La práctica de la relajación total

permitirá sanar nuestro cuerpo y

nuestra mente, es por ello que para
lograr esto, debemos estirarnos
libremente boca arriba, en el lugar que
te sientas más cómodo. Dejando relajar
las extremidades y conectándonos con
cada parte de nuestro cuerpo.

Teniendo en cuenta que cuando

inspiramos y expiramos observamos y
sentimos lo maravilloso que es cada
rincón del cuerpo. Tomando conciencia
y relajando cada órgano.

Es así que si hay un sitio en tu cuerpo que está

sufriendo y necesita sanar, aprovecha este momento
para percibirlo y enviarle tu amor.
Como también debemos tomar conciencia de las otras partes del
cuerpo que están fuertes y saludables. Dejando que estas envíen
energía y amor a las partes débiles. Seguidamente inspiramos y
afirma tu propia capacidad de sanación, luego expiramos y
votamos el miedo y la inseguridad.

Finalmente sonreímos al cuerpo entero

mediante la inspiración y expiración.
Estiramos lentamente el cuerpo y
abrimos los ojos, tomándonos el tiempo
que deseamos para levantarnos.

Estas técnicas de relajación pueden ayudar a nuestro

cuerpo a relajarse y disminuir todo el estrés que día a
día cargamos, donde las prisas y los miedos toman el
control de nuestra vida.
¡Por ello que no descuidemos nuestra salud mental ¡