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PASIÓN, MUERTE Y RESURRECCIÓN DE JESÚS

CELEBRACIÓN DE SEMANA SANTA

COMUNIDAD MISIONERA SHALOM


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VIERNES SANTO
PASIÓN Y MUERTE DEL SEÑOR

ACTIVIDADES:

Laudes Se recomienda que en este día, se celebre en las iglesias, el oficio de lectura y
Laudes, con participación de los fieles.

Pedir que en el pueblo no se pongan los tocadiscos con alto volumen. Recordar que es un
día santo y muy solemne.

PREPARAR LOS CANTOS: Para el Viacrucis, Para la celebración de la pasión y muerte de


Jesús, para la adoración de la cruz, para la comunión y para la despedida.

Se inicia con el Viacrucis.

Viacrucis por el pueblo. de preferencia empezarlo a las 11:00 del día, para que al
terminarlo, iniciemos las Liturgia inmediatamente después, de otra manera la gente se va a
preparar “el molito, los romeritos” y ya no regresa, o regresa muy poca y lo más
importante, vital, central es la liturgia . No tiene sentido tener más gente en el Viacrucis
que en la Celebración Litúrgica. Donde realmente no se pueda, la Liturgia se hace en la
tarde, a la tres.

Explicar el significado del camino y la Cruz como motivación para salir de la situación que los
aflige.
Ya está todo preparado desde el día anterior, hoy se vive.

El Viernes Santo es el día desolado, día de gran duelo No hay misa. Los altares permanecen
desnudos. La cruz preside, elocuente, los templos. El color de los ornamentos es rojo, el
color de los mártires. Hoy no hay flores, ni música, ni campanas. El sagrario está abierto y
vacío.

Liturgia del Viernes Santo:

Hoy no se celebra misa. El altar esta desnudo y el sagrario vacío.


La Celebración consta de tres partes: 1. Liturgia de la Palabra. (Lecturas. solemnes, tres
personas que previamente se seleccionaron y repasaron las lecturas). 2. Adoración de la
Cruz. La cruz debe estar preparada, (las lecturas y los cantos). 3. La Sagrada Comunión

Reflexión sobre las Siete Palabras. Vienen comentadas en este Manual (página 49).
Alguien del equipo debe ser el responsable de hacer la reflexión. Donde se pueda hacerla
después del Viacrucis.

Avisar del retiro de mañana con los jóvenes.

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SUGERENCIAS PARA LOS MENSAJES LITURGICOS Viernes Santo

“No hay mayor amor”


“Murió por nosotros”
“Murió por mí”
“Nos amó hasta el fin”
“Perdón Señor por tantas cosas”
“Tu muerte no es el final”
“Necesitamos amar más”

Visitas al Santísimo por familia. (De 7 p m a 12 p.m.). (Anexo No 3)


 Lista de familias que visitarán al Santísimo una hora.
 Un misionero debe estar en cada hora, animando la oración, cantos, (preparado)

Recordar a los jóvenes el retiro de mañana, pedirles que sean puntuales, y que cada quien
lleve su itacate, para la comida y el almuerzo.

Evaluación del día, siguiendo la hoja de actividades diarias y planeación del siguiente día.
En esta evaluación sólo debe estar el equipo misionero. Con esta actividad y oración cierran
el día.

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LAUDES DEL VIERNES SANTO

V. Señor abre mis labios.


R. Y mi boca proclamará tu alabanza.

Salmo Invitatorio

Ant. A Cristo, Hijo de Dios, que nos redimió con su sangre preciosa, venid, adorémosle.
Venid, aclamemos al Señor,
demos vítores a la Roca que nos salva;
entremos en su presencia dándole gracias
aclamándolo con cantos

Porque el Señor es un dios grande,


soberano de todos los dioses:
tiene en su mano las simas de la tierra,
son suyas las cumbres de los montes.
Suyo es el mar porque él lo hizo,
la tierra firme que modelaron sus manos.

Venid, postremos por tierra,


bendiciendo al Señor, creador nuestro.
porque él es nuestro dios,
y nosotros su pueblo,
el rebaño que él guía.

Ojalá escuchéis hoy su voz:


“No endurezcáis el corazón como en Meribá.
como el día de Masá en el desierto:
cuando vuestros padres me pusieron a prueba,
y dudaron de mí, aunque habían visto mis obras.

Durante cuarenta años


aquella generación me repugnó, y dije:
“Es un pueblo de corazón extraviado,
que no reconoce mi camino;
por eso he jurado en mi cólera
que no entrarán en mi descanso”.

Gloria al padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.


Como era en un principio, ahora y siempre,
por los siglos de los siglos. Amén.

Ant. A Cristo, Hijo de Dios, que nos redimió con su sangre preciosa, venid, adorémosle.
HIMNO

Brazos rígidos y yertos,


por dos garfios traspasados,
que aquí estáis, por mis pecados,
para recibirme abiertos,
para esperarme clavados.
3
Cuerpo llagado de amores,
yo te adoro y yo te sigo;
yo, Señor de los señores;
quiero partir tus dolores
subiendo a la cruz contigo.

Quiero en la vida seguirte


y por sus caminos irte
alabando y bendiciendo,
y bendecirte sufriendo
y muriendo bendecirte.

Que no ame la poquedad


de las cosas que van y vienen;
que adore la austeridad
de estos sentires que tienen
sabores de eternidad;

que sienta una dulce herida


de ansia de amor desmedida;
que ame tu ciencia y tu luz;
que vaya, en fin, por la vida
como tú estás en la cruz:

de sangre los pies cubiertos,


llagadas de amor las manos,
los ojos al mundo muertos
y los dos brazos abiertos
para todos mis hermanos. Amén.

SALMODIA

Ant. 1. Dios no perdonó a su propio Hijo, sino que lo entregó a la muerte por todos nosotros.

Salmo 50
Misericordia, Dios mío, por tu bondad;
por tu inmensa compasión borra mi culpa;
lava del todo mi delito,
limpia mi pecado.

Pues yo reconozco mi culpa,


tengo siempre presente mi pecado;
contra ti, contra ti solo pequé,
cometí la maldad que aborreces.

En la sentencia tendrás razón,


en el juicio brillará tu rectitud.
Mira, que en la culpa nací,
pecador me concibió mi madre.

4
Te gusta un corazón sincero,
y en mi interior me inculcas sabiduría.
Rocíame con el hisopo: quedaré limpio;
lávame: quedaré más blanco que la nieve.

Hazme oír el gozo y la alegría,


que se alegren los huesos quebrantados.
Aparta de mi pecado tu vista,
borra en mí toda culpa.

¡Oh Dios!, crea en mí un corazón puro,


renuévame por dentro con espíritu firme;
no me arrojes lejos de tu rostro,
no me quites tu santo espíritu.

Devuélveme la alegría de tu salvación,


afiánzame con espíritu generoso;
enseñaré a los malvados tus caminos,
los pecadores volverán a ti.

Líbrame de la sangre, ¡oh Dios,


Dios, Salvador mío!,
y cantará mi lengua tu justicia.
Señor, me abrirás los labios,
y mi boca proclamará tu alabanza.

Los sacrificios no te satisfacen;


si te ofreciera un holocausto, no lo querrías.
Mi sacrificio es un espíritu quebrantado:
un corazón quebrantado y humillado
tú no lo desprecias.

Señor, por tu bondad, favorece a Sión,


reconstruye las murallas de Jerusalén:
entonces aceptarás los sacrificios rituales,
ofrendas y holocaustos,
sobre tu altar se inmolarán novillos.

Ant. Dios no perdonó a su propio Hijo, sino que lo entregó a la muerte por todos nosotros.

Ant. 2. Jesucristo nos ama y nos ha lavado de nuestros pecados con su sangre.

Cántico Ha 3, 2-4, 13a. 15-19

¡Señor, he oído tu fama,


me ha impresionado tu obra!
En medio de los años, realízala;
en medio de los años, manifiéstala;
en el terremoto acuérdate de la misericordia.

5
El Señor viene de Temán;
el Santo, del monte Farán:
su resplandor eclipsa el cielo,
la tierra se llena de alabanza;
su brillo es como el día,
su mano destella velando su poder.

Sales a salvar a tu pueblo,


a salvar a tu ungido;
pisas el mar con tus caballos,
revolviendo las aguas del océano.

Lo escuché y temblaron mis entrañas,


al oírlo se estremecieron mis labios;
me entró un escalofrío por los huesos,
vacilaban mis piernas al andar.
Tranquilo esperó el día de la angustia
que sobreviene al pueblo que nos oprime.

Aunque la higuera no echa llamas


y las viñas no tienen fruto,
aunque el olivo olvida su aceituna
y los campos no dan cosechas,
aunque se acaban las ovejas del redil
y no quedan vacas en el establo,
yo exultaré con el Señor,
me gloriaré en Dios mi salvador.

El Señor soberano es mi fuerza,


él me da piernas de gacela
y me hace caminar por las alturas.

Ant. Jesucristo nos ama y nos ha lavado de nuestros pecados con su sangre.

Ant. 3. Tu cruz adoramos, Señor, y tu santa resurrección alabamos y glorificamos; por el


madero ha venido la alegría al mundo entero.

Salmo 147

Glorifica al Señor, Jerusalén;


alaba a tu Dios, Sión:
que ha reforzado los cerrojos de tus puertas
y ha bendecido a tus hijos dentro de ti;
ha puesto paz en tus fronteras,
te sacia con flor de harina.

Él envía su mensaje a la tierra,


y su palabra corre veloz;
manda la nieve como lana,
esparce la escarcha como ceniza;

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hace caer el hielo como migajas;
y con el frío congela las aguas;
envía una orden, y se derriten;
sopla su aliento, y corren.

Anuncia su palabra a Jacob,


sus decretos y mandatos a Israel;
con ninguna nación obró así,
ni les dio a conocer sus mandatos.

Ant. Tu cruz adoramos, Señor, y tu santa resurrección alabamos y glorificamos; por el


madero ha venido la alegría al mundo entero.

LECTURA BREVE Is 52, 13-15

Mirad: mi siervo tendrá éxito, será enaltecido y ensalzado sobremanera. Y, así como
muchos se horrorizaron de él, pues tan desfigurado estaba que ya ni parecía hombre, no
tenía ni aspecto humano, así también muchos pueblos se admirarán de él y, a su vista, los
reyes enmudecerán de asombro porque verán algo jamás narrado y contemplarán algo
inaudito.

En lugar del responsorio breve se dice la siguiente antífona.

Cristo, por nosotros, se sometió incluso a la muerte, y una muerte de cruz.

CÁNTICO EVANGÉLICO

Ant. Fijaron encima de su cabeza un letrero indicando el motivo de su condenación: “Éste es


Jesús, el rey de los judíos.”

Cántico de Zacarías (Benedictus) Lc 1, 68 - 79

Bendito sea el señor, Dios de Israel,


porque ha visitado y redimido a su pueblo.

Suscitándonos una fuerza de salvación


en la casa de David su siervo,
según lo había predicho desde antiguo,
por boca de sus santos profetas.

Es la salvación que nos libra de nuestros enemigos


y de la mano de todos los que nos odian;
ha realizado así la misericordia que tuvo con nuestros padres,
recordando su santa alianza
y el juramento que juró a nuestro padre Abraham.

Para concedernos que, libres de temor,


arrancados de la mano de los enemigos,
le sirvamos con santidad y justicia,
en su presencia, todos nuestros días.

7
Y a ti, niño, te llamarán profeta del altísimo,
porque irás delante del Señor
a preparar sus caminos,
anunciando a su pueblo la salvación,
el perdón de sus pecados.

Por la entrañable misericordia de nuestro Dios,


nos visitará el sol que nace de lo alto,
para iluminar a los que viven en tiniebla
y en sombra de muerte,
para guiar nuestros pasos
por el camino de la paz.

Ant. Fijaron encima de su cabeza un letrero indicando el motivo de su condenación: “Este es


Jesús, el rey de los judíos.”

PRECES

Adoremos a nuestro Redentor, que por nosotros y por todos los hombres quiso morir y
ser sepultado para resucitar de entre los muertos, y supliquémosle, diciendo:

Señor, ten piedad de nosotros.

Señor y maestro nuestro, que por nosotros te sometiste incluso a la muerte,


enséñanos a someternos siempre a la voluntad del Padre.

Tú que siendo nuestra vida quisiste morir en la cruz para destruir la muerte y todo su
poder,
haz que contigo sepamos morir también al pecado y resucitemos contigo a la vida
nueva.

Rey nuestro, que como gusano fuiste el desprecio del pueblo y la vergüenza de la
gente,
haz que tu Iglesia no se acobarde ante la humillación, sino que como tú, proclame en
toda circunstancia el honor del Padre.

Salvador de todos los hombres, que diste tu vida por los hermanos,
enséñanos a amarnos mutuamente con un amor semejante al tuyo.

Tú que al ser elevado en la cruz atrajiste hacia ti a todos los hombres,


reúne en tu reino a todos los hijos de Dios dispersos por el mundo.

Se pueden añadir algunas intenciones libres.

Porque la muerte de Cristo nos ha hecho agradables a Dios, nos atrevemos a orar al
Padre, diciendo: Padre nuestro...

Oración
Mira, Señor, con bondad a tu familia santa, por la cual Jesucristo nuestro Señor aceptó
el tormento de la cruz, entregándose a sus propios enemigos. Por nuestro Señor Jesucristo,
tu Hijo.

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EL VÍACRUCIS
Lo que se necesita para el Viacrucis:

1. Establecer y avisar con tiempo dónde van a ser las estaciones.


2. Preparar la cruz del Vía Crucis.
3. Verificar que este día las estaciones estén adornadas.
4. El manual de misionero día a día.
5. Cantos preparados
6. El megáfono.

Quiénes lo realizan:

1. El misionero o monitor.
2. Lectores designados.
3. Una persona de la familia donde se colocó la estación para hacer la lectura.
4. La comunidad o asamblea reunida.

Saludo inicial.

Guía: Por la señal de la Santa Cruz,


Todos: de nuestros enemigos líbranos, Señor, Dios Nuestro. En el nombre del Padre y del
Hijo del Espíritu Santo. AMEN.

Acto de Contrición

Guía: Señor mío Jesucristo,


Todos: Dios y hombre verdadero, me pesa de todo corazón de haber pecado, porque he
merecido el infierno y perdido el cielo, y sobre todo, porque te ofendí a Ti, que eres bueno, y
a quien yo amo sobre todas las cosas. Propongo firmemente, con tu gracia, enmendarme y
evitar las ocasiones próximas de pecado, confesarme y cumplir la penitencia. Confío me
perdonarás por tu infinita misericordia. AMEN.

Guía: Hermanos, estamos aquí reunidos para recordar los grandes sufrimientos que Cristo
soportó para salvarnos. Un día Cristo dijo: "No existe amor más grande que dar la vida por
los amigos" (Jn. 15, 13). Sufriendo y muriendo en la cruz, Jesús nos dio la prueba más
grande de su amor. Recorriendo estas estaciones del VÍA CRUCIS, iremos meditando sobre
nuestros pecados, que fueron la causa de la muerte de Cristo, y al mismo tiempo nos
preguntaremos: ¿Qué hacemos para que la sangre de Cristo sea desperdiciada? ¿Cuánta
gente hay todavía que no conoce a Cristo y no lo ama? ¿Qué puedo hacer yo para que se
acerquen más a Jesús, que sufrió tanto para salvarnos?

Oración preparatoria

SEÑOR MÍO JESUCRISTO QUE NOS INVITAS A TOMAR LA CRUZ Y SEGUIRTE,


CAMINANDO TU DELANTE PARA DARNOS EJEMPLO: DANOS TU LUZ Y TU GRACIA AL
MEDITAR EN ESTE VÍA CRUCIS TUS PASOS PARA SABER Y QUERER SEGUIRTE.
MADRE DOLOROSA: INSPÍRANOS LOS SENTIMIENTOS DE AMOR CONQUE
ACOMPAÑASTE EN ESTE CAMINO DE AMARGURA A TU DIVINO HIJO. AMÉN.

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PRIMERA ESTACIÓN: JESÚS ES CONDENADO A MUERTE

Guía: Ya que el profeta Isaías lo había anunciado.


Lector: "¿Quién podrá creer esta noticia? No tenía gracia ni belleza, para que nos fijáramos
en él. Despreciado y tenido como la basura de los hombres, hombre de dolores y
familiarizado con el sufrimiento. Ha sido tratado como culpable a causa de nuestras
rebeldías y aplastado por nuestros pecados. Él soportó el castigo que nos trae la paz y por
sus llagas hemos sido sanados. Sin embargo, eran nuestras dolencias las que él llevaba,
eran nuestros dolores los que le pesaban. FUE DETENIDO Y ENJUICIADO injustamente y
herido de muerte por los crímenes de su pueblo" (Is. 53, 1-8).

Guía: Nosotros somos aquel pueblo por el que Cristo fue condenado a muerte. Cristo
aceptó ser NUESTRO REPRESENTANTE delante del Padre y pagar por nuestros pecados.
La condena de Pilato tenía que recaer sobre cada uno de nosotros.
(Reflexión en silencio)

Guía: OREMOS. (todos repiten en voz alta) Señor Jesús, gracias por habernos amado
tanto. Ten piedad de nosotros. Ayúdanos a reconocer nuestros pecados, que han sido la
causa de tu condenación a muerte.

Guía: En esta primera estación vamos a pedir:


Por todos los que están en la cárcel injustamente.
Por los que están en la cárcel por sus ideas políticas y religiosas .
Por los que están en la cárcel porque no tienen dinero para pagar su defensa.
Por todos los que son torturados en nuestras cárceles.
Por todos los jueces para que no se vendan por dinero.
Por todas las autoridades para que administren rectamente la justicia.
Por todos nosotros, para que nunca condenemos, de palabra o de obra, a ninguno de
nuestros prójimos.

Guía: ORACIÓN. Señor Jesús, que fuiste injustamente condenado siendo inocente; mira con
bondad a todos los que padecen injusticias y concédenos a todos, autoridades y pueblo,
luchar por la justicia y la paz.

Guía: Te adoramos, oh Cristo, y te bendecimos,


Pueblo: que por tu Santa Cruz redimiste al mundo. (Canto)

SEGUNDA ESTACIÓN: JESÚS CARGA LA CRUZ Y SE DIRIJE AL CALVARIO.

Guía: Después de la condena, le entregan a Cristo una cruz, y empieza su largo y penoso
camino hacia el Calvario, lugar donde será crucificado. Detengámonos un momento y
pensemos: Si Cristo hizo tanto por nosotros, ¿es justo que nosotros sigamos diciendo que
estamos ocupados y no tenemos tiempo para conocer más a Cristo y seguirlo de veras?
¿Por qué nos espanta tanto el sufrimiento, si nuestro Maestro llegó a dar la vida por
nosotros? Escuchemos su Palabra:

Lector: "Si alguno quiere seguirme, olvídese de sí mismo, tome su cruz y sígame. Porque si
alguno quiere salvar su vida, la perderá; en cambio si pierde la vida por mí y por el Evangelio,
la salvará. ¿De qué sirve al hombre ganar el mundo entero, si pierde su vida? O ¿Qué
puede dar el hombre a cambio de su vida? Yo les digo: Si alguno se avergüenza de mí y de
mis palabras en medio de esta gente adúltera y pecadora, también el Hijo del Hombre se
avergonzará de él, cuando venga en la gloria de su Padre, rodeado de sus santos ángeles"
(Mc. 8, 34-38).
(Reflexión en silencio)
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Guía: En esta estación vamos a pedir:
Por todos los bautizados que se avergüenzan de llevar la Cruz de Cristo.
Por todos los que han renegado de su religión y de su Fe
Por todos los que no quieren llevar a cuestas la Cruz de la penitencia y mortificación
de sus pecados.
Por todos los que imponen la Cruz a los demás y ellos ni con un dedo quieren llevarla.
Por todos nosotros para que aceptemos gozosos la Cruz de nuestro Salvador.
Por todos nosotros para que la Cruz de Cristo sea nuestra gloria y nuestra esperanza

Guía: ORACIÓN. Señor Jesús que quisiste cargar la Cruz para enseñarnos el camino de la
penitencia y del servicio en favor de nuestros hermanos, concédenos llevar nuestra Cruz con
gozo y alegría para que obtengamos el perdón de nuestros pecados y la dicha de participar
contigo en la gloriosa resurrección.

