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PALABRA

que da Vida

Año XXI - No. 18


Agosto 09 del 2020
XIX DOMINGO
TIEMPO ORDINARIO
Primera Lectura (1Re 19, 9a.l la- 13a) Dios no está en la
tempestad... - Elías venció a los sacerdotes de Baal en el monte
Ciclo “A”
Carmelo, invocando sobre ellos el fuego del cielo. Pero Dios le
hizo experimentar que el celo no siempre es victorioso y su
vocación no es la violencia contra los hombres, sino el servicio Parroquia:
paciente. Elías, perseguido por Jezabel, queda sin fuerza y huye
hasta el Horeb. Y allí Dios le habla, pero no en elementos “Virgen
violentos - tempestad, terremoto, fuego, - sino en la suave brisa... del Buen Remedio
y San Pablo Apóstol”
Segunda Lectura (Rm 9, 1 -5) En los capítulos 9 al 11 el apóstol
trata un grave problema que le causó profundo sufrimiento:
Calle Santa Paula 489
Israel en el plan salvador de Dios. Pablo acaba de proponer a sus Urb. III Etapa de Pando
lectores el programa admirable de la nueva vida de los renacidos Cercado
por el sacramento y el Espíritu y mediante ellos han alcanzado la
excelente dignidad de llamarse y ser hijos de Dios y poder
dirigirse a ese Dios como Papá bien amado. Ahora el apóstol
dirige su mirada a los miembros de su pueblo que se resisten a
aceptar el evangelio de la gracia, creer en Jesucristo y recibir la
Pedro se hunde,
jus ficación gratuitamente mediante la fe, y formar parte del precisamente,
verdadero y único pueblo de Dios
cuando su fe
Evangelio (Mt 14, 22-23) Ahora bien, después de la
mul plicación de los panes (cf domingo pasado), Jesús había deja de estar
dejado que sus discípulos atravesaran solos el lago de Genesaret.
Ahora enfrentados contra estas fuerzas, a las que ellos, como
anclada en Jesús
muchos pescadores en su supers ción, les atribuían un origen y se desvía
malo. En esas circunstancias, Jesús se propone dar un paseo
caminando sobre las olas. Simón Pedro (solamente el evangelio hacia el hecho
de Mateo narra este detalle) se siente animado y quiere ir al
encuentro de Jesús caminando sobre las olas. Pero de repente ve extraordinario
nuevamente ante sí el viento y las aguas y pierde la confianza en de estar
sí. Pero no en Jesús, pues grita "Señor, sálvame" y Jesús lo ayuda,
pero le llama la atención sobre su poca fe. Y entonces, con un caminando
gesto que revela toda su majestad, Jesús calma las olas. Ahora los
discípulos lo reconocen como el Señor, el hijo de Dios, y lo sobre el agua..
adoran.

Hoja Dominical - El Domingo, día del Señor


1
MONICIÓN GENERAL
"Dios viene al encuentro del hombre especialmente en los momentos de necesidad ... El
Dios de los profetas y de Jesús es aquel que toma la defensa de los pobres y de los
débiles. Él no está en los fenómenos naturales grandiosos y violentos, sino en el soplo
leve de la brisa, como significando la espiritualidad e in midad de las manifestaciones
de Dios al hombre. La comunidad cris ana vive una existencia atormentada por la
hos lidad de las fuerzas adversas, que se manifiestan en las persecuciones y
dificultades internas y externas. Únicamente con sus fuerzas ella no llegaría al fin de su
camino. Pero Jesús resucitado está presente en medio de los suyos; aunque invisible, Él
los asiste. En esta celebración nos unimos a nuestros hermanos cuya vida ha sido tocada
por el corona virus, por sus familiares y por todos aquellos que par eron a la casa del
Señor por esta pandemia.

