Está en la página 1de 2

¿CÓMO SERÍA EL ESTADO DE PERFECCIÓN?

¿Cuál sería la situación de una persona que estuviera en una situación


perfecta? Es decir, sin problemas de salud, sin problemas económicos… lo único
que se me ocurre que uno podría hacer es jugar. ¿Cuál sería el estado psíquico
del Creador? Que es el estado al que tendríamos que apuntar.
La necesidad se cubre con un mal necesario, el deseo no, el deseo es
algo que vos deseas hacer y que puede ser algo creativo, novedoso.
Jugar sería el acto más elevado del universo, es lo que hace el Creador.
Y no tiene otra cosa que hacer, porque no hay otra cosa que se pueda hacer
en un estado de perfección. ¿Qué otra cosa se os ocurre que se pueda hacer
en un estado de perfección? No se me ocurre nada. Jugar y crear.
Razonando llegamos a la conclusión de que estamos metidos en un
juego del creador. O sea, el creador en estado perfecto lo único que puede
hacer es jugar, pero jugar requiere, o realmente disfrutar un juego requiere
emoción, y ello requiere riesgo (poder ganar, poder perder), requiere
incertidumbre. El creador no puede porque es consciente de todo, ¿cómo lo
hace para jugar? Entonces, razonando, para que un ser perfecto pueda jugar
y disfrutar necesita inevitablemente limitarse, o sea, dejar de ser perfectos. Y eso
somos nosotros, representantes del creador dentro de su juego. Necesita
representantes que sean limitados, o sea, que de alguna manera estén
reducidos a nivel de conciencia y mandados al juego. (Es decir, siendo perfecto
me ajusto a reglas a propósito).

¿Y por qué será que a pesar de que lo vemos claramente nos cuesta
vivirlo? Hace meses que hablamos de la ilusión pero seguimos como engañados
dentro de la ilusión.
Porque no estamos convencidos de que fuera así. Entonces vas sin fe y te
funciona poco. El asunto es fe total, entonces ahí funciona. Que es lo que hace
el niño, no duda de las cosas que hace. Nosotros tenemos esa característica del
adulto que duda de todo, y como duda de todo no puede crear nada. Y esto
es una paradoja, porque dudar es necesario para aprender, pero no sirve para
crear. Por lo tanto dudar es un mal necesario, o sea, es parte del proceso de
aprendizaje. Pero en algún momento se tiene que acabar.
En la Biblia se ve el poder de la fe: “mi hija está enferma…” “No, tu hija
está sana”. No dice de hacerle un pase mágico ni nada, simplemente dice yo
no creo que esté enferma. Lo que te permite ver a una persona curada es tu fe,
no la de otro. Tu fe puede curarte a ti y a todas las personas que tú ves. Jesús le
dice “tu hija está sana”, si el tipo tiene confianza en Él y cree entonces vuelve a
casa y su hija está sana. Jesús era como un vehículo intermedio de fe, en
realidad la fe no necesita nada, pero él se posicionó como alguien que “vos
crees en mí, entonces puedes lograr lo que quieras, porque yo te digo que vos
puedes lograr lo que quieras”.
Somos seres todopoderosos inmersos en una sociedad en la que todos se
dicen entre todos “son todos boludos”. Entonces estamos todos convencidos.

Si uno lo piensa bien que uno te diga que los problemas que tienes están
en tu mente, refleja la frase de “la verdad os hará libres”, porque significa que si
los problemas que yo experimento están en mi mente significa que yo los puedo
borrar. Ahora si no dependen de mí significa que son eternos, que yo nunca voy
a poder vivir bien porque yo no puedo hacer nada contra ello. Sin embargo la
persona egoísta no acepta esto, cree que las cosas las está haciendo bien y
que el mal viene de fuera.

También podría gustarte