Guía: Te adoramos, oh Cristo, te bendecimos,


Pueblo: que por tu Santa Cruz redimiste al mundo. (Canto)

TERCERA ESTACIÓN: JESÚS CAE POR PRIMERA VEZ

Guía: Cristo no puede seguir adelante, cargando la cruz por mucho rato. Ya acabaron sus
fuerzas; la agonía en el Getsemaní la noche pasada entre los insultos de los jefes de pueblo,
la flagelación y la coronación de espinas, lo han destruido, y cae agotado. Escuchemos al
profeta Isaías:

Lector: "He ofrecido mi espalda a los que me golpeaban, y mis mejillas a los que me tiraban
la barba, y no oculté mi rostro ante las injurias y los salivazos. Puse mi cara dura como
piedra". (Is. 50, 6-7).
(Reflexión en silencio)

Lector: San Pablo nos dice "Es que cuando aún nosotros estábamos sin fuerzas, entonces
en su momento, Jesús el Mesías murió por los culpables. Cierto, con dificultad se dejaría uno
matar por una causa justa; con todo por una buena persona quizá afrontaría uno la muerte.
Pero el Mesías murió por nosotros cuando éramos aún pecadores: así demuestra Dios el
amor que nos tiene" (Rm. 5, 6-8).

Guía: OREMOS todos en voz alta: Señor Jesús, enséñanos a sufrir. Que no nos
desanimemos en la prueba. Danos la fuerza para levantarnos cuando caemos en el pecado.

Guía: En esta estación vamos pedir:


Por los jóvenes para que sigan la cruz de Cristo.
Por los Sacerdotes, Obispos y el Papa para que marchen a la cabeza de su pueblo
llevando la cruz del Señor.
Por los seminaristas, para que renunciando a los bienes y comodidades sigan a Cristo
en el Sacerdocio.
Por las hermanas Religiosas, para que no desmayen en su ardua tarea de anunciar a
Cristo.

Guía: ORACIÓN Señor Jesucristo, que caíste bajo el peso de la Cruz, pero que te
levantaste para seguir tu camino y cumplir tu misión; míranos con bondad a todos los que
hemos emprendido, por gracia tuya, la tarea de seguirte, y no permitas que abandonemos tu
Cruz sino que sepamos siempre levantarnos y cumplir la misión que Dios Padre nos ha
encomendado.

Guía: Te adoramos, oh Cristo, y te bendecimos,


Pueblo: que por tu Santa Cruz redimiste al mundo. (Canto)
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CUARTA ESTACIÓN: JESÚS ENCUENTRA A SU SANTÍSIMA MADRE

Guía: Ya se lo había anunciado el anciano Simeón, cuando María presentó al niño Jesús en
el templo:

Lector: "Simeón lo bendijo, y después dijo a María, su Madre. Mira, este niño debe ser causa
tanto de caída como de resurrección para la gente de Israel. Será puesto como una
bandera, de modo que a Él lo atacarán y a ti misma una espada te atravesará el corazón"
(Lc. 2, 34-35).
(Reflexión en silencio)

Guía: OREMOS. Oh María, madre de Jesús y madre nuestra, enséñanos a sufrir con Jesús
por la salvación del mundo entero.

Guía: En esta estación vamos a pedir:


Por todas las madres que sufren y lloran por sus hijos.
Por todas las madres abandonadas y solitarias.
Por todas las madres pobres, enfermas o despreciadas.
Por todas las madres cristianas para que estén al pendiente de la educación de sus
hijos.
Por nuestras propias mamás, para que el Señor les pague los dolores y trabajos que
han sufrido por nosotros.

Guía: ORACIÓN. Virgen Santísima, María Madre de Jesús y madre nuestra; te damos
gracias porque concebiste y acompañaste a Jesús durante toda su vida y de manera
especial en su pasión y su cruz te encomendamos con cariño a todas las mamás que sufren
y lloran por sus hijos, para que las consueles en sus penas y recobren a sus hijos como tú
recobraste a tu hijo, después de su resurrección de entre los muertos.

Guía: Te adoramos, oh Cristo, y te bendecimos,


Pueblo: que por tu Santa Cruz redimiste al mundo. (Canto)

QUINTA ESTACIÓN: JESÚS ES AYUDADO POR EL CIRENEO A LLEVAR LA CRUZ

Guía: Jesús ya no puede seguir con la cruz, está tan acabado. Entonces los soldados
obligan a un hombre de Cirene para que ayude a Jesús a llevar la Cruz. Es un ejemplo para
nosotros. También nosotros tenemos que ayudar a Jesús para que su sangre no sea inútil
para nuestros hermanos. Todavía hay muchos que no conocen a Cristo; nosotros tenemos
que preocuparnos por ellos y hacer algo. Acordémonos de las palabras de Cristo:

Lector: "La cosecha es abundante; pero los obreros son pocos; por eso rueguen al Dueño de
la cosecha que envíe obreros a su cosecha. Vayan; los envío como corderos en medio de
lobos" (Lc. 10, 2-3). Pidamos a Dios continuamente para que envíe más misioneros y
catequistas a su Iglesia, que tengan el valor de predicar el mensaje de Cristo con fe y sin
miedo, convencidos de que sólo mediante la entrega y el sufrimiento se ayuda a Cristo en su
obra de salvación.
(Reflexión en silencio)

Guía: OREMOS. (todos en voz alta) Señor Jesús, perdónanos si muchas veces no te
hemos ayudado a llevar la cruz. Tal vez por nuestra culpa muchos se echaron a perder.
Ayúdanos a vivir el compromiso, que tomamos el día de la Confirmación, de ser soldados
tuyos en el mundo.

Guía: En esta quinta estación vamos a pedir:


Por todos los egoístas, para que sepan ayudar a los demás.
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Por todos nosotros, para que sepamos compartir los bienes y las penas con nuestros
semejantes.
Porque el Señor nos conceda alguien que nos tienda la mano cuando lo necesitemos.
Para que el Señor nos conceda humildad y sepamos aceptar la ayuda que nos brinda
algún hermano.
Por todos nosotros para que seamos solidarios y estemos dispuestos a ayudar a quien
lo necesita.

Guía: ORACIÓN. Jesús, que supiste aceptar con humildad la ayuda que te prestó ese
hombre campesino llamado Simón Cireneo; te pedimos nos des humildad para aceptar la
ayuda de los demás y nos des generosidad para tender la mano a un prójimo caído o
necesitado.

Guía: Te adoramos, oh Cristo, y te bendecimos,


Pueblo: que por tu Santa Cruz redimiste al mundo. (Canto)

SEXTA ESTACIÓN: LA VERÓNICA LIMPIA EL ROSTRO DE JESÚS

Guía: Mientras Jesús trata de seguir adelante, una mujer se le acerca y le limpia el rostro
con una toalla, quedando en ella la imagen de su cara. Cada cristiano tiene que imitar a la
Verónica, procurando transformar su misma vida en una imagen de Cristo. Escuchemos a
San Pablo:

Lector: "Hagan morir lo que les queda de vida terrenal, es decir, relaciones sexuales impuras,
cosas prohibidas, pasión desordenada, malos deseos y esa codicia que es una manera de
servir a los ídolos. Ustedes se despojaron del hombre viejo y de su manera de vivir para
revestirse del hombre nuevo que se va siempre renovando y progresa hacia el conocimiento
verdadero, conforme a la imagen de Dios, su creador (Col. 3, 5-10). (Reflexión en silencio)

Guía: OREMOS. (todos en voz alta) Señor Jesús, graba en nuestros corazones la imagen
de tu rostro. Que nunca nos olvidemos de Ti.

Guía: En esta estación vamos a pedir:


Por todos los que ensuciamos el rostro de Cristo con nuestros pecados.
Porque todos los cristianos conservemos la gracia recibida el día de nuestro bautizo y,
además, que nunca manchemos el rostro de la Iglesia y de nuestro prójimo.
Para que en todos nuestros hermanos veamos siempre el rostro de Cristo.
Por todas las veces que hemos sido ingratos con los que nos han ayudado en
nuestras dificultades.

Guía: ORACIÓN. Señor Jesús, que esta actitud de Verónica al limpiarte el rostro nos ayude
a ser más solidarios con los que sufren cada día y encontremos en ellos tu rostro de paz y
verdadero espíritu de servicio.

Guía: Te adoramos, oh Cristo, y te bendecimos,


Pueblo: que por tu Santa Cruz redimiste al mundo. (Canto)

SÉPTIMA ESTACIÓN: JESÚS CAE POR SEGUNDA VEZ

Guía: Nuestras recaídas en el pecado fueron la causa de las numerosas caídas de Jesús en
su doloroso camino hacia el Calvario. Es necesario que tomemos en serio nuestro
compromiso cristiano, recordando que hemos sido salvados por la sangre de Cristo, el Hijo
de Dios.

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Lector: "Como hijos obedientes, no vivan más como en el tiempo anterior, cuando todavía
ignoraban y se guiaban por sus pasiones. El que los llamó a ustedes, es santo, y también
ustedes han de ser santos en toda su conducta, según dice la Escritura: Ustedes serán
santos porque yo lo soy. No olviden que han sido liberados de la vida inútil que llevaban
antes, imitando a sus padres, no mediante un rescate material de oro y plata, sino con la
sangre preciosa del Cordero sin mancha ni defecto. Ámense unos a otros de todo corazón,
ya que nacieron a otra vida que no viene de hombres mortales: ustedes ahora viven por la
palabra eterna del Dios que vive y permanece. Esta palabra es la Buena Nueva, que llegó a
ustedes". (1P. 1, 14-15, 18, 22-25). (Reflexión en silencio)

Guía: OREMOS todos en voz alta: Señor Jesús, perdónanos en nuestras recaídas en el
pecado. Danos la fuerza de tu Espíritu, para que podamos resistir a los ataques del
demonio.

Guía: En esta séptima estación vamos a pedir:


Por todos los cristianos mediocres para que seamos todos más fervorosos.
Por todos los que hemos dejado nuestra cruz o nos sentimos aplastados por ella.
Por todos los bautizados confirmados y que hicieron la Primera Comunión pero que
ya no se acercan a la Iglesia.
Por todos los que no van a Misa ni a la Iglesia los domingos.
Por todos los que viven vida matrimonial y no se han casado.
Por todos lo que no conocen el amor de Dios o lo hacen a un lado y aprovechan
estos días santos para pasarlos divirtiéndose.

Guía: ORACIÓN. Señor Jesús, que caíste por segunda vez bajo el peso del madero de la
Cruz: mira nuestra vida y la de muchos de nuestros hermanos cristianos alejados o
indiferentes, y danos a todos nosotros la fortaleza y la alegría para seguir tus pasos y rehacer
nuestra vida cristiana.

Guía: Te adoramos, oh Cristo, y te bendecimos,


Pueblo: que por tu Santa Cruz redimiste al mundo. (Canto)

OCTAVA ESTACIÓN: JESÚS CONSUELA A LAS PIADOSAS MUJERES

Lector: "Lo seguía muchísima gente, especialmente mujeres que se golpeaban el pecho y se
lamentaban por él. Jesús, volviéndose hacia ellas, les dijo: Hijas de Jerusalén, no lloren por
mí. Lloren más bien por ustedes mismas y por sus hijos. Porque va a llegar el día en que se
dirá: Felices las mujeres que no dieron luz ni amamantaron. Entonces, se dirá; ¡Ojalá que las
lomas nos ocultaran! Porque, si así tratan al árbol verde, ¿qué harán del seco?" (Lc. 23, 27-
31).

Guía: Ahora Jesús nos dirige las mismas palabras: "No lloren por mí; yo ya hice todo lo que
pude para salvarlos. Lloren más bien por ustedes mismos. Porque, si no se arrepienten de
veras y no dejan el pecado de una vez recibirán tremendos castigos, como les pasó a los
habitantes de Jerusalén, por no haber hecho caso a mis palabras. Y sufrirán aún más,
porque se tratará de un castigo eterno". (Reflexión en silencio)

Guía: OREMOS. (todos en voz alta) Señor Jesús, concédenos un verdadero


arrepentimiento de nuestros pecados y un firme propósito de no volver a pecar.

Guía: En esta estación vamos a perdón:


Por todos los que nos compadecemos de Cristo, pero no nos compadecemos del
prójimo.
Por todas las madres irresponsables que ni siquiera se dan cuenta del mal que causan
a sus hijos.
14
Por todos los niños que sufren a causa de la irresponsabilidad de sus padres.
Por los jóvenes que nos se preparan conscientemente para el matrimonio y para la
vida y son causa de graves males y problemas para la sociedad y sus hijos.

Guía: ORACIÓN. Señor Jesucristo, que invitaste a estas mujeres de Jerusalén a considerar
su propia vida y las invitaste al arrepentimiento y a la conversión; te encomendamos a todas
las madres y mujeres cristianas para que les concedas la gracia de cumplir con
responsabilidad la misión que tú les has encomendado en el mundo.

Guía: Te adoramos oh Cristo, y te bendecimos,


Pueblo: que por tu Santa Cruz redimiste al mundo. (Canto)

NOVENA ESTACIÓN: JESÚS CAE POR TERCERA VEZ

Guía: A pesar de hacer todo el esfuerzo posible para seguir adelante, Jesús ya no aguanta y
cae por tercera vez. Así es cuando uno es débil. Así pasa con nosotros, cuando volvemos a
caer en el pecado. Es necesario que Dios mismo intervenga en nuestra vida, purificándonos
del pecado y dándonos un nuevo corazón. Escuchemos al profeta Ezequiel

Lector: Derramaré sobre ustedes agua purificada y serán purificados. Los purificaré de toda
mancha y de todos sus ídolos. Les daré un corazón nuevo. Y pondré dentro de ustedes un
espíritu nuevo. Les quitaré del cuerpo el corazón de piedra, y les pondré un corazón de
carne. Infundiré mi espíritu dentro de ustedes, para que vivan según mis mandamientos y
respeten mis órdenes. (Ez. 36, 25-27).

Guía: Si seguimos pecando, es que no hemos tenido fe suficiente en las promesas de


nuestro Padre Dios. Pidámosle a Dios que aumente nuestra fe y cumpla en nosotros su
promesa.
(Reflexión en silencio)

Guía: OREMOS. (todos en voz alta) Oh Padre Celestial, en el nombre de Jesús, te pedimos
que nos quites de una vez este corazón de piedra y nos concedas un corazón de carne, que
sepa amar de veras a Ti y a los hermanos.

Guía: En esta estación vamos a pedir:


Por todos los que nos calumnian y persiguen por ser cristianos.
Por todos los que nos insultan a causa del nombre de Cristo.
Por todos los que persiguen a la Iglesia en nuestra patria.
Por todos los que desprecian y difaman por el hecho de ser católicos.
Por todos los que abandonaron y renegaron de la FE cristiana que recibieron en su
bautismo.

Guía: ORACIÓN. Señor Jesús, que nos mandaste perdonar a quienes nos ofenden y orar
por los que nos persiguen y calumnian a causa de tu nombre, te pedimos por todos aquellos
que han perseguido a la Iglesia en nuestra Patria y por todos los que difaman para que Tú
los hagas volver a la FE verdadera y al seno de la santa Iglesia.
Guía: Te adoramos, oh Cristo, y te bendecimos,
Pueblo: que por tu Santa Cruz redimiste al mundo. (Canto)

DÉCIMA ESTACIÓN: JESÚS ES DESPOJADO DE SUS VESTIDURAS

Guía: Llegados al lugar de la ejecución, le quitan las vestiduras a Jesús.

15
Lector: "Yo soy un gusano, y ya no un hombre, vergüenza de los hombres y basura del
pueblo. Mis huesos se han descoyuntados, mi corazón se derrite como cera. Se reparten
entre sí mis vestiduras y mi túnica se juegan a los dados".

Guía: Mientras Jesús es despojado de las vestiduras, nosotros seguimos teniendo nuestro
corazón apegado al dinero y a los honores. Se ve que no hemos entendido nada del
mensaje de Cristo. Es necesario que de una vez tomemos una decisión clara: o con Cristo o
contra Cristo, ya que imposible servir a dos amos. (Reflexión en silencio)

Guía: OREMOS. (todos en voz alta) Señor Jesús, ayúdanos a despojarnos de nuestras
malas costumbres.

Guía: En esta estación vamos a pedir:


Por todos aquellos que se aprovechan y apropian de los bienes de los demás.
Por los lujuriosos que hacen de su cuerpo instrumento de pecado.
Por la Santa Iglesia de Cristo que ahora se encuentra dividida, para que pronto todos
los cristianos lleguemos a unirnos y formar el único pueblo de Dios.

Guía ORACIÓN. Señor Jesús, que sufriste ser desnudado y que se repartieran tus
vestiduras; mira a todos los pobres sin techo y sin vestido y alimento y haz que tu Iglesia
reencuentre pronto la unidad y la paz.

Guía: Te adoramos, oh Cristo, y te bendecimos,


Pueblo: que por tu Santa Cruz redimiste al mundo. (Canto)

DÉCIMO PRIMERA ESTACIÓN: JESÚS ES CLAVADO EN LA CRUZ

Guía: Empezando su predicación, Jesús había dicho:

Lector: "Así como Moisés levantó la serpiente en el desierto así también es necesario que el
Hijo del Hombre sea levantado en alto, para que todo el que crea en Él tenga la vida eterna.
Porque tanto amó Dios al mundo que le dio su Hijo Único, para que todo el que crea en Él,
no se pierda, sino que tenga la vida eterna". (Jn. 3, 14-16)

Guía: ¿Cuánta gente hay todavía en el mundo que no conoce este amor de Dios? ¿Qué
estoy haciendo yo para que la sangre de Cristo no sea inútil para mí y para mis hermanos?
(Reflexión en silencio)

Guía: OREMOS. (todos en voz alta) Señor Jesús, ayúdanos a ser tus testigos en el mundo.
Que todos los hombres conozcan tu amor y se acerquen a Ti.

Guía: En esta estación vamos a pedir:


Por todos nosotros, para que clavemos en la Cruz de Cristo nuestros vicios e
inclinación al pecado.
Por todos los cristianos, para que vivamos siempre pendientes de los mandamientos
divinos.
Por todos los que sufren y lloran, para que el dolor de Cristo los consuele y santifique.
Por todos nosotros, para que sepamos cumplir fielmente con nuestros deberes y
obligaciones.

