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Universidad de Oviedo

Curso de Especialista Universitario en Enfermería Quirúrgica,


Anestesia y Esterilización.

ENFERMERÍA DE ANESTESIA: EL PORQUÉ DE SU EXISTIR.

Lucía Menéndez Medina

Curso 2017/2018

15 de Mayo del 2018

Trabajo Fin de Curso

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Curso de Especialista Universitario en Enfermería Quirúrgica,
Anestesia y Esterilización.

ENFERMERÍA DE ANESTESIA: EL PORQUÉ DE SU EXISTIR

Lucía Menéndez Medina Mª Yolanda García Gutiérrez


Dña. Mª Yolanda García Gutiérrez, con DNI 10851963B, Profesora del Curso de
Especialista Universitario en Enfermería Quirúrgica, Anestesia y Esterilización por
la Universidad de Oviedo,
CERTIFICO:
que el Trabajo presentado por D/Dña. Lucía Menéndez Medina, titulado
“Enfermería de Anestesia: el porqué de su existir”, ha sido realizado bajo mi
dirección dentro del Curso de Especialista Universitario en Enfermería Quirúrgica,
Anestesia y Esterilización, y que reúne a mi juicio las condiciones necesarias para
ser admitido como Trabajo Fin de Curso.
Y para que así conste dónde convenga, firmo la presente certificación en Gijón a
15 de Mayo de 2018.
Fdo. Yolanda García Gutiérrez

Tutora del Trabajo


Índice
1. Índice de abreviaturas...................................................................................... 5

2. Resumen y palabras clave. .............................................................................. 6

3. Introducción. .................................................................................................... 7

4. Objetivos. ......................................................................................................... 9

5. Método. .......................................................................................................... 10

6. Desarrollo. ..................................................................................................... 12

6.1. Historia de la anestesia. .......................................................................... 12

6.1.1. Civilizaciones Antiguas. .................................................................... 12

6.1.2. Del siglo XVIII en adelante. .............................................................. 15

6.2. El marco educativo de la enfermería. ...................................................... 17

6.2.1. Antecedentes en los estudios de Enfermería. .................................. 17

6.2.2. Marco educativo actual. .................................................................... 18

6.2.3. Enfermera de Anestesia, Reanimación y Terapia del Dolor. ............ 24

6.3. La Enfermera de Anestesia, Reanimación y Terapia del Dolor: sus


competencias. ................................................................................................... 26

6.3.1. Entrevista y consulta pre-intervención. ............................................. 28

6.3.1. Periodo inmediato pre-operatorio. .................................................... 30

6.3.2. Periodo peri-operatorio. .................................................................... 30

6.3.3. Periodo post-operatorio. ................................................................... 32

6.3.4. Unidades del dolor. ........................................................................... 33

7. Discusión. ...................................................................................................... 35

8. Conclusión. .................................................................................................... 36

9. Bibliografía. .................................................................................................... 37
1. Índice de abreviaturas.
ASEEDAR-TD: Asociación Española de Enfermería de Anestesia - Reanimación y
Terapia del Dolor.

EEES: Espacio Europeo de Educación Superior.

IFNA: International Federation of Nurse Anesthetists.

OMS: Organización Mundial de la Salud.

ATS: Ayudante Técnico Sanitario.

DUE: Diplomado Universitario en Enfermería.

ECTS: European Credit Transfer System.

EIR: Enfermera Interna Residente.

EARTD: Enfermera de Anestesia, Reanimación y Terapia del Dolor.

AANA: American Association of Nurse Anesthetists.

ASA I / ASA II: la clasificación ASA diseñada por la American Society of


Anesthesiologists se utiliza para catalogar a los pacientes según su riesgo de
sufrir complicaciones durante la anestesia. El término ASA I corresponde a los
pacientes que están sanos, mientras que el término ASA II les corresponde a
aquellos que padecen una enfermedad sistémica leve que no limita su actividad.

ECG: electrocardiograma.

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2. Resumen y palabras clave.
Resumen: Pese a que la presencia de la enfermería en los documentos que
hablan de la evolución de la misma en el terreno de la anestesia es muy poca,
siempre ha estado vinculada a ella y han avanzado paralelamente. Prueba de ello
son todos los cambios que nuestra oferta formativa ha experimentado a lo largo
de los años, adaptándose a las necesidades de cada momento histórico, lo que a
su vez nos capacita para desempeñar nuestro trabajo en todos los ámbitos de la
salud. Sin embargo, y a pesar de todos los beneficios que conlleva la presencia
de una EARTD dentro del equipo de salud, su figura no está reconocida
oficialmente en nuestro estado como especialidad.

Palabras clave: Nurse Anesthetists; Enfermería de quirófano; Anestesia.

6
3. Introducción.
A lo largo de toda la historia, los campos de la anestesiología y la formación en
Enfermería han pasado por diferentes etapas, en las que cada una evoluciona
para dar respuesta a las necesidades que se plantean en cada momento.

La anestesia (que etimológicamente significa “sin sensibilidad”, es decir, falta de


conciencia de una sensación1) comenzó su profesión utilizando ungüentos y
plantas medicinales para el alivio del dolor, pasando más tarde a la aplicación de
frío local o al empleo de gases, hasta que a mediados del siglo XIX se
sintetizaron los primeros fármacos anestésicos y se universalizó la práctica
anestésica2; mientras que la enfermería pasó de estar basada en un enseñanza
técnica a integrarse en las universidades y tener formación tanto teórica como
práctica3, 4.

Debido a la complejidad actual del trabajo en el quirófano y la anestesia, junto con


la posibilidad en enfermería de realizar una especialidad una vez terminada la
formación universitaria, surgió la necesidad de la figura de la Enfermera de
Anestesia, que se define como un/ a enfermero/a de Anestesia provee o participa
en la realización de técnicas avanzadas o especializadas y servicios de anestesia
a pacientes que requieran de la misma, cuidados respiratorios, resucitación
cardiopulmonar y/u otra emergencia y servicios de mantenimiento de vida cuando
sea necesario. Asimismo, participa en la aplicación de las diferentes técnicas
analgésicas, tanto para el dolor agudo, como el crónico, en el ámbito de las
clínicas o unidades del dolor5.

El trabajo de una Enfermera de Anestesia se desarrolla dentro del ámbito pre,


intra y post anestésico y se relaciona con la preparación del paciente para la
cirugía, el estado fisiológico del mismo y sus alteraciones, la comprobación del
correcto funcionamiento de monitores y equipos, la administración de fármacos
anestésicos o un adecuado trabajo en equipo5.

La ASEEDAR-TD asumió esta tarea y luchó para conseguir el reconocimiento a


nivel nacional de la Enfermera de Anestesia, que se incluiría dentro de la
especialidad de Enfermería de Cuidados Especiales. Actualmente, esta figura no
está reconocida de manera oficial en todo el país, pero sí se puede ejercer como

7
tal en determinadas provincias, hospitales o clínicas que ven en ella una
proyección profesional, además de sus beneficios al trabajo en equipo y al
paciente6.

