Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
“Cualquiera que haya lidiado con la pobreza sabe lo extremadamente caro que
resulta ser pobre”.
James Baldwin
Un pobre vive al día, por lo tanto compra en el momento lo que necesita para
satisfacer su necesidad inmediata; el precio de un chile jalapeñ o comprado en lata de
3.8 kg. en Sam´s puede multiplicarse por 5 o má s si se compra en una latita de 100 grs
en el abarrote de la esquina y, con la misma diná mica toma refrescos que son má s
caros que el agua de limó n y papas fritas que pueden costar hasta 15 veces el precio
de una papa cruda, y si de agua se trata es muy probable que no exista la
infraestructura y tenga que comprar el agua de pipas y transportarla en cubetas hasta
su hogar.
Un pobre compra una casa de interés social en las afueras de la ciudad, lejos de
todo, una parte importante del precio de la casa va a pagar su parte proporcional de
infraestructura: drenaje, alumbrado, energía eléctrica, banquetas, guarniciones y una
calle de concreto armado por la que pueda circular un carro que no tiene y esto só lo le
encarece aú n má s la vida pues tiene que dedicar una parte sustancial de su tiempo y
su reducido salario a pagar un transporte desarticulado caro e ineficiente o
endeudarse con dinero caro para hacerse de una carcachita que mermará aú n má s sus
finanzas en gasolina, mantenimiento y trá mites, por otra parte, si no tiene acceso a
vivienda a crédito construye al pasito su propio cuartito, también en las afueras de la
ciudad, para lo cual compra materiales caros al menudeo, sobredimensiona
generalmente columnas y trabes metiendo má s cemento y varilla de la necesaria y
desperdiciando mezcla mal calculada.
Un pobre se casa y se llena de hijos siendo joven y, sin apenas darse cuenta ya
está metido hasta el cuello en este círculo perverso de pobreza y carencias.
En un Guanajuato má s parejo, ser pobre no tendría por que ser tan caro.
Javier Hinojosa
Presidente del Iplaneg
javier.hinojosa@me.com