Guía: ORACIÓN. "Misericordia, Dios mío, por tu bondad, por tu inmensa compasión borra
mi culpa; lava del todo mi delito, limpia mi pecado. Pues reconozco mi culpa, tengo siempre
presente mi pecado, contra ti sólo pequé, cometí la maldad que aborreces ... Te gusta un
corazón sincero, y en mi interior me inculcas sabiduría. Rocíame con el hisopo, quedaré
limpio; lávame, quedaré más blanco que la nieve.
16
Guía: Te adoramos, oh Cristo, te bendecimos,
Pueblo: que por tu Santa Cruz redimiste al mundo. (Canto)

DÉCIMO SEGUNDA ESTACIÓN: JESÚS MUERE EN LA CRUZ

Guía: Después de tres horas de penosísima agonía, Jesús muere, entre los insultos y las
burlas del pueblo. Es el nuevo Cordero Pascual. En su sangre se establece el Nuevo
Compromiso, o alianza, entre Dios y el Nuevo Pueblo de Israel, representado por María, San
Juan y unas cuantas mujeres. Es el momento más importante de toda la historia de la
humanidad. Alabemos a Cristo y démosle gracias por el grande amor que nos ha
manifestado.

Lector: "Eres digno de tomar el libro y abrir sus sellos, porque fuiste degollado y por tu
sangre compraste para Dios, hombres de toda raza, lengua, pueblo y nación; y has hecho de
ellos para nuestro Dios un reino de sacerdotes que reinan sobre la tierra. Digno es el
Cordero que ha sido degollado, de recibir el poder, la riqueza y la sabiduría, la fuerza y el
honor, la gloria y la alabanza" (Ap. 5, 9-10, 12).
(Reflexión en silencio)

Guía: OREMOS. (todos en voz alta) Gracias, oh Señor Jesús, por habernos amado tanto.
Que nunca nos cansemos de alabarte y bendecirte.

Guía: En esta estación en que contemplamos la muerte de Jesús en la Cruz, le vamos a


pedir:
Que sepamos entregar nuestra vida por nuestros prójimos.
Que nunca nos avergoncemos de sus mandamientos y de su Cruz.
Que su cruz sea nuestra alegría y nuestra gloria.
Que sepamos someternos siempre a la voluntad del Padre.
Que vivamos siempre agradecidos, por haber entregado su vida por nosotros en
prueba de su amor.

Guía: ORACIÓN. "Dios mío, Dios mío, ¿Por qué me has abandonado. A pesar de mis
gritos, mi oración no te alcanza ... En Ti confiaban nuestros padres; confiaban y los ponías a
salvo ... Pero yo soy un gusano, no un hombre, vergüenza de la gente"

Guía: Te adoramos, oh Cristo, y te bendecimos,


Pueblo: que por tu Santa Cruz redimiste al mundo. (Canto)

DECIMOTERCERA ESTACIÓN: JESÚS ES BAJADO DE LA CRUZ

Lector: "Vinieron entonces los soldados y les quebraron las piernas a los que estaban
crucificados para después retirarlos. Al llegar Jesús, vieron que ya estaba muerto. Así que
no le quebraron las piernas, sino que uno de los soldados le abrió el costado de una lanzada
y al instante salió sangre y agua. El que lo vio lo declara para ayudarles en su fe, y su
testimonio es verdadero. El mismo sabe que dice la verdad. Esto sucedió para que se
cumpla la Escritura que dice: "No le quebrarán ni un solo hueso", y otra dice: "Contemplarán
al que traspasaron". (Jn. 19, 32-37)

Guía: OREMOS. (todos en voz alta) Señor Jesús, reconocemos que Tú eres nuestro único
Salvador y Señor. Que nunca nos olvidemos de Ti.

Guía: En esta estación vamos a pedir:


Por todos nosotros, para que podamos decir al final de nuestra vida: "Todo está
cumplido".

17
Por todos nosotros para que, como Cristo, sepamos perdonar y orar por nuestros
enemigos.
Por todos nosotros, para que sepamos ponernos siempre en las manos del Padre y a
él entregar nuestro espíritu.
Para que sepamos, como José de Arimatea, ayudar a nuestros amigos y vecinos en
caso de enfermedad o muerte.

Guía: ORACIÓN. Madre de Jesús y madre de todos nosotros, Virgen Santísima, María: Tú
que acompañaste a tu Hijo durante toda su vida y de modo particular en su pasión y su
muerte acompáñanos también a nosotros pecadores para que gocemos, como Tú gozas
ahora, de la gloria de la Resurrección junto con tu hijo Jesucristo, nuestro salvador.

Guía: Te adoramos, oh Cristo, y te bendecimos,


Pueblo: que por tu Santa Cruz redimiste al mundo. (Canto)

DECIMOCUARTA ESTACIÓN: JESÚS ES SEPULTADO.

Guía: Después de haberlo bajado de la cruz, lo llevaron al sepulcro. He aquí el ejemplo más
grande de la humillación. Escuchemos a San Pablo:

Lector: "Tengan un mismo amor, un mismo espíritu, un único sentir y no hagan nada por
rivalidad o por orgullo. Al contrario, que cada uno, humildemente, estime a los otros como
superiores a sí mismo. No busque nadie sus propios intereses, sino más bien, el beneficio
de los demás. Tengan entre ustedes los mismos sentimientos que tuvo Cristo Jesús: Él que
era de condición divina, no se aferró celoso a su igualdad con Dios. Si no que se aniquiló a
sí mismo tomando la condición de esclavo, y llegó a ser semejante a los hombres.
Habiéndose comportado como hombre, se humilló, obedeciendo hasta la muerte, y muerte
en una cruz" (Fil. 2, 2-8).

Guía: Aquí vemos todo lo contrario de la actitud de Adán y Eva nuestros padres en la
desobediencia. Siendo hombres, quisieron ser iguales a Dios. Jesús, siendo Dios, se hizo
igual a nosotros, para salvarnos. El silencio del sepulcro tiene mucho que enseñarnos.
(Reflexión en silencio)

Guía: OREMOS. (todos en voz alta) Señor Jesús, enséñanos a ser humildes. Que nunca
busquemos los honores de este mundo.

Guía: En esta estación vamos a pedir:


Por todos nuestros difuntos para que descansen en el Señor.
Por todos los enfermos y agonizantes, para que el Señor Jesús esté junto a ellos.
Por todas las madres que han perdido a sus hijos, para que la Madre de Jesús les dé
consuelo y esperanza.
Por todos nosotros para que el Señor nos conceda una muerte cristiana.
Por todos los que aún no conocen a Cristo, para que pronto llegue a ellos la salvación
que Él nos consiguió con su muerte y resurrección.

Guía: ORACIÓN. Dios todopoderoso, cuyo Hijo descendió al lugar de los muertos y salió
luego victorioso del sepulcro, te pedimos nos concedas a tus fieles que hemos muerto con
Cristo al pecado por el Bautismo, resucitar también con Él a una nueva vida.

Guía: Te adoramos, oh Cristo, y te bendecimos,


Pueblo: que por tu Santa Cruz redimiste al mundo. (Canto)

18
DECIMOQUINTA ESTACIÓN: JESUCRISTO RESUCITA VICTORIOSO.

Guía: San Pablo, escribiendo a Timoteo, dice: "Acuérdate de Jesucristo, resucitado de entre
los muertos. Si hemos muerto con Él, con Él también viviremos. Si sufrimos con Él, también
reinaremos con Él" (2Tim. 2, 11-12). Para nosotros Cristo tiene que ser todo; su vida tiene
que ser nuestra vida.

Lector: "Mediante el bautismo fueron sepultados con Cristo; y también en el mismo bautismo
fueron resucitados con Cristo. Ustedes estaban muertos por sus pecados: pero Dios les
perdonó todas sus faltas. Así pues, si han sido resucitados con Cristo, busquen las cosas de
arriba, donde se encuentra Cristo sentado a la derecha de Dios; piensen en las cosas de
arriba, no en las de la tierra. Pues ustedes han muerto, y su vida está ahora escondida con
Cristo, en Dios. Cuando se manifieste Cristo, que es nuestra vida, ustedes también vendrán
a la luz de Él y tendrán parte de su gloria" (Col. 2, 12-13; Col. 3,1-4).
(Reflexión en silencio)

Guía: OREMOS. (todos en voz alta) Señor Jesús, enséñanos a vivir pensando siempre en
Ti, que estás victorioso a la diestra del Padre. Que después de haberte acompañado hasta
el Calvario, podamos alcanzarte en la gloria.

Guía: En esta última estación en que nos alegramos por el triunfo de Cristo digamos:
Te alabamos, Señor Jesús, porque con tu muerte venciste a la muerte y nos diste la
esperanza de resucitar contigo.
Te damos gracias, porque en el bautismo morimos contigo al pecado y resucitamos a una
nueva vida.
Te pedimos que nos concedas la gracia de morir continuamente al pecado y que vivamos
para Dios una vida de servicio a la comunidad.
Concédenos, por tu resurrección, dar testimonio alegre de la vida nueva que nos has
ganado.
Que la certeza de resucitar contigo llene nuestra vida de alegría y de esperanza.
Que todos nuestros difuntos resuciten contigo en el último día.

Guía: ORACIÓN. Oh Jesús, Dios poderosos, Rey de reyes y Señor de Señores, Luz que
brilla en las tinieblas y fuente de vida eterna. Mira a tu familia santa aquí reunida que te ha
acompañado en la meditación de tu pasión y concédele alegrarse y participar contigo en tu
gloriosa resurrección.

GUÍA: Te adoramos, oh Cristo, y te bendecimos,


Pueblo: que por tu Santa Cruz redimiste al mundo. (Canto)

ORACIÓN COMUNITARIA

Guía: Hermanos, hemos visto cuánto hizo Dios por nosotros. Acerquémonos, pues, a Él con
toda confianza, pidiéndole sinceramente perdón por todos los pecados que hayamos
cometido y renovándole la entrega total de nuestra vida. Él nos amó y entregó su vida por
nosotros; también nosotros de ahora en adelante tratemos de amarlo sobre todas las cosas y
de vivir conducidos por su mismo Espíritu.

A cada intención contestemos: TE ROGAMOS, SEÑOR.

Lector: Por todos nosotros para que sintamos un verdadero horror al pecado.

Pueblo: TE ROGAMOS, SEÑOR.

19
Lector: Para que comprendamos que nuestros pecados han sido la causa de los sufrimientos
de Cristo.

Pueblo: TE ROGAMOS, SEÑOR.

Lector: Para que ahora en adelante, nunca nos separemos de Cristo, nuestro hermano y
salvador.

Pueblo: TE ROGAMOS, SEÑOR.

Lector: Por todos los que no conocen a Cristo, afín de que también para ellos llegue pronto el
día de la luz y de la paz, al conocer el gran amor de Dios hacia todos los hombres.

Pueblo: TE ROGAMOS, SEÑOR.

Lector: Por las misiones, para que Dios aumente el número de los catequistas y misioneros.

Pueblo: TE ROGAMOS, SEÑOR.

Lector: Por los cristianos comprometidos, para que entiendan que su vida es inútil si no están
llenos del Espíritu Santo.

Pueblo: TE ROGAMOS, SEÑOR.

Lector: Por el Papa, los obispos, los sacerdotes y los diáconos para que no se cansen nunca
de predicar a Cristo muerto y resucitado por nosotros.

Pueblo: TE ROGAMOS, SEÑOR.

(Se pueden añadir intenciones particulares).

ORACIÓN FINAL

Guía: Oh Padre Celestial, te damos gracias y te alabamos por el grande amor, que has
manifestado hacia nosotros. Por amor nos creaste y por amor nos redimiste, entregando a tu
mismo Hijo, que derramó toda su sangre para pagar nuestra libertad y conseguirnos el
perdón de los pecados. Y para que nuestra vida desde ahora fuera ofrenda agradable para
ti, nos enviaste al Espíritu Santo como primicia de la nueva vida que tendremos un día en la
gloria. Bendito sea para siempre tu santo nombre. No permitas nunca que volvamos al
pecado; más bien ayúdanos a tener siempre una vida santa, alabándote ahora y por los
siglos de los siglos. AMEN.

20
PRIMERA PARTE
PRIMER DÍA DEL TRIDUO PASCUAL
CONMEMORACIÓN DE LA PASIÓN DEL SEÑOR

1. RITOS INICIALES
Lo que se necesita:

1. El manual del misionero día a día.

Quiénes lo realizan:

1. El ministro de la Palabra.
2. La comunidad o asamblea reunida.

Cómo realizarlo:

Dejar el altar completamente desnudo, las cruces cubiertas o quitadas de igual manera que
las imágenes de los santos, a la hora convenida se reúnen todos en la capilla o en templo al
iniciarse la celebración se ponen todos de rodillas y oran en silencio por unos momentos.

PRESENTACIÓN.

M.
EN ESTE DÍA NOS REUNIMOS PARA REVIVIR EL GRAN MISTERIO DE NUESTRA SALVACIÓN: EL
MISTERIO DE LA PASIÓN Y MUERTE DE JESÚS, PERO SIN PERDER DE VISTA QUE ESTE MISMO
JESÚS CRUCIFICADO HA RESUCITADO GLORIOSAMENTE Y VIVE EN NOSOTROS QUE SOMOS SU
IGLESIA.
HOY NO SE CELEBRA LA SANTA MISA EN NINGUNA PARTE, SINO UNA ACCIÓN LITÚRGICA MUY
SEMEJANTE A ESTA CELEBRACIÓN DE LA PALABRA QUE VAMOS A INICIAR.
ÉSTA NO COMIENZA COMO DE COSTUMBRE, CON CANTO Y ACLAMACIONES JUBILOSAS, SINO
CON SILENCIO; SILENCIO QUE NOS LLAMA A CONTEMPLAR A CRISTO QUE MUERE, Y SOBRE
TODO, QUE NOS LLAMA A PENSAR EN NUESTRA PROPIA MUERTE QUE, UNIDA A LA DE ÉL, ES
CAMINO HACIA LA PASCUA.
EN EL MOMENTO EN QUE EL QUE PRESIDE LA ASAMBLEA SE ARRODILLE NOSOTROS TAMBIÉN
NOS ARRODILLAREMOS PARA ORAR, ENTRANDO ASÍ, DESDE ESTE MOMENTO, EN LA DINÁMICA
DE ESTA CELEBRACIÓN, QUE ES ENCUENTRO PERSONAL CON AQUEL QUE, PARA DARNOS LA
VIDA, QUISO EXPERIMENTAR LA MUERTE

A continuación, todos se arrodillan y el que preside la asamblea, son la cabeza inclinada,


permanece en oración por algunos momentos, mientras todos rezan en silencio. Luego,
permaneciendo de rodillas, inicia la celebración con una de estas oraciones:

M.P.
OREMOS: RECUERDA, PADRE, QUE TU TERNURA Y TU MISERICORDIA SON ETERNAS;
SANTIFICA A TUS HIJOS Y PROTÉGELOS SIEMPRE, PUES JESUCRISTO, TU HIJO, A FAVOR
NUESTRO INSTITUYÓ POR MEDIO DE SU SANGRE EL MISTERIO PASCUAL. POR NUESTRO
SEÑOR JESUCRISTO.

O bien:

21
M.P.
OH DIOS, TU HIJO JESUCRISTO, SEÑOR NUESTRO, POR MEDIO DE SU PASIÓN HA DESTRUIDO
LA MUERTE QUE COMO CONSECUENCIA DEL ANTIGUO PECADO, A TODOS LOS HOMBRES
ALCANZA. CONCÉDENOS HACERNOS SEMEJANTES A ÉL. DE ESTE MODO, LOS QUE HEMOS
LLEVADO GRABADA, POR EXIGENCIA DE LA NATURALEZA HUMANA, LA IMAGEN DE ADÁN, EL
HOMBRE TERRENO, LLEVAREMOS GRABADA EN ADELANTE, POR LA ACCIÓN SANTIFICADORA
DE TU GRACIA, LA IMAGEN DE JESUCRISTO, EL HOMBRE CELESTIAL. ÉL, QUE VIVE Y REINA
POR LOS SIGLOS DE LOS SIGLOS.

A.
AMÉN.

Inmediatamente después se inicia la Liturgia de la palabra. NO SE HACEN CANTOS NI


ORACIONES EN VOZ ALTA.

SEGUNDA PARTE
LITURGIA DE LA PALABRA

Lo que se necesita para la Celebración:

1. La Biblia o misal mensual.


2. Un lugar digno para proclamar la Palabra.

Quiénes la realizan:

1. La comunidad o asamblea reunida.


2. El ministro de la Palabra.
3. El monitor.
4. El canto o coro.
5. Dos lectores

Lecturas a preparar:

1. Isaías 52, 13 - 53, 12.


2. Salmo 30.
3. Hebreos 4, 14 - 16; 5, 7 - 9.
4. Juan 18, 1 - 19, 42.

Cómo realizarla:

Después de haberse puesto todos de rodillas y habiendo orado en silencio, todos se sientan
y el monitor dirá a la asamblea las siguientes palabras.

2.- PROCLAMACIÓN DE LA PALABRA DE DIOS.


M.
JESÚS MUERE, PARA ESTABLECER, ENTRE DIOS Y LA HUMANIDAD, LA NUEVA Y
ETERNA ALIANZA ANUNCIADA POR LOS PROFETAS; POR SU MUERTE EN CRUZ,
DIOS PADRE LO PROCLAMA ÚNICO MEDIADOR Y SALVADOR. ESTE ES EL
MENSAJE QUE NOS OFRECEN LAS LECTURAS DE LA PALABRA DE DIOS QUE
PROCLAMAREMOS A CONTINUACIÓN.
22
ESCUCHEMOS CON ATENCIÓN.

Una vez hecha la monición anterior desde un lugar distinto de donde se proclama la Palabra,
se acerca el primer lector para hacer la lectura correspondiente sin decir "PRIMERA
LECTURA", ni leer el pequeño texto que la sintetiza, sino que sólo dirá: "Lectura del libro
de..." e iniciará inmediatamente la lectura del texto bíblico correspondiente. Esto es para
todos los lectores.

Del libro del profeta Isaías 52, 13-53, 12

He aquí que mi ciervo prosperará, será engrandecido y exaltado, será puesto en alto.
Muchos se horrorizaron al verlo, porque estaba desfigurado su semblante, que no tenía ya
aspecto de hombre; pero muchos pueblos se llenaron de asombro. Ante él lo reyes cerrarán
la boca, porque verán lo que nunca se habían imaginado. ¿Quién habrá de creer lo que
hemos anunciado? ¿A quién se le revelará el poder del Señor? Creció en su presencia como
planta débil, como una raíz en el desierto. No tenía gracia ni belleza. No vimos en él ningún
aspecto atrayente; despreciado y rechazado por los hombres, varón de dolores, habituado al
sufrimiento; como uno del cual se aparta la mirada, despreciado y desestimado.

Él soportó nuestros sufrimientos y aguantó nuestros dolores; nosotros lo tuvimos por


leproso, herido por Dios y humillado, traspasado por nuestras rebeliones, triturado por
nuestros crímenes. Él soportó el castigo que nos trae la paz. Por sus llagas hemos sido
curados.

Todos andábamos errantes como ovejas, cada uno siguiendo su camino, y el Señor
cargó sobre él todos nuestros crímenes. Cuando lo maltrataban, se humillaba y no abría la
boca, como un cordero llevado a degollar; como oveja ante el esquilador, enmudecía y no
abría la boca.
Inicuamente y contra toda justicia se lo llevaron. ¿Quién se preocupó de su suerte? Lo
arrancaron de la tierra de los vivos, lo hirieron de muerte por los pecados de mi pueblo, le
dieron sepultura con los malhechores a la hora de su muerte, aunque no había cometido
crímenes, ni hubo engaño en su boca. El Señor quiso triturarlo con el sufrimiento.