8
4. Objetivos.
Objetivo general.

o Definir a la Enfermera de Anestesia y el papel que desempeña.

Objetivos específicos.

o Describir la evolución histórica de la anestesia.

o Detallar el marco educativo de Enfermería y sus posibilidades.

o Analizar la situación actual de la Enfermera de Anestesia, Reanimación y


Terapia del Dolor en nuestro país.

9
5. Método.
En este Trabajo Fin de Curso se aborda la evolución histórica de la anestesia y el
papel de las enfermeras dentro de ella y la Enfermería de Anestesia, Reanimación
y Terapia del Dolor: su marco educativo y las competencias que desarrollan en su
vida laboral.

Para su elaboración se realizó una revisión bibliográfica de literatura científica en


diferentes bases de datos, así como en diversas páginas web que están
vinculadas con el mundo de la enfermería y anestesia.

Bases de datos: Motores de Páginas web:


búsqueda:
 SciELO  ASEEDAR-TD
 Lilacs  Google  EEES
 Science Direct académico  Consejo
General de
Enfermería
 IFNA
 OMS

Como estrategia de búsqueda para la obtención de artículos e información


científica en las diferentes bases de datos, motores de búsqueda y páginas web
se han utilizado diferentes palabras en lenguaje controlado y/o lenguaje libre.

DeCS: Lenguaje libre:

 Nurse Anesthetists  Enfermería de quirófano


 Enfermería de quirófano  Enfermería en España.
 Anestesia

Una vez que estuvieron definidas las palabras en lenguaje controlado que se iban
a usar para la búsqueda de artículos, se combinaron junto con los booleanos para
conseguir información que se acercase más a nuestras necesidades de
información.

 Enfermería de quirófano AND anestesia

10
En total, como resultado de la búsqueda, se obtuvieron 3 documentos en bases
de datos que han sido empleados para la elaboración del Trabajo Fin de Curso, al
mismo tiempo que se utilizó información o documentos contenidos en las páginas
web de la ASEEDAR-TD, el EEES, el Consejo General de Enfermería, la IFNA y
de la OMS.

11
6. Desarrollo.

6.1. Historia de la anestesia.


El significado etimológico de anestesia es “sin sensibilidad”, es decir, la falta de
conciencia sobre una sensación1, mientras que la palabra analgesia se refiere a la
ausencia de dolor1. Estos dos campos de trabajo nacen como instrumento para
paliar el sufrimiento que desde los inicios de su existencia el ser humano ha
padecido y ambos se han ido desarrollando de forma paralela, obteniendo
referencias de hasta nueve mil años atrás2.

6.1.1. Civilizaciones Antiguas.

6.1.1.1. Neolítico, Sumeria, Mesopotamia, Siria y Antiguo Egipto.


Las primeras reseñas que figuran en los libros de historia de la anestesia se
remontan al periodo Neolítico, durante el cual trataban el dolor a través de
ungüentos hechos con hojas naturales o sangre de animales, así como rituales
para expulsar a los espíritus. La primera referencia que se obtiene del uso del
opio es sobre el empleo del hulgil (o adormidera) hace 4000 a.C, cuyo uso se
extiende hasta la época del antiguo Egipto (1000 – 1500 a.C) junto con otras
plantas como el cannabis o la mandrágora. Los asirios, a su vez, desarrollaron
una técnica anestésica y analgésica basada en la compresión de las carótidas a
su paso por el cuello, lo que producía una isquemia cerebral y como
consecuencia un estado comatoso2.

Ya en civilizaciones antiguas, la población dejaba por escrito los materiales que


empleaban para conseguir efectos analgésicos, así como rituales o exorcismos en
libros de referencia como el Papiro de Ebbers en el Antigua Egipto o el código de
Hammurabi en Mesopotamia, el cual también incluía registro de los médicos y los
tratamientos, tanto médicos y quirúrgicos, por los que se guiaban 2.

6.1.1.2. Indígenas americanos.


La primera referencia acerca del uso de la coca es en la cultura peruana, para
producir anestesia local en la herida quirúrgica a través de las cocadas (bolas de
hoja de coca) que se mezclaban con cal o ceniza y la saliva del propio cirujano,

12
aunque también hay registros de los efectos anestésicos en la boca y faringe que
producía masticar las hojas de coca. Igualmente en el continente americano, los
araucanos empleaban para aliviar el dolor las flores de la maya (Datura ferox)
cuyo principio activo es la escopolamina, fármaco ampliamente utilizado hoy en
día en los hospitales; además, los mayas también hacían uso de este alcaloide
con el fin de proporcionar efectos analgésicos durante el trabajo del parto a través
de la administración del estramonio (Datura stramonium), planta que también
contiene un alcaloide del tipo de la atropina2.

6.1.1.3. Cultura china.


La cultura china destaca por el uso de las plantas medicinales. Las dos técnicas
de analgesia y anestesia de uso más extendido eran a través de la administración
de hachís a los pacientes y a través de la acupuntura. Asimismo, se empleaba la
moxibustion, es decir, la combustión de pequeñas cantidades de artemisa en
aquellas zonas donde era necesario combatir el dolor2.

6.1.1.4. Cultura griega.


En la antigua Grecia, las vías para paliar el sufrimiento eran a través de vendajes,
pociones y el opio, técnicas que los sacerdotes llevaban a cabo en los templos de
Esculapio; con el mismo fin se utilizaba la Filipéndula ulmaria, una planta
precursora de ácido acetilsalicílico2.

Hipócrates (460 – 377 a.C.) empleó una técnica anestésica inhalatoria que
perduró hasta mediados del siglo XVI: se denominaba spongia somnífera y
consistía en una esponja de mar impregnada con opio, beleño (que contiene el
alcaloide de la escopolamina) y mandrágora. Asimismo, describe la corteza del
sauce blanco como elemento para combatir el dolor del parto, pues se trata de un
precursor del ácido acetilsalicílico2.

Dioscórides (50 d.C.), médico y filósofo de Grecia, extendió por toda la sociedad
griega el uso del vino de mandrágora como método anestésico durante las
cirugías. Durante su actividad laboral como médico, también destaca el uso de
torpedo marmorata (descargas eléctrica de anguilas) para aliviar el dolor
producido por las neuralgias2.

13
6.1.1.5. Cultura romana.
En Roma, Aulus Cornelius utilizaba la mezcla resultante de hervir a hoja de sauce
banco en vino para el tratamiento de los prolapsos uterinos, mientras que Galeno
(130 – 200 d.C.) fue el precursor de la polifarmacia gracias al uso de hojas de
plantas a modo de apósito para tapar las heridas abiertas y las úlceras 2.

