la
Riqueza explica cómo todo lo que le sucede a una persona
es resultado de la Ley de Causa y Efecto. En el 2004 inicié
un emprendimiento inmobiliario, construyendo pequeños
departamentos para alquilar, negocio en el que también ob-
tuve muy buenos resultados y logré generar un buen monto
en ingresos pasivos. Eso me permitió crecer y al día de hoy
soy dueño de 14 mini-departamentos, cuya renta, sumada
al ingreso del mercadito más el salario de mi esposa, gene-
ran un ingreso mensual que nos permite vivir muy bien.
Al mensaje de Robert Kiyosaki accedí en el 2009. Aportó
mucho a mi mentalidad y a mis conocimientos, sobre todo
me permitió ordenarme y sistematizar la administración
y manejo de mis inversiones, negocios y dinero en general.
En el último año, mi patrimonio e ingresos crecieron un
100% gracias a los principios y estrategias que aprendí en
sus libros. Mi mensaje final es que, sin duda, ¡se puede salir
de la pobreza!
7) G. J. tiene 43 años y vive en la ciudad de Cali, Co-

lombia. Nos envió la siguiente historia:
Tuve la oportunidad de conocer las redes de mercadeo un
día domingo a las nueve de la noche, a través de una lla-
mada telefónica que recibí de un desconocido. Me sorpren-
dió la llamada, pues me hablaba de un modelo similar a
las franquicias y, como yo era propietario de una, accedí a
la reunión que me proponía por teléfono. Un mes y medio
después, estaba vinculado con la compañía Amway, de net-
work marketing. Aprendí muchísimo en esa empresa y un
día cometí el error de abandonarla porque ése es uno de los
197
secretos del networking: se debe permanecer allí con pa-

ciencia haciendo el trabajo que se debe hacer. Yo abandoné
por la ‘ambición’ de ganar dinero rápidamente. Conocí una
empresa nueva con un plan de compensación más agresivo,
lo que en menos de tres años me permitió generar alrede-
dor de 250.000 dólares, fruto de haber construido una red
de casi diez mil personas y de haber trabajado con dedica-
ción y constancia. Yo leía mucho y me dejaba enseñar.
Día a día fui comprendiendo que se trataba de compartir

la oportunidad siempre con alguien y, una vez que logra-
ba incorporar un nuevo miembro a mi red, ayudarle a que
pueda también generar su grupo y sus ingresos. En el mo-
mento en que mayor fuerza teníamos, empecé a sentir que
algo empezaba a andar mal en la empresa para la cual yo
era distribuidor, o empresario independiente; ésta empezó
a tener dificultades financieras, a incumplir sus pagos y a
no tener capacidad de respuesta ante las demandas de los
productos.
Ante un inminente cierre, tomé la decisión de retirarme con

varios de los líderes del equipo. Teniendo bien en claro que
estar en redes de mercadeo es una profesión, escogí otra
empresa que tenía suficiente respaldo financiero, un pro-
ducto altamente competitivo, y un sistema de formación y
motivación que permitía que cualquier persona lograra el
éxito. Hoy en día continúo allí con muy buenos resultados y
soy consciente de que dentro de cinco años, tendremos una
gran organización en diferentes países, que me generará
importantes ingresos residuales.
198
8) A. C. tiene 34 años, es soltero y vive en Buenos

Aires. Así nos contó su historia:
Comencé a trabajar a los 14 años, en un negocio familiar.
A los 19 inicié mi propio emprendimiento fabricando ropa
para niños, bajo una marca propia que logré posicionar
muy bien en todo el país. Sin estudios universitarios, a los
23 años en marzo del 2001 tuve la posibilidad de ir a traba-
jar a Miami en la empresa de negocios inmobiliarios RE/
MAX, un trabajo y un mundo desconocidos para mí. De-
cidí cerrar la fábrica de ropa. Una vez instalado en Estados
Unidos, me desarrollé como Agente Inmobiliario logrando
los más altos estándares de ventas, durante los seis años
que permanecí allá. En 2006 volví a Argentina donde abrí
una sucursal de RE/MAX (RE/MAX Premium), que desde
2007 a 2010 fue por cuatro años consecutivos Número Uno
en ventas en Argentina. Mi primer libro de Robert Kiyosaki
fue Padre Rico, Padre Pobre. Accedí a él en Estados Unidos
a través de un amigo. Me sentí identificado con su filosofía,
ya que yo tenía un pensamiento muy parecido. Luego de
leerlo me enfoqué más en hacer cosas para salir de la Carre-
ra de la Rata. Paralelamente vengo realizando inversiones
en propiedades desde el pozo (inicio de la construcción),
compra-venta de inmuebles en general, propiedades para
alquilar y también hipotecas. Si quisiera dejar de trabajar
ahora podría hacerlo, pero no con el estándar de vida que
pretendo. Mi plan es retirarme dentro de ocho años, a mis
42. Alcancé este nivel de ingreso pasivo o residual, invir-
tiendo prácticamente todo lo que iba ganando. Adhiero a
seguir los consejos del Padre Rico en general. A las perso-
nas que recién inician su camino hacia la libertad financie-
ra, les diría que piensen bien sus movimientos y que no se
199
dejen llevar por lo que dicen los diarios o los gurúes finan-
cieros sobre la economía.
9) P. C. tiene 44 años, es argentino y vive en la ciudad

de Buenos Aires. Su historia es la siguiente:
Nací en Buenos Aires, hijo de inmigrantes españoles. Tra-
bajo desde muy jovencito. Mi primer trabajo formal fue a
los 18 años, al terminar mis estudios secundarios, como
empleado del Banco Quilmes. Pero antes me había desem-
peñado en varias actividades informales. En el banco co-
mencé a trabajar como cajero, pero dado que era un joven
muy inquieto siempre trataba de conocer la actividad de los
otros sectores del banco. Mis jefes al ver mis aptitudes, de-
cidieron pasarme al sector de inversiones, donde conocí los
mercados de valores e inicié mi aprendizaje sobre el tema.
Al cabo de unos años ya manejaba una gran cartera de
clientes. Así que cuando llegué a los 24 años y había nacido
mi primera hija, para desarrollarme en forma independien-
te renuncié a mi empleo y de repente me encontré sin traba-
jo y sin dinero. Comencé a vender libros en la calle. Luego
me vinculé con la editorial, me convertí en representante
en Argentina y comencé un próspero negocio. Mi pasión
por los mercados se mantenía vigente, pero la adrenalina
que eso me proporcionaba no alcanzaba para ganarme el
sustento. Mantenía una pequeña cartera de clientes pero
entonces decidí poner manos a la obra para hacerla crecer.
Como la necesidad de dinero en mi casa había aumentado
pues había nacido mi segunda hija, comencé a trabajar por
las noches como chofer de ambulancia, para que me queda-
ra el día libre. Con empeño, llegué a agrandar la cartera lo
suficiente como para que de allí provenga el sustento fami-
200
liar, hasta que dejé el trabajo como chofer para administrar

