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TEMA 16: TRASTORNOS AFECTIVOS.

ACTUACIONES DE
ENFERMERÍA
INTRODUCCIÓN
La característica fundamental en estos trastornos es una alteración del humor o de la
afectividad.
Este cambio suele acompañarse de un cambio del nivel general de actividad (vitalidad). La
mayoría del resto de los síntomas son secundarios a estas alteraciones del humor y de la
vitalidad o son comprensibles en su contexto (congruentes con el estado de ánimo). La
mayoría de estos trastornos tienden a ser recurrentes y el inicio de cada episodio suele estar
en relación con acontecimientos o situaciones estresantes.

Cada año, alrededor del 10% de la población padece de enfermedades depresivas. Estas
enfermedades mentales junto a los trastornos de ansiedad son las más frecuentes en nuestra
sociedad actual. El costo en términos económico es alto, pero el costo en términos de
sufrimiento es incalculable. Los trastornos depresivos interfieren con el funcionamiento
cotidiano del paciente. Causan dolor y sufrimiento no sólo a quienes los padecen, sino también
a sus seres queridos.

CLASIFICACIÓN DE LOS TRASTORNOS AFECTIVOS


Los trastornos del estado de ánimo están divididos en trastornos depresivos (depresión
unipolar) y trastornos bipolares (incluyen episodios depresivos y episodios hipertímicos).
Los trastornos depresivos se distinguen de los bipolares por el hecho de no haber historia
previa de alteración del humor por exceso (episodio maniaco o hipomaniaco).
Los trastornos bipolares implican la presencia o historia de episodios maniacos o
hipomaniacos, normalmente acompañados por la presencia o historia de episodios depresivos
mayores.

 TRASTORNOS BIPOLARES

TRASTORNO BIPOLAR O PSICOSIS MANÍACO-DEPRESIVA

El trastorno bipolar se caracteriza por cambios cíclicos en el estado de ánimo: fases de ánimo
elevado o eufórico (manía) y fases de ánimo bajo (depresión mayor).
Los cambios de estado de ánimo pueden ser dramáticos y rápidos, pero más a menudo son
graduales.
Cuando una persona está en la fase depresiva del ciclo, puede padecer de uno, de varios o de
todos los síntomas del trastorno depresivo. Cuando está en la fase maníaca, la persona puede
estar hiperactiva, hablar excesivamente y tener una gran cantidad de energía. La manía a
menudo afecta la manera de pensar, el juicio y la manera de comportarse con relación a los
otros. Puede llevar a que el paciente se meta en graves problemas y situaciones embarazosas.
Por ejemplo, en la fase maníaca la persona puede sentirse feliz o eufórica, tener proyectos
grandiosos, tomar decisiones de negocios descabelladas, e involucrarse en aventuras o
fantasías románticas.

No todas las personas que están en fases depresivas o maníacas padecen de todos los
síntomas. Algunas padecen de unos pocos síntomas, otras tienen muchos. La gravedad de los
síntomas varía según la persona y también puede variar con el tiempo.

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 Criterios diagnósticos episodio manÍaco
Episodio de 1 semana de duración como mínimo (o menos si es necesaria la
hospitalización) de estado de ánimo anormal o persistentemente elevado, expansivo o
irritable.
Durante ese periodo se dan 3 ó más de los siguientes síntomas:
o Autoestima exagerada o grandiosida
o Disminución de la necesidad de dormir.
o Verborre
o Pensamiento acelerado o fuga de idea
o Atención dispersa, distraibilidad
o Aumento de la actividad intencionada (social, en el trabajo, estudios o
sexualmente) o agitación psicomotora
o Excesiva implicación en actividades placenteras con riesgo de producirse daño (por
ejemplo, realizar compras irrefrenables, indiscreciones sexuales o inversiones
económicas alocadas)

 Criterios diagnósticos episodio depresivo mayor


La característica principal de un episodio depresivo mayor es un periodo de al menos 2
semanas durante el que hay un estado de ánimo deprimido (tristeza patológica) o una
pérdida de interés o placer en casi todas las actividades (anhedonia). En los niños y
adolescentes el estado de ánimo puede ser irritable en lugar de triste. El paciente debe
experimentar al menos 5 de los siguientes síntomas:
o Tristeza patológica. Estado de ánimo deprimido la mayor parte del día casi cada
día. En niños y adolescentes puede ser irritabl
o Anhedonia
o Pérdida de peso importante sin hacer régimen o aumento de peso (variaciones de
más del 5% del peso corporal en 1 mes). Es más frecuente la pérdida de pes
o Insomnio o hipersomnia. Es más frecuente el insomnio y se caracteriza por ser un
insomnio tardío (despertar precoz)
o Agitación o enlentecimiento psicomotor
o Astenia, fatiga o pérdida de energía
o Sentimientos de inutilidad o culpa excesivos o inapropiados que pueden llegar a
ser delirante
o Dificultades cognitivas, disminución de la capacidad para pensar y concentrarse, o
indecisión
o Pensamientos recurrentes de muerte