6.1.1.6. Edad Media y Renacimiento.


Durante la Edad Media y el renacimiento, Teodorico (1205 – 1298) utilizó un
método de analgesia similar al de Hipócrates: utilizaba una esponja empapada en
opio y mandrágora para adormilar al paciente. Además, para despertarlo utilizaba
una esponja empapada en vinagre, procedimiento que el físico griego no
realizaba. La práctica de esta técnica se extendió por toda Europa y perduró
durante casi trescientos años2.

Paracelso, suizo, descubrió el poder del éter sulfúrico gracias a que endulzó la
comida de sus pollos y gallinas con vitriolo, aceite que se obtenía a partir de la
mezcla del ácido sulfúrico con alcohol caliente; como consecuencia de ello los
animales caían en un profundo sueño. Por desgracia, no fue capaz de investigar
más allá de este suceso y se perdió todo conocimiento acerca de este agente
químico2.

Otro suceso destacable en la historia de la anestesia es que, a pesar de ya haber


evidencias en la antigüedad, en 1564 Ambrossio Paré comenzó a utilizar como
método anestésico local en el enfriamiento o congelación en la zona quirúrgica.
Fue en el siglo XIX (1875) en España cuando José de Letamendi propone el uso
de objetos fríos sobre la zona quirúrgica para provocar la anestesia local, lo que
deja ver que la práctica de Ambrossio no se extendió y el desarrollo de la
anestesia por Europa era desigual2.

Quizá el mayor avance hasta el siglo XVIII se llevó a cabo en Inglaterra durante
todo el siglo anterior, en el que se inició la inyección de opio intravenoso a través
del cañón de una pluma, contribuyendo así al desarrollo de la anestesia
intravenosa2.

14
6.1.2. Del siglo XVIII en adelante.

6.1.2.1. Siglo XVIII.


El siglo XVIII se puede calificar como el punto de inflexión en el desarrollo de
todas las ciencias. En cuanto a la anestesia, fue en el año 1721 cuando apareció
por primera vez su definición como “un defecto de sensación” en el libro An
Universal Etymological English Dictionary. A finales de este siglo, en 1774,
Joseph Priestley descubrió y preparó el oxígeno y el óxido nitroso y nítrico.
Durante varios años el óxido nitroso fue considerado mortal, hasta que en 1796
Humphry Davy decidió aspirar el gas y en lugar de fallecer, describió unas
sensaciones placenteras; más tarde, cuando padecía una enfermedad dental
decidió aspirarlo, lo que le provocó un efecto analgésico. Otro hecho a tener en
cuenta es la primera intubación endotraqueal realizada por Curry en el año 1792,
ayudándose únicamente de sus manos2.

6.1.2.2. Siglo XIX.


Durante los primeros años del siglo XIX, en 1804, Serturner sintetizó la morfina
por primera vez, tratando el opio con amoníaco y purificando esa mezcla con
ácido sulfúrico y alcohol. También durante los primero años de este nuevo siglo,
Davy junto con Faraday, continuaron los estudios sobre los gases anestésicos y
descubrieron que al mezclar el éter con aire común se consiguen efectos
similares a los que producía el óxido nitroso2.

Otro fármaco sintetizado por primera vez a lo largo de este siglo fue el cloroformo
en el año 1831, a partir de que Samuel Guthrie, Eugene Souberrain, y Justus von
Liebing destilasen una mezcla de cloruro de calcio y alcohol. Once años más
tarde (1842), se difundió rápidamente el uso del éter como anestésico después de
que Jefferson lo utilizase para la extracción de un tumor en el cuello de un
paciente y este no experimentase ningún dolor2.

El surgimiento de la anestesia moderna viene con Horacio Wells a mediados de


siglo, cuando se dejó extraer una pieza dental tras haber inhalado el óxido nitroso
y no haber sufrido ningún dolor; sin embargo, sus posteriores ensayos con
pacientes son un fracaso, lo que le lleva al encarcelamiento y posterior suicidio.
Pocos años más tarde, Morton decide sustituir el ya conocido NO 2 por éter
sulfúrico: todos sus ensayos son un éxito, por lo que el uso de este gas se

15
extiende rápidamente por todos los quirófanos europeos y se dice que se
descubre la anestesia general. A pesar del éxito del éter y a raíz del
descubrimiento de otros gases anestésicos, Simpson utilizó el cloroformo durante
un parto y descubrió que presentaba ciertas ventajas sobre el éter sulfúrico y que
desencadenaba menos efectos secundarios2.

A mediados de siglo, en 1859, Albert Nieman conocedor de los beneficios y usos


que se le había dado a la hoja de coca desde las civilizaciones antiguas, aisló
este alcaloide y lo llamo cocaína, el cual se comenzó a utilizar como agente
anestésico y analgésico. Unos años más tarde, en 1899, un químico alemán que
trabajaba en el laboratorio de Bayer, produjo la Aspirina (ácido acetilsalicílico)
fármaco con propiedades analgésicas, antipiréticas y antiinflamatorias2.

6.1.2.3. Siglo XX.


Otro hecho de especial mención en el desarrollo de la anestesia sucedió en
1934, cuando José C. Delorme en Buenos Aires, consiguió fabricar el primer
aparato de anestesia con vaporizadores para éter, cloroformo y cloruro de etilo,
con tanques de CO2 Y O2 y también una marmita para la cal sodada. Nueve años
más tarde, Lofgren y Lundquist sintetizaron la lidocaína2.

En España, hasta la década de los 60 las enfermeras eran las encargadas de la


administración de los fármacos anestésicos de manera independiente o bajo la
supervisión de los cirujanos. Fue a partir de estos años cuando se creó la
especialidad médica de Anestesiología, por lo que estas tareas ahora las
desempeñaban los médicos de esta especialidad. Con el paso de los años, las
profesionales de enfermería no retomaron su posición en la anestesia, ya que los
anestesiólogos lo veían como intrusismo laboral y tampoco encontraban respaldo
en la administración de los hospitales7.

Con respecto a las Unidades del Dolor, en nuestro país la creación de la primera
clínica dedicada a este terreno llegó en 1976 por el Doctor Madrid Arias. A partir
de este momento, se comienza a difundir la importancia del tratamiento del dolor,
promulgando este interés a los médicos de todo el mundo. A su vez, las
profesionales de enfermería que desarrollaban su trabajo en las Unidades del
Dolor precisaban de una mayor especialización en este campo, comenzando de

16
este modo la necesidad de creación de una especialidad enfermera dedicada al
cuidado del paciente en la anestesia y el tratamiento del dolor 2.

En la actualidad y pese a la formación recibida en los estudios de grado como de


posgrado que nos capacita para ello, seguimos en la misma situación, y aunque
en algunos centros sanitarios cuenten con la figura de la Enfermera de Anestesia,
Reanimación y Terapia del Dolor, no está reconocida oficialmente a nivel
nacional.

