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REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

MINISTERIO DEL PODER POPULAR PARA LA EDUCACIÓN UNIVERSITARIA

UNIVERSIDAD NACIONAL EXPERIMENTAL “SIMÓN RODRÍGUEZ”

NÚCLEO VALLE DE LA PASCUA - ESTADO GUÁRICO

Formulación de Proyectos socio-comunitarios

INDICADORES DE DESARROLLO SOSTENIBLE

Facilitador: Participantes:

Ing. Wilfredo

Mayo del 2013

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REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

MINISTERIO DEL PODER POPULAR PARA LA EDUCACIÓN UNIVERSITARIA

UNIVERSIDAD NACIONAL EXPERIMENTAL “SIMÓN RODRÍGUEZ”

NÚCLEO VALLE DE LA PASCUA – ESTADO GUÁRICO

Formulación de Proyectos socio-comunitarios

INDICADORES DE GESTIÓN SOCIAL

Facilitador: Participantes:

Ing. Wilfredo León

Mayo del 2013

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RESUMEN

La sustentabilidad ha reflejado que un indicador es el producto de


la existencia de un problema con rentabilidad social sustentabilidad y los
avances tecnológicos que nos encaminarán hacia ella, tienen un factor
común: la pregunta de parte de los lectores sobre el significado del
término "sustentabilidad". Este se viene escuchando con frecuencia en
este último tiempo y se encuentra en casi todos los informes de
responsabilidad social empresarias que he leído.

Si bien existen numerosos libros dedicados a explicar este


concepto, a continuación les voy a presentar mi interpretación. Tengo que
confesar que, según el diccionario de la Real Academia Española, utilizo
el término de forma incorrecta, ya que para describir lo que yo llamo
sustentable se debería emplear el término sostenible.

Según la Real Academia Española, "sostenible" se define como: "1.


m. desarrollo que, cubriendo las necesidades del presente, preserva la
posibilidad de que las generaciones futuras satisfagan las suyas."

El término se hizo conocido en el año 1987, cuando la World


Commission on Environment and Development de las Naciones Unidas
también conocida como la Comisión Brundtland, publicó el reporte
llamado Our common future (Nuestro futuro en común), centrado en el
concepto de desarrollo sustentable o sostenible. En lo personal prefiero la
palabra sustentable simplemente porque la veo más tecnológica y creo, al
igual que Ray Anderson , que gran parte de las soluciones vienen a través
de la tecnología.

La definición es muy corta e inclusive la considero difícil de


memorizar pero si me ha ayudado a reflexionar. Si partimos de la base

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que nos gustaría que nuestros hijos, nietos y todas las futuras
generaciones tengan como mínimo, la misma calidad de vida, mismas
posibilidades y acceso a los mismos recursos naturales que tenemos
nosotros hoy en día, la definición toma otra dimensión. (Feres, 2010).

El pensamiento sustentable desde mi punto de vista se basa en


hacerse entonces la siguiente pregunta: ¿Podré seguir indefinidamente
con este comportamiento o costumbre, y podrán también seguir mis hijos
y nietos?.

Está claro que la pregunta hay que hacérsela de manera global y


pensando a largo plazo y no siempre es fácil. También hay que
abstraerse del factor económico y pensar en los recursos. (Marlow, 2004).

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INDICE

Portada
Resumen
Introducción…………………………………………………………………..
CAPITULO I

Indicadores de sostenibilidad
Social……………………………………………………………………………

CAPITULO II

Indicadores economía-
Ambientales……………………………………………………………………

CAPITULO III

Indicadores Políticos-Social-
Salud…………………………………………………………………………….

CAPITULO IV

Conclusiones……………………………………………………………………

Referencias Bibliográficas…………………………………………………….

Referencias Electrónicas………………………………………………………

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INTRODUCCIÓN

Los indicadores se pueden definir como medidas en el tiempo de


las variables de un sistema que nos dan información sobre las tendencias
de éste, sobre aspectos concretos que nos interesa analizar. Éstos
pueden estar compuestos simplemente por una variable (número de
vehículos de un municipio) o por un grupo de ellas, como por ejemplo los
metros cuadrados de verde urbano por habitante y también pueden
encontrarse interrelacionadas formando índices complejos, como los
índices económicos.

Un indicador es un signo, típicamente medible, que puede reflejar


una característica cuantitativa o cualitativa, y que es importante para
hacer juicios sobre condiciones del sistema actual, pasado o hacia el
futuro. La formación de un juicio o decisión se facilita comparando las
condiciones existentes con un estándar o meta existentes. (Quiroga,
2001. Indicadores de Sostenibilidad ambiental y de desarrollo sostenible:
Estado del Arte y perspectivas. CEPAL, Santiago de Chile).

Los indicadores son un medio de simplificar una realidad compleja


centrándose en ciertos aspectos relevantes, de manera que queda
reducida a un número manejable de parámetros.

En la gestión ambiental se utilizan para tres propósitos: a)


suministrar información sintética para poder y evaluar las dimensiones de
los problemas; b) establecer objetivos; y c) controlar el cumplimiento de
los objetivos. Pueden utilizarse además para incrementar el grado de
conciencia ciudadana (Bermejo, 2001. Economía sostenible, principios
conceptos e instrumentos. Bakeaz, País Vasco)

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CAPITULO I

INDICADORES DE SOSTENIBILIDAD SOCIAL

Un indicador es un instrumento diseñado con el propósito de


ofrecer información orientada al diagnóstico, monitoreo y evaluación de un
fenómeno. Al mismo tiempo dan información en términos relativos,
permitiendo comparaciones, en el tiempo o en el espacio. (Jaramillo,
2012).

Según la entidad de World Wide Foundation WWF, los indicadores:

“son instrumentos destinados a simplificar, medir y comunicar eventos


complejos o tendencias”.

Cecchine también refiere acerca de los indicadores:

Que han estado presentes por muchísimo tiempo; decididamente


desde antes de los romanos. He aquí algunos indicadores que casi toda
la gente usa.

· Horas y minutos como indicadores de tiempo;

· Temperatura del cuerpo como indicador de salud;

· Resultados de exámenes como indicadores de progreso en los estudios

Existen diversos tipos de indicadores que sirven para medir


aspectos como la actividad económica, la productividad y desempeño de
las empresas, indicadores de gestión, indicadores de calidad e
indicadores sociales.

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 Indicadores Demográficos

Según el profesor Edgardo Sardón los indicadores demográficos son


instrumentos para cuantificar el estado y la dinámica de la población. Lo
que llevará a consideraciones de ciertas características de la población
que se requiera cuantificar: los que indicadores de de estado y de
movimiento:

Cada una de ellas tiene ciertos componentes:

a) Indicador de Estado:

Composición urbano-rural: Cu: P° Urb/P° rural por cada 1000 Hbts.

Densidad poblacional: Numero Total P°/Km2 por C Km2.

Tamaño de la población

Composición por sexo: Número de hombres/ Número de mujeres x K


=61.574.398/ 63.995.848 x 100 =96,2. Entonces en 1995, había 96
hombres por cada 100 mujeres en Japón.(fuente: PRB. Guía rápida de
Población) CD Room 2004. www.prb.org) pg. 6.

b) Indicador de Movimiento:

Tasa(*) bruta de natalidad: TBN=Nv/Df (1000) Ejemplo:

TNB = 78178/3810179 = 0,0205 (1000) = 21 nacimientos por C/1000


personas en el año 2000.

Tasa bruta de mortalidad: TBM=Df/ Nv (1000) Ejemplo:


TBM=14630/3810179 = 0,0038 (1000) = 4 muertes por C/1000 personas
en Costa Rica en el año 2000.

Tasa de Mortalidad infantil: TMI= Número de muertes de menores de 1


año durante un año./nacidos vivos en ese año x K. Donde 10016/596816

8
= 0.0167 (1000) = 16.7 Entonces hubo 17 muertes de niños menores de
un año por C/ mil nacidos en Venezuela durante 1996.

Tasa de crecimiento

Tiempo de duplicación de la población

Tasa de fecundidad general

Esperanza de vida al nacer

Etc.

 Indicadores Sociales:

Según Simone Cecchine. Los indicadores sociales: “son instrumentos


de medición del bienestar social de las personas fundamentalmente. O los
indicadores sociales dan cuenta de la situación social de un país o de una
región.

Se entiende por “social”, por un lado, lo relacionado a las condiciones


de bienestar de los miembros de una sociedad y por otro lado, la forma
como se satisfacen las necesidades de esa misma sociedad. (Bocaz,
2012)

Ahora bien, los indicadores sociales normalmente se relacionan con


los niveles educativos de la población y la asistencia escolar; el acceso a
servicios de salud (incluso más que el estado de salud propiamente
dicho); los niveles de nutrición y la esperanza de vida; las condiciones de
la vivienda y del medio ambiente; el acceso y la disponibilidad de agua
potable y de otros servicios domiciliarios considerados básicos; el grado
de violencia del entorno.

En resumen, los indicadores sociales deben dar cuenta del estado de


bienestar de la sociedad y del grado de satisfacción de las necesidades,
analizando su comportamiento temporal y espacial.(Feres, 2010).

