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ÉTICA PROFESIONAh

MIJUEL ÁNJEL POLO SANTILLÁN*


E-maçl: polotzu@yakoo.com

INTRODUCCIÓN a la práctica protesional. Por eso


nuestro artículo quiere esclarecer el
Antes de iniciar el tema, quisiera concepto y al hacerlo quedará clara la
plantearme la siguiente pregunta: sen tunción de la ética protesional. Así,
qué conte<to hablamos de ética dividiré el artículo en las siguientes
protesional?, scuál es la importancia de partes: i) presentar el signiticado de la ética
este tema en nuestro conte<to nacional? en la vida humana; ii) el bosquejo
Sabemos que la corrupción social se ha histórico de las protesiones; iii) el sentido
agudizado desde los anos 90, en la cual de la protesión; iv) la protesión como
han participado protesionales de una actividad con tines internos; v) las
distintas carreras como de diversas e<celencias necesarias para lograr los tines;
universidades y estratos sociales. El espacio vi) entender la protesión como una actividad
político terminó corrompiendo la actividad comunitaria; vii) tomar conciencia de que las
protesional. Ante tal evento, la actividad protesiones torman parte de la sociedad
protesional debe recobrar su sentido a civil; viii) tinalmente, presentaremos la
partir de la atirmación de su propio conclusión de lo trabajado. El desarrollo no
espacio, que es el espacio público. Desde quiere ser sólo e<positivo, sino también
ahí puede ayudar a recobrar el sentido de la veremos las posibles corrupciones o
moral social tan venida a menos. No es, problemas que puede atrontar la
pues, este tema uno entre otros, sino uno actividad protesional.
que atecta al entramado social.
Entender el papel de la ética en las 1. DE LA ÉTICA A LA ÉTICA PROFESIONAL
protesiones requiere entender las
protesiones, su devenir y naturaleza. Desde sCómo va la ética en nuestro país?
ahí podremos comprender que hablar de sEs sensato seguir hablando de ética en
ética protesional no es simplemente un nuestro país cuando encontramos un
asunto adicional de buena voluntad, sino déticit moral en todos los niveles? Por
que es aquello que le da sentido eso algunos pueden

* Magíster en Fçlosofía con mencçón en Hçstorça de la Fçlosofía. Profesor Asocçado de la Facultad de Letras y Cçencças

Gestión en el Tercer Milenio, Revista de Investigación de la facultad de Ciencias Administrativas, UNMSM (Año 6, N.° l2, Lima,
Diciembre, 2003)

1
Humanas de la UNMSM. Investçgador del Instçtuto de Investçgacçones Humanístçcas de la FLCH/UNMSM. Mçembro de la
Socçedad Peruana de Fçlosofía.

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sostener que hablar de ética en nuestro entrentarla? Requerimos, pues, cuestionar,
país es como hablar de la «dentadura del interrogar, y al hacerlo estamos planteando
pollo». Sin embargo, a pesar de que los una opción ética. Interrogantes que nos
hechos sean así, no debemos dejarnos llevan a la búsqueda de la vida buena. La
aplastar por ellos. interrogación y la búsqueda son entonces
dos componentes
sEs racional seguir hablando de ética
en este conte<to? Claro que sí, porque el
hombre, como diría Kant, es un ser
metatísico por naturaleza, es decir, que se
resiste a someterse a los hechos tríos y
opacos. sPor qué es posible seguir
hablando de ética? Porque los seres
humanos, a pesar de nuestros
condiciona- mientos, hacemos opciones
tundamentales. Las dos principales son una
opción personal y una opción social. Con la
primera podemos tomar la decisión de
cultivar nuestro ser, es decir,
comprometernos en lo que Mill
denominaba el desarrollo de las capacidades
intelectuales y morales. La ética tiene que
ver con el bien personal, la autorrealización
o telicidad. Con la segunda, tomamos la
decisión de realizar el bien común, para lo
cual participamos en una actividad
comunitaria. De lo contrario, nuestra
e<istencia social se pone en peligro, porque
el bien común abarca la realización de
las necesidades indispensables para vivir
humana y dignamente. Ambas opciones son
en realidad una misma opción que se
e<presa de dos maneras. Es decir, que la
ética tiene que ver con el compromiso de
ser una «buena persona», la cual pasa por
la realización del bien común y la
búsqueda de la plenitud de nuestra
e<istencia.
Sin embargo, contra la concepción
liberal tradicional, dicha opción
requiere de condiciones previas que la
hacen posible, es decir, no es un acto
espontáneo ni esporádico. Entre las
condiciones previas están el marco de
reterencia cultural, el saber práctico y la
sensibilidad. Curiosamente, la búsqueda de
esas condiciones es ya una búsqueda ética.
Esa búsqueda nos lleva a interrogar, a
cuestionar nuestro marco de reterencia,
especialmente la reterida a la corrupción.
sCuáles son sus causas? sEn qué nos
involucra? sCómo atrontarla o
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indispensables de la vida ética. De lo actividades seculares, mundanas, sin
contrario nos queda la imposición y el relación con la religión. De esa manera,
sometimiento al poder económico y nuevas actividades pasaron a ser
político, que son dos tormas que protesiones, como ingeniero (de distintas
distorsionan las actividades sociales, especies), economistas, contadores, etc.
entre ellas las protesionales. Éste es el Además, se incluyó en esta
marco mínimo para hablar de las éticas
protesionales. Ahora, veamos un poco
sobre la naturaleza de esta actividad
pública denominada PROFESIÓG.

