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ALLAN ANDERSON

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ELPENTECOSTALISMO
autorización o plagien. en todo o en parte. una obra literaria,
artística o científica fijada en cualquier tipo de soporte.
El cristianismo carismático mundial
Traducción:
Ana Juliá Cristóbal

Títu lo original
An' introduction lo Penrecostalism, Global Charismatic Christianity

Publicado originalmente por Tite Press Syndicate of tite


Universiry of Cambridge, 2004

© AJlan Anderson, 2004

© Ediciones Akal, S. A., 2007


para lengua española

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28760 Tres Cantos
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Impreso en Cofás. S. A,
Móstoles (Madrid) akal
xv
pezaron a aparecer las primeras casuchas de hojalata a las afueras de las
zonas residenciales propiamente dichas, varias de estas iglesias se impli-
caron en la provisión regular de alimentos y ropa para los llamados «ocu-
pas». En enero de 1992 se inauguró una escuela primaria administrada
por Tshwane Christian Ministries (una organización dirigida por pente- LA GLOBALIZACIÓN y EL FUTURO
costales y carismáticos de la zona de Soshanguve) y a ésta le siguió un DEL PENTECOSTALISMO
hogar para niños pobres. También se empezaron a impartir clases de al-
fabetización para adultos y de costura, punto y labores domésticas, todo
bajo los auspicios de estas iglesias. Como señala el antropólogo Martin
West refiriéndose a las iglesias independientes de Soweto, de esta mane-
ra las iglesias pentecostales africanas «cubren muchas de las necesidades
de los habitantes de las ciudades que antes cubrían sus parientes a menor
escala en las zonas rurales». West enumera varias maneras en las que se
cubrían las necesidades de los miembros de la iglesia en el asentamiento
urbano de Soweto. La iglesia independiente, como asociación de vo-
luntarios, ofrece a sus miembros un sentido de familia, amistad (pro-
porcionando grupos de apoyo en tiempos de inseguridad), protección EL CRISTIANISMO CARISMÁTICO COMO FENÓMENO
bajo la figura dellider (y espec1almente el líder carismático), control so- «GLOBAL12ADO»
cial (insistiendo en ciertas normas de comportamiento y haciéndolas
cumplir) y de maneras prácticas, como, por ejemplo, ayudándoles a en- Este libro ha demostrado que, después de sólo un siglo transcurrido
contrar empleo, ofreciéndose ayuda mutua en los momentos de crisis desde su comienzo, las facetas carismáticas del cristianismo ahora es-
personal y dándoles oportunidades de liderazgo, Las iglesias proveen así tán presentes en la mayoría de los países y han afectado a todas las for-
a sus miembros «nuevas bases de organización social»:". mas de cristianismo de nuestro mundo contemporáneo, comoquiera
En Latinoamérica, África y en otros lugares del mundo mayorita- que veamos o manipulemos las estadísticas de afiliación, Espero que
rio, el pentecostalismo sigue siendo lo que Cheryl Johns llama un este libro haya conseguido demostrar la complejidad de lo que llama-
«poderoso movimiento de los pobres» y, como tal, «tiene un poten- mos «pentecostalismo», tanto en cuanto a sus orígenes como en cuan-
cial latente para la transformación de la sociedad». Ella cita a la pen- to a sus distintivos teológicos, Como declara el SUbtítulo del libro de
tecostal argentina Susana Vaccaro de Petrella, que afirma que la ex- Cox, Eire from Heaven, la religión misma ha tomado una «nueva for-
periencia pentecostal del Espíritu Santo provoca varias clases de obra ma» gracias a la «aparición de la espiritualidad pentecostal», Por tan-
social como «verdadera respuesta a los problemas de nuestros días» to, cualquiera que sea nuestra opinión o experiencia personal con res-
y al «fuerte deseo tanto de renovación espiritual como de liberación pecto al pentecostalismo, se trata de un movimiento de tal magnitud
que todo ser humano necesita para vivir en un clima de libertad, jus- que el cristianismo mismo jamás volverá a ser el mismo. El crecimien-
ticia y pazv'". No debemos dar por perdidos a los pentecostales y ca- to desenfrenado de las iglesias pentecostales y carismáticas, y la «pen-
rismáticos como si no tuvieran remedio, como si fueran de otro mun- tecostalízación» de las iglesias más antiguas, tanto protestantes como
do y sólo se preocuparan por la moralidad privada y carecieran de católica, especialmente en el mundo mayoritario, es un hecho de nues-
relevancia en lo que se refiere a las necesidades de la sociedad. Pue- tro tiempo. El teólogo presbiteriano ghanés Cephas Omenyo afirma
de que acaben de dar sus primeros pasos, pero ya está produciéndose que la experiencia pentecostal se está convirtiendo en el cristianismo
en ellos una transformación enorme. «tradicional» de África, «no sólo en cifras sino, lo que es más impor-
tante, en espiritualidad, teología y práctica»l. Esta observación se apli-
ca también a otros continentes, tal como hemos visto. Con todos sus
"