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 Área Temática Sub-área temática

1. Bienestar 1.1 Pobreza

1.2Distribución del ingreso

1.3hambre y desnutrición

2. Trabajo 2.1Empleo, desempleo y subempleo

2.2 Remuneraciones y calidad del subempleo

3. Educación 3.1 Cobertura

3.2Impacto y rendimiento

3.3Recursos

4. Salud 4.1Mortalidad

4.2 Fecundidad, saludre productiva y lactancia materna.

4.3 Morbilidad

4.4 Cobertura

4.5 Recursos

5. Género 5.1participación en la actividad económica

5.2La mujer y la pobreza

5.3Educación y capacitación de la mujer

5.4Participación Política de la mujer

5.5Violencia contra la Mujer

6. Vivienda servicios Básicos

6.1 Tenencia y tipos de vivienda

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6.2. Servicios básicos

7. Población 7.1Tamaño, estructura y distribución

Geográfica de la población

7.2Crecimiento de la población

7.3Migración

7.4Familias

8. Economía 8.1 Producto

8.2Precios

8.3Gasto público social

8.4Deuda

 Utilidad de los indicadores sociales

De esta manera, los indicadores son aspectos fundamentales para


evaluar, dar seguimiento y predecir tendencias de la situación de un país,
un estado o una región en lo referente a su economía, sociedad,
desarrollo humano, etc., así como para valorar el desempeño institucional
encaminado a lograr las metas y objetivos fijados encada uno de los
ámbitos de acción de los programas de gobierno. (Galván, 2012).

Por lo tanto, la comparabilidad del desarrollo económico y social es


otra de las funciones de los indicadores, ya que estamos inscritos en una
cultura donde el valor asignado a los objetos, logros o situaciones sólo
adquiere sentido respecto a la situación de otros contextos, personas y
poblaciones, es decir, es el valor relativo de las cosas lo que les da un
significado.

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 Características

Deben mostrarse especificando la meta u objetivo a que se vinculan


y/o a la política a la que se pretende dar seguimiento; para cumplirlas se
recomienda que los indicadores sean pocos.

Por consiguiente, los indicadores no son exclusivos de una acción


específica; uno puede servir para estimar el impacto de dos o más hechos
o políticas, o viceversa.

Para cada indicador debe existir una definición, fórmula de cálculo y


metadatos necesarios para su mejor entendimiento y socialización.

Por lo anterior, es importante que el indicador sea confiable, exacto en


cuanto a su metodología de cálculo y consistente, permitiendo expresar el
mismo mensaje o producir la misma conclusión si la medición es llevada a
cabo con diferentes herramientas, por distintas personas, en similares
circunstancias.( Marlow, 2004).

 Tipos de indicadores sociales

Según Simone Cecchini los indicadores sociales pueden ser, entre otros:

 De Hechos y de Percepciones

Mediante la información proporcionada por los indicadores sociales se


puede definir de hechos cuando intenta mostrarla condición de un
fenómeno social o sus cambios en el tiempo (por ejemplo, la tasa neta de
matrícula en las escuelas).
Cuando un indicador trata manifestarla percepción que tiene una
comunidad o los diferentes grupos e individuos que la constituyen– acerca
de una condición objetiva (por ejemplo, el nivel de satisfacción de una
comunidad con sus escuelas).

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 Los indicadores sociales cuantitativos

Derivan de métodos que recogen información principalmente en


formato numérico o en categorías pre-codificadas, mientras que la
información utilizada para construir indicadores cualitativos proviene
mayoritariamente de textos descriptivos sin, o con poca, categorización y
sin pre-codificación.

 Los indicadores absolutos

Pueden ser expresados en los términos en que se realiza la medición


(por ejemplo, población total), o derivados mediante un proceso de cálculo
que relacione dicha medición con otras magnitudes (por ejemplo, tasa de
crecimiento de la población).
La expresión de los indicadores en términos relativos facilita la
comparación entre países.

 Los indicadores sociales simples

Son síntesis, series o selecciones de datos básicos que se usan para


analizar algún aspecto determinado de las condiciones de vida; (se
refieren a una sola variable).

 Los indicadores compuestos (o “índices”)

Por otra parte, representan tendencias en el bienestar o los servicios


sociales que incluyen diversos y amplios aspectos. Para compilar los
indicadores compuestos, hay que utilizar una combinación ponderada de
indicadores de los factores subyacentes; por lo tanto, la cifra resultante de
esta combinación se refiere a más de una variable.

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 Los indicadores intermedios

Serían aquellos que miden los factores que propician la consecución


del objetivo. Existen indicadoresintermedios de “factor causal”, y de
“producto”, no son objetivos en sí mismos, sino más bien ayudan a
conseguir los objetivos seleccionados.

 Los indicadores finales

Son los que miden el efecto de una intervención en el bienestar de los


individuos. A su vez, se dividen en indicadores de “resultado” y “de
impacto”.
Los indicadores de resultado miden el acceso, uso y satisfacción con
los servicios públicos que per se no son dimensiones del bienestar,
mientras que los indicadores de impacto miden las dimensiones
esenciales del bienestar.

En el ámbito de la evaluación de programas y proyectos es importante


también mencionar los indicadores de eficacia y de eficiencia.

 Los indicadores de eficacia

Miden el grado en que una política o programa social es capaz de


alcanzar las metas y objetivos definidos, en el tiempo previsto y con la
calidad esperada, pero sin tener en cuenta los costos.

 Los indicadores de eficiencia

A su vez, miden la relación entre productos obtenidos y costos. En


análisis de salud de los países, por ejemplo, se pueden utilizar datos
sobre tasas de inmunizaciones o de mortalidad infantil junto con datos
sobre gastos totales o per cápita en salud para dar una idea delo que se
gasta para generar resultados.
 Construcción de indicadores

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Se dice que la construcción de indicadores requiere un marco legal,
programático y normativo (nacional y/o internacional) que establece las
necesidades de información para medir o analizar la situación de la
economía, la sociedad, la población o el medio ambiente, respecto a
determinados valores o metas perseguidos.(Marlow 2004).

En el caso de los indicadores sociales no existe un marco conceptual


que permita integrar todos los indicadores en un único sistema, al
contrario de lo que ocurre en el ámbito económico con el sistema de
cuentas nacionales. (Marlow 2004).

 Obtención de indicadores

¿De dónde se obtiene la información de las variables con las cuales se


elaboran los indicadores sociales?

Se obtienen de distintas fuentes:

a) Información censal

Cuando la información se recoge para toda la población (universo de


estudio), ésta es censal.

b) Información tomada de encuestas

Con las técnicas de muestreo, es posible obtener información


estadística sin necesidad de investigar a toda la población; con muestras
representativas, o de grupos de ella, es posible estudiar muchos
fenómenos a través de encuestas.

En el campo social hay otro tipo de encuestas que son también de


gran importancia como la de Calidad de Vida o como la de Demografía y
Salud. (Jaramillo, 2012).

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c) Información tomada de fuentes administrativas

Otras estadísticas se pueden obtener de la información que


guardan las instituciones encargadas de prestar diferentes servicios
(salud, educación y justicia por mencionar algunos casos).

d) Otras fuentes no estadísticas

Otra fuente de información, que es muy útil para comprender los


fenómenos sociales es el estudio de caso (por ejemplo en hogares).

 Clasificación de los indicadores

Según Feres, 2004 los indicadores se clasifican en:

a) Los indicadores sectoriales

Expresan de manera simple, información detallada en cada sector


social. Estos indicadores describen la coyuntura y permiten monitorear y
evaluar los logros de políticas específicas asociadas a cada uno de ellos
(Educación, Salud, Vivienda y Servicios Públicos, Demografía, Empleo e
Ingresos).

b) Los indicadores globales

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Suministran una visión general o global de la situación de cada uno
de los sectores que intervienen en la determinación de la calidad de vida
de la población. Entran en esta categoría los gastos sociales e
indicadores globales de demografía y salud.

c) Los indicadores compuestos

Involucran las diferentes dimensiones sociales y la complejidad de


la vida en medidas de resumen de la calidad de vida de la población
(Línea de pobreza, Línea de indigencia, Índice de Calidad de Vida) y los
de Desarrollo Humano (Índice de Desarrollo Humano, índice de Desarrollo
Relativo al Género, Índice de Potenciación de Género).

Según Marlow, 2012.El desarrollo sustentable se origina del hecho


de tener unos recursos naturales limitados (nutrientes en el suelo, agua
potable, minerales, etc.), susceptibles de agotarse, de la misma manera
una creciente actividad económica sin más criterio que el económico
produce, tanto a escala local como planetaria, graves problemas
medioambientales que pueden llegar a ser irreversibles.

Según la CEPAL. En América Latina, más de la mitad de la


población rural es pobre, según un informe preparado por la Organización
de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación, conocida
como FAO, Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal)
y la Organización Internacional del Trabajo (OIT), cuyas conclusiones
sirvieron de base para la organización de un seminario conjunto sobre
Mercado de Trabajo y Pobreza Rural.

Las tres agencias de Naciones Unidas concluyeron que la


generación de trabajo decente en el sector agrícola de Latinoamérica es
indispensable, para combatir la persistente pobreza rural, y decidieron

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actuar de manera conjunta para respaldar la creación de más y mejores
empleos en la región. El informe Políticas de mercado de trabajo y
pobreza rural en América Latina, preparado por la FAO con la
colaboración de la CEPAL y la OIT, indica que “pese al crecimiento
económico registrado por América Latina durante gran parte de la última
década, al aumento de las agro-exportaciones y al auge agrícola, la
pobreza entre la población rural bajó sólo de 60 a 52 por ciento entre
1980 y 2008.

La investigación señala el predominio de los trabajos informales en


las zonas agrícolas de la región y en ellos generalmente no se cumplen
las leyes vigentes referidas a salario mínimo o a protección social como
tampoco lo relacionado con derecho laboral.

