Y tú me habrás de salvar.

¡Madre mía de Guadalupe!

Aurora de la mañana,
Tierna virgen mexicana.
¡Ampárame por piedad!
 MODO DE HACER LA NOVENA III

El día cuatro de diciembre se comienza la novena (puede Soy creatura de las manos
hacerse en cualquier tiempo); en ésta comulgarás el día de la
De todo un Dios de bondad
Aparición y otros dos días con el consejo del padre espiritual,
en honra de la Encarnación del Verbo concepción de Nuestra Cuya inmensa majestad
Señora y Asunción gloriosa.
Contigo quiero adorar.
Oye misa y reza el rosario (o sea. todo el año con tu familia y
sea ésta la señal de esclavo de mi Señora, que vale mucho en
comunidad la oración; que, si haces, yo te prometo que crecerás
en virtud y tendrás alivio en tus necesidades. Quiero ser hijo obediente

Perdona a tus enemigos, por Dios; no les quités el habla, que, Dócil a la inspiración,
si no perdonas, no alcanzarán perdón de tus pecados; mira que Que siento en mi corazón
esto no los enseña la fe, acuérdate de la doctrina cristiana.
Para amarte sin cesar.
Visita las iglesias, enfermos y encarcelados, consuélalos,
anímalos a la devoción de mi Señora, y si pudieses con
oraciones, limosna o con tu diligencia sacar a alguno de pecado
harás una obra muy del agrado de María Santísima y haz bien IV
por las almas del purgatorio. Sé humilde, casto callado y Cuando cierre yo mis ojos
obediente, especialmente a tu confesor; frecuenta los
sacramentos, abrázate con las virtudes, mortificando tu carne, Con sueño eterno, Señora
sentido y pasiones, ama a Dios y a María Señora nuestra,
procurando hacer algo más cada día, en señal de que los amas, Serás tú mi protectora
señalando alguna cosa especial, para que cada día crezcas en su
 ACTO DE CONTRICION
Dios te salve María Santísima de Guadalupe, Santísima Madre
de pecadores, a mí me pesa Señora, de haber ofendido a tu Hijo
y mi Dios por ser quien es y por Hijo tuyo y porque le amo
sobre todo amor y por ser ofensas contra ti (a quienes después
de su majestad debía amar), espero, Madre mía, por su
intercesión alcanzar perdón de mis pecados y gracia para nunca
más pecar y prometo, Señora, la enmienda de mi vida y cumplir
hasta la muerte éste propósito y así no me desampares. Ruega
a Jesús tenga misericordia de mí, pequé Señora mía,
alcanzarme misericordia de tu Hijo Jesús. Amén.
Oración con la que finalizará todos los días.
¡Oh dulcísima y amabilísima María! Dueña de mis
pensamientos, consuelo de mi corazón, alegría de mi alma,
complemento de mis deseos; yo creo que tú has rogado a tu
Hijo por mí para que me perdone y que le suplicaste que diese
su gracia para salir del camino de perdición que me llevaba al
abismo y me has alcanzado éstas y otras gracias que he
implorado de tu piedad, quitando el amor del siglo y dándome
el de tu Hijo Santísimo y el tuyo. ¡Ah! Yo no quiero tener en la
vida más riqueza que tu amistad y devoción, ni más gloria que
amor, ni más consuelo que tu patrocinio, ni más ocupación que
la contemplación de tus virtudes; cuando llegue la hora de mi
muerte, has, oh Madre amorosa, que mis labios pronuncien tu
augusto nombre para dejar este mundo y que resuene en el
borde de mi tumba y lo repita al poner el pie en el horizonte de
la eternidad para que al invocarle tenga la inefable alegría de
encontrarme contigo y tomándome tú por la mano, me
conduzcas y me presentes a tu Divino Hijo y le digas: "He aquí,
Hijo mío, un pecador a quien yo he salvado de caer en el
infierno; ruego corones en él mi amor y tus dones". Así sea.
 PLEGARIA amor; quienes te asistan y a quienes tú ames hasta la muerte.
Dios sea bendito. Amén Jesús,
A la Virgen de Guadalupe Entre nosotros inspirar.
Puesto de rodillas delante de una imagen de nuestra Señora,
I II habiéndote persignado, harás el siguiente.
Cuando en Tepeyac, Señora Tanto favor, tanta gracia

Te levantaron un templo Has prodigado en nosotros,

De Madre diste el ejemplo Que no has otorgado a otros,

Amándonos más y más. Sino a México nomás.