los fondos que me confiaban mis clientes. Aún siendo cho-
fer, en cierta oportunidad un médico dejó olvidado un libro
en el asiento de la ambulancia: Padre Rico, Padre Pobre. Su
lectura me atrapó de inmediato. Sus enseñanzas me ayuda-
ron a redefinir mis objetivos y concentrarme en lo que real-
mente me daría luego la posibilidad de crecer, invirtiendo
mi dinero para que éste generara más dinero. Actualmente
trabajo con el mercado de capitales y el mercado interna-
cional de divisas, soy dueño de una empresa constructora
y encabezo diversos emprendimientos. Puedo disfrutar de
mis logros.
10) L. S. tiene 43 años, es casado y vive en la ciudad

de Córdoba. Éste es su relato:
Trabajo desde los 18 años, desde hace 25, durante 15 de los
cuales desarrollé paralelamente una actividad solidaria
como contribución social. El primer libro de Robert Kiyo-
saki que leí fue El Cuadrante del Flujo de Dinero a fines del
2003. Inmediatamente leí también Padre Rico, Padre Pobre,
y allí se inició una nueva historia para mí. En aquellos días
me resultaba intolerable pensar que ‘la próxima estación’
estaba 30 años más adelante y se llamaba ‘jubilación’. Leer
los libros de Kiyosaki agitó en mí el espíritu empresarial. Ni
siquiera sabía por dónde comenzar cuando ya tuve que su-
perar las primeras batallas: empecé a enfrentarme a depre-
sivos cuestionamientos de amigos y conocidos tales como:
‘eso sólo funciona en Estados Unidos’; o ‘la única enseñanza
real de Kiyosaki para volverse rico es escribir libros para
tontos’. Pude percibir que todos ellos que me cuestionaban
habían sepultado sus sueños. Comencé a leer material que
201
antes no leía y fui avanzando en la profundización de temas

financieros. Así, en mayo de 2005 me llegó la primera opor-
tunidad para comenzar a implementar lo aprendido: una
línea de Venta Directa de productos. Así se inició el entre-
namiento que permitió mi desarrollo personal en una red
de mercadeo, experiencia que se profundizó un par de años
después. El resultado fue muy bueno, ya que logré obtener
importantes ingresos que hoy me permiten proyectarme
a invertir en negocios que generen Ingresos Pasivos. Hace
ya más de cinco años que con mi esposa dejamos nuestros
empleos. Con una estructura en nuestra red de más de 1.200
personas, podemos mirar al futuro llenos de expectativas.
Lo más importante es el crecimiento que obtuvimos en lo
personal, que también se refleja en los ingresos. Puedo afir-
mar con seguridad que estamos transitando el camino para
llegar a la salida de la Carrera de la Rata.
Ejercicio:
“Escribe ahora tu historia de éxito”
Tómate unos minutos para “visualizar” como sería tu his-

toria de éxito y escríbela en unas breves líneas. Sin duda,
te resultará muy útil para ejercitar tu visión y empezar a
proyectarte hacia el futuro:
202
Capítulo XI
.
La Ley de Dar y Recibir
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
Capítulo XI La Ley de Dar y R ecibir
Bueno es dar cuando nos piden; pero mejor es dar sin que nos
pidan, como buenos entendedores.
Khalil Gibran
1. Si siembras generosamente,
¡Siempre habrá cosecha!
C
reemos firmemente que, quien no encuentra un
modo de devolver su don al mundo, sufrirá a lo
largo de toda su vida de una sensación de falta de
realización, algo así como despertar cada mañana con un
vacío y sentir un anhelo que nada puede llenar. Es por ello
que tenemos el compromiso de DAR lo que creemos que
ayudará a otros de la misma manera que nos fue dado.
“Es el privilegio de dar, es sentirse realizado,

caminar con Dios al lado.” Axel
Uno de los principios de la riqueza más difundido tiene que

ver con la caridad. Desde la Biblia hasta varios escritores
modernos, el acto de ser bondadosos con nuestro tiempo
205
Aprende a Ser Rico Capítulo XI
y dinero, ocupa un lugar importante en nuestro estilo de

vivir la vida y en la escalera hacia la libertad financiera.
Robert Kiyosaki dedica varios párrafos en sus libros, au-

dios y videos a las donaciones, y en su juego de mesa Cas-
hflow, la generosidad también está presente. En dicho juego
aquel que caiga en la casilla de “Caridad” y haga uso de esa
opción, será recompensado con un dado extra en cada uno
de sus turnos. Es un ejemplo bien tangible de la multiplica-
ción de lo que entregamos para el bien de los demás.
Queremos compartir algunas anécdotas personales que

tienen que ver con este principio y que no dejan de sorpren-
dernos:
Si bien desde chico, yo Walter, fui un asiduo lector, a partir

del año 2006 mi hábito por la lectura se elevó notablemente
e incluso tomé la costumbre de regalar a amigos y conoci-
dos, los libros que habían tenido un impacto positivo en mi
vida. Esa costumbre se mantuvo por varios meses y un día,
casi por casualidad, me pasaron la dirección de una librería
en la ciudad de Buenos Aires que tenía algunos títulos que
estaba buscando y no podía conseguir. Mientras repasaba
las portadas de varias editoriales, se me acercó un vendedor
muy amable, quien se presentó y me regaló ese día el libro
más costoso de los que faltaba en mi biblioteca, junto con
otros títulos nuevos. Ahora es habitual que cada vez que
aparece un audio libro de unos de mis autores favoritos,
John Maxwell, me regalen el CD recién salido a la venta.
206
Además de varios autores que me han enviado sus trabajos

al canal, quiero destacar la actitud del escritor con éxitos de
ventas en todo el continente, Bernardo Stamateas, que me
obsequió varios de sus trabajos autografiados; también de
escritores que aún no han sido editados en nuestro país y
por quienes compartimos admiración. Intento no abando-
nar la costumbre que le dio comienzo a este ciclo de “dar y
recibir”, y siempre regalo algún libro ¡para que no se deten-
ga!
También tuve varias experiencias con hechos que pueden
parecer inexplicables, pero donde es posible ver la influen-
cia positiva del “universo”. Recibí vouchers de ropa infantil
para mi hija, después de regalar justamente ropa para ni-
ños; la convocatoria para protagonizar una publicidad lue-
go de hacer una donación de dinero a una entidad benéfica
muy conocida; y lo más curioso fue un vendedor de zapatos
que salió de su local de una galería en un supermercado
de Quilmes, para regalarme dos pares de zapatos, un día
después de que yo había regalado zapatos.
“Si quieres más tiempo, da tiempo. Si quieres más dinero, da

dinero, no tiempo.” (Robert Kiyosaki en Retírate Joven y Rico)
2. Dar es un privilegio
Parece que la “ley de dar y recibir” de verdad funciona, y

te animo a que hagas la prueba. Con el universo como so-
cio, las cosas tienen el éxito asegurado. Todos conocemos
en nuestro barrio o ciudad, alguna entidad o persona que
207
necesita de nuestra ayuda humana y económica. Identifica

una causa justa (ecológica, social, deportiva) que te apasio-
ne y apóyala. ¿Qué mejor manera de ayudar a combatir el
hambre en el mundo, que donar a un comedor infantil cerca
de tu casa? ¿Qué mejor manera de colaborar con la ecología,
que acercarte a quien ayuda a las mascotas de tu barrio o
fomenta los espacios verdes en tu zona?
Además de hacer una contribución a la sociedad, verás