RITO DE ENTRADA LITURGIA DE LA PALABRA

An fona de entrada: Sal 73, 20. 19. 22.23


Primera lectura
Piensa, Señor, en tu alianza, no olvides sin remedio la vida
Elías espera a Dios y este se le presenta
de tus pobres. Levántate, oh Dios, defiende tu causa, no
como un susurro, sin prueba alguna de su
olvides las voces de los que acuden a ..
poder. Es el gran secreto de Dios que nos
narró Jesucristo que se acerca como Padre
Acto Penitencial
bueno a sus criaturas.
S. Tú que nos has venido a condenar, sino a perdonar: Señor ten
piedad. R. Señor, ten piedad.
S. Tu que padeciste por nosotros para seguir tus huellas: Cristo,
ten piedad. R. Cristo, ten piedad.
S. Tú que perdonas mucho a quien mucho ama: Señor, ten piedad. Lectura del primer libro de los Reyes 19, 9a. 11-13a
R. Señor, ten piedad En aquellos días, cuando Elías llegó al Horeb, el monte de
Dios, se me ó en una cueva donde pasó la noche. El Señor
Gloria le dijo: —«Sal y ponte de pie en el monte ante el Señor. ¡El
Gloria a Dios en el cielo, Señor va a pasar!». Vino un huracán tan violento que hacía
y en la erra paz a los hombres que ama el Señor. temblar las montañas y hacía trizas las peñas delante del
Por tu inmensa gloria te alabamos, Señor; pero el Señor no estaba en el viento. Después del
te bendecimos, te adoramos, viento, vino un terremoto; pero el Señor no estaba en el
te glorificamos, te damos gracias, terremoto. Después del terremoto, vino un fuego; pero el
Señor Dios, Rey celes al, Señor no estaba en el fuego. Después del fuego, se oyó una
Dios Padre todopoderoso brisa tenue; al sen rla, Elías se tapó el rostro con el manto,
Señor, Hijo único, Jesucristo. salió afuera y se quedó de pie a la entrada de la cueva.
Señor Dios, Cordero de Dios, Hijo del Padre; Palabra de Dios. R. Te alabamos Señor.
tú que quitas el pecado del mundo,
ten piedad de nosotros;
tú que quitas el pecado del mundo, Salmo 84, 9ab-10. 11-12. 13-14 (R.: 8)
a ende nuestra súplica;
tú que estás sentado a la derecha del Padre, R. Muéstranos, Señor, tu misericordia
ten piedad de nosotros; y danos tu salvación.
porque sólo tú eres Santo,
sólo tú Señor, sólo tú Al simo, Jesucristo, Voy a escuchar lo que dice el Señor: «Dios anuncia la paz a
con el Espíritu Santo su pueblo y a sus amigos». La salvación está ya cerca de sus
en la gloria de Dios Padre. fieles, y la gloria habitará en nuestra erra. R.
Amén.
La misericordia y la fidelidad se encuentran, la jus cia y la
Oración Colecta: paz se besan; la fidelidad brota de la erra, y la jus cia mira
Dios todopoderoso y eterno, a quien, instruidos por el desde el cielo. R.
Espíritu Santo nos atrevemos a llamar Padre, renueva en
nuestros corazones el espíritu de la adopción filial, para El Señor nos dará la lluvia, y nuestra erra dará su fruto. La
que merezcamos acceder a la herencia prome da. Por jus cia marchará ante él, la salvación seguirá sus pasos. R.
nuestro Señor Jesucristo.