6.2. El marco educativo de la enfermería.

6.2.1. Antecedentes en los estudios de Enfermería.


La enfermería siempre ha estado sometida a contantes cambios en su educación
debido a que se ha tenido que ir adaptando en cada momento a las necesidades
sanitarias de la población.

En sus comienzos, esta profesión contaba con una formación educativa basada
en la enseñanza técnica y con la que se obtenía el título de ATS3, 4. Como
consecuencia del surgimiento de un nuevo concepto de salud, en la década de los
70, la enfermería se ve sometida a un cambio en su enseñanza y se integra en la
formación universitaria; por consiguiente, se pasa a obtener el nombramiento de
DUE3, 4.

En lo que se refiere al plan académico, en este nuevo modelo de educación


conviven la teoría y la práctica otorgándose a las dos la misma importancia a lo
largo de la diplomatura; asimismo, se potencia el papel docente, investigador y
administrativo de las enfermeras4. Otra novedad fue el desarrollo de las
especialidades de enfermería, con lo que se pretendía una formación más
profunda en aquellas áreas de cuidado más específicas 4. La incorporación de los
estudios de Enfermería a la Universidad es la respuesta a las nuevas
necesidades de la salud demandadas por la población y se pretende dirigir esta
profesión hacia un cuidado integral de las personas y la comunidad influyendo
positivamente en la calidad de vida4.

17
A partir de los años 90, el programa de estudios de la Diplomatura en Enfermería
vuelve a experimentar algunos cambios: se implanta el sistema de créditos y se
establece un modelo educativo en el que el propio estudiante puede definir su
carrera académica a través de las materias optativas, además de establecerse
una nueva metodología en la que se intenta potenciar el pensamiento reflexivo del
alumno4. De este modo y gracias a estos cambios, el estudiante pasa de ser un
elemento pasivo dentro de su formación a desempeñar un papel activo con el que
puede decidir hacia que rama dirigir su carrera y estudios, a la vez que comienza
a desarrollar su propio criterio científico4. Otra novedad que trajo consigo la
Diplomatura es la posibilidad del libre intercambio de profesores, alumnos a través
del programa Erasmus, y profesionales por toda la Comunidad Europea gracias a
que el perfil académico y profesional se adecúa a lo reflejado en la normativa de
Europa4.

6.2.2. Marco educativo actual.


Los estudios oficiales de Enfermería ya habían experimentado un gran cambio al
integrarse en las Universidades en el año 1977; sin embargo, con la creación del
EEES se tuvo que llevar a cabo una readaptación en su formación.

6.2.2.1. Espacio Europeo de Educación Superior.


La creación de este sistema comienza con la Declaración de Bolonia, en la que se
definen los puntos clave que debe reunir el EEES: que sea un plan comparable,
compatible y coherente, al mismo tiempo que se crea una educación de calidad,
facilitando la movilidad tanto de estudiantes como de profesores y
profesionales8,9. Otra novedad que trajo consigo el proceso de Bolonia fue un
aprendizaje más autónomo y activo del alumno que el anterior modelo, mientras
que el profesor desempeña el papel de guía en el aprendizaje 10. Asimismo, se
pretende fomentar una formación profesional continua una vez terminados los
estudios universitarios con el fin de aumentar la competitividad y la diversidad en
la formación, así como la igualdad en oportunidades11

El proceso de Bolonia fue un cambio en el modelo educativo de educación


superior adoptado voluntariamente por cuarenta y ocho países, siendo un modelo

18
de cooperación educativo internacional y que está llamando la atención de otras
partes del mundo8, 9.

En la Declaración se establecieron los principales objetivos a conseguir con la


puesta en marcha de este proceso12:

1. La adopción de un sistema fácilmente legible y comparable de titulaciones,


mediante la implantación, entre otras cuestiones, de un Suplemento al
Diploma (incluye una descripción de la materia, el nivel, el contexto y las
asignaturas de los estudios y su propósito es facilitar a los países
extranjeros el reconocimiento de las calificaciones universitarias
obtenidas13).
2. La adopción de un sistema basado, fundamentalmente, en dos ciclos
principales: grado y máster.
3. El establecimiento de un sistema de créditos, como el sistema ECTS
(sistema que permite medir el trabajo que deben realizar los estudiantes
para superar las materias que componen su plan de estudios14,15).
4. La promoción de la cooperación Europea para asegurar un nivel de calidad
para el desarrollo de criterios y metodologías comparables.
5. La promoción de una necesaria dimensión Europea en la educación
superior con particular énfasis en el desarrollo curricular.
6. La promoción de la movilidad y remoción de obstáculos para el ejercicio
libre de la misma por los estudiantes, profesores y personal administrativo
de las universidades y otras Instituciones de enseñanza superior europea.

Como consecuencia de la creación del Espacio Europeo de Educación Superior


se produjo un cambio en la estructura general de los estudios universitarios, que
pasarían a dividirse en tres ciclos8, 16 (Figura 1):

1. Primer ciclo: es la base del EEES y se refiere al título de Grado. Cuenta


con un total de 240 créditos ECTS divididos en cuatro cursos académicos
(hay algunas excepciones como medicina o arquitectura que tienen más
créditos, y por lo tanto se prolonga su formación)8.
2. Segundo ciclo: está constituido por los estudio de Máster. Engloba un total
de 60 o 120 créditos ECTS, dependiendo de si su duración es de un año o

19
dos respectivamente y concluye con la elaboración y defensa del Trabajo
Fin de Máster8.
3. Tercer ciclo: está formado por el Doctorado, divido en dos etapas
(formación e investigación) que convergen en la Tesis Doctoral. En total
tiene una duración de tres o cuatro años y 60 ECTS8.

Figura 1: Estructura de los estudios superiores dentro del EEES.

Fuente: Espacio Europeo de Educación Superior – Estructura


del EEES8.

6.2.2.2. Formación en Enfermería.


A partir del 2010 fue cuando se pasó de cursar una Diplomatura para obtener el
título de DUE, a cursar un grado y acabar los estudios universitarios con el
nombramiento de Graduado en Enfermería4. Además de los estudios
universitarios básicos, el EEES da la opción de continuar hacia una formación
más avanzada8 (Figura 2).

Figura 2: Posibilidades en los estudios de Enfermería.

Fuente: Consejo General de Enfermería – Tres ciclos formativos16.

20
 Primer ciclo.

El primer ciclo de los estudios de Enfermería está constituido por el Grado en


Enfermería. Dicho grado está divido en cuatro cursos académicos de estudios que
en total suman 240 créditos ECTS repartidos en clases teóricas, seminarios,
prácticas de laboratorio y de aula, prácticas clínicas (2.300 horas) y el trabajo
individual del propio estudiante17.

