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Desarrollo de la Morfología

Diplomado en trastornos de la comunicación en


el ámbito educativo
Modulo: Desarrollo de la comunicación
Profesor: Luis Martínez

 Camila Paz Llanca González

14 de Junio del 2019


Introducción

El lenguaje es un sistema muy complejo, que se puede dividir en tres componentes principales:
forma, contenido y uso. La forma incluye: sintaxis, morfología y la fonología; el contenido incluye la
semántica; y el uso es la parte pragmática. De este modo son estos cinco componentes: sintaxis,
morfología, fonología, semántica y pragmática los componentes del lenguaje (Puyuelo, Wiig, Renom,
y Solanas, 2000, Owens, 2003).

El lenguaje está absolutamente influido por el contexto. El contexto, tanto lingüístico como
situacional, determina las opciones comunicativas del usuario lingüístico. Por otra parte, la
necesidad de comunicarse existe con anterioridad a la elección del contenido y la forma del
lenguaje. Por esta razón, los lingüistas consideran que la pragmática constituye el principio
organizador más general del lenguaje. Solamente cuando un niño quiere comerse una galleta y se
encuentra en un contexto apropiado para que le den una, recurrirá a las reglas sintácticas,
morfológicas, fonológicas y semánticas que conozca, para construir una petición adecuada.

Evidentemente, los componentes del lenguaje están vinculados entre sí. Por ejemplo, la estructura
sintáctica necesita marcadores morfológicos que, a su vez, cambian fonéticamente para acomodarse
a la palabra. A lo largo del desarrollo tales componentes también se influyen recíprocamente, en
tanto en cuanto la evolución de alguno de ellos puede modificar el desarrollo de los demás.

En este trabajo se presenta una revisión bibliográfica, en la que se abordara el desarrollo del
lenguaje en los niños y niñas, enfocado en el componente del lenguaje conocido como Morfología.
Desarrollo del nivel morfológico del lenguaje

La morfología es un campo definido de varias formas por diferentes autores, teniendo aquí algunos:

1. Libro: Desarrollo del Lenguaje


Autor: Robert E. Owens, Jr.
La morfología se encarga del estudio de la palabra, implica el análisis de su estructura y de su
organización interna. Las palabras pueden ser un morfema o estar constituidas por morfemas, los
cuales son considerados como las unidades gramaticales más pequeñas, es decir, la unidad mínima
de significado.

2. Libro: Lingüística: teoría y aplicación.


Autor: Eugenio Martínez Celdrán.
La morfología es una disciplina lingüística que se ocupa del estudio de la estructura de la palabra y
las relaciones que se producen en el seno de esta.

3. Libro: Introducción a la Teoría y Estructuración del Lenguaje


Autor: Luis Alberto Hernando Cuadrado
El vocablo morfología designa en general, en general el estudio de la forma o las formas que
presentan los objetos de cualquier ciencia y las variantes que presentan .En lingüística, la voz
morfológica nos designa, como pudiera reducirse de su etimología, el estudio de las formas en
general, porque también la sintaxis se ocupa de elementos y relaciones formales. La palabra
morfología hace referencia a únicamente a un subconjunto de estas relaciones formales, a las que
se dan, dentro de la palabra, en unidades menores que ellas.

Tomado en cuenta las definiciones anteriores, se puede decir en palabras simples que la morfología
estudia las formas o unidades estructurales portadoras de significado (palabras y morfemas),
ocupándose de la forma interna de las palabras.
Para poder analizar las palabras y morfemas se debe observar la estructura y la función que
cumplen. El lenguaje está constituido por formas o estructuras significativas que pueden ser libres o
ligadas. En este plano un morfema es “una unidad mínima formal con significado” que no puede
subdividirse en partes más pequeñas con significado, encontrando morfemas libres y ligados
(Bermeosolo, 2001).

Según Yule (1998) los morfemas libres pueden aparecer como palabras independientes, que tienen
sentido por si solas, mientras que los morfemas ligados no son independientes, ya que tienen que
estar pegados a otras formas. Una palabra corresponder a uno o más morfemas. En las palabras
con más de un morfema distinguen la raíz, en donde está el lexema que es el morfema de contenido
y las gramemas que son morfemas trabados (Bermeosolo, 2001).