Cuando entregue su vida como explicación, verá a sus descendientes, prolongará sus
años y por medio de él prosperarán los designios del Señor. Por las fatigas de su alma, verá
la luz y se saciará; con sus sufrimientos justificará mi siervo a muchos, cargando con los
crímenes de ellos.

Por eso le daré una parte entre los grandes, y con los fuertes repartirá despojos, ya que
indefenso se entregó a la muerte y fue contado entre los malhechores, cuando tomó sobre sí
las culpas de todos e intercedió por los pecadores.

Palabra de Dios.

La asamblea, una vez que ha terminado la lectura, responde de la manera acostumbrada.

R. Te alabamos Señor.

Terminada la lectura de la Palabra, el salmista se acercará al lugar de la proclamación de la


Palabra para salmodiar el salmo correspondiente, pero sin anunciar "SALMO
RESPONSORIAL", sino que salmodiará la parte que le corresponde y la asamblea
responderá de la misma manera.

23
SALMO RESPONSORIAL Del salmo 30

R. Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu.


A ti, Señor, me acojo,
que no quede yo nunca defraudado.
En tus manos encomiendo mi espíritu
y tú, mi Dios leal, me librarás.
R. Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu.

Se burlan de mí mis enemigos,


mis vecinos y parientes de mí se espantan,
los que me ven pasar huyen de mí.
Estoy en el olvido, como un muerto,
como un objeto tirado en la basura.
R. Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu.

Pero yo, Señor, en ti confío.


Tú eres mi Dios,
y en tus manos está mi destino.
Líbrame de los enemigos que me persiguen.
R. Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu.

Vuelve, Señor, tus ojos a tu siervo


y sálvame, por tu misericordia.
Sean fuertes y valientes de corazón,
ustedes, los que esperan en el Señor.
R. Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu.

Posteriormente se harán las lecturas siguientes de igual modo que la primera.

SEGUNDA LECTURA:

De la carta a los Hebreos 4,14-16; 5,7-9

Hermanos: Jesús, el Hijo de Dios, es nuestro sumo sacerdote, que ha entrado en el cielo.
Mantengamos firme la profesión de nuestra fe. En efecto, no tenemos un sumo sacerdote
que no sea capaz de compadecerse de nuestros sufrimientos, puesto que él mismo ha
pasado por las mismas pruebas que nosotros, excepto el pecado.

Acerquémonos, por lo tanto, con plena confianza al trono de la gracia, para recibir
misericordia, hallar la gracia y obtener ayuda en el momento oportuno.

Precisamente por eso, Cristo, durante su vida mortal, ofreció oraciones y suplicas, con
fuertes voces y lágrimas, a aquel que podía librarlo de la muerte, y fue escuchado por su
piedad. A pesar de que era el Hijo, aprendió a obedecer padeciendo, y llegado a su
perfección, se convirtió en la causa de la salvación eterna para todos los que obedecen.

Palabra de Dios. R. Te alabamos Señor.

Terminada la segunda lectura, se entonará la aclamación antes del Evangelio, ya sea


salmodiada o cantada por el coro, según la manera acostumbrada en cada ermita.
24
ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO Flp 2, 8-9

R. Honor y gloria a ti, Señor Jesús.

Cristo se humilló por nosotros


y por obediencia aceptó incluso la muerte,
y una muerte de cruz.
Por eso Dios lo exaltó sobre todas las cosas
y le otorgó el nombre que está sobre todo nombre.

R. Honor y gloria a ti, Señor Jesús.

Se procede a la lectura de la Pasión del Señor, sin saludar a la asamblea como el


sacerdote, sin signar el libro como el sacerdote, pero signándose el ministro de la Palabra y
la asamblea.

En esta proclamación del Evangelio participan:


1. El ministro de la Palabra, quien lee las partes de Cristo.
2. El lector, quien hace el papel de narrador.
3. Un lector que hace el papel de pueblo, sanedrín, sacerdotes, etc.

Cuando se lee el momento de la muerte de Jesús, se guarda silencio y todos se ponen de


rodillas por unos momentos, contemplando el misterio de la redención, para continuar
posteriormente con la lectura.

+.- Jesús; S.- Discípulos, pueblo y otros personajes; C.- Cronista

PASIÓN DE NUESTRO SEÑOR JESUCRISTO SEGÚN SAN JUAN 18, 1-19,42

C.- En aquel tiempo, Jesús fue con sus discípulos al otro lado del torrente Cedrón, donde
había un huerto, y entraron allí él y sus discípulos. Judas, el traidor, conocía también el sitio,
porque Jesús se reunía a menudo allí con sus discípulos. Entonces Judas tomó un batallón
de soldados y guardias de los sumos sacerdotes y de los fariseos y entró en el huerto con
linternas, antorchas y armas. Jesús, sabiendo todo lo que iba a suceder, se adelanto y les
dijo:

+.- ¿A quien buscan?

C.- Le contestaron:

S.- “A Jesús, el Nazareno”.

C.- Les dijo Jesús:

+.-“Yo Soy”.

C.- Estaba también con ellos Judas, el traidor. Al decirles “Yo Soy”, retrocedieron y cayeron a
tierra. Jesús les volvió a preguntar:

+.- ¿A quién buscan?

C.- Ellos dijeron:

25
S.- “A Jesús, el Nazareno”.

C.- Jesús contestó:

+.- “Les he dicho que soy yo. Si me buscan a mi, dejen que éstos de vayan”.

C.- Así se cumplió lo que Jesús había dicho: “No he perdido a ninguno de los que me diste”.
Entonces Simón Pedro, que llevaba una espada, la sacó e hirió a un criado del sumo
sacerdote y le cortó la oreja derecha. Este criado se llamaba Malco. Dijo entonces Jesús a
Pedro:

+.- “Mete la espada en la vaina. ¿No voy a beber el cáliz que me ha mandado mi padre?

C.- El batallón, su comandante y los criados de los judíos apresaron a Jesús, lo ataron y lo
llevaron primero ante Anás, porque era suegro de Caifás, sumo sacerdote aquel año. Caifás
era el que había dado a los judíos este consejo : “Conviene que muera un solo hombre por el
pueblo”. Simón Pedro y otro discípulo iban siguiendo a Jesús. Este discípulo era conocido del
sumo sacerdote y entró con Jesús en el palacio del sumo sacerdote, mientras Pedro se
quedaba fuera, junto a la puerta. Salió el otro discípulo, el conocido del sumo sacerdote,
habló con la portera e hizo entrar a Pedro, La portera dijo entonces a Pedro:

S.- ¿No eres tu también uno de los discípulos de ese hombre?

C.- Él dijo:

S.- “No lo soy”.

C.- Los criados y los guardias habían encendido un bracero, porque hacía frío, y se
calentaban. También Pedro estaba con ellos de pie, calentándose. El sumo sacerdote
interrogó a Jesús acerca de sus discípulos y de su doctrina. Jesús le contestó:

+.- “Yo he hablado abiertamente al mundo y he enseñado continuamente en la sinagoga y en


el templo, donde se reúnen todos los judíos, y no he dicho nada a escondidas, ¿Por qué me
interrogas a mi? Interroga a los que me han oído, sobre lo que les he hablado. Ellos saben lo
que he dicho”.

C.- Apenas dijo esto, uno de los guardias le dio una bofetada a Jesús, diciéndole:

S.- “¿Así contestas al sumo sacerdote?

C.- Jesús le respondió:

+.- “Si he faltado al hablar, demuestra en qué he faltado; pero si he hablado como se debe,
¿por qué me pegas?”

C.- Entonces Anás lo envió atado a Caifás, el sumo sacerdote. Simón Pedro estaba de pie,
calentándose, y le dijeron:

S.- ¿No eres tú también uno de sus discípulos?”

C.- Él lo negó diciendo:

S.- “No lo soy”.

26
C.- Uno de los criados del sumo sacerdote, pariente de aquel a quien pedro la había cortado
las orejas, le dijo:

S.- “¿Qué no te vi yo con él en el huerto?


Pedro volvió a negarlo y enseguida canto un gallo. Llevaron a Jesús de casa de Caifás al
pretorio. Era muy de mañana y ellos no entraron en el palacio para no incurrir en impurezas y
poder así comer la cena de Pascua. Salió entonces Pilato a donde estaban ellos y les dijo:

S.- “¿De qué acusan a este hombre?

C.- Le contestaron:

S.- “Si este no fuera un malhechor, no te lo hubiéramos traído”.

C.- Pilato les dijo:

S.- “Pues llévenselo y júzguenlo según su ley”.

C.- Los judíos le respondieron:

S.- “No estamos autorizados para dar muerte a nadie”.

C.- Así se cumplió lo que había dicho Jesús, indicando de que muerte iba a morir. Entró
otra vez Pilato en el pretorio, llamó a Jesús y le dijo:

S.- “¿Eres tu el rey de los judíos?”

C.- Jesús le contestó:

+.- “¿Eso lo preguntas por tu cuenta o te han dicho otros?”

C.- Pilato le respondió:

S.- “¿Acaso soy yo judío? Tu pueblo y los sumos sacerdotes te han entregado a mí. ¿Qué
es lo que has hecho?“

C.- Jesús le contestó:

+.- “Mi reino no es de este mundo. Si mi Reino fuera de este mundo, mis servidores habrían
luchado para que no cayera yo en manos de los judíos. Pero mi Reino no es de aquí”.

C.- Pilato le dijo:

S.- “¿Con que tu eres rey?

C.- Jesús le contesto:

+.- “Tú lo has dicho. Soy rey. Yo nací y vine al mundo para ser testigo de la verdad. Todo el
que es de verdad, escucha mi voz”.

C.- Pilato le dijo:

S.- “¿Y qué es la verdad?”

C.- Dicho esto, salió otra vez a donde estaban los judíos y les dijo:
27
S.- “No encuentro en él ninguna culpa. Entre ustedes es costumbre que por Pascua ponga
en libertad a un preso. ¿Quieren que les suelte al rey de los judíos?”

C.- Pero ellos gritaron:

S.- “¡No, a ése no! ¡A Barrabás!

C.- (El tal Barrabás era un bandido).


Entonces Pilato tomó a Jesús y lo mando azotar. Los soldados trenzaron una corona
de espinas, se la pusieron en la cabeza, le echaron en cima un manto color púrpura, y
acercándose a el, le decían:

S.- “¡Viva el rey de los judíos!”

C.- Y le daban de bofetadas. Pilato salió otra vez afuera y les dijo:

S.- “Aquí lo traigo para que sepan que no encuentro en él ninguna culpa”.

C.- Salió, pues, Jesús, llevando la corona de espinas y el manto color púrpura. Pilato les dijo:

S.- “Aquí esta el hombre”.

C.- Cuando lo vieron los sumos sacerdotes y sus servidores, gritaron:

S.- “Crucifícalo, crucifícalo”

C.- Pilato de dijo:

S.- “Llévenselo ustedes y crucifíquenlo, pero yo no encuentro culpa en él”.

C.- Los Judíos le contestaron:

S.- “Nosotros tenemos una ley según esa ley tiene que morir, porque se ha declarado Hijo
de Dios”.

C.- Cuando Pilato oyó estas palabras, se asustó aún más, y entrando otra vez en el pretorio,
dijo a Jesús:

S.- “¿De dónde eres tú?”

C.- Pero Jesús no le respondió. Pilato le dijo entonces:

S.- “¿A mi no me hablas? ¿No sabes que tengo autoridad para soltarte y autoridad para
crucificarte?”

C.- Jesús le contesto:

+.- “No tendrías ninguna autoridad sobre mi, si no te la hubieran dado de lo alto. Por eso, el
que me ha entregado a ti tiene un pecado mayor”.

C.- Desde ese momento Pilato trataba de soltarlo, pero los judíos gritaban:
S.- “¡Si sueltas a ese, no eres amigo del Cesar!; porque todo el que pretende ser rey, es
enemigo del Cesar”.

28
C.- Al oír estas palabras, Pilato sacó a Jesús y lo sentó en el tribunal, en el sitio que llaman
“el Endosado” (en hebreo Gábbata). Era el día de la preparación de la Pascua, hacia el
mediodía. Y dijo Pilato a los judíos:

S.- “Aquí tienen a su rey”.

C.- Ellos gritaron:

S.- “¡Fuera, fuera! ¡Crucifíquenlo!”

C.- Pilato les dijo:

S.- “¿A su rey voy a crucificar?”

C.- Contestaron los sumos sacerdotes:

S.- “No tenemos mas rey que el Cesar”.

C.- Entonces se lo entregó para que lo crucificaran. Tomaron a Jesús, y él, cargando con la
cruz se dirigió hacia el sitio llamado “la Calavera” (que en hebreo se dice Gólgota), donde lo
crucificaron, y con él a otros dos, uno de cada lado, y en medio a Jesús. Pilato mandó
escribir un letrero y ponerlo encima de la cruz; en él estaba escrito: “JESÚS EL NAZARENO,
EL REY DE LOS JUDÍOS”. Leyeron el letrero muchos judíos, porque estaba cerca el lugar
donde lo crucificaron a Jesús y estaba escrito en hebreo, latín y griego. Entonces los sumos
sacerdotes de los judíos le dijeron a Pilato:

S.- “No escribas: “El rey de los judíos”, sino: ‘Este ha dicho: Soy el rey de los judíos’”.

C.- Pilato les contestó:

S.- “Lo escrito, escrito está”.

C.- Cuando crucificaron a Jesús, los soldados cogieron su ropa e hicieron cuatro partes, una
para cada soldado, y apartaron la túnica. Era una túnica sin costura, tejida toda de una pieza
de arriba abajo. Por eso se dijeron: “No la rasgaremos, sino echemos suerte para ver a quien
le toca”. Así se cumplió lo que dice la Escritura: Se repartieron mi ropa y echaron a suerte mi
túnica. Y eso hicieron los soldados.

Junto a la cruz de Jesús estaba su madre, la hermana de su madre, María la de Cleofás, y


Maria Magdalena. Al ver a su madre y junto a ella al discípulo que tanto quería, Jesús dijo a
su madre:

+.- “Mujer, ahí está tu hijo”.

C.- Luego dijo al discípulo:

+.- “Ahí está tu madre”.

C.- Y desde aquella hora el discípulo se la llevó a vivir con él. Después de esto, sabiendo
Jesús que todo había llegado a su termino, para que se cumpliera la Escritura dijo:

+.- “Tengo sed”.

C.- Había allí un jarro lleno de vinagre. Los soldados sujetaron una esponja empapada en
vinagre a una caña de hisopo y se la acercaron a la boca. Jesús probó el vinagre y dijo:
29
“Todo está cumplido”,

C.- E inclinando la cabeza, entregó el espíritu.

Aquí se arrodillan todos y se hace una breve pausa.

C.- Entonces, los judíos, como era día de la preparación de la Pascua, para que los cuerpos
de los ajusticiados no se quedaran en a cruz el sábado, por que aquel sábado era un día
muy solemne, pidieron a Pilato que les quebraran las piernas y los quitaran de la cruz.
Fueron los soldados, le quebraron las piernas a uno y luego al otro de los que habían sido
crucificados con él. Pero al llegar a Jesús, viendo que ya había muerto, no le quebraron las
piernas, sino que uno de los soldados traspasó el costado con una lanza e inmediatamente
salió sangre y agua.

El que vio da testimonio de esto y su testimonio es verdadero y él sabe que dice la verdad,
para que también ustedes crean. Esto sucedió para que se cumpliera lo que dice la Escritura:
No le quebrarán ningún hueso; y en otro lugar de la Escritura dice: Mirarán al que
traspasaron.

Después de esto, José de Arimatea, que era discípulo de Jesús, pero oculto por miedo a los
judíos, pidió a Pilato que lo dejara llevarse el cuerpo de Jesús. Y Pilato lo autorizó. Él fue
entonces y se llevó el cuerpo.

Llegó también Nicodemo, el que había ido a verlo de noche, y trajo unas cien libras de una
mezcla de mirra y áloe.
Tomaron el cuerpo de Jesús, y lo envolvieron en lienzos con esos aromas, según se
acostumbraba enterrar entre los judíos.

Había un huerto en el sitio donde lo crucificaron, y en el huerto, un sepulcro nuevo, donde


nadie había sido enterrado todavía. Y como para los judíos era día de la preparación de la
Pascua y el sepulcro estaba cerca, allí pusieron a Jesús.

Una vez que se ha terminado la lectura, el ministro de la Palabra dirá:

M.P. PALABRA DEL SEÑOR

Y la asamblea responderá:

A. GLORIA A TI, SEÑOR JESÚS.

Se guardan unos minutos de silencio (2 ó 3) para meditación personal.

30
3.- REFLEXIÓN COMUNITARIA
COMENTAMOS LA PALABRA DE DIOS.

VER los acontecimientos de este viernes santo.


¿Cuáles son los hechos principales de este día?
¿Qué nos enseña Jesucristo en este viernes santo?
¿Qué entendimos de la lectura?
JUZGAR Y PENSAR los sentimientos que tenía Cristo
¿Cuáles son los delitos por los que condenaron a Jesús?
¿Qué personajes decidieron su crucifixión?
¿Cuáles la causa de la muerte de Jesús?
¿Nuestro pueblo esta crucificado hoy?
¿Hay quien se burla de nosotros y nos humilla?
¿Hay quien nos insulta por ser nosotros pobres?
¿Los enemigos de Cristo triunfaron? ¿por qué?

ACTUAR: de cara a un compromiso personal y comunitario.


¿Qué lecciones guarda la muerte de Jesús para los hombres de hoy?
¿Por qué este final de la vida de Jesús debe ser el camino que debemos emprender
para que se obre nuestra liberación?
¿En que forma podemos contribuir a que nuestros pueblos dejen de ser pueblos de
viernes santo para transformarse en comunidades pascuales?
¿Que podemos hacer en nuestra comunidad para liberarnos del peso de la cruz?
¿Cuál es la esperanza de los cristianos pobres?

NO SE DICE CREDO.

4.- ORACIÓN UNIVERSAL O DE LOS FIELES.


Inmediatamente después vienen las oraciones de los fieles (se puede usar el esquema
breve), las que iniciará el ministro de la Palabra:

M.
LA ORACIÓN UNIVERSAL O DE LOS FIELES QUE HACEMOS EN TODAS LAS CELEBRACIONES,
TIENE HOY UNA IMPORTANCIA ESPECIAL. JESÚS, SUMO SACERDOTE NUESTRO, INTERCEDE
POR TODA LA HUMANIDAD ANTE EL PADRE. UNÁMONOS A ÉL, CON EL CORAZÓN DESPOJADO
DE EGOÍSMO, DISCORDIAS, DESAVENENCIAS, PREJUICIOS Y REVANCHAS, PARA QUE ESTE
VIERNES SANTO EXTIENDA SUS FRUTOS DE RECONCILIACIÓN Y PAZ A TODA LA IGLESIA, A LOS
PUEBLOS QUE SUFREN, A LOS HOMBRES CANSADOS, A LOS QUE BUSCAN LA LUZ Y,
ESPECIALMENTE, A QUIENES SE ENCUENTRAN SEPARADOS POR LAS ABSURDAS BARRERAS
DEL EGOÍSMO Y DEL ODIO.