L. EL DEVENIR DE LAS PROFESIONES


La cultura y la sociedad
premoderna habían estructurado las
protesiones a partir de una cosmovisión,
donde jerárquicamente el orden divino
ocupaba el primer lugar y como
representación suya se encontraba el
orden político, tinalmente el orden
personal. Para garantizar dicho orden
estaban el sacerdote que cuidaba del
alma divina y de los asuntos divinos, el
jurista para cuidar de la sociedad
mediante leyes, el médico para el cuidado
del cuerpo. Por ello, el sacerdote, el
médico y el jurista asumen sus
actividades a partir de juramentos en los
cuales prometen obedecer determinadas
reglas. Por esa protesión o declaración
tueron conocidas como las primeras
protesiones.
El término «protesional» y su
respectiva valoración son algo que surge
en la época moderna, debido al proceso de
secularización donde la vida mundana y
sus actividades torman un campo
distinto de la te. El calvinismo, como
momento intermedio y como lo ha
sostenido Ma< Weber, había visto en las
actividades protesionales el camino
de salvación o condenación de una
persona. Si había tenido é<ito
protesional indicaba que estaba salvada;
si había tracasado, entonces estaba
condenado. Ello permitió que la
modernidad sea un proceso de «atirmación
de la vida corriente» (Taylor),
abriéndose un espacio a la
revalorización de nuevas actividades
humanas. Así, la cultura moderna asumió
ciertas actividades como «protesiones»,
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denominación medios de vida anteriores colectiva, que e<presa una cierta
como médico, abogado, protesor, etc. Ahora, comunidad protesional que tienen los
paralelo a la protesión de te (profesar una mismos tines, utilizan un lenguaje
te), estaba el protesar una actividad, es común, con métodos semejantes
decir, el consagrarse o comprometerse con
una actividad y sus principios. Por eso se
dice que la protesión aparece como una
proclamación pública; no es una actividad
secreta sino abierta y tiene el respaldo de
la sociedad.

3. ¿QUÉ ES UNA PROFESIÓN?


Con la pregunta de lo que es la protesión
no queremos hacer una simple descripción,
sino que estamos preguntando por el sentido
que tiene ésta. Ma< Weber, en su obra clásica
La ética PROTESTAGTE y el espíritv del capitalismo,
detinía la protesión del siguiente modo:

la actividad especializada y PERMAGEGTE


de VG hombre qve,
GORMALMEGTE , COGSTITVYE para él VGA
FVEGTE de IGGRESOS y, por TAGTO, VG
FVGDAMEGTO ECOGÓMICO segvro de sv
EXISTEGCIA. (Peber 1985, 8Z)

Esta detinición acentúa dos


características de las protesiones: su
carácter individual y económico. Las
protesiones son un medio de subsistencia
de los individuos. Eso hace de las
protesiones un «instrumento individual» de
ganar dinero. Sin embargo, como lo
han senalado otros autores, este entoque
resulta muy limitado, porque olvida los
tines y la actividad social de las
protesiones. Adela Cortina, tilósota
espanola, hace tres observaciones a
esta detinición:
a) La tinalidad de la protesión no se
limita a la «tuente de ingresos», es
decir, a una tinalidad subjetiva, sino
que la protesión misma tiene su
tinalidad. El logro de dicha tinalidad
es lo que le da sentido y legitimidad
social a la protesión, por ello la misma
sociedad puede reclamarle que lo
realice así como reclamar su calidad.
b) La protesión, además de ser una
actividad individual, es una actividad
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y con un ethos propio. Es decir, así es que en nuestra época se han
como hay un ethos (carácter, modo dituminado los antiguos límites entre
de ser) personal, también e<iste un
ethos de la protesión.
c) Por lo anterior, «el ingreso en una
actividad y en una comunidad
protesional determinadas dota al
protesional de una peculiar IDEGTIDAD y
genera en él un peculiar sentido de
PERTEGEGCIA» (Cortina L000, 15). Esto
tiene que ver con que la protesión es
una torma de atirmación de la
sociedad civil trente al poder político,
así como una atirmación de un espacio
público trente a otros como el
económico o religioso.
Por lo anterior, basada en las ideas
de MacIntyre, una detinición más
integradora de lo que es una protesión es la
que otrece Cortina. Una protesión es:

