Está en la página 1de 3

El proyecto

ARQUITECTO.- He contactado a un trabajador que me han recomendado para realizar este proyecto tan
importante. Tiene que ser perfecto. La obra no se puede detener… Estoy seguro que este hombre no
tardará en llegar. Mientras revisaré los últimos detalles en los planos. (Mira a los planos)

TRABAJADOR.- Tenía algunos meses sin trabajar y ahora se presenta esta gran oportunidad. Tengo que hacerlo
bien. (Saluda al arquitecto) Buenas tardes arquitecto, mucho gusto.

ARQUITECTO.- Buenas tardes. Veo que ha llegado a tiempo, ¡eso me gusta!

TRABAJADOR - ¡Siempre puntual para trabajar!

ARQUITECTO.- Precisamente estoy buscando personas como usted, que sean responsables y que estén
dispuestos a hacer mi obra. Porque no es una obra cualquiera. Es una obra muy especial y yo quiero que
salga perfecta, que perdure. Le he investigado y he visto que en los trabajos que ha realizado ha sido
esforzado, valiente, disciplinado; por lo cual lo he contactado para que juntos realicemos este proyecto.

TRABAJADOR - Pues…muéstreme lo que hay que hacer y entonces hablamos de negocios.

ARQUITECTO.- (Extiende los planos) Mire usted, (antes que los pueda ver el contratista, los baja) solo quiero que
recuerde lo importante de la obra, nada debe detenerla.

TRABAJADOR - ¡Si, si… como usted diga! ¡Se obedecer!

ARQUITECTO.- Mire usted, (Vuelve a extender los planos), la base de toda la obra es esta roca, es inamovible, es
la piedra angular. Sobre esta roca usted tiene que construir todo esto, y va a levantar estas columnas y
luego que quede bien firme, hay que levantar las paredes y pondrá esto y no se le olvide esto de acá. (El
contratista saca la cinta métrica) ¡Las medidas son exactas! Confíe en mi diseño. El plano debe ser
considerado en todo momento. ¿Estamos de acuerdo?

TRABAJADOR - Mire, arquitecto… yo pensé que el proyecto era algo más sencillo. Creo que esta obra es muy
grande, no sé si sea capaz de terminarla a tiempo. Creo que es más de lo que yo puedo realizar.

ARQUITECTO.- Confíe en usted mismo, confíe en mi que he creído en usted. Tenga fe.

TRABAJADOR - ¿Fe? Fe no va a levantar esta obra.

ARQUITECTO.- ¡Ahhhhh! Se equivoca mi amigo. La fe es muy importante en este proyecto. Pero no se preocupe,
la tarea no la va a realizar usted solo. (Saca un teléfono celular de su bolsillo)

TRABAJADOR - ¿Y esto? Yo necesito quien me ayude a martillar, a cortar madera, a trasladar los materiales… ¿El
teléfono para qué? ¡Ahhh ya se! Para llamarle al hermano Pepe.

ARQUITECTO.- No, te equivocas… este teléfono solo tiene un número esta bajo el nombre Espíritu Santo. Cada
vez que tengas dudas sobre el proyecto, que te sientas cansado o que necesites ayuda o materiales.
Marca ese número y tendrás lo que necesitas. ¿Está claro?
1
TRABAJADOR – Bueno, así la cosa cambia.

ARQUITECTO.- Solo no te olvides de ser obediente y continuar la obra pase lo que pase. He puesto mi confianza
en ti.

TRABAJADOR.- Así lo haré. Gracias por su confianza (Estrechan las manos y sale el arquitecto) (Lee los planos) Es
hora de trabajar… pero veo que el material es insuficiente, no podré realizar la obra... Ahhh, pero el
Arquitecto me ha dicho que este proyecto no debe detenerse… (Se acuerda del teléfono y marca) Bueno,
Espíritu Santo, el arquitecto me dijo que te llamara cuando… si, pues mira… necesito material, no puedo
realizar la obra sin material… (Entran uno a uno personas con material en mano) … Wooow, esto si que
es prontitud… aun no terminaba de decir la palabra y ya lo tengo conmigo…. ¡Gracias Espíritu Santo! De
verdad, que contigo todo es mas sencillo.

AYUDANTE.- Traigo este material que el Espíritu Santo me pidió que le entregara, pero además siento en mi
corazón quedarme aquí con usted para ayudarle en lo que necesite.

TRABAJADOR.- Eso sería excelente. ¿Pero como te llamas?

AYUDANTE.- Usted llámame Diacono, pues estoy para servir.

TRABAJADOR.- ¡Excelente! Trabajemos juntos. (Trabajan unos momentos)

ENEMIGO.- (Hablando desde la entrada) Mira, mira… una obra lista para detenerse. Ese es mi trabajo…
desanimar, detener y destruir. A veces no batallo, hay gente que con una sola palabra cae ante mi
astucia. Veamos que tan fuertes son (Se acerca a los trabajadores). Veo que usted es un excelente
trabajador… lleno de habilidades… talentos… solo que, al parecer, no le han dado muy buenos
materiales, el Arquitecto siempre hace lo mismo… quiere levantar una obra con lo que otros no quieren.