2
eres tú, mándame ir hacia andando sobre el agua». Él le
Segunda lectura
dijo: —«Ven». Pedro bajó de la barca y comenzó a caminar
Pablo manifiesta un gran dolor por su
sobre el agua, a-cercándose a Jesús; pero, al sen r la fuerza
pueblo israelita, que gozaba de
del viento, le entró miedo, empezó a hundirse y gritó:
grandes privilegios, pero en su
—«Señor, sálvame». En seguida Jesús extendió la mano, lo
mayoría no creían en Jesús. Es bueno
agarró y le dijo: —«¡Qué poca fe! ¿Por qué has dudado?».
mirar con ojos de fe para poder
En cuanto subieron a la barca, se calmó el viento. Los de la
entender que muchas veces ciertas
barca se postraron ante él, diciendo: —«Verdaderamente
situaciones se dan en la vida no como
eres Hijo de Dios».. Palabra del Señor. R. Gloria a , Señor
nosotros quisiéramos, sino según los
Jesús.
designios de Dios.
Profesión de fe: Credo de Nicea (Constan nopolitano)
Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Romanos Creo en un solo Dios, Padre todopoderoso, Creador del
9, 1-5 cielo y de la erra, de todo lo visible y lo invisible. Creo en un
Hermanos: Les hablo con toda verdad en Cristo; mi solo Señor, Jesucristo, Hijo único de Dios, nacido del Padre
conciencia, iluminada por el Espíritu Santo, me asegura que antes de todos los siglos: Dios de Dios, Luz de Luz, Dios
no miento. Siento una gran pena y un dolor incesante, en mi verdadero de Dios verdadero, engendrado, no creado, de la
corazón, pues por el bien de mis hermanos, los de mi raza misma naturaleza del Padre, por quien todo fue hecho; que
según la carne, quisiera incluso ser un excluido de la por nosotros, los hombres, y por nuestra salvación bajó del
compañía de Cristo. Ellos descienden de Israel, fueron cielo,(En las palabras que siguen, hasta se hizo hombre, todos se
adoptados como hijos, enen la presencia de Dios, la inclinan) y por obra del Espíritu Santo se encarnó de María, la
alianza, la Ley, el culto y las promesas. Suyos son los Virgen, y se hizo hombre; y por nuestra causa fue
patriarcas, de quienes, según la carne, nació el Mesías, el crucificado en empos de Poncio Pilato; padeció y fue
que está por encima de todo: Dios bendito por los siglos. sepultado, y resucitó al tercer día, según las Escrituras,
Amén.. Palabra de Dios. R. Te alabamos Señor. y subió al cielo, y está sentado a la derecha del Padre;
y de nuevo vendrá con gloria para juzgar a vivos y muertos,
y su reino no tendrá fin. Creo en el Espíritu Santo, Señor y
Evangelio dador de vida, que procede del Padre y del Hijo, que con el
Dios se revela a través de su Hijo, Padre y el Hijo recibe una misma adoración y gloria, y que
acercándose a cada persona de una habló por los profetas. Creo en la Iglesia, que es una, santa,
manera humana. Se acerca a los católica y apostólica. Confieso que hay un solo bau smo
atormentados, a los inseguros a para el perdón de los pecados. Espero la resurrección de los
quienes están pasando por momentos muertos y la vida del mundo futuro. Amén.
tristes, de oscuridad que piensan que
se están hundiendo como Pedro. Jesús
es la luz que ilumina siempre nuestras
oscuridades.

Aclamación antes del Evangelio Sal (129), 5

Aleluya, aleluya. Espero en el Señor espero en su palabra.


R. Aleluya

Lectura del santo Evangelio según san Mateo 14, 22-33 Eucaristía: 7:00 pm
R. Gloria a , Señor
En aquel empo, inmediatamente después de la
mul plicación de los panes, Jesús ordenó a sus discípulos
que subieran a la barca y se le adelantaran a la otra orilla, LA PALABRA feria semanal
mientras él despedía a la gente. Y, después de despedir a la
gente, subió al monte a solas para orar. Llegada la noche, SAN LORENZO, diácono y már r (FIESTA)
estaba allí solo. Domingo XIX 240 Mientras tanto, la barca 10 LUNES Ez 1, 2-5.24-28; Sal 148; Mt 17, 22-27
iba ya muy lejos de erra, sacudida por las olas, porque el 11 MARTES Ez 2, 8-3, 4; Sal 118; Mt, 18, 1-5.10.12-14
viento era contrario. De madrugada se les acercó Jesús, 12 MIÉRCOLES Ez 9, 1-7;10,18-22; Sal 112; Mt, 18, 15-20
andando sobre el agua. Los discípulos, viéndole andar 13 JUEVES Ez 12, 1-12; Sal 77; Mt 18, 21-29
sobre el agua, se asustaron y gritaron de miedo, pensando 14 VIERNES Ez 16, 1-15.60.63; Sal/Is 12, 2-6; Mt 19, 3-12
que era un fantasma. Jesús les dijo en seguida: —«¡Ánimo, 15 SÁBADO
soy yo, no tengan miedo!». Pedro le contestó: —«Señor, si LA ASUNCIÓN DE LA VIRGEN MARÍA (SOLEMNIDAD)
Ap 11, 19a; 12, 1-6a.10ab; Sal 44; 1Cor 15, 20-27; Lc 1, 39-56

