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com

J ciencia forense,mayo de 2007, vol. 52, núm. 3

doi:10.1111/j.1556-4029.2007.00403.x
Disponible en línea en: www.blackwell-synergy.com

Jules A. Kieser,1Doctor.; Valeria Bernal,2Doctor.; John Neil Waddell,1M. Dip. tecnología; y Shilpa Raju,1BDS

La singularidad de la dentición anterior humana:

un análisis morfométrico geométrico

RESUMEN:El análisis de las marcas de mordeduras tiene una relación significativa con la odontología forense y ha atraído una variedad cada vez más sofisticada de técnicas en
su evaluación. Dos postulados subyacen en todos los análisis de marcas de mordida: en primer lugar, que las características de los dientes anteriores involucrados en la
mordida son únicas y, en segundo lugar, que esta singularidad se registra con precisión en el material mordido. Aquí, investigamos la cuestión de la singularidad de la dentición
anterior. Para ello, utilizamos técnicas de morfometría geométrica basadas en datos de hitos y semihitos. Las superficies oclusales de incisivos y caninos de 50 modelos de
ortodoncia seleccionados al azar de individuos jóvenes (17-20 años) de ambos sexos forman el material para este estudio. Analizamos los tamaños de estos dientes mediante
análisis de puntos de referencia y semipuntos de referencia para calcular las distancias de Procusto entre los contornos de los dientes. Con el fin de analizar la variación de
forma entre los individuos, llevamos a cabo análisis de componentes principales en las puntuaciones de deformación parcial. Estos se derivan de las coordenadas parciales de
Procrustes alineadas por medio de una descomposición spline de placa delgada basada en la matriz de energía de flexión. Los resultados indican que no existe dimorfismo
sexual en la forma de las arcadas superior e inferior. Los gráficos del tamaño del centroide y las primeras deformaciones relativas muestran menos superposición entre los
individuos que en el análisis de la forma. Esto significa que, cuando el tamaño y la forma se consideran juntos, la diferencia entre los arcos aumenta. Superposición de
Procrustes entre los dos individuos más próximos (0,0444) y los dos más separados (0.0444). 1567) a lo largo del primer eje de los análisis de deformación relativa muestran que
los individuos no solo se diferencian por la posición relativa de sus dientes sino también por la forma de su arco. En conclusión, parece que las superficies incisales de la
dentición anterior son de hecho únicas.

PALABRAS CLAVE:ciencia forense, análisis de mordedura, odontología forense, tamaño y forma del diente, semipuntos de referencia

