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Vol. 8 Nº4 págs. 569-581.

2010
https://doi.org/10.25145/j.pasos.2010.08.049

www.pasosonline.org

La patrimonialización de un paisaje marítimo:


de la arena de la playa a la arena política

Eliseu Carbonelli
Institut Català de Recerca en Patrimoni Cultural (España)

Resumen: En este artículo exploramos los significados y usos sociales que tiene la playa en una
población de la costa central catalana. Consideramos de forma especial los procesos de patrimo-
nialización que se están llevando a cabo en esta playa por parte de una asociación de amantes de la
navegación tradicional, proceso que está afectando a otros usuarios de la playa. El conflicto vivido
a raíz de la oposición ciudadana a un proyecto de rehabilitación del frente marítimo pone de relieve
que la playa es considerada patrimonio en sí misma e incide de lleno en los discursos y representa-
ciones de la identidad local. El proceso de patrimonialización de la playa se verá inmiscuido en las
dinámicas de inclusión/exclusión como sujeto y objeto.

Palabras clave: Procesos de patrimonialización; Antropología marítima; Playa; Paisaje; Identidad.

Abstract: The paper explores the social meaning and uses of a beach located in the central coast of
Catalonia (Spain). We focus on the heritage process or “patrimonialization” carried on in this beach
by an association devoted to traditional sailing, and how this process affects to other beach users. A
conflict generated around the project to construct a seafront promenade in the same place showed
up that the beach itself is considered heritage by local people and that it fall into the discourses and
representations of local identity. The heritage process of the beach will be involved in the inclusion/
exclusion practices both as subject and object.

Keywords: Heritage process; Maritime anthropology; Beach; Landscape; Identity.

i Institut Català de Recerca en Patrimoni Cultural. Email: eliseuc@icrpc.cat.

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Introducción geomorfológico y muy inestable, la are-


na de la playa, es concebida socialmente
En los últimos años estamos asistiendo como elemento esencial de su patrimonio
a un creciente interés de la antropología e identidad y los cambios en los usos de la
en España por los procesos de patrimonia- misma son interpretados como amenazas
lización de la naturaleza, centrados ma- a la identidad local. Todo ello genera na-
yormente en estudios etnográficos sobre turalmente un conjunto de tensiones por
espacios naturales protegidos (Pascual y la competencia y apropiación de la arena
Florido del Corral, 2005; Frigolé y Roigé, que actúa como verdadera arena política
2006; Beltran, Pascual y Vaccaro, 2008). A de la vida local. Observado bajo esta pers-
la luz de estos y otros trabajos resulta bas- pectiva, el proceso de patrimonialización
tante claro que los procesos de patrimonia- de la playa adquiere una clara dimensión
lización de la naturaleza tienen que ver con política donde las dinámicas de inclusión
la producción de localidad e identidad cul- y exclusión toman un especial relieve.
tural (Pereiro, 2003; Prats, 2006; Frigolé,
2007). El presente artículo pretende contri- El patrimonio cultural en la playa
buir a este debate mostrando un caso de es-
tudio un tanto singular puesto que centra El interés por la navegación tradi-
su atención en una playa, espacio que tiene cional recreativa se remonta a la segun-
un fuerte componente tanto de espacio na- da mitad del siglo XIX, cuando surge
tural como de espacio público/urbano, y los la práctica del “yachting” y el turismo
conflictos surgidos alrededor de su uso so- náutico (Esteban Chapapría, 2000). Más
cial, uso que comprende específicamente su recientemente ésta actividad ha ido ad-
patrimonialización y uso patrimonial. quiriendo una dimensión patrimonial li-
El trabajo que presentamos está basado gada también al turismo (Knafou, 2002).
en un trabajo de campo realizado de forma Dejando aparte los museos navales, la
intensiva durante el año 2007 aunque to- consideración de la navegación tradicio-
davía no ha concluido, por lo que se trata nal como patrimonio cultural es bastante
de una investigación en marcha y las con- reciente. Por ejemplo, en la Polinesia, en
clusiones deben ser tomadas como prelimi- los últimos treinta años se está llevando
nares1. La playa estudiada se encuentra a cabo un esfuerzo de recuperación de las
situada frente al centro urbano de una po- técnicas náuticas y constructivas de em-
blación de la costa central catalana2 , cono- barcaciones tradicionales como una forma
cida como “playa de los pescadores” puesto de reafirmación de la identidad cultural
que allí varaban las barcas de pesca hasta y confraternización entre distintos archi-
1985, fecha en que se retiró el ultimo pa- piélagos del Pacífico (Esteban, 2007). El
trón. Hasta el momento nuestra investiga- mismo proceso ha podido observarse en
ción nos lleva considerar que el proceso de distintos puntos de Europa, donde a raíz
patrimonialización al que estamos asistien- de iniciativas públicas y privadas se han
do puede haber seguido un camino similar ido recuperando embarcaciones de made-
al que ha sido descrito por Joan Frigolé ra y organizando eventos como el encuen-
(2005) para el caso de las “trementinaires” tro de embarcaciones tradicionales que se
de ciertos valles pirenaicos: la desaparición celebra desde 1992, cada cinco años, en el
de un oficio tradicional muy residual en los puerto de Brest, en la Bretaña francesa.
últimos años de actividad y hasta un cierto Esto podría llevarnos a hablar de la
punto marginal, que reaparece con fuerza relación entre patrimonio y turismo, y
en forma de patrimonio cultural en un con- específicamente en el caso del patrimonio
texto de creación de localidad y negociación marítimo. Aunque no es fundamental-
de identidades. mente el objeto de este artículo discutir
Tratándose de los procesos de patri- las implicaciones de tal relación, el caso
monialización que tienen lugar en un una que aquí expondremos muestra como
playa, a primera vista podría pensarse una operación patrimonial basada en la
que el objeto de patrimonialización serán búsqueda de lo auténtico coincide con la
los bienes muebles e inmuebles ligados a la búsqueda de lo auténtico de la experiencia
pesca, la construcción naval y la navega- turística (Wang, 1999), especialmente en
ción tradicional ubicados sobre la playa o el marco del llamado “turismo cultural”.
colindantes, pero la aproximación etnográ- Además nuestro estudio se centra en una
fica nos muestra que lo que está en juego operación patrimonial situada precisa-
es la patrimonialización de la playa en sí, mente en un espacio turístico por antono-
de la arena misma, ya que como se verá en masia, como es la playa.
ella recae en buena medida la representa- Según Chias (2002) el turismo cul-
ción identidad local. Así pues, nuestra in- tural consiste en un viaje que responde
vestigación nos muestra como un elemento al interés por “conocer otras culturas