Por el contrario, los autores del informe destacan la necesidad de


cumplir con la normativa laboral y la formalización de empleo, para reducir
la pobreza. Insisten en que el incumplimiento de las normas laborales es
responsable en gran parte de la pobreza en las zonas rurales
latinoamericanas.

El director regional de la OIT para América Latina y el Caribe, Jean


Maninat, explicó que durante la crisis internacional los países pusieron en
práctica políticas para promover el trabajo formal, y esa fue “una decisión
política muy relevante para estos tiempos. Sin empleo para las personas
el crecimiento no es sostenible, y la gobernabilidad se debilita”.
Educación y capacitación.

Durante su intervención, Alicia Bárcena, secretaria ejecutiva de la


CEPAL, planteó que “el empleo es la llave maestra para resolver la
desigualdad, por eso urge fortalecer en América Latina y el Caribe las
capacidades nacionales para lograr convergencia productiva, reducir la

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heterogeneidad estructural, cerrar brechas de productividad y alcanzar un
nuevo pacto fiscal que permita al Estado distribuir mejor los recursos”.
El representante regional de la FAO para América Latina y el Caribe, José
Graziano da Silva, propuso un cambio de la situación, cumpliendo con la
normativa laboral vigente, formalización del empleo, además de una
mejora en los contratos y una ampliación de la seguridad social mediante
el fortalecimiento de las capacidades de los trabajadores
proporcionándoles educación y capacitación.

CAPITULO II

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INDICADORES DE ECONOMÍA Y AMBIENTE

Los modelos con micro-fundamentos en donde el tipo de cambio es


una variable relevante son una opción para la introducción del dinero en la
función de utilidad porque los agentes mantienen dinero en su función de
utilidad, ya que el dinero permite ahorrar tiempo en las transacciones y,
por lo tanto, se consigue más tiempo de ocio. Este modelo presenta
varias limitaciones que serán destacadas en su oportunidad y que serán,
posteriormente, enmendadas con un enfoque estocástico. (Téllez, 2012).

Es así, que en el presente artículo se menciona los Unidos,


España, Francia e Italia, los deudores son especialmente instituciones
financieras; si se observa la deuda doméstica, se encuentra que un
porcentaje considerable de ésta es obligación de empresas productivas,
lo que ocurre por ejemplo en Estados Unidos, Francia, Italia y Japón;
destaca también que en otros casos, como en Brasil, Argentina, China y
México, que el principal deudor es el gobierno. (Velásquez 2011).

Mediante la independencia del análisis económico que Keynes


(1967) realiza en el postulado de la teoría del empleo, en una perspectiva
social se puede asumir que el trabajo constituye un derecho del ser
humano, y su papel se fundamenta en la construcción del eje de una
sociedad, por lo que su escasez normalmente se asocia con el
subdesarrollo y la pobreza.

El Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD,


2009), indica que el proceso de industrialización experimentado por
muchas de las economías de América Latina presenta un deficiente
crecimiento y una persistente continuidad de la pobreza caracterizados
por las brechas en el ingreso entre ricos y pobres. En el caso de México,
se experimenta un persistente deterioro entre el crecimiento del Producto
Interno Bruto (PIB), y la generación de empleo desde 1950 hasta la

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actualidad, lo que ha conducido a un deterioro de la calidad de vida de la
población. Los diversos estudios sobre el tema han demostrado que a
pesar de los grandes cambios económicos ocurridos en México, durante
las últimas tres décadas, el contexto laboral ha sufrido una gran erosión, y
actualmente presenta grandes retrocesos que devienen de la
metamorfosis económica emprendida por el propio país. Es decir, su
integración al sistema internacional desde el primer tercio de la década de
los ochenta, ha permitido la entronización del sentido empresarial, y la
autorregulación de los mercados sobre la economía, lo que ha implicado
no el retiro del Estado, sino un fuerte replanteamiento de su propio papel.

Pues, la evidencia actual indica que la adopción del modelo de libre


mercado en México ha conducido a un lento y limitado crecimiento de la
economía y, en consecuencia en una ingente incapacidad para la
creación de empleos, situación que ha generado una mayor
concentración en las actividades de baja productividad, incrementos en la
informalidad y un deterioro en las condiciones laborales. (Cruz 2012).

A este respecto, la ciencia, en particular la social, en cuanto


producto de determinadas condiciones (de tiempo y lugar) y relaciones
sociales, conlleva a desacuerdos que se derivan del lugar y de la posición
que asume una comunidad científica frente a las consecuencias sociales
de un conocimiento dado. Las diferencias de interpretación y del modo de
hacer ciencia denotan la posibilidad de que el analista social o una
comunidad científica en tanto que es parte activa en la producción de
conocimiento y en función de la relación que entabla con respecto al
objeto de estudio: lo social, asuma como cierto (científico) un
conocimiento distinto y hasta contrapuesto al que es reivindicado por
otros miembros de la comunidad.

De esta manera, esta idea del modo en que se constituye la ciencia


difiere de la visión tradicional y positivista, que pondera el trabajo

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científico como una tarea individual y personal, guiado por hallazgos
azarosos que sólo la genialidad puede comprender y ordenar o
sistematizar científicamente. El conocimiento científico, como producto de
un descubrimiento, es para invalidar y desechar el conocimiento
contrapuesto y convertirlo en un prejuicio, en un conocimiento falso. En
términos de las ciencias sociales, la ideología es parte de la ciencia y del
conocimiento.

En efecto, el marco de la teoría del conocimiento, el problema


puede simplificarse en torno a la idea de que el conocimiento es un reflejo
de la realidad externa, es un principio de todo científico materialista; la
controversia aparece cuando quiere explicarse el modo en que se
construye ese reflejo. Al respecto se han elaborado genéricamente dos
razonamientos.

Por un lado, la posición empirista, que supone que a partir del dato
o los símbolos dados por la realidad se estructura la percepción a través
de sensaciones. El conocimiento es conferido por las características,
cualidades, propiedades, atributos o especificidades, que los objetos (la
realidad o lo social) poseen por sí mismos (la realidad es tal como se ve).

En esta primera posición, podrían considerarse a las corrientes


interesadas en indagar la manera en que se estructura el sistema de
percepciones y, mediante ello, la acción social del individuo. Por ejemplo,
desde la lingüística, la ciencia política, e inclusive las teorías del
individualismo metodológico en la sociología. (Martínez 2012).

En términos agregados, el escenario económico actual muestra la


contracción del producto, la reducción en la inversión productiva, el
incremento de las obligaciones financieras y la acentuación de la
demanda de títulos financieros. En el Cuadro 1, se muestra la contracción
generalizada del producto en el año 2009, situación que ya era previsible
desde 2008. En el Cuadro 2 se muestra la expansión de la deuda pública

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en los últimos doce años, este hecho ha sido muy notorio en varios países
europeos como en Alemania, Francia, Grecia, Irlanda, Italia, Portugal y el
Reino Unido. La simple comparación entre los datos de los cuadros 1 y 2
evidencia que la expansión de la deuda pública, no ha repercutido
favorablemente en los niveles de producción; esta circunstancia permite
suponer entonces que el gasto público se ha dirigido hacia el gasto
corriente, o bien, hacia el cumplimiento de los compromisos financieros
(cayéndose en una estructura pública tipo Ponzi).

A lo largo, de la evolución de la deuda en algunos países, se trata


de los saldos vigentes por deuda y por tipo de emisor; en algunos países
como Estados Unidos, España, Francia e Italia, los deudores son
especialmente instituciones financieras; si se observa la deuda doméstica,
se encuentra que un porcentaje considerable de ésta es obligación de
empresas productivas, lo que ocurre por ejemplo en Estados Unidos,
Francia, Italia y Japón; destaca también que en otros casos, como en
Brasil, Argentina, China y México, que el principal deudor es el gobierno.
(Rodríguez 2012).

Otro factor que puede estar repercutiendo en la disminución del


petróleo es la remoción, el color de la matriz del suelo testigo es pardo
grisáceo muy oscuro (10YR3/2) en el horizonte superficial (0-10/13 cm)
originado por la acumulación de MO, en los horizontes subyacentes
aumenta la intensidad del color a 3/8 respecto al superficial, debido a la
mayor cantidad de arena y al proceso de lavado vertical por el paso del
agua, aunque nuevamente disminuye cuatro unidades la intensidad al
pasar de 3/8 a 3/4, aparentemente por los procesos de reducción
existentes en el horizonte más profundo (93/97-105 cm). En el suelo
restaurado la matriz dominante es menos oscura (10YR3/3, pardo oscuro)
que la matriz del suelo testigo, posiblemente por la remoción y mezclado
del suelo extraído desde tres metros de profundidad, aunque puede ser
oscuro por la presencia de hasta 60000 mg/kg de petróleo. En cuanto a

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las motas y vetas del suelo testigo variaron de gris muy oscuro (10YR3/1)
por la presencia de materia orgánica en los horizontes 1 (0-10/13 cm) y 2
(10/13-15/23 cm) a pardo amarillento (10YR5/4) en el horizonte 1. El color
de las motas del suelo restaurado es contrastante con las del suelo
testigo ya que aumentaron tanto el brillo como la intensidad en el intervalo
de pardo amarillento (10YR5/8), amarillo (10YR7/8) a rojo claro (2.5Y6/6),
lo cual parece ser que se relaciona con el material alóctono sólido de
hasta 4 cm de ancho con óxidos de Fe. (Trujillo, 2012).