cómo aumenta tu sentido de pertenencia y, lo que es me-
jor, “gratuitamente” días (o meses) más tarde, el universo o
como quieras llamarlo, te lo devolverá multiplicado.
Sir John Marks Templeton citó: “Donar siempre reporta los
mayores beneficios sobre tu inversión.”
3. Un mentor de excelencia sabe dejar herencia
A través de este libro, también queremos difundir una de

las misiones de Escuela de Riqueza que tiene que ver con un
aporte a la sociedad. Parte de las ganancias de este libro
serán donadas al “Hogar Querubines” que trabaja día a día
en las localidades de Béccar y Olivos con niños en situación
social de riesgo. En dichos hogares llegan niños derivados
de juzgados y tribunales de menores, quienes viven allí
hasta que se resuelve su situación familiar, o hasta que son
entregados a una familia sustituta. Respetuosamente te pe-
dimos que colabores con ellos también (o con la institución
benéfica que creas afín a ti), sea con dinero, con tiempo o
con tus habilidades especiales. Te aseguro que la sonrisa de
esos niños es la mejor paga que cualquiera podría recibir.
208
Si quieres ayudarnos a ayudar: +5411-4747-7012 o www.que-

rubines.org.ar
“Mirá nene hacelo fácil, dar es dar.” (Fito Páez)
Y no sólo es dar, sino también compartir lo que te permite

vaciarte y volverte a llenar. Tyron Edwards dijo: “Si sabes
algo a fondo, enséñaselo a los demás.”
Nos gustaría que nos ayudaras a compartir y difundir los
conceptos de este libro que te han servido. Así como nues-
tros mentores fueron generosos con nosotros, es nuestro
deseo que nuestro trabajo sirva para construir puentes y
abrir puertas de nuevos conocimientos. La lectura va crean-
do “links” con otros autores y queremos que en base a tu
exploración, vayas formando tus opiniones y encontrando
tu planificación ideal. También te necesitamos para ser un
difusor de la importancia que tiene la educación financiera
en la actualidad.
Somos fervientes defensores del aprendizaje mutuo, y

como bien señala Robert Kiyosaki citando el Cono del
Aprendizaje diseñado por Edgar Dale, participar de una
discusión o realizar una presentación hace que dos sema-
nas después, recordemos aproximadamente un 70 % de lo
aprendido. Por eso para reforzar tu educación financiera, te
sugerimos enseñarle o debatir con alguien un nuevo con-
cepto, ni bien lo hayas aprendido. Como dice la guía “Teach
to be rich”, la mejor manera de aprender es enseñar lo que
quieres aprender, y la mejor manera de hacerse rico es ayu-
dar a otros a ser ricos.
209
“Si tus acciones crean un legado que sirve de inspiración a los

demás para que sueñen más, aprendan más, hagan más y lle-
guen más lejos, serás un líder excelente.”
(Dolly Parton)
En nuestra página www.kiyosakiteniarazon.com encontrarás

material para descargar e información adicional para que
puedas repasar conceptos y compartirlos. Te necesitamos
en nuestro equipo de difusión, e incluso te pedimos que nos
envíes alguna sugerencia sobre un tema de tu interés. ¡Eres
bienvenido!
“Si dedicas tiempo y atención a beneficiar al máximo a los de-

más, puedes descansar tranquilo: el universo no dejará de apo-
yarte justo cuando lo necesites.”
(R. Buckminster Fuller)
“El éxito no es un proyecto en solitario: hay que compartirlo; y

tampoco es una competición, hay de sobra para todos.” (Mark
V. Hansen)
Ejercicio:
Entra ahora a www.querubines.org.ar y siembra lo que desees
para que tu cosecha sea mucho mayor.
210
Capítulo XII
.
Conclusión
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
Capítulo XII Conclusión
“Nada ocurre sin ser, antes, un sueño.”

Carl Sandburg
Q
ue algo esté publicado en un libro, no significa que
sea verdad. Sólo si aplicas lo que lees, podrás com-
probar si es cierto o no. Todos los razonamientos
del mundo no valen nada comparados con un resultado.
Ahora es tu oportunidad de ver si la filosofía de Padre Rico,
funciona o no. La única forma de probarlo es poniéndola en
práctica, y esperamos que lo hagas.
El día del juicio final, no nos preguntarán qué

hemos leído, sino qué hemos hecho.
Thomas à Kempis
Sabemos que puedes empezar a poner excusas; que puedes

usar el tema de la “lógica” para decir que el material de este
libro y todos los libros de Kiyosaki, pueden no ser ciertos.
¡No nos importa! Haz lo que proponemos, y toda tu lógi-
213
Aprende a Ser Rico Capítulo XII
ca se esfumará. No podríamos enfatizar lo suficiente este

punto. ¡Hazlo! ¡Hazlo! ¡Hazlo! Y lo comprobarás todo por ti
mismo. No se puede juzgar algo que está escrito hasta que
no se lo pruebe…. No seas como muchos autores y “opinó-
logos” que sin intentarlo, lo juzgan imposible.
Te hemos abierto una puerta. Esa puerta te dirige hacia una

vida libre de problemas financieros. Ahora sólo tienes que
cruzar esa puerta. Te recomendamos que te atrevas a dar
el primer paso. No lo dejes para más tarde. Retrasarse es
jugar con fuego. Si tardas demasiado, tu entusiasmo pasará
y todo habrá acabado. Actúa ahora y el futuro será tuyo. Así
de simple.
Si empiezas en este mismo momento, pronto comenzarás a
disfrutar tu nueva vida, no sólo por lo que consigas tener,
sino por la persona en la que te transformes y llegues a ser.
Tony Robbins, el coach personal más famoso del mundo,
dice:
“Si quiere jugar para ganar, tendrá que jugar “a tope”. Tiene que
estar dispuesto a hacer el ridículo, e intentar cosas que puede que
no funcionen.”
Si decides no intentarlo ahora, te sugerimos que guardes el

libro en un lugar seguro. Nunca se sabe si algún día te sien-
tas desesperado y lo tengas que buscar para volver a leerlo.
Por si ese día llegara, es mejor que lo tengas a mano.
Según el estudio anual de riqueza de Merrill Lynch y la

consultora Capgemini, el número de personas con gran-
des fortunas –aquellos con unos activos financieros de al
214
menos US$1 millón al margen de la vivienda y los consu-

mibles– aumentó un 8,3% en 2010 hasta los 10,9 millones de
personas millonarias en todo el mundo. En América Lati-
na, una de las regiones con mayor índice de pobreza, hay
actualmente 500.000 millonarios, mientras que en 2003 sólo
eran 190.000. Esto demuestra que a pesar de la pobreza, las
crisis, la inflación, la corrupción, la violencia y cualquier
otro factor externo, hay personas que han encontrado la for-
ma de convertirse en millonarios.
El estudio también demuestra que la capacitación y el fac-
tor de aprendizaje favorecieron la multiplicación de las
fortunas en la región latinoamericana. La capacitación es
el combustible que nos permitirá avanzar en el viaje hacía
la libertad financiera. Hay personas que gastan más en el
combustible y mantenimiento de su automóvil, que en la
capacitación y mantenimiento de sí mismos.
Para alcanzar la libertad financiera debes desarrollar el há-