En nuestro idioma existen dos tipos de morfemas: el morfema base o lexema, y el morfema
gramatical. El morfema base (MB) es el encargado de dar a la palabra su significado fundamental. El
morfema base también se denomina radical o raíz de la palabra (Owens. 2003)

Tomando algunos ejemplos de Owens, en la palabra zapatitos, el morfema base es zapat-, ya que
este grupo de letras es el que aporta su significado léxico. Y la terminación - itos aporta otra
información. Fíjense en lo que sucede si mantenemos la terminación, pero cambiamos la base:
angelitos. Ahora el morfema base es angel-, ya que entrega el significado fundamental. Es esta raíz
lo que hace que las palabras sean diferentes, de ahí su nombre, porque constituye la base de la
palabra.

Con el mismo morfema base, pueden formarse muchas palabras. Por ejemplo, con zapat-, además
de zapatito tenemos zapatear, zapatería, zapatilla, etc. No es casualidad que los significados de
estas palabras sean similares, ya que comparten el mismo morfema base o la misma raíz, y esto
hace que estén relacionadas en cuanto a su significado, es decir, que formen una familia de
palabras.

Continuando con Owens, el morfema gramatical entrega a la palabra cierto tipo de información
gramatical, más que de significado propiamente dicho. Existen dos tipos de morfemas gramaticales,
el morfema gramatical verbal y el morfema gramatical nominal.
El morfema gramatical verbal es el que otorga las terminaciones a las formas verbales. En cuanto al
morfema gramatical nominal, existen 2 tipos; el que indica género y el que indica número. Los
morfemas gramaticales derivativos se denominan .afijos., y se añaden a la raíz para formar palabras
nuevas. Según su oposición en la palabra, dichos morfemas pueden ser prefijos y sufijos.

Tipos de morfemas y ejemplos (Owens, 2003)

Existen construcciones que están compuestas por morfemas rígidos, esto quiere decir que no se
puede alterar el orden de estos, ya que sino la construcción carecería de sentido, por lo tanto, el
significado de esta depende de los morfemas que se encuentran presentes y de su orden, que en
general son construcciones más ligadas como las palabras. Por otro lado también hay
construcciones que pueden cambiar el orden sin alterar el sentido de esta, pero esto es sólo parcial,
debido a que son casi siempre construcciones menos ligadas como por ejemplo las frases. El orden
de los morfemas y la rigidez de estos son elementos básicos de la lengua (Gleason, 1975).

Muchos autores han dividido o creado categorías morfológicas las que son básicas y se pulen
durante el periodo de enseñanza. Lenz (1912, en Roa, 1996) las divide según su significado en:
palabras que expresan conceptos: sustantivos, adjetivos, adverbios y verbos; palabras que repiten o
reemplazan conceptos: pronombres; y palabras que relacionan conceptos: preposiciones y
conjunciones, así mismo la Academia Española coincide con estos pero incluye dos más que son el
artículo e interjección (Roa, 1996).

Estos elementos morfológicos van emergiendo y mejorando la precisión de su uso en el transcurso


del desarrollo, de tal forma que se espera una mayor y mejor utilización de estos en forma
progresiva entre los 18 y 60 meses. Así dejan en evidencia una mejor comprensión de los elementos
morfológicos y sintácticos antes que la adecuada expresión de estos.
Durante el periodo escolar al niño se le instruye sobre algunos aspectos morfológicos que
pertenecen a las categorías mencionadas y que sirven de base para el desarrollo de los
componentes del lenguaje. Uno de estos es el verbo que es la parte más variable de la oración y
designa estado, acción o pasión. También se define como la palabra que sola expresa todo un juicio
independiente y forma una oración, ya que si a un verbo se le añade un sujeto expresa un juicio
completo, independiente. Los verbos tienen diferentes clasificaciones: según origen, según
estructura, según su significado y según su conjunción, de acuerdo a esta última se pueden
encontrar los verbos regulares e irregulares. El verbo regular es el que en todos sus tiempos y
personas conservan sus letras radicales y toma las desinencias ordinarias de la conjugación a la que
pertenecen, mientras que el verbo irregular es el que se conjuga alterando ya sus radicales, y a las
desinencias propias de la conjugación regular; es muy importante que el niño conozca las formas
verbales y de qué manera es correcto utilizarlas.