... VGA actividad social cooperativa,


cvya meta IGTERGA COGSISTE EG
PROPORCIOGAR a la sociedad VG
BIEG específico e IGDISPEGSABLE para
sv SVPERVIVEGCIA como sociedad HVMAGA,
para lo cval se precisa el COGCVRSO
de la COMVGIDAD de PROFESIOGALES
qve como tales se IDEGTIFICAG AGTE la
sociedad. (CORTIGA ZOOO, 15)

A partir de esta detinición podemos


darnos cuenta del sentido de una protesión.
En primer lugar, una protesión busca
realizar un bien o tinalidad, que es
indispensable para la vida social. Pero su
realización e<ige el cultivo de hábitos o
e<celencias por parte del sujeto y de la
acción que realiza. Finalmente, la actividad
protesional no es una actividad aislada
sino comunitaria, la cual le da una
identidad protesional. Veremos más
adelante estos componentes.
A pesar de que la palabra «protesión»
tiene múltiples usos —porque sirve para
designar tanto a un médico, un protesor,
como para un vendedor, un tutbolista y
hasta suele hablarse de un delincuente
protesional—, la detinición propuesta puede
ayudarnos a discernir cuando estamos en
presencia de una protesión. Lo que sucede
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«protesiones» y «oticios». Para darnos cuenta internos. Son los tines los que dan
de esta complejidad de protesiones, veamos orientación y sentido a las prácticas
una posible clasiticación. Antonio protesionales. La importancia de
Peinador ha clasiticado las protesiones
teniendo en cuenta dos criterios: por razón
de la actividad y por razón de los tines de
cada protesión (Peinador 196L, 8-10):

Por la actividad
Manvales: predomina el trabajo
corporal, manual o mecánico. También
denominadas oficios.
Liberales: predomina el trabajo de
la inteligencia. Denominada PROFESIÓG
propiamente tal.

Por los fines


Derecho a la vida física:
a) en un plano interior: cocinero, zapatero,
sastre, carpintero, labrador, artesano,
etc.;
b) en un plano superior: técnicos e
investigadores de laboratorio, industriales,
comerciantes, banqueros, etc.
Derecho al cvltivo progresivo e ilimitado
de la inteligencia: cientítico, teólogo,
tilósoto, artista, pedagogo, etc.
Derecho a vivir como individvos y
miembros de la sociedad dentro del orden
jvrídico y moral: político, sociólogo,
abogado, juez, notario, historiador,
novelista, religioso, etc.
En cualquier caso, para que algo
sea considerado protesión o actividad
protesional, dicha actividad debe estar
comprometida al logro del bien común,
para lo cual requiere el cultivo de ciertos
hábitos o virtudes, en un conte<to
comunitario. De ese modo, el
componente ético no es un anadido o un
agregado que no atecta la esencia de
la protesión. Aclaremos más estos
componentes.

4. LA PROFESIÓN COMO ACTIVIDAD


CON FINALIDAD
La actividad protesional es una
actividad social que contiene tines o bienes
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los tines la podemos encontrar en la praxis, mientras que hay tines que son
detinición de «protesión» que nos da e<ternos a las actividades, por lo cual éstas
Antonio Peinador. La protesión es: se convierten en medios para lograr los
tines. Es a esto a lo que Aristóteles
denomina poiesis. En época reciente, MacIntyre
la APLICACIÓG ORDEGADA y RACIOGAL de
parte de la actividad del
hombre al COGSEGVIMIEGTO de
cvalqviera de los FIGES IGMEDIATOS y
FVGDAMEGTALES de la vida HVMAGA.
(TEIGADOR 196Z, Z).

Entonces, la protesión no es una


simple actividad u ocupación, sino que
debe estar orientada hacia un tin
noble, es decir, el servicio a los demás:
el curar, el ensenar, el intormar, la
convivencia justa, etc.; las
protesiones no tienen sentido en sí
mismas sino por los bienes internos que
contienen. Por eso, no se puede
entender lo que es una protesión si no
se entiende que ésta tiene en su interior
una tunción social: el bienestar común.
De esa manera, el protesional es aquel
hombre

...pvesto al servicio de los demás,


DEGTRO del EGGRAGAJE social, ACTVAGDO
COG carácter pnblico y
cOMPROMETIÉGDOSE , EG cVAGTO
RESPOGSABLE de svs actos, AGTE Dios y
AGTE sv COGCIEGCIA; y, además, AGTE
aqvellos a QVIEGES sirve y de QVIEGES se
BEGEFICIA por ley de reciprocidad.
(TEIGADOR 196Z, 7)