bito de la disciplina, que es hacer lo que se tiene que hacer, cuan-
do se tiene que hacer, pase lo que pase y cueste lo que cueste. En
este punto la pregunta ya no es si vas a alcanzar la libertad
financiera, sino: ¿en cuánto tiempo la vas a alcanzar? Ya no
existen las excusas de no tener tiempo, dinero, motivación,
educación, o tener miedo o ser demasiado grande.
Existen personas que esperan a que el sentimiento de mie-
do se vaya de sus vidas para actuar. Estas personas segui-
rán esperando por el resto de sus vidas porque el miedo
nunca desaparecerá. Las personas ricas y exitosas también
tienen miedo, preocupaciones y dudas, la diferencia es que
tienen la capacidad de actuar a pesar del miedo. El miedo
215
es parte del éxito. La acción conduce al éxito. ¡Ahora te toca

jugar a ti!
En realidad, las cosas no son tan difíciles, lo que las hace

difíciles es no hacer nada.
Todo el mundo merece ser rico. ¡Y tú también! Puedes estar

seguro de que nadie es mejor ni más inteligente que tú. Lo
repetimos: nadie es mejor que tú, nadie es más inteligente
que tú. No obstante, una de las principales razones por las
que las personas no tienen confianza en sí mismas y no pa-
san a la acción, es su falta de resultados y de logros financie-
ros. Al final desarrollan (y ocultan) un sentimiento de in-
ferioridad, convencidos de que los demás son mejores que
ellos. Que no te quepa la menor duda de que esto no es así.
Mira a tu alrededor. En la vida diaria, en los gestos más
insignificantes, en las múltiples relaciones que mantienes
a diario con tu entorno familiar o profesional... ¿de veras
piensas que eres inferior a tus compañeros de la oficina, a
tus primos, a tus amigos? En muchos aspectos somos igua-
les; sin embargo, cuando hay que actuar y comprometerse
algunos dudan y se creen menos buenos que los demás.
Quítate esta idea de la cabeza. Lo que marca la diferencia es
que unos actúan y otros no. ¡Nada más!
¿Quieres saber por qué y cómo muchos se hacen ricos?
• Siempre creen en sí mismos porque siempre han pen-

sado que si otros han sido capaces de hacerlo, no existe
razón alguna para que ellos no puedan hacer lo mismo.
• ¡Pasaron a la acción mientras otros seguían hablando!
216
¿Te parece que lo anterior es muy difícil o imposible de

copiar?
Todas las ideas o estrategias que han sido explicadas a lo
largo de estas páginas, son accesibles para la mayoría de no-
sotros y sólo necesitan una cosa: ¡que las pongas en práctica!
Deberás ser consciente de que lo único que realmente te
permitirá hacerte rico, no será tomar la decisión de serlo,
sino hacer todo lo posible para que así sea. Únicamente pa-
sando a la acción lograrás enriquecerte. Las buenas inten-
ciones no bastan.
Tu mejor inversión: ¡tu formación!
Una vez que hayas empezado a pagarte a ti primero, tu

primera inversión tiene que destinarla a tu educación fi-
nanciera. Es lo mejor que puedes hacer. Perfecciona tus
conocimientos sobre este tema particular, y ampliarás tus
horizontes. Cuanto mejor lo conozcas, más posibilidades
tendrás de enriquecerte y de aprovechar las oportunidades
que se presenten. Si no sabes nada, no harás nada. Si no eres
capaz de reconocer un buen negocio cuando aparezca y no
sabes qué tienes que hacer para financiarlo, ¡pasará por de-
lante de tus narices!
Aunque ya hemos demostrado que la escuela no nos ense-

ña nada respecto al dinero, si sabes cómo perfeccionar tus
conocimientos, tendrás una visión más amplia del mundo
y añadirás puntos a tu favor. Cuantos más puntos tengas,
más fuerza tendrás para actuar cuando llegue el momento.
No tengas reparos a la hora de educarte: lee, visita las ferias
profesionales, participa en seminarios, talleres, conferen-
217
cias y webbinars, navega por Internet, etc. No hay límites y

cada vez hay más medios de aprendizaje.
Pero el mejor sistema sigue siendo pedir el consejo de las
personas que ya han invertido en los ámbitos de tu inte-
rés: los mentores. Son las que mejor preparadas están para
responder tus preguntas. No tengas temores a la hora de
formularles preguntas ni uses el pretexto de que crees que
tienen secretos ocultos, que no quieren compartir. Muy al
contrario, siempre tienen tiempo para quienes quieren un
consejo sincero. Eso nos pasó a nosotros al hablar con Kiyo-
saki en su visita a Buenos Aires y todo lo que Cristian vivió
en sus múltiples encuentros con este gran mentor.
Dice Robert Kiyosaki al final de su libro: “Retírate Joven y

Rico”:
…Lentamente, me di cuenta de que demasiado tiempo mi miedo
de no ser suficiente o de no tener suficiente me impidió disfrutar
de la abundancia que ofrece la vida aquí en la tierra. Me di cuenta
de que mi lucha personal por hacerme rico era principalmente mi
lucha personal contra mi miedo de ser pobre. También me di cuen-
ta de por qué mi padre rico siempre dijo: “Es tu miedo lo que te
hace tu propio prisionero. Es tu miedo lo que te encierra en
tu propia celda, una prisión que no deja entrar la abundan-
cia de Dios”.
Justo antes de que recogiéramos nuestro tapete de playa y nos di-

rigiéramos de regreso para la cena, pude escuchar a mi padre rico
que decía: “Muchas personas pequeñas se pasan la vida
atacando gigantes. Critican, chismean, extienden rumo-
res y mienten al respecto, haciendo su mejor esfuerzo por
despedazarlos. Ven lo que está mal en el gigante en lugar
218
de ver lo que está bien. Por esa razón permanecen peque-

ñas”. El objetivo de este libro es que cada uno de nosotros tiene
a una persona pequeña, un David, y a un Goliat en el interior.
David pudo haberse quedado como una persona pequeña tomando
el contexto de una persona pequeña, diciendo: “Él es más grande
que yo. ¿Cómo puedo encargarme de un gigante tan sólo con una
honda?” En cambio, David se convirtió en un gigante al elegir
tomar el contexto de un gigante. Así es cómo venció a Goliat y se
convirtió en gigante él mismo. Tú puedes hacer lo mismo.
Te animamos a que te transformes en gigante y no te quedes

como enano simplemente, por no permitirte probar si pue-
des llegar a ser todo lo que quieres ser.
LLEGANDO AL FINAL…
Al acercarnos al final de este viaje que hemos realizado jun-

tos, recordamos a un gran maestro del que aprendimos mu-
chísimo, Jim Rohn, quien hizo en un seminario llamado “El
Reto del Triunfo”, cuatro preguntas que deseamos medites
con atención.
La primera es: «¿Por qué debo intentarlo?» Los niños pre-

guntan a menudo el porqué de las cosas, y ésta es una de
las preguntas más importantes. ¿Por qué levantarme tan
temprano? ¿Por qué trabajar tan duro? ¿Por qué leer tantos
libros? ¿Por qué hacer tantas amistades? ¿Por qué irme tan
lejos? ¿Por qué ganar tanto? ¿Por qué dar tanto?
La mejor respuesta a «¿por qué debo intentarlo?», es otra

pregunta: «¿Por qué no?» ¿Qué otra cosa puedo hacer con
219
mí vida? ¿Por qué no comprobar hasta dónde puedo llegar?

