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Natalia Méndez

1. Descripción exhaustiva

Es una taza que pertenece a un juego de tazas heredados de un familiar que no


conocí. Aún así, les tengo cariño. Me encanta que el color es crema, no blanco, no
amarillo. El diseño de la cerámica es clásico, casi barroco, con unos relieves a lo largo
de todo el contorno y una forma muy típica en el asa. Es una taza de boca ancha,
panzona, antigua. Nada que ver con esas de moda, enormes y gruesas y pesadas.
Esta es liviana. Ligera, casi sin peso. Es una taza de té de un clásico té inglés. Tiene
pintadas unas flores en el exterior. Podrían ser unas amapolas, una violeta y una roja
de un lado y del otro, el que sería el lado principal si la tomamos con la diestra, tres
flores más grandes, también en tonos rosas, rojos, violetas y poco de naranja y
amarillo. Al fondo en cada ocasión, unas hojas y ramitas. Hay un detalle adorable y es
que tiene también una flor en el interior. Una sorpresa que se luce al tomar el té o
que apenas se transparenta si todavía no lo probamos. Tiene también una rayita azul
que recorre toda la circunferencia y el asa y que se nota pintada a mano, mientras
que las flores son calcomanías para cerámica.
En la base tiene un sello marcado que no llega a leerse bien, y unas marcas de
horneado. No me suena que fueran de excelente calidad las tazas. En el juego se
notan algunas marquitas, como si fuera un juego de segunda mano tal vez.
Prefiero esta taza a las que son tipo jarro, que también hay varias en casa. Primero
porque me gustan las tazas de boca más ancha, y segundo porque el borde fino y
delicado me resulta más agradable. Me siento una señora tomando té, un poco, en
un salón, aunque esté despatarrada en pijama en mi casa. Las tazas pueden hacer
eso, cómo que no.

2. Descripción a partir de una lista

1. Es de cerámica.
2. Es de boca ancha, petisa y panzona
3. Es de color crema.
4. Tiene pintadas unas flores en el exterior.
5. Tiene una pequeña flor pintada en una pared del lado interior.
6. Tiene también una decoración con un trazo azul que da toda la vuelta.
7. Era de un pariente que no conocí.
Natalia Méndez

8. Tiene en el exterior una forma un poco barroca.


9. Me gusta su liviandad.
10. Me gusta que es fino el borde donde se apoyan los labios al tomar.
11. La puedo tomar con las dos manos y sentir el calor del té.
12. Tiene algunas marcas de uso.
13. Debe tener muchos años.
14. ¿Por cuántas casas habrá pasado?
15. Creo que antes de llegar a mi casa estuvo un buen tiempo guardada en
un depósito.
16. Es un tipo de cerámica que se hace con molde. No podría hacer una
igual a mano.
17. Se podría, bueno, pero lleva tanto trabajo que no tiene sentido.
18. El asa es muy frágil, suele ser donde primero se rompen.
19. La pintura de las flores está bastante bien conservada a pesar del
tiempo.
20. Si no tenés un compás sirve para dibujar un círculo.

3. Describirla como si la viera un extraterrestre


1. No se puede acceder desde las superficies exteriores, solo se accede
por arriba.
2. Sus paredes son resbaladizas.
3. En el fondo parece haber un líquido oscuro, con un aroma muy
fuerte.
4. El perfume definitivamente viene del líquido y no de esa flor pegada
en una de sus paredes internas.
5. Podría usarse como pileta.

4. A qué colección pertenece y qué otros elementos hay en esa colección:

Pertenece a mi colección de objetos para dibujar un círculo. Otros objetos de mi


colección son:
*Un compás. No me gusta usarlo mucho porque me pinché una vez.
*Un vaso. Siempre hay que tener cuidado de que no le quede líquido. En el vaso se
puede dibujar un círculo más grande si apoyamos la boca contra la hoja o más chico
si usamos la base.
*Un alambre para hacer pompas de jabón
Natalia Méndez

*Una letra O
*Un cero
*La luna llena. Cuando pasa por mi ventana en invierno, puedo aprovechar y dibujar
con el dedo sobre el vidrio empañado.

5. Manual de instrucciones

Partes de su taza:
-Base
-Parte superior o concavidad
-Asa

La taza tiene un lado superior y un lado inferior. El lado inferior o base debe ir
apoyado en una superficie lisa y equilibrada. El lado superior es la boca de la taza y
presenta una concavidad. En esa concavidad debe verter el té o la bebida de su
elección (para recetas de té mire el prospecto anexo).
Para beber, una vez que haya vertido la bebida de su agrado, debe acercar la taza a
sus labios suavemente, siempre de manera perpendicular a la superficie original en
donde estaba apoyada a fin de evitar derrames innecesarios. Una vez que el borde
de la taza está apoyado sobre su labio inferior debe abrir ligeramente la boca e
inclinar suavemente la taza hacia usted. Esto provocará, por causas naturales de los
fluidos y de la ley de gravedad, que el contenido de la taza se dirija hacia su boca.
Debe tragar de inmediato y retirar la taza del labio volviendo a enderazarla. Repetir la
operación hasta acabar con el contenido de la taza.
Si se vuelca por fuera de su boca el líquido es que
a. No abrió lo suficiente a la boca o no coordinó la inclinación de taza con la
apertura de la boca.
b. Inclinó demasiado pronto o demasiado bruscamente la taza.
No se preocupe, requiere un poco de práctica, pero luego de los primeros usos no
será un problema.
Una vez que el líquido se acabó, debe lavar su taza con agua limpia y en lo posible
una esponja suave con jabón.
Dejar secar boca abajo.
Guardar hasta el próximo uso.

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