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contemplando recursos culturales, princi- expone que en Francia, según un acuerdo


palmente relacionados con la historia y el entre los Ministerios de Defensa y Cultura,
arte”. Bonet (2005) añade que el turismo la Marina debe facilitar el acceso del públi-
cultural emerge en el contexto de un mer- co, entiéndase de los turistas, a su patrimo-
cado turístico que busca diversificarse de- nio. Pero aunque la Marina, añade el autor,
bido a “la creciente importancia de la nue- desee asegurar la valorización turística de
va clase media urbana, con un alto nivel de su patrimonio, esto no entra dentro del cua-
estudios, interesados en conocer y experi- dro de sus misiones, más bien al contrario,
mentar algo especial diferente de la oferta el uso turístico del patrimonio naviero mi-
turística masiva”. En cambio, Moragues litar implica que esos buques de guerra
(2006: 69) advierte que hablar de “turismo se “repliegan” a la reconversión turísti-
cultural” implica suponer que el turismo, ca. En definitiva, como advierte Bernard
en términos generales, no es una actividad (2002:323) “las relaciones que se estable-
cultural –lo cual sería más que discutible–, cen entre turismo y patrimonio marítimo
o en cualquier caso que “existe una especie reposan sobre la ambigüedad de conciliar
de graduación de culturalidad del viaje en la preservación con la explotación del patri-
función de las motivaciones del sujeto y de monio”. Un ejemplo de ello sería las dificul-
las opciones que tiene su periplo”. Ya Agus- tades de mantener grandes veleros de épo-
tín Santana nos advirtió sobre las comple- ca para transportar turista adaptándolos a
jas relaciones entre patrimonio y turismo. las normativas de seguridad actuales. Ello,
Si por un lado, el patrimonio tiene unas ba- aunque bastante complejo, no es en abso-
ses identitarias, políticas y educativas, el luto imposible. Y de hecho, incluso para el
uso turístico del patrimonio difiere de las caso concreto de la pesca artesanal, no es
mismas y “si bien se mantiene su compo- solo posible sino que incluso resulta desea-
nente simbólico, el ente presumiblemente ble plantear la convergencia de intereses
patrimonial ha de ser frecuentemente re- de la poblaciones locales de pescadores con
creado, acompañado con una escenografía la industria turística, encontrando el punto
apropiada y, de forma esporádica, espec- de confluencia en la patrimonialización de
tacularizado” (Santana, 1998), para satis- la actividad pesquera (Santana y Pascual,
facer la demanda turística. Finalmente, 2003; Alegret, 2003; García-Allut, 2003).
Núria Galí, en su tesis doctoral sobre las Volviendo a nuestro estudio, este no se
miradas turísticas a la ciudad de Girona, ha centrado de forma exclusiva en una acti-
defiende que la manera en que los turis- vidad tradicional, como puede ser la pesca
tas se relacionan con el patrimonio debe artesanal, así como la navegación o la cons-
ser considerada como única y específica y trucción naval en sus formas tradicionales,
que se explica “por la naturaleza singular sino que hemos tomado como punto de par-
de la propia experiencia turística” (Galí, tida el estudio de un espacio público, una
2004: 58-59). Galí sostiene que el consumo playa, donde actualmente se está llevando
turístico del patrimonio tiene cuatro carac- a cabo un proceso de patrimonialización de
terísticas propias: 1. Ausencia de un factor dichas actividades. Antes de centrarnos en
identitario; 2. El contexto extra-ordinario la descripción de este proceso en la actua-
de la experiencia turística; 2. El valor sim- lidad, ofreceremos una breve descripción
bólico del patrimonio; y 4. El consumo frag- general de la playa.
mentado. La playa que estamos estudiando se en-
En el caso concreto de la relación entre cuentra ubicada frente al centro histórico
patrimonio marítimo y turismo deberíamos de un pueblo de unos cinco mil habitan-
partir de los mismos principios genera- tes de la provincia de Barcelona. Es una
les expuestos anteriormente. Por ejemplo, playa pequeña, con una extensión de unos
Knafou (2002) comenta el caso del mítico trescientos metros de longitud y anchura
transanlántico Queen Mary uno de los variable en función de la acción del mar.
mayores elementos del patrimonio flotante El límite urbano del centro histórico por
norteamericano, tanto por su relevancia en el frente marítimo lo traza la vía del tren.
la historia naviera como por su tamaño, a Superada ésta, por un paso a nivel, se ac-
pesar de haber sido profundamente trans- cede a la una avenida con apartamentos a
formado en su interior para reconvertirlo un lado y el mar enfrente. Al inicio de la
en hotel. Así, el uso turístico del patrimo- avenida, una plaza sombreada con bancos
nio marítimo implica por un lado, produc- y una fuente sirve de lugar de reunión de
ción de patrimonio, lo cual crea las bases ancianos durante el día y jóvenes por la no-
para su conservación, pero por otro lado che. Desde ella se accede a la playa de los
implica también su falsificación (Knafou, pescadores.
2002:318). Lo mismo sucede con la conser- Los pescadores abandonaron la playa
vación y uso turístico y patrimonial de los en los años ochenta. Hasta entonces fae-
buques militares. Así, Alain Roques (2002) naban cuatro barcas de arrastre más una

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docena aproximadamente de laúdes de re- proyecto más emblemático de la asocia-