¿Por qué no comprobar cuánto puedo ganar o leer o dar?
¿Por qué no comprobar lo que puedo llegar a ser, o cuánto
puedo crecer? ¿Por qué no? Después de todo, tendrás que
vivir en este mundo hasta que pases a mejor vida.
La tercera pregunta va más allá y es muy simple: «¿Por qué
no yo?» Algunas personas consiguieron cosas increíbles
con medios y conocimientos muy limitados. Algunas per-
sonas se las arreglan tan bien, que intentan triunfar en todo.
¿Y por qué no yo?
¿Por qué no voy a disfrutar todo lo que ofrece la vida, sa-

biendo que ése es el premio al esfuerzo disciplinado y cons-
tante? ¿Por qué no yo?
Y la última pregunta: «¿Por qué no ahora?» ¿Por qué pospo-

ner ese futuro mejor, cuando todas esas maravillas aguar-
dan impacientes una orden tuya? Empieza hoy. Compra
unos buenos libros, elabora un plan detallado de objetivos,
invita a comer a un millonario, busca nuevas formas de au-
mentar tu productividad, inicia un nuevo estilo de vivir con
más amor y generosidad, haz un esfuerzo para aumentar la
confianza en ti mismo. ¡Empieza a actuar hoy!
Hay una historia que cuenta la aventura de un hombre que

convirtió un desierto de rocas en un hermoso jardín lleno
de flores, tras dos años de duro trabajo. Cierto día apareció
por allí un ermitaño. Había oído hablar del jardín, ya que
su fama se había extendido en muchos kilómetros a la re-
donda. El ermitaño quería asegurarse de que el jardinero
no había olvidado al Creador de todo, y le dijo: «Jardine-
220
ro, el Señor te ha bendecido con un jardín verdaderamente

hermoso.» El jardinero entendió lo que quería decirle, y le
respondió: «Tienes razón, amigo. Si no hubiese sido por el
sol, la lluvia, la tierra y el milagro de las semillas y de las
estaciones, no existiría este jardín. Pero tendrías que haber
visto este lugar hace dos años, cuando sólo el Señor se ocu-
paba de él.»
Así que éste es nuestro mensaje final. Actúa. Emprende.

Asume la responsabilidad. Usa lo que aprendiste aquí, y
hazlo enseguida. Y no sólo para ti mismo, también para
otros. El beneficio de tales acciones es superior a cuanto
puedas imaginar. En el mundo hay mucha gente que habla.
Muchos saben lo que es correcto y lo que les otorga poder;
y sin embargo no obtienen los resultados que desean. No
basta con hablar para recorrer el camino, hay que echar a
andar.
En la antigüedad hubo dos grandes oradores. Uno fue Ci-

cerón, el otro Demóstenes. Cuando Cicerón acababa de ha-
blar, los oyentes siempre le ovacionaban y decían: «¡Qué
bien habla!». Cuando terminaba Demóstenes, la gente ex-
clamaba: «¡En marcha!», y lo hacían. Ésa es la diferencia en-
tre exposición y persuasión. Esperamos clasificar dentro de
la segunda categoría. Si tú terminas de leer y te dices: «No
está mal este libro; explica muchos recursos interesantes»,
pero no empleas ninguno de ellos, tú y yo habremos perdi-
do el tiempo.
Mientras tanto, te agradecemos tu interés en aprender, en

progresar y desarrollarte. Esperamos que te dediques no
221
sólo a luchar por los objetivos que te has propuesto, sino

también a plantearte otros una vez que alcances los prime-
ros; no sólo a ser fiel a tus sueños del pasado, sino a soñar
otros más grandes todavía; no sólo a disfrutar de tu país y
de sus riquezas, sino a convertirlo en un lugar mejor para
todos; y no sólo a tomar de esta vida lo que puedas, sino a
amar y vivir con generosidad.
Deseamos sinceramente que este libro te haya permitido

disfrutar tanto al leerlo como a nosotros al escribirlo. Si
piensas que de verdad te aportó algo, no dudes en regalar-
lo y en compartir con tus allegados lo que has aprendido,
pues el maestro Kiyosaki así lo dice: “Se aprende al enseñar.
También nos encantaría que nos transmitieras tus impre-
siones, por eso te invitamos a que compartas tus experien-
cias en la página de Internet www.AprendeaSerRico.com. Allí
encontrarás otros testimonios que te ayudarán a avanzar
en la dirección correcta y a evitar algunos errores.
Te dejamos con una sencilla bendición irlandesa: «Que el

camino venga a tu encuentro, que el viento sople siempre
a tu espalda, que el sol te caliente la cara, que la lluvia caiga
con suavidad sobre tus campos y, hasta que volvamos a ver-
nos, que Dios te sostenga en la palma de su mano».
Hasta siempre, y que nos encontremos pronto

celebrando tu éxito!
222
Para que puedas ponerte en acción rápidamente:
Asegúrate de visitar www.AprendeaSerRico.com y des-

cárgarte los capítulos gratuitos de algunos de los libros
que aquí mencionamos.
También podrás participar en las actividades organi-

zadas por Escuela de Riqueza, nos sentimos sumamente
afortunados por crear seminarios, talleres y conferen-
cias que transforman la vida de la gente en forma rápida y
efectiva; nos motiva poderosamente haber ayudado a mi-
les de personas que ya han pasado por ellos. De corazón
te animamos a que asistas al Seminario/Taller “Apren-
diendo a Ser Rico”, este evento te llevará a un nivel de
éxito totalmente nuevo.
¡Por tu éxito!
Cristian Abratte y Walter Queijeiro
223
Contactate con nosotros:
Aprende a Ser Rico:

Página web: www.AprendeaSerRico.com
Twitter: @AprendeaSerRico
Facebook: Aprende a Ser Rico
Walter M. Queijeiro:
Página web personal: www.wqueijeiro.com
Twitter: @wqueijeiro
Facebook: Walter Queijeiro
Cristian Abratte:
Blog: http://cristianabratte.net
(Diario de un buscador de la libertad financiera)
Twitter: @cristianabratte
Facebook: Cristian Abratte
Página: www.escuerladeriqueza.org
Twitter: @escuelariqueza
Facebook: Escuela de Riqueza
224
Incrementa tu IQ Financiero
Seminarios, Cursos y Talleres de Escuela de Ri-

queza:
• Taller de Finanzas Personales con Juego Cashflow:

Aprenda a conocer y manejar sus finanzas por medio del
simulador “Cashflow”. Mensualmente se realizan juegos
Cashflow en varias ciudades de Latinoamérica, por favor,
verifique en www.escueladeriqueza.org
Conferencias:
• 5 Pasos a la Libertad Financiera:

¿Ves que con lo que haces hoy día, nunca llegarás a lo que
siempre soñaste? Una mejor vivienda. Un automóvil 0 km.,
el que siempre quisiste. Unas vacaciones de un mes en un
lugar paradisíaco. Pagarte o pagarles a tus hijos los estudios
en una prestigiosa universidad. Colaborar con quienes más
lo necesitan sin sentir que eres tú quien más lo necesita.
Te das cuenta de que: Tu trabajo no es tan seguro como antes
creías. No tienes un “plan B” en caso de perder tu trabajo.
Más estudios y títulos no son garantía de continuidad y
225
ascensos. Necesitas aprender algo más que nunca te ense-