La evidencia mordida se ha establecido como una herramienta útil e
importante en la administración de justicia (1) y ha atraído una gama
cada vez más sofisticada de técnicas en su análisis (2,3). Hay dos
postulados que subyacen en todos los análisis de marcas de mordida:
primero, que las características de los dientes anteriores involucrados
en la mordida son únicas y, segundo, que esta singularidad se registra
con precisión en el material mordido (4). Sweet and Pretty (5) han
afirmado que no hay acuerdo entre los odontólogos forenses sobre la
singularidad (individualidad) de la dentición. Uno de los primeros
artículos en abordar este problema fue el de MacFarlane et al. (6),
quienes sugirieron que se debe diferenciar entre características
positivas (p. ej., la presencia de un diente con una característica
individualizadora) y características negativas (p. ej., ausencia de un
diente). Al evaluar 200 modelos de estudio de los dientes superiores e
inferiores de pacientes adultos que asistían a una consulta externa,
estos autores concluyeron que ciertas características, como el número
y la forma de cada diente, las restauraciones y las rotaciones dentales,
no eran independientes. Por ejemplo, encontraron que la rotación
mesiopalatina de un incisivo central superior estaba fuertemente
relacionada con la misma rotación en el incisivo central adyacente. Este
es un punto crucial, ya que proporcionó evidencia de que la regla del
producto no podía aplicarse a la evaluación de la singularidad de la
dentición humana. Sin embargo, los autores se basaron en exámenes
altamente subjetivos de los modelos realizados por múltiples
examinadores y tampoco publicaron una tabla de sus resultados. Estos
dos puntos deben tenerse en cuenta al estudiar la unicidad de la
dentición anterior, porque el error interobservador,
La siguiente referencia citada con frecuencia en apoyo de la individualidad
dental es la de Sognaes et al. (7), que examinó la marca de mordedura
1Facultad de Odontología, Universidad de Otago, Dunedin, Nueva Zelanda.
2División Antropología, Museo de La Plata, Paseo del Bosque B1900FWA, La
patrones de cinco pares de gemelos monocigóticos masculinos. Su
conclusión fue que, en términos de forma de arco oclusal y posiciones de
dientes individuales en las mordidas generadas, incluso los gemelos
idénticos no eran dentalmente idénticos. Sin embargo, este estudio se limitó
a la medición de radiografías de mordidas de prueba, sin ningún esfuerzo
por documentar las formas en que se estandarizaron las mordidas reales.
Crucialmente, no hubo referencia a la presión aplicada al crear mordidas de
prueba; sin embargo, muchas de las características examinadas dependían
de hecho de la profundidad de penetración de la mordida de prueba en el
sustrato (4). Posiblemente, el artículo más citado a favor de la unicidad de la
dentición es el de Rawson et al. (8), quienes examinaron 397 mordidas de
prueba seleccionadas de una muestra de 1200 mordidas de este tipo
generadas por dentistas forenses en los Estados Unidos. Las muescas
mordidas se rellenaron con polvo de zinc, se radiografiaron y se trazaron
sobre superposiciones. A partir de su análisis en profundidad del artículo de
Rawson, Pretty (4) concluyó que si bien establecía que la dentición anterior
humana era única, no lo hacía de una manera matemáticamente sólida.
Por lo tanto, si el análisis de las marcas de mordeduras humanas debe
aceptarse como evidencia científica confiable, un punto importante que aún
debe investigarse es la cuestión de la singularidad de la dentición anterior.
Para ello, utilizamos técnicas de morfometría geométrica basadas en datos
de hitos y semihilos (9) para estudiar las diferencias de tamaño y forma de
los dientes anteriores superiores e inferiores.
Material y métodos
Las superficies oclusales de incisivos y caninos de 50 modelos de
ortodoncia postoperatorios seleccionados al azar de individuos jóvenes
(17-20 años) de ambos sexos formaron el material para este estudio. Solo se
seleccionaron individuos con normoclusión posortodóntica y dientes no
restaurados, porque esperábamos que este grupo mostrara un nivel más

Plata, Argentina bajo de individualidad que la población general. Cada conjunto de moldes se
Recibido el 1 de abril de 2006; y en forma revisada el 26 de agosto de 2006; aceptado el 22 de octubre escaneó en una impresora multifunción ''Epson Stylus'' con función de
de 2006; publicado el 5 de abril de 2007. escáner de cama plana, número de modelo CX3100 (Epson,

Derechos de autorr2007 por la Academia Estadounidense de Ciencias Forenses 671

672 REVISTA DE CIENCIAS FORENSES

Auckland, Nueva Zelanda), en las siguientes configuraciones de escáner:

resolución: 300 ppp, origen del documento: superficie plana, escala: 100 %,
exposición: 1,gramo-1,44, luces: 255, sombras: 22, intensidad de escala de
grises: 100 y saturación: 0. La imagen escaneada se guardó en formato JEPG.
Los modelos maxilares se colocaron de manera que los bordes incisales de
los incisivos centrales tocaran la superficie de vidrio del escáner y los
modelos mandibulares se colocaron de manera que los bordes incisales de
los incisivos anteriores y las cúspides de los molares más posteriores
tocaran la superficie de vidrio. del escáner. Los modelos mandibulares se
recortaban en la región retromolar si la altura del modelo impedía el
contacto molar. Esta técnica de posicionamiento de los modelos asegura
que el proceso pueda repetirse en una etapa posterior si es necesario sin
variabilidad en el ángulo de escaneo y la imagen resultante.

