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INTRODUCCIÓN:

En la Biblia encontramos muchos simbolismos, y para mí uno de los más


interesantes es el pasaje donde se habla acerca de la armadura de la fe y vemos allí
que la ESPADA representa la palabra de Dios.

Alguna vez has escuchado que alguien llame a la Biblia “espada”…?

Tal vez eso se escuche algo extraño porque la espada y la Biblia, físicamente no
tienen nada en común; la Biblia se usa normalmente para estudiar o dar un sermón pero
la espada se usa o se usaba normalmente en las batallas.

Pero cuando leemos el pasaje (Hebreos 4:12)

“Porque la palabra de Dios es viva y eficaz, y más cortante que cualquier espada de dos filos; penetra hasta la
división del alma y del espíritu, de las coyunturas y los tuétanos, y es poderosa para discernir los pensamientos y las
intenciones del corazón.

Pablo nos está diciendo que la Biblia, la palabra de Dios también es muy filosa, “más
cortante que cualquier espada”… la diferencia es que la Biblia es usada en las batallas
espirituales.

La Biblia contiene la palabra de Dios, y es aquí (levantas la Biblia), donde vamos a


encontrar esta mañana el código de honor bajo el cual debe vivir cada hijo de Dios.

DESARROLLO:

Hablemos un poco más de la espada…

La palabra espada proviene del latín spatha, este nombre sirvió para llamar así a la


espada larga y recta que usaban los romanos. A su vez, este nombre viene del
griego spathe. Etimológicamente el nombre permanece hoy día en el italiano
como spada.

En la actualidad, la espada se ha convertido casi en su totalidad en un objeto de


adorno o de exposición para los museos, aunque en algunos lugares, aún se sigue
practicando el combate cuerpo a cuerpo como parte de su cultura. Incluso dentro del
deporte encontramos aún el uso de la espada, en los que practican la esgrima.

Podemos decir que la espada es cosa del pasado y por eso vamos a viajar un poco en el
tiempo y vamos a descubrir que en la antigüedad la espada era algo importante y valioso
para los pueblos, ya que para poder fundar una nación o un imperio poderoso se hacía a
través de sangrientas batallas.

Tal fue el caso del rey David, todos conocemos su historia y encontramos que para que
él pudiera establecerse como rey lo tuvo que hacer por medio de batallas contra
enemigos feroces.

Vallamos a la biblia…

A caso hemos olvidado su primer combate que tuvo que enfrentar David… pues saben a
partir de ese momento David se ganó muchos enemigos, que lo odiaban a muerte y que una
y otra vez intentarían matarlo…

Por eso encontramos en el relato sagrado que uno de los principales enemigos de David y
sus aliados fueron los filisteos –ustedes saben por qué- (relatar)
El éxito que tuvo el rey David, sin lugar a dudas fue por su confianza plena
en Dios, pero también es importante reconocer el valor de los hombres que lo
acompañaban en cada batalla, tanto es así que ha estos hombres se les conoce como “los
valientes de David”.

David y sus valientes tuvieron éxito porque ellos decidieron vivir bajo un CODIGO DE
HONOR, este código los motivaba cada batalla a dar su mejor esfuerzo, este código les
enseñaba como debían moverse, como debían caminar, como debían hablar, este código les
mostraba incluso los lugares a los cuales debían ir y a cuáles no debían ir.

Hace poco leí por primera vez el Código de Honor de los Marines en Estados Unidos.
El código dice así:
“Un Marín nunca mentirá, engañará, robará y nunca tolerará a aquellos que lo hagan”.

Al reflexionar un poco sobre este código de honor pensé sobre si sería fácil o difícil vivir una vida bajo este
código, digo esto porque el código de honor está escrito en blanco y negro… nunca hay grises; es decir aún
acosta de su propia vida, los marines están dispuestos a vivir siempre bajo ese código de honor, sin cambios
ni variaciones.
Muchas veces nosotros pensamos que nos regimos por un código similar, por ejemplo nosotros como
CONQUISTADORES decimos, que vivimos bajo el código de honor llamado LA LEY DEL
CONQUISTADOR.
La cual tiene varios principios que debemos obedecer tanto los conquistadores como nuestros directivos.
Pero lo que realmente pasa es que debido a muchos “pretextos” que hemos llamado circunstancias de la
vida, rompemos las reglas cuando nos conviene.
Muchas veces culpamos a nuestros líderes políticos como corruptos, cuando nosotros mismos muchas veces
hemos hecho alguna trampa en algún examen, o somos nosotros los que tiramos la basura en la calle y luego
nos quejamos porque nadie hace nada por la limpieza de la comunidad.
Cuántas veces hemos tenido que mentir para no afrontar las consecuencias de nuestras acciones, cuántas
veces hemos engañado con tal de ganar en algún tipo de competencia. Cuántas veces hemos dicho “una
mentirita blanca”, justificando nuestras acciones.

¿Cómo sería nuestra vida si nos rigiéramos por el Código de Honor de los marines: Nunca mentiré, nunca
engañaré, nunca robaré y nunca toleraré a aquellos que lo hagan?
Hace ya algo de tiempo se le pregunto a un ex Marín lo que fue vivir toda su vida bajo el código de honor,
bromeando le comentaron lo “difícil” que debió ser para él, pasar todos esos años en la academia regido por
ese código.
“Debió ser estresante” – le dijeron.
“Al contrario” – respondió.
“Es lo más liberador que he vivido en mi vida” – continuó.
Por unos minutos me comentó lo fascinante que era vivir en una mini sociedad regida por el Código de
Honor. Muy entusiasmado me contaba lo que significaba vivir sin llaves o candados porque… nadie te roba.
Varias veces dejó su dinero del mes encima de su cama… nadie te roba.
Hermanos, amigos Koinos lamentablemente vivimos en mundo donde hay suficiente maldad … tanto que
nuestras puertas tienen doble cerrojo, quién se atrevería a dormir dejando la puerta de su casa abierta…
Vemos como casi todos los negocios están protegidos con alarmas, cámaras de video….
Pero creo que nosotros podemos comprometernos con Dios a dar el ejemplo y vivir bajo el “Código de
Honor”, si amigos, vivamos bajo nuestro código de honor cuyos principios fueron tomados de “la poderosa
espada de la verdad”, la Biblia,

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