Así, una ética protesional


requiere reconocer el bien interno que
busca realizar determinada protesión;
de lo contrario la actividad no tendrá
sentido y legitimidad social. Esta torma
de entender las acciones se enmarca en la
tradición aristotélica. Para el estagirita,
toda actividad tiene una tinalidad, la cual
constituye su bien. Sin embargo, no
todos los tines son iguales. Hay tines que
son internos a las actividades, es decir,
en la realización de la actividad se
encuentra la realización de la tinalidad.
Es a esto a lo que Aristóteles denomina

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ha tomado dichos términos para detinir la ya no sirve a la justicia sino a quien paga
práctica. Sostiene MacIntyre: más,

Tor «práctica» EGTEGDEREMOS cvalqvier


forma COHEREGTE y compleja de actividad
HVMAGA cooperativa, establecida
SOCIALMEGTE, MEDIAGTE la cval se REALIZAG
los BIEGES IGHEREGTES a la misma MIEGTRAS
se IGTEGTA lograr los modelos de EXCELEGCIA
qve le SOG apropiados a esa forma de
actividad y la dEFIGEG PARCIALMEGTE, COG
el resvltado de qve la capacidad HVMAGA
de lograr la EXCELEGCIA y los COGCEPTOS
HVMAGOS de los FIGES y BIEGES qve cOGLLEVA
se EXTIEGDEG SISTEMÁTICAMEGTE .
(MACIGTYRE 1987, Z33)

Los elementos que componen una


práctica son: i) el que sea una actividad
cooperativa, ii) establecida socialmente, iii)
busca la realización de los bienes internos,
iv) el logro de esos bienes internos produce
e<celencias o virtudes en los sujetos que
las realizan. No está sosteniendo el
autor una visión medieval de estatus y
roles predeterminados, sino que en tanto
actores sociales ya nos encontramos
realizando alguna actividad cooperativa.
Somos tuncionarios públicos, protesores,
empleados de una empresa, protesionales en
ejercicio, choteres, padres de tamilia, etc.
Cada actividad tiene bienes internos cuya
realización hace que ella tenga sentido. Si
soy médico y me aprovecho de mi condición
ante la debilidad de un entermo, entonces
no realizo el bien interno de la medicina,
que es curar.
MacIntyre reconoce que e<isten también
bienes e<ternos legítimos que se obtienen
de las prácticas, como el dinero, el
reconocimiento, etc., pero ellos no son
el sentido de la actividad. Justamente
la corrupción de una actividad se produce
cuando se reemplazan los bienes internos
por los e<ternos. Entonces tenemos que el
protesor ya no ensena bien porque le
pagan poco, el comisionado no cumple
los reglamentos porque aprovecha su
cargo para realizar sus intereses
personales, el policía ya no protege a la
ciudadanía y pretiere la coima, el abogado
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al político ya no le interesa el bien común a su protesión ni a su vida. Es ahí donde el
sino los negocios de grupos e intereses poder político y las organizaciones
partidarios, etc. Los bienes e<ternos son protesionales deberían reducir al má<imo
legítimos, pero en tanto sean las injusticias que produce el sistema
subordinados a los bienes internos; de lo económico.
contrario la actividad protesional deja de
tener sentido y legitimidad social.
Sin embargo, las e<igencias sociales y
los cambios cientíticos y tecnológicos
muchas veces nos obligan a redetinir los
bienes internos de nuestras actividades
protesionales. Por ejemplo, los avances
de la medicina y las necesidades sociales
hacen que la medicina ya no tenga sólo
como tinalidad el curar, sino que ahora
agrega la promoción de la salud y la
prevención de las entermedades. Y es que
el concepto mismo de salud ha sido
redetinido, más de acuerdo con una
visión humana integral. Por otro lado,
la globalización y la internet hacen que
los protesionales bibliotecarios también
requieran redetinir sus tinalidades.
Cuando esto sucede, se abre un necesario
periodo de debate y retle<ión, en los cuales
también deberían participar los atectados de
las actividades protesionales.
Una observación adicional. sCuál es
el lugar del bien personal o
autorrealización en la actividad
protesional? La realización de los bienes
internos torma parte de nuestra
realización personal, de su proyecto
de telicidad. Y es que el «horizonte de
plenitud» (Et<eberria) hace reterencia a la
vida humana como totalidad. Sin
embargo, esto plantea serios problemas.
La sociedad moderna tiende a tragmentar
la vida humana, a no asumirla
integralmente. Por ello, la vivencia de
las actividades protesionales suele ser
asti<iante, donde los sujetos estresados
pueden ser eticientes, pero no se
sienten telices. El problema no es de las
actividades protesionales mismas, sino de
la tinalidad del sistema económico: la
ganancia. Por realizar la tinalidad del
capitalismo, los individuos en sus
actividades protesionales suelen ser
e<plotados al punto de no encontrar sentido