En la actualidad, la sociedad, sus regiones y países como Chile, se


han ido configurando a partir de una fuerte y creciente urbanización, de
una rápida transformación de sus procesos productivos, un acelerado
aumento de población y un alto desarrollo industrial (Altieri y Rojas 1999,
Ricaldi 1999, Quiroga 2001), los que han generado avances y beneficios,
pero también problemas socio ambientales complejos (Camus y Hayek
1998, INAP 2006) que afectan la calidad de vida de la población y ante los
cuales la capacidad institucional se ha visto sobrepasada (OCDE 2005).

Estos efectos, adversos de la modernidad no están exentos de


amenazas o daños, los cuales muchas veces se vuelven peligros o
riesgos para la sociedad. La probabilidad de que se hagan realidad las
externalidades negativas, expresadas en daños, y éstas estén asociadas
a determinadas decisiones a través de selecciones en pos de ciertos
cursos de acción, es lo que entenderemos como riesgos en una sociedad
moderna (Luhmann 1992). Por lo tanto, el manejo de los riesgos estará
ligado a las formas de decisión y a la previsión en torno a los cambios
indeseados que tales decisiones generan y que impactan en la calidad de
vida de las personas.

Estas últimas, así como diversos tipos de organizaciones, muchas


veces ignoradas y poco partícipes en la definición y acciones ante los
riesgos, dejan la responsabilidad de la construcción y “visibilización” a los

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expertos, principalmente aquellas instituciones que tienen la potestad de
la acciones o por lo menos de la tematización de aquellas amenazas
presentes en la sociedad. (Oñate 2012).

En la medida que la determinación de HTP y sus fracciones fue


utilizada la metodología USEPA 8015, que determina compuestos
orgánicos no halogenados a través de cromatografía gaseosa, acoplada a
un detector de ionización de llama. Los extractos orgánicos fueron
obtenidos siguiendo el método USEPA 3540C (Soxhlet extraction) y la
preparación previa a la cromatografía siguió el método USEPA 3630C
(Silica gel cleanup). Los valores de HTP consideran los resultados de
HTP en las fracciones de gasolina, querosén, diesel y aceite combustible,
así como la fracción no resuelta en el cromatograma.

Por lo tanto, fueron determinados los tenores de criseno (CHR) y


de benzo(a)pireno (BaP) por cromatografía gaseosa acoplada a
espectrometría de masas, de acuerdo con el método USEPA 8270 C.Los
extractos orgánicos fueron obtenidos siguiendo el método USEPA 3540C
y la preparación previa a la cromatografía siguió el método USEPA
3630C. Todas las determinaciones fueron realizadas por triplicado.
(Oliveira, 2012).

Dentro de este marco, el diseño del Programa de Comunicación de


Riesgos Los elementos del programa de CR fueron los siguientes: La
fuente. Este papel lo llevó a cabo El Consorcio Académico: Niño, Casa,
Ambiente y Salud (CANICAS), integrado por profesores-investigadores y
estudiantes de posgrado y de licenciatura de la Facultad de Medicina y de
la Facultad de Ciencias Químicas de la UASLP, de septiembre de 2003 a
octubre de 2005. El trabajo desarrollado por la fuente fue tanto el diseño y
la implementación del PCR, como la evaluación del mismo.

25
En efecto, la audiencia estuvo integrada por niños, niñas, padres
de familia y maestros. La población infantil que participó en el PCR estuvo
compuesta de 142 niños y niñas con un rango de edad de cinco a doce
años. Este rango de edad se consideró ya que por su etapa de desarrollo
y por las actividades propias de los niños, los hace el grupo más
susceptible a los efectos de los contaminantes.

De hecho, el programa se aplicó durante dos ciclos escolares en


diferentes escuelas que se encuentran en el área contaminada con Pb y
As de la zona de Villa de la Paz y Matehuala. Entre estas escuelas se
encuentra la “Escuela Primaria Benito Juárez” ubicada en la zona urbana
de Villa de la Paz y muy cercana a la mina. Otro centro escolar
seleccionado fue el “Jardín de Niños José Cerrillo”, el cual está ubicado
frente a la quebradora, que es donde se lleva a cabo el proceso de
trituración del mineral. También se seleccionaron escuelas ubicadas en la
colonia Real de Minas y en la comunidad del Carmen, entre éstas el
“Jardín de Niños David Alfaro Siqueiros” y la “Escuela Primaria Jaime
Torres Bodet” respectivamente, ya que la primera se encuentra enfrente,
y la segunda cercana a los residuos mineros llamados “jales”. En
Matehuala también se seleccionó una escuela, la cual fue el “Jardín de
Niños María de la Luz Castillo”, que se encuentra a las afueras de
Matehuala rumbo a Villa de la Paz, cercana a los jales mineros. (Salas,
2012).

En este sentido, la acumulación de metales pesados en tejidos


vegetales por absorción u otras formas de asociación natural, da la
posibilidad de ser biodisponibles a los seres humanos y animales a través
del consumo de estos productos (Brun et al. 2001, Gincchio et al. 2002,
Prieto García et al. 2005, Friesl et al. 2006). Esta posible vía de
exposición es particularmente relevante en el caso del maíz (Zea mays L.)
ya que es un alimento básico de la dieta de los mexicanos, y su cultivo
constituye una actividad importante para la sobrevivencia de la familia

26
campesina, por lo que el impacto generado por los residuos mineros
representa un problema de salud, ambiental y social. En trabajos previos,
Kabata-Pendias y Pendias (2001) reportaron valores de concentraciones
de metales para granos de maíz dulce en el intervalo de Cu 1.4 a 2.1, Zn
25 a 36, As 0.03 a 0.4 y Pb 0.3 a 3.0 mg/kg.

En la medida, que el desarrollo del maíz es afectado por algunos


elementos metálicos que se refleja en los diferentes órganos y tejidos que
pueden presentar algunos cambios estructurales (Malkowski et al. 2002,
Souza et al. 2005, Pál et al. 2006; Shen et al. 2006) lo que altera también
su rendimiento. Aunado a esto, en la región minera de Taxco no existen
muchos estudios relacionados con la transferencia de metales entre el
suelo y las plantas. Los trabajos más representativos son los generados
por Talavera et al. (2002) y Torre Martínez (2001) quienes determinaron el
impacto de los residuos mineros sobre suelos de cultivo y urbanos de la
zona, mientras que Díaz-Villaseñor (2006), evaluó la transferencia de
metales entre suelo y plantas de maíz que crecieron en terrenos
afectados por jales mineros. Cabe señalar que esas plantas, además de
estar expuestas a suelos contaminados pueden haber recibido metales y
metaloides directamente en las partes aéreas (debido al transporte de
partículas de jales) y en las raíces por absorción directa de agua de riego
contaminada. (Huerta, 2012).

CAPITULO III
INDICADORES DE POLITICA-SOCIAL-SALUD

27
Debe señalarse, el siguiente artículo como un agente, de la corte
suprema de Justicia (csJ) declaró inconstitucional los artículos 215 inciso
2º numeral 5; inciso 1º; 238; 239 inciso 1º; 250 inciso 1º; 253-c, inciso 3º;
y 262 inciso 6º del código electoral. Fundamentalmente, para la corte, es
inconstitucional exigir constancia de afiliación partidaria a los candidatos a
elección para la asamblea Legislativa. Además, considera que las listas
cerradas y bloqueadas menoscaban los derechos de los ciudadanos a
ejercer el sufragio de manera libre responsables de los partidos
interpretaron dicha decisión como una intromisión indebida de los
magistrados en una materia que les corresponde exclusivamente.

De esta manera, la primera reacción de los partidos fue aprobar


una reforma constitucional que estipulara claramente el requisito de
afiliación a un partido político como condición para ser candidato tanto a
la asamblea Legislativa como a los concejos municipales (El Faro, 2010).
Luego convocaron a ex presidentes de la corte suprema de Justicia para
que analizaran la decisión de los magistrados y que dijeran si estaba
reñida o no con la constitución. De esta manera, buscaban argumento
para la destitución de dichos magistrados. Por lo menos dos ex
presidentes de la csj dieron la razón a los diputados. Manifestaron su
desacuerdo con la sentencia de la sala y abogaron claramente por la
destitución de dichos magistrados. Hubo quien incluso sostuviera,
Mauricio Gutiérrez. (Reserve, 2012).

Dentro de este marco, luego de sufrir las consecuencias de la crisis


internacional, la economía paraguaya se recuperó con fuerza inusitada en
2010 y mantuvo el ritmo hasta mediados de 2011. en el segundo
semestre del año la aparición de un brote de fiebre aftosa en el
departamento de san Pedro afectó adversamente las exportaciones
cárnicas y el sector de la industria frigorífica. Con posterioridad, una

28
sequía prolongada castigó la producción agrícola y augura un año 2012
de menor crecimiento aunque las previsiones son aún muy preliminares.

De este modo, la inflación se mantuvo bajo control disminuyendo


del 7,2 por ciento interanual a diciembre de 2010 a 4,9 por ciento
interanual a diciembre 2011.mostraron también un saldo favorable pese al
déficit de la balanza comercial gracias a los ingresos de las binacionales
itaipú y Yacyretá, las remesas de los paraguayos en el exterior, y la
afluencia de capitales externos. El comportamiento de la política fiscal ha
sido sólido. en 2011 Paraguay cerró el octavo año consecutivo de
superávit fiscal primario, 1,4 por ciento del pib. La deuda externa
disminuyó del 18 por ciento del pib en 2007 a 9,8 por ciento en 2011.
(Abente , 2012).