deros. Todos ellos varaban en la arena de ción ha consistido en la restauración de
la playa. Un historiador local (Rodríguez, una pequeña construcción situada en la
1977) sitúa la época de esplendor de la pes- playa, destinada originariamente a alber-
ca a mediados del s.XIX, cuando las embar- gar los dos motores que se usaban para
caciones del pueblo se aventuraban hasta remolcar las barcas en la playa, instala-
aguas del golfo de Cádiz y el golfo de León. ción conocida popularmente como “la ca-
La pesca local tuvo un último repunte en seta del motor” o “de la maquinilla”.
la postguerra, pero en los años cincuenta Se trata de un edificio de 30 m2 que
esta actividad será paulatinamente reem- preside la playa de los pescadores en la
plazada por la industria textil. Las últimas zona superior central, adosada por la par-
barcas que varaban en la playa o bien se te posterior al andén de la estación de fe-
trasladarán a un puerto vecino o bien re- rrocarril. Las tres paredes restantes es-
sistirán hasta la jubilación del patrón. La tán dotadas de grandes ventanales para
imagen de decadencia quedará fijada en procurar la máxima visibilidad. Desde su
los anales ocultos de historia local con el interior se domina toda la playa a levante
abandono de una gran barca de madera so- y poniente y, enfrente, el horizonte mari-
bre la arena, que se irá deteriorando hasta no. La caseta fue construida en 1931 para
que a finales de los ochenta el alcalde deci- albergar el motor o “maquinilla” -según
de mandar a la brigada municipal con un la terminología local-, que permitía sacar
bidón de gasolina. las barcas del mar y remolcarlas arena
La imagen de la vieja barca de madera arriba con la ayuda de palos o traviesas
ardiendo sobre la playa contrasta con el mo- untadas con sebo. En caso de alerta por
vimiento de recuperación del pasado mari- temporal, las barcas se subían hasta la
nero de la población que actualmente, pa- parte más alta de la playa y antigua-
sados veinte años de aquella hoguera, está mente, incluso se subían hasta la vía se-
llevando a cado una asociación local con el cundaria del tren. Este mecanismo vino
apoyo de las administraciones. Todo resto a reemplazar la pareja de bueyes que se
material ligado a la pesca y la navegación usaban desde antaño para cumplir esta
tradicional es ahora objeto de protección función. En el interior de la caseta se dis-
patrimonial y a falta de grandes barcas de pusieron dos motores y un cabrestante.
pesca a restaurar se construyen réplicas El motor principal funciona con corriente
con un esfuerzo material y humano consi- alterna trifásica y hay un motor secunda-
derable. Pero no se construyen réplicas de rio, diesel, que se usaba en caso de avería
las embarcaciones de pesca tal como eran del motor principal o por interrupción del
en los años ochenta (construidas las más suministro eléctrico. Ambos motores fue-
antiguas a principios de los años treinta), ron adquiridos en la Exposición Universal
sino unos modelos más antiguos, los que de Barcelona en el año 1929 y nunca de-
se usaban a finales del siglo XIX, antes de jaron de funcionar. En los últimos treinta
la introducción del motor, aparejados con años, desaparecidas las barcas de pesca,
vela latina, con una silueta más estrecha, han sido mantenidos en funcionamiento
se diría que más “auténticos”. Y es que la por los miembros de otra asociación que
búsqueda de autenticidad será, como vere- también usa la playa para sus activida-
mos, uno de los elementos que impulsan el des, una asociación formada por gente
proceso de patrimonialización. mayor que tiene su pequeño bote de fibra
Este proceso está siendo llevado a cabo de vidrio en la playa para salir a pescar.
por una asociación de amantes de la vela La caseta fue rehabilitada tanto en su
latina y la navegación tradicional, nacida parte exterior como interior. La cubierta
el año 2001 con el objetivo de “promover la y los ventanales se renovaron. Se acondi-
conservación y difusión del patrimonio ma- cionó el acceso. Viejos cabos y pedazos de
rítimo”, según se recoge en su página web. cadena se retiraron y en su lugar se dispu-
Actualmente cuenta con medio centenar de sieron nuevas traviesas de madera como
socios que se han encargado de la restau- las que se usaban para la varada y cabos
ración de diversos laúdes de madera a los perfectamente enrollados. En el interior
que se dota del aparejo para navegar a vela se eliminó el chapapote, se hizo la puesta
latina, la construcción de una réplica de un a punto de los motores, se instaló un sis-
barco sardinero del s.XIX de diez metros tema de iluminación adecuado, se tiraron
de eslora y la organización y participación viejos cachivaches y se dispusieron sobre
en los distintos eventos de navegación tra- las paredes recién pintadas objetos deco-
dicional a vela que tienen lugar en verano rativos relacionados con la pesca, fotogra-
en varios puntos de la costa catalana, así fías y paneles didácticos que explican el
como otras actividades relacionadas con oficio tradicional de la varada. El día de
la promoción del patrimonio marítimo. El la inauguración pude oír a una mujer ma-

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yor lamentar que se hubiera retirado de la cambiante como el nuestro. La singulari-


caseta la mesa de jugar a la butifarra (ma- dad del lugar aparece como una pieza clave
lilla) donde se reunían los pescadores para del capital cultural local a ser preservado
jugar a naipes cuando hacía mal tiempo. en forma de patrimonio. Tilley (2006:15)
Este pequeño detalle es una muestra del añade que el tipo de paisaje que se acaba
contraste entre la cultura marítima como produciendo está inextricablemente ligado
experiencia de vivida y la cultura maríti- a las políticas de identidad, a las ideas so-
ma como patrimonio cultural. bre con quien se quiere vivir y a quien se
El exterior de la caseta también fue quiere excluir, quien forma parte del grupo
acondicionado y aquí encontramos un con- y quien queda fuera de él. Hemos podido
traste más serio sobre lo que acabamos de constatar estas dinámicas en el proceso de
anotar. Adosada a una de las paredes la- patrimonialización de la playa al que esta-
terales de la caseta, un pescador de unos mos asistiendo. Abordaremos esta cuestión
sesenta años, perteneciente a una antigua de forma específica en el último apartado
familia de pescadores del pueblo, habiendo del artículo.
perdido todas sus posesiones, según dijeron Nos centraremos ahora en tres afir-
mis informantes por causa del juego, había maciones que aparecen recurrentemente
dispuesto una lancha deportiva cubierta en nuestras entrevistas sobre la playa. La
con unas lonas y pernoctaba allí desde ha- primera hace referencia a la singularidad
cía varios años. La caseta del motor prote- de la playa, singularidad que recae en la
gía su cobertizo del viento y le procuraba calidad que la gente atribuye a la arena.
cierta discreción. Con motivo de la restau- La segunda es más bien un lugar común,
ración de la caseta del motor la lancha fue todo el mundo al hablar de la playa remar-
desplazada lo bastante lejos de su campo ca su función de plaza pública, de espacio
de visión y allí sigue, abierta al viento y de sociabilidad veraniega por excelencia. Y
a las miradas de los curiosos, aunque este en tercer lugar, la afirmación de que la pla-
hecho, según he podido comprobar, despier- ya es el elemento principal de la identidad
ta más ironía que compasión entre la gen- del pueblo. Esta afirmación, también recu-
te del lugar. Se trata de la “víctima” más rrente en nuestras entrevistas, se verá re-
directa del proceso de patrimonialización forzada por un discurso político ciudadano
de la pesca y la navegación tradicional: un surgido a raíz de unos hechos acontecidos
pescador fracasado que vive no precisa- en verano de 2007 que comentaremos en el
mente en un viejo laúd de madera sino en próximo epígrafe.
una moderna lancha de fibra de vidrio. La gente mayor del lugar se refiere a la
Con todo ello se pone de manifiesto que playa como “la sorra” (arena en catalán).
la rehabilitación de la caseta del motor y su La playa está compuesta de sablón, des-
transformación en instalación patrimonial, composición de granito. Cuando pregun-
forma parte de un proyecto de patrimonia- tamos a la gente su opinión sobre la playa
lización que no se limita a una infraestruc- responden de forma unánime que en este
tura en concreto sino que se extiende a su pueblo la arena es de la mejor calidad por-
entorno. Dicho de otro modo, el proyecto qué siempre está limpia, no tiene polvo
de patrimonialización incluye la playa y el como en otros pueblos: “la arena es siempre
conjunto de la fachada marítima, dando al nueva” –dicen todos. La gente habla de su
paisaje una consideración de patrimonio. playa desde el patriotismo local, de modo
parecido al que en otros lugares hablan de
La patrimonialización de la arena su gastronomía, sus fiestas o sus monu-
de la playa mentos, es decir, la playa, la arena, forma
parte de su patrimonio cultural.
Como ha mostrado Christopher Tilley, A diferencia de otras playas más pro-
identidad, paisaje y patrimonio están muy tegidas por la orografía, la playa de los
estrechamente relacionados. Los proce- pescadores es sumamente inestable. Los
sos de patrimonialización del paisaje tie- temporales de NE, las “llevantades”, van
nen por finalidad “la preservación de una absorbiendo la arena de la playa hasta
identidad romantizada, la búsqueda de la vaciarla por completo. Esto causaba gran-
pureza de grupos étnicos y la continuidad des inconvenientes a los pescadores que se
frente al cambio” (Tilley, 2006: 14). La pa- veían obligados a varar sus barcas en otra
trimonialización del paisaje actúa como re- playa del municipio cuando esto sucedía.
torno simbólico al pasado, a menudo como En cambio, cuando sopla fuerte el viento
una estrategia de defensa ante las incerti- ábrego, el temporal de SW o “garbinada”
dumbres del presente. El paisaje proporcio- devuelve la arena a esta playa, que comple-
na autenticidad, representa la estabilidad menta sus aportaciones con la arena prove-
frente al cambio, lo cual resulta bastante niente de la sierra litoral transportada por
complejo de gestionar en un mundo tan una rambla que desemboca a poniente de