39 M. West, Bishops and Prophets in a Black City, Ciudad del Cabo, David Philip,
I C. N. Omenyo , Pentecost Outside Peniecostalism: A Study of the Development of
1975, pp. 196-199; Anderson , Zion and Pentecost, cit., p. 170.
40 C. B. Johns, Pentecostal Forrnation, cit.. pp. 78 Y 96.
Charismatic Renewal in the Mainline Churches in Ghana, Zoetermeer, Boekencentrum,
2002, p. 306.

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defectos e imperfecciones, este complejo movimiento continúa ex- dulos traicionan la actitud. del siervo su!ri~nte en la cruz y ?e aque_
pandiéndose y creciendo a 10 largo y ancho del globo. El reciente y llos discípulos suyos del SIglo 1 que le sirvieron con tanta eftcacia.
creativo estudio de Simon Coleman acerca de una iglesia carismática
de Suecia ha demostrado la globalización del cristianismo carismático EL ATRACTIVO GENERALIZADO DEL PENTECOSTALISMO
con respecto a tres dimensiones: l . El uso de los medios de comuni- CONTEMPORÁNEO
cación masiva para divulgar sus ideas; 2. Una organización social que
fomenta la internacionalización a través de viajes por el mundo y re- ¿Hasta qué punto l~s. formas contemporáne~s de pentecostalisrno se
des, conferencias y megaiglesias que funcionan como empresas in- han convertido en «religión popular», en el sentido de que presentan so.
ternacionales; y 3. Una «orientación global», o «metacultura» caris- lamente lo que las masas quieren y omiten otros aspectos fundamenta_
mática global. que trasciende la localidad y lealtad denominacional y les importantes del Evangelio de Cristo? Las razones de que haya rnu],
despliega asombrosas similitudes en diferentes partes del mundoj. Al- titud de personas que acuden a las nuevas iglesias se deben a algo más
gunos de sus más flamantes representantes han caído en las formas que al poder del Espíritu, aunque no debemos pasar por alto este irn,
más flagrantes de corrupción y explotación, pero esta faceta sórdida portante factor pneumatológico. El ofrecimiento de una vida mejor y
del pentecostalismo no es un fenómeno nuevo en la historia del cris- más próspera muchas veces llena de esperanza a personas que pugnan
tianismo. Algunos de sus embajadores trotan por todo el mundo con en medio de la pobreza y la desesperación. Cox insinúa que la rápida ex-
su mensaje de éxito y prosperidad para todos los que crean y apoyen pansión del pentecostalismo se debe a su espiritualidad embriagadora y
sus organizaciones. A pesar de todas estas muchas faltas, los pente- espontánea, «como la difusión de una epidemia saludable». El hincapié
costales se encuentran entre los emprendedores con más iniciativa de pentecostal en la experiencia tocaba a la gente en sus emociones y Se
todo el panorama religioso, adaptándose creativamente a contextos divulgaba a través del testimonio y el contacto personal. Faupel habla