Ahora bien , el balance de la economía boliviana para el 2011 ha


sido positivo, tal como muestran los informes económicos oficiales. Según
del ministerio de economía y Finanzas públicas el crecimiento del piB
proyectado para el 2011 es de 5,2%, con un 1,4% más que el PIB del año
2010. El crecimiento, como en años anteriores, se debe al incremento del
sector de hidrocarburos, gas y petróleo y minería. El superábit del sector
público no financiero se proyecta que estará en 0,8% como porcentaje del
PIB y el tesoro General de la nación tendrá un déficit de –0,5%. La
inflación acumulada a diciembre del 2011 fue de 6,9%.

En la medida, que la inversión directa extranjera después de la


drástica reducción de los años 2003-2006 logró recuperarse ya a partir de
2007; durante enero y junio de 2011 la inversión neta fue de us$ 319
millones de dólares, la cual fue superior en 63,7% a la inversión durante el
mismo periodo para 2010, aunque ésta todavía no alcanza los niveles
registrados en el 2000.

En este caso, la inversión nacional privada alcanzó u$s 1.100 millones


de dólares, siendo superior a la extranjera. La inversión pública durante el

29
2011 subió en un 34% con relación al año 2010; el sector de transportes
tuvo la mayor asignación presupuestaria (803.4 millones de dólares),
seguido de hidrocarburos (315.2 millones de dólares) y urbanismo y
vivienda (293.7 millones de dólares). como parte de la política del
gobierno de distribución de las riquezas y del nuevo modelo de desarrollo
del gobierno del presidente morales, se mantuvieron como en años
pasados los bonos Juancito pinto, renta dignidad y Bono madre-niño
Juana azurduy. De la misma forma se continuó con la recreación de
empresas públicas. (Deheza, 2012).

Es cierto, que los estados no son todos iguales, especialmente que no


disponen del mismo poder a nivel mundial, es uno de los pocos hechos
indisputables de la historia de la humanidad. pero una cosa es comparar
el poder que los estados tienen en la arena internacional y otra muy
distinta es comparar el poder que los estados proyectan sobre sus propias
sociedades. Brasil, por ejemplo, es el estado más poderoso de América
del sur en el sentido de que ningún otro país de la región podría derrotarlo
en una guerra mano a mano ni tiene similar influencia en foros de
seguridad internacional.

Sin embargo, al comparar el poder del estado brasileño con el del


estado chileno respecto de las capacidades para desarrollar sus propias
sociedades, las cosas se hacen más complejas. La disciplina de las
relaciones internacionales tiene formas simples y directas de
conceptualizar y medir el poder internacional de los estados,
esencialmente tamaño y dotación tecnológica de sus fuerzas armadas. en
cambio, la disciplina de la política comparada carece de conceptos e
indicadores igualmente inequívocos para trazar variaciones en términos
del poder nacional de los estados, es decir, del poder de controlar y
transformar la sociedad que nominalmente dominan.

30
A mediados de los ochenta, con la contribución de sociólogos políticos
“neo-weberianos” de las universidades estadounidenses, se consolidó
una tríada de conceptos para comparar el poder nacional de los estados:
legitimidad, autonomía y capacidad (Lac). “santa trinidad” de variables es
todavía el estado del arte en la disciplina. No es que la política comparada
como campo intelectual haya sido perezosa en actualizar y refinar sus
conceptos. Lo que explica la vigencia de viejos conceptos es que el
estado mismo fue eclipsado por reformas de mercado que lo desplazaron
como motor de cambio social precisamente en el mismo momento en que
la tríada Lac tomaba vuelo.

En lo esencial, la teoría neoweberiana del estado quedó trunca. La era


del neoliberalismo recortó protagonismo, y por ello interés, a su objeto de
estudio. Ahora bien, con la revalorización del papel del estado en el nuevo
siglo, la conceptualización del poder nacional del estado se ve forzada a
retomar allí donde había quedado antes del eclipse. Es preciso entonces
desempolvar los conceptos de legitimidad, capacidad y autonomía.
( Mazzuca, 2012).

Según la acertada expresión de Carlos real de azúa, el mLn-t no


fue una guerrilla sino un “movimiento político con armas”. Calculaban muy
cuidadosamente el impacto potencial de sus acciones en términos de
popularidad. No deja de ser paradójico: los tupamaros no supieron
organizar una guerrilla invencible, ni acelerar el proceso revolucionario, ni
fabricar un atajo hacia la insurrección popular. ni siquiera pudieron
participar en la Huelga General de 1973.
Pero, haciendo propaganda armada, comunicando sus ideas
mediante acciones arriesgadas e ingeniosas, utilizando pocas palabras
pero perfectamente comprensibles por el uruguayo medio,
comunicándose por medio de símbolos, conectando hábilmente su lucha
con las principales tradiciones revolucionarias del país y, muy

31
especialmente, con el artiguismo, demostraron que sí sabían cómo hacer
política (panizza, 1990).
En el fondo, lo mejor que tuvieron como guerrilleros fue lo que
tenían de políticos: picardía, intuición, capacidad de comunicación. Es
muy importante, para el argumento general, retener esta idea. Muchos,
como Raúl sendic y José mujica, habían hecho política sin armas, antes
de desencantarse del camino electoral y de encandilarse con la teoría del
foco. Sendic militó durante muchos años en el partido socialista de
Uruguay. Mujica, inició su carrera política en el partido nacional, más
específicamente en la fracción orientada por Luis Alberto de Herrera. en
este sentido, el caso del mLn-t lleva agua para el molino de Alison (2010)
acerca de la importancia de la experiencia política previa como variable
explicativa en el éxito de los procesos de transición de los movimientos
armados a maquinarias electorales.
Así se ha verificado, la principal diferencia entre los tupamaros y el
resto de la izquierda no tiene que ver con los objetivos políticos sino con
los procedimientos. Mientras que la izquierda comunista y socialista
asignaba una gran importancia a la elaboración teórica, la actuación
parlamentaria y la lucha electoral, los tupamaros pensaban que el ejemplo
cubano demostraba que “las condiciones subjetivas se crean luchando” y
que la lucha armada no sólo era la única vía a la revolución en américa
Latina sino el “principal método de lucha”, al que deberían subordinarse
todos los demás. para los tupamaros, la práctica revolucionaria era más
importante que la teoría revolucionaria. de hecho, lo dijeron y lo
escribieron reiteradamente: “la teoría surge de la práctica” y “no hay mejor
teoría revolucionaria que la que surge de las revoluciones hechas”.
( Garcé, 2012).

Es por ello que en otro estudio, de montesquieu fue dedicado a la


separación de poderes se inicia con el planteamiento de un problema
fundamental para la realización de la libertad: el poder político que puede

32
y debe garantizarla constituye en sí mismo un peligro para la libertad. sin
embargo, en la misma fórmula en la que el autor resume el problema del
poder anuncia también su solución: “es una experiencia eterna que todo
hombre que tiene poder siente inclinación a abusar de él, yendo hasta
donde encuentra límites” (2003: 205. el destacado es mío). La cuestión
radica entonces en encontrar una forma de limitar el poder que no invalide
su función como expresión y garante de la libertad de los ciudadanos.

Es por eso, este el problema al que pretende dar respuesta la


constitución inglesa descrita por montesquieu, a partir de un sistema de
distribución jurídica y social de las funciones del estado que permite que
“el poder contrarreste el poder”. el sistema jurídico distribuye el poder del
estado en tres órganos: el Legislativo ,representante de la voluntad
general del pueblo que expresa a través de las leyes; el ejecutivo,
encargado de dar cumplimiento a dicha voluntad, y el Judicial, que juzga
los delitos y las diferencias entre particulares.

Pero, además, el sistema comprende una serie de facultades y


procedimientos que permiten que estos órganos –específicamente el
Legislativo y el ejecutivo– participen de otro poder sin confundirse con él.
el Legislativo tiene la facultad de examinar las acciones del ejecutivo y
puede acusar a los ministros si considera que no actúan en conformidad
con lo dispuesto en la ley. El ejecutivo, por su parte, participa del poder
Legislativo a través del derecho a veto que le permite rechazar las
resoluciones del órgano legislador. Del mismo modo, el Legislativo sólo
puede sesionar a instancias del ejecutivo que lo convoca y durante el
período que este disponga; pero el ejecutivo está obligado a convocarlo al
menos una vez al año, para que resuelva sobre la recaudación de
impuestos y las fuerzas armadas. (Fuentes, 2012).

Bien, afirma Nietzsche en este artículo que no es posible definir


términos esencialmente históricos (Nietzsche, 1993: 91) y, en este caso,

33
su supuesto se cumple: no se puede hablar de hegemonía sin hacer
referencia a la enrevesada historia del marxismo como teoría social y
como orientación política. De plejanov a Laclau-mouffe puede registrarse
una compleja serie de cambios sociales y económicos, epistemológicos y
estratégico políticos, que hacen parecer quimérica la pretensión de definir
la hegemonía. Más aun cuando en la obra de Gramsci, a quien se debe la
versión más elaborada del concepto, coexisten múltiples y no
necesariamente congruentes usos del término (Anderson, 1998).

De este modo, puede decirse, sin embargo, contra la idea de


nietzsche, que la imposibilidad de dar una definición atemporal del
término debido a sus múltiples usos a lo largo de su historia, no impide
definirlo, por ejemplo, de manera estipulativa. Definir, al fin y al cabo, no
es una operación intelectual para la cual se precise necesariamente
recurrir al uso efectivo de un término por parte de una comunidad de
hablantes. De esta manera, omitiendo tanto el recorrido histórico por las
distintas acuñaciones del concepto de hegemonía como los debates
exegético-hermenéuticos en torno a la obra de Gramsci, puede más bien
fijarse una definición operativa del mismo que resulte adecuada para el
análisis político y se valore, en consecuencia, conforme a sus réditos
explicativos. (Ramírez, 2011).