TRASTORNO CICLOTÍMICO
Alteración del estado de ánimo crónica con fluctuaciones que comprenden numerosos ciclos
depresivos (más leves que los episodios depresivos mayoras) y numerosos ciclos hipomaniacos
(más leves que los episodios maniacos) durante un periodo mínimo de dos años.

Episodio hipomaniaco
La hipomanía es un grado menor de manía y no se acompañan de alucinaciones o ideas
delirantes. Hay una exaltación leve y persistente del ánimo (durante al menos varios días
seguidos), un aumento de la vitalidad y de la actividad y por lo general, sentimientos marcados
de bienestar y de elevado rendimiento físico y mental. También es frecuente que el individuo
se vuelva más sociable, hablador, que se comporte con una familiaridad excesiva, que muestre
un excesivo vigor sexual y una disminución de la necesidad de sueño, pero nada de esto tiene
una intensidad suficiente como para interferir con la actividad laboral o provocar rechazo

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social. En algunos casos la irritabilidad, el engreimiento y la grosería pueden sustituir a la
exagerada sociabilidad eufórica.

Puede alterarse la capacidad de atención y concentración, dando lugar a una imposibilidad


para desarrollar con calma actividades laborales, de entretenimiento o descansar
tranquilamente. No obstante, esto no suele impedir el interés por actividades y empresas
totalmente nuevas o por gastos ligeramente excesivos.

 TRASTORNOS DEPRESIVOS

DEPRESIÓN MAYOR (depresión unipolar)


Un trastorno depresivo mayor se caracteriza por un curso clínico de 1 ó más episodios
depresivos mayores sin historia de episodios maniacos o hipomaniacos.
El riesgo de padecer un episodio depresivo mayor en la población general varía del 10-25%
para las mujeres al 5-12% para los hombres.
La característica principal de un episodio depresivo mayor es un periodo de al menos 2
semanas durante el que hay un estado de ánimo deprimido (tristeza patológica) o una pérdida
de interés o placer en casi todas las actividades (anhedonia).
En los niños y adolescentes el estado de ánimo puede ser irritable en lugar de triste. El
paciente debe experimentar al menos 5 de los siguientes síntomas:
o Tristeza patológica. Estado de ánimo deprimido la mayor parte del día casi cada día. En
niños y adolescentes puede ser irritable
o Anhedonia
o Pérdida de peso importante sin hacer régimen o aumento de peso (variaciones de más
del 5% del peso corporal en 1 mes). Es más frecuente la pérdida de pes
o Insomnio o hipersomnia. Es más frecuente el insomnio y se caracteriza por ser un
insomnio tardío (despertar precoz)
o Agitación o enlentecimiento psicomotor
o Astenia, fatiga o pérdida de energía
o Sentimientos de inutilidad o culpa excesivos o inapropiados que pueden llegar a ser
delirante
o Dificultades cognitivas, disminución de la capacidad para pensar y concentrarse, o
indecisión
o Pensamientos recurrentes de muerte

TRASTORNO DISTÍMICO
La característica principal de este trastorno es el estado de ánimo crónicamente deprimido que
está presente la mayor parte del día de la mayoría de los días durante un periodo mínimo de
dos años.
La distimia, es un tipo de depresión menos grave, que incluye síntomas crónicos (a largo plazo)
que no incapacitan tanto, pero sin embargo interfieren con el funcionamiento y el bienestar de
la persona.
Muchas personas con distimia también pueden padecer de episodios depresivos severos en
algún momento de su vida.
 Criterios diagnósticos:
Estado de ánimo crónicamente deprimido la mayor parte del día de la mayoría de los días,
durante al menos dos años (en los niños y adolescentes puede ser irritable)
Presencia de al menos otros dos síntomas:
o Pérdida o aumento de peso
o Insomnio o hipersomnia
o Falta de energía o fatiga

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oBaja autoestima
oDificultades para concentrarse o tomar decisiones
o Sentimientos de desesperanza.
TRATAMIENTO DE LOS TRASTORNOS DE LOS ESTADOS DE ÁNIMO

El tratamiento fundamental de los trastornos del estado de ánimo debe consistir en


psicoterapia (más importante en las formas menos graves y sin síntomas psicóticos) y
psicofármacos (más importantes en las formas más graves). Siempre es recomendable
combinar ambos tipos de estrategias terapéuticas.