Análisis Morfométricos Geométricos

En la evaluación de la morfología dental, los investigadores se

han basado típicamente en mediciones de distancias, ángulos o
proporciones seleccionadas entre "puntos de referencia"
identificados subjetivamente (10). Luego se hicieron inferencias
basadas en estas mediciones usando métodos estadísticos
univariados y multivariados estándar (11). Sin embargo, los
avances recientes en imágenes digitales han facilitado la ubicación
de puntos de referencia como coordenadas. Estas configuraciones
de puntos de referencia pueden luego evaluarse mediante
métodos morfométricos geométricos, que permiten la
investigación tanto de la forma como del tamaño. Con la ayuda de
una amplia disponibilidad de software de computadora, así como
de literatura accesible, estos métodos se han vuelto cada vez más
populares en una variedad de disciplinas. Recientemente,
Robinson et al. (10) han proporcionado detalles de cómo se puede
utilizar este método en mediciones dentales. Los métodos
morfométricos geométricos permiten un análisis cuantitativo de la
forma mediante la captura de la geometría de las estructuras
morfológicas de interés y la preservación de esta información a lo
largo de los análisis estadísticos (12). Una contribución importante
de la morfometría geométrica es la clara definición matemática de
forma y tamaño (tamaño del centroide). El primero se define como
"toda la información geométrica que queda cuando se filtran los
efectos de ubicación, escala y rotación de un objeto" (13), mientras
que el tamaño del centroide se define como la raíz cuadrada de las
distancias cuadradas sumadas desde cada punto de referencia. al
centroide de configuración. Estas definiciones separan claramente
ambos componentes de la forma biológica y permiten el desarrollo
de métodos para medir las diferencias de tamaño y forma de
forma independiente.
Utilizamos dos puntos de referencia y dos semipuntos de referencia
ubicados en cada superficie oclusal para describir la dentición anterior
superior e inferior. Mientras que el hito 1 correspondía al punto extremo
más mesial, el hito 2 se ubicaba en el extremo más distal de la cara oclusal
de cada uno de los dientes considerados. Según Bookstein (14), estos
mojones se clasifican como Tipo III, porque se ubican en puntos extremos
de una estructura. Debido a que hay pocas características anatómicas en la
superficie oclusal, el uso de puntos de referencia no es suficiente para
capturar aspectos de la morfología que son relevantes para este estudio (p.
ej., diferencias en el ancho de la superficie oclusal entre individuos). Por lo
tanto, utilizamos dos semipuntos de referencia ubicados en los puntos
mediales de los lados labial y lingual de la superficie oclusal (semipuntos de
referencia 3 y 4). Figuras 1aybmostrar los puntos digitalizados en el maxilar
y la mandíbula, respectivamente. Tanto los puntos de referencia como los
semipuntos de referencia se digitalizaron con tpsDig 1.40 (15).
HIGO. 1—Arriba, puntos de referencia y semipuntos de referencia digitalizados en dientes maxilares;
abajo, puntos de referencia y semipuntos de referencia digitalizados en dientes mandibulares. Círculos,
puntos de referencia; plazas, semimojones.
En análisis basados en semipuntos de referencia, los puntos individuales
no son homólogos pero las curvas o contornos descritos por ellos deberían
ser homólogos de sujeto a sujeto (16). Debido al hecho de que los
semipuntos de referencia se colocan arbitrariamente a lo largo de los
contornos, su variabilidad a lo largo de las direcciones tangentes no es
informativa y solo la coordenada normal al contorno transmite información
sobre las diferencias entre especímenes o grupos (9,16). Como
consecuencia, Green y sus colegas (16,17) han propuesto el método de
semipunto de referencia deslizante para capturar y analizar contornos como
una extensión del procedimiento estándar de superposición de Procrustes.
Además de traducir, escalar y rotar puntos de referencia de manera óptima,
