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Asignatura: Perfil del Predicador Bíblico

Docente: Mtro. José Ramos

Seminarista: Martha Cecilia Reyes Rodríguez

Correo electrónico: rerm930520@gmail.com

Carrera: Licenciatura en Ministerio

Trabajo: "Capitulo 3,4 y 5”

Fecha: 01 de diciembre de 2022

Ciudad Juárez, Chihuahua, México.

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Índice

"Capitulo 3,4 y 5” 3
Bibliografía 4
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"Capitulo 3,4 y 5”

Introducción A continuación veremos un poco más de lo que percibimos a simple

vista del predicador, todo lo que implica el que este parado detrás de un pulpito, veremos al
predicador como testigo, en cuanto a la experiencia y la humildad del predicador, padre con
el amor y ternura que debe poseer el predicador, y siervo son las características que en este
ensayo desarrollaremos para referirnos a las cualidades del predicador como nos ensena la
palabra de Dios en el Nuevo Testamento

Idea principal del autor. El autor nos muestra unas claras ideas de estas
características que debe poseer el predicador, el predicador es un testigo, pero no de su
experiencia personal, como se suele estar acostumbrado, si no que piensa en el predicador
como un testigo del trasfondo bíblico, testigo de su ora redentora y de la manifestación de
su Santo Espíritu, así como del Hijo, del Padre dando testimonio al mundo, como iglesia
pero no solo eso también en particular, en la individualidad, lo cual traslada la
responsabilidad al individuo no permitiéndole escusarse tras una iglesia por dar o no tal
testimonio. Podemos tener testimonio falso o verdadero, pero siempre estaremos
testificando algo, solo nos recuerda que el testigo falso es Satanás. Respecto a la humildad
señala lo totalmente opuesto a la vanagloria que podría contribuirte el pulpito, llamando a
todo lo contrario el sometimiento competo a Dios, reconociendo y dándole a él la gloria
siempre que de antemano le corresponde.

Como padre, con esa ternura y amor que deben ser parte del perfil del predicador,
porque así nos ensena la palabra, desarrollada en una relación de afecto más que de
obligación, el autor en una sola frase describe todo este apartado diciendo ¨es como un
padre con sus hijos¨ y con ello todas las bondades que desarrolla esta característica.

Autoridad limitada porque es El padre nuestra única autoridad, pero sin abusar de
esa autoridad, si no siendo un padre tierno, manso y humilde, pero amor ilimitado como el
del mismo Padre a nosotros. Sin olvidar el empeño, el ejemplo y las oraciones de un padre,
un buen padre.
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Por último punto el ser siervo, el poder y motivación de un predicador, llamados a

ser siervos, todos en general, pues es de rechazar todo acto de veneración a cualquier
humano al servicio de Dios, el predicador no es si no un instrumento o siervo de portar y
proclamar la palabra de Dios. Ahora bien refiere el autor, la responsabilidad de predicador
es la proclamación, no la discusión, en la que muchas veces por falta de humildad llega uno
a caer, casi si percatarse de ello.

Opinión personal Es muy efectiva la forma en a que este autor declara y arremete
contra aquello con lo cual un predicador constantemente puede enfrentarse, efectivo po que
confronta con la misma palaba cual es el modelo a seguir bíblicamente, y nos lleva a no
conformarnos con ser como queramos argumentando que lo hacemos para Dios y el
conoce, porque la verdad es que mayor excelencia requiere toda obra que se hace en su
nombre, pues somos heraldos del Rey, por lo cual en esa misma representación del rey
debeos hacerlo todo con excelencia.

Conclusión Practica Hacer una instrospeccion practica hacia nosotros mismos nos
llevara a valorar objetivamente nuestra labor como predicador, confrontando cada aspecto
de nuestra vida por medio de la sumision y entrega al Espiritu Santo para que sea el quien
nos transforme y guie en crecer con humildad y sencilles para su propia gloria y honra,
cada dia debemos hacer ese examen de si estamos cumpliendo con estas caracteristicas en
cada uno de sus subtemas, o subcaracteristicas, sabiendo que el mismo Padre es quien dara
testimonio por su Espiritu santo a traves de nosotros, a traves del predicaor, el cual
inebitablemente sera cada uno de nosotros por haber sido encontrados con la Cruz de Cristo
y su sangre redentora.
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Bibliografía

Stott, J. (1996). Imagenes del predicador en el Nuevo Testamento. Buenos Aires: Grand
Rapids.
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