Otro componente del lenguaje es el sustantivo, que es la parte de la oración que sirve para designar
seres (personas, animales o cosas) que tienen existencia independiente, ya sea real, abstracta o
personificada. Los sustantivos pueden clasificarse de distintas maneras, siendo una de ellas por su
origen. Dentro de esta categoría podemos encontrar los sustantivos primitivos o primeros, que están
formados por un lexema básico y fijo (por ejemplo <<doctor>>) y puede ser seguido por un morfema
(en este caso es de género <<a>>); también podemos encontrar el sustantivo derivado que son los
que proceden o se forman de uno primitivo, mediante la acción de un sufijo, un ejemplo de esto es
<<doctorado>>.

El adjetivo es otro componente del lenguaje y al igual que el verbo se considera una parte muy
variable de la oración, siendo su función acompañar al sustantivo determinándolo o calificándolo.

Los superlativos tienen una estrecha relación con los adjetivos ya que usan como base la raíz de un
adjetivo el cual se combina con un sufijo. Un ejemplo de esto sería el adjetivo <<feliz>> junto con el
sufijo <<ísimo>> crean el superlativo <<felicísimo>>. Siguiendo con los componentes del lenguaje
encontramos al adverbio que sirve para calificar o determinar el significado del verbo o del adjetivo, y
a veces la de otro adverbio (Roa, 1996).

Otro aspecto morfológico es el pronombre que sirve para designar una persona o cosa sin
nombrarla; y denota a la vez las personas gramaticales. Dentro de la clasificación de los pronombres
encontramos los pronombres personales, que sirven para designar a las personas que intervienen
en un discurso (Yo, Tú, El, Nosotros, Vosotros, Ellos). Cuando hablamos de pronombres personales
en función del objeto nos referimos a pronombres personales de tercera persona, los que tienen
funciones complementarias; tales como formas convergentes o reflexivas (yo me lavo, él se lava) y
las divergentes (yo le lavo, él me lava). Dentro de estas últimas están las formas de sujeto: él, ella,
ello /ellos, ellas. Los posesivos son una serie de pronombres que actúan como adjetivos, frente a un
pronombre personal que actúa como un sustantivo, estos están morfológicamente relacionados con
los personales ya que poseen la misma base (mío, tuyo, suyo) (Franch y Blecua, 1982).

Todos los componentes morfológicos del lenguaje expuestos son fundamentales para la creación de
la oración; y el área del lenguaje que se dedica a estudiar las estructuras que se crean al juntar
estos componentes se denomina Sintaxis.
Conclusión

El lenguaje es una herramienta social que consiste en un sistema de símbolos muy complejo, y en
una serie de reglas necesarias para la utilización de esos símbolos. Los hablantes competentes de
una lengua deben conocer tanto los símbolos que se emplean en esa lengua como las reglas más
aceptables para su uso, lo que incluye las combinaciones entre los conceptos, las palabras, los
morfemas y los fonemas.
.
Por otra parte podemos decir que la combinación de palabras y la identificación morfológica se
consideran una de las etapas más sorprendentes de la producción del lenguaje, ya que el uso de la
morfosintaxis (de las reglas de la morfología y la sintaxis en conjunto) permite al niño obtener un
mayor control en su habilidad comunicativa. Además La morfología es parte de las claves
gramaticales que se han considerado como importantes por el papel que pueden desempeñar en la
inferencia del significado de las palabras.

Por último mencionar que el hecho de comprender los lexemas o raíces de una palabra es de suma
importancia para mejorar la ortografía y asi tener un buen nivel de desarrollo del lenguaje escrito.
Bibliografía

 Esteban, R. A. (1995). Desarrollo del Lenguaje. Barcelona: Octaedro.

 Serra, M., Serra, E., Sole, R., Bel, A., & Aparici, M. (2000). Adquisión del Lenguaje. Barcelona:
Ariel.

 Robert E. Owens, J. (2003). Desarrollo del lenguaje. Madrid: Pearson.


 Martínez, C. A. (2012). La adquisición del lenguaje en la etapa de 0 a 3 años. Valladolid:
Universidad de Valladolid
 Martínez E. (2002). Lingüística: teoría y aplicación. España: Masson
 Hernando L.(1995). Introducción a la teoría y estructuración del lenguaje . España: Verbum.

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