Como son estudios que se enmarcan dentro del EEES, el ideal en este ciclo es
que el estudiante desarrolle un papel activo dentro de ellos para que así pueda
desarrollar las competencias y habilidades necesarias para esta profesión (trabajo
autónomo y en equipo o el pensamiento crítico y reflexivo)18 (Tabla 1).

Además de estas destrezas generales, en el Libro Blanco de Enfermería de


describen unas competencias específicas que también es necesario tener en
cuenta a la hora del desempeño laboral y se dividen en seis grupos18:

1. Valores profesionales, es decir, saber llevar a cabo el trabajo


correctamente en consonancia con los derechos humanos, valores,
cultura… de cada individuo, familia o comunidad.
2. Práctica enfermera y toma de decisiones, como no emitir juicios sobre el
paciente, además de mantener actualizados los conocimientos a través de
las últimas evidencias científicas.
3. Competencias en relación con un adecuado plan de cuidados, como, la
promoción o la educación para la salud o la realización de intervenciones o
técnicas necesarias y con eficacia y seguridad.
4. Llevar a cabo una formación continua a lo largo de toda la vida laboral.
5. Habilidades comunicativas, tanto en los aspectos relacionados con el
paciente como en los registros clínicos.
6. Capacidad de líder de grupo, trabajo en equipo y gestión.

21
Tabla 1: Competencias generales del Graduado en Enfermería.

COMPETENCIAS GENÉRICAS TRANSVERSALES


(Proyecto Tunning)

Instrumentales Interpersonales Sistémicas

1.Capacidad de análisis 1.Capacidad crítica y 1.Capacidad de aplicar


y síntesis autocrítica los conocimientos en la
práctica
2.Capacidad de 2.Trabajo en equipo
organizar y planificar 2. Habilidades de
3.Habilidades
investigación
3.Conocimientos interpersonales
generales básicos 3. Capacidad de
4.Capacidad de trabajar
aprender
4.Conocimientos básicos en un equipo
de la profesión interdisciplinar 4.Capacidad para
adaptarse a nuevas
5.Comunicación oral y 5.Capacidad para
situaciones
escrita en la propia comunicarse con
lengua expertos de otras áreas 5. Capacidad para
generar nuevas ideas
6.Conocimiento de una 6.Apreciación de la
(creatividad)
segunda lengua diversidad y
multiculturalidad 6.Liderazgo
7.Habilidades básicas de
manejo del ordenador 7.Habilidad d trabajar en 7. Conocimiento de
un contexto internacional culturas y costumbres de
8.Habilidades de gestión
otros países
de la información 8.Compromiso ético
(habilidad para buscar y 8. Habilidad para
analizar información trabajar de forma
proveniente de fuentes autónoma
diversas)
9.Diseño y gestión de
9.Resolución de proyectos
problemas
10. Iniciativa y espíritu
10. Toma de decisiones emprendedor

22
Actividades. 11. Preocupación por la
calidad

12. Motivación de logro

Fuente: Consejo General de Enfermería18.

 Segundo ciclo.

El objetivo final del Máster Universitario es la especialización a través de la


obtención de unos conocimientos sobre una materia concreta; asimismo, abre las
puertas a la posibilidad futura de realizar proyectos de investigación y obtención
de Doctorado. Los estudios del segundo ciclo contienen 60 o 120 créditos ECTS
(uno o dos años) de formación tanto teórica como práctica; asimismo, para la
obtención de título es necesaria la elaboración del Trabajo Fin de Máster 19.

Otra opción existente en la carrera de Enfermería en este segundo ciclo es la


realización del EIR, en la que te conviertes en enfermera especialista que ejerce
su trabajo supervisado a tiempo completo (durante dos o tres años) dentro de la
rama escogida con el fin de aprender y desarrollar las habilidades, técnicas y
competencias necesarias para ejercer con responsabilidad dicha profesión 20,21.
Actualmente, se pueden escoger entre seis especialidades22:

 Enfermería Obstétrica –  Enfermería Geriátrica.


Ginecológica.  Enfermería Familiar y
 Enfermería de Salud Mental. Comunitaria.
 Enfermería del Trabajo.  Enfermería Pediátrica.

23
La forma ordinaria de acceder a este programa formativo es presentándose al
examen anual organizado para ello. Una vez publicados los resultados oficiales
de esta prueba, las plazas serán escogidas en orden de mayor a menor
puntuación obtenida23. Otra forma de obtener el título de Enfermera Residente es
a través de la homologación de títulos anteriores o por el reconocimiento de la
trayectoria laboral en algunas de estas áreas24 (Figura 3).

Figura 3: Vía especial de obtención del título de Enfermero Especialista.

Fuente: Consejo General de Enfermería – Acceso especial24

 Tercer ciclo.

El objetivo del Doctorado en la formación avanzada en determinado tema y su


investigación25. La duración de este ciclo en la enfermería es de un máximo de
tres años (cinco años si es a tiempo parcial) y concluye con la defensa de los
resultados de la investigación realizada: la Tesis Doctoral26.

6.2.3. Enfermera de Anestesia, Reanimación y Terapia del Dolor.


Las enfermeras que se dedican al campo de trabajo de la Anestesia, la
Reanimación y la Terapia del Dolor desempeñan su trabajo en el terreno pre, intra
y postoperatorio (consulta pre-anestésica, preparación del quirófano y del
paciente o en el control del dolor postquirúrgico), además de desarrollar al igual
que el resto sus tareas docente, investigadora, gestora y asistencial 5. Dada las
posibilidades actuales de educación en enfermería que reciben todas las
personas que se dedican a ello, estos profesionales están perfectamente

24
capacitados para adquirir una formación específica y avanzada en esta área de
trabajo enfermero y cualquiera de las otras.

A lo largo de todo el mundo, se han encontrado diferentes posibilidades en la


situación laboral del personal de enfermería de anestesia7:

 Actuación de enfermería totalmente independiente de los médicos


anestesistas.
 Trabajo del personal de enfermería bajo la supervisión de los
anestesiólogos.
 Actuación de las enfermeras bajo la supervisión de los anestesistas, pero
con un mayor catálogo de técnicas que pueden realizar.
 El desempeño laboral de las enfermeras corresponde con la asistencia al
médico anestesista.

Desde el comienzo de la anestesia, en Estados Unidos las enfermeras fueron las


encargadas de la administración de los fármacos y así fue evolucionando en el
tiempo hasta la creación de esta especialidad7. Por esto, el papel de la EARTD
está reconocido, goza de total independencia en sus actuaciones diarias en
algunos estados, mientras que en otros está supervisada y su actividad laboral
está guiada por protocolos estandarizados, además de tener una educación
continua dentro de su campo7, 27. La AANA reivindica el papel de estas
profesionales de la enfermería, ya que poseen los conocimientos y competencias
necesarias para realizar y ejecutar una evaluación previa del paciente y su plan
de cuidados de manera autónoma, pero se encuentran con el intrusismo laboral
dentro del campo de actuación de los médicos anestesistas, además de con
barreras administrativas y políticas27, 28. Asimismo, durante los últimos años, en
algunos estados de este país se ha construido la figura de los “asistentes del
anestesiólogo” con un año de formación de ciencias básicas y dos de anestesia:
actúan bajo la responsabilidad y supervisión del anestesista y están desplazando
a las enfermeras en estas tareas7.