Siendo esta, la investigación académica sobre reforma electoral,


como variable dependiente, se ha concentrado en tres puntos principales,
que se resumen a continuación. En primer lugar, existe amplia
investigación en torno a qué factores explican el inicio de reformas
electorales, y quiénes controlan el proceso reformista. Conforme a las
contribuciones de benoit (2007), López-pintor (2009) y renwick (2010), se
distinguen dos tipos de factores asociados al inicio de una reforma
electoral. por un lado, están los actores políticos propiamente tales, como
los partidos (los que por su centralidad en el proceso político son el
principal y más común agente de cambio), actores políticos no partidarios

34
(como los jefes del ejecutivo), actores externos (potencias extranjeras que
imponen un sistema electoral) y expertos (asesores de autoridades
eventualmente buscan modificar las reglas electorales).

Por el otro, existen condiciones sociales o históricas relevantes


para entender por qué se decide a favor de ciertas reglas electorales.
entre ellos destacan factores históricos (como cuando se recurre a
sistemas utilizados en otro tiempo para solucionar problemas actuales); la
heterogeneidad social (si ella es alta, un sistema proporcional sería más
útil), o la estructura económica (p.e., rogowski sostiene que mientras más
dependiente es un país del comercio exterior, más probabilidad hay de
que se establezca un sistema proporcional) (benoit, 2007: 374-376).

En cuanto, al control del proceso reformista, renwick define dos


tipos de reforma, de los cuales deriva una tipología sobre su carácter
(2010: 10). La primera es aquella en que los políticos retienen el control
del proceso de reforma. si ello es así, corresponde establecer si ellos
consideran al sistema electoral como una institución “redistributiva” (que
mejora las condiciones de un grupo a expensas de otro), o “eficiente”
(aquella que, respecto del statu quo, mejora la posición de todos o casi
todos los actores). Luego, a partir de esta distinción, se definen dos
categorías de reforma: a) si un partido o grupo de ellos la impulsa para
mejorar su posición electoral y/o perjudicar la de otro, ella será una
reforma by elite majority imposition; b) si ella es “eficiente” y tiene amplio
apoyo, será una reforma by elite settlement.

Por otra parte, la segunda es aquella en la que los políticos pierden


el control, caso en que conforme a renwick existen distintos actores que
pueden adquirir relevancia, como los jueces, actores externos o los
ciudadanos (p.e., si existe posibilidad de referéndum) (2010: 13-17).
Luego, si ello sucede, se distinguen otras dos categorías: las que son
producto de una interacción entre la élite y otros actores (p.e. jueces),

35
elite-external interaction; y la que surge de la interacción entre élite y
ciudadanos: elite-mass interaction. (Gamboa, 2011).

Cabe considerar, que la segunda mitad de la década de los


ochenta supuso la aparición de un nuevo modelo para el desarrollo del
territorio desde lo local; no obstante, la perspectiva macro daba muestras
de su incapacidad operativa para reactivar la economía española tras la
crisis vivida –inicialmente a nivel mundial– en la década de los setenta y
posteriormente con su prolongación hasta finales de los ochenta. Ello
dejaba paso a una actuación donde lo micro cobraba una importancia
máxima.

De allí, el desarrollo de abajo a arriba (Alburquerque, 2002: 54) se


convertía en la directriz básica para hacer frente a esta situación de crisis
socioeconómica. Reactivar el territorio suponía redefinir las actuaciones y
las dinámicas desde lo pequeño. Lo rural que había sido abandonado
años atrás debido al avance del modelo de producción fordista volvía a
adquirir una dimensión fundamental.

En resumidas cuentas, el desarrollo desde lo local es una


concepción en la que la dinamización de los procesos económicos
devuelve el protagonismo al territorio y a su población (Madoery, 2001:
125).Estas estrategias de desarrollo endógeno (Vázquez Barquero, 1988,
2000a, 2000b; Pérez, 2000a: 117; Pérez y Carrillo, 2000; Rubio, 2000;
Sanchis, 2000a: 158; Moltó y Hernández, 2002: 177) pretenden la
activación de las potencialidades de los recursos y las dinámicas
existentes en el ámbito local, y el fomento y la estimulación de la actividad
productiva endógena de forma eficaz, coherente e integrada,
complementándolos con las oportunidades que el entorno pueda generar
para dar solución a los problemas concretos, en un enfoque territorial de
abajo-arriba.

36
Asimismo, estas actuaciones constituyen una vía emergente para
abordar de manera eficaz los procesos de desarrollo local (Esparcia,
2009: 272). Primero, diseñando respuestas imaginativas al problema del
paro, entre las que se incluyen experiencias como las iniciativas locales
de empleo que se han revelado eficaces en la creación de ocupación
(Greffe, 1990; Vázquez Barquero, 1993: 201; Muiños y Cortegiano, 1998;
Alós, 1999; Sánchez, 2000: 133; CCE, 2001; Banyuls et al., 2002).
Posteriormente, elaborando estrategias de desarrollo local que ofrecen
nuevos horizontes de promoción a sus comunidades (Salom, 2001: 13).

En este sentido, los recursos endógenos existentes en el territorio


se convierten en los elementos centrales del nuevo modelo, por lo que su
conocimiento es determinante para la consecución de sus objetivos.
( Palomares, 2011).

Por lo tanto, si hubiésemos de resumir la línea evolutiva de la


política ambiental en España durante las últimas décadas, habríamos de
incidir necesariamente en la idea de la influencia de las políticas europeas
(Aguilar, 1997, 2003; Arias y Valencia, 2004; Navarro, 1999). El caso de la
CAPV no va a ser contrario a esta pauta, si bien ello no equivale a
sostener que la inclusión de las cuestiones ambientales en la agenda
pública fuese producto exclusivamente del ingreso en la Comunidad
Económica Europea; en realidad, determinadas actuaciones públicas en
materia medioambiental habían venido dándose en Euskadi desde la
década de los setenta, motivadas en un principio por el problema de la
contaminación atmosférica y del agua (De la Peña y Barcena, 2012).

Sin embargo, queda fuera de toda duda la influencia que a partir de


1986 habría de tener la integración en el espacio europeo, no solo en el
aspecto sustantivo de las políticas ambientales, sino también en su
enfoque.

37
Dicho de otro modo, un punto de inflexión claro en la evolución de
estas políticas podemos situarloen 1998. En esa fecha se elabora la Ley
3/1998, de 27 de febrero, general de protección del medio ambiente del
País Vasco (Boletín Oficial del País Vasco, 27 de marzo de 1998), donde
se integran explícitamente los conceptos de Desarrollo Sostenible y
participación, como venían siendo recogidos en los Planes de Acción
Medioambiental europeos (Aguilar, 2003; Font, 2000).

Por esto, el influjo europeo de la norma viene explicitado en su


propia exposición de motivos y se transmite, sobre todo, al abrir una
nueva fase que podríamos definir como el nacimiento de la planificación
estratégica en la política ambiental, puesto que como mandato de la Ley
3/1998 se elabora la Estrategia Ambiental Vasca de Desarrollo Sostenible
2002-2020 (EAVDS) y, en desarrollo de ésta, los sucesivos programas
marco ambientales (PMA)políticas ambientales tratarán de ser elaboradas
mediante una participación lo más amplia posible, por lo que se crea el
Consejo Asesor de Medio Ambiente (CAMA), se revaloriza el papel de
otros consejos consultivos que ya existían y se recurre a procesos
participativos ad-hoc para la elaboración de la planificación. Es esa fase
iniciada entonces la que hemos elegido para examinar la configuración de
la red de actores. (De la Peña, 2011).

Por lo demás, ellos destacamos la visibilización de la profundidad


histórica construida en base a los asentamientos de la población originaria
y de los grupos de migrantes que arribaron a la Provincia. El territorio de
la actual provincia de Misiones, como parte de las Misiones Jesuíticas, no
quedó al margen de los sucesos acaecidos a fines del siglo XVIII, ante la
desestructuración reduccional producida por la expulsión de Jesuitas
(1767). Yolanda Urquiza señala que "en esta región se reconocen rasgos
comunes, que sobrevivieron a los sucesivos aportes étnicos y aún a su
transformación en un espacio trasnacional" (Urquiza, 2002: 158). La
organización productiva y la configuración de un corpus cultural y

38
simbólico favorecieron la conformación de una población que no
reconoció las fronteras políticas. (Gallero, 2012).

Ahora bien, la "inespecificidad seductora" del planteo de Barth


también nos obliga a preguntarnos cuál es la especificidad de las
identidades etarias entre todas las identidades sociales que funcionan con
el mismo principio de adscripción por contraste. Como ya se dijo, las
construcciones etarias, al igual que las étnicas, son objeto de disputas
que generan una arena en la que emergen subjetividades que cargan
con interpelaciones diversas. La categoría "joven" ha sido objeto de
proyección de utopías tanto de la incorporación y la asimilación total,
como de la disidencia y la rebeldía (Reguillo Cruz, op.cit.). De hecho, el
activismo mapuche de los ochenta y noventa del que hoy los jóvenes
mapuche se diferencian, fue definido por algunos investigadores como
una propuesta "joven", asociando esta categoría con la práctica política de
cuestionar significados hegemónicos (Radovich, op.cit.).

