La refracción de la luz.

La refracción de la luz es cuando la onda lumínica traspasa de un medio material a otro al

propagarse, tras lo cual se produce de inmediato un cambio en su dirección y su velocidad. Se
trata de un proceso relacionado con la reflexión de la luz y puede manifestarse al mismo
tiempo.

La luz puede propagarse en medios materiales como el vacío, el agua, el aire, el diamante, el
vidrio, el cuarzo, la glicerina, y toda clase de materiales transparentes o traslúcidos. En cada
medio, la luz se propaga a una velocidad diferente.

En todo fenómeno de refracción de la luz, participan los siguientes

elementos:

rayo incidente: rayo de luz que llega a la superficie entre ambos

medios;

rayo refractado: rayo que se desvía cuando la onda luminosa

atraviesa la superficie;

línea normal: línea imaginaria perpendicular a la superficie,

establecida a partir del punto en que ambos rayos coinciden;

ángulo de incidencia: ángulo que se produce entre el rayo

incidente y la línea normal. Se expresa con el símbolo θ1;

ángulo de refracción: es el ángulo que se produce entre el rayo

refractado y la línea normal. Se expresa con el símbolo θ2.

Newton:

Isaac Newton es sobre todo conocido por sus 3 leyes de movimiento y cómo no por la
gravedad. Sin embargo, fue uno de los grandes científicos, con otros grandes descubrimientos,
entre ellos el prisma óptico, donde logró descomponer la luz. El prisma de Newton es
probablemente uno de los instrumentos más sencillos de la ciencia del que podemos
aprender. Newton eligió óptica para sus clases universitarias. En el año 1666 logró
descomponer la luz en los colores de su espectro por medio de un prisma y en el año 1672,
presentó a la Royal Society este nuevo descubrimiento.

PRISMA DE NEWTON: DESCOMPOSICIÓN DE LA LUZ

Muchos de los científicos de la época pensaban que el color era una mezcla de luz y oscuridad
y que eran los prismas los que teñían la luz y que por eso la emitían. En su día Aristóteles
escribió sobre la luz blanca como una entidad simple, pero Newton estaba convencido que la
luz blanca sería una mezcla de diferentes colores.
El físico inglés Robert Hooke criticó los trabajos de Newton sobre la naturaleza de la luz, lo que
desató una ira en Newton que parecía desproporcionada en relación con los comentarios de
Hooke. En consecuencia, Newton demoró la publicación de su monumental libro «Óptica»
hasta después de la muerte de Hooke. En 1704 se publicó finalmente dicho libro, el que
trataba en profundidad sus investigaciones sobre los colores y la difracción de la luz.

Para sus experimentos, usó prismas triangulares de cristal. La luz penetra por una de las caras
del prisma y se refracta hasta descomponerse en diferentes colores, debido a que el grado de
separación varía en función de la longitud de onda de cada color. Los prismas actúan de este
modo gracias a que la luz cambia de velocidad cuando pasa del aire al cristal del prisma. Una
vez separados los colores, Newton utilizó un segundo prisma para volver a refractarlos y que
formaran de nuevo luz blanca. El experimento demostraba que el prisma no añadía el color a
la luz, como muchos creían. Newton también hizo pasar solo al color rojo obtenido con un
prisma por un segundo prisma, descubriendo así que el color no se alteraba. Era una prueba
más de que el prisma no creaba los colores, sino que sólo separaba los que estaban presentes
en el haz de luz original.

Los diferentes colores que podemos apreciar se deben a diferentes longitudes de onda de los
componentes de la luz. Al hacer pasar la luz por un prisma de cristal, por el fenómeno de la
refracción al cambiar de medio, cada longitud de onda tiene una desviación diferente,
separándose por colores y dando todos los colores en los que se compone la luz blanca.
En su día, Newton no trabajaba con longitudes de onda, puesto que no se sabía que la luz era
una onda-partícula. Hoy sabemos que no todas las longitudes de onda son visibles por el ojo
humano, y así existen radiaciones no visibles entre 350nm y 740nm (infrarrojos, por debajo de
los 350nm, hasta los ultravioletas, por encima de los 750nm).(newton-metro)

El mismo fenómeno de descomposición de la luz que ocurre en el prisma óptico, ocurre con las
gotas del agua suspendido en la atmósfera, descomponiendo la luz y dando de resultado el
arcoíris

Este descubrimiento fue un gran aporte para la concepción actual que tenemos de la luz y el
color, que nació con Isaac Newton.

LA LUZ VISIBLE EN EL ESPECTRO ELECTROMAGNÉTICO

La luz visible está compuesta por ondas electromagnéticas. Forma parte del espectro
electromagnético y es la zona que el ojo humano es capaz de percibir. Cada color tiene una
longitud de onda diferente. En un límite del espectro de luz visible (por encima del violeta) se
encontraría la luz ultravioleta y en el otro límite (por debajo del rojo) se encontrarían los
infrarrojos.