cambiantes y haciendo uso de los medios electrónicos y las técnicas de la «llama del avivamiento» que se difundía en los comienzos del
de publicidad más recientes. Parece que no hay freno para el incesan- pentecostalismo y que dejaba un «caos creativo tras su estela», como
te avance del pentecostalismo , en contraste con la mayoría del resto de vemos en el despliegue de obreros y misioneros que salieron de la ca-
expresiones del cristianismo, que parecen hallarse en un estado de de- He Azusa, en el papel de esta misión como meca a la que peregrinaban
clive permanente. Cualquiera que desee tomar la temperatura religio- los líderes cristianos (especialmente los que provenían de las iglesias
sa de nuestro mundo debe echar una buena ojeada al pentecostalismo. del movimiento de santidad), en la creación de nuevos centros pente-
El futuro del cristianismo mismo y del encuentro del cristianismo con costales y en la expansión a las naciones del mundo". Pero hay algo más
otras confesiones depende profundamente de él. que espiritualidad en el pentecostalismo; hay intereses reales, terrenales,
No es posible acusar a los pentecostales y carismáticos de ofrecer' que trata de atender; estos intereses han causado, al menos, tanto im-
únicamente un cristianismo de «castillos en el aire para cuando mu- pacto como los intereses místicos.
ramos», pero hay peligros reales en esas promesas de sanidad, salud El pentecostalismo ha continuado expandiéndose por el mundo ma-
y prosperidad instantánea para todos que se basan en la «escatología yoritario de muchas formas diferentes. Un aspecto importante que sólo
realizada». La preocupación por estas cuestiones terrenales avanza se toca en este estudio es el de las iglesias proféticas (especialmente en
muchas veces a expensas de algunas virtudes cristianas como la hu- África), donde la profecía oracular cumple muchas funciones pastora-
mildad, la paciencia y la paz. La libertad del Espíritu que reconocen les y terapéuticas. Los pentecostales y carismáticos creen en la función
todos los pentecostales con frecuencia los vuelve vulnerables ante primordial de la profecía oral, que es «para edificación, exhortación y
unos líderes autoritarios que es posible que exploten a sus miembros consolación» (1Corintios 14,3). Los profetas y profetisas africanos han
y causen más divisiones. El estilo de vida lujoso, derrochador ya ve- llevado esta triple función un paso más allá y se han convertido en con-
ces laxo de moral de algunos de los más notorios representantes del sejeros, pastores y sanadores todo al mismo tiempo, tratando las nece-
pentecostaJismo y las artimañas de esos charlatanes religiosos que se sidades humanas de formas coherentes con las cosmovisiones de aque-
presentan a sí mismos como especialistas con poderes milagrosos y llos que los consultan".
que hacen presa de las debilidades de unos seguidores incautos y eré-