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la playa de pescadores. Los temporales que tas, la gente se reúne a cenar o beber en
engullen y devuelven alternativamente la la playa. Muchos de los actos veraniegos
arena provocan un efecto auto-lavado, por organizados por el Ayuntamiento o por
lo que el polvo no llega a acumularse. Pero entidades locales tienen lugar en la pla-
siendo el Mediterráneo el mar con más re- ya de los pescadores o bien en una pla-
siduos plásticos del planeta (Linde, 2007), za colindante. También la asociación que
si no hay polvo en la arena, lo que encontra- impulsa el proyecto de patrimonialización
mos después de un temporal son todo tipo de la playa lleva a cabo sus actividades
de desechos, sobretodo en invierno cuando durante el verano, como el encuentro de
los servicios municipales no limpian la pla- embarcaciones de vela latina u otras ac-
ya, dato que se elude en las entrevistas. La tividades relacionadas con sus proyectos.
playa, en los discursos de los habitantes del A parte de estas actividades organizadas
pueblo, siempre está limpia y nueva. formalmente no hay que olvidar que la
Hay otro dato curioso a destacar en re- playa es el escenario de todo tipo de rela-
lación a la arena de la playa. Acabamos de ciones espontáneas e informales. La pla-
comentar que una rambla es responsable ya es realmente una plaza pública. Y en
de la aportación complementaria de arena. este aspecto de la vida social en la playa
Esta rambla discurre paralela a una carre- el quiosco de refrescos o chiringuito tiene
tera local que conecta el pueblo de la costa un protagonismo que hay que considerar
con sus vecinos situados a tan solo cinco de forma particular.
quilómetros al interior. La gente de este En la playa de los pescadores, el chi-
pueblo interior suele estacionar sus coches ringuito era conocido popularmente como
al lado de la rambla cuando van a la playa, el “tumulto”, nombre que describe muy
donde hay un gran estacionamiento. Allí la bien la gran concurrencia que atraía. Ha-
playa es más ancha y se extiende más de blo en pasado porqué el chiringuito cam-
un quilómetro hacia el sur, siendo pues un bió de dueños hace unos pocos años y ha
lugar de baño habitual y espacioso para la entrado en una cierta decadencia, aunque
gente que accede en coche. Como he podido sigue reuniendo mucha gente actualmen-
constatar en mis entrevistas, la gente de te. El “tumulto” fue inaugurado en los
la costa considera que aquella playa per- años sesenta por los operarios encarga-
tenece en cierto modo al pueblo del inte- dos del funcionamiento de la maquinilla
rior. Antes de llegar a la costa arrastrada y lo situaron justo al lado de la caseta del
por la rambla, la arena pasa por el pueblo motor. Estos operarios recibían el nombre
del interior y es como si les perteneciera de “palés”, en relación al palo o traviesa
a ellos, como si hubiera sido arrancada de con el que se traslada las barcas sobre la
sus montes antes de llegar a la playa, del arena, puesto que además de atender el
mismo modo que a ellos les pertenece la motor de varar eran los encargados de po-
arena de la playa de los pescadores situada ner la primera traviesa al varar y asistir
frente al centro del casco urbano. La are- al patrón en la delicada operación de bo-
na es patrimonio tanto en sentido cultural tar y varar. Los palés se jubilaron cuando
como en sentido notarial. Así se comprende la última barca de pesca dejó de precisar
mejor que cuando la gente de fuera del pue- sus servicios, pero siguieron explotando
blo planta sus sombrillas en la playa de los el chiringuito hasta que lo traspasaron
pescadores, los locales lo interpretan como hace algunos años. Cuando las barcas de
una verdadera usurpación, como he podido pesca empezaron una tras otra a abando-
observar y oír en más de una ocasión. Todo nar la playa para trasladarse a un puerto
ello da una idea del sentimiento de propie- cercano, los palés vieron reducidos sus in-
dad y apropiación que hay sobre la arena gresos, puesto que se les remuneraba con
de la playa. un 40% de parte de cada barca. De este
Es importante subrayar que no estamos modo, el aumento del turismo fue aprove-
hablando de una apropiación privada de la chado por los palés mediante el chiringui-
playa sino de una apropiación pública. La to como forma de compensar las pérdidas
segunda consideración que aparece recu- en su oficio al irse reduciendo el número
rrentemente al hablar de la playa con la de barcas de pesca y poder así continuar
gente del pueblo es que la playa es una pla- practicándolo, en lugar de abandonarlo
za pública. La playa es un lugar privilegia- por la construcción o los servicios como
do para la sociabilidad informal durante hacían otros pescadores. De modo que el
los meses de verano. En el clímax del vera- turismo, paradójicamente, permitió en
no, durante la Fiesta Mayor, la mayoría de esta playa el mantenimiento de la pesca
actividades festivas se celebran en la playa, tradicional todavía un par de décadas,
donde se instala una gran carpa para cele- puesto que sin palés hubiera sido inviable
brar bailes y conciertos. En ocasión de los y ellos no hubieran podido vivir de su tra-
fuegos artificiales que clausuran las fies- bajo en la playa sin el complemento econó-