Sin embargo, en nuestro país, la Enfermera de Anestesia, Reanimación y Terapia


del Dolor, se caracteriza por presentar una fragilidad dentro de su formación y
reglamentación, además de no estar reconocida oficialmente como profesional de
enfermería6. La ASEEDAR-TD es la asociación que engloba a todo el conjunto de
25
profesionales de la enfermería que trabajan en el entorno de la anestesia,
reanimación y terapia del dolor. Dicha asociación, inició una labor de investigación
a través de una encuesta en la que recogían datos acerca del interés sobre ella,
los servicios donde se lleva a cabo o la labor asistencial que desempeñan los
profesionales que se dedican a ella, con el fin de que fuese reconocida
oficialmente en España y estuviese integrada dentro de la especialidad de
Enfermería de Cuidados Especiales6. Posteriormente, se encargaron de recoger
documentos de apoyo de diferentes asociaciones de profesionales cuyo trabajo
está directamente relacionado con la EARTD y de diferentes hospitales y
servicios6. Años más tarde, desarrollaron un modelo de plan de estudios que se
debería desarrollar6.

Aun conociéndose la cantidad de tareas que desempeñan en relación con el


beneficio del paciente y con los de cuidados del mismo a lo largo de todo el
proceso quirúrgico, así como la limitación de cada profesional a las tareas que les
compete (sin olvidarse del trabajo en equipo) y su necesidad debido a la evolución
y aumento de demanda de los cuidados durante la anestesia, contribuyendo
también al desarrollo profesional de esta profesión, en España la Enfermería de
Anestesia, Reanimación y Terapia del Dolor no está oficialmente reconocida como
especialidad enfermera. Asimismo, este trabajo no está incluido dentro de
ninguna especialidad quirúrgica ni tiene la suya propia, por lo que el profesional
que se quiera formar en ello debe realizar un curso de postgrado en el que se
integre esta rama de la Enfermería o cursos de formación específicos sobre la
Enfermera de Anestesia organizados por clínicas u hospitales.

6.3. La Enfermera de Anestesia, Reanimación y Terapia del


Dolor: sus competencias.
La EARTD, según la IFNA, es aquella enfermera que provee o participa en la
realización de técnicas avanzadas o especializadas y servicios de anestesia a
pacientes que requieran de la misma, cuidados respiratorios, resucitación
cardiopulmonar y/u otra emergencia y servicios de mantenimiento de vida cuando
sea necesario. Asimismo, participa en la aplicación de las diferentes técnicas

26
analgésicas, tanto para el dolor agudo, como el crónico, en el ámbito de las
clínicas o unidades del dolor5; es decir, aquella que desarrolla su actividad
profesional en los campos de la consulta pre-anestésica, el quirófano y las áreas
de recuperación quirúrgica, así como en las unidades del dolor.

Gracias al marco educativo actual en el Grado de Enfermería y a la formación


recibida en las diferentes opciones que hay de convertirse en enfermera de
Anestesia, Reanimación y Terapia del Dolor, estamos totalmente capacitadas
para adoptar este papel y desempeñar todas las funciones mencionadas de
manera independiente, ya que no existe diferencia entre la actuación de una
EARTD o un médico27, además de que las actuaciones de las enfermeras
conllevan menos costes económicos que la de los médicos27.

En aquellos países, hospitales o clínicas que no cuentan con esta figura todas las
tareas que le corresponden y lleva a cabo la EARTD tienen que ser
desempeñadas por otros miembros del equipo de enfermería (generalmente por
la enfermera circulante), lo que puede desembocar en una sobrecarga de tareas,
con los errores, accidentes y burn out que ello conlleva.

Inherentemente a la profesión enfermera y sin tener en cuenta en qué


especialidad trabaja, todos los profesionales desempeñan varios roles 5, 29 (Figura
4):

 el rol investigador para contar con las últimas actualizaciones científicas;

 asistencial como administrador de cuidados y defensor de la salud de


nuestros pacientes;

 el rol gestor de los cuidados o fármacos, así como en los registros de


enfermería;

 rol comunicador en cuanto a la educación para la salud de todos los


pacientes, familias o comunidades;

 función docente y de formación continua a lo largo de toda la carrera


laboral;

27
 y el papel colaborador para un ambiente adecuado de trabajo dentro del
equipo multidisciplinar, estando también comprobado que el aprendizaje en
conjunto mejora las habilidades y los conocimientos de todos los miembros
del mismo, así como la capacidad de trabajo grupal30.

Asimismo, todo ello tiene que ser articulado con profesionalidad, a través del
pensamiento crítico y reflexivo, sin desentenderse del marco legislativo dentro del
que actúan los profesionales de enfermería y siguiendo el Código Ético y
Deontológico de nuestra profesión29, 31.

Figura 4: Roles de Enfermería.

Investigador

Colaborador Asistencial

Comunicativo Docente

Administrativo y
gestor

Fuente: elaboración propia.

6.3.1. Entrevista y consulta pre-intervención.


La responsabilidad de la programación y evaluación de la consulta pre-anestésica
recae sobre los anestesiólogos, responsables de una buena gestión de los
recursos de los que disponen32. Sin embargo, gracias a la Ley de Ordenación de
las Profesiones Sanitarias, se decide crear un sistema de trabajo en equipo en el
que las tareas de anestesia se repartan en función de la formación y las
competencias de cada profesional7, 32. De esta forma aumenta la seguridad de los
pacientes y disminuyen las complicaciones, y repercute de manera positiva en los
profesionales: aumenta la eficiencia y a satisfacción del personal y se consigue la
mejora de las habilidades y un mejor desarrollo profesional de todo el equipo 7, 32.

28
Con esta nueva dinámica de trabajo, la consulta de enfermería está protocolizada
y bajo la tutela del anestesiólogo en pro de una buena práctica clínica 32. En esta
fase del proceso quirúrgico, la enfermera junto con el anestesiólogo encargado
aprovechan la consulta preoperatoria para realizar una valoración del paciente y
exploración física en busca de factores de riesgo que haya que tener en cuenta a
la hora de decidir la técnica quirúrgica y anestésica como: el peso y la talla, otras
patologías presentes que no sean las causante de la intervención, medición de
constantes vitales, medicación habitual, alergias o prótesis que pueda tener, entre
otros datos5.