3
Oración Universal PLEGARIA EUCARÍSTICA
A Dios, que es Padre y busca en todo nuestro mayor bien,
dirijamos nuestra oración confiada, pidiendo con viva fe. (Variaciones posteriores al finalizar la consagración)
1. Por el Papa Francisco: para que, sostenido y guiado por el
Espíritu Santo, siga animando nuestra fe y sosteniendo CP. Este es el misterio de la fe (o bien:)
nuestra esperanza. Oremos. CP. Este es el sacramento de nuestra fe.
2. Te rogamos, Señor, por tu Iglesia, por los ministros y los R. Anunciamos tu muerte,
fieles laicos que la componemos, para que el Señor proclamamos tu resurrección.
Resucitado siga manifestando su ternura en medio de las ¡Ven Señor Jesús!
tormentas que circundan al mundo; para que viva en
comunión y sea signo de esperanza. Oremos. CP. Aclamamos el Misterio de la fe.
3. Por la humanidad: para que cesen en el mundo las R. Cada vez que comemos de este pan
guerras, las divisiones, los odios, los recelos y las discordias, y bebemos de este cáliz,
y recuperemos la esperanza en el amor. Oremos. anunciamos tu muerte, Señor,
4. Por cuantos están reunidos en el Señor: para que Dios hasta que vuelvas.
nos de la paz del corazón, el perdón de los pecados y la
firme voluntad de obedecer siempre sus mandamientos. CP. Proclamamos el Misterio de la fe.
Oremos. R. Sálvanos Salvador del mundo,
5. Te pedimos, Dios bendito por los siglos, por nuestros que nos has liberado
hermanos que sufren a causa de las enfermedades, del por tu cruz y resurrección.
Covid 19 y las tormentas de la vida; para que, reconociendo
tu presencia y tu obrar, acojan tu ternura y se abran a tu An fona de comunión Jn 6, 51
misericordia. Oremos. El pan que yo daré es mi carne por la vida del mundo, dice el
Padre que imitemos a tu Hijo, que pasó por la vida haciendo Señor
el bien, llevando así a plenitud la ley; que te amemos a
sobre todas las cosas y a nuestros hermanos como a COMUNIÓN ESPIRITUAL
nosotros mismos. Te lo pedimos por Jesucristo, nuestro Jesús mío, creo que Tú estás en el san simo Sacramento; te
Señor. Amén. amo sobre todas las cosas y deseo recibirte ahora dentro de
mi alma, ya que no te puedo recibir sacramentalmente, ven
al menos espiritualmente a mi corazón. Señor, no soy digno
LITURGIA DE LA EUCARISTÍA
ni merezco que entres en mi pobre morada, pero di una sola
palabra y mi alma será sana, salva y perdonada. El cuerpo,
Preparación de los dones la sangre, el alma y la divinidad de Nuestro Señor Jesucristo
Bendito seas, Señor, Dios del universo, por este pan, guarden mi alma para la vida eterna
fruto de la erra y del trabajo del hombre, Breve pausa
que recibimos de tu generosidad y ahora te presentamos; Y como si ya te hubiese recibido, te abrazo y me uno todo a
él será para nosotros pan de vida. . Tú no te ausentes de mí. Te suplico, oh Señor mío,
R. Bendito seas por siempre, Señor. Jesucristo, que la ardiente y dulce fuerza de tu amor
embriague toda mi alma, a fin de que muera de amor por ,
Bendito seas, Señor, Dios del universo, por este vino, así como Tú te dignaste morir de amor por mí. Amén
fruto de la vid y del trabajo del hombre,
que recibimos de tu generosidad Oración después de la comunión
y que ahora te presentamos; él será para nosotros La comunión en tus sacramentos nos salve, Señor, y nos
bebida de salvación. afiance en la luz de tu verdad. Por Jesucristo, nuestro
R. Bendito seas por siempre, Señor. Señor.