ñaron.
Entonces, quizá tú eres una de las “ratas” que sigue girando
en la rueda de la vida que nunca te llevará a ningún lu-
gar... ¿Crees que no hay escape? ¿Que toda tu vida seguirás
igual? ¡No te desesperes! Hay un camino de salida que en 5
sencillos pasos te pondrán en ruta hacia tus sueños.
• Despertando Tu Mente Abundante:

Es un seminario gratuito para que puedas abrir tus posi-
bilidades a tus más ansiados sueños, y planees a partir del
entendimiento del por qué es una vía para que te adentres
en los principios fundamentales que sustentan la filosofía
de la riqueza y la abundancia; es un acontecimiento que sin
duda te marcará nuevas pautas al momento de planear tu
futuro financiero y laboral.
• Amo o Esclavo de tu Dinero?:

¿Cansado de las deudas? ¿Se te esfumó el sueldo antes de
fin de mes? ¿Necesitas crear más ingresos? ¿Quieres más
tiempo para tu familia y tus hobbies?
¿Qué puedes hacer hoy para:

- incrementar tu tiempo libre,
- mejorar tu estilo de vida,
- lograr tu independencia económica
- abandonar tu trabajo de 9 horas,
- acrecentar tus ingresos o,
- disfrutar de tus afectos y hobbies
La educación financiera, es sin dudas, la clave.
226
Seminarios y Talleres:
• Seminario/Taller: Aprendiendo a Ser Rico, un viaje al

éxito:
Cada uno de nosotros tiene un sin número de oportunida-
des de lograr sueños, metas y ambiciones y muchas veces
tenemos las destrezas y talentos necesarios; sólo que nos
falta descubrirlos y aprender a usarlos. En este seminario/
taller conocerás eso y mucho más, para alcanzar todo lo que
financieramente te hayas propuesto en tu vida.
¿Sabías que el 95% de los latinoamericanos son analfabe-
tos financieros?
¡Despierta! Escuela de Riqueza ha desarrollado herramien-
tas para que salgas de este paradigma y empieces a trabajar
para hacer tus sueños realidad. Este seminario está diseña-
do para mostrarte cómo manejar tu mente y tu dinero de la
manera correcta, y así cumplir tus metas de independencia
financiera.
• Seminario / Taller de Riqueza: Escape de la Carrera de

la Rata - ¡Haciéndome dueño de mis finanzas!:
¿Por qué algunas personas son capaces de enriquecerse,
mientras que otras nunca lo consiguen? ¿Será por culpa de
obstáculos de tipo material, espiritual o pedagógico?
Analizándolo con cierta perspectiva, llegué a la conclusión
de que sólo quienes ignoran lo que hay que hacer para enri-
quecerse nunca lo logran; el enriquecimiento está al alcance
de todo el mundo, siempre y cuando se tenga la formación
adaptada a tal fin y la voluntad de conseguirlo.
Para empezar, una buena noticia: ¡si no sabes nadar, siempre
puedes aprender a hacerlo!
227
• Impuestos: el Camino más rápido y sencillo a la Rique-

za:
¿Sabías que los argentinos deben trabajar entre 132 a 178
días al año para pagar impuestos directos e indirectos?
No importa si eres empleado, auto-Empleado, dueño o in-
versor, necesitarás una estrategia fiscal adecuada para sa-
car ventaja de los impuestos y ponerlos a tu favor.
• Seminario Taller: Gane el 5% diario invirtiendo en la

Bolsa de Nueva York.
En este taller aprenderás que no es necesario tener expe-
riencia previa en los mercados financieros ni contar con
enormes sumas de capital, para convertirte en un inversor
que gane el 5% diario, e incluso más, sobre el capital inverti-
do en las bolsas de Estados Unidos. Tampoco hace falta que
cuentes con un gran dispositivo técnico. Podrás realizar tus
transacciones desde tu casa, sentado frente a tu computa-
dora.
• Taller Intensivo: Técnicas Profesionales de Venta:

El objetivo de este programa es proveerle al participante
de las tácticas y estrategias que hoy se están usando para
captar clientes, y venderle más a cada uno, además de darle
una atención diferencial para fidelizarlo.
• Seminario Taller: Cómo hacer Dinero sin Dinero:

Robert Kiyosaki repite permanentemente que el dinero es
una idea y que podemos imprimir nuestro propio dinero
legal... el tema es que hay que saber ¡cómo hacerlo!
228
Este taller te confrontará con tus creencias acerca del dinero

y te llevará por un camino del que no querrás volver, pues
aprenderás los secretos del propio Padre Rico sobre cómo
puedes lograr dinero sin dinero.
• Seminario: Cómo Comprar Bienes Raíces Sin Anticipo

y sin usar Su Dinero:
Con este seminario podrás conocer los por menores de las
estrategias de inversión inmobiliaria, para lograr ingresar
en el sector más estable y deseado de los caminos a la liber-
tad financiera.
• Seminario / Taller: Hágase Rico Cualquiera Sea Su Sa-

lario o Ingreso:
¿Quieres ser el amo o el esclavo de tus deudas? No impor-
ta donde estés ahora. Puedes estar obteniendo un ingre-
so excelente pero sentir que no es suficiente. Puedes estar
luchando por sobrevivir y ni siquiera saber por dónde co-
menzar. En este seminario, se expondrán herramientas y
estrategias para enriquecerse, independientemente del ni-
vel económico, incluso si tienes deudas.
• Seminario Intensivo: Oro y Plata vs. Dólar:

El 30/7/09 Robert Kiyosaki recomendó durante su visita a
Argentina comprar plata, que estaba en ese momento a u$15
la onza. Hoy la plata, varios meses después ha superado los
u$40 y llegó a tocar los u$50, un tremendo % de ganancia
en sólo pocos meses y pronosticó que llegaría a u$1000 en 5
años. ¿No crees que deberías saber cómo aprovechar este consejo?
• Seminario de Negociación Estratégica:
229
Si necesitas negociar efectivamente, si estás cansa-

do de que los demás saquen ventajas al momento
de negociar, si no encuentras herramientas para ob-
tener un beneficio extra al momento de negociar o
te gustaría tener ventajas competitivas la próxima
vez que negocies, ¡ESTE PROGRAMA ES PARA TI!
Ya sea con tu jefe o tus empleados, con tus proveedores o
tus clientes, la próxima vez que tengas que negociar, cuenta
con el manejo de las técnicas y las variables que conocen los
negociadores profesionales.
• Taller de Desarrollo Personal: RETO AL TRIUNFO:

Sin DESARROLLO PERSONAL no es posible conseguir lo-
gros sustentables. Si alguna vez has llegado a algo y luego
no pudiste mantenerlo, es porque trabajaste más en los fru-
tos que en las raíces. Necesitamos poder desarrollar nues-
tro SER para poder lograr las habilidades que nos permitan
HACER lo que tenemos que hacer, cuando lo tengamos que
hacer, nos guste o no, para lograr entonces el tan ansiado
TENER todo aquello que la buena vida nos quiere regalar.
¡No lo olvides!
• Seminario/Taller: Finanzas, Inversiones y Negocios:

