LA INDIGNIDAD EN EL DERECHO CIVIL PERUANO Y COLOMBIANO

Para poder tener en consideración lo que es la indignidad en la sucesión debemos

empezar definiendo la dignidad como tal, a lo cual Elorriaga de Boris (2010) dice “que
la dignidad es el mérito de una persona para suceder por causa de muerte a otra. En
sentido inverso la indignidad para suceder pude ser entendida como la falta de mérito de
un sujeto para suceder al causante, debido a que no cumplió con los deberes que para
con él tenía o porque faltó al respeto que su memoria le imponía.”

Por otro lado, Guillermo Lobamann Luca de Tena, defina la indignidad como (Tena,
2003) “sanción privativa de derecho sucesorio.”

Podemos entender entonces que la indignidad es una consecuencia de una acción que va
en contra de las reglas que permiten a la persona suceder la herencia que por norma le
corresponde.

Antes de empezar a comparar tenemos en cuenta que el Código Civil Colombiano

cuenta con 8 incisos en su Artículo 1025 el cual habla sobre la indignidad sucesoral,
mientras que el Artículo 667 del Código Civil Peruano cuenta con 7 incisos sobre la
misma materia.

Para entrar a la comparación de la indignidad, al observar la normativa en ambos

códigos nos damos con la sorpresa de que, en la normativa colombiana, es más simple,
ya que solo toma en cuenta para declarar indigno que el sucesor haya cometido
homicidio en la persona del difunto o que haya intervenido en este crimen por obra o
consejo, o dejándola parecer pudiendo salvarlo; en la normativa peruana nos
encontramos que menciona lo mismo, pero de manera mejor explicada además de no
solo el homicidio siendo hacia el causante, sino hacia sus ascendientes, descendientes o
cónyuge también. Siendo que, en el código colombiano no da pie a que este inciso sea
indultado por la prescripción de la pena como se menciona en el código peruano que
dice que no desaparece por el indulto ni por la prescripción de la pena.

En el siguiente inciso el Código Civil Colombiano hace mención que será declarado
indigno el que “cometió atentado grave contra la vida, el honor o los bienes de la
persona de cuya sucesión se trata, o de cualquiera de sus ascendientes o descendientes,
con tal que dicho atentado se pruebe por sentencia ejecutoriada.” Esto es casi lo mismo
que el inciso anterior, solo que le agregan lo que el Código Civil Peruano tenía en el
inciso 1 que es que también debe ser en contra de los ascendientes o descendientes,
además de agregar que debe ser probado mediante sentencia ejecutoriada. En el inciso 2
del Código Civil Peruano nos dice “Los que hubieran sido condenados por delito doloso
cometido en agravio del causante o de alguna de las personas a las que se refiere el
inciso anterior.” Lo cual es más simple y hace mención a lo mismo que el inciso de la
normativa colombiana, que mediante sentencia haya cometido el delito doloso de
homicidio y que haya sido en contra del causante, los ascendentes del mismo o los
descendientes.

En el inciso 3 encontramos una diferencia, debido a que el Código Civil Colombiano

establece que “El consanguíneo dentro del sexto grado inclusive que en el estado de
demencia o destitución de la persona de cuya sucesión se trata no la socorrió pudiendo.”
Entiendo que el pariente de hasta sexto grado de consanguineidad no socorrió al
causante el cual se encuentra en estado de demencia o destitución no lo socorrió o
ayudó en dicho estado, por tal motivo se le declara indigno. En el Código Civil Peruano
nos menciona que “Los que hubieran denunciado calumniosamente al causante por
delito al que la ley sanciona con pena privativa de libertad.” Cosa distinta a lo que
menciona el Código Civil Colombiano, ya que el Código Peruano hace mención a que
el sucesor debe de cometer un acto como denunciar calumniosamente, o sea, querer
causar daño moral al causante antes de su muerte.

En el inciso 4 del Código Civil Colombiano, nos dice “el que por fuerza o dolo obtuvo
alguna disposición testamentaria del difunto o le impidió testar.”, haciendo mención a
que el sucesor debió haber empleado la fuerza para que el difunto antes de su muerte no
realice su testamento con la finalidad de que no le deje la herencia a este. En el inciso 4
del Código Civil Nacional dice lo mismo.