De esta manera, la pregunta entonces tiene que ver con el uso de


esa categoría para articular planteos políticos que ingresan en el espacio
público con prácticas y discursos particulares. El sistema de alteridades
etarias, a diferencia de otras construcciones de alteridad, garantiza y
naturaliza el pasaje de los sujetos de una categoría a otra a través de la
conformación de entidades colectivas que comúnmente denominamos
"generaciones".

Entonces, más que las disputas en torno a la construcción de lo


joven, me interesa el proceso de construcción de cohortes de edad -de
generaciones en tanto instancias de articulación que implican a la vez
interpelación y agencia. Esto me lleva a retomar un tema que era central
en las etnografías de la antropología clásica y que ha sido borrado de la
agenda de la antropología social en el presente: la estructura de grupos
de edad en las sociedades humanas.

39
En los últimos años, los antropólogos de la juventud y de la niñez han
retomado críticamente los aportes de algunos antropólogos clásicos. Si
bien se rescata la preponderancia que antropólogos como Mead, Benedict
y Malinowski le dieron a la niñez y a la adolescencia así como la
perspectiva relativista y desnaturalizadora que introdujeron, se cuestiona
la definición adulto-céntrica de adolescencia como un estado biológico y
psicosocial transicional que es recurrente en sus etnografías. (Kropff,
2012).

Por consiguiente, la región agrícola del sur de la provincia de Santa Fe


responde en la actualidad a los requerimientos de especialización
productiva a través del cual el país se integra a los mercados
internacionales, adecuando para ello la organización de su espacio rural.
Especialización centrada especialmente en el cultivo de soja y en la
profundización del capital en las relaciones de producción, proceso que
genera transformaciones en la organización familiar y en la estructura
productiva de las explotaciones.

Por tal motivo, los cambios registrados en el modelo tecnológico desde


el inicio del proceso de modernización hasta la actualidad, han producido
una reducción importante en la mano de obra empleada en las
actividades propiamente agrícolas. El reemplazo de tareas manuales por
tecnología mecánica o química, derivó en una disminución de los
requerimientos de empleo, mayor especialización de las tareas
demandadas y disminución del tiempo de trabajo de las mismas (Cloquell,
S. et al, 2002).

40
Esta reestructuración de las actividades agrícolas no solo generó
reducción en el trabajo sino que además contribuyó a la modificación del
lugar de trabajo y de los trabajadores en la organización y gestión de los
establecimientos rurales. Cada vez más las tareas vinculadas a las
actividades productivas tienen mayor vinculación con los centros urbanos.
Fue así que a partir de la década del ´70 las familias rurales comenzaron
a mudarse a los centros poblados más cercanos a su explotación. Este
proceso migratorio, comúnmente denominado desruralización, modificó la
relación de la familia con la actividad productiva, profundizando la división
entre unidad doméstica y unidad de producción. (Preda, 2012).

Por lo que esta, conformada a partir de diferentes flujos migratorios, la


comunidad lituana en Argentina es la más numerosa de América Latina,
detrás de Brasil. A pesar de los años transcurridos desde la llegada de los
inmigrantes en la década de 1920 y, en menor medida, luego de la
Segunda Guerra Mundial, la actividad asociativa continúa en las
instituciones étnicas ubicadas principalmente en Lanús, Villa Lugano y en
la ciudad de Berisso. Específicamente nos referimos a la "Sociedad
Lituanos Unidos en la Argentina" o "Susivienijimas" de Lanús, al "Centro
Lituano" de Villa Lugano y a las instituciones berissenses "Nemunas" y
"Mindaugas". En el interior del país la vida asociativa lituana también se
desarrolla en ciudades como Rosario, provincia de Santa Fe. Fundadas
entre 1909 y 1936 con el propósito de brindar ayuda económica a los
recién llegados, fueron transformando sus objetivos hasta convertirse en
la actualidad en centros movidos principalmente por fines de recreación y
recordación, siendo el origen el referente principal en el proceso de
recrear la noción de comunidad entre socios y partícipes.(
Monkevicius,2012).

41
Territoriales y físicos que han generado transformaciones entre ambas
orillas centraremos brevemente en contextualizar ciertas relaciones
sociales, económicas y culturales que se han ido construyendo entre las
ciudades de Concordia y Salto unidas desde el año 1979 por el puente de
Salto Grande que conforma la Central Hidroeléctrica Binacional de Salto
Grande: "La organización del espacio urbano manifiesta un modelo
segregativo que fue siguiendo la división centro periferia profundamente
marcado por la presencia de los arroyos más tarde del ferrocarril.

Sin duda, la mayor inflexión se produjo en la década del '70-'80 con la


construcción de la Represa de Salto Grande y un crecimiento poblacional
cercano al 30%. Más de 28.000 habitantes, mayoritariamente mano de
obrano calificada, quedaron en la zona una vez terminada la construcción
de la represa, con sus consabidas consecuencias en materia laboral. En
el aspecto urbano han conformado un cinturón de "villas", en la periferia y
zonas inundables de la ciudad. El 49% de esta población padece NBI
(necesidades básicas insatisfechas). La ciudad posee inconvenientes en
sus accesos y trama circulatoria en general y presenta un ambiente un
tanto degradado por la marginalidad de su periferia, así como en toda la
zona costera por la acción modificadora del río Uruguay". (Mingo de
Bevilacqua et. al., 2006.

42
Visto de esta forma, en la ciudad de Concordia, declarada Capital
Nacional de la Citricultura, habitan aproximadamente 170.000 personas
según datos extraoficiales del último Censo Nacional (Censo 2010,
INDEC). Este número la convierte en la segunda ciudad más importante
de la provincia de Entre Ríos (y la de mayor importancia sobre la costa del
Río Uruguay). La ciudad está ubicada al nordeste de dicha provincia y a
orillas del Río Uruguay, el cual la une a la vecina ciudad de Salto
(Uruguay). La ciudad entrerriana desarrolla una economía relacionada
con la citricultura y la forestación (podemos también agregar que en los
últimos años las plantaciones de arándano han ido tomando relevancia) y
su mercado se liga directamente con las zonas rurales. Así mismo, estas
actividades productivas la convierten en una de las tantas ciudades
receptoras del trabajo golondrina con altas tasas de rotación de su
población.

Tal vez, esta característica le da ciertas especificidades a la ciudad


mostrando una trama enmarañada de relaciones tensas entre quienes
son originarios concordienses y quienes no lo son. Asimismo, estas
complejidades se han visto atravesadas por un contexto reciente donde
las diversas miradas economicistas de las políticas neoliberales de la
década del 90 y la crisis económica de 2001 han incrementado y
generado una diversa heterogeneidad de migrantes que se han asentado
en la ciudad. De la misma forma dichos procesos, han visibilizado la
fragmentación de los sectores medios mostrando cómo mientras ciertos
grupos acceden al mundo del consumo de bienes y servicios, otros se
enfrentan al desempleo y precariedad en sus trabajos y estudios.
(Andrade, 2012).

43
En esta perspectiva, el diseño del presente estudio corresponde a la
valoración de una escala psicométrica empleada en la estimación de un
criterio diagnóstico; el análisis está enfocado a las propiedades
psicométricas de la escala NBAS, particularmente a la validez del
constructo ya la consistencia interna del instrumento. El término análisis
factorial agrupa en general a una categoría de métodos de análisis
estadístico multivariante que se propone identificar o esclarecer la
estructura que constituye una matriz de datos obtenida a partir de la
aplicación de un instrumento de valoración de tipo psicométrico,
generalmente de tipo escalar, es decir que mide cierto atributo como el
coeficiente intelectual, el estrés o el grado de neurodesarrollo en términos
numéricos.

En efecto, busca esencialmente encontrar grupos homogéneos de


variables a partir de un conjunto numeroso de ellas. Cada grupo
homogéneo está formado por variables que se correlacionan entre sí, a la
vez que cada grupo muestra cierta independencia respecto a los otros
grupos o dimensiones que se identifiquen.

44
En nuestra opinión, el eje central interpretativo es el análisis de las
correlaciones existentes entre las diferentes variables, ítems o reactivos
que miden parcialmente diversas características de un atributo, cualidad o
constructo teórico que se explora mediante un cuestionario. El análisis
permite identificar uno o varios grupos de dimensiones o subconjuntos de
ítems que se correlacionan con una de las características del atributo
general que se está midiendo. El análisis factorial puede ser exploratorio
cuando no se conoce el número de factores o dimensiones que
componen un constructo y la experiencia empírica determina el número
de factores; también es confirmatorio cuando el número de factores se ha
fijado previamente y se utilizan contrastes de hipótesis para corroborar
dicho número.(Lizarazo, 2012).

En lo esencial, la expresión génica aberrante es una de las


características clave vinculada con enfermedades complejas como
cáncer, diabetes tipo II, esquizofrenia y enfermedades autoinmunes. En
estas enfermedades hay un importante componente hereditario aunque
no siguen un patrón de herencia mendeliano. Existe evidencia que
sugiere que anomalías epigenéticas, junto con alteraciones genéticas, son
responsables de la alteración en la regulación de genes clave en estas
patologías. Además, los mecanismos epigenéticos ofrecen una
explicación alternativa para algunas de las características de
enfermedades complejas como establecimiento tardío, efecto de género,
efecto por origen parental y fluctuación de los síntomas (4, 24). En cáncer,
por ejemplo, islas CpG normalmente no metiladas están a menudo
hipermetiladas para silenciar genes supresores tumorales y favorecer el
desarrollo de la neoplasia. (Gracia, 2012).