M.
POR LA SANTA IGLESIA
OREMOS HERMANOS, POR LA IGLESIA SANTA DE DIOS, PARA QUE EL SEÑOR LE DÉ LA PAZ, LA
MANTENGA EN LA UNIDAD, LA PROTEJA EN TODA LA TIERRA, Y A TODOS NOS CONCEDA UNA
VIDA CONFIADA Y SERENA, PARA LA GLORIA DE DIOS. (Oración en silencio)

M.P.
DIOS TODOPODEROSO Y ETERNO, QUE EN CRISTO MANIFIESTAS TU GLORIA A TODAS LAS
NACIONES, VELA SOLÍCITO POR LA OBRA DE TU AMOR, PARA QUE LA IGLESIA, EXTENDIDA
POR TODO EL MUNDO, PERSEVERE CON FE INQUEBRANTABLE EN LA CONFESIÓN DE TU
NOMBRE. POR JESUCRISTO NUESTRO SEÑOR.
31
A. TE ROGAMOS, SEÑOR.

M.
POR EL PAPA
OREMOS TAMBIÉN POR NUESTRO SANTO PADRE EL PAPA (se dice el nombre), PARA QUE DIOS, QUE
LO LLAMÓ AL ORDEN EPISCOPAL, LO ASISTA Y PROTEJA PARA BIEN DE LA IGLESIA COMO GUÍA
DEL PUEBLO SANTO DE DIOS. (Oración en silencio)

M.P.
DIOS TODOPODEROSO Y ETERNO, CUYA SABIDURÍA GOBIERNA TODAS LAS COSAS, ATIENDE
BONDADOSO NUESTRAS SÚPLICAS Y PROTEGE AL PAPA, PARA QUE EL PUEBLO CRISTIANO,
GOBERNADO POR TI BAJO EL CAYADO DEL SUMO PONTÍFICE, PROGRESE SIEMPRE EN LA FE.
POR JESUCRISTO NUESTRO SEÑOR.

A. TE ROGAMOS, SEÑOR.

M.
POR TODOS LOS MINISTROS Y POR LOS FIELES
OREMOS TAMBIÉN POR NUESTRO OBISPO (se dice el nombre), POR TODOS LOS OBISPOS,
PRESBÍTEROS Y DIÁCONOS, Y POR TODOS LOS MIEMBROS DEL PUEBLO SANTO DE DIOS .
(Oración en silencio)

M.P.
DIOS TODOPODEROSO Y ETERNO, CUYO ESPÍRITU SANTIFICA Y GOBIERNA TODO EL CUERPO
DE LA IGLESIA, ESCUCHA LAS SÚPLICAS QUE TE DIRIGIMOS POR TODOS SUS MINISTROS,
PARA QUE, CON LA AYUDA DE TU GRACIA, CADA UNO TE SIRVA FIELMENTE EN LA VOCACIÓN A
QUE LE HAS LLAMADO. POR JESUCRISTO NUESTRO SEÑOR.

A. TE ROGAMOS, SEÑOR.

M.
POR LOS CATECÚMENOS
OREMOS TAMBIÉN POR LOS CATECÚMENOS, PARA QUE DIOS NUESTRO SEÑOR LOS ILUMINE
INTERIORMENTE, LES ABRA CON AMOR LAS PUERTAS DE LA IGLESIA, Y ASÍ ENCUENTREN EN EL
BAUTISMO EL PERDÓN DE SUS PECADOS Y LA INCORPORACIÓN PLENA A CRISTO, NUESTRO
SEÑOR. (Oración en silencio)

M.P.
DIOS TODOPODEROSO Y ETERNO, QUE HACE FECUNDA A TU IGLESIA DÁNDOLE
CONSTANTEMENTE NUEVOS HIJOS, ACRECIENTA LA FE Y LA SABIDURÍA DE LOS
CATECÚMENOS, PARA QUE, AL RENACER EN LA FUENTE BAUTISMAL, SEAN CONTADOS ENTRE
LOS HIJOS DE ADOPCIÓN. POR JESUCRISTO NUESTRO SEÑOR.

A. TE ROGAMOS, SEÑOR.

M.
POR LA UNIDAD DE LOS CRISTIANOS
OREMOS TAMBIÉN POR TODOS AQUELLOS HERMANOS NUESTROS QUE CREEN EN CRISTO,
PARA QUE DIOS NUESTRO SEÑOR ASISTA Y CONGREGUE EN UNA SOLA IGLESIA A CUANTOS
VIVEN DE ACUERDO CON LA VERDAD QUE HAN CONOCIDO. (Oración en silencio)

M.P.
DIOS TODOPODEROSO Y ETERNO, QUE VAS REUNIENDO A TUS HIJOS DISPERSOS Y VELAS
POR LA UNIDAD YA LOGRADA, MIRA CON AMOR A TODA LA GREY QUE SIGUE A CRISTO, PARA

32
QUE LA INTEGRIDAD DE LA FE Y EL VÍNCULO DE LA CARIDAD CONGREGUE EN UNA SOLA
IGLESIA A LOS QUE CONSAGRÓ EN UN SOLO BAUTISMO. POR JESUCRISTO NUESTRO SEÑOR.

A. TE ROGAMOS, SEÑOR.

M.
POR LOS JUDÍOS
OREMOS TAMBIÉN POR EL PUEBLO JUDÍO, EL PRIMERO A QUIEN DIOS HABLÓ DESDE ANTIGUO
POR LOS PROFETAS, PARA QUE EL SEÑOR ACRECIENTE EN ELLOS EL AMOR DE SU NOMBRE Y
LA FIDELIDAD A LA ALIANZA QUE SELLÓ CON SUS PADRES. (Oración en silencio)

M.P.
DIOS TODOPODEROSO Y ETERNO, QUE CONFIASTE TUS PROMESAS A ABRAHAM Y SU
DESCENDENCIA, ESCUCHA CON PIEDAD LAS SÚPLICAS DE TU IGLESIA, PARA QUE EL PUEBLO
DE LA PRIMERA ALIANZA LLEGUE A CONSEGUIR EN PLENITUD LA REDENCIÓN. POR
JESUCRISTO NUESTRO SEÑOR.

A. TE ROGAMOS, SEÑOR.
M.
POR LOS QUE NO CREEN EN CRISTO
OREMOS POR LO QUE NO CREEN EN CRISTO, PARA QUE, ILUMINADO POR EL ESPÍRITU SANTO,
ENCUENTREN TAMBIÉN ELLOS EL CAMINO DE LA SALVACIÓN. (Oración en silencio)

M.P.
DIOS TODOPODEROSO Y ETERNO, CONCEDE A QUIENES NO CREEN EN CRISTO QUE, VIVIENDO
CON SINCERIDAD ANTE TI, LLEGUEN AL CONOCIMIENTO PLENO DE LA VERDAD, Y A NOSOTROS
CONCÉDENOS TAMBIÉN QUE, PROGRESANDO EN LA CARIDAD FRATERNA Y EN EL DESEO DE
CONOCERTE MÁS, SEAMOS ANTE EL MUNDO TESTIGOS MÁS CONVINCENTES DE TU AMOR.
POR JESUCRISTO NUESTRO SEÑOR.

A. TE ROGAMOS, SEÑOR.

M.
POR LOS QUE NO CREEN EN DIOS
OREMOS TAMBIÉN POR LOS QUE NO ADMITEN A DIOS, PARA QUE POR LA RECTITUD Y
SINCERIDAD DE SU VIDA ALCANCEN EL PREMIO DE LLEGAR A ÉL. (Oración en silencio)

M.P.
DIOS TODOPODEROSO Y ETERNO, QUE CREASTE A TODOS LOS HOMBRES PARA QUE TE
BUSQUEN Y, CUANDO TE ENCUENTREN, DESCANSEN EN TI, CONCÉDELES QUE, EN MEDIO DE
SUS DIFICULTADES, LOS SIGNOS DE TU AMOR Y EL TESTIMONIO DE LOS CREYENTES LES
LLEVEN AL GOZO DE RECONOCERTE COMO DIOS Y PADRE DE TODOS LOS HOMBRES. POR
NUESTRO SEÑOR JESUCRISTO

A. TE ROGAMOS, SEÑOR.

M.
POR LOS GOBERNANTES
OREMOS TAMBIÉN POR LOS GOBERNANTES DE LAS NACIONES, PARA QUE DIOS NUESTRO
SEÑOR, SEGÚN SUS DESIGNIOS, LES GUÍE EN SUS PENSAMIENTOS Y DECISIONES HACIA LA PAZ
Y LIBERTAD DE TODOS LOS HOMBRES. (Oración en silencio)

M.P.
DIOS TODOPODEROSO Y ETERNO, QUE TIENES EN TUS MANOS EL DESTINO DE TODOS LOS
HOMBRES Y LOS DERECHOS DE TODOS LOS PUEBLOS, ASISTE A LOS QUE GOBIERNAN, PARA
33
QUE, POR TU GRACIA, SE LOGRE EN TODAS LAS NACIONES LA PAZ, EL DESARROLLO Y LA
LIBERTAD RELIGIOSA DE TODOS LOS HOMBRES. POR JESUCRISTO NUESTRO SEÑOR.

A. TE ROGAMOS, SEÑOR.

M.
POR LOS ATRIBULADOS
OREMOS, HERMANOS, A DIOS PADRE TODOPODEROSO, POR TODOS LOS QUE EN EL MUNDO
SUFREN LAS CONSECUENCIAS DEL PECADO, PARA QUE CURE A LOS ENFERMOS, DÉ ALIMENTO
A LOS QUE PADECEN HAMBRE, LIBERE DE LA INJUSTICIA A LOS PERSEGUIDOS, REDIMA A LOS
ENCARCELADOS, CONCEDA VOLVER A CASA A LOS EMIGRANTES Y DESTERRADOS, PROTEJA A
LOS QUE VIAJAN Y DÉ SALVACIÓN A LOS MORIBUNDOS. (Oración en silencio)
M.P.
DIOS TODOPODEROSO Y ETERNO, CONSUELO DE LOS QUE LLORAN Y FUERZA DE LOS QUE
SUFREN, LLEGUEN HASTA TI LAS SÚPLICAS DE QUIENES TE INVOCAN EN SU TRIBULACIÓN,
PARA QUE SIENTAN EN SUS ADVERSIDADES LA AYUDA DE TU MISERICORDIA. POR
JESUCRISTO NUESTRO SEÑOR.

A. TE ROGAMOS, SEÑOR.

M.
POR LAS NECESIDADES DE LA COMUNIDAD LOCAL
OREMOS TAMBIÉN, HERMANOS, PARA QUE DIOS PADRE MISERICORDIOSO MIRE
BENIGNAMENTE A NUESTRA COMUNIDAD, NOS CONCEDA LOS BIENES ESPIRITUALES Y
MATERIALES QUE NECESITAMOS, Y PODAMOS ASÍ SERVIRLE CON MAYOR ALEGRÍA Y AMOR.
(Oración en silencio)

M.P.
DIOS TODOPODEROSO Y ETERNO, FUENTE INAGOTABLE DE TODOS LOS BIENES, ESCUCHA
BENIGNAMENTE LAS SÚPLICAS QUE TE PRESENTAMOS POR NUESTRA COMUNIDAD, PARA QUE
CONOZCAMOS EL INFINITO AMOR QUE NOS TIENES EN LAS GRACIAS QUE RECIBIMOS DE TU
GENEROSA BONDAD. POR JESUCRISTO NUESTRO SEÑOR.

A. TE ROGAMOS, SEÑOR.

M.
POR TODOS LOS PRESENTES
OREMOS TAMBIÉN, HERMANOS POR TODOS LOS QUE ESTAMOS REUNIDOS CELEBRANDO EL
MISTERIO DE LA PASIÓN GLORIOSA DEL SEÑOR, PARA QUE DIOS NUESTRO PADRE NOS
OTORGUE FORTALEZA EN LA FE, FIRMEZA EN LA ESPERANZA Y PERSEVERANCIA EN EL AMOR.
(Oración en silencio)

M.P.
DIOS TODOPODEROSO Y ETERNO, QUE NOS DISTE EN TU HIJO LA MEJOR PRUEBA DE TU
AMOR, Y LO ENVIASTE AL MUNDO PARA QUE, POR SU MUERTE Y RESURRECCIÓN, NOS
HICIERA PARTÍCIPES DE SU VIDA DIVINA, CONCÉDENOS QUE, UNIDOS A CRISTO POR EL
BAUTISMO, NO VIVAMOS YA PARA NOSOTROS MISMOS, SINO PARA AQUÉL QUE POR
NOSOTROS MURIÓ Y RESUCITÓ, MIENTRAS AGUARDAMOS LA DICHOSA ESPERANZA DE SU
VENIDA GLORIOSA. POR JESUCRISTO NUESTRO SEÑOR.

A. TE ROGAMOS, SEÑOR.

M.P.
PARA QUE EN ESTOS DIAS ESTEMOS MAS CERCA DE TI, Y ENTENDAMOS QUE NUESTRA
FELICIDAD ERES TU
34
A. TE ROGAMOS, SEÑOR.

M.P.
PARA NOS AYUDES A DEJAR NUESTROS VICIOS, EL ALCOHOL, LOS MALOS TRATOS A LA
MUJER, NUESTRO EGOISMO Y NUESTRAS CRÍTICAS HIRIENTES.

A. TE ROGAMOS, SEÑOR.

_____________________________________________________________________

Si se prefiere, puede usarse también el siguiente esquema más breve:


M.
LA ORACIÓN DE LOS FIELES QUE HACEMOS EN TODAS LAS CELEBRACIONES, TIENE HOY UNA
IMPORTANCIA ESPECIAL. PUESTO QUE, GRACIAS A LA MUERTE DE CRISTO, HA LLEGADO LA
SALVACIÓN PARA TODA LA HUMANIDAD, EN ESTE DÍA EN QUE CONMEMORAMOS DE MANERA
ESPECIAL ESTA MUERTE REDENTORA, PEDIMOS POR TODOS LOS HOMBRES CON GRAN
SOLEMNIDAD.

M.P.
HERMANOS: EL QUE NO PERDONÓ A SU PROPIO HIJO, SINO QUE LO ENTREGÓ POR
NOSOTROS, ¿NO NOS CONCEDERÁ CON ÉL TODA CLASE DE FAVORES? POR ESO, OREMOS
CONFIADAMENTE, CONVENCIDOS DE QUE NUESTRA SÚPLICA ESTÁ RESPALDADA POR LA
SANGRE PURIFICADORA DE CRISTO.

M.
OREMOS POR LA SANTA IGLESIA DE DIOS, A LA QUE PERTENECEMOS TODOS NOSOTROS.

M.P.
PARA QUE LA IGLESIA, NACIDA DEL COSTADO ABIERTO DE JESÚS, SEA SIEMPRE FIEL A SU
ESPÍRITU.

A. ESCUCHA, SEÑOR, EL CLAMOR DE TU PUEBLO.

M.
OREMOS POR EL PAPA, NUESTRO(S) OBISPO(S), POR TODOS LOS PRESBÍTEROS Y DIÁCONOS,
POR TODOS LOS MINISTROS DE LA IGLESIA Y POR TODO EL PUEBLO SANTO DE DIOS.

M.P.
PARA QUE LOS PASTORES DEL PUEBLO CRISTIANO SIRVAN GENEROSAMENTE A TODOS SUS
HERMANOS.

A. ESCUCHA, SEÑOR, EL CLAMOR DE TU PUEBLO.

M.
OREMOS POR LOS MIEMBROS DEL PUEBLO JUDÍO Y POR TODOS LOS QUE NO CREEN EN
CRISTO.

M.P.
PARA QUE TODOS LOS HOMBRES RECONOZCAN QUE DIOS QUIERE SALVARNOS POR MEDIO
DE JESÚS.

A. ESCUCHA, SEÑOR, EL CLAMOR DE TU PUEBLO.

M.
35
OREMOS POR NUESTRA PATRIA, POR SUS GOBERNANTES Y POR TODOS LOS PUEBLOS DE LA
TIERRA.

M.P.
PARA QUE TODAS LAS NACIONES DEL MUNDO GOCEN DE PAZ, Y ALCANCEN UN DESARROLLO
INTEGRAL EN JUSTICIA Y LIBERTAD PARA TODOS SUS MIEMBROS.

A. ESCUCHA, SEÑOR, EL CLAMOR DE TU PUEBLO.

M.
OREMOS POR LOS ENFERMOS, LOS HUÉRFANOS Y TODOS LOS QUE SUFREN EN EL CUERPO Y
EL ESPÍRITU.
M.P.
PARA QUE EXPERIMENTEN PAZ Y CONSUELO, GRACIAS A LA ESPERANZA CRISTIANA Y A
NUESTRA CARIDAD FRATERNA.

A. ESCUCHA, SEÑOR, EL CLAMOR DE TU PUEBLO.

M.P.
QUE ESTA SÚPLICA UNIVERSAL LLEGUE HASTA TI, DIOS Y PADRE DE TODOS LOS HOMBRES.
POR JESUCRISTO, NUESTRO SEÑOR

A. AMÉN.

Terminada la oración de los fieles se pasa a la adoración de la Cruz.

TERCERA PARTE
5.- ADORACIÓN DE LA SANTA CRUZ
Lo que se necesita:

1. Una Cruz cubierta con una tela morada. Puede ir adornada la Cruz con flores.
2. Dos cirios o candelas.
3. Dos cestos para recoger las limosnas que se dan para el mantenimiento de los Santos
Lugares (el dinero se entregará al párroco).
4. El manual del misionero día a día.

Quiénes la realizan:

1. El ministro de la Palabra.
2. Quien entrega la cruz al ministro de la Palabra.
3. Quienes llevan los cirios o candelas.
4. La comunidad o asamblea reunida.

Cantos a preparar:

1. Perdona a tu pueblo, Señor.


2. Perdón, ¡Oh, Dios mío!.

Cómo realizarla:

Se lleva al altar la Cruz, cubierta con un velo y acompañada por los dos cirios o candelas.
36
M.
HERMANOS; DIOS ELIGIÓ LA CRUZ PARA QUE SU HIJO SE SACRIFICARA EN ELLA POR NUESTRA
SALVACIÓN. LA CRUZ DESNUDA, CON SU BRAZOS EXTENDIDOS, ES EL SÍMBOLO DE CRISTO QUE
ENTREGÓ SU VIDA CON AMOR SIN LÍMITES. POR ESO ES LA SEÑAL DE LA VICTORIA, DE LA
SALVACIÓN Y DEL AMOR DE DIOS POR NOSOTROS.
VAMOS A RESPONDER A ESTE AMOR, HACIENDO NUESTRO EL LLAMAMIENTO DE JESUCRISTO, A
TOMAR NUESTRA CRUZ CADA DÍA, MIENTRAS DOBLAMOS NUESTRAS RODILLAS PARA VENERAR
LA CRUZ Y, A TRAVÉS DE ESTE SIGNO, ADORAR A AQUÉL QUE, SIENDO EL SEÑOR Y EL
MAESTRO, NOS DIO EL EJEMPLO A SEGUIR.

El ministro de la Palabra la recibe, descubre un poco el extremo superior, la eleva y dice:


M.P.
ÉSTE ES EL ÁRBOL DE LA CRUZ DONDE ESTUVO CLAVADO CRISTO EL SALVADOR DEL
MUNDO.