La EARTD aprovechará esta consulta para proporcionar al individuo toda la


información específica sobre el proceso quirúrgico al que va a ser sometido:
técnica quirúrgica, tipo de anestésica, posibles complicaciones…para que firme el
consentimiento informado siendo consciente5. En este instante, también se
aprovechará para informar sobre todas aquellas medidas preparatorias que es
necesario que el paciente tome antes de la intervención: medidas higiénicas,
dietas o ayunas, preparación intestinal o pruebas complementarias 5. En este
proceso es muy importante implicar a la familia, pues es el apoyo más cercano
que tienen los pacientes que van a ser intervenidos5.

Al mismo tiempo que se le proporciona toda la información que el individuo debe


de conocer y se le realiza la valoración preoperatoria, la EARTD aprovechará para
buscar en el paciente (o sus acompañantes) signos de ansiedad y preocupación
sobre este nuevo proceso que enfrentan y tratará de disminuirlos; conviene el
paciente y su entorno conozcan que existe una red de profesionales de
enfermería que le acompañará durante todo el proceso y a los que puede acudir
en caso de tener alguna duda5.

Aunque la práctica vigente es la consulta de enfermería tutelada por el médico,


existen guías clínicas y protocolos que respaldan la evaluación pre-anestésica
independiente por parte de la EARTD de aquellos pacientes que no tienen
ninguna patología asociada y son candidatos a cirugías menores: pacientes ASA I
– ASA II en cirugías de grado 0 o I32.

29
6.3.1. Periodo inmediato pre-operatorio.
Antes de la intervención la enfermera de anestesia deberá realizar un chequeo y
valoración del correcto funcionamiento de todos los sistemas y aparatos que
vayan a ser utilizados durante la intervención5, 29. Además, todos estos sistemas
deben de ser los adecuados según la normativa vigente29; también se debe
preparar todo aquel material que vaya a ser necesitado durante la intervención5,
29. Todas estas verificaciones se realizan con el fin de evitar errores y accidentes
y evitar tiempos de espera innecesarios5. Hay que realizarlo antes de la llegada
del paciente a la sala de intervención, para disminuir su espera y evitar que
incremente la ansiedad en caso de que algún aparato no funcione5.

El 26% de los accidentes que ocurren durante la anestesia y la intervención es a


causa de un mal funcionamiento de los aparatos o de un mal chequeo de los
mismos, lo cual es fácilmente evitable si la Enfermera de Anestesia lleva a cabo
estas comprobaciones de manera correcta27.

Asimismo, todos los dispositivos que se utilizan dentro del quirófano cada vez
son más modernos y se adaptan a las nuevas tecnologías que hay en el mercado,
que aunque conlleve un periodo de adaptación, las enfermeras estamos
adecuadamente capacitadas para asumir debido a que la formación que se recibe
(tanto las enfermeras generalistas como las EARTD) ha ido evolucionando y
adaptándose a las necesidades del entorno sanitario (sanitarias, económicas,
políticas o de las nuevas tecnologías)30.

6.3.2. Periodo peri-operatorio.


Antes de cualquier procedimiento, la Enfermera de Anestesia realiza en el
antequirófano una verificación rápida sobre algunos datos de vital importancia
(alergias, si porte prótesis o complementos metálicos…) para la anestesia e
intervención y se comprueba que se posee el consentimiento informado firmado 5,
29, 31. Una vez realizadas todas las comprobaciones, tanto de monitores y equipos
como de la información relacionada con el paciente, se procede a su paso a la
sala de intervención.

30
Una vez dentro del quirófano se procederá a la preparación del paciente para la
anestesia, es decir, se canalizará un acceso venoso y otro arterial (si fuese
necesario), se monitorizará las constantes vitales y el ECG y se iniciará la
sedación del paciente colaborando con el anestesiólogo en todo momento 5, 29, 31;
a lo largo de este proceso, la Enfermera de Anestesia tratará de disminuir la
ansiedad y preocupación del paciente5. Posteriormente, el paciente será colocado
en la posición quirúrgica indicada para su intervención y se le colocarán las
medidas de protección y confort que sean necesarias5.

Cuando ya se haya iniciado la intervención, la EARTD individualizará un plan de


cuidados en función del paciente, técnica, tipo de anestesia y a lo largo de toda la
intervención deberá5, 29, 31: verificar de forma continua la permeabilidad de la vía
aérea; la oxigenación a través del color de piel, sangre, gasometría…; comprobar
una adecuada circulación sanguínea a través del relleno capilar, pulso, tensión
arterial…; en caso de ser necesario, también se intentará mantener la
normotermia del paciente mediante los colchones de calor o infusión de líquidos
calientes y deberán reconocerse los signos de hipertermia o hipotermia. Así
mismo, se monitorizará la función neuromuscular en caso de utilizar fármacos
bloqueantes neuromusculares5, 29.

Todas estas acciones pueden ser desempeñadas independientemente por la


Enfermera de Anestesia ya que, gracias a la formación recibida durante su carrera
educativa, está perfectamente capacitada para ello, así como para formar parte
junto a todo el equipo quirúrgico en la toma de decisiones que competen al tipo de
anestesia, posición quirúrgica, fármacos o tipo de monitorización. Sin embargo,
tanto las tareas del periodo pre-quirúrgico y peri-operatorio que le corresponden a
la EARTD son realizadas por otros miembros del equipo de enfermería quirúrgica,
generalmente por la enfermera circulante, aumentando su carga de labores a
desempeñar. Por consiguiente, al tener que realizar más tareas en el mismo
tiempo el estrés de esta enfermera aumentará, contribuyendo también al aumento
de la probabilidad de cometer fallos o accidentes y retrasando el tiempo de inicio
de la intervención.

31
6.3.3. Periodo post-operatorio.
Una vez el paciente ya se haya despertado de la anestesia o sedación con la
colaboración de todo el equipo, la EARTD procede a realizar los registros de
todos los cuidados que haya precisado el paciente durante la intervención5, 29, 31.

Cuando ya se haya terminado este proceso de registros y el despertar de la


intervención y anestesia, la enfermera de anestesia será la responsable de
trasladar al paciente a la unidad donde será vigilado por los profesionales hasta
su recuperación inmediata de la operación5, 29, 31.

6.3.3.1. Área post-anestésica.


En esta zona, se llevarán a los pacientes para proporcionar los cuidados y la
vigilancia que sea necesaria para su adecuada evolución y recuperación de la
intervención5.

Será necesario que los profesionales de reanimación que allí se encuentren


trabajando reconozcan los síntomas de las posibles complicaciones que puedan
presentar y sean capaces de llevar a cabo una actuación precoz. Asimismo, es
necesaria una continua valoración del dolor del paciente para la administración
de cuidados y tratamiento analgésico según la prescripción médica 5.