los puntos de los semipuntos de referencia se deslizan a lo largo de la curva
del contorno hasta que coincidan lo mejor posible con las posiciones de los
puntos correspondientes a lo largo de un contorno en una configuración de
referencia. Los semipuntos se deslizan a lo largo de su tangente al contorno
minimizando uno de varios criterios posibles, como la energía de flexión (16)
o las distancias de Procrustes (16,18). En nuestro estudio, los últimos
criterios, denominados criterios de proyección perpendicular o distancias
mínimas de Procrustes, se utilizaron para deslizar los puntos a lo largo de
los contornos. Este método desliza los puntos para minimizar las distancias
entre la curva de la referencia y cada individuo de la muestra. El criterio de
proyección perpendicular elimina la diferencia a lo largo de la curva en
posiciones de semipunto de referencia entre la forma de referencia y cada
espécimen estimando la dirección de la tangente a la curva y eliminando el
componente de la diferencia que se encuentra a lo largo de la tangente a la
curva (18). Los semipuntos de referencia se alinearon a lo largo de sus
respectivas curvas utilizando tpsRelw 1.40 (15).
 .
KIESER Y AL. LA SINGULARIDAD DE LA DENTICIÓN ANTERIOR HUMANA
Con el fin de analizar la variación de la forma entre los
individuos, llevamos a cabo un análisis de componentes
principales (PCA) en las puntuaciones de deformación
parciales, además de los componentes uniformes derivados
de las coordenadas de punto de referencia y semipunto de
referencia alineadas con Procrustes parcial mediante la
descomposición spline de placa delgada basada en la
flexión. matriz energética (19). Las deformaciones parciales
son variables de forma que representan cambios de forma
localizados (14), mientras que el componente uniforme
estima la variación de forma global (20). Un PCA realizado
en la matriz de covarianza de las variables de forma se
denomina análisis de deformación relativa (RW) y se realizó
utilizando tpsRelw 1.40 (15). Luego, para representar las
diferencias de forma entre los individuos, el primer eje RW
que resume la principal variación de forma se trazó contra
el tamaño del centroide.
Dado que ciertos rasgos como el tamaño/forma del diente pueden estar
fuertemente asociados entre sí (23,24), exploramos la covariación entre el
tamaño del diente y la forma del arco anterior tanto en el arco superior
como en el inferior. Usamos un análisis de mínimos cuadrados parciales
(PLS) (25,26) para encontrar pares correlacionados de combinaciones
lineales (vectores singulares) entre el tamaño y la forma del centroide. Los
vectores singulares se construyen en forma de nuevas variables
emparejadas denominadas deformaciones singulares, que explican tanto
como sea posible la covariación entre los dos conjuntos originales de
variables. Estos vectores expresan la máxima covarianza entre ambas
variables dentro de su conjunto y con las variables del otro conjunto (26). el
coeficienter,que mide la correlación de las puntuaciones de los especímenes
a lo largo de los ejes singulares de los dos conjuntos de variables, se utilizó
como medida de correlación entre el tamaño y la forma de cada arco. El
análisis PLS se realizó utilizando el software tpsPLS 1.13 (13).
El error intraobservador asociado con la colocación de coordenadas de
puntos fue evaluado por uno de los autores (VB), quien digitalizó los puntos
de referencia y semipuntos de referencia en una submuestra de 20
mandíbulas dos veces con una semana entre las sesiones de puntuación.
Los conjuntos de coordenadas de puntos obtenidos cada vez se utilizaron
para realizar el análisis RW y se compararon las ordenaciones obtenidas.
Esto se hizo comparando el puntaje de cada espécimen en el primer RW, que
representó la mayor cantidad de variación explicada, utilizando un
coeficiente de correlación intraclase (CCI) (27,28). La correlación intraclase
evalúa la confiabilidad de la calificación al comparar la variabilidad de
diferentes calificaciones del mismo objeto con la variación total entre todas