C. Oren hermanos, para que este sacrificio, mío y suyo, sea ORACIÓN POR LA PANDEMIA
agradable a Dios, Padre todopoderoso. Señor Jesús, nuestro Médico Divino te pedimos que nos
R. El Señor reciba de tus manos este sacrificio, para guardes y protejas del coronavirus y de todas las
alabanza y gloria de su nombre, para nuestro bien y el de enfermedades letales. Ten piedad de todos los que han
toda su santa Iglesia. muerto. Sana a todos los que están enfermos. Ilumina a
todos los cien ficos que están buscando un remedio.
Oración sobre las ofrendas Fortalece y protege a todos los asistentes sanitarios que
Acepta complacido, Señor, los dones que en tu están ayudando en estos momentos a los enfermos. Que tu
misericordia has dado a tu Iglesia para que pueda Preciosa Sangre sea nuestra defensa y salvación. Nos
ofrecértelos, y que ahora transformas con tu poder en abandonamos con toda confianza en tu infinita
sacramento de nuestra salvación. Por Jesucristo, nuestro misericordia. Amén
Señor.

4
LA PALABRA
Y LAS PALABRAS
El vocabulario de la Biblia para el hombre de hoy

MAR

El mar sirve de fondo oscuro y amenazador al relato evangélico de hoy


(Mate o 14,22-33). El an guo Israel experimentaba frente a las grandes
masas de agua una sensación de miedo: también los indígenas
cananeos veían en el mar a un dios nega vo, Yam, en eterno conflicto
con el dios de las aguas benéficas y fecundadoras, Baal. Las «grandes
aguas», en hebreo mayyim rabbim, eran un símbolo del caos, de la
nada y del mal. En efecto, la erra era concebida como una plataforma
suspendida sobre las aguas oceánicas y sostenida por columnas. Se
Mons.
trata de un equilibrio regulado por el Creador, que ha «dividido» agua y Gianfranco Ravasi
erra firme, nada y ser, según una armonía que sólo él puede conservar.

Hay un pasaje suges vo del libro de Job en el que Dios es presentado


como aquel que bloquea la furia del mar aprisionándolo a lo largo del
rompeolas: «¿Quién encerró con doble puerta el mar, cuando salía
borbotando del seno, cuando le fijé sus confines y le puse en torno
puertas y cerrojos, y le dije: "No pasarás de aquí, aquí se romperá la
soberbia de tus olas"?» (38,8-11).

Por eso, según la Biblia, el mar está poblado de monstruos con nombres
impresionantes: Behemot, semejante al hipopótamo; Leviatán,
«serpiente huidiza, tortuosa, dragón del mar», según Isaías (27,1); Prefecto de la Biblioteca
parecido a un enorme cocodrilo, según Job (c. 41); Rajab, otro cetáceo Pinacoteca Ambrosiana,
monstruoso; el mismo Abismo, cuyo nombre, Tejom, evoca la divinidad miembro de la Comisión
nega va de los relatos babilonios sobre el origen del mundo (Tiamat). Bíblica Pon ficia y Profesor
de exégesis bíblica en la Facultad
Teológica de Italia Septentrional.
Sobre todo, el caos y el mal, encarnado por el mar, se ex ende la
palabra creadora de Cristo que los domina y permite a su discípulo
pasar indemne por ellos. Así logramos entender por qué en la Jerusalén
celes al del Apocalipsis el mar desaparece por completo, dejando
espacio a un mundo pacificado por fin: «Vi un cielo nuevo y una erra
nueva, porque el primer cielo y la primera erra han pasado y el mar ya
no existe» (21,1).

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