Introducción Hay Poder en la alabanza y el enemigo sabe esto y quiere quitar quiere robar de nuestra boca la alabanza a Dios. Quiere que estemos en desesperación en tristezas, con dudas con temores, con queja y con preguntas en vez de estar dando una alabanza a Dios en vez de darle a Dios agradecimiento le pedimos explicaciones. Pero hoy yo quiero que usted tenga bien en claro que en medio de la alabanza Dios se mueve con poder en medio de una alabanza sincera genuina y verdadera el poder de Dios se manifiesta. I. No importa tú circunstancia sólo alaba Independientemente de la situación en que te encuentres, independientemente de lo que estés viviendo, sea dolor sea angustia o desesperación, Dios es digno de tu alabanza. Si estás en abundancia o escasez Dios es digno de alabanza Y si estás enfermo o tiene salud aún así en medio de lo que sea que estés viviendo tiene que haber una alabanza una adoración tienes qué dar fruto de labios que glorifiquen su santo y poderoso nombre. Vemos aquí a Pablo y a Silas, ellos estaban asustados adoloridos encarcelados con cadenas en sus pies estaban presos en lo más profundo de un calabozo en una situación desesperante en una situación de aflicción pero esto no cayó sus bocas esto no dejó que le robara la alabanza que Dios se merecía ellos comenzaron a alabar ellos comenzaron a adorar y con voz fuerte Porque todos los podían oír. Oían sus cantos entonados para Dios y Dios se manifestó con poder. A) Él se mueve con poder en medio de la alabanza. Cuando el pueblo de Dios alaba suceden cosas maravillosas. Cuando el pueblo de Dios adora y alaba de corazón las puertas se abren, y las cadenas se rompen. Dios todo lo mueve , Dios todo lo sacude y lo transforma y cambia. Dónde hay tristeza llega la alegría, donde hay desesperación Dios trae Paz. Donde hay dolor Dios trae consuelo, donde hay muerte Dios trae vida y vida en abundancia. Es por eso que tú no debes de callar, es por eso que tú no debes de dejar de adorar, dejar de alabar y reconocer que tienes un Dios grande. Servimos a Dios todopoderoso, y la presencia de Dios se mueve en medio de tu alabanza (Salmos 22:3). 2. Pero si alabas, alaba en espíritu y en verdad (Juan 4:21- 23-24) A) Una adoración verdadera Va a llegar el tiempo en que no se podrá adorar a Dios, ya no va haber oportunidad Pero esto no tiene porqué callar nuestra alabanza. Esto no tiene porqué parar nuestra adoración, pues su pueblo ya va estar con el Señor, así que es necesario que el que le adore le adore en espíritu y en verdad. No importa el lugar, no importa donde te encuentres, lo que Dios ve es un corazón que en verdad, y sinceridad adora. Un corazón que está agradecido y reconoce su grandeza. B) Algo sorprendente ¿Y sabe qué es algo sorprendente? Que Dios anda buscando adoradores que le adoren en espíritu y en verdad. Póngase usted a pensar. Dios tiene a su alrededor ángeles que cantan con voces hermosas. Dios tiene arcángeles. Él tiene serafines y querubines que le adoran que le alaban todo el tiempo. Adoran su nombre, glorifican Su grandeza. Pero aún así Dios espera tu alabanza y mi alabanza. Aún así, Dios busca ese momento en el que tú vengas ante su presencia adorarle, a derramar tu alma, reconociendo Su grandeza y su poder. Dios espera, desea, y busca ese momento, en el que tú le adores en espíritu y en verdad. Él se mueve en medio de la alabanza. No importa la voz, no importa si desafinas o desentones, sólo necesitas que sea en espíritu y en verdad, y Él se manifiesta en medio de esa alabanza. C) El poder de tus alabanzas Porque cuando tú le alabas la tristeza se convierte en gozo, cuando tú le alabas la desesperación se transforma en paz y confianza en sus promesas, todos los temores desaparecen. Así que yo quiero que usted aprenda y que grabe estas palabras en su corazón, Hay poder en medio de una alabanza genuina, de una alabanza sincera. Dios se manifiesta con poder, abre puertas que están cerradas. Dios hace caminos donde no los hay (Isaías 43:16-21). Dios quebranta toda cadena, Él hace que las murallas sean desmoronadas en medio de la alabanza (Josué 6). D) Nuestro Dios es digno, Él se merece toda Gloria. Toda honra sea a Su nombre, exaltado sea Su nombre. Bendito por siempre, y para siempre, porque Él es digno. Suyo es el poder porque suya es la alabanza y la adoración. Sólo a Él le pertenece toda Gloria por los siglos de los siglos (Gálatas 1:3-5). La Biblia dice que todo lo que respira alabe a Jehová (Salmos 150:6). Así que si usted está ahora respirando, entonces alábelo. Alabe Su grandeza, Su gran poder, y Su misericordia para con nosotros, porque Él es bueno y digno de suprema alabanza (Salmos 145:3-21). Conclusión Qué toda su vida, no solamente sus palabras, sino que toda su manera de vivir, toda su vida entera sea una alabanza continua a Jehová. Que todas sus acciones glorifiquen Su nombre qué es Bendito por la eternidad.