Así es que mi corazón
Por eso vengo afanoso
Con el corazón henchido A ti llega agradecido
Del cariño que has sabido Y con lágrimas te pido
Que no me olvides jamás.
OOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO
OOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO
OOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO
OOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOoooooooooooo
ooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooo
ooo
 DIA TERCERO
(El acto de contrición, la Oración para todos los días y después
la siguiente:
ORACION
Oh señora de mi corazón, Virgen Santísima de Guadalupe,
consuelo enviado por Dios a los desterrados y muy en
particular a nuestra Nación; estrella de mi camino, sostén de mi
debilidad, riqueza de mi indigencia, medicina de mis heridas,
alivio de mis dolores, esperanza de mi salud; oye mis
oraciones, compadécete de mis suspiros y en la vida y en la
muerte vuelve a sí esos tus ojos misericordiosos; estampa en
mi corazón tu imagen bendita como la estampaste en la tosca
tilma de Juan Diego, para que mis actos sean dirigidos por ti y
sea acreedor a oír de tus purísimos labios, al fin de mi jornada,
aquellas tibias palabras que dirigiste al feliz neófito: "Hijo mío
a quien amo tiernamente como a pequeñito y delicado", y me
salves bajo tu manto sagrado, pues eres el refugio, la vida, el
auxilio, la esperanza y la fortaleza de los mortales. Así sea.
(La petición y salves como el primer día).
ORACION
Dios te salve María, mar de misericordia, aurora y precursora
de la gracia, pronóstico de la salud del mundo, Cristo Jesús
Reina de los Ángeles y hombre, iris que convierte los rigores
de un Dios árido, en dulces misericordias, alegría del cielo y
tierra; felicidad de esta Nación Mexicana; por tu nombre y
sagrada Aparición de Guadalupe, te pedimos estampes en
nuestras almas con el pincel de tu gracia la imagen de tu
hermosísimo Rostro, dándome la joya apreciable de la caridad
perfecta para con Dios y nuestros prójimos, una muerte de puro
amor de Dios, dolor de nuestros pecados; en ella tu asistencia
para alcanzar perdón y en vida amor a nuestros enemigos,
resolución de no pecar más inclinación a las virtudes y aprecio
a la frecuencia de sacramentos, para vivir en gracia y gozar de
la alegría perfecta que es gozar de Dios en tu compañía,
amándola en su gloria. Amén.
di: Sea alabado el nombre de Jesús y el de María
Dirás la oración del día y acabada, siete veces Santísima; y reza
cinco Ave Marías al nombre y Aparición de mi Señora y luego
el
 OFRECIMIENTO
Dios te salve María, fuente cristalina de donde dimanan
copiosos raudales de misericordia; cielo que resplandeces y
luces como sol, luna y estrellas, abraza como sol mi espíritu
para amarte, destierra como luna las tinieblas de los pecados
que hay en mi alma, que para dar pasos a la virtud me
aprisionan; influye como estrella en mí y en todos, dulces
influencias de santidad y gracia, para ser cual otro Querubín,
dotado Trono a tu grandeza en quien las hermosas huellas de
tus sagradas plantas se estampen, siendo estos, honrosos
laureles a mis sienes, y marca gloriosa a mi corazón con que te
confiese por mi Ama y Señora, publicando que soy tu esclavo:
y como tal, pueda ofrecer (como ofrezco) ante su soberanía
postrado, esta Novena por el tributo, que como esclavo tuyo
debo, pidiéndote por nuestro ilustrísimo Pastor, por los hijos de
la Nación Mexicana, les des paz y victoria contra los herejes,
por la exaltación de nuestra santa fe, conversión de los turcos,
conversión de los pecadores a penitencia, y libertad de los
cautivos: por la conservación de las sagradísimas religiones y
justos y congregaciones espirituales, predicadores, confesores
y jueces eclesiásticos y seculares, padres de familia, y todos los
que tienen almas que gobernar, les dé acierto para que obren
con justicia; por los que hacemos esta Novena, por los que