 TERAPIA ELECTRO-CONVULSIVA (TEC o "Electro-shock")


Es útil en algunos casos de trastornos afectivos, especialmente para los pacientes cuya
depresión es severa o pone su vida en peligro y para los pacientes que no pueden tomar
antidepresivos. La TEC es a menudo efectiva en casos en que los medicamentos antidepresivos
no proporcionan un alivio suficiente. En los últimos años la TEC se ha perfeccionado mucho.
Antes de administrar el tratamiento, que se hace bajo anestesia de duración breve, se
administra un relajante muscular. Se colocan electrodos en sitios precisos de la cabeza, para
enviar impulsos eléctricos. La estimulación ocasiona una convulsión breve (aproximadamente
30 segundos) dentro del cerebro. La persona que recibe TEC no percibe conscientemente el
estímulo eléctrico. Para obtener el máximo beneficio terapéutico se requieren varias sesiones
de TEC, usualmente programadas con un promedio de tres por semana.

 FÁRMACOS ANTIDEPRESIVOS:
Desde la introducción de los fármacos antidepresivos a mediados de los años cincuenta se ha
producido una mejora significativa en la perspectiva de tratamiento de los pacientes con
depresión. Se considera que estos fármacos son eficaces en el 60 a 80 % de los pacientes,
siendo la respuesta variable en función de la gravedad de la depresión y de la presencia de
otros factores que pueden "entorpecer" la acción del fármaco como pueden ser
acontecimientos vitales estresantes mantenidos, características de personalidad alteradas de
base o mal cumplimiento del tratamiento. Además hasta el 90% de las depresiones
responderán a algún tipo de tratamiento antidepresivo.

La depresión parece estar asociada a la existencia de niveles bajos de determinadas sustancias


a nivel cerebral tales como la serotonina, la noradrenalina o la dopamina. Por ello, los
fármacos antidepresivos actúan intentando aumentar alguna de estas sustancias en el cerebro
a través de distintos mecanismos de acción.

A la hora de seleccionar un fármaco antidepresivo hay que tener en cuenta algunos factores
como son: la experiencia conocida de un episodio anteriormente tratado, el subtipo de
depresión, el perfil de efectos secundarios propio de cada medicamento y la posibilidad de
interacción con otros medicamentos que ya se estén tomando…

Es necesario conocer de antemano que todos los fármacos antidepresivos tienen un período
entre que se inicia su toma y comienza la respuesta antidepresiva, tiempo que se denomina
latencia de respuesta, y que puede variar entre dos y cuatro semanas. El paciente, en este
período, además de no notar importante mejoría, percibirá los efectos secundarios posibles de
la medicación, lo cual añade frustración y desconfianza hacía la eficacia del tratamiento. Se ha
de ser, por tanto, paciente y esperar la mejoría de la depresión dentro de ese plazo de tiempo.
Si es posible observar, en ocasiones, una cierta mejoría a los pocos días de iniciar la toma del
medicamento, pero este efecto que no es antidepresivo, posiblemente se deba a cierta acción

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sedativa o inductora del sueño que mejora aspectos que suelen presentarse asociados a la
depresión como es la ansiedad o el insomnio.

Por tanto, solo se considerará ineficaz un medicamento antidepresivo cuando haya sido
probado durante 4 a 6 semanas a dosis adecuadas y con buen cumplimiento. En caso de
ineficacia el planteamiento será sustituir el medicamento por otro, habitualmente de distinto
grupo de acción antidepresiva, o bien la combinación de dos fármacos antidepresivos de
mecanismo de acción complementario. Al sustituir un fármaco, en ocasiones es necesario
dejar pasar unos días de eliminación antes de iniciar el nuevo tratamiento a fin de evitar
interacciones entre ambos. Otro problema es que lo primero que mejora en los pacientes
deprimidos es la inhibición psicomotriz, pero no lo hacen a nivel cognitivo, con lo que al
principio de tomar la medicación aumenta el riesgo de suicidio (sigo pensando que me quiero
morir y ya tengo fuerzas para hacerlo)

Fundamentalmente, y de manera resumida, existen dos grandes grupos de fármacos


antidepresivos:

ANTIDEPRESIVOS TRICÍCLICO
Fueron de los primeros antidepresivos en aparecer. Presentan