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5. LA EXCELENCIA COMO MODO DE su carencia impide lograr tales bienes.
REALIZAR EL FIN (MacIntyre 1987, L37).
sQué es lo que pueden realizar los La virtud no es un asunto privado,
bienes internos a las prácticas íntimo, cualidad que algunas personas
protesionales? Siguiendo los conservadoras
lineamientos aristotélicos, podemos
sostener que son las virtudes o
e<celencias (aretai). Las virtudes protesionales
son la parte central de las éticas
protesionales, porque ellas son las tormas
como se realizan los tines de las
actividades protesionales.
Sin embargo, otros autores ponen
el acento en las normas, es decir, en el
«momento deontológico» (Et<eberria). Una
detinición en ese sentido de ética
protesional la podemos encontrar en
González, quien sostiene que la ética
protesional es

la REFLEXIÓG sistemática sobre las GORMAS


morales qve REGVLAG el COMPORTAMIEGTO
EG la actividad PROFESIOGAL (G OGZÁLEZ
1996, Z77)

Pero la «retle<ión sistemática» sobre


las normas puede convertir la ética
protesional en una deontología, limitando su
valor. Para que no ocurra ello, es necesario
que entendamos las normas morales del
protesional no sólo como mínimos legales
que está obligado a cumplir, sino como
tormas de promover las virtudes o
e<celencias de las acciones. No se trata
entonces sólo de revisar y renovar las
normas morales de los códigos de ética,
sino de promover las virtudes necesarias
para lograr los tines especíticos de la
protesión.
Por lo anterior, dejando de lado por
un momento los códigos de ética, es
necesario senalar que «ética protesional»
no signitica tanto la imposición o
aceptación de normas, sino que toda
práctica protesional conlleva virtudes o
«e<celencias» sin las cuales tales prácticas
se corrompen. Por ello, MacIntyre ha
acertado al entender las virtudes como
cualidades adquiridas necesarias para
realizar los bienes internos de las prácticas;
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o bienintencionadas tienen. Es un son dos cosas distintas. Alguien es buen
asunto personal e interpersonal, protesional cuando realiza con destreza y
subjetivo e intersubjetivo, individual y responsabilidad la tinalidad de su
colectivo. Y ese ne<o se encuentra en actividad. Por ejemplo, alguien es un
las acciones, en las prácticas en las buen protesor cuando realiza el bien
cuales nos encontramos con otros para interno, el cual
realizar los bienes internos. E<iste, pues,
en la detinición de virtud de MacIntyre
una indesligable relación entre virtudes
y bienes internos. Sin virtudes no es
posible la realización de los bienes
internos de las actividades, así como sin
realización de los bienes internos no es
posible virtud alguna.
Sin duda, esto sugiere que no todas
las actividades requerirán las mismas
virtudes. El policía, el obrero, el
empleado y el protesor requieren
virtudes distintas para lograr sus bienes
internos. Pero MacIntyre se percata de que
esto produciría un politeísmo de virtudes
incone<as, por lo que sostiene que
aunque las prácticas sean distintas,
podemos sostener un mínimo de virtudes
(como la integridad) que surgen de la
búsqueda de la vida buena, de asumir
nuestra e<istencia como un todo
unitario. El mismo problema es visto
por Camps, cuando sostiene que en la
sociedad de protesionales, cada protesión
tiene virtudes especíticas distintas de las
virtudes públicas (como solidaridad,
responsabilidad, tolerancia). Y senala algo
que suscribo plenamente:

La PROFESIOGALIDAD será VGA virtvd


pnblica EG la medida EG qve sirva a los
IGTERESES COMVGES de la sociedad. No EG
la medida EG qve sirva sólo al
MAGTEGIMIEGTO y COGSERVACIÓG de los
roles, FVGCIOGES y CORPORACIOGES
EXISTEGTES. Y será VGA virtvd privada EG
la medida EG qve ayvde al IGDIVIDVO
a serlo REALMEGTE , a ser AVTÓGOMO
y GO esclavo de svs actividades. (Camps
1993, 1O5)

Volviendo a la pregunta por las


«virtudes de una protesión», ésta signitica
lo mismo que la pregunta de cuándo
alguien es un «buen protesional». No

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es educar. No es un buen protesor aquel ve obligado a reducir el tiempo de
que maltrata a los alumnos tísica o diálogo con sus pacientes descuidando
psicológicamente, si impone su criterio tanto un e<amen cuidadoso como el
de autoridad, si no sabe llegar a los trato humano que requieren los
alumnos, etc. Según González, las
virtudes de un buen protesional son la
productividad (que encierra la capacidad de
producir, la actitud de producir y el nivel de
eticiencia), la creatividad y la
superación. Sin embargo, no siempre todas
las protesiones requieren de las mismas
virtudes. Para resolver la pregunta sobre
cuáles son las buenas prácticas o virtudes
que debe cultivar el protesional, deben
participar tanto los mismos
protesionales como los atectados o
beneticiarios o usuarios. Sobre esto,
Cortina sostiene:

Los vsvarios SOG los qve EXPERIMEGTAG la


calidad del servicio prestado y, AVGQVE GO
COGOCEG la trama IGTERGA de la PROFESIÓG,
RESVLTAG IGDISPEGSABLES para DETERMIGAR
qvé prácticas pRODVCEG VG servicio de
calidad y cváles GO. De ahí qve hoy EG
día los colegios PROFESIOGALES GO
PVEDAG ser cerrados, GO PVEDAG diseñar
svs códigos GI COMPOGER comités SIG
COGTAR COG los CIVDADAGOS
CORRIEGTES , COG los BEGEFICIARIOS
actvales o virtvales del servicio qve
PRESTAG a la sociedad. EG este PVGTO
DEBEG TRAGSFORMARSE RADICALMEGTE.
(CORTIGA ZOOO, Z4)

A veces perdemos de vista el tin


que perseguimos, y cuando lo tenemos en
cuenta tendemos a diterenciarlo de las
virtudes y creemos que éstas son simples
medios. Pero las virtudes no son simples
medios para lograr algo. La práctica de las
virtudes implica ya la realización de la
«tinalidad» de la protesión. El tin de una
protesión no es algo subjetivo y alejado
en un tuturo incierto, sino que está
contenido en la práctica correcta de la
protesión. Cuando los tines y los medios
los ponen la sociedad y su economía, no
permite la correcta práctica de una
protesión. Por ejemplo, al médico se le
e<ige productividad y eticiencia, pero se
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entermos. Por lo anterior, estamos de colegios protesionales. Esto tiene
acuerdo con González cuando dice que las ventajas y desventajas. Los colegios
virtudes que encarna el buen protesional protesionales sirven para autorizar y
son distorsionadas por la tetichización tiscalizar la práctica protesional,
de la economía, la deshumanización de procurando que llegue a dar un servicio de
las relaciones sociales y el olvido de que calidad. Además, vigilan que dicha
la vida es el valor supremo (González
1996, L89-L90). De ese modo, la
sociedad en que vivimos convierte en
tines los medios y los medios en tines, no
permitiendo un buen ejercicio de la
protesión.

6. LA PROFESIÓN COMO
ACTIVIDAD COMUNITARIA
Las protesiones son e<presiones de la
«actividad humana cooperativa», es decir,
las prácticas protesionales son
comunitarias. Esto por lo menos en tres
sentidos.
En primer lugar, porque el
protesional comparte con otros
protesionales un lenguaje común, un
método y hasta un modo de ser. La
transmisión y la renovación del saber
especializado se realizan dentro de
comunidades protesionales. Por eso
resulta e<trano, por decir lo menos, que un
protesional sociólogo, por ejemplo,
dicte cursos de especialidad para
administradores. Ello sólo se admite
cuando el sociólogo también tiene
tormación de administrador.
En segundo lugar, la comunidad
protesional se convierte en el reterente
del individuo protesional, porque le da
identidad y pertenencia. Este aspecto no
es poca cosa, sino que tiene que ver con
la identidad de una persona, pues así
como tenemos identidad religiosa,
nacional, política, también tenemos
identidad protesional.
En tercer lugar, porque la comunidad
de protesionales hace suya la tarea de
realizar la tinalidad de dicha práctica. En
otras palabras, las protesiones sirven a
la sociedad para realizar bienes
especíticos, pero lo hacen de torma
institucionalizada. Por ello, los
protesionales torman corporaciones,

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actividad sea ejercida por personas que LA SOCIEDAD CIVIL
hayan pasado por un previo periodo de Es célebre la distinción hegeliana de
tormación, especialmente si son que la eticidad está contormada por la
actividades con gran responsabilidad tamilia, la
social. Por ello es que los colegios
protesionales son la instancia que
autoriza el ejercicio protesional.
Sin embargo, este sentido de
solidaridad puede degenerar en
«corporativismo», que se manitiesta en el
encubrimiento de las actividades
ilícitas cometidas por los
protesionales. Se busca salvar el cuerpo,
el colegio, protegiendo a individuos
protesionales incompetentes o inmorales o
negligentes, dejando de tener en cuenta
los «mínimos niveles de calidad
protesional» (Vielva). También se
manitiesta en la e<igencia o detensa de
privilegios corporativos, relegando la
«solidaridad universal» por la «solidaridad
grupal». Como lo senala Cortina, la
«elevada misión» que justitica privilegios a
determinadas protesiones sólo tiene
sentido dentro de una visión gremial de la
sociedad, muy típica de la edad media.
Pero en una sociedad con estado de
derecho que por principio detiende la
igualdad de la ley para todos los grupos
sociales, tal actitud resulta anacrónica.
En cualquier caso, el corporativismo
pierde el sentido de la comunidad de
protesionales.
Finalmente, el ejercicio de las
protesiones puede hacer que se amolden a
las instituciones públicas o privadas sólo
respetando las normas y procedimientos de
la institución y caen en la rutina a tal
punto que dejan de tener en cuenta la
misión que tienen. Es lo que se ha llamado
«burocratismo». En palabras de Cortina:
F REGTE al ethos bvrocrático de QVIEG
se ATIEGE al MÍGIMO legal, pide el
ethos PROFESIOGAL la EXCELEGCIA ,
porqve sv compromiso FVGDAMEGTAL GO
es el qve les liga a la bvrocracia, SIGO a
las PERSOGAS COGCRETAS, a las PERSOGAS de
CARGE y hveso, cvyo b EGEFICIO da
SEGTIDO a cvalqvier actividad e
IGSTITVCIÓG social. (CORTIGA ZOOO, Z8)