45
En los últimos años, los sitios de asistencia clí-nica (unidades de
cuidado intensivo, áreas de hospitalización clínica, servicios de urgencias,
servicio de rehabilitación, unidades de atención ambulatoria) han tenido
una mayor relevancia como escenarios de aprendizaje enriquecidos para
la formación y desarrollo de competencias profesionales en Salud (1).
Dentro de estos escenarios el proceso de evaluación educativa se
convierte en un mecanismo de retroalimentación para el
perfeccionamiento del desempeño profesional, en donde el docente
universitario desempeña un papel fundamental como juez y verificador de
los logros alcanzados por los profesionales en formación en el desarrollo
y perfeccionamiento de las competencias profesionales en clínica.

Cabe considerar, que la manera tradicional de evaluar en estos


escenarios se ha centrado en la determinación del dominio conceptual, de
la capacidad argumentativa y del razonamiento clínico para la toma de
decisiones por parte de los estudiantes. La aplicación de pruebas escritas
y orales permite dar cuenta de las competencias cognitivas, pero no
alcanza a determinar el logro en relación con las competencias
procedimentales y del actuar profesional del practicante en Salud. Esta
mirada reduccionista de la evaluación educativa en clínica genera serias
discrepancias e inconsistencias en el proceso de evaluación del
desempeño profesional en dicha área. (Correa, 2011).

A lo largo, de los años, desde 1975, el Código de Familia estableció


la responsabilidad compartida entre la madre y el padre en la crianza y
educación de sus hijas e hijos. En la actualidad la protección a la
maternidad de la madre trabajadora y el cuidado del menor se regula en
el Decreto Ley No. 234 del 13 de agosto de 2003 y su legislación
complementaria, la Resolución No. 22 del 23 de octubre de 2003 del
Ministerio de Trabajo y Seguridad Social. Según publicaciones nacionales
esta ley ha sido muy revolucionaria, porque propicia la responsabilidad

46
compartida de la madre y el padre en el cuidado y atención de los hijos y
la del padre en caso de fallecimiento de la madre trabajadora (18, 20).
(Garcia, 2011).

Por otra parte, teniendo en cuenta las dimensiones biológica y


social de la AF y los referentes internacionales y nacionales que
direccionan el ejercicio de la profesión, ¿cuáles son las características del
ejercicio profesional del fisioterapeuta? A partir de los planteamientos
realizados se abre una discusión en torno a los elementos curriculares
que se deben garantizar para favorecer el desempeño profesional en el
área que, si bien es cierto no son los elementos sobre los cuales se
expondrá en este artículo, se espera que lo aportado sirva como un inicio
para la discusión no solo en la agenda del programa de Fisioterapia de la
Universidad del Rosario, sino El objetivo central de este documento es
abordar el ejercicio profesional del fisioterapeuta en el campo de la AF y
para ello se propone explicarla desde una perspectiva biológica y otra
social, describir las características del ejercicio profesional según
referentes nacionales e internacionales y en relación con las dimensiones
biológica y social de la AF.

De este modo, el presente marco de referencia aborda las


concepciones teóricas en torno a la AF desde las dimensiones biológica y
social. Además, se presentan las acciones profesionales que el
fisioterapeuta realiza a la luz de la World Confederation for Physical
Therapy (WCPT), la American Physical Therapy Asociation (APTA), y la
Ley 528 por la cual se reglamenta el ejercicio profesional de la fisioterapia
en Colombia, como referentes que han direccionado hecho desde una
dimensión biológica, concibiéndola como toda actividad que demanda un
gasto energético.

Ahora bien, cuando esta actividad se desarrolla de manera


programada, secuencial, estructurada y con el fin de mantener o mejorar

47
uno o más de los componentes del fitness, se denomina ejercicio físico un
incremento en la tasa metabólica, producto de cualquier movimiento
realizado con los músculos esqueléticos; sin embargo, también se ha
abordado desde una dimensión social, como una fuente de conocimiento,
comunicación, emoción, salud y esparcimiento AF genera un gasto
energético que impacta la homeostasis celular y, si se practica con las
características adecuadas (periodicidad, duración, volumen, progresión,
etc.), se producen procesos adaptativos a nivel nuclear que se reflejan en
una mejor condición de vida; así, mediante la práctica regular de la AF
puede modificarse la morbimortalidad asociada con las principales
enfermedades crónicas no transmisibles, ECNT, y no traumáticas que
aquejan a un individuo y a una comunidad.

Debe señalarse, que la ejecución de prácticas o hábitos que


desarrollan los sujetos o colectivos para proteger su salud. En este
sentido, Bourdieu entiende los hábitos como las formas de práctica donde
se realizan procesos de clasificación y simbolización que darán un
lenguaje propio como rasgo distintivo en una sociedad, por ejemplo, entre
clases sociales (3). Dichos hábitos tienen como función “identificar la
unidad de estilo propia en las prácticas y bienes individuales y colectivos,
convirtiéndose en rasgos diferenciadores y diferenciantes que operan
para la praxis social” (Ocampo, 2011).

Dicho de otro modo, la participación activa del paciente en su


propio cuidado (6) a partir de la educación para el conocimiento de su
enfermedad, integrado con manejo farmacológico, ejercicio físico, soporte
psicosocial y nutricional, pues estos elementos son básicos para lograr un
resultado efectivo.

Finalmente, este reporte muestra una evolución significativa en la


calidad de vida de la paciente después de recibir veinticuatro sesiones de
rehabilitación pulmonar, con entrenamiento de resistencia de los

48
miembros superiores e inferiores, educación en el manejo y
recomendaciones para un mejor control de los síntomas, lo cual causó un
excelente impacto en su desempeño funcional, con mayor participación
social y notable disminución en el número de hospitalizaciones, ingreso a
urgencias y visitas médicas.( Gómez, 2011).

CAPITULO IV
CONCLUSIONES

Indicadores sociales es toda aquella situación o cambio en un


territorio, población o lugar este mejora los aspectos de vida tanto social
como económica en el que cualquier individuo puede interesarse.
Podemos ver también que pensaba Mario Bunge acerca de indicadores
sociales él lo definía como una descripción de una situación social, o
mediación de cambios en una situación dada; estos indicadores también
nos sirve para identificar, describir, analizar y evaluar proyectos en un
determinado territorio, los indicadores sociales les permite tomar
decisiones a las autoridades de un territorio como son (concejales,
alcaldes, gobernadores), a los empresarios y la comunidad en general.
Para que así puedan tener un desarrollo eficiente y trasparente para
generar una buena calidad de vida.

49
Ahora bien, hablamos que para hacer una investigación el
investigador debe conocer bien lo que va a estudiar y tener claro un
concepto de ese mismo; porque si no lo hace puede perder poder al
momento de dar la información, también debe poseer capacidad para
cuando llegue al lugar del estudio saber en si cuales son las necesidades
que se tienen allí y el por qué de ellas, al finalizar su estudio el debe
interpretar clara y sencillamente la realidad de lo que investigo. Se hace
una consulta en Iberoamérica en donde sus estadísticas nos dan a
conocer que las áreas de mayor utilización en los indicadores fueron
población, vivienda, servicios básicos, salud, educación, trabajo e
ingresos y pobreza.

Desde entonces, el PIB real (corregido por la inflación) se ha


incrementado por casi el doble, al crecer en un 94,7 por ciento en 5,25
años, lo que equivale a un ritmo anual de 13,5 por ciento.

Visto de esta forma, la mayor parte de este crecimiento se ha dado en


el sector no petrolero de la economía y además, el sector privado ha
crecido a un mayor ritmo que el sector público.

Durante, la expansión económica actual, la tasa de pobreza se ha


reducido en más de la mitad, desde un 54 por ciento de hogares en
pobreza en el primer semestre de 2003 hasta el 26 por ciento a finales del
año 2008.  La pobreza extrema ha disminuido aún más, en un 72 por
ciento.  Estos índices de pobreza están basados solamente en el ingreso
en efectivo de las personas y por ende, no toman en cuenta el mayor
acceso a los servicios de salud o educación.

A lo largo de toda la década, el porcentaje de hogares en condiciones


de pobreza se ha reducido en un 39 por ciento y el que se encuentra en
extrema pobreza por más de la mitad.

50
Por lo tanto, Se han dado grandes avances en la educación,
particularmente en la educación superior, con un incremento en los
índices de escolarización en ese sector de más del doble entre los años
escolares de 1999-2000 y 2007-2008.Durante la última década, el número
de beneficiarios del sistema de seguridad social aumentó por más del
doble. El gasto social real (corregido por la inflación) por persona se ha
incrementado por más de tres veces entre 1998 y 2006.

Sin duda, el informe también evalúa la situación económica actual y


cómo se verá afectado el país por precios más bajos para el petróleo. 
Concluye que dada la gran acumulación de reservas en moneda
extranjera de Venezuela, es improbable que el país enfrente problemas
en la balanza de pagos, incluso si los precios del petróleo permanecen a
niveles tan bajos por mucho más tiempo de lo que anticipan los analistas
y mercados de futuros.  El desafío más importante e inmediato para
Venezuela, según el análisis en este informe, será el de implementar un
programa de estímulo fiscal oportuno y adecuado para contrarrestar los
efectos de la recesión global.  A largo plazo, el análisis también ve la
necesidad de lograr un tipo de cambio más competitivo para diversificar la
economía hacia otros sectores distintos al petrolero.

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