Está en la página 1de 3

nido ese valor o esa abnegación.

Que qué no nos ocupamos en esta reseña de


puede conducir a Enrique Grau -como los cuadros exhibidos. Ni les asignemos
puede no conducirlo- a un estilo gran- categorías. Varios poseen toda clase de
de, basado en premisas seguras y robus- excelencias . Otros se nos imponen como
tas. iDios lo conduzca de la mano! Pero una presencia imborrable. Pero todos es-
nosotros todos, el público aficionado, de- tán tocados del signo de la difícil facili-
beríamos darle las gracias por haberlo in- dad que es el indicio de la madurez, y
tentado No se ve tal cosa todos los días. marcan una etapa decisiva en la evolu-
En vista de lo anterior, se hará claro por ción del artista.

EL FOLCLORE MUSICAL
EN COLOMBIA

Del Boletín de Programas N° 199,


Febrero de 1961

I tratar de la música colombiana es


necesario hablar sobre la música
americana Nuestra historia está incorpo-
rada a la historia de América, y desde el
descubrimiento quedó nuestra música ló-
gicamente englobada dentro de la ame-
ricana.
Más obscuro es el pasado Sobre esta
materia nos faltan estudios, nos faltan da- dor, y es la propulsión de la cultura mu-
tos. Reunir estos datos, estudiarlos , ha- sical en Colombia concediéndole gran
cer de ellos un análisIs comparativo en importancia al nacionalismo . Esto pare-
relación sobre el particular en otros pue- ce ser de importancia capital y decisiva,
blos americanos es cosa Interesante no en otros términos, qUiere decir manera
sólo para el músico sino para el historia- de presentarnos ante la clvlllzacion artís-
dor Para el músico sería abrirle una fuen- tica vestidos correctamente A este ob-
te nueva, hoy que tántas se están ago- jeto debemos prepararnos , y la mejor
tando, y el histOriador pOdría sacar de ahí manera es empezar por admitir que has-
partido para sus Invesllgaclones ta hoy hemos hecho muy poco. Apenas
Los puntos sometidos por la Dirección de si se cuentan esporádicamente algunos
Bellas Artes al estudio de este Congreso esfuerzos individuales en las actividades
pueden reducirse a un común denomina- musicales de distinto orden: pero descon-

32

© Biblioteca Nacional de Colombia


certados entre sí y sin resultados prácti - en el criterio de sus grandes composito-
cos generales . A la luz de un criterio im- res , y a qué grado de form idable desa
parcial aplicado de cerca se puede ver rrollo han llevado la música. Entran como
que hasta hoy entre nosotros el empiris- causales varios factores, entre otros el
mo y la desunión se han erigido en siste- temperamento de su raza influido por el
ma Volvamos a nuestro asunto medio geográfico. Raza muy dada a las
diSCiplinas espirituales de todo género ,
Extenderse en consideraciones sobre el
caracterizándose por la cualidad del equi -
folclore universal sería cosa muy larga,
libriO refleXIVO Infiltrándose en el alma po-
y aquí debemos hacer gracia a la conci -
pular, en una tradición secular que conti -
sión y brevedad. Pero no está de más ,
núa hasta el presente , esos factores han
a modo de exordio , darle una brevísima
sido causa determinante de una caracte-
ojeada a vuelo de avión.
rística de su folclore , y es ésta : el saber,
La tendencia nacionalista en el arte mu- el sentir popular, como diría Pedrell, han
sical no es cosa nueva , podemos decir creado una musa refinada y ennoblecida .
que es tan antigua como la humanidad A la solidez de este concepto contribu-
misma. Esto procede de razones simple- yen en gran parte las opiniones de gran-
mente naturales y lógicas La música es des artistas y autorIZados crílicos y
el lenguaje o expresión de los sentlmlen escritores franceses Hagamos referen-
tos, los cuales son conexos en el Indlvl cia a éstos por considerarlos Jueces de
duo con su temperamento y su sicología, excepción , en los cuales , además de su
modelados y estereotipados en él por ata- competencia e ilustradas facultades cr í-
vismo racial ante todo De ahí que el gra- ticas y analíticas, resalta una cual idad ad
do de cultura y progreso de los pueblos mi rabie y enVidiable; la imparcialidad .
pueda apreciarse por su arte y por el es- Entre muchos de ellos , y en escrito re -
tado en que ese arte se encuentre La Ciente , el señor Yamín coloca la música
musica , dice Paul Sertrand , es el arte con alemana en primer término No encuen -
el cua l se expresa al través de las eda- tra nombres qué oponer a los de Sach ,
des el corazón de la humanidad Parece Seethoven y Wagner , y luego agrega
que todo lo que atañe al folclore está ín- " Como las energías matenales , las ener-
timamente ligado a la etnología , forman - gías espirituales solamente pueden pro-
do un mismo cuerpo con ella . pagarse en un medio conductor El alma
En los pueblos de Oriente , Rusia excep- alemana ha Sido más que ninguna otra un
tuada, el arte musical permanece estaclo cuerpo conductor de música".
nario a pesar de su Inmensa riqueza fol Rusia logró formar una verdadera escuela
clórica y de la variedad interesante de sus tomando por base su potencial folclórico
instrumentos típicos . Su música no evo - Obra ha sido de Gllnca , su fundador , y
luciona conservándose en estado de pri- de sus continuadores , entre ellos el gru-
mitivismo Sin embargo es indudable que po conocido de " los cinco " Su más ca-
adqUirirá un Importante desarrollo , dadas racterizado representante actual es Stra-
las tentativas que en tal sentido vienen vinsky, cuya compleXión musical es pre-
realizando los músicos europeos que se potente y avasalladora
interesan en explotar ese filón FranCia está conS iderada por muchos co-
En Europa la tendenCia nacionalis ta ha mo la nación que va hoya la vanguard ia
ven ido acentuándose cada día más . Sa- en arte musical QUizá esto deba contem -
bido es cómo en los países centrales, con plarse baJO el punto de vista de escuela
Alemania a la cabeza , la música popular fundada en orientaciones hacia una nue-
como elemento autóctono ha presidido va estélica , y el empleo de procedlm ien -