3 H. Cox , Fire, cit., pp. 61. 71; D. W. Faupe1, Everlasting Gospel, cit., pp. 210-222.
2 S. Coleman, 01'. cit., pp. 66-69. 4 A. Anderson, Zion and Pentecost, cit., pp, 177-179.

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Tomado en su conjunto, el pentecostalismo fue el sector del cristia- nes se habría considerado «carismáticos» hace unos cuarenta años.
nismo que creció más rápidamente en el siglo xx y uno de los aconte- Hay muchas razones que explican esto, entre las cuales podrían estar
cimientos más notables de la historia de la iglesia. La expansión del los escándalos que han causado ciertos telepredicadores en EEUU, la
pentecostalismo en los últimos años es tan importante que Cox ha re- apropiación del término «carismático» por parte, de los predicadores de
vertido su tan conocida postura de la secularización inevitable y habla la fe y la prosperidad, y la aparición de algunas iglesias independientes
del pentecostalismo como de una manifestación de la «reaparición im- «carismáticas» que parece que no tienen que dar cuentas a nadie. Pero
prevista en nuestro tiempo de la primera espiritualidad»>. Aunque las no hay escapatoria al hecho de que el pentecostalismo y sus diversos
denominaciones pentecostales norteamericanas han sido agresivas en fenómenos ahora están verdaderamente bien asentados dentro de las
sus esfuerzos misioneros y evangelísticos, al menos dos tercios del iglesias tradicionales del mundo católico y protestante. Como resultado,
pentecostalismo se concentran ahora en el mundo mayoritario y sólo el potencial para la cooperación ecuménica es enorme. Hace más de
una cuarta parte de sus miembros es blanca. En los últimos años, el ere- treinta años John V. Taylor dijo:
cimiento más grande dentro del penteeostalismo se ha producido en el
Afriea subsahariana, en Indonesia, en Filipinas, en Corea del Sur y, de Creo que ha llegado el momento en que debemos tener en cuenta
manera especial, en Latinoamérica. El movimiento de iglesias en las todo lo que es positivo dentro del movimiento pentecostal si esperamos
casas, que ha crecido tan rápidamente en China, es, sobre todo, un mo- avanzar más por cualquiera de los diversos caminos de la renovación
vimiento autóctono de tipo pentecostal, aunque puede que no se lo re- litúrgica, el diálogo interconfesional, la indigenización del cristianis-
conozca como «pentecostal» en el sentido occidental de la palabra. Los mo, las experiencias experimentales en cuanto a comunidades y grupos
enormes edificios que se han construido, con capacidad para miles de cristianos, el ministerio de sanidad, especialmente hacia los psicóticos
adoradores, son un reflejo de la clase media pentecostal que está emer- y adictos, y las nuevas formas de enfocar a la unidad de la iglesia",
giendo en muchas partes del mundo. Los pentecostales del mundo ma-
yoritario, sin embargo, normalmente son, sobre todo, un movimiento A estas cosas se podría añadir la relación entre la teología y la es-
propio de las clases bajas, que atrae de forma especial a los desfavore- piritualidad, y el ministerio de oración, todas ellas cosas que han cons-
cidos y menospreciados. Muchas, por no decir la mayor parte, de las tituido una parte primordial de la investigación de Steven Land". To-
iglesias cristianas que crecen rápidamente en el mundo mayoritario son dos estos elementos son importantes a la hora de meditar en el valor
pentecostales, pero funcionan independientemente del pentecostalismo que tiene la experiencia carismática para la iglesia en la actualidad,
occidental. Las denomianciones pentecostales clásicas fundadas por pero destacaré los tres primeros que daba Taylor. La renovación en la
misioneros estadounidenses, especialmente las AAD, la CGC y la ICFG, vida de la iglesia siempre ha aportado un nuevo vigor y una nueva vi-
están creciendo a gran velocidad en muchos lugares del mundo, pero la talidad que han atraído especialmente a los jóvenes, y esto normal-
~asta mayoría de su membresía internacional está en Latinoamérica, mente se expresa, en primer lugar, en forma de cambios litúrgicos. El
África y Asia. movimiento carismático ha sido la punta de lanza de un regreso a la
«Escritura en el canto» y a una nueva salmodia que ha refrescado a mu-
chas de las iglesias más antiguas. Es posible que el diálogo interconfe-
EL IMPACTO DEL PENTECOSTALTSMO EN EL CRISTIANISMO MUNDIAL sional sea un aspecto más controvertido de considerar, pero, puesto que
los movimientos pentecostales y carismáticos están tan a menudo a la
Podría ser prematuro sugerir, como han hecho algunos, que el mo- vanguardia del encuentro con otras confesiones (sin duda, a veces de
vimiento carismático ha seguido su curso y que ahora estamos en una forma antagonista), tiene lecciones para toda la comunidad cristiana
fase «postcarismática» de la historia de la iglesia. Aún hay muchos que se aprenden en el contacto de la vida real más que en las torres de
movimientos de renovación muy vivos y florecientes dentro de las marfil académicas de nuestros pluralistas filósofos y teólogos occi-
iglesias de todo el mundo, incluso en las iglesias pentecostales clási- dentales. Aunque a menudo no son conscientes de este hecho, las igle-
cas mismas. Es cierto que, al menos en el mundo protestante occiden- sias pentecostales han absorbido tanto del contexto religioso y cultu-
tal, la etiqueta de «carismático» ya no encaja bien con aquellos a quie-
6 J. V. Taylor, op. cit., p. 201.
7 S. J. Land , op. cit .. pp. 165,220.
5 H. Cox , Fire , cit., p. 83.