las calificaciones y todos los objetos.
Resultados
De los 50 juegos de modelos dentales, solo se analizaron 33 maxilares y
49 mandibulares de individuos masculinos y femeninos. Esta pequeña
reducción en el número se debió a que algunos dientes no tenían sus
superficies oclusales claramente visibles. Los resultados del análisis ICC
muestran una excelente concordancia (ICC50,95) (22) entre las dos series
realizadas, y significativa a unpags-nivel de 0.01. Esto indica un alto nivel de
consistencia intraobservador en la ubicación de los puntos de referencia.
La figura 2 traza los dos primeros RW calculados a partir de los puntos de
referencia y semipuntos de referencia maxilares, que representan el 66,28 %
de la varianza explicada. El primer RW explica el 52,57% de la varianza y
refleja principalmente las diferencias en la profundidad y anchura de la
arcada anterior (Fig. 3). Los resultados indican que no existe dimorfismo
sexual en la forma de la arcada superior. La gráfica del tamaño del centroide
y el primer RW (Fig. 4) para los datos del maxilar muestran una
superposición menor entre los individuos que en el análisis de la forma. Esto
significa que cuando el tamaño y la forma se consideran juntos, la diferencia
673
HIGO. 2—Análisis de deformación relativa (RW) de puntos de referencia y semipuntos de
referencia maxilares (n533). diamantes rellenos, hembra; diamantes vacíos, macho.
encia entre los arcos aumenta. Finalmente, es importante señalar que
ambos sexos no están tan superpuestos como en el análisis de forma (p. ej.,
análisis RW; Fig. 2).
La Figura 5 muestra la superposición de Procrustes entre los dos
individuos más cercanos (similares) y los dos más separados (disímiles)
a lo largo del primer eje del análisis RW obtenido de puntos de
referencia y semipuntos de referencia maxilares. La distancia de
Procrustes entre los individuos más cercanos en RW es de 0,0444 y
entre los individuos más separados es de 0,1567. Como puede verse en
la Fig. 5, aunque la distancia entre dos individuos es pequeña, existen
diferencias en la posición relativa de los dientes. Cuando las distancias
son mayores, los individuos no solo se diferencian por la posición
relativa de sus dientes sino también por la forma de sus arcadas (Fig.
5).
La figura 6 muestra los dos primeros RW calculados a partir de los puntos
de referencia y semipuntos de referencia mandibulares, que representan el
55,13 % de la varianza explicada. El primer RW explica el 46,02% de la
varianza y refleja principalmente las diferencias en la profundidad y anchura
de la arcada anterior (Fig. 7). Los resultados indican que no existe un claro
dimorfismo sexual en la forma de la arcada inferior. El gráfico del tamaño
del centroide y el primer RW (Fig. 8) para los datos de la mandíbula indica
que existe una gran superposición entre ambos sexos.
La Figura 9 muestra la superposición de Procrustes entre los dos
individuos más similares y los dos más diferentes a lo largo del primer
eje del análisis de RW obtenidos de puntos de referencia y semipuntos
de referencia de la mandíbula. La distancia de Procrustes entre los
individuos más parecidos en RW es 0,0387 y entre los individuos más
disímiles es 0,1718. Como se puede ver en la Fig. 9a,aunque la distancia
entre dos individuos es pequeña, existen diferencias en la posición
relativa de los dientes. Cuando las distancias son mayores, los
individuos no solo se diferencian por la posición relativa de los dientes
sino también por la forma del arco (Fig. 9b).
Los resultados del análisis PLS indican una covariación baja y no
significativa entre tamaño y forma, tanto en la parte superior (r50,38;
pags50,35) y menor (r50,52;pags50.08) arcos. Así, en la muestra
analizada parece que la forma de las arcadas anteriores no está
fuertemente correlacionada con el tamaño dentario.
Discusión
Las técnicas comparativas forenses, como los análisis de marcas de mordeduras, escritura a
mano, marcas de herramientas y morfología del cabello, continúan perturbando
674 REVISTA DE CIENCIAS FORENSES