7. LA PROFESIÓN COMO EXPRESIÓN DE


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sociedad civil y el Estado. Sin sociedad. Esta dimensión de servicio
embargo, entendió la sociedad civil que todo protesional presta es
como e<presión de las actividades marcadamente una dimensión moral y
económicas, es decir, del mercado. es el centro de su actividad. No
Hoy no es posible sostener que la e<iste un
sociedad civil, esté compuesta básicamente
por el mercado y que sea lo único que
hace trente al espacio político.
La sociedad civil también es el ámbito
de las actividades protesionales, la
opinión pública, las asociaciones cívicas
y, sin duda, las organizaciones económicas.
Lo cual quiere decir que las protesiones
juegan un papel importante en la
sociedad civil, por ello su necesidad de
atirmarse como espacio público diterente
de las actividades económicas y de las
políticas, que hoy pretenden ocupar todo
el espacio publico. Tan importante es el
espacio protesional en la sociedad civil
que sin ella ninguna actividad política y
empresarial podría realizar sus actividades
con óptimos resultados.
Con conciencia de ello, los
Colegios Protesionales pueden jugar un
rol más activo dentro de la sociedad
peruana, superando de ese modo el
corporativismo que les hace perder su
sentido. Las comunidades protesionales
tienen una responsabilidad social porque es
la misma sociedad la que hace
necesaria su e<istencia. Por
pertenecer a la sociedad y porque ella
hace necesaria las actividades
protesionales, ella también está autorizada
o legitimada para e<igir a los protesionales
que cumplan con la realización de los tines
o bienes especíticos.

8. A MODO DE CONCLUSIÓN
Podemos resumir y concluir lo
trabajado a partir de tres aspectos que
inevitablemente tocan la vida protesional
y tienen contenido ético, como son los
aspectos social, económico y personal.
a) El aspecto social. Las protesiones tienen
por tunción satistacer
determinadas necesidades de las
personas, de los miembros de una

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protesional que no preste un servicio a al mercado de trabajo de torma
la sociedad justamente ésa es su organizada y vigilada. Pero no se puede
razón de ser. Y ese servicio lo hace negar que
de manera comunitaria, generalmente
agrupados en colegios protesionales.
Para un mejor logro de los bienes
internos de las actividades
protesionales, estos colegios e<igen
actualización, mayor protesionalización
y e<igen (o deberían e<igir) el respeto
de los códigos de ética de la protesión.
Aunque siempre e<iste la duda de si
los colegios protesionales realmente
tuncionan como una comunidad o como
una corporación.
Este aspecto social también se retiere a
la intluencia que tienen las protesiones
en la sociedad. Una protesión no es un
ente autónomo culturalmente, sino que
recibe intluencias y a su vez intluye
culturalmente en la sociedad. Por eso, la
comunidad de protesionales también es
responsable del estado actual de la
sociedad, sea porque no cumple con su
rol ni genera modelos de e<celencia. Ha
sido el caso del periodismo en la década
turbia del tujimorismo, donde los
periodistas inventaban la noticia, se
vendían al poder político, ditamaban la
honra de las personas, degenerando la
práctica del periodismo. Creo que no se
puede dudar de que eso haya impactado
negativamente en la mentalidad nacional.

b) El aspecto ECOGÓMICO. Toda protesión


tiene una dimensión económica tanto a
nivel social como personal. La PROFESIÓG
PRESEGTA EG primer TÉRMIGO VG carácter
MARCADAMEGTE ECOGÓMICO, pvesto qve la
ECOGOMÍA TAMBIÉG se refiere a las GECESIDADES
HVMAGAS y al modo de satisfacerlas. EG
efecto, las PROFESIOGES se DESARROLLAG EG el
campo de la ECOGOMÍA , OBEDECEG a
cavsas ECOGÓMICAS y PRODVCEG efectos de la
misma clase. (Álvarez 1957, 171)
Así, los colegios protesionales
también tienen que ver con esta tunción
económica, porque los colegios sirven
para que sus miembros puedan acceder
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aparte de esa ’IGICIACIÓG’ EG los
BEGEFICIOS del mercado qve el colegio
c) El aspecto PERSOGAL . Por último, las
(IGTERMEDIARIO EGTRE el GOBIERGO y la
protesiones también incluyen un aspecto
cLIEGTELA ) ofrece, pvede FVGCIOGAR y de
hecho FVGCIOGA VG MECAGISMO de
COGTROL moral IGTERGO , a GIVEL de los
colegiados. (Regal 1988, 195)