6.3.3.2. Unidad de reanimación post-quirúrgica.


A esta área llegan los pacientes que se encuentran en estado crítico después de
la intervención quirúrgica5.

Las EARTDs son las responsables de establecer un plan de cuidados


individualizado según las características de cada paciente, la intervención a la que
ha sido sometido y el tipo de anestesia que se ha empleado para garantizar su
óptima evolución y recuperación5. En necesario que todos los parámetros
(respiratorios, ventilatorios, cardiológicos, hemodinámicos y temperatura) sean
monitorizados y evaluados las veinticuatro horas del día y saber actuar
precozmente ante las posibles complicaciones5.

En estas situaciones es muy importante la atención a la familia a través de la


empatía para generar un clima de confianza5. También se debe informar de los
horarios de visita y los horarios de información acerca de la salud del allegado, así

32
como de hacer todo lo posible porque la comunicación familia-paciente y
paciente-profesional sea lo más completa y satisfactoria posible5.

6.3.4. Unidades del dolor.


En este campo, la EARTD es la encargada de elaborar un plan de cuidado
individualizado y específico para cada paciente y la enfermera puede desempeñar
funciones de tipo asistencial o de intervención en los diferentes procedimientos
que se realicen7.

Antes de elaborar dicho plan de cuidados, es necesaria la realización de una


valoración inicial de la que se obtenga toda la información acerca del dolor que
sufre el paciente5: qué tipo de hábitos tiene (costumbres, trabajo, vida social…),
localización del dolor, desde cuándo sufre ese dolor (agudo o crónico) y cuál es
su intensidad, factores que pueden modificar el dolor y las manifestaciones de ese
dolor en el paciente, tanto física como psíquicamente 5. Una vez recabada toda
esta información, la EARTD junto con el médico responsable, elaboran el plan de
cuidados adaptado al paciente y a su tipo de dolor y prescriben un tratamiento 5;
será la enfermera la encargada de realizar la tarea de educación para la salud al
paciente y su familia en cuanto al porqué de dicho tratamiento, tipo e analgesia
que se le pauta y la dosis correspondiente, los efectos adversos de esos
fármacos y la pauta de toma de dicho tratamiento5, 31.

En el caso de los pacientes domiciliarios, la EARTD realizará una educación más


profunda al paciente y sus familiares, incidiendo en: información suficiente sobre
el tratamiento prescrito y cómo llevarlo a cabo, recomendaciones acerca de cómo,
dónde y cuánto tiempo dura la técnica escogida para el tratamiento del dolor,
informar sobre posibles efectos adversos o molestias, asegurarse de que el
paciente posee todo el material necesario para la realización de la técnica (es
posible que la enfermera deba participar al comienzo del tratamiento para ayudar
al paciente) 5. También se recomienda entregar una serie de instrucciones y
recomendaciones que puedan servir de utilidad al paciente en su domicilio en
caso de que le surjan dudas 5. En el caso de los pacientes que están en
tratamiento en su domicilio con opioides vía transdérmica o poseen implantes

33
quirúrgicos para la administración de analgesia, es recomendable que la
enfermera realice un seguimiento y control de ellos5.

Dentro de las Unidades del Dolor Agudo, el dolor tiene que ser tratado como una
prioridad en los cuidados. Es muy importante el control del dolor postoperatorio
para la pronta recuperación del paciente5, 29, 31.

Tanto en las Unidades y Clínicas de Dolor y en las Áreas de Sedación, las


Enfermeras de Anestesia, Reanimación y Terapia del Dolor tienen un papel muy
importante e ineludible en relación con la calidad asistencial, ya que el desarrollo
de la medicina implica una atención multidisciplinar al paciente. Sin embargo,
estos campos de trabajo están experimentando un desarrollo irregular que
depende de los recursos que el hospital disponga para ello, al igual que la
formación de enfermería en estos campos y la dotación de los mismos de estos
profesionales7.

34
7. Discusión.
Pese a que la enfermera una figura indispensable en los cuidados de la salud, su
mención a lo largo de la historia es prácticamente nula. En concreto, cuando se
habla de la evolución de la anestesia y los cuidados que precisa y pese a ser un
papel fundamental en el terreno, se encuentran muy pocas referencias del
desarrollo histórico de los profesionales de enfermería en este ámbito.

Sin embargo, a medida que avanzaban los tiempos y las necesidades de la salud
de la población cambiaba con ellos, la formación en enfermería también lo hacía:
se pasó de tener una educación técnica, a integrarse en la universidad y un nuevo
cambio que los integra dentro de los estudios de grado y los convierte en
estudiantes autónomos. Gracias a este desarrollo de la estrategia formativa y los
cambios en las materias y modelos educativos, los profesionales de la enfermería
están perfectamente capacitados para asumir las diferentes tareas que engloban
los cuidados de la Anestesia, Reanimación y Terapia del Dolor; pese a todo, sigue
sin haber una especialidad enfermera que reconozca este trabajo, y pese a los
beneficios que acarrea una EARTD, su existencia dentro de equipo de salud es
decisión individual de cada centro asistencial.

En cuanto a las competencias que lleva a cabo una Enfermera de Anestesia,


Reanimación y Terapia del Dolor en su vida laboral, cabe destacar que las
definidas por la IFNA y la OMS únicamente se centran en el ambiente de
quirófano, mientras que las competencias que describe la ASEEDAR-TD van más
allá del papel de la enfermería en la intervención quirúrgica y engloban también la
visita pre-anestésica, el periodo inmediato de recuperación después de la
intervención y sus diferentes funciones con respecto a la Terapia del Dolor. En
todos los ámbitos, la enfermería desarrolla un papel activo con respecto a los
cuidados que precisan los pacientes, acarreándoles también beneficios: a nivel
psicológico, asistencial y laboral evitando la sobrecarga de trabajo en el resto de
profesionales.

35
8. Conclusión.
Aunque las referencias encontradas hayan sido pocas, la enfermería siempre ha
estado presente en el desarrollo de la anestesia. Asimismo, la Enfermera de
Anestesia, Reanimación y Terapia del Dolor está muy implicada en los cuidados
de la anestesia, tanto en la visita preoperatoria durante la entrevista al paciente,
como en el proceso de anestesia peri y post-operatorio donde realiza un plan de
cuidados individualizado y holístico a cada paciente para producir en él los
mayores beneficios posibles; además, también ejerce sus funciones dentro de las
Unidades del Dolor proporcionando un soporte y realizando las tareas de
educación para la salud a los paciente con tratamiento analgésico pautado.

Actualmente, las enfermeras contamos con un marco educativo que nos capacita
plenamente para asumir estas funciones (y otras de otros campos sanitarios); sin
embargo, esta especialidad enfermera continúa sin ser oficial, teniendo que
recurrir a otras opciones para adquirir esta formación y siendo de elección
individual de cada centro asistencial incorporar esta figura a su equipo de salud.

36
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