HIGO. 3—Cuadrículas de deformación que representan la variación morfológica a lo largo de los dos primeros ejes de deformación relativa (RW) obtenidos de puntos de referencia y semipuntos de
referencia maxilares. Estas cuadrículas muestran la transformación de la forma media en los puntos extremos de ambos ejes; (a) deformación en el extremo más negativo a lo largo del primer RW; (b)
deformación en el extremo más positivo a lo largo del primer RW; (c) deformación en el extremo más negativo a lo largo del segundo RW; (d) deformación en el extremo más positivo a lo largo del
segundo RW. Las líneas que conectan puntos de referencia y semipuntos de referencia son solo para visualización.

tanto la comunidad forense como la legal (29). Estas son ciencias no

exactas cuyo valor probatorio no está respaldado por números grandes
y estadísticamente relevantes, sino que depende de la identificación y
0.25
comparación de características individuales y de clase (30). Incluso la
práctica establecida desde hace mucho tiempo del análisis de huellas 0.2
dactilares ha sido cuestionada recientemente (31). Lo que estas
0.15
técnicas comparativas tienen en común es la confianza en una serie de
caracteres variables que a menudo deben evaluarse de manera 0.1
inductiva (basada en la experiencia) en lugar de deductiva (matemática) 0.05
que es intuitivamente más atractiva para los jurados y los legos (32) .
Los odontólogos forenses han reconocido durante mucho tiempo la 0
importancia de la evidencia de marcas de mordeduras. Sin embargo, algunos han
− 0,05
argumentado que puede que no sea tan precisa como se había afirmado (33), una
afirmación respaldada por quienes sugirieron que la dentición humana, de hecho, − 0,1

puede no ser tan única como se suponía anteriormente (34). el evidencial − 0,15

− 0,2
− 0,3 − 0,2 − 0,1 0 0.1 0.2 0.3

0.25

0.2

0.15

0.1

0.05

− 0,05

− 0,1

− 0,15

− 0,2
− 0,3 − 0,2 − 0,1 0 0.1 0.2 0.3

HIGO. 4—Diagrama de dispersión que resume las relaciones entre la variación de HIGO. 5—Superposición de Procrustes entre (a) los dos individuos más cercanos (es
tamaño (tamaño del centroide [CS]) y forma (alabeo relativo [RW]) entre individuos en la decir, similares) y (b) los más separados (es decir, diferentes) a lo largo del primer eje de
dentición anterior del maxilar. El primer RW explica el 52,57% de la variación de forma (n los análisis de deformación relativos obtenidos de puntos de referencia maxilares y
533). semipuntos de referencia.
 .
KIESER Y AL. LA SINGULARIDAD DE LA DENTICIÓN ANTERIOR HUMANA 675

HIGO. 6—Análisis de deformación relativa (RW) de puntos de referencia mandibulares y semipuntos de HIGO. 8—Diagrama de dispersión que resume la variación de tamaño (tamaño del
referencia (n549). centroide [CS]) y forma (warp1 relativo [RW1]) entre individuos en la dentición anterior de
la mandíbula. El primer RW explica el 45,89% de la variación de forma.

La confiabilidad de la evidencia de marcas de mordida se basa en gran medida en
dos principios: en primer lugar, que los tamaños, las formas y la disposición de las
superficies oclusales de los dientes anteriores superiores e inferiores son
específicos para cada individuo y, en segundo lugar, que se genera una impresión
precisa de los dientes del mordedor. en el material mordido (35,36). Si bien existe
una cantidad relativamente grande de literatura centrada en el tamaño, la forma y
la posición de los dientes (revisiones (37,38)), su singularidad nunca se ha
establecido con rigor científico (39,40). Claramente, en ausencia de una base
científica sólida para la afirmación de la individualidad de la dentición, la
frustración espera a aquellos que intentan utilizar la evidencia de la mordedura en
los tribunales.
Es importante señalar que nuestro estudio solo se centró en uno de los
principios antes mencionados: el de la individualidad. No aborda la respuesta
viscoelástica de la piel al morder. La pregunta que hicimos aquí es: "¿Cuál es la
evidencia de que las superficies oclusales de los dientes anteriores son únicas para
cada individuo?" No estamos preguntando: "¿Cuál es la probabilidad de encontrar
un conjunto suficientemente similar de superficies oclusales en una población
objetivo?'' Para responder a la última
requeriría el desarrollo de modelos estadísticos apropiados para capturar todos
los aspectos de la variabilidad de las características oclusales sobresalientes de la
dentición anterior. Como en el caso de las huellas dactilares, esto aún permanece
fuera de nuestro alcance (41).
Usamos una nueva familia de métodos morfométricos geométricos para
capturar diferencias sutiles sobre la variación morfológica y la ubicación espacial
relativa de las superficies oclusales individuales (por ejemplo, espacio entre
dientes, rotación, aleteo) de la dentición anterior superior e inferior, así como una
buena descripción de la forma general del arco. Es importante destacar que se ha
demostrado que el análisis de puntos de referencia y semipuntos de referencia
permite explorar las diferencias de forma oclusal entre las muestras con mayor
detalle que las mediciones lineales (42).
Nuestro estudio muestra que existen claras diferencias en la arcada
dentaria anterior, tanto en forma como en forma. La principal variación de
forma, resumida por el análisis RW, parece estar relacionada con cambios
generales en la profundidad y el ancho de las arcadas. Estas diferencias son
mayores que las debidas a la posición relativa de los dientes oa su
morfología individual. Sin embargo, cuando las personas con muy