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ral en su fe cristiana que tienen mucho en común con otras confesio- miento de iglesias». Hay muchos peligros en esta eclesiología laten-
nes. En su obra pionera, Amos Yong escribe acerca de «discernir al Es- te, no menos que en el individualismo galopante que crea una proli-
píritu» en otras confesiones y hace una clara contribución pentecostal feración de nuevas «iglesias», algunas de las cuales no tienen más
hacia una teología pneumatológica de las religiones". que un puñado de personas. Pero ésta es una de las características de
Esto nos lleva al aspecto de la indigenización que tiene lugar en el esta era posmoderna y en el pentecostalismo es al Espíritu a quien se
pentecostalismo, que he preferido llamar «contextualización». Queda atribuye el mérito de casi todo lo que sucede en cada una de las acti-
mucho por hacer en este campo, pero he tratado de demostrar que el vidades de la iglesia, ya sea grande o pequeña, rara o sutil. Por 10 que
pentecostalismo, con su flexibilidad (o «lioertad») en el Espíritu, cuen- respecta a la eclesiología, en el pentecostalismo hay una tensi6n en-
ta con una capacidad innata para encontrarse como en casa en casi cual- tre carisma e institución y entre las diferentes formas de bautismo.
quier contexto. Ha continuado expandiéndose en el mundo mayoritario Las líneas que delimitan quiénes pertenecen a la iglesia y quiénes no,
de muchas formas diferentes. Los pentecostales y carismáticos han adop- no están tan claras como podrían pensar algunos pentecostales, ya
tado características bastante diferentes en las distintas partes del mundo, que están bajo la influencia de diferentes contextos de diferentes ma-
neras. El papel de las mujeres en la iglesia también ha cambiado sig-
sobre todo porque su creencia en la «libertad en el Espíritu» a menudo
nificativamente. Todos estos temas deben examinarse en detalle si la
les permite más flexibilidad en el desarrollo de expresiones propias que
teología pentecostal ha de adquirir un papel verdaderamente relevan"
sean culturalmente relevantes. Cox afirma que nuestra era sufre de un
te para su contexto".
«déficit de éxtasis» y que la restauración de los dones espirituales per- El hincapié en recibir una experiencia consciente del Espíritu es
mite a la gente adquirir conciencia de «perspectivas más profundas y una característica fundamental de los diferentes tipos de iglesias pen-
sentimientos exultantesc". Sin embargo, si estas experiencias son sola- tecostales y carismáticas. La cosmovisión espiritual de la mayoría de
mente para gratificación «espiritual» personal, entonces el hincapié en las sociedades es la de un universo personal e interrelacionado en el
los dones espirituales va en detrimento de una vida cristiana sana y ho- cual la persona, como fuerza viva, depende de todas las demás fuer-
lista, y se convierte en una mera «expresión apasionada de interés por zas para su supervivencia. El acento en recibir el poder del Espíritu,
uno mismo». Pero si los dones espirituales mejoran el sentido indivi- un poder más grande que cualquier otro poder que pueda amenazar
dual de pertenencia a una comunidad: cubren las necesidades que uno esa supervivencia, es realmente una buena noticia. A principios del si- .
siente y traen una mayor conciencia tanto de Dios como del prójimo, y glo xx, los pentecostales descubrieron que la doctrina bíblica del Es-
un mayor amor hacia ambos, entonces el hincapié en el Espíritu debe píritu no era tan remota y aislada como a menudo había proyectado
ser, sin duda, bienvenido'". Los pentecostales y carismáticos se están la teología académica y que la necesidad humana de participación re-
dando cuenta de que la obra del Espíritu va más allá de la piedad per- ligiosa quedaba cubierta gracias a ella. El Espíritu Santo que domina
sonal y la experiencia privada de los dones carismáticos; el Espíritu es en el pentecostalismo dio al cristianismo una nueva vitalidad y rele-
el espíritu creador que renueva la Tierra y se interesa por todas las ne- vancia. El concepto bíblico del Espíritu hace posible tener una expe-
cesidades de este mundo. Este enfoque holista del papel del Espíritu riencia de intervención divina en términos reales, que abarca toda la
eliminará la sospecha de que el pentecostalismo sólo es una relígión vida cristiana y no sólo la parte «espiritual» de la misma. Esto suele
privatizada e individualizada que no se preocupa por el resto de nece- provocar que se dé rienda suelta a la emoción, una catarsis que tiene
sidades de la sociedad y de toda la creación. un efecto purificante. Las críticas a las iglesias pentecostales y ca-
La razón de la existencia misma de los pentecostales es su con- rismáticas con su hincapié en el Espíritu y su emocionalismo suelen
vicción del poder del Espíritu que opera en la iglesia: No hemos dis- pasar por alto este aspecto. Estas iglesias (como muchas de las más
cutido muy éxtensamente la eclesiología pentecostal implícita en su antiguas) están limitadas por naturaleza como consecuencia de su
visión de la iglesia, que es principalmente una reunión de creyentes humanidad y, por esta razón, a veces necesitan corrección. Pero han
locales más que una institución, ni tampoco hemos considerado en demostrado que es, al menos, tan importante practicar la teología
detalle los diversos aspectos del acento que se pone en el «establecí- como teorizar sobre ella. En muchas partes del mundo hay una miría-
da de necesidades que rara vez satisface el cristianismo anticuado, ra-