La asamblea responde:

A.
VENID Y ADOREMOS.

Terminada la respuesta todos se arrodillan y adoran en silencio por unos momentos la cruz.
Se ponen de pie y el ministro de la Palabra descubre el brazo derecho y vuelve a decir:

M.P.
ÉSTE ES EL ÁRBOL DE LA CRUZ DONDE ESTUVO CLAVADO CRISTO EL SALVADOR DEL
MUNDO.

A.
VENID Y ADOREMOS.

Se vuelven a poner de rodillas, adoran en silencio por unos momentos la Cruz, se ponen de
pie, el ministro de la Palabra descubre por completo la Cruz y repite por tercera vez:

M.P.
ÉSTE EL ÁRBOL DE LA CRUZ DONDE ESTUVO CLAVADO CRISTO EL SALVADOR DEL MUNDO.

A.
VENID Y ADOREMOS.

Se vuelven a arrodillar como en los momentos anteriores. Poniéndose de pie, pasan uno a
uno a besar la cruz y a depositar su limosna en los cestos que deben estar a los lados, junto
con los cirios o candelas.

Mientras se hace la adoración se canta: PERDONA A TU PUEBLO SEÑOR y PERDÓN, ¡OH


DIOS MÍO!

Se hace la lectura de los IMPROPERIOS. y se puede continuar con la siguiente lectura.

DIOS SE QUEJA DEL PECADO.

TODOS: Pueblo mío ¿qué mal te he hecho o en que te he ofendido?


Respóndeme.

37
M.P. Les di a mi Hijo para que lo escucharan y ustedes no han cambiado su
manera de vivir.

TODOS: Pueblo mío ¿qué mal te he hecho o en que te he ofendido?


Respóndeme.

M.P. Les di recursos naturales, terrenos, cerros, agua, para que vivieran.
como hermanos y ustedes los han empleado para la división y el pleito.

TODOS: Pueblo mío ¿qué mal te he hecho o en que te he ofendido?


Respóndeme.

M.P. Yo les di la tierra para que la trabajaran y no les faltara la comida y ahora
unos pocos han acaparado las tierras mientras que muchos no tienen
que comer.

TODOS: Pueblo mío ¿qué mal te he hecho o en que te he ofendido?


Respóndeme.

M.P. Les di capacidad de gobernar y guiar a mi pueblo y ustedes han abusado


de su autoridad para empobrecer a mi pueblo.

TODOS: Pueblo mío ¿qué mal te he hecho o en que te he ofendido?


Respóndeme.

M.P. Hice al hombre y a la mujer para que se ayudaran y se respetaran, y


ustedes han pisoteado sus derechos.

TODOS: Pueblo mío ¿qué mal te he hecho o en que te he ofendido?


Respóndeme.

LETANÍA DE LA CRUZ

M.P. LA CRUZ DE CRISTO ES UN MISTERIO DE LA SABIDURÍA SALVADORA DE DIOS, QUE QUISO


CONVERTIR Y CAMBIAR LA MUERTE EN VIDA. POR ESO, DIGAMOS DESPUÉS DE CADA
ACLAMACIÓN: ¡TRANSFORMAMOS!

 Cruz de pecado, convertida en Cruz de gracia. R: ¡TRANSFÓRMANOS!


 Cruz de ignominia, convertida en Cruz de gloria. R: ¡TRANSFÓRMANOS!
 Cruz de muerte, convertida en Cruz de vida. R:
 Cruz de condena, convertida en Cruz de perdón y justificación. R:
 Cruz de perdición, convertida en Cruz de salvación. R:
 Cruz de locura y escándalo, convertida en Cruz de sabiduría. R:
 Cruz de derrota, convertida en Cruz de victoria. R:
 Cruz de maldición, convertida en Cruz de bendición. R:
 Cruz de odio, convertida en Cruz de amor. R:
 Cruz de sufrimiento, convertida en Cruz de gozo y felicidad. R:
 Cruz de debilidad, convertida en Cruz de fortaleza. R:
 Cruz de impotencia del hombre, convertida en Cruz de la Omnipotencia de Dios . R:
 Cruz de división, convertida en Cruz de reconciliación. R:
 Cruz de esclavitud, convertida en Cruz de libertad y señorío. R:
 Cruz de guerra, convertida en Cruz de paz. R:
 Cruz de humillación, convertida en Cruz de exaltación. R:
 Cruz de miseria, convertida en Cruz de grandeza. R:
38
 Cruz del hombre viejo, convertida en Cruz del hombre nuevo. R:
 Cruz de desesperación, convertida en Cruz de esperanza. R:
 Cruz de incredulidad, convertida en Cruz de fe. R:
 Cruz de ruina, convertida en Cruz de plenitud. R:
 Cruz de maldad, convertida en Cruz de bondad. R:
 Cruz de soledad, convertida en Cruz de comunión y solidaridad. R:
 Cruz de veneno, convertida en Cruz de medicina y salud. R:
 Cruz de traición, convertida en Cruz de fidelidad. R:
 Cruz de tinieblas, convertida en Cruz de luz. R:
 Cruz del hombre deshumanizado, convertida en Cruz de Dios humanizado. R:
 Cruz de castigo, convertida en Cruz de premio eterno. R:

M.P: Señor Jesús, que te abrazaste al madero de la cruz y te hiciste uno con ella, atrae
nuestro corazón hacia Ti y danos fuerza para llevar nuestra cruz de cada día.
Amén.

CUARTA PARTE
6.- DISTRIBUCIÓN DE LA SAGRADA COMUNIÓN.
(Este rito se realizará solamente donde se tenga la reserva del Santísimo Sacramento, sino
pasar al rito de la paz)

Lo que se necesita para la Celebración:

1. El Altar dignamente vestido, con sus velas y, de ser posible, que esté decorado con flores.
2. El manual “día a día del misionero”.

Quiénes la realizan:

1. El ministro extraordinario de la Eucaristía.


2. La comunidad o asamblea reunida.

Cantos a preparar:

1. Un mandamiento nuevo.
2. Altísimo Señor.

Cómo realizarla:

Una vez terminada la adoración de la Cruz, se viste el altar, permaneciendo los cirios o
candelas encendidas, el ministro extraordinario de la Eucaristía se acerca al lugar donde está
reservado el Santísimo Sacramento, toma el copón, lo deposita sobre el altar, hace
genuflexión e invita a recitar el Padre Nuestro con las siguientes palabras:

M.
LA COMUNIÓN DE ESTA TARDE NO ES LA COMIDA DE UN BANQUETE FESTIVO, ES, MÁS BIEN, EN
TODO EL SENTIDO DE PALABRA, EL MEDIO DE ENTRAR EN “COMÚN-UNIÓN”, UNIÓN DE TODOS Y
CADA UNO…, ÍNTIMA, PERSONAL, SILENCIOSA, AGRADECIDA…, CON EL QUE EN LA CRUZ SE
ENTREGÓ POR NOSOTROS Y SIGUE ENTREGÁNDOSE EN LA EUCARISTÍA COMO VIDA DEL
MUNDO.

M.P.

39
PORQUE SABEMOS QUE POR LA MUERTE Y RESURRECCIÓN DEL SEÑOR HEMOS CONSEGUIDO
SER HIJOS DE DIOS, DIGAMOS AL PADRE:

M.E.
PADRE NUESTRO, QUE ESTÁS EN EL CIELO,

A.
SANTIFICADO SEA TU NOMBRE; VENGA A NOSOTROS TU REINO; HÁGASE SEÑOR TU
VOLUNTAD EN LA TIERRA COMO EN EL CIELO. DANOS HOY NUESTRO PAN DE CADA DÍA; Y
PERDONA NUESTRAS OFENSAS, COMO TAMBIÉN NOSOTROS PERDONAMOS A LOS QUE NOS
OFENDEN; NO NOS DEJES CAER EN LA TENTACIÓN, Y LÍBRANOS DEL MAL.

Terminada la oración del Padre Nuestro, se invita a la asamblea a unirse todos las manos y a
darse la paz con las siguientes palabras:

M.P.
EN CRISTO, QUE NOS HA HECHO HERMANOS EN SU CRUZ, DÉMONOS LA PAZ COMO SIGNO DE
LA REDENCIÓN REALIZADA EN EL AMOR.

Todos levantan las manos en señal de paz y posteriormente se entona el canto:

HAZME UN INSTRUMENTO DE TU PAZ.

Nunca cantar o decir el "Cordero de Dios".

Terminando el canto de paz, el Ministro Extraordinario de la Eucaristía hace genuflexión,


toma la hostia y, sosteniéndola un poco elevándola sobre el copón, vuelto hacia el pueblo
dice:

M.E.
ESTE ES EL CORDERO DE DIOS QUE QUITA EL PECADO DEL MUNDO, DICHOSOS LOS
INVITADOS A LA CENA DEL SEÑOR.

La asamblea responde:

A.
SEÑOR, NO SOY DIGNO DE QUE ENTRES EN MI CASA, PERO UNA PALABRA TUYA BASTARÁ
PARA SANARME.

El ministro extraordinario de la Eucaristía comulga diciendo en secreto: "Que el cuerpo de


Cristo me guarde para la vida eterna".

Inmediatamente después, toma el copón, se acerca a los que van a comulgar, presenta a
cada uno la hostia elevándola un poco y diciendo:

M.E. EL CUERPO DE CRISTO.

El que va a comulgar responde "AMÉN" y recibe la hostia. Mientras el ministro de la


Eucaristía da la Comunión, se entonan los siguientes cantos: UN MANDAMIENTO NUEVO y
ALTÍSIMO SEÑOR.

Terminada la Comunión, el ministro extraordinario de la Eucaristía reserva el Santísimo


Sacramento y hace genuflexión.

40
Se guarda un momento de silencio y dice la siguiente oración teniendo las manos juntas:

M.E.
DIOS DE PODER Y DE BONDAD, QUE POR MEDIO DE LA MUERTE Y RESURRECCIÓN DE
JESUCRISTO NOS REDIMISTE A TODOS, PROSIGUE EN NOSOTROS LA OBRA DE TU AMOR, A FIN
DE QUE EL RECUERDO CONSTANTE DE NUESTRA SALVACIÓN, NOS IMPULSE A CONSEGUIR
PLENAMENTE SUS FRUTOS, POR CRISTO NUESTRO SEÑOR.

La asamblea responde: AMÉN.

QUINTA PARTE
RITO DE PAZ

(ESTE RITO SE REALIZARÁ EN DONDE NO SE DÉ LA COMUNIÓN).

Lo que se necesita:

1. El manual del misionero día a día.

Quiénes lo realizan:

1. El ministro de la Palabra.
2. La comunidad o asamblea reunida.

Cómo realizarlo:

Una vez que se ha terminado la adoración de la cruz el ministro de la Palabra invita a la


asamblea a darse la paz tomándose de las manos y diciendo las siguientes palabras:

M.P.
EN CRISTO, QUE NOS HA HECHO HERMANOS EN SU CRUZ, DÉMONOS LA PAZ COMO SIGNO DE
LA REDENCIÓN REALIZADA EN EL AMOR.

Todos levantan las manos en señal de paz y posteriormente se entona el canto: HAZME UN
INSTRUMENTO DE TU PAZ.

Nunca cantar o decir el "Cordero de Dios".

Terminando el canto de paz, el ministro de la Palabra invita a la asamblea a recitar el Padre


nuestro con las siguientes palabras:

M.P.
PORQUE SABEMOS QUE POR LA MUERTE Y RESURRECCIÓN DEL SEÑOR HEMOS CONSEGUIDO
SER HIJOS DE DIOS, DIGAMOS AL PADRE....

M.E. PADRE NUESTRO, QUE ESTÁS EN EL CIELO,

A.
SANTIFICADO SEA TU NOMBRE; VENGA A NOSOTROS TU REINO; HÁGASE SEÑOR TU
VOLUNTAD EN LA TIERRA COMO EN EL CIELO. DANOS HOY NUESTRO PAN DE CADA DÍA; Y
PERDONA NUESTRAS OFENSAS, COMO TAMBIÉN NOSOTROS PERDONAMOS A LOS QUE NOS
OFENDEN; NO NOS DEJES CAER EN LA TENTACIÓN, Y LÍBRANOS DEL MAL.

41
7.- RITO DE DESPEDIDA
Terminada la distribución de la Sagrada Comunión o del rito de paz en su caso, después de
un espacio de silencio sagrado, el que preside dice, con las manos juntas, la siguiente
oración:

M.P.
DIOS TODOPODEROSO, RICO EN MISERICORDIA, QUE NOS HAS RENOVADO CON LA GLORIOSA
MUERTE Y RESURRECCIÓN DE JESUCRISTO, NO DEJES DE TU MANO LA OBRA QUE HAS
COMENZADO EN NOSOTROS, PARA QUE NUESTRA VIDA, POR LA COMUNIÓN EN ESTE
MISTERIO, SE ENTREGUE CON VERDAD A TU SERVICIO. POR JESUCRISTO NUESTRO SEÑOR.
A.
AMÉN.

EN ESTE MOMENTO, ANTES DE DESPEDIR A LA ASAMBLEA, EL GUÍA O EL PRESIDENTE PUEDEN DAR


LOS AVISOS DE INTERÉS PARA LA COMUNIDAD, SOBRE TODO INVITANDO A PARTICIPAR CON MUCHA
ALEGRÍA EN LA CELEBRACIÓN DE LA FIESTA DE PASCUA, YA SEA EN LA SOLEMNE VIGILIA PASCUAL
EN LA NOCHE DE MAÑANA SÁBADO, O BIEN, EN LA ASAMBLEA EL DOMINGO DE RESURRECCIÓN.

FINALMENTE, EL QUE PRESIDE, CON LAS MANOS JUNTAS, IMPLORA LA BENDICIÓN DE DIOS SOBRE
ÉL Y TODOS LOS PRESENTES.

M.P.
QUE TU BENDICIÓN, SEÑOR, DESCIENDA CON ABUNDANCIA SOBRE ESTE PUEBLO QUE HA
CELEBRADO LA MUERTE DE TU HIJO CON LA ESPERANZA DE SU SANTA RESURRECCIÓN; QUE
VENGA SOBRE ÉL TU PERDÓN, CONCÉDELE TU CONSUELO, ACRECIENTA SU FE, Y CONSOLIDA
EN ÉL LA REDENCIÓN ETERNA. POR JESUCRISTO NUESTRO SEÑOR.

A.
AMÉN.

Terminada la oración todos se retiran en silencio, a no ser que en este momento continúe el
rito de la veneración de la cruz. concluida toda celebración se quita el mantel del altar, y se
deja solamente cobre él la cruz que se utilizó en la veneración.

Se hace hincapié en el hecho de conservar el resto del día y de la noche el espíritu de


recogimiento logrado en la celebración.

Después que se han retirado todos se desnuda nuevamente el altar.

42
CATEQUESIS PARA EL VIERNES SANTO

PLÁTICA (en la iglesia o en el retiro)

A continuación vienen algunos elementos que nos pueden servir para animar, la adoración
de la cruz, la hora santa familiar, o en el retiro.

REFLEXIONES SOBRE EL AYUNO Y ABSTINENCIA

La Iglesia pide ayunar en viernes santo y a ser posible “prolongar durante el sábado
santo este ayuno", Por esta razón vamos a reflexionar sobre el ayuno y su significado.

EL AYUNO EN LA BIBLIA

Ayuno es la abstinencia parcial o total de alimentos durante el día. Incluso la abstinencia


de relaciones sexuales.

La ley mosaica conocía el ayuno de la fiesta de la expiación,, pero es en tiempos de


Samuel cuando el ayuno adopta un cariz de acto penitencial. En la muerte de Saúl la
gente ayunó durante siete días consecutivos. Después de la cautividad el ayuno
subraya oficialmente el aniversario de las calamidades de Israel.

El profeta Jeremías 14,12, encuadra el ayuno en la ley de la caridad: ... bien practicado,
puede ser fuente de luz y de justicia.

El fariseo del evangelio ayuna dos veces por semana, según la tradición.

Los discípulos de Juan Bautista hacen otro tanto.

Jesús admite el ayuno, pero le da su valor de preparación y debe hacerse con


simplicidad y humildad (Mt 6,16). El se preparó con cuarenta días. La Iglesia primitiva
adoptó la costumbre judía. En Antioquía se ayuna antes de enviar a Bernabé y Saulo en
misión (Hch 13,3). Estos hacen lo mismo con ocasión de organizar las primeras
comunidades cristianas.

El ayuno que me agrada (Dios) (Isaías 58,6)

“¿No sabéis cuál es el ayuno que me agrada?


Abrir las prisiones injustas,
soltar las coyundas del yugo,
dejar libres a los oprimidos,
romper todas las ataduras;
repartir tu pan con el hambriento,
hospedar a los pobres sin techo
vestir al que ves desnudo y
no volver tu rostro ante tu hermano".

EL AYUNO QUE LA IGLESIA PIDE

El ayuno y la abstinencia deben tener para el cristiano una orientación fundamental a


la caridad fraterna.

43
El ayuno y la abstinencia son también para el cristiano un acto de obsequio y de culto
a Dios, ya que permite cumplir el deber de la abstinencia con obras de culto: a condición de
que en ellas se evidencie nuestra sumisión a Dios.

Un significado, quizás el más global e interior del ayuno y la abstinencia, juntamente


con otras obras penitenciales, es el de ser para los creyentes y para toda la comunidad, a la
vez que un acto de conversión, un acto de esperanza. Se nos invita a despreciar las cosas
terrenales y amar las del reino.

"La limosna y el ayuno son dos medios estrechamente ligados entre sí. El ayuno
significa un dominio sobre nosotros mismos. Significa ser exigentes en las relaciones con
nosotros mismos: estar prontos a renunciar a las cosas: no solo a los manjares, sino
también a los goces y placeres diversos.

Y la limosna significa la prontitud a compartir con los otros alegrías y tristezas, a dar al
prójimo, en particular al necesitado, a repartir no solo los bienes materiales sino también los
dones del espíritu: abrirse a los demás, sentir sus necesidades, sufrimientos, infortunios y
buscar los medios para adelantarnos a sus necesidades.

Así pues, el dirigirse a Dios mediante la oración va unido con el dirigirse al hombre.
Siendo exigentes con nosotros mismos y generosos con los otros, manifestamos nuestra
conversión de modo concreto y al mismo tiempo social y nos unimos a Cristo paciente y
resucitado" (Juan Pablo 11).

EL AYUNO QUE DIOS QUIERE

 Que no hagas gastos superfluos.


 Que ayudes a los pobres.
 Que prefieras pasar tú necesidades antes de que las pase tu hermano.
 Que ofrezcas tu tiempo al que te lo pida, que lo ayudes.
 Que prefieras servir a ser servido.
 Que tengas hambre y sed de justicia.
 Que no des pretextos cuando te piden ayuda.
 Que veas en todo hombre y mujer a un hermano, a una hermana.
 Que veas en el pobre y en todo hombre que sufre la imagen de Cristo.
 Que luches cada día para que salga adelante tu comunidad.
 Que eduques a tus hijos, que les des buen ejemplo.
 Que dejes al aguardiente y alimentes mejor a tus hijos.
 Que apoyes, ayudes a tu esposa, que no la maltrates.