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mico que les aportaba turismo a través del ción que, como hemos visto con el ejemplo
chiringuito. del chiringuito o el tipo de embarcaciones
Desde un punto de vista económico y que se restauran, no es totalmente cohe-
social, el chiringuito permite pues expli- rente a nivel histórico, sino que más bien
car la historia reciente de la pesca tradi- responde a un modelo idealizado de pesca y
cional en este pueblo. Pero en cambio el navegación tradicional y reconstrucción del
chiringuito no entra dentro de los planes pasado marítimo de la población, operando
de patrimonialización de la playa. Nadie así la patrimonialización de un paisaje ma-
por el momento ha propuesto restaurarlo rítimo como retorno simbólico al pasado.
en su estado original, aunque sin él no se En la búsqueda de autenticidad se recae en
entiende la historia reciente de la pesca. contradicciones. El pasado idealizado se si-
Al contrario, para los promotores del pro- túa aproximadamente en lo que se conside-
yecto patrimonial, el chiringuito es algo a ra la época del esplendor de la pesca, en la
suprimir. Así lo pude constatar a mediados segunda mitad siglo XIX, cuando los pesca-
de julio de 2007 cuando faltaba poco más dores se aventuraban en aguas lejanas, ya
de un mes para la inauguración del Centro que se reconstruye un tipo de embarcacio-
de interpretación. Algunas tardes me acer- nes anterior a la aparición del motor para
caba a la caseta del motor para observar las barcas de pesca, con una sublimación
como avanzaban los trabajos. Estos eran de la vela latina. No deja de ser paradójico
llevados a cabo con esmero por los miem- erigir un pequeño museo a un motor o “ma-
bros de la asociación de amantes de la vela quinilla” para un proyecto patrimonial que
latina, que destinaban sus horas libres a la menosprecia la mecanización de la pesca.
rehabilitación, pintando, arreglando los úl- Pero, como ha mostrado Frigolé (2007: 80),
timos detalles, preparándolo todo para que las reconstrucciones del pasado que tienen
estuviera listo el día de la inauguración. por finalidad la producción de patrimonio
Cuando se acercaba la fecha, los nervios de corren siempre el riesgo de caer en este tipo
la última hora se iban haciendo más paten- de contradicciones.
tes. Una de aquellas tardes se me ocurrió Por un lado observamos un sentido
decir, simplemente para dar ánimos, que de apropiación de la playa para su patri-
todo iba a quedar muy bonito y uno de los monialización, que entra en conflicto con
socios más activos se volvió hacia mí y me otros usos de la playa. Pero por otro lado
dijo con voz grave: “Sí, sobre todo cuando observamos que la apropiación de la pla-
quiten el chiringuito, el puesto de la Cruz ya como paisaje de gran valor simbólico es
Roja, la carpa de la Fiesta Mayor y las du- algo bastante generalizado en la población.
chas”, y siguió con su trabajo. A continuación veremos cómo entran en
Este comentario denota un claro senti- juego las dialécticas de identidad relacio-
miento de apropiación de la playa para el nadas con la playa y su patrimonialización.
proyecto de patrimonialización. Cabe de- Anteriormente nos referíamos a los tres
cir que esta playa detenta el distintivo de elementos que surgen de forma recurrente
“Bandera Azul” otorgado por la Fundación en nuestras entrevistas sobre la playa: la
Europea de Educación Ambiental a las pla- singularidad de su arena siempre limpia,
yas que cumplen una serie de condiciones su carácter de plaza pública y finalmente
ambientales e instalaciones, como duchas, la playa como signo de identidad del pue-
letrinas, papeleras de reciclaje, puesto de blo. Para abordar este último aspecto, nos
vigilancia y primeros auxilios, acceso para detendremos a analizar las prácticas y dis-
minusválidos hasta la orilla, etc., elemen- cursos sobre la identidad ligados a la playa
tos en todo caso que nada tienen que ver y su patrimonialización.
con la navegación y la pesca tradicional.
Así, la playa tiene que compaginar el pro- De la arena de la playa a la arena
yecto de patrimonialización con otros usos política
que comportan otras exigencias a veces
contradictorias con tal proyecto. El proyec- La playa ha jugado siempre un papel im-
to de patrimonialización de la playa, como portante en la vida económica de esta po-
tal, tiene como hemos visto ciertas aspira- blación, y seguramente a consecuencia de
ciones de pureza y autenticidad y todo lo ello ha sido siempre también un lugar don-
que no encaja con él –nos hemos referido de se han visualizado conflictos sociales de
antes el caso de las barcas de fibra y la lan- raíz política y económica. Históricamente
cha del pescador arruinado- es claramente porque era la base de la flota pesquera y
un estorbo. Se entra pues en una situación por lo tanto un punto crucial para la su-
de competencia de usos y concepciones de pervivencia de una parte importante de la
la playa. población, y actualmente porque se sigue
Los promotores del proyecto patrimonial dependiendo de ella en tanto que en buena
pretenden moldear la playa en una direc- medida la economía local está basada en

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576 La patrimonialización de un paisaje marítimo...

