SIMPLIFICANDO NUESTRAS VIDAS

Una de las mayores razones que dificultan iniciar un grupo de pastoreo mutuo, como
también en continuar con el mismo, es la falta de tiempo. A continuación indicamos varios
ejercicios que pueden ayudar simplificar tu vida. Apenas las introduciremos. Para hacerlos
necesitará de un tiempo mayor.
A. Ejercicio de la PODA. Si el médico declarase que su estrés lo llevará a morir dentro de
un mes si no disminuye el ritmo de su vida e insistiera que usted identificase cuatro
actividades que debe dejar de hacer, ¿Cuáles serían? (vea Jn 15:1-2 → podando su vida;
Hb 12:1 → despojándose de todo peso).
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B. CLAVES PARA DECIR “NO” a las invitaciones y peticiones de las personas.

A. ¡Nunca diga “Si”! 
Agradezca la invitación y pida a la persona enviártela oficialmente, por correo
electrónico o de cualquier otra forma escrita. ¡Muchos no lo harán y ya liberaste
tiempo! Otros lo harán, así podrás orar y pensar con cabeza fría, no siendo llevado
por la presión o emoción del momento.
B. Con la invitación escrita en la mano, si piensas que puede ser bueno hacerlo, orar
y pedir que Dios te confirme.
C. Si sientes una confirmación de Dios, pero la invitación tomará tiempo de tu familia
o tus compromisos normales, consulta a las personas involucradas,
principalmente tu cónyuge en primer lugar y tu familia en segundo. Si ellos
confirman, puedes seguir adelante con libertad y alegría.

C. Ejercicio de LAS PRIORIDADES divinas.

1. Haz una lista de todas tus actividades durante una semana o mes típico (incluye
tiempo ocasionado en cada actividad).
2. Clasifica las actividades en seis grupos:
A. Con Dios (espirituales)
B. Conmigo mismo (ejercicio, descanso, lectura, etc.)
C. Con la familia (cónyuge e hijos)
D. Con el trabajo (laboral)
E. Con el ministerio y/o iglesia
F. Otro
3. Dentro de cada grupo separa las actividades en tres tipos de prioridad:
 a. Indelegables
b. Delegables, pero supervisables
c. Opcionales (Residuales)
4. Comparte tu ejercicio con un mentor o discipulador que podría ayudarte a realizar
en la práctica lo que tú quieres en la teoría. 
 Ejercicio. Prioridades Divinas
Nuestras vidas cambian rápidamente. Este ejercicio debe realizarse por lo menos cada seis meses.
Utilice la tabla siguiente para una lista de sus actividades en las siete áreas, es necesario poner
primero las indelegables, las supervisables segundo y las opcionales tercero.
Dios Si mismo Familia Liderados Iglesia Trabajo Otros
Prioridades Indelegables
Prioridades delegables, pero
Supervisables
Prioridades Opcionales
(Residuales)
 Ejercicio. Agenda Semanal Productiva
Domingo Lunes Martes Miércoles Jueves Viernes Sábado
4:00

5:00

6:00

7:00

8:00

9:00

10:00

11:00

12:00

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14:00

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16:00

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21:00

22:00

23:00
 Ejercicio del Enfoque
1. Mirando hacia un año por delante, haga una lista de todas sus actividades, responsabilidades y
oportunidades. Sea específico. Por ejemplo, si usted predica dos veces a la semana, indique eso
como dos actividades: la predicación el domingo y la predicación el miércoles por la noche. Debe
incluir las oportunidades que Dios está abriendo para usted en los próximos doce meses; no debe
incluir actividades de los doce meses anteriores que sabe que no continuará. Para alguien que
está en el ministerio a tiempo completo esta lista implica generalmente entre 15 y 50 actividades.
Una forma de encontrar estas actividades puede ser repasar su agenda de los últimos doce
meses y ver cualquier actividad que piensa continuar en el próximo año.
2. De toda la lista, elija 16 actividades prioritarias. Las que no van en esta lista son secundarias y
opcionales. Puede ser que algunas actividades en las que está bastante involucrado y que toman
bastante tiempo no entran en su lista de las 16. En este caso, debe pensar sobre la posibilidad de
delegar esas actividades, capacitar otras personas para hacerlas o simplemente retirarse de
ellas. En algunos casos, puede tomar un buen tiempo (¿un año?) para que usted pueda disponer
de estas actividades, pero necesita empezar ahora.
3. Pensando que estas 16 actividades representan las que usted priorizó hasta aquí, ahora elija los
ocho que usted no está dispuesto a delegar y elimine ocho actividades del total de 16. Las
actividades no están compitiendo entre duplas (ítem 1 con 2, 3 con 4), sino todos contra todos.
Puede tachar el número del ítem que usted piensa que no va delegar y puede poner un círculo a
los ítems que cree que pasarán, para obtener el balance de ocho eliminados y ocho que ganarán.
Puede usar el gráfico en la próxima página.
4. De los ocho, elige las cuatro más importantes (por las que su corazón palpita y están dentro de su
proyecto de vida). Estos son de alta prioridad para el próximo año. Cuando hay un conflicto de
agenda, la prioridad debe ser para ellas (estas cuatro), y en su planificación debe resaltarlas. No
necesariamente significa que la mayoría de su tiempo se destinará a estas cuatro actividades,
pero donde hay conflicto, ellas tendrán prioridad.
5. De las cuatro, elije dos. Debe invertir a fondo en ellas que son las de más alta prioridad. Para un
pastor, normalmente uno de esos dos son “aquellos que me diste”, su EQUIPO PASTORAL.
6. De las dos, elije una. Este es el enfoque de su ministerio para el próximo año. Usted
probablemente debería invertir la mayor parte de su tiempo en eso, enfocando su energía y
esfuerzos en esta área.
7. Si usted tiene un equipo, es interesante pedirles que ellos hagan este ejercicio y compartan los
resultados con usted y con el equipo. De esta manera, todos pueden apoyarse mutuamente en
sus enfoques y prioridades. También pueden ver que en los diferentes enfoques y prioridades de
las diferentes personas se alinean para poder cooperar más en estas áreas.
8. Oración de discernimiento. Esta oración sobre cuales actividades debe dejar de hacer o puede
hacer, es difícil y dolorosa. El corazón de la oración son preguntas como: "Padre, ¿qué quieres
que yo haga este año?". "¿Dónde estás trabajando y dónde quieres que te acompañe de manera
especial?". Esto puede ser la base de un retiro con Dios.
9. Conversaciones de discernimiento. Hable abiertamente con su pareja y con sus mentores o
líderes espirituales. Escuche atentamente su perspectiva.
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EJERCICIO DE ENFOQUE
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ENFOQUE

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