están en pecado mortal; por los bienhechores de los santuarios
y toda esta ciudad; por las almas santas del purgatorio, por
SEGUNDO DIA
El acto de contrición. La oración para todos los días y después
la siguiente:
(María de Guadalupe, consuelo de los que lloran). De nuevo
vengo a pedirte el remedio de tantas necesidades que me
agobian. Tú las ves, tú las conoces todas, ¿no te moverás a
remediarlas? Sí, mi tierna Madre, mis lamentos llegarán a tu
materno corazón y no será insensible a mis miserias, y
presentándolas ante el trono de tu Hijo, intercederás por mí
alegándole que eres mi Madre y no puedes ver las penas de tu
pobre hijo sin socorrerlas, pues que a ti acudo con toda
confianza de que es capaz mi corazón. Y aunque por la cantidad
de mis pecados no merezco ser oído, atenderá los ruegos de su
Madre, experimentaré tu favor y amparo y bendeciré por
siempre a la que por amor a nosotros bajó a las cumbres del
Tepeyac. Así sea.
(La petición, salves y jaculatorias como el primer día).
Ruega por nosotros Sta. María de Guadalupe. Para que seamos quienes aplicamos estas pobres oraciones, unidas con tus
dignos de las promesas de Nuestro Señor Jesucristo. méritos y con la preciosa sangre de Jesús, para que sean libres
de tus penas, alcanzándoles eterno descanso, y nosotros todos,
OREMOS y el mundo todo alcancemos tus bendiciones, y después de esta
vida besemos a tu original los pies en la gloria. Amén.
¡Oh Dios! que con habernos colocado bajo el singular
patrocinio de la Sta. Virgen María quisiste colmarnos de
beneficios perpetuos; te suplicamos nos concedas que, así
como nos regocijamos hoy de su conmemoración en la tierra,
así consigamos gozar de su presencia en el cielo, te lo pedimos
por Jesucristo Nuestro Señor. Amén.
(Luego se dirá la Oración final con que se terminará todos los
días).
 PRIMER DIA De Guadalupe (Ultima salve en honor de la
cuarta aparición)
Dios te salve María, gloria de la trinidad beatísima, paraíso de Santa María,
sus delicias, Dios te salve, gloria y reina de los Ángeles; yo te ¡Cuánto te quiero!
Gratas Delicias
alabo con estos hermosísimos espíritus, y por sus méritos te
¡Cuánto te adoro!
ruego, que con su custodia hagas que nos apartemos de tus Del alma mía.
consejos, y que nuestra gloria sea observarlos cumpliendo con Reina del cielo,
los mandamientos de Dios, para ser fieles siervos, y entrar en Pues que bajaste
el gozo de la gloria. Amén. ¡De Dios tesoro!
Al Tepeyac,
Pintarás en tu alma estos días la imagen de María Santísima, Pues que bajaste
haciendo algunas obras virtuosas; y hoy en lugar de rosas da Protege al pueblo
alguna limosna, aunque en pedazo de pan, o espirituales como Al Tepeyac,
Del Anáhuac.
es rezar por las ánimas o por los cautivos. Protege al pueblo
Del Anáhuac.
 LA PETICION
Se reza un salve a la Stma. Virgen en honor de su primera
aparición con la siguiente:
Alba Azucena
Flor de granado,
Dulce consuelo
Del desterrado
Pues que bajaste
Al Tepeyac
Protege al pueblo
Del Anáhuac.
(Otra salve en honor de
la segunda aparición)
SEGUNDO DIA
Fuente de vida. Dios te salve María, vara florida, de cuya raíz salió la flor de
campo; divina azucena de los valles, Dios te salve, Hija del
Bella Señora
Eterno Padre y Emperatriz de los ángeles; yo te alabo con
Del Mexicano estos obedientísimos espíritus; y por ellos te suplico, que
como cuidan de los Pontífices e Hijos de la Nación Mexicana
La protectora. hagas nos asistan por ti para la puntual asistencia a nuestro
Pues que bajaste Santísimo Padre el Pontífice Romano, y que los herejes que la
niegan, se rindan convirtiéndose en mansos corderos y dejen
Al Tepeyac, sus errores y nosotros demos el cuello al cuchillo, antes de
faltar a tan debida obligación; y a ti obedezcamos Señora y
Protege al pueblo
abogada nuestra, agradeciéndote el habernos dado el bendito
Del Anáhuac. fruto de tu vientre Jesús, para nuestra salvación, rindiéndote