TRABAJADOR.- Ah ¡¿si?, ¿Y usted quién es? ¿Cómo conoce al Arquitecto?

ENEMIGO.- Yo conozco al Arquitecto desde hace mucho tiempo. Yo estuve con Él desde el principio. Era uno de
sus trabajadores. Bueno, era el mejor de todos los trabajadores…no había nadie como yo…

TRABAJADOR.- ¿y porque no sigues trabajando con Él si eras tan bueno?

ENEMIGO.- Precisamente esa es la razón por la que estoy aquí… Porque Él es un perfeccionista. Es muy
demandante. Quiere que todo se haga como Él quiere.

TRABAJADOR.- Pues por eso es el mejor Arquitecto. Es más no conozco alguien que haga mejores obras que Él.

ENEMIGO.- Mira, yo te puedo ofrecer un mejor proyecto… Deja esta obra, se ve que es muy cansada, agotadora,
y al final, el crédito se lo llevará Él. No tiene caso que estés esforzándote tanto… Deja de trabajar… No
continúes…

TRABAJADOR.- Pero el me ofreció un galardón, una recompensa para cuando termine mi trabajo.

ENEMIGO.- Eso va a tardar mucho!!!! Y no creo que termines… Lo que llevas avanzado se ve muy frágil…

TRABAJADOR.- Sabes que… (Saca el teléfono…)

2
ENEMIGO.- (Con miedo) ¿Qué haces?... No marques… Espera…

TRABAJADOR.- Espíritu Santo… lo conoces? ahhh, no me digas!!! Con razón… Eso me tranquiliza… ¡Gracias
Espíritu Santo! ¡Nunca cambies! (Cuelga el teléfono y saca la cinta métrica) Tal como me lo advirtieron,
tú no tienes las medidas del Maestro. Con que tú eres un traidor y enemigo del Arquitecto… ya me
dijeron que te corrieron porque no te sometiste. Que ahora tratas de desanimar a los fieles trabajadores
para que se detenga la obra… Sabes que, vete de aquí, el Arquitecto me ha encomendado esta obra y
no voy a parar hasta terminarla. No me estorbes más.

ENEMIGO.- Bueno, después no digas que no te lo advertí. Me voy, pero regresaré… (hablando a la gente) Cuando
se le descargue el celular y no pueda hablarle al Espíritu Santo, cuando este distraído… cuando menos
se lo esperen… mi trabajo no ha terminado.

TRABAJADOR.- Esta obra sí que es especial… Debe ser muy importante para que alguien trate de detenerla.
Sigamos trabajando como dijo el Arquitecto. Sigamos sus instrucciones. (Se queda pensativo) Siento
como que esta obra esta tardando mucho. ¿Será que el enemigo tenía razón? ¿Será que tarde mucho la
recompensa? Ya hasta siendo que el Diacono me quiere quitar el puesto. Estoy muy cansado. (Mira al
teléfono) Ya casi se queda sin pila… (suena el teléfono) Espíritu Santo, si… ¿Si?, ¿Qué siga adelante, que
me esfuerce?... entiendo… el diacono y yo estamos del mismo lado… Voy a confiar en el Arquitecto, voy
a seguir adelante, nada detendrá la obra. Si, si,… Enseguida lo pongo a cargar para estar comunicados.
¡Hablar contigo me fortalece! ¡Gracias Espíritu Santo!

ARQUITECTO.- Veo que la obra ha avanzado. Usted ha hecho un muy buen trabajo.

TRABAJADOR.- Si, la verdad que ha sido difícil… (limpiándose el sudor).

ARQUITECTO.- Lo sé, no deje de observarte, en el tiempo del desánimo, de la escases y de la prueba. He visto tu
obediencia y persistencia. Pronto te daré tu recompensa. Solo déjame revisar el trabajo y (saca la cinta
métrica). Aquí falta algo…

TRABAJADOR.- Pero, he realizado todo lo que estaba en los planos…

ARQUITECTO.- Si, tu trabajo esta terminado… pero el último detalle, no lo pondrás tú. Ese último toque lo pondrá
otro de mis trabajadores. Uno que durante 40 años me ha servido; que al igual que tú, ha pasado por
pruebas, momentos difíciles y por ataques del enemigo, pero de ninguna cosa ha hecho caso ni ha
estimado su vida preciosa para sí mismo, se ha esforzado por continuar la carrera con gozo y el ministerio
que recibió de mi para dar testimonio del evangelio de la gracia de Dios. Él ha sido fiel y obediente a mi
voz. (Va a donde esta el pastor y le da un letrero para colgar en la obra)

Mi siervo, tu trabajo será galardonado.

Fin
3

También podría gustarte