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FORO 1

WALID ENGELS SOLORZANO MACHADO


MEDICO CIRUJANO
FORO DE APLICACIÓN DE LA IA EN EL CUIDADO DE LA SALUD
INTRODUCCION
La inteligencia artificial (IA) tiene el potencial de transformar la forma en que se brinda
el servicio. Puede respaldar mejoras en los resultados de la misma, aumentar la
productividad y la eficiencia de la prestación y permitir que los sistemas de salud
brinden más y mejor atención a más personas. La IA puede ayudar a mejorar la
experiencia de los profesionales sanitarios, y dedicar más tiempo a la atención directa
del paciente, reduciendo el agotamiento. Por último, puede respaldar la prestación más
rápida, principalmente al acelerar el tiempo de diagnóstico, y ayudar a los sistemas de
salud a mejorar su administración de manera más proactiva, asignando recursos donde
puede tener el mayor impacto.
Desde agilizar el lento y costoso desarrollo de nuevos fármacos a analizar el genoma de
un paciente, las aplicaciones que ya están en marcha son numerosas. Pero la IA se
perfila, sobre todo, como una herramienta capaz de aprender y analizar con rapidez
enormes cantidades de información de los historiales de pacientes, de las pruebas de
imagen y de los avances científicos para ayudar a los profesionales a ofrecer mejores
diagnósticos y tratamientos. La IA es un asociado que les liberará también de algunas
tareas monótonas, como el análisis de las imágenes médicas. Es decir, algoritmos para
analizar e interpretar imágenes, y trabajar en el aprendizaje de máquinas (machine
learning) para extraer de las mismas información clínica útil. Así, la IA se aplica para
entender mejor el desarrollo del cerebro, optimizar el diagnóstico de pacientes, por
ejemplo, con demencia, que hayan sufrido un ictus o daños cerebrales, o bien realizar
diagnósticos en personas con enfermedades cardiovasculares. Hay muchas cosas que se
pueden hacer de forma automática para ayudar a los profesionales. Estos sistemas
prometen ayudar a estos a evaluar a los pacientes de manera más eficiente y menos
costosa.
Las TICs ofrecen la infraestructura escalable y multiplicadora para promover una
atención y cuidados sanitarios continuados e intensivos como nunca antes en la historia
de la humanidad. Las tecnologías digitales pueden mejorar el acceso a la sanidad y
favorecer el bienestar de personas y poblaciones enteras. La penetración de la
tecnología de comunicación móvil y la rápida adopción de los teléfonos móviles
inteligentes (“smartphones”) por grandes capas de la población mundial ha motivado un
interés muy grande por la salud digital1 y el uso de computación avanzada para mejorar
la salud.
Por ejemplo, en psiquiatría se han desarrollado numerosas aplicaciones (apps, chatbots)
para diagnosticar distintas enfermedades mentales. Aunque la evidencia empírica y
clínica de la efectividad de estas “apps” y/o chatbots en la identificación, detección y
prevención de ciertas condiciones en salud mental no es muy robusta y los interrogantes
epistémicos y éticos son muchos; las técnicas estadísticas aplicadas a la enorme
cantidad de datos que obtienen (Big Data), permiten realizar análisis cada vez más
significativos, interpretar mejor los datos y comunicar de manera más eficiente los
resultados. En este artículo, pretendo ofrecer una visión panorámica de la IA aplicada a
la medicina. Las dos preguntas que me hago son:
1. ¿cómo hemos llegado hasta una medicina digital a partir de la revolución digital y el
uso de métodos estadísticos? 2. ¿cuál será el futuro de la salud y los cuidados? Para ello,
valoraré las implicaciones éticas de la IA médica, y sus consecuencias socio-políticas a
través de una perspectiva humanista. En la siguiente sección ofreceré una visión
panorámica de la historia de la medicina digital centrándome sobre todo en distintas
tecnologías digitales aplicadas a la salud y en especial la IA médica. También
comentaré el fuerte impacto de la IA en las ciencias biomédicas y los distintos retos
éticos que presenta el uso y abuso de las tecnologías digitales. Finalmente, especularé
de manera informada hacia dónde nos llevará la medicina digital y cuál será el futuro de
la salud.
Medicina digital
La medicina digital promete con la ayuda de las tecnologías digitales, incluida la IA,
mejorar la salud abordando problemas globales (e.g. enfermedades, diabetes, epidemias,
envejecimiento, enfermedad mental, adicciones). De acuerdo con algunas estimaciones
más de la mitad de la población mundial está conectada a Internet y existen numerosos
esfuerzos por acercar la red de redes cada vez a más gente (ITU 2019).
Con más de 5 mil millones de usuarios de telefonía móvil, la siguiente revolución en la
intersección entre TICs y ciencias biomédicas será la telemedicina o como dice Eric
Topol (2014), invirtiendo el clásico adagio médico: “el médico le verá ahora”, la
medicina digital constante y continua a través de nuestros dispositivos y terminales
digitales. Nuestros teléfonos móviles inteligentes (“smartphones”) actuales son más
sofisticados y tienen mayor capacidad computacional que los primeros ordenadores que
ocupaban habitaciones enteras. Y la ventaja es que nuestros “smartphones” caben en
nuestro bolsillo del pantalón y lo podemos llevar a todas partes. Esto supone una
herramienta de diagnóstico sin precedentes en la historia de la medicina que implica que
se pueden cubrir las necesidades de cobertura y asistencia sanitaria de pacientes que
hasta ahora el sistema de salud dejaba de lado. El término paraguas de tecnologías
digitales es tan amplio, no solo incluye al “smartphone”, que logra tal diversidad,
versatilidad y flexibilidad que podemos imaginar el Internet de las Cosas (IoT),
computación ubicua, ciudades inteligentes (smart cities), visión computacional,
nanochips, genómica, IA, Big Data. convergiendo entre sí con una fuerte
interoperabilidad para capturar, tratar y procesar múltiples datos vía algoritmos que
informen de la salud de personas y poblaciones enteras. Y todo ello con gran precisión e
individualización con el objetivo final de conseguir la digitalización de los seres
humanos (Topol 2013, Steinhubl y Topol 2018), la democratización de la salud (Topol
2014) y la posibilidad de que el “aprendizaje profundo” y otras técnicas de la IA
clasifiquen, prescriban y predigan (Topol 2019).
Como la principal motivación de la medicina digital es el uso de la tecnología para
mejorar la efectividad de las intervenciones, es muy probable que cualquier desarrollo e
innovación tecnológica con potencial aplicación en el ámbito clínico sea adaptada. De
los primeros pasos de la intervención remota con el teléfono hasta llegar al teléfono
móvil, las apps, las redes sociales (online), asistentes virtuales, IA, Big Data etc. la
constante adaptación de la tecnología con propósito clínico hace de la medicina digital
un campo de investigación abierto a nuevas oportunidades. La medicina digital tiene el
potencial de convertirse en una plataforma ubicua de salud pública global y de
precisión.
CONCLUSION:
Creemos que la IA tiene un papel importante que desempeñar en la práctica médica del
futuro. En forma de aprendizaje automático, es la capacidad principal detrás del
desarrollo de la medicina de precisión, ampliamente aceptada como un avance necesario
en mejorar la salud. Aunque los primeros esfuerzos para proporcionar recomendaciones
de diagnóstico y tratamiento han demostrado ser un desafío, esperamos, que la IA
finalmente acompañe la educación médica. También parece cada vez más claro que los
sistemas de IA no reemplazarán a los profesionales médicos a gran escala, sino que
aumentarán sus esfuerzos para cuidar a los pacientes.

BIBLIOGRAFIA
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