el turismo residencial, donde el “sol y pla- piedras de un muro que tenía por único
ya” es su principal activo. Como veremos objeto proteger la vía del tren de los tem-
en este apartado, la arena de la playa se porales marítimos. En efecto, los tempo-
identifica de forma metonímica al conjun- rales fuertes, frecuentes sobretodo en oto-
to de la población, actuando como seña de ño e invierno, provocan la interrupción
la identidad local. Los discursos sobre la de la circulación de trenes en este punto
identidad, local y nacional, toman la playa con bastante frecuencia, esta es la razón
como símbolo y patrimonio a defender de fundamental por la que se vio la necesi-
las amenazas exteriores. dad de elaborar dicho proyecto. Se trata
Se acercaba el verano de 2007 cuan- de un problema que se arrastra desde que
do un hecho inesperado vino a romper la se creó esta línea litoral de ferrocarril en
aparente calma de este pueblo de la cos- la segunda mitad del siglo XIX. Más ade-
ta. Una mañana del mes de junio apare- lante volveremos sobre esta cuestión. Sus
ció, junto a la caseta del motor, una gran defensores argumentaban la necesidad
valla publicitaria del Ministerio de Medio de esta protección, las ventajas del paseo
Ambiente, anunciando la rehabilitación marítimo que surgiría y que la obra no
del frente marítimo de la población con un afectaría a la playa puesto que la falta
presupuesto de cerca de dos millones de progresiva de arena se debía a otras cau-
euros. La reacción no se hizo esperar y al sas de mayor alcance, como los cambios en
cabo de pocos días el cartel fue objeto de las dinámicas del fondo marino causadas
grafitis de protesta donde se leía: No más por la construcción de puertos deportivos
piedras. en la comarca. Encontramos también una
El proyecto de rehabilitación del frente posición intermedia representada por la
marítimo consistía en reforzar el muro de Asociación de Vecinos, de carácter ecolo-
protección de la vía del tren con una pla- gista y muy pendiente de aspectos urba-
taforma de 4 metros de anchura y 400 de nísticos, que evitaba posicionarse a favor
longitud. Esta plataforma sería habilitada o en contra del proyecto, reclamando un
en forma de paseo peatonal, separada de estudio técnico más detallado de los efec-
la vía del tren por un muro de 1,20 metros, tos de la obra sobre la playa.
y conectando la playa de los pescadores con Esta fue la posición que se impuso fi-
la playa situada a poniente de la población, namente, después de un verano caliente a
en el lugar donde desemboca la rambla, nivel político, puesto que las dos posicio-
con sendos pasos subterráneos a cada ex- nes se polarizaron fuertemente entorno
tremo. Se trataba de un proyecto acordado al gobierno y la oposición municipal. A fi-
entre el Ayuntamiento, la Demarcación de nales de septiembre se llegó a un acuerdo
Costas del Ministerio de Medio Ambiente unánime de todas las partes implicadas
y Renfe, la compañía española del ferro- solicitando la suspensión del proyecto a la
carril. Demarcación de Costas de Catalunya por
Los opositores al proyecto empezaron a un periodo de seis meses y la creación de
organizarse en forma de plataforma ciuda- una comisión especial con la asesoría de
dana y la movilización contra el proyecto técnicos de la Universidad Politécnica de
rápidamente adquirió un aire de conflicto Catalunya, que ayudaran a buscar la me-
abierto. Uno podía escuchar a diario dis- jor solución al polémico proyecto. Pero la
cusiones sobre el tema en los bares, la tien- solución llegó de forma inesperada antes
das, incluso en las calles. Se organizaron de cumplirse el periodo de moratoria con-
manifestaciones, asambleas, happenings, cedido, cuando Costas comunicó al Ayun-
recogidas de firmas, etc., en contra del tamiento que suspendía de forma definiti-
proyecto. Los plenos municipales pasaron va la ejecución del proyecto. La noticia fue
a ser multitudinarios, con abucheos y des- recibida con evidente euforia por parte de
calificaciones personales dirigidas sobre los opositores, que lo interpretaron como
todo al alcalde y al concejal de urbanismo. una victoria de su presión. Por el contra-
Se creó un foro de discusión en internet rio, el Ayuntamiento, en un comunicado
donde, tras el anonimato, insultos, desca- lo interpretaba como el rescate de una in-
lificaciones e incluso amenazas, fueron su- versión del Estado para destinarla a otras
biendo de temperatura. La prensa también actuaciones en el contexto del debate so-
se hizo eco de las protestas, “La política bre el déficit de las infraestructuras en
destrozará la playa” o “Consigna: salvar Catalunya.
la playa”, fueron algunos de los lacónicos Para entender el contexto político en
titulares que publicaron aquél verano pe- que esto se produce debemos recordar que
riódicos del ámbito territorial de habla ca- 2007 fue el año de las obras de entrada
talana como Avui o El Punt Diari. del tren de alta velocidad a Barcelona, lo
Los opositores argumentaban que la que provocaba constantes incidencias y
playa desaparecería enterrada bajo las retrasos en la red de trenes de Cercanías

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Eliseu Carbonell 577

que presta servicio a una área metropolita- compañía mediante sabotajes, entre otras
na con tres millones de habitantes. Estos acciones. Entre 1890 y 1892, la Guardia
hechos sumados a otras graves incidencias, Civil tuvo que intervenir en seis ocasiones
como el apagón que dejó a Barcelona con a requerimiento de la compañía. Ante esta
300.000 abonados sin electricidad durante situación de conflictividad, el alcalde y ca-
60 horas en julio de 2007 o el colapso de ae- cique local decidió tomar parte a favor de
ropuertos y autopistas catalanas el mismo los pescadores. Creó un semanario de ideo-
verano, puso sobre la mesa el debate sobre logía catalanista y conservadora, donde el
el estado de las infraestructuras. Desde ferrocarril aparecía como símbolo de todos
Catalunya, y en especial desde los partidos los males que comportaba el progreso y los
nacionalistas, la lectura que se hacía era en pescadores sus víctimas.
términos del déficit de inversiones acumula- Frente a esta posición encontramos a
do durante años, como resultado del desin- otro sector de la población, principalmen-
terés del Gobierno central hacia Catalunya. te artesanos, industriales y comerciantes,
Para ilustrarlo bastará con recordar uno interesados prioritariamente en el buen
de los eslóganes electorales que el partido funcionamiento del ferrocarril del que se
independentista Esquerra Republicana de depende cada vez más. Estos fundaron
Catalunya colgó en las inmediaciones de también su semanario, al que titularon La
todas las estaciones de la red de cercanías playa, de orientación liberal-republicana,
donde se podía leer: “He vuelto a llegar tar- para defender sus posiciones. El enfrenta-
de al trabajo por culpa de la Renfe, por eso miento fue pues entre dos sectores con inte-
quiero la independencia”; o el más sutil del reses económicos diferentes y de ideología
partido nacionalista moderado Convergèn- también distinta. No deja de ser curiosa la
cia i Unió, visible también en todas las esta- posición del principal propietario agríco-
ciones, donde sobre un reloj se leía: “Renfe la, el alcalde, que llegó a ser condenado a
te roba… el tiempo”, asimilable al eslogan abandonar el pueblo durante algunos me-
nacionalista “España nos roba”, como tra- ses por desobediencia pública, convirtién-
ducción de una balanza fiscal considerada dose así en una especie de héroe local. Se-
desfavorable para Catalunya. La idea de gún la interpretación de Pomés (1992:323),
una red ferroviaria que conecta Catalun- su posición se corresponde con una actitud
ya con el resto de España y que se gestiona general de los grandes propietarios rura-
desde Madrid, opera a nivel simbólico como les catalanes ante la crisis finisecular y
representante del Estado opresor. A nivel la amenaza del sindicalismo agrario, los
local de lo que sucedió en verano de 2007, cuales optan por una estrategia de hacerse
Renfe representaba el Estado, como elemen- con la adhesión de los sectores populares
to externo, que amenazaba la playa y con frente a los intereses industriales y tratar
ella la misma esencia del pueblo. así de mantener su hegemonía social, más
Hagamos ahora un paréntesis para re- tomando en cuenta la instauración del su-
troceder en el tiempo y contar brevemente fragio universal en 1890.
un conflicto que aconteció en esta misma “La cuestión del carril” se fue desinflan-
población en la década de 1890, que se dio do por sí sola y la Compañía finalmente de-
a conocer como “la cuestión del carril”. Este sistió de sus pretensiones. Los pescadores
conflicto enfrentó también entonces a dos ganaron la batalla y los trenes siguieron
sectores de la población con intereses eco- sufriendo interrupciones hasta día de hoy.
nómicos distintos, aunque en la memoria Resulta bastante chocante comparar dos
popular se recuerda como un enfrentamien- opiniones escritas con 120 años de diferen-
to del pueblo entero contra la compañía de cia sobre este asunto. El 23 de septiembre
ferrocarril. En efecto, los opositores al pro- de 1887, después de un temporal que inte-
yecto de rehabilitación del verano de 2007 rrumpió la circulación de trenes el Semana-
citaban frecuentemente la “cuestión del ca- rio de Mataró publicaba: “Son tan frecuen-
rril” como antecedente histórico a su lucha tes los percances de esta clase que parece
actual, que enfrentó el pueblo a la amenaza que sería el caso que la Compañía del ferro
externa que suponía los intereses de la com- carril de Francia tomara alguna resolución
pañía ferroviaria. Este tema, que ha sido definitiva y eficaz con el fin de evitar para
poco estudiado3 , enfrentó a los pescadores siempre tales desperfectos”. 120 años más
con la compañía del ferrocarril por unas tarde, en un boletín informativo municipal
obras que ésta pretendía realizar con el fin distribuido en julio de 2007, encontramos:
de reforzar la vía del tren a su paso por la “El proyecto de rehabilitación del frente
población. Los pescadores consideraban que marítimo… pretende acabar con la provi-
esta obra les perjudicaba porque afectaría sionalidad de la protección actual, que ha
negativamente a la playa. La falta de acuer- de renovarse cada cierto tiempo a causa de
do llevó a un profundo malestar entre los los temporales, y solucionar la protección
pescadores que decidieron enfrentarse a la de la vía de una forma definitiva”.