La abstinencia que agrada a Dios

 Que no seas esclavo del consumo de alcohol, de los juegos, del orgullo, de la
vanidad.
 Que te abstengas de tanta televisión, novelas, películas y videos.
 Que te abstengas de levantar falsos, chismes y murmuraciones a la gente del
pueblo
 Que frecuentes menos las cosas que no te permiten estar con tus hijos.
 Que te abstengas de golpear a los hijos y a la esposa.
 Que no seas esclavo ni del sexo, ni de la pasión, ni de nada que te esclavice y
despersonalice.
 Que te abstengas del odio, de la violencia y de obrar la injusticia.
 Que respetes a Dios, a las criaturas, al medio ambiente y todo ser vivo.
44
 Que te abstengas de toda palabra grosera, ociosa y necia.
 "Lo esencial de nuestro ayuno no consiste en la mera abstención de alimentos.
 No es de ningún provecho el sustraer alimentos al cuerpo, si el corazón no se
libera de la injusticia.
 Lo que cada uno sustrae a sus placeres que lo emplee en favor de los pobres e
indigentes" (S. León Magno).

SÚPLICAS Y ACLAMACIONES (a manera de oración)

1.- NO HAY MEJOR AMIGO QUE EL QUE DA LA VIDA POR SUS AMIGOS, NOS DIJO
EL MISMO JESUS, POR ESO DIGÁMOSLE CON TODO ÉL
CORAZON: TÚ ERES NUESTRO MEJOR AMIGO

Todos: Tú eres nuestro mejor amigo.

M.P.
 Jesús, porque diste la vida por nosotros.
 Jesús, porque nos contaste todos los secretos de tu Padre.
 Jesús, porque sufriste en lugar nuestro.
 Jesús, porque te hiciste nuestro servidor.
 Jesús porque por nosotros no tuviste miedo a cargar la cruz.

2 JESÚS DIJO QUE SI LA SEMILLA NO MUERE, NO DA FRUTO, PERO SI MUERE


SU FRUTO SERÁ ABUNDANTE. JESÚS ES ESA SEMILLA QUE ENTERRADA DIO
ABUNDANTE FRUTO; POR ESO ACLAMÉMOSLO CON TODO NUESTRO SER
DICIENDO: TÚ ERES LA SEMILLA QUE MURIENDO DIO FRUTO.

Todos: Tú eres la semilla que muriendo dio fruto.

M.P.
 De Ti brotó la Iglesia fuente de salvación para el mundo entero.
 De Ti surgió el manantial de agua viva que da la vida eterna.
 De Ti nacieron incontables multitudes de mártires que testimoniaron su fe en el
único y verdadero Dios.
 De Ti nacieron incansables luchadores de la verdad, de la paz y de la justicia en
el mundo.
 De Ti brota toda la fe, toda esperanza y todo amor.

3 COMO JESÚS, EL SIERVO DE DIOS, QUE ENDURECIÓ SU ROSTRO ANTE EL


DOLOR Y NO SE ECHÓ PARA ATRÁS (Is 50,5-7) ANTE EL SUFRIMIENTO Y LA
MUERTE POR SALVAR A SU PUEBLO Y CUMPLIR ASÍ LA VOLUNTAD DE DIOS,
ASÍ NOSOTROS SIGUIENDO A JESÚS, DIGAMOS: NO ME ECHARÉ PARA
ATRÁS, SEÑOR.

Todos: No me echaré para atrás, Señor.

M.P.
 Aunque amar al prójimo me lleve a tener que ser servidor de los demás.
 Aunque amar a mi prójimo me lleve a tener que estudiar y prepararme en la vida
día a día.
 Aunque amar a mi prójimo me lleve a tener que compartir con los demás mis
bienes.
45
 Aunque amar a mi prójimo me lleve a tener que soportar burlas, desprecios y
críticas.
 Aunque amar a mí prójimo me lleve a peligros políticos y riesgos económicos.
 Aunque amar a mi prójimo me lleve a desvelos y a arriesgar mi propia vida.

4 MIS PENSAMIENTOS NO SON LOS PENSAMIENTOS DE USTEDES, DICE DIOS


EN LA BIBLIA, POR ESO COMO JESUS EN LA ORACION DEL HUERTO
DIGÁMOSLE A DIOS: SEÑOR .QUE SE HAGA TU VOLUNTAD Y NO LA MIA.

Todos: Señor, que se haga tu voluntad y no la mía.

M.P.
 Señor, Tú quieres convertir a los demás ganándoles el corazón con el amor, pero
nosotros queremos la fuerza y la violencia.
 Señor, Tú quieres que nos salvemos unos a otros pero nosotros quisiéramos
salvarnos solos sin tener necesidad de los demás,
 Señor, nosotros quisiéramos un mundo sin dolor y sin trabajo, pero Tú quieres
nuestro esfuerzo y paciencia.
 Señor, nosotros quisiéramos un mundo sin vicios y sin injusticias aunque todos
fueran máquinas, pero Tú quieres siempre respetar la libertad del ser humano.
 Señor, nosotros quisiéramos una familia y una sociedad toda sin problemas y
donde todo se nos dé, pero Tú quieres siempre nuestra colaboración y
participación.

5 JESÚS DIJO: EL QUE QUIERA SER MI DISCÍPULO QUE TOME SU CRUZ DE


CADA DÍA Y QUE ME SIGA, POR ESO DIGÁMOSLE DE CORAZÓN: SEÑOR.,
QUIERO SEGUIRTE CON MI CRUZ DE CADA DÍA

Todos: Señor, quiero seguirte con mi cruz de cada día.

M.P.
 Te ofrezco los esfuerzos diarios por corregirme y levantarme de mis defectos.
 Te ofrezco el que hacer de cada día para tener orden y limpieza en mi casa y en
mi vida.
 Te ofrezco el trabajo de cada día para poder merecer la comida.
 Te ofrezco el tener que soportar todos los días los defectos de los demás.
 Te ofrezco el tener que renovar a diario mis propósitos de amarte y servirte en
mis hermanos.

6 AL OÍR EL LLAMADO DE DIOS A LA CONVERSIÓN, DIGÁMOSLE A JESÚS:


CONVIÉRTENOS, SEÑOR, CON LA FUERZA DE TU CRUZ.

Todos: Conviértenos, Señor, con la fuerza de tu Cruz.

M.P.
 Jesús dijo: cuando sea yo levantado en alto, atraeré a todos hacía mí (Jn 12,32).
Por eso digámosle...
 El Señor dice: que el malvado abandone su camino y que regrese al Señor que
es rico en perdón (ls 55,7). Por eso digámosle...
 El Señor dice: que el criminal deje sus planes y que regrese el pecador al Señor,
pues él tendrá piedad (ls 55,7). Por eso digámosle...
 El Señor dice: vuélvanse a MÍ, hijos rebeldes; no les pondré mala cara, porque
soy compasivo y no me enojo para siempre Por eso digámosle...

46
 El Señor dice: acérquense a Dios y El se acercará a ustedes. Humíllense en la
presencia de Dios y él los levantará (Sar7t. 4. 8a, 10). Por eso digámosle...
 El Señor dice: pecadores, purifíquense las manos, y gente que actúa con doblez,
limpien sus corazones (Sant 4,8b). Por eso digámosle...
 El Señor dice: Dios resiste a los soberbios y da su gracia a los humildes (Sant
4,6s), Por eso digámosle...
 El Señor dice: dejen de hacer el mal, aprendan a hacer el bien. Entonces, aunque
sus pecados sean rojos como la púrpura, quedarán blancos como la nieve (Is 1,
16s). Por eso digámosle...
 El Señor dice: busquen lo que es justo, hagan justicia al oprimido,, defiendan al
indefenso, protejan al que no tiene protector. Entonces aunque sus pecados sean
negros como el carbón quedarán blancos como la lana (ls 1, 16-18). Por eso
digámosle...
 El Señor dice: hombres todos, conviértanse de sus delitos, estrenen un corazón
nuevo y un espíritu nuevo (Ez 18, 30b-3 l). Por eso digámosle...
 El Señor dice: hoy es el tiempo de la misericordia, hoy es el día de la salvación,
no dejen pasar en vano la gracia de Dios (2 Cor 6, 1 4a), Por eso digámosle...

7 HERMANOS: LA PALABRA DE DIOS NOS DICE QUE TENEMOS EN CRISTO,


QUE SUFRIÓ Y MURIÓ POR NOSOTROS, UN SACERDOTE CAPAZ DE
COMPADECERSE DE NOSOTROS, Y QUE POR ESO. DEBEMOS
ACERCARNOS A LOS LLENOS DE CONFIANZA PARA ALCANZAR
MISERICORDIA Y OBTENER LA GRACIA DE UNA AYUDA OPORTUNA (Heb 4,
16). DIGÁMOSLE PUES A CRISTO JESÚS: JESUS, TÚ ERES NUESTRO UNICO
Y ETERNO SACERD0TE"

Todos: Jesús, Tú eres nuestro único y eterno Sacerdote

M.P.
 En la Eucaristía diste al mundo el sentido de tu muerte diciendo que era para el
perdón de nuestros pecados (Mt 26,28).
 En el altar de la cruz no ofreciste el sacrificio de cosas y animales, sino que dijiste
"aquí estoy yo para hacer tu Voluntad" (Heb 10,6-7)
 En el santuario del cielo estás interviniendo constantemente por nosotros ante
Dios (Heb 8,11-12),
 Una vez sacrificado, tu sacrificio dura para siempre, y resucitado ya no puedes
volver a morir jamás (Rom 6,9).
 Tú eres nuestro Sumo Pontífice, el único puente que une al cielo con la tierra
(Heb 4,16).
 Tú eres a un tiempo sacerdote, víctima y altar.
 Tu sacrificio no se repite (Heb 10, 10- 14), tu sacrificio se hace presente.

8 SAN PABLO DECÍA: "YO NO QUIERO PREDICAR SINO A CRISTO Y A CRISTO


CRUCIFICADO” (COR 1, 23). “LÍBREME DIOS DE GLORIARME EN OTRA
COSA, SINO ES EN LA CRUZ DE NUESTRO SEÑOR JESUCRISTO"(GAL 6,14),
POR ESO DIGÁMOSLE TAMBIEN NOSOTROS A JESÚS: "NUESTRA GLORIA .
SEÑOR, ES TU CRUZ

Todos: Nuestra gloria, Señor, es tu Cruz.

M.P.
 Para muchos sabios y poderosos es una locura pensar en un Dios a quien el
hombre pudo crucificar, pero para nosotros allí está la fuerza y la sabiduría del
amor de Dios.
47
 En la cruz la aparente debilidad de Dios, se convirtió en fuerza que cautivó la
libertad del hombre.
 En la cruz la aparente tontería de Dios, fue desborde de astucia para seducir el
corazón del hombre.
 En la cruz lo que era desnudez y pobreza máxima se convirtió en plenitud de vida
y en derroche de amor.
 En la cruz lo que era castigo y maldición se convirtió en perdón y gracia.
 En la cruz la muerte se convirtió en vida y la obediencia en libertad.

9 HOY, VIERNES SANTO, NO ESTAMOS CELEBRANDO A UN MUERTO,


ESTAMOS CELEBRANDO LA MUERTE DE AQUEL QUE PARA RESUCITAR
TUVO QUE PASAR POR ELLA. HOY CELEBRAMOS LA PASION Y LA MUERTE
DEL SEÑOR JESUS, PERO VIÉNDOLAS DESDE LA RESURRECCION, COMO
UN TRIUNFO DEL AMOR Y DE LA VIDA. POR ESO DIGAMOS DESPUES DE
CADA FRASE: ¡GRACIAS, SENOR JESÚS!"

Todos: ¡Gracias, Señor Jesús!

M.P.
 Tu oración en el Huerto, a la luz de la resurrección, calma nuestras angustias y
preocupaciones.
 Tu flagelación en la columna, a la luz de la resurrección, da nuevos ánimos a
nuestro cuerpo enfermo.
 Tu coronación de espinas, a la luz de la resurrección, nos ayuda a vencer los
pensamientos tristes,
 Tu subida al Calvario con la cruz a cuestas es, a la luz de la resurrección, fuente
de perseverancia que nos impulsa a llegar a la meta.
 Tu crucifixión, a la luz de la resurrección, nos abre caminos de libertad,
 Tu muerte, a la luz de la resurrección, nos hace vencer el miedo a la muerte.
 Tu desnudez, a la luz de la resurrección, nos hace vencer nuestras obsesiones
sexuales.
 Tu soledad, a la luz de la resurrección, se vuelve para nosotros compañía.
 El sentirte abandonado por Dios se transforma, a la luz de la resurrección, en
prueba esperanzadora para nosotros.

1O. JESÚS CRUCIFICADO ES EL MEJOR SIGNO DEL AMOR DE DIOS PADRE PARA
NOSOTROS, POR ESO DIGAMOS DESPUES DE CADA FRASE: “¡SEÑOR, ATRAE
NUESTRO CORAZON HACIA TU PADRE!"

Todos: ¡Señor, atrae nuestro corazón hacia tu Padre!

M.P.
 Tus manos extendidas son signo de un amor que nos acoge.
 Tus pies atados son signo de un amor que nos se espera.
 Tu corazón traspasado es signo de un amor que entrega todo.
 Tu cabeza caída es signo de un amor humilde y manso.
 Tus ojos cerrados son signo de un amor que ve más allá de lo exterior.
 Tu rostro desfigurado es signo de un amor que da confianza al que se siente
repugnante.
 Tu cuerpo deshecho es signo de un amor que se ha entregado entero.

48
LAS SIETE PALABRAS DE CRISTO EN LA CRUZ

Recordemos las últimas palabras de Cristo en la Cruz, que son como un testamento y última
voluntad.

PRIMERA PALABRA.
Hablar de la Cruz es hablar del Perdón. "PADRE PERDÓNALOS, PORQUE NO SABEN LO
QUE HACEN". En esta palabra, Cristo pide al Padre perdón por los que lo crucifican. Al pedir perdón
por sus verdugos lo pide para la humanidad entera, ya que por todos nosotros padeció y murió. La
muerte de Jesús es luz que ilumina toda su vida y revela la inmensidad del amor del Padre.
El misterio del Calvario es cada vez más luminoso. Perdonar es signo de grandeza, es la
prueba de que el amor en plenitud nunca se puede acabar. Siempre como el agua viva busca
caminos para renacer. Jesús muere sin ira y sin rencor, muere para alcanzar el perdón de todos
nosotros que éramos sus enemigos. Dice San Pablo: "La prueba que Dios nos ama es que Cristo,
siendo todavía nosotros pecadores, murió por nosotros. Por eso debemos amar a Dios, pues Él nos
amó primero". (Rom. 5,8) El amor divino no es un amor cualquiera, es fidelidad y misericordia.
Perdonar es grandeza. El Cristo del perdón y de la gracia llama a sus seguidores a perdonar
siempre, a volver a amar sin rencor alguno. La misericordia es la única que hace posible el amor y
ante el Crucificado todos somos llamados al perdón.
Perdón en el seno de las familias, que hijos y padres se reconcilien de todo corazón, que
parientes, amigos, vecinos se reconcilien también y olviden las ofensas. Perdonar es la expresión de
la grandeza del hombre y la mujer, creados a imagen y semejanza de Dios.
CANTO.

SEGUNDA PALABRA.
La prueba de la eficacia salvadora de la pasión de Jesús la tenemos cuando el ladrón
arrepentido, en los últimos momentos de su vida, a pesar de sus grandes crímenes, se vuelve a
Jesús y le pide que se acuerde de él cuando llegue a su Reino. Jesús inmediatamente le contesta al
ver su fe y su arrepentimiento: "YO TE ASEGURO: HOY ESTARÁS CONMIGO EN EL PARAÍSO".
El ladrón recibe la seguridad de su entrada en el paraíso. Aquí se hace patente que nuestro
Dios es un Dios al que el hombre puede clamar confiadamente. Con la seguridad de que su
misericordia actuará en favor nuestro. El amor del Padre es como un resorte automático, nunca deja
de oír la sinceridad de sus hijos. Dios es siempre fiel aunque nosotros seamos infieles. La promesa
de Jesús hecha al ladrón es una promesa hecha a todos lo hombres y mujeres que le reconozcan. El
corazón debe abrirse a la Gracia de Dios que todo lo transforma y todo lo redime. El encuentro con
Cristo que perdona se da en el Sacramento de la Reconciliación y el perdón siempre es vocación de
nueva vida. Por eso la palabra de Jesús es una fuerte llamada a la Santidad. Cristo desde la Cruz
me llama en este Viernes Santo a una sincera conversión.
CANTO.

TERCERA PALABRA.
Una de las palabras más hermosas de Jesús es cuando mirando al apóstol S. Juan junto a la
Cruz le dice a su madre: "MUJER, AHÍ TIENES A TU HIJO", y luego le dijo a Juan "HIJO, AHÍ
TIENES A TU MADRE". Es el gran momento de la Redención, ante Dios y ente el mundo, la Virgen
es proclamada madre de todos. La Madre de Dios y madre nuestra nos ayuda a vivir fielmente la vía
cristiana. La relación con la Madre de Dios es garantía del seguimiento sincero de su hijo Jesucristo.
María, mujer valiente que ni ante el sufrimiento se dobla sino que permanece de pie como guardián
que custodia algo muy valioso, en este caso la VIDA MISMA.
CANTO.

49
CUARTA PALABRA.
"DIOS MÍO, DIOS MÍO, ¿POR QUÉ ME HAS ABANDONADO?" En medio de la oscuridad
estremecen las palabras de Cristo: "Dios mío, Dios mío ¿por qué me has abandonado?". Palabras
impresionantes, reveladoras de la agonía o lucha interior de Cristo en el momento de su muerte cruel.
No sólo muere clavado, desangrándose, con un sufrimiento indecible, sino que muere abandonado y
despreciado. Las burlas y risotadas acompañan su ejecución. Las palabras de Jesús expresan su
angustia profunda, pero también son una oración confiada. El abandono de Dios puede parecer
inmenso en determinados momentos de la historia personal y social. En el sufrimiento intenso, uno
puede tener la sensación de que se ha apagado el amor del Padre. Jesús pronuncia estas palabras
porque en el se concentran todos los dolores de la humanidad y los presenta ante el Padre para que
el Padre no los olvide sino que les haga justicia remediándolos. Por más lejanos que nos sintamos
de Dios, debemos tener la seguridad que en la súplica de Jesús, Dios nos escuchará.
CANTO.

QUINTA PALABRA.
"TENGO SED" Jesús tiene sed, deshidratado por la pérdida de sangre. Tiene la garganta
reseca y la lengua se le pega al paladar. La sed es signo de las ganas de vivir, no obstante la vida se
le escapa; tiene sed de vida y de dar vida. Por eso muere: por la vida de los hombres y mujeres del
mundo. Y por eso su muerte se convertirá en resurrección, en vida plena. Jesús nos quiere hacer
comprender que en esa sed que él siente, estamos representados todos nosotros, los mortales, que
como la samaritana a la que Jesús le pidió de beber, andamos bebiendo en charcos y aljibes rotos,
andamos bebiendo bienes y pasiones que llevamos dentro y que sólo la Palabra de Dios y su Santa
voluntad serán capaces de saciar. Él es el agua viva, un manantial de agua que salta hasta la vida
eterna.
Sólo el que bebe de la roca viva, que es Cristo, consigue vivir con la serenidad del que posee
el agua necesaria para realizar su vocación de hombre-mujer creado y salvado. En este grito, pues,
Cristo nos enseña a tener hambre y sed de Dios, hambre y sed de justicia, hambre y sed de oír y
cumplir la palabra de Dios.
CANTO.

