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Contrato de la Neshamá

¡Shalom!

En este archivo te hemos preparado el “contrato” para firmar, del cual te hablamos en la primera
clase del curso.

La primera parte es un texto extraído del libro de Shaaré Orá, escrito por el gran cabalista Rabí
Yosef Ben Abraham Gikatilla, el cual explica la base y la idea de la cual hemos sacado este contrato.

A continuación esta también el contrato. Léelo con seriedad e intenta interiorizar lo que está escrito
en él. Al firmar, estarás auto proclamando que estás dispuesto a seguir tu vida según este nuevo
punto de vista y que conectas con la decisión que tomó tu Neshamá (alma) antes de venir al
mundo a hacer su Tikún (rectificación). De esta manera te sentirás más conectado a tu parte
espiritual y podrás seguir tu camino en la dirección correcta para ti.

Libro Shaaré Orá, Sexto Portón:

"Y debemos enseñarte grandes principios que sostienen el mundo entero, y es el misterio del Maasé
Bereshit (La obra de la Creación), quiero iluminar tus ojos con este secreto: el motivo por el cual en
toda la obra de la Creación fue usado el nombre "Elohím" (Dios).
Y el misterio es: que por cuanto todas las creaciones, las superiores y las inferiores, todas fueron
creadas según el Juicio (Dín) y la justicia (mishpat), no hay ninguna criatura de todas las
creaciones que no fue juzgada por el Tribunal llamado "Elohím" antes de que esta fuera creada. Y
así se decretó en el juicio:
Tal creación así debe ser según su medida, altura, forma de su cuerpo, tiempo de vida y cantidad
de sustento" Y en el juicio también se decreta que esta creación este subyugada a otra creación,
tanto subyugada en su cuerpo como en su alimento. Y así era el juicio en toda la obra de la
Creación y para cada criatura, que fue decidida en el Tribunal Celestial su medida, su cuerpo, su
vida y su sustento, a quien tendrá que subyugarse y quien será su gobernante.
Y toda creación se presentó ante el Juzgado que se llama "Elohím" y le advirtieron y le informaron:
"Debes saber que la medida de tu cuerpo será esta, así serán sus partes, así será tu sustento, tu
vida..." Y contestó toda creación y dijo: "Heme aquí, con todo esto, estoy alegre y con de buen
corazón". Y esto es lo que nos dijeron los sabios: Toda la obra de la creación, con su conocimiento
fue creada, con su medida fue creada, y con bajo su orden fue creada.
Su conocimiento, es decir, que entendieron todo lo que tendrían que pasar. Su medida: La medida
de su cuerpo y su forma, y bajo su orden: Que ellos quisieron, desearon y ordenaron pasar todo
lo que tendrían que pasar...
Contrato de la Neshamá

Yo, tomo conciencia de mi decisión


y elección de venir a este mundo, justo en este tiempo, con estos padres, con este número de hijos,
con este cuerpo con sus virtudes y sus faltas, etc.

✓ Entiendo que todo ocurre por "La Supervisión personal Divina" (Hashgajá pratít) para
conmigo.

✓ Entiendo que las condiciones con las que nací son las mejores que podría tener para mi
verdadero Tikún (rectificación). Pues todo fue elegido por la Sabiduría Eterna del Creador.

✓ Acepto que vine al mundo para rectificar y enmendar mis "Tikunim" personales, y los
conflictos ocultos y revelados de mi familia, y los ecos de las generaciones pasadas, y lo
acepto con amor.

✓ Acepto también si se me pidió completar el Tikún (rectificación) de un alma que no pudo


llegar a su Tikún (rectificación) en su vida pasada, incluso un caso de aborto o suicidio. Lo
recibo con gran amor y entiendo que el Tikún (rectificación) que yo termine hoy no
necesitará ser traspasado a las siguientes generaciones.

✓ Entiendo que todos los dolores y dificultades que paso, son parte de mi Tikún (rectificación),
y todo lo que el Creador hace es para bien, y no hay ningún mal que descienda del cielo, y
todo, absolutamente todo es para mi bien, y desde ahora declaro (Salmo 118:21): "Te
agradezco porque me afligiste, y me fuiste de Salvación", es decir, que todo lo que parece
a mis ojos juicio Divino, es en realidad amor y es digno de agradecimiento.

✓ Acepto que toda la negatividad que veo y experimento en la realidad que me rodea, es un
mensaje de la Supervisión Divina, para mostrarme el Tikún (rectificación), y todo lo que veo
en mi exterior es como un espejo para mostrarme que algo similar existe en mí que aún
debe ser rectificado.

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