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578 La patrimonialización de un paisaje marítimo...

Los paralelismos entre los aconteci- aprovechan una coyuntura política favo-
mientos de 1890 y 2007 son considerables rable para obtener un beneficio. Y esta
y los opositores al proyecto de rehabili- opinión, insisto, aunque es sólo una per-
tación lo subrayaban constantemente en cepción etnográfica, flotaba en el ambien-
el foro de internet. Me gustaría describir te aquél verano.
algunas de sus acciones como ilustración
del papel que jugó la noción de identidad Apuntes finales: inclusión y ex-
ligada a la playa en la reivindicación de clusión en los procesos de patri-
sus posiciones políticas. Una imagen muy monialización
gráfica que ofreció la protesta consistió, al
cabo de una manifestación, en disponer un Con motivo de la inauguración de la
cubo de arena de la playa ante la puerta restauración de la caseta del motor, los
del ayuntamiento con una placa donde se palés, dos señores de ochenta años cum-
leía “La playa 1574-2007”. 1574 es la fecha plidos en 2007, recibieron todo tipo de
de fundación del pueblo, cuando se segregó atenciones. Periódicos y televisiones se
del pueblo interior del que hasta entonces acercaron a entrevistarles y ellos expli-
había estado siendo un arrabal de pesca- caban orgullosos su oficio a todo aquél
dores. La playa, que es un elemento del que les preguntara. Al fin y al cabo, la
paisaje con una escala temporal geológica, restauración y musealización de la case-
se hace coincidir con la escala temporal de ta bien podía considerarse un homenaje
la cronología histórica, al identificar el ori- a su oficio y ellos dos verdaderos “trésors
gen de la playa con el del pueblo. De modo vivants”. Por eso me sorprendió cuando
que si en 2007 se destruyera su playa se el hijo de uno de ellos me comentó que a
sobreentiende que ello significaría también su padre le ofendía profundamente que la
el fin del pueblo mismo. En otras acciones gente del pueblo se refiriera a él como “el
se dispusieron ataúdes en la playa, bande- oriundo”. Oriundo era una palabra usada
ras catalanas y pancartas reivindicativas. para referirse a los futbolistas latinoame-
Un cartel llamando a la manifestación con- ricanos que jugaban en la liga española.
vocada el 2 de agosto consistía en un foto- A pesar de tener una connotación positiva
montaje donde aparecía el general Franco no dejaba de señalar que su portador era
presenciando un desfile militar. En lugar un foráneo. Aquél señor, nacido en Bar-
de carros de combate se pusieron trenes celona, había llegado al pueblo con veinte
de cercanías desfilando bajo la ermita ro- años, pero su origen foráneo no se había
mánica, icono del pueblo, como lanzados borrado.
a invadir el pueblo y “destrozar la playa”. El día de la inauguración de la res-
En otro fotomontaje aparecía el concejal tauración de la caseta del motor pude
de urbanismo en un anuncio de aceitunas recoger muchas opiniones y comentarios,
“La Española” para señalar su complici- entre ellos los que acusaban “al italiano”
dad con los intereses españoles, es decir de haber estropeado el motor (pero dicho
la Renfe, en el pueblo. Un último ejemplo, de forma muy grosera). “El italiano” tam-
en el foro de internet, en el punto álgido bién había vivido toda su vida adulta en
de las protestas, se llamó a “todos los que el pueblo, aunque conservaba el acento
no queremos más PIEDRAS y si queremos y la gestualidad de su país natal. Había
ARENA”, a boicotear la inauguración de la sido durante años presidente de la asocia-
restauración de la caseta del motor aprove- ción de propietarios de las barcas de fibra
chando la asistencia del alcalde y autorida- de vidrio que hay en la playa de pesca-
des provinciales: “Cuando los temporales dores, usadas para pesca recreativa. En
se lleven la poca arena que nos queda, los los últimos años habían utilitzado, según
espabilados de (nombre de la asociación de parece sin demasiado cuidado, la maqui-
amantes de la vela latina), ¿dónde vararán nilla para varar sus barcas, hasta que se
sus barcas?”. hizo cargo la asociación que ha llevado a
Esta propuesta no prosperó, ya que fue cabo su restauración. En el pueblo he oído
inmediatamente contestada en el foro por referirse a los miembros de las dos aso-
otros opositores al proyecto, defendiendo ciaciones, la de pesca recreativa y la de
la implicación de la asociación para con la vela latina, como “domingueros”, de forma
conservación del patrimonio marítimo de genérica, para señalar que no es gente del
la localidad. Pero me interesa destacar el pueblo, a pesar que en las dos asociacio-
uso del calificativo “espabilados”, que creo nes hay gente nacida en el pueblo, gente
que sintoniza con una opinión, quizás mi- residente no nacida allí y residentes de
noritaria, pero que efectivamente existe. El temporada estival.
término “espabilados” se está usando aquí, Como demostró Gilmore (1982), los
según mi interpretación, como sinónimo “nicknames” en el Mediterráneo suelen
de “oportunistas”, es decir, de aquellos que ser una forma de agresión verbal. Al alcal-