HIGO. 7—Cuadrículas de deformación que representan la variación morfológica a lo largo de los dos primeros ejes de deformación relativa (RW) obtenidos de puntos de referencia mandibulares y
semipuntos de referencia. Estas cuadrículas muestran la transformación de la forma media en los puntos extremos de ambos ejes; (a) deformación en el extremo más negativo a lo largo del primer RW;
(b) deformación en el extremo más positivo a lo largo del primer RW; (c) deformación en el extremo más negativo a lo largo del segundo RW; (d) deformación en el extremo más positivo a lo largo del
segundo RW. Las líneas que conectan puntos de referencia y semipuntos de referencia son solo para visualización.
676 REVISTA DE CIENCIAS FORENSES

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se superponen formas arcadas similares, las diferencias en la orientación de
Stat Soc B 1991;53:285–339.
los dientes siguen siendo evidentes (Figs. 6ay 9a).Por lo tanto, se puede 23. Dayan T, Wool D, Simberloff D. Variación y covariación de cráneos y
decir que en la presente muestra, seleccionada específicamente para tener dientes: carnívoros modernos y la interpretación de mamíferos fósiles.
niveles de individualidad más bajos que la población general, no hay dos Paleobiología 2002;28:508–26.
individuos con morfología dental idéntica. 24. Dempsey PJ, Townsend GC, Martin NG, Neale MC. Covarianza genética del tamaño de
la corona de los incisivos en gemelos. J Dent Res 1995;74:1389–98.
Solo examinamos las superficies oclusales de los dientes anteriores en
25. Bookstein FL, Streissguth AP, Sampson PD, Connor PD, Barr HM. Forma del
una pequeña muestra de conveniencia. No se intentó evaluar cómo estas cuerpo calloso y déficits neuropsicológicos en machos adultos con fuerte
superficies podrían crear un patrón de mordida en cera o en la piel. Con exposición fetal al alcohol. NeuroImagen 2003;15:233–51.
estas disposiciones en mente, ¿cuáles son las implicaciones de nuestros 26. Rohlf FJ, Corti M. El uso de mínimos cuadrados parciales de dos bloques para estudiar
la covariación en la forma. Syst Zool 2000;49:740–53.
resultados para nuestra comprensión de la confiabilidad probatoria del
27. Shrout PE, Fleiss JL. Correlaciones intraclase: usos en la evaluación de la confiabilidad
análisis de marcas de mordidas? En primer lugar, nuestro estudio apoya la del evaluador. Psychol Bull 1979; 2: 420–8.
noción de la individualidad de la dentición anterior humana. En segundo 28. Fleiss JL. Métodos estadísticos para tasas y proporciones. 2ª ed. Nueva York:
lugar, nuestros resultados sugieren un nivel de correlación bajo y no John Wiley, 1981.
significativo entre el tamaño/forma dental y la forma del arco, lo que 29. Taupin JM. Comparación forense de la morfología del cabello: ¿arte moribundo o
ciencia basura? Sci Justicia 2004; 44: 95–100.
significa que la regla del producto se puede aplicar a la evaluación de estos
30. Saferstein R. Criminaslistics: una introducción a la ciencia forense. 5ª ed. Englewood
datos. Finalmente, nuestro estudio no sugiere que las características únicas Cliffs, Nueva Jersey: Prentice-Hall, 1995.
de las superficies incisales anteriores documentadas aquí se transfieran 31. Pollak J. US v Plaza, Acosta y Rodríguez Cr. No. 98-362-10,11,12, Tribunal de
necesariamente a un sustrato mordido. Distrito de Pensilvania, Orden del 13 de marzo de 2002.
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para las comparaciones de crestas de fricción como medio de identificación: Correo electrónico: jules.kieser@stonebow.otago.ac.nz