cultos de devoción, para amarte siempre en la gloria, Amén.
(Una salve en honor de la
Hoy en lugar de las estrellas, cuarenta y seis veces alaba los
tercera aparición) dulcísimos nombres de Jesús y de María, que cuarenta y seis
son las estrellas.
 TERCER DIA
Dios te salve, María, Antorcha lucidísima, que alumbra a los
hombres. Dios te salve, Madre de Dios Hijo, Princesa de los
principados; yo te alabo con estos celosísimos espíritus, y por
sus méritos te ruego, pues son superiores a los Ángeles y
Arcángeles, en cosas pertenecientes a la salvación de los
hombres, hagas que nos asistan para hacer obras que nos guíen
a eterna vida, y acortando el camino con su gracia, lleguemos
al puerto de la gloria. Amén.
Hoy en lugar de la túnica y cinto, desnúdate de las pasiones que
tienes con algunos y que, naturalmente te repugnan; háblales
con afabilidad y humildad.
DIA PRIMERO
ORACION
Aquí me tienes a tus plantas, Madre mía de Guadalupe, lleno
de confianza en tu poderoso patrocinio. Vengo a exponerte mis
necesidades todas, porque seguro estoy de tu poder cerca de tu
Hijo Santísimo y de tu deseo de favorecer a los pecadores, muy
especialmente a los mexicanos, pues así lo manifestaste al
sencillo Juan Diego, cuando apareciéndote a él por primera vez,
el feliz 9 de diciembre de mil quinientos treinta y uno, entre
músicas suavecísimas, nubes y resplandores le dijiste que
querías se te fabricase un templo en aquel sitio, donde, como
Madre piadosa suya y de sus semejantes mostrarías tu
clemencia amorosa y la compasión que tienes de los naturales
y de aquéllos que te amen y busquen; y de todos los que
solicitasen tu amparo y te llamasen en sus trabajos y
aflicciones, oirías los ruegos y lágrimas para darles consueto y
alivio. Lleno de fe y confianza en estas tus tiernas promesas;
vengo a depositar en tus manos piadosas mis necesidades
espirituales y temporales para que te apiades de mí. Mira que a
ti aclamo, a ti acudo y no saldrá confundido el que en la Madre
de Dios pone sus esperanzas, así sea.
 LAUS DEO CUARTO DIA
Hecho el acto de contrición, se dirá con toda confianza la Dios te salve María, diamante precioso del Corazón de Dios,
siguiente que resplandece en la ciudad santa. Dios te salve, Esposa del
Santo y divino Espíritu, Sra. de las potestades; yo te alabo con
ORACION PARA TODOS LOS DIAS estos soberanos espíritus, y por ellos te ruego; pues tienen
potestad para refrenar a los demonios, hagas que sujeten a los
¡Oh Madre tierna de los mexicanos, María Santísima de
que nos combaten, y con su favor venzamos las sugestiones con
Guadalupe! Con cuánto entusiasmo vengo a tus pies sagrados
que nos tientan, ejercitando las virtudes, para ser coronados en
a tributarte mis homenajes, a ti que, siendo Reina del Cielo, no
la gloria. Amén.
desdeñaste bajar a nuestro suelo santificándolo con tu
presencia: Dígnate aceptarlos, Señora mía Inmaculada, con esa Hoy en lugar de manto guarda modestia; y no veas, si no fuere
bondad que has mostrado a esta tu nación predilecta, y no lo necesario, y las imágenes de Jesús y María: para alabarlas.
atiendas a mi frialdad e insuficiencia más sólo al deseo que
tengo de honrarte, alabarte y de ponerme bajo tu maternal
protección. A ti ¡Oh María!, acudo lleno de confianza para que
el torbellino de este tempestuoso piélago del mundo, tú seas mi
estrella. La muchedumbre de mis pecados me avergüenza y las
tentaciones me acometen sin descanso. En tanta aflicción a ti
me acojo, porque sé que soy tu hijo y que si en los peligros, en
las angustias te llamo, tú vienes a mi socorro; si te ruego no
desesperaré; si pienso en ti, no me desviaré; si tú me sostienes,
no caeré; si me proteges, nada tendré que temer y en fin, si me
guías, no me cansaré y acabaré felizmente mi jornada,
experimentando con cuánta razón quisiste ser Madre nuestra y
la dicha que es ser hijo tuyo. Así sea.
 QUINTO DIA Pídele a tu Eterno Padre