R A. Yong , Discerning the Spirit/s; cit.: A. Yong , Beyond the Impasse: Toward a pneu-
matological theology of religions, Grand Rapids, MI, Baker Acadernic, 2003. 11 W. J. Hollenweger, Pentecostatism, cit., pp. 248-250, 253-256, 258 Y261-268.
9 H. Cox, Fire, cit., pp. 83 Y86. .
10 .J. V. Taylor, op. cit .. pp. 220-221.
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330
cional y más bien impotente y filosófico. El cristianismo innovador de servicio del Evangelio completo y de la edificación de iglesias. Este
muchas iglesias pentecostales y carismáticas se toma en serio la cos- libro ha tratado de señalar el potencial que hay dentro del pentecos-
movisión popular con sus necesidades existenciales. Es específica- talismo para la cooperación ecuménica y la transformación social.
mente en las diversas manifestaciones del Espíritu en estas iglesias Esto no se puede conseguir con una reversión al fundamentalismo,
donde podemos ver su valiosa contribución a una teología práctica y porque el resultado sería que había tantas versiones de la «verdad»
contextual. como los miles de movimientos que hay. Pero la experiencia del Es-
píritu es el factor unificador que trasciende a las insignificantes dife-
rencias y une a las personas.
EL FUTURO DEL CRISTIANISMO CARISMÁTICO
El enorme crecimiento del cristianismo carismático en Asia, Áfri-
ca y Latinoamérica también significa que puede continuar expan-
Si el pentecostalismo sigue siendo en nuestro tiempo el movi- diéndose y ejerciendo influencia sobre todos los tipos de cristianismo
miento religioso que crece a mayor velocidad, entonces, ¿cuál será su de estas regiones y de otros lugares. Cada vez más, estas influencias
futuro a largo plazo? Aquí es arriesgado hacer predicciones. Los cien- e interconexiones se han vuelto tanto globales como heterogéneas.
tíficos sociales, por lo general, defienden que, cuando cualquier mo- Con mucha creatividad, los pentecostales y carismáticos han fomen-
vimiento religioso deja la fase «carismática» y se institucionaliza, su tado un cristianismo globalizado que no ha perdido contacto con su
tasa de crecimiento se ralentiza marcadamente. Algunos han sugeri- contexto local. Tal como comenta Colernan, las ideas que se originan
do que el pentecostalismo ya ha entrado en esta fase y que, al final, en EEUU han estado «sujetas a fórmulas constantes de apropiación
caerá derrotado por la modernidad y la secularización. Pero otros es- cultural, para luego presentarlas de otra manera y volverlas a difun-
tudios recientes, que me convencen más, demuestran todo lo contra- dir en el ámbito transnacional» 13. Esto se ha convertido en Un fenó-
rio. Si hemos de creer a los estadísticos, entonces no hay signos de meno que preserva tanto las características globales como las locales,
que el crecimiento del pentecostalismo esté disminuyendo. Se ha con- haciendo posible hablar al mismo tiempo de «pentecostalismo» y de
vertido en una de las expresiones más importantes del cristianismo en «pentecostalismos». Así, al menos para el futuro inmediato, la conti-
el siglo pasado y es lo suficientemente flexible y elástico como para nuada vitalidad del cristianismo carismático probablemente esté ase-
adaptarse y acomodarse tanto a la modernidad como a su escurridizo gurada. Toda la iglesia cristiana bien puede dar las gracias de que esto
sucesor, la posmodernidad. Hay signos de que en los países donde ha sea así, porque es posible que esto signifique que el cristianismo mis-
tenido lugar su crecimiento más espectacular, cuando el pentecosta- mo se salve del declive y olvido final en el próximo siglo.
lismo se ha convertido en la opción preferida más de la clase media
que de los pobres, entonces sus cifras de nuevos miembros han de-
clinado. Corea del Sur es un ejemplo de esto. Pero la eclesiología del
pentecostalismo es tal que incluso dentro de la misma denominación
(como ha demostrado el ejemplo del reciente avivamiento en las
AAD de Pensacola en EEUU) , existe la posibilidad de que se pro- .
duzca una renovación y una transformación bajo la operación del Es-
píritu.
El antiguo mensaje del Evangelio completo de Jesucristo, el Rey
que «salva, sana, bautiza y viene pronto», sigue sonando con fuerza y
claridad en las iglesias pentecostales de todo el mundo. Estos acentos
teológicos los vuelven «conservadores», al igual que su literalismo
bíblico. Hemos visto que, a pesar de sus similitudes, el pentecostalis-
mo no equivale a una forma de fundamentalismo, porque el pente-
costalismo hace hincapié en lo intuitivo y emocional a través de las
revelaciones y la libertad del Espíritu en vez de seguir un esclavizan-
te literalismo bíblico!". A veces esta libertad provoca divisiones y cis- 12 S, Coleman, op. cu., pp. 24-26; H. Cox , Fire, cit., p. 15.
mas, pero hasta esto tiene el efecto de movilizar a nuevas personas al 13 S. Colernan, op, cit., p. 36.

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