En el inciso 5 del Código Civil Colombiano, “el que dolosamente ha detenido u

ocultado un testamento del difunto, presumiéndose dolo por el mero hecho de la
detención u ocultación.” Haciendo mención a que el sucesor no debe de ocultar el
testamento, porque podría beneficiarse de mala fe por este acto cosa que no es justa,
entonces recae en causal de indignidad. En el Código Civil Peruano, menciona lo
mismo con la diferencia que el Código Nacional adiciona que “destruyan, oculten,
falsifiquen o alteren el testamento de la persona de cuya sucesión se trata y quienes, a
sabiendas, hagan uso de un testamento falsificado.” Agregando a ocultar o detener, más
actos que podrían beneficiar al sucesor con la herencia que deja el causante.

En el inciso 6 del Código Civil Colombiano nos dice “El que abandonó sin justa causa a
la persona de cuya sucesión se trata, estando obligado por ley a suministrarle alimentos.
Para los efectos de este artículo, entiéndase por abandono: la falta absoluta o temporal a
las personas que requieran de cuidado personal en su crianza, o que, conforme a la ley,
demandan la obligación de proporcionar a su favor habitación, sustento o asistencia
médica. Se exceptúa al heredero o legatario que, habiendo abandonado al causante, este
haya manifestado su voluntad de perdonarlo y de sucederlo, lo cual se demostrará por
cualquiera de los mecanismos probatorios previstos en la ley, pero previo a la sentencia
judicial en la que se declare la indignidad sucesoral y el causante se encuentre en pleno
ejercicio de su capacidad legal y libre de vicio.” Que es indigno el sucesor que
abandona al causante sin causa justa en sus épocas que ya están por morir, es decir, en
la vejez del causante. En el Código Civil Peruano, nos menciona que “Los que hubieran
sido sancionados con sentencia firme en un proceso de violencia familiar en agravio del
causante.” Este inciso en el Código Nacional se encuentra claro, los que violentaron
física o psicológicamente demostrado mediante sentencia firme en agravio del causante,
serán declarados indignos.

En el inciso 7 del Código Civil Colombiano nos dice que “El que hubiese sido
condenado con sentencia ejecutoriada por la comisión de alguno de los delitos
contemplados en el Título VI Capítulo Primero del Código Penal, siendo el sujeto
pasivo de la conducta la persona de cuya sucesión se trata.” Estos son delitos civiles
para el Código Penal Colombiano, por ejemplo, la reparación del daño, indemnización
por daños, entre otros. En cambio, en el inciso 7 del Código Civil Nacional nos dice que
“Es indigno de suceder al hijo, el progenitor que no lo hubiera reconocido
voluntariamente durante la minoría de edad o que no le haya prestado alimentos y
asistencia conforme a sus posibilidades económicas, aun cuando haya alcanzado la
mayoría de edad, si estuviera imposibilitado de procurarse sus propios recursos
económicos. También es indigno de suceder al causante el pariente con vocación
hereditaria o el cónyuge que no le haya prestado asistencia y alimentos cuando por ley
estuviera obligado a hacerlo y se hubiera planteado como tal en la vía judicial.”
Haciendo mención en que el hijo es indigno por responsabilidad del padre que no lo
asumió como su hijo durante la minoría de edad o que no haya prestado alimentos a este
hasta su mayoría de edad. Además de que el heredero que sabiendo que el causante
estuvo imposibilitado de trabajar y se encontraba en situación de pobreza no le pasó
alimentos será declarado indigno.

Y por último el inciso 8 del Código Civil Colombiano que dice “quien abandonó sin
justa causa y no prestó las atenciones necesarias al causante, teniendo las condiciones
para hacerlo, si este en vida se hubiese encontrado en situación de discapacidad.” Como
ya mencioné anteriormente, en el Código Civil Peruano se regula esto también y
podemos entender que abandonar al causante, en este caso hablamos de nuestro padre o
madre, es algo imperdonable, más aún cuando se sabe que estos no pueden valerse por
sí mismos, siendo ancianos.

CONCLUSIÓN

El Código Civil Peruano y Colombiano tienen mucho parecido, cada uno ajustado a la
realidad de cada país, sin embargo, los actos o acciones que generan la indignidad son
los mismos. Podemos entender que estas acciones son declaradas indignas debido a su
mala fe o mala intención de beneficiarse de los bienes que heredan por parte de sus
ascendentes que ya fallecen, entonces, para evitar que estas situaciones se den, se dan
estas causas de indignidad y que todo se mantenga conforme a lo “correcto” que es lo
socialmente aceptado para poder llevar una mejor sociedad.

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

Lohmann Luca de Tena, J. G. (2008). Comentarios civiles (de derecho de sucesiones) a

ciertas normas tributarias. Revista ULIMA.

ELORRIAGA DE BORIS, F. (2010). Derecho Sucesorio. Segunda Edición (pág. 27).

Santiago de Chile: Editorial AbeledoPerrot legal Publishing.