SEXTA PALABRA.
"TODO ESTÁ CONSUMADO" Jesús muere. Las Escrituras se han cumplido. Jesús ha
glorificado al Padre. Jesús es el hombre justo por excelencia, ha cumplido fielmente la obra para la
que fue enviado, no se ha desviado del camino de humildad que el Padre pedía. Nació pobre, fue un
muchacho exiliado, vivió una vida de familia sencilla, entró en Jerusalén montado en un asno como
rey pacífico y murió humillado en la Cruz. Con una humillación que causa horror, apenas es posible
sostener la mirada de su rostro: su deformidad repugna y asusta. Todo es consecuencia de su
misión. Todos se ha cumplido. Todo ha sido como debía ser. El hombre justo ha sido llevado
injustamente al suplicio. El hombre honesto ha sufrido la más absurda condenación. El hombre
bueno rabiosamente perseguido.
Para comprenderlo todo uno tiene que colocarse en el corazón del Señor. Desde Dios hay
que mirar ahora la vida y la muerte. El aguijón de la muerte ha sido vencido para siempre.
CANTO.

SÉPTIMA PALABRA.
"PADRE, EN TUS MANOS ENCOMIENDO MI ESPÍRITU" Jesús siempre en contacto con el
Padre, muere abandonándose a sus manos. Aquel que había venido de lo alto, a lo alto retorna,
nuestra muerte también es así: un retorno al que es nuestro origen, nuestro Creador y redentor. El
Hijo de Dios muere con confiada serenidad, no es la impotencia del que ya está extenuado sino la
plegaria del que sabe que Dios es amor. Desde este momento, morir será compartir la muerte de
Jesús, tener parte en el Misterio Redentor que, a lo largo de los siglos salva a todos los que abren el
corazón a la misericordia de Dios. Queda claro también que en este mundo ser crucificado por la
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verdad, por la vivencia de la fe, por la promoción y el cuidado de los más pobres y necesitados, por la
defensa de las víctimas de la injusticia y del absurdo, ser perseguido o rechazado por la búsqueda del
bien, impulsar con sacrificios los caminos del amor y la solidaridad, todo ello es la vida que hace
posible la historia como salvación de los hombres y mujeres del mundo.
Muere Jesús. pero se manifiesta con toda su fuerza la gloria de Dios. JESÚS QUEDA
CONSTITUIDO COMO EL ÚNICO CAMINO, LA ÚNICA VERDAD, LA ÚNICA VIDA. Hay que seguir
sus huellas sin temor.
CANTO.

Para terminar estas reflexiones sobre la Pasión y Muerte del Señor Jesús y poder esperar con
firmeza y confianza nuestra resurrección, pidamos al mismo Señor Jesucristo, que por su inmensa
misericordia nos conceda ser fieles a sus palabras y mandamientos; que por piedad nos fortalezca
con su Espíritu Santo para que podamos siempre cumplir su santa voluntad; que por sus dolores y
penas nos alcance del Padre remediar las penas y los dolores de nuestros hermanos necesitados;
que por su cruz nos conceda llevar con alegría la nuestra, especialmente los que tenemos que sufrir
por permanecer fieles a su palabra y mandatos; que por los méritos de su Santísima Madre María,
nos conceda disposición y constancia en su servicio; que por su gloriosa resurrección nos conceda
alcanzar la nuestra y la de todos nuestros difuntos. Amen.

ORACIÓN. Mira, Señor, con bondad a esta tu familia aquí reunida, por la cual tu Hijo Jesús
no dudó en dar su vida en la Cruz; te pedimos que siendo fieles a su pasión, como lo fue la Santa y
Gloriosa Virgen María, podamos todos, junto con ella, llegar a participar de tu gloriosa resurrección.
Amén.

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ROSARIO DE PÉSAME

Los equipos que quieran rezar el rosario normal...

Rezar el rosario en el micrófono de la Iglesia


Poco a poco se va juntando la gente

INTRODUCCIÓN AL ROSARIO:

El recuerdo de María no debe faltar en la vida del misionero; es madre de Jesús y madre
nuestra. Rezar el rosario significa continuar en nosotros la meditación hecha por María, como
nos recuerda el Evangelio, sobre los acontecimientos de la vida de Jesús y de la suya. Al
mismo tiempo, se la saluda y se la invoca.

Esfuérzate por contemplar con amor, serenidad y reflexión los principales hechos
salvíficos de la vida de Cristo, desde la concepción virginal hasta los momentos culminantes
de la Pasión, Muerte y Resurrección, viéndolos a través del corazón de quien estuvo más
cerca de Él.

Procura conjugar, en el rezo del rosario, la contemplación de los misterios con la


actitud filial, la alabanza en el paso de las avemarías, la adoración en los glorias, la
admiración e impetración en las letanías, para que todo él resume confianza y amor a María.

“El rosario es mi oración mariana predilecta. ¡Plegaria maravillosa! Maravillosa en su


sencillez y en su profundidad. En esa plegaria repetimos muchas veces las palabras que la
Virgen oyó del Arcángel y de su prima Isabel. Y en el trasfondo de las Aves Marías, pasan
ante los ojos del alma los episodios principales de la vida de Jesucristo. El rosario en su
conjunto consta de los Misterios Gozosos, Dolorosos y Gloriosos, y nos pone en comunión
vital con Jesucristo a través del Corazón de su Madre “.
Juan Pablo II

Se comienza con el signo de la cruz y a continuación se hace una petición.

Guía: Recemos todos juntos: Por la señal de la Santa Cruz.

Pueblo: de nuestros enemigos líbranos, Señor, Dios nuestro. En el nombre del Padre y del
Hijo y del Espíritu Santo. Amen.

Guía: Para que nuestra oración pueda agradar a Dios, purifiquemos nuestro corazón,
arrepintiéndonos de nuestros pecados. Recemos todos el ACTO DE CONTRICIÓN.

Pueblo: Señor mío Jesucristo Dios y hombre creador y redentor mío, por ser vos quien sois
me pesa de todo corazón haberte ofendido, propongo firmemente confesarme y cumplir la
penitencia que me fuere impuesta, ofrezco mi vida obras y trabajos en satisfacción de mis
pecados, confío en vuestra misericordia infinita que me perdonareis y me daréis gracia para
nunca más pecar. Amen.

Se dice cada misterio según el día y después se rezan un Padre Nuestro y diez Ave Marías
y un Gloria al Padre.

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MISTERIOS DOLOROSOS (Para todos los martes y viernes)

Primer Misterio:
LA ORACIÓN DE JESÚS EN EL HUERTO.

Llegaron a una propiedad llamada Getsemaní, y Jesús dijo a sus discípulos: "Siéntense aquí
mientras voy a orar".
Y se llevó consigo a Pedro, a Santiago y a Juan, y comenzó a sentir temor y angustia.
Entonces les dijo: "Siento en mi alma una tristeza mortal. Quédense aquí y permanezcan
despiertos".
Jesús se adelantó un poco y cayó en tierra, suplicando que si era posible no tuviera que
pasar por aquella hora. Decía "Abbá, o sea Padre; para ti todo es posible; aparte de mí esta
copa. Pero no: no se haga lo que yo quiero, sino lo que quieras tú".
Volvió y los encontró dormidos. Y dijo a Pedro: "Simón, ¿duermes? No pudiste estar
despierto ni una hora. Estén despiertos y oren, para que no caigan en tentación; ya que el
espíritu es animoso, pero la carne es débil" (Mc. 14, 32-38).
Aunque fuera el Hijo de Dios, Jesús sintió la necesidad de prepararse a la prueba mediante
la oración. Es precisamente en la oración donde Jesús encuentra la fuerza para enfrentarse
con el valor a los sufrimientos.
Es un ejemplo para nosotros. No podremos superar las distintas pruebas de la vida, si no
tenemos la costumbre de orar. La realidad, la oración representa la fuerza del cristiano.

Segundo Misterio:
LA FLAGELACIÓN DE JESÚS, ATADO A LA COLUMNA.

Pilato quería dejar contenta a la gente. Por eso dejó libre a Barrabás y, después de haber
hecho azotar a Jesús, lo entregó para que fuera crucificado (Mc. 15, 15).
En nuestra vida buscamos siempre las comodidades. Y para conseguir más satisfacciones,
nos olvidamos de la Ley de Dios. Jesús tuvo que pagar todos esos pecados mediante la
flagelación, que transformó toda su espalda en una inmensa llaga.

Tercer Misterio:
LA CORONACIÓN DE ESPINAS DEL HIJO DE DIOS.

Los soldados lo llevaron al patio interior, llamado pretorio, y llamaron a todos sus
compañeros. Lo vistieron con una capa roja y colocaron sobre su cabeza una corona
trenzada con espinas. Después se pusieron a saludarlo: "¡Viva el Rey de los Judíos!". Y le
golpeaban la cabeza con una caña, lo escupían y luego arrodillándose, le hacían reverencias
(Mc. 15, 16-19).
El orgullo ha sido siempre la causa de muchos pecados. Para pagar nuestros pecados de
orgullo, Jesús aceptó la humillación de ser coronado con espinas, como un rey de burlas.
Si queremos vivir como verdaderos cristianos, tenemos que luchar en contra de la soberbia.
¡Cuántos pleitos y rencores se pueden evitar mediante la humildad!

Cuarto Misterio:
JESÚS CAMINO DEL CALVARIO CON LA CRUZ A CUESTAS.

Entonces los soldados sacaron fuera a Jesús para crucificarlo. Al salir, se encontraron con
Simón de Cirene, que volvía del campo, y lo obligaron a llevar la cruz de Jesús. Llevaron a
Jesús al lugar llamado Gólgota o Calvario, lo que significa "Sitio de la Calavera" (Mc. 15, 21-
22).
Por amor a nosotros, Jesús cargó con la cruz y subió al Calvario. En lugar de juzgar y
condenar a los demás, tenemos que hacer el esfuerzo por soportar sus defectos y ayudarlos
a superarse. Sólo así imitaremos a Jesús.

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Quinto Misterio:
CRUCIFIXIÓN Y MUERTE DE NUESTRO SEÑOR JESUCRISTO.

Crucificaron a Jesús con otros dos, uno a cada lado. Junto a la cruz de Jesús estaba su
madre y la hermana de su madre y también María, esposa de Cleofas, y María de Mágdala.
Jesús, al ver a la madre y junto a ella a su discípulo más querido, dijo a la madre: "Mujer, ahí
tiene a tu hijo". Después dijo al discípulo: "Ahí tienes a tu madre". Desde ese momento el
discípulo se la llevó a su casa.

Después de eso, como Jesús sabía que ya todo se había cumplido, y para que se cumpliera
la Escritura, dijo "Tengo sed". Había allí un jarro lleno de vino agridulce. Pusieron en una
caña una esponja llena de esta bebida y la acercaron a los labios.
Cuando hubo probado el vino, Jesús dijo: "Todo está cumplido". Inclinó la cabeza y entregó
su espíritu (Jn. 19, 18, 25-30).

"No existe amor más grande que éste: dar la vida por los amigos" (Jn 15,13), había dicho
Jesús. Sufriendo y muriendo por nosotros en la cruz, Jesús nos dejó la prueba más grande
de su amor. Ahora depende de nosotros saber aprovechar de este amor, renunciando a
nuestra vida de pecado y tratando de empezar una vida nueva.

Terminando el quinto misterio se añade...: Padre Nuestro...

Guía: Dios te salve, María, hija de Dios Padre, virgen purísima y castísima antes del parto,
en tus manos encomiendo mi fe para que la alumbres, llena eres de gracia...

Pueblo: Santa María...

Guía: Dios te salve, María, Madre de Dios Hijo, virgen Purísima y castísima en el parto, en
tus manos encomiendo mi esperanza para que la alientes, llena eres de gracia...

Pueblo: Santa María...

Guía: Dios te salve, María, Esposa del Espíritu Santo, virgen purísima y castísima después
del parto, en tus manos encomiendo mi caridad para que la inflames, llena eres de gracia...

Pueblo: Santa María...

Guía: Dios te salve, María, templo, trono y sagrario de la Santísima Trinidad, virgen
concebida sin la culpa original,

Todos: Dios te salve, Reina y Madre de Misericordia; vida, dulzura y esperanza nuestra, Dios
te salve. A ti llamamos los desterrados hijos de Eva; a ti suspiramos, gimiendo y llorando en
este valle de lágrimas. Ea pues Señora, abogada nuestra, vuelve a nosotros esos tus ojos
misericordiosos y después de este destierro, muéstranos a Jesús, fruto bendito de tu vientre.
¡Oh clemente, oh piadosa, oh dulce siempre Virgen María!

Guía: Ruega por nosotros, Santa Madre de Dios.

Pueblo: Para que seamos dignos de alcanzar las divinas gracias y promesas de Nuestro
Señor Jesucristo. Amén.
Guía: Y ahora vamos a pedir a la Virgen que interceda por nosotros, invocándola con los
títulos más bellos que durante siglos el pueblo cristiano ha ido descubriendo en su honor.
Recemos la Letanía:

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Letanía Mariana:

Señor, ten piedad de nosotros. Señor, ten piedad de nosotros


Cristo, ten piedad de nosotros. Cristo, ten piedad de nosotros
Señor, ten piedad de nosotros. Señor, ten piedad de nosotros
Cristo, óyenos Cristo, óyenos.
Cristo, escúchanos. Cristo, escúchanos
Dios, Padre celestial, ten piedad de nosotros
Dios Hijo, Redentor del mundo, ten piedad de nosotros
Dios, Espíritu Santo, ten piedad de nosotros
Santa Trinidad un solo Dios, ten piedad de nosotros
Santa María, Ruega por nosotros
Santa Madre de Dios Ruega por nosotros
Santa Virgen de las Vírgenes Ruega por nosotros
Madre del Cristo Ruega por nosotros
Madre de la Divina Gracia Ruega por nosotros
Madre purísima Ruega por nosotros
Madre castísima Ruega por nosotros
Madre intacta Ruega por nosotros
Madre incorrupta Ruega por nosotros
Madre inmaculada Ruega por nosotros
Madre amable Ruega por nosotros
Madre admirable Ruega por nosotros
Madre del buen consejo Ruega por nosotros
Madre del Creador Ruega por nosotros
Madre del Salvador Ruega por nosotros
Madre de la Iglesia Ruega por nosotros
Virgen prudentísima Ruega por nosotros
Virgen digna de veneración Ruega por nosotros
Virgen digna de alabanza Ruega por nosotros
Virgen poderosa Ruega por nosotros
Virgen clemente Ruega por nosotros
Virgen fiel Ruega por nosotros
Espejo de justicia Ruega por nosotros
Trono de la sabiduría Ruega por nosotros
Causa de nuestra alegría Ruega por nosotros
Vaso espiritual Ruega por nosotros
Vaso digno de honor Ruega por nosotros
Vaso insigne de devoción Ruega por nosotros
Rosa mística Ruega por nosotros
Torre de David Ruega por nosotros
Torre de marfil Ruega por nosotros
Casa de oro Ruega por nosotros
Puerta del cielo Ruega por nosotros
Estrella de la mañana Ruega por nosotros
Salud de los enfermos Ruega por nosotros
Refugio de los pecadores Ruega por nosotros
Consoladora de los afligidos Ruega por nosotros
Auxilio de los cristianos Ruega por nosotros
Reina de los ángeles Ruega por nosotros
Reina de los arcángeles Ruega por nosotros
Reina de los patriarcas Ruega por nosotros
Reina de los profetas Ruega por nosotros
Reina de los apóstoles Ruega por nosotros
Reina de los confesores Ruega por nosotros
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Reina de las vírgenes Ruega por nosotros
Reina de todos los santos Ruega por nosotros
Reina concebida sin pecado original Ruega por nosotros
Reina asunta a los cielos Ruega por nosotros
Reina del santísimo rosario Ruega por nosotros
Reina de la familia Ruega por nosotros
Reina de la paz Ruega por nosotros
Cordero de Dios que quitas el pecado del mundo, perdónanos, Señor.
Cordero de Dios que quitas el pecado del mundo, escúchanos, Señor.
Cordero de Dios que quitas el pecado del mundo, ten piedad de nosotros.

Ruega por nosotros Santa Madre de Dios, para que seamos dignos de las promesas de
Cristo.

Oremos:
Te rogamos Señor nos concedas a nosotros tus siervos, gozar de perpetua salud de
alma y cuerpo, y por la gloriosa intercesión de la bienaventurada Virgen María, seamos
librados de la tristeza presente y disfrutemos de la eterna alegría. Por Cristo Nuestro Señor.
Amén.

Guía: Todos: Por estos misterios santos, de que hace el alma recuerdo. Te pedimos ¡Oh
María! Con tierno y devoto pecho. De nuestra fe sacrosanta, la conversación y aumento.
Torna tus divinos ojos hacia tu cristiano pueblo. Da a tu iglesia la victoria, y al mundo grato
sosiego; serena las tempestades que airado descarga el cielo, y del pontífice Augusto mitiga
el dolor acerbo. Las terrenas tempestades sigan de Dios los preceptos, porque la justicia
torne y al bien vayan sus esfuerzos. Que a Dios el gentil conozca, su error abjure el soberbio.
Que de la verdad aparta corazón y entendimiento. Que la culpa nos inspire dolor profundo y
perfecto. Halle puerto el navegante y la salud el enfermo. Las almas del Purgatorio gozosas
vayan al cielo. Ya que este santo ejercicio tenga ¡Oh Madre! Tal aumento en todo el orbe
cristiano, que fiel adora al Dios bueno. Que de continua alabanza sean tus glorias objeto y
por tu amor merezcamos gozar el eterno premio.

Pueblo: Bajo tu amparo nos acogemos, Santa Madre de Dios no desprecies las oraciones
que te hacemos en nuestras necesidades. Antes bien, líbranos de todos los peligros, oh
Virgen gloriosa y bendita.

Un Padre Nuestro por las intenciones de nuestro Santo Padre.

Por la Señal de la Santa Cruz...

Al final del Rosario se dice la siguiente oración: ORACIÓN A LA VIRGEN DOLOROSA:

MADRE PURÍSIMA, ES INMENSO TU DOLOR, Y PROFUNDA LA PENA QUE NUESTROS


CORAZONES SIENTEN POR ELLO; SIN EMBARGO YO DIRÍA, QUE AÚN HALLABAS ALGÚN
CONSUELO, SOSTENIENDO TAN TIERNAMENTE ABRAZADO A TU HIJO MUERTO.
¡OH SEÑORA PURA Y TIERNA!, QUISIERA QUE EN ESTOS MOMENTOS DEPOSITARAS
ESPIRITUALMENTE A TU TIERNO HIJO SOBRE MIS RODILLAS, PARA QUE VIÉNDOLO Y
MUERTO EXPERIMENTE, EN CUANTO ME SEA POSIBLE, POR LA MEDITACIÓN Y
CONTEMPLACIÓN, LO QUE TU SENTISTE EN REALIDAD...
MADRE PURÍSIMA, MI ALMA PERMANECE CERCA DE TI EN LA TRISTEZA Y LA COMPASIÓN.
EN MI CONTEMPLACIÓN TE ACOMPAÑO CON FERVOR, ALABANZA Y AGRADECIMIENTO,
CUANDO VUELVES DEL SEPULCRO A TU CASA, POR LA PUERTA DE LA CIUDAD SANTA;
ASIMISMO DESEO, ¡OH MADRE, TIERNA Y PURA!, QUE A MI ALMA, AL PARTIR DE ESTE
MUNDO, LA CONDUZCAS A LA PATRIA, SEGURA DE SU FELICIDAD ETERNA.

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