Dios te salve María, arca del mismo Dios, hacesito de Rosa del De hijos nos conceda el cielo.
Jardín de Cristo, purísima Esposa del Señor San José, Reina de
De él llenó a nuestra ventura, etc.
las virtudes: yo te alabo con estos admirables espíritus y por
sus méritos te pido, hagas nos aprovechemos de los milagros
que Dios por su medio obra, y de los especiales con que nos
favorece cada día, y con su favor conozcamos las inspiraciones,
que nos envía para mejorar de costumbres, y gozar en la gloria.
Amén.
Hoy en lugar de los rayos de sol, dispón tu Alma con una
confesión y comunión, para que tengas los rayos de Cristo,
Sacramentado con las luces de su gracia, que es día de la
Concepción de mi Señora, y haz siete actos de contrición.
 Que reina te confiesa.
Desde la luna a la otra zona:
Allí de Águila te abona
Que hasta Dios levanto el vuelo.
De él llenó a nuestra ventura, etc.
Sirve a tus pies de repisa Noble Serafín alado.
Y estar tus pies postrado
En su más noble divisa.
Así con ejemplo atiza
La llama de nuestro cielo.
De él llenó a nuestra ventura, etc.
Porque a nuestra dicha cuadre.
Madre quieres te llamemos.
Haz que tal favor paguemos.
Amándote como a madre.
SEXTO DIA
Dios te salve María, luz que iluminas todo entendimiento, para
conocer el verdadero sendero de la santidad. Dios te salve, Hija
del santo, y mejor par, Señor San Joaquín, y mi Señora Santa
Ana, princesa de las dominaciones, yo te alabo con estos
providentísimos espíritus, y por sus méritos te suplico, pues
presiden a los inferiores ministros de la Providencia; hagas que,
con su compañía domine mis pasiones, refrenando la
revelación de la carne, para vivir constante, y con espíritu puro,
gozar después de esta vida las luces de la gloria. Amén.
Hoy en lugar del ayate, dale tu corazón limpio de toda culpa y
perdona a tus enemigos, para que se estampe en él mi Señora,
pues la mejor tela es el corazón sin culpa.
 SEPTIMO DIA Porque cree hallar en tus plantas