Toda la vida nos han enseñado que tenemos que estudiar
para trabajar, y trabajar para conseguir dinero. Pero nunca
nos enseñaron cómo despertar nuestra inteligencia finan-
ciera para manejar el dinero que recibimos de nuestro tra-
bajo. Todos seguimos el patrón de vivir para trabajar y de
trabajar para saldar nuestras deudas.
230
El temor más grande de este tema es: Creer que no hace falta
saber acerca de finanzas, inversiones y negocios para lograr
las metas y objetivos que nos hemos fijado en la vida.
No hay nada más peligroso para una persona que no te-
ner una idea clara de cuánto puede vender, cuánto puede
ganar, pero más importante: cuánto dinero cuesta ganar
dinero.
• Seminario: Las mujeres inteligentes toman el control

de sus finanzas:
Muchas mujeres se sienten a menudo perdidas cuando tra-
tan de planificar su futuro financiero. Muchas veces dejan
el asunto del dinero en manos de los hombres o posponen
decisiones importantes, superadas por el miedo o la indeci-
sión. Este curso es el primer paso para todas las mujeres que
han decidido tomar el control de sus finanzas y hacerlas
crecer.
Diplomado:
• Maestría en Cashflow:
Cada uno de nosotros tiene un sin número de oportunidades
de conseguir sueños, metas y ambiciones y muchas veces
tenemos las destrezas y talentos necesarios, sólo que nos
falta descubrirlos y aprender a usarlos. En este seminario/
taller conocerás eso y mucho más para alcanzar todo lo que
financieramente te hayas propuesto en tu vida. Participa
en el “Diplomado en Educación Financiera, Maestría en
Cashflow” donde serás instruido directamente por el
maestro Robert Kiyosaki por medio de videos exclusivos
para este programa y un sistema de aprendizaje vivencial
231
que te llevará a descubrir las inmensas posibilidades que

puede darte estar educado en temas del dinero. Para más
referencias http://www.escueladeriqueza.org/DetalleInfo.
aspx?Not=1400
• Maestría en Coaching Financiero:

¿Qué es Coaching Financiero?
El coaching financiero es una especialización del coaching,
utiliza la metodología, el modelo de comunicación, la filo-
sofía que hay detrás: todas las personas tenemos los recur-
sos para resolver y superar los retos que nos plantea la vida.
Se centra en el dinero, la riqueza y las finanzas.
¿Qué objetivos tiene un proceso de coaching financiero?
Se trata de trabajar con las personas para superar sus limi-
taciones y dificultades respecto a las finanzas. Es un entre-
namiento para lograr el equilibrio financiero, una econo-
mía saneada y cambiar nuestras relaciones con el dinero
y la riqueza. Los requisitos son estar abierto a reconocer
nuestros patrones respecto al dinero, plantearse objetivos
claros y comprometerse a acciones que modifiquen nues-
tros hábitos en cuanto a la generación de ingresos, ahorro
e inversión.
El Coaching financiero va dirigido a personas interesadas

en conocer las claves para tener éxito y generar riqueza, que
quieran mejorar su calidad de vida.
Si quieres ser entrenado personalmente en tus finanzas, es-
cribe a coaching@escueladeriqueza.org
232
Cursos On Line:
Si por la ciudad donde vives no puedes acceder a los cursos

presenciales, puedes realizar una variedad de otros entre-
namientos por el sistema a distancia o de video-cursos, por
favor, visita: www.escueladeriquezaonline.org
• Redes de Mercadeo:
Si quieres formarte en La Escuela de Negocios de la Vida
Real, como Robert Kiyosaki ha denominado a las Redes
de Mercadeo o Marketing Multinivel busca información
en www.AprendeaSerRico.com para descargarte un infor-
me gratuito para que sepas que es el Network Marketing
(o redes de mercadeo) y como podría ayudarte a llegar a tu
libertad financiera.
Comunidad “APRENDE A SER RICO”:

Si quieres formar parte de la comunidad y beneficiarte de:
• Información relevante
• Conferencias, cursos y seminarios
• Oportunidades de negocios e inversión
• Networking para armar tu red de contactos
• Tips y consejos puedes darte de alta, sin cargo en http://
www.AprendeaSerRico.com

233
Bibliografía
.
.
.
.
Allen, Robert G.; Múltiples Fuentes de Ingresos
Cómo generar una vida de riqueza ilimitada-. Editorial
Time&Money, 2007.
Canfield, Jack; Los Principios del Éxito - Cómo llegar de

donde está a donde quiere ir-. Editorial Océano, 2006.
Chatzky, Jean; Gana Dinero sin Más Excusas: Una guía

para que toda mujer pueda volverse rica... ¡realmente rica!,
Editorial Triskel Press, 2011.
Eker, Harv T. ; Los Secretos de la Mente Millonaria - Cómo

dominar el juego interior de la riqueza. Editorial Sirio, 2006.
Ferris, Timothy; La Semana Laboral de 4 horas - Olvídate

de fichar, vive donde quieras y únete a los nuevos ricos-.
Editorial RBA, 2009.
Flaquer, Rodríguez Ariel; Hágase Rico - Gane el 5% diario.

Ed. Aguilar, 2007.
Gage, Randy; ¿Qué nos tiene Atontados, Sin Salud y Sin Di-
nero? Triskel Press. Editorial, 2011.
Gage, Randy; ¡Cómo estar Motivados, Saludables y Ricos!

Editorial Triskel Press. Editorial, 2011.
235
Bibliografía
Hansen, Mark V. y Allen, Robert; Millonario en Un Minu-

to - Cómo crear riqueza sin estrés. Editorial Temas de Hoy,
2003.
Kiyosaki, Robert T.; Si quiere ser rico y feliz, No vaya a la

Escuela! -Resguarde de por vida su seguridad y la de sus
hijos- Editorial Triskel Press, 1998.
Kiyosaki, Robert T.; Padre Rico, Padre Pobre- Qué le ense-

ñan los ricos a sus hijos acerca del dinero que las clases me-
dia y pobre no! -, Editorial Aguilar, 2005.
Kiyosaki, Robert T.; La Conspiración de los Ricos - Las 8

Nuevas reglas del dinero- Editorial Aguilar, 2011.
Kiyosaki, Robert T.; Incrementa tu IQ Financiero - Se más

hábil con tu dinero-Editorial Aguilar, 2010.
Kiyosaki, Robert T. y Kiyosaki Emi; Hermano Rico, her-

mana rica - Dos caminos distintos hacia Dios, el dinero y la
felicidad-Editorial Aguilar, 2009.
Kiyosaki, Robert T.; La Escuela de Negocios - Para gente que

le gusta ayudar a los demás. Editorial Aguilar, 2008.
Kiyosaki, Robert T.; Antes de Renunciar a tu Empleo - Las

10 lecciones que todo emprendedor debe saber para cons-
truir un negocio multimillonario-. Editorial Aguilar, 2008.
Kiyosaki, Robert T. y Trump, Donald; Queremos que seas

Rico - Dos hombres, Un mensaje-. Editorial Aguilar, 2008.
236
Bibliografía
Kiyosaki, Robert T.; Mujer Millonaria - Guía financiera

para la mujer-. Kim Kiyosaki, Editorial Aguilar, 2007.
Kiyosaki, Robert T.; Guía para hacerse Rico - Sin cancelar

tus tarjetas de crédito-. Editorial Aguilar, 2007.
Kiyosaki, Robert T.; Padre Rico, Padre Pobre para jóvenes

