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Oración después de la comunión (LOC pág.

Misión San Romero, Carrizal


Confesión de pecado (LOC pág.. 282): 288): Domingo 27 de Noviembre
Confesemos nuestros pecados contra Dios y
contra nuestro prójimo. Primer domingo de Adviento
Eterno Dios, Padre celestial, en tu bondad nos
has aceptado como miembros vivos
Dios de misericordia, confesamos que hemos de tu Hijo, nuestro Salvador Jesucristo;
pecado contra ti por pensamiento, palabra y nos has nutrido con alimento espiritual
obra, por lo que hemos hecho en el Sacramento de su Cuerpo y de su San-
y lo que hemos dejado de hacer. No te hemos gre. Envíanos ahora en paz al mundo;
amado con todo el corazón; no hemos amado revístenos de fuerza y de valor para amarte y
a nuestro prójimo como a nosotros mismos. servirte con alegría y sencillez de corazón;
Sincera y humildemente nos arrepentimos. Celebrante: Bendito sea Dios: Padre, Hijo y
por Cristo nuestro Señor. Amén. Espíritu Santo.
Por amor de tu Hijo Jesucristo, ten piedad de
nosotros y perdónanos; así tu voluntad será Pueblo: Y bendito sea su reino, ahora y por
nuestra alegría y andaremos por tus caminos, siempre. Amén. (LOC pág. 277).
para gloria de tu Nombre. Amén.
Dios omnipotente, para quien todos los corazo-
La paz (LOC pág. 283). nes están manifiestos, todos los deseos son co-
nocidos y ningún secreto se halla encubierto:
Celebrante: La paz del Señor sea siempre Purifica los pensamientos de nuestros corazones
con ustedes. por la inspiración de tu Santo Espíritu, para que
Pueblo: Y con tu espíritu. perfectamente te amemos y dignamente procla-
memos la grandeza de tu santo Nombre; por
Canto de las ofrendas. Cristo nuestro Señor. Amén. (LOC pág. 278).

Celebrante (LOC pág. 286): Oremos como No se dice gloria…


nuestro Salvador Cristo nos enseñó.
Monición para corona y velas de adviento…
Pueblo y Celebrante: Padre nuestro que
estás en los cielos, santificado sea tu Nom- Celebrante: El señor este siempre con uste-
bre, venga tu Reino, hágase tu voluntad, así des.
en la tierra como en los cielos. El pan nuestro Pueblo: Y con tu espíritu.
de cada día, dánosle hoy. Y perdónanos
nuestras deudas, así como nosotros perdona- Celebrante: Oremos. Dios todopoderoso, da-
mos a nuestros deudores. Y no nos dejes nos gracia para despojarnos de las obras de las
caer en la tentación mas líbranos de mal. Por- tinieblas y revestirnos con las armas de la luz,
que tuyo es el reino, y el poder, ahora en esta vida mortal, en la cual Jesucristo
y la gloria, por siempre jamás. Amén. tu Hijo, con gran humildad, vino a visitarnos; a fin
de que en el día postrero, cuando vuelva con
Celebrante: [¡Aleluya!] Cristo, nuestra Pas- majestad gloriosa a juzgar a vivos y muertos,
cua, se ha sacrificado por nosotros. resucitemos a la vida inmortal; mediante él,
Pueblo: ¡Celebremos la fiesta! [¡Aleluya!]. quien vive y reina contigo y el Espíritu Santo, un
solo Dios, ahora y por siempre. Amén (LOC
Celebrante: Los dones de Dios para el 125).
Pueblo de Dios.

Canto de comunión…
Lecciones de este domingo… Segunda lectura: Romanos 13:8-l4
No tengan deudas con nadie, aparte de la deuda de Santo Evangelio de nuestro Señor Je-
Primera lectura: Isaías 2:1-5 amor que tienen unos con otros; pues el que ama a sucristo según San Mateo 24:37-44
Estas son las profecías que Isaías, hijo su prójimo ya ha cumplido todo lo que la ley ordena. "Como sucedió en tiempos de Noé, así
de Amos recibió por revelación acerca Los mandamientos dicen: "No cometas adulterio, no sucederá también cuando regrese el Hijo
de Judá y Jerusalén: En los últimos mates, no robes, no codicies", pero estos y los de- del hombre. En aquellos tiempos antes del
tiempos quedará afirmado el monte más mandamientos quedan comprendidos en estas diluvio, y hasta el día en que Noé entró en
donde se halla el templo del Señor. Se- palabras: "Ama a tu prójimo como a ti mismo," El la barca, la gente comía y bebía y se ca-
rá el monte más alto, más alto que cual- que tiene amor no hace mal al prójimo; así que en saba. Pero cuando menos lo esperaban,
quier otro monte. Todas las naciones el amor se cumple perfectamente la ley. En todo vino el diluvio y se los llevó a todos. Así
vendrán a él; pueblos numerosos llega- esto tengan en cuenta el tiempo en que vivimos, y sucederá también cuando regrese el Hijo
rán, diciendo: "Vengan, subamos al sepan que ya es hora de despertarnos del sueño. del hombre. En aquel momento estarán
monte del Señor, al templo del Dios de Porque nuestra salvación está más cerca ahora que dos hombres en el campo: uno será lleva-
Jacob, para que él nos enseñe sus ca- al principio, cuando creímos en el mensaje. La no- do y el otro será dejado. Dos mujeres es-
minos y podamos andar por sus sende- che está muy avanzada, y se acerca el día, por eso tarán moliendo: una será llevada y la otra
ros." Porque de Sión saldrá la enseñan- dejemos de hacer las cosas propias de la oscuridad será dejada. "Manténganse ustedes des-
za del Señor, de Jerusalén vendrá su y revistámonos de la luz, como un soldado se revis- piertos, porque no saben a que hora va a
palabra. El Señor juzgará entre las na- te de su armadura. Actuemos con decencia, como venir su Señor. Pero sepan esto, que si el
ciones y decidirá los pleitos de pueblos en pleno día. No andemos en borracheras y ban- dueño de una casa supiera a que hora de
numerosos. Ellos convertirán sus espa- quetes ruidosos, ni en inmoralidades y vicios, ni en la noche va a llegar el ladrón, se manten-
das en arados y sus lanzas en hoces. discordias y envidias. Al contrario, revístanse uste- dría despierto y no dejaría que nadie se
Ningún pueblo volverá a tomar las ar- des del Señor Jesucristo como de una armadura, y metiera en su casa a robar. Por eso, uste-
mas contra otro ni a recibir instrucción no busquen satisfacer los malos deseos de la natu- des también estén preparados; porque el
para la guerra. ¡Vamos, pueblo de Ja- raleza humana. Hijo del hombre vendrá cuando menos lo
cob, caminemos a la luz del Señor! esperen.
Lector: Palabra del Señor.
Lector: Palabra del Señor. Pueblo: Demos gracias a Dios. Pueblo: Gloria a ti Señor
Pueblo: Demos gracias a Dios.
Celebrante: El Evangelio del Señor
Pueblo: Te alabamos Señor
Salmo 122: R: Me alegre cuando me
dijeron vamos a la casa del Señor. Credo Niceno (LOC pág. 280)

Oración de los fieles: formula IV- (LOC


pág. 310-311).

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