Dios te salve María, vida de los santos, alegría de los ángeles y El lleno de su fortuna:
espanto de los demonios, Dios te salve, vida fructífera y mar de
Haz que menguante ninguna
virtudes. Dios te salve, vida y emperatriz de los tronos; yo te
alabo con estos escogidos espíritus, por ellos te suplico me Padezca el Mexicano suelo;
otorgues, que a su imitación sea trono de Dios, conservando mi
alma sin la culpa que priva de tal gloria y que sea, mi vida De él llenó a nuestra ventura, etc.
semejante a las de los justos para ser agradable asiento a tan
grande Majestad, viviendo a las cosas eternas y muriendo al En tosco y grosero ayate
mundo; y a mí mismo, para vivir en tu compañía en la feliz
patria de la gloria. Amén.
Pintas tu imagen hermosa.
Hoy en lugar de Luna, haz siete actos de humildad, y mira las
creces y menguas de tu alma, propón de no dejar el ejercicio de Y por honrarme piadosa
las virtudes y devociones que tenías antes, y no desprecies a los
pobres. A esto tu humilde se abaten;
Justo es que mi pecho trate
De agradecer tanto cielo:
De él llenó a nuestra ventura, etc.
Ceñida la real corona
Se ve oh María en tu cabeza,
 Que no eran a tal pureza
Otros adornos decentes;
Venzan tus rayos valientes
De nuestros pechos el hielo.
De él llenó a nuestra ventura, etc.
Para bordar tú vestido
Han bajado las estrellas
Porque en tu hallan ellas
Firmamento más lucido
Tú siempre la estrella has sido:
Que Influye nuestro consuelo:
De él llenó a nuestra ventura, etc.
Tapete forma la luna
A tus plantas sacrosantas,
OCTAVO DIA
Dios te salve María, panal virgíneo que misericordiosamente
endulzas las amarguras de la muerte, Dios te salve, tórtola
amorosa. Dios te salve, Reina de los Querubines yo te alabo
con estos eminentes espíritus, y te ruego por sus perfecciones
alcances en mis obras la perfección de ellas para agradar a
Dios, y que en todos me asistan, para que contigo la más
eminente y perfecta de todas las criaturas, adoremos a tu Hijo
Santísimo en la gloria. Amén Jesús.
Hoy lugar en el lugar del Querubín, enciende tu alma con
afectos de amor de Dios, de María Santísima, de fe, esperanza
y caridad hazlos siete veces cada uno.
 NOVENO DIA GOZOS
Dios te salve María, ejemplo de amor que en amar a Dios Pues a ser nuestro consuelo
perfectísimamente accedes a los coros angélicos santos del
Cielo y justos de la tierra. Dios te salve, templo de pureza, Bajasteis ¡Oh Virgen pura,
paloma candidísima, la más agradable a un Dios Trino y uno. De él llenó a nuestra ventura
Dios te salve, Señora de los serafines; yo te alabo con estos
abrazadísimos espíritus y te suplico por su amor que hagas nos Subir a adorarte al Cielo,
asistan, para que a su imitación no cesemos un instante de amar
a quien por amarnos dio la vida en el árbol de la Cruz, para que En la tilma retratada dejaste tu imagen bella
vivamos crucificados con su amor, siendo nuestra vida amarle Para que fuese la estrella
y alabarle hasta la muerte y que a ti amorosa María, que tanto
le amas, te sigamos muriendo por amarle, y por amarte a ti; y De esta tu América amada.
entregando nuestras almas en tus manos, en ellas hallemos el
tesoro de amarle siempre en la gloria. Amén. Por eso en ti asegurada

Hoy haz templo tu alma, y recibe a María Santísima: Adórale Tiene su dicha este suelo:
muchas veces en lugar de las adoraciones que le dieron en el De él llenó a nuestra ventura, etc.
palacio. Y da de comer a una pobrecita, en obsequio de la
Señora. Del sol los rayos ardientes
Dos aves Marías, por quien Imprimió esta Novena, y por quien Formas tronos a tu grandeza
se hizo.