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Eliseu Carbonell 579

de del pueblo se le llama “el maño” cuando conclusiones. A este punto creo que bastará
quiere hablarse de él de forma despectiva. con señalar como hipótesis de trabajo que
Pero no por que se considere despectivo el el retorno de las barcas en forma de acti-
orígen aragonés, italiano u “oriundo”, sino vidad patrimonial, la patrimonialización
para señalar su origen foráneo, para ex- de la playa, se enmarca en un contexto de
cluir. “Dominguero” constituye un insulto inclusión/exlusión previamente existente y
bastante al uso. A mediados de septiembre de hecho viene a reforzarlo, siendo un actor
se celebra en este pueblo una fiesta cono- a la vez excluido y excluyente dentro de la
cida como “La despedida del dominguero” dialéctica política por la configuración de
que consiste en un pasacalle portando un la identidad local.
monigote vestido de forma playera al que
se monta en un tren con dirección a Barce- Bibliografía
lona. El tren aparece nuevamente, aunque
los veraneantes suelen venir en vehículo Alegret, J.L.
privado. El tren es el agente invasor, el ene- 2003 “Valoración patrimonial del sector
migo de la playa, la amenaza a la identidad pesquero”. Boletín del Instituto Andaluz
del pueblo, el portador de gente de fuera, de del Patrimonio Histórico, 11(44): 34-41
domingueros. Beltrán, O.; Pascual J. J.; Vaccaro, I.
El objetivo del proyecto de patrimonia- 2008 Patrimonialización de la naturaleza.
lización de la playa es poner de manifies- El marco social de las políticas ambien-
to una identidad marinera, recreada y no tales. Donostia, Ankulegi.
del todo compartida, pero al fin y al cabo
una identidad que produce localidad, para Bernard, N.
distinguirse o singularizarse en un mundo 2002 “Turisme et patrimoine maritime: un
globalizado, como han señalado también marriage de raison?”. En Peron, F. (dir.)
Frigolé y Del Marmol (2008). No importa Le patrimoine maritime (pp. 323-327).
que quien lo haga sea descendiente de una Rennes: Presses Universitaires de Ren-
larga estirpe de pescadores locales o gente nes.
recién instalada en el pueblo sin relación Bonet, L.
con la pesca. De hecho, Tilley (2006:14) 2005 “Mercat cultural i indústria turísti-
señala que a menudo son gentes de origen ca. Paradoxes i reptes del turisme cul-
foráneo los que más insisten en subrayar tural”, D CIDOB, 93.
la singularidad o “uniqueness” del lugar Chias, J.
como una pieza clave del capital cultural 2002 “Del recurso a la oferta. Turismo
a mantener. La cuestión es que la partici- cultural: Catálogo de Problemas”, En
pación en el proyecto de patrimonialización I Congreso Internacional del Turismo
permite situarse de forma ventajosa dentro Cultural, Salamanca, 5 y 6 de noviem-
de la dinámica de inclusión y exclusión, bre 2002.
aunque se corra el riesgo de ser acusados
de “espabilados”. Esteban Chapapría, V.
Los promotores del proyecto de patrimo- 2000 “El planteamiento de infraestructu-
nialización de la playa se sienten herederos ras para el turismo náutico”, Cuadernos
de los antiguos pescadores y con ello legiti- de Turismo, 6: 29-44
mados para devolver a la playa su antiguo Esteban, C.
aspecto de playa de pescadores, a sabiendas 2007 “Las gentes del mar abierto”. En
de que su proyecto entra en conflicto con Caosyciencia.com. Recuperado el
otros usos sociales de la playa, como el uso 14/02/2007 de: http://www.caosyciencia.
por parte de los bañistas que disfrutan de com/ideas/articulo.php?id=140207
las ventajas de la Bandera Azul, las barcas Frigolé, J.
de fibra de pescadores aficionados y sobre- 2007 “Producció cultural del lloc, memòria
todo la competencia por el uso de la playa i terciarització de l’economia en una vall
en los discursos políticos sobre la identidad del Prepirineu”. Revista d’Etnologia de
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Los veraneantes reemplazaron a los pes- Frigolé, J.; Del Marmol, C.
cadores como actividad económica principal 2008 “Los contextos en la producción del pa-
del pueblo, ocupando su espacio natural, la trimonio”. En Prado, S.; Takenaka, H.;
playa. Los veraneantes eran un elemento
externo (domingueros) que aparecían en Pereiro, X. (Coords.) Patrimonios cul-
un contexto social donde ya preexistían turales: educación e interpretación (pp.
las dinámicas de exclusión (oriundos, etc.). 187-203). Donostia, Ankulegi.
Como hemos anotado al principio del artí- Frigolé, J.; Roigé, X.
culo, nuestra investigación está todavía en 2006 Globalización y localidad: Perspectiva
marcha, por lo que es prematuro aventurar etnográfica. Barcelona, Publicacions de

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580 La patrimonialización de un paisaje marítimo...

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Bages: Manresa. para preservar el anonimato de nuestros
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Eliseu Carbonell 581

sivo de esta población, sino que se están pro-


duciendo procesos similares en otras pobla-
ciones a lo largo de la costa catalana.
3 Nuestra fuente de información sobre “la
cuestión del carril” son los trabajos de Po-
més (1992), Sauleda (2006) y la prensa local
de la época, El Sanpolench, semanario pu-
blicado entre 1890 y 1894 que contiene una
sección dedicada exclusivamente al tema,
titulada “Cosas de la playa”.

Recibido: 26/01/09
Reenviado: 04/08/09
Aceptado: 15/03/10
Sometido a evaluación por pares anónimos

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