Sin embargo, el sistema económico


ha convertido la sociedad en una
«sociedad de productores», desvalorizando
o cuestionando como actividad protesional
a aquellas que no producen lo que el
sistema requiere. Es el caso de protesiones
como la Filosotía, la Literatura, la Teología,
el Arte, etc. No obstante, mientras no se
entienda el producto en sentido reducido
(técnico-cientítico), e<iste espacio
suticiente para justiticar la e<istencia de
todas estas actividades. Los bienes que
una sociedad requiere no sólo son
económicos, sino e<iste toda una gama
que está en relación con las necesidades
espirituales, intelectuales, estéticas y
vitales.
Además, este aspecto económico de
la protesión no sólo signitica que
los protesionales accedan al mercado de
trabajo, sino que la actividad
protesional se ha convertido en el
medio económico de subsistencia de los
protesionales. La protesión nos proporciona
los medios económicos de satistacer las
necesidades privadas, las personales y
las domésticas. La actividad PROFESIOGAL es
hoy la FVEGTE GORMAL de IGGRESOS de todo
IGDIVIDVO qve GO VIVE a costa de los demás.
(Álvarez 1957, 173)
Sin duda, este aspecto también se
relaciona con el siguiente, pero debido a las
condiciones económicas del sistema
capitalista, las personas no suelen ver
al trabajo, y a la actividad protesional en
particular, como una dimensión que dé
sentido a sus vidas. Es visto como medio
para conseguir riqueza y poder, no como
parte de su realización personal. La
alienación de la economía, del trabajo y
de la actividad protesional son tactores que
deben ser tenidos en cuenta para pensar
una ética protesional.

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personal. Esto en un doble sentido. de vida que tenemos. Así, cada aspecto no
Por un lado, la práctica protesional está aislado del otro. Cuando uno de los
requiere de cierta vocación o aptitudes tres aspectos resulta enajenado,
para prestar un mejor servicio. Por perjudicado por la sobrevaloración de uno
otro lado, las protesiones moldean de ellos, vienen los problemas de
generalmente todas las demás áreas inmoralidad, pérdida del sentido de la
de la vida de un protesional. actividad, trustración, tormación de
grupos de poder, etc.
La vida de cada VGO se ORGAGIZA alrededor La ética protesional tiene, pues, la
de sv pROFESIÓG de tal sverte qve si ésta tarea de articular los distintos aspectos,
falta svele aqvélla desarticvlarse. tarea nada tácil pero que compromete
SEMEJAGTE ORGAGIZACIÓG afecta a la vez la totalmente. sTendremos los
vida privada y pnblica del protesionales el valor de asumir ese
IGDIVIDVO . Hábitos, jvicios, modos de reto? Sea que se asuma o no se asuma, ya
PEGSAR y hacer, formas de ACCIÓG se ha optado y en ambos casos habrá
IGTERGAS y EXTERGAS DEPEGDEG de la consecuencias de las que deberemos
PROFESIÓG y por ella se EXPLICAG. Tipos responsabilizarnos.
de vida familiar, estilos de amistad
TAMBIÉG se DERIVAG de la PROFESIÓG EG GRAG
medida. (Álvarez 1957, 17Z-173)
BIBLIOGRAFÍA
Sostiene Camps que la vida
protesional puede ser tuente de distrute y • ÁhVAREZ, Joaquín. Ética de ruestro
tiempo. Mé<ico: UNAM. 1957.
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«protesionalización absoluta», es decir, • CAMPS, Victoria. Virtudes públicas. Madrid: Espasa
está cuando la actividad protesional Calpe. 1993.
ocupa toda la vida personal, • CORTINA, A. Hasta ur pueblo de demorios.
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en su único mundo, generando un • CORTINA, A. Y CONIhh, J. (Dirs.). 10 palabras
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del sistema económico pero no con las Verbo Divino. L000.
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otro aspecto negativo de la actividad
Bogotá: El Búho. 1996.
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autonomía», es decir, cuando lo único • MACINTYRE, Alasdair. Tras la virtud.
que motiva a la actividad son los bienes Madrid: Cátedra. 1987.
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(Camps 1993, 10L-104). • REGAh, Bernardo. Furdamertos de etica
En síntesis, como se habrá entendido, profesioral. hima: Universidad de hima. 1988.
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personal, dando sentido y legitimidad a la L00L.
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moral es la torma

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