33

© Biblioteca Nacional de Colombia


tos nuevos Como corolario tenemos el norte de Santander (motilinos), en los lia-
vanguardismo, el ultramodernismo, el fu- nas orientales, en la costa atlántica (gua-
turismo, etc. En materia de folclore, que jiros), en la costa del Pacífico hacia
es lo que interesa a nuestro estudio, pa- Panamá, en las regiones del Sur. Como
rece que el movimiento es interesante. huellas de una civilización pasada tene-
Sus musicógrafos coleccionan, estudian mos las ruinas de San Agustín, y algunas
y analizan concienzudamente viejas me- inscripciones jeroglíficas como las de Fa-
lodías y temas populares de diferentes re- catativá, Pandi, etc. Esto es lo conocido
giones del pais, tomando muy en cuenta hasta hoy, acusando una inferioridad ma-
el temperamento de su raza y las influen- nifiesta en relación con incas y aztecas .
cias estéticas de la periferia, dado su me- En música diremos que los historiadores
dio geográfico Sus compositores utilizan sólo mencionan el fotuto (flauta) y otros
el elemento popular tratándolo en los div- pocos de viento y percusión, haciéndo-
sersos géneros musicales. se por tanto escasa y difícil la documen-
Estudios muy Interesantes se realizan en tación organográfica. En cuanto al sis-
los Estados Unidos hace ya bastantes tema de tradición parece que es muy po-
años, con el debido apoyo de entidades co lo que pueda recogerse, dadas las di-
oficiales y particulares, los museos y uni- ficultades.
verSidades Se publican libros y revistas
Se hace ya necesario hacer investigacIo-
sobre la materia, yen los archiVOS de los
nes en materia tan importante, recono-
museos o de las bibliotecas se encuen-
ciendo y aceptando, con humildad, que
tran las colecciones folclóricas de las ra-
los países hermanos nos están dejando
zas Indígenas hechas por los músicos
muy a la zaga En cuanto al valor artísti -
que , como miss Fleteher, han logrado
co y posible utilización de los motivos In-
permanecer largas temporadas entre los
dígenas precolombinos, no es prudente
indios. Es ya larga la lista de obras de mú-
emitir un juicio a priOri, no es para sentir-
sicos de los Estados Unidos en las que
nos optimistas ni pesimistas: ni engreídos
se ha hecho aplicación del folclore in·
ni desconsolados Y aquí se Impone es
digena
ta conSideración : la geografía política,
Con un Interés que está en razón directa convencional y enmarcada entre líneas
de su progreso se trabaja en las demás movedizas, es muy diferente de la geo
naciones americanas. grafía musical, dependiente de cuestio -
Entre el imperiO de los aztecas y el de los nes de raza , cultura , afinidades tempe
incas hay una vasta zona dentro de la ramentales y otros factores que deben
cual se encuentra lo que es hoy nuestra estudiarse Teniendo en cuenta que la
República de Colombia Esta zona pare- parcelaCión del terntorlo amencano era
ce constituir una solución de continuidad otra, resultaría algo anacrónico naciona-
entre la civilización de aquellos pueblos lizar la música indígena precolombina de
Por lo que toca a nuestra patria, la raza acuerdo con las naCionalidades actuales,
de sus primitivos pobladores ha desapa- y Sin que preceda un análiSIS que de luz
recido casi por completo en muchas par- sobre las recíprocas Influencias proba-
tes ; en otras hay el mestizo , y quedan bles , etc, Con el tiempo pOdrían surgir
unas pocas tribus aisladas que viven al hasta reclamaciones ,

34
© Biblioteca Nacional de Colombia

También podría gustarte