- Los secretos para ganar dinero que no te enseñaran en la
escuela-. Editorial Aguilar, 2006.
Kiyosaki, Robert T.; El Juego del Dinero - Por qué los inver-
sionistas lentos pierden y el dinero rápido gana!-. Editorial
Aguilar, 2006.
Kiyosaki, Robert T.; Retírate joven y rico - Como volverse

rico pronto y para siempre-. Editorial Aguilar, 2005.
Kiyosaki, Robert T.; Historias de Éxito - Historias verdade-

ras de personas que siguieron las lecciones de Padre Rico-.
Editorial Aguilar, 2005.
Kiyosaki, Robert T.; El Cuadrante del Flujo de Dinero -

Guía del Padre Rico hacia la Libertad Financiera-. Editorial
Aguilar, 2005.
Kiyosaki, Robert T.; Guía para Invertir - En qué invierten

los ricos a diferencia de los pobres y clase media-. Editorial
Aguilar, 2005.
Kiyosaki, Robert T.; Niño Rico, Niño Listo - Cómo dar a los
niños una educación financiera Sólida-. Editorial, 2004
237
Bibliografía
Olivier, Michael; Cómo Vender Network Marketing ¡sin

miedo, sin ansiedad y sin perder a sus amigos! – Editorial
Triskel Press, 2007.
Robbins, Anthony; Poder Sin Límites - La Nueva ciencia del

desarrollo personal-. De Bolsillo, Edición, 2010.
Robbins, Anthony; Controle Su Destino - Despertando el

gigante que lleva dentro. Anthony Robbins, De Bolsillo.
Edición, 2010.
Rohn, Jim; Las Estaciones de la Vida, Success Books, 2010.
Rohn, Jim; Las cinco piezas más importantes del rompeca-

bezas de la vida: Una guía para el éxito personal, Success
Books, 2010.
Rohn, Jim; El Tesoro de Citas, Jim Rohn Latin America, 1995.
Stamateas, Bernardo; Quiero un Cambio, Editorial Vergara,

2010.
Trump, Donald; Cómo hacerse rico. Editorial Planeta, 2005.
.
.
.
.
.
.
.
238
Índice
.
.
.
.
Introducción 13
Capítulo I
Historia personal de Walter 17
Capítulo II
Historia personal de Cristian 41
Capítulo III
Si puedes soñarlo, puedes lograrlo 51
Capítulo IV
Situación financiera actual 71
Capítulo V
Educación financiera:
“La diferencia que marca la diferencia” 99
Capítulo VI
Comienza la acción 117
Capítulo VII
Trabajo en equipo 125
Capítulo VIII
Escalera hacia la libertad financiera 133
Índice
Capítulo IX
Redes de mercadeo:
La escuela de negocios al alcance de todos 169
Capítulo X
Historias de éxito 179
Capítulo XI
La ley de dar y recibir 203
Capítulo XII
Conclusión 211
Bibliografía 223
Incrementa tu IQ financiero 229
Galería de imágenes
Galería de Imágenes
EDICIÓN DIGITAL

Aprende A Ser Rico-Ebook

Cargado por

Información del documento

Título original

Derechos de autor

Formatos disponibles

Compartir este documento

Compartir o incrustar documentos

Opciones para compartir

¿Le pareció útil este documento?

¿Este contenido es inapropiado?

Copyright:

Formatos disponibles

Aprende A Ser Rico-Ebook

Cargado por

Copyright:

Formatos disponibles

Walter Queijeiro

Cristian Abr atte

Actívalo ahora suscribiéndote en nuestra Web

Fecha de catalogación: 29/11/2011

APRENDE A SER RICO

Queda hecho el depósito que establece la ley 11.723

Para un periodista deportivo, escribir su primer libro so-

A mi esposa Andrea y a mis hijas Delfina y Alma Carmen,

A mi papá que me regaló mi primer libro, y a mi mamá que

A mis abuelos Alfredo, Carmen (Ita), Mario y Delfina. Al-

A Kim y a Robert Kiyosaki que en su visita en Argentina,

A todos los telespectadores de mis programas de TV, y se-

A Robert Kiyosaki, quien nos abrió la mente a una reali-

A Jim Rohn quien a través de sus seminarios, audios y li-

A mi esposa, Verónica quien en silencio y con gran com-

A mis hijos, Melina, Micaela y Gian Franco quienes son

A mis padres, Omar y Susana, quienes me apoyaron en

A los cientos de personas que participaron en los encuen-

A Fernando González, Julián Sbano, Daniel Lanteri, Cris-

Miguel Toma, Diego Repetto, Cristian Olivero, Rubén Durán,

Hace unos meses leí algo sobre un empresario colombiano

Es impactante ver, como cientos de miles de personas no

Actualmente, cientos de miles de profesionales viven en

Hoy por hoy, un gran número se cuestiona, si valió la pena

Otros, no pueden comprender la irónica respuesta del siste-

Miles no pueden entender por qué la tierna edad de treinta

Los más afortunados, cuentan con la bendición de tener un

para decir “despedido”, pero con una refinada hipocresía

Esto me trae una reflexión: Que por otro lado y de manera

Día a día miles se están uniendo a esta corriente, motivados

Quienes decidan pertenecer a esta élite del logro huma-

¡Gracias por leernos y que disfruten el camino a la libertad,

Cristian Abratte y Walter Queijeiro

“La condición humana debería ser un alegre vuelo entre

Mark Yarnell y Rene Reid Yarnell

1. ÉRASE UNA VEZ...

¿Qué quiero decir con esto? Paso a contarles:

Era una calurosa tarde de febrero cuando, luego de hacer

decía: “Prendé la radio, La Metro, que están ‘matando’ a

Como los que me conocen saben de mi admiración por Ro-

De modo que sintonicé la emisora sugerida y en ese mismo

El invitado del día era un especialista en planificación de

Al escuchar esto, mi primera reacción fue enojarme mucho.

A medida que la entrevista avanzaba, sus argumentos me

Ya a mitad de camino y mientras circulaba por la Autovía

“Hablar es fácil. Aprende a escuchar con los ojos. Los hechos

2. ¡SE HIZO LA LUZ!

Hace unos años, precisamente en enero del 2008, fui con-

Esta experiencia, además de permitirme conocer ese paraí-

“La consecuencia de no pertenecer a ningún partido

Y otro hecho relevante que pude observar es lo importan-

También en ese viaje, casi de casualidad, me topé con un

¿Quién no pensó en alguna oportunidad, en poder dejar su

¿Quién no soñó con poder manejar su propia agenda, sin que

Seguramente muchos de los que están leyendo este libro.

regreso, leer Padre Rico Padre Pobre se convirtiera en una de

3. SOÑANDO CON UN MUNDIAl

Debo decir acá que, ser periodista deportivo en Argentina

Menciono este mega-evento deportivo porque es muy co-

compañeritos de 6to grado por el título de México ‘86. Fue

Pero para los periodistas deportivos, los mundiales de

Adelantándome un poco, diré que más tarde iba a leer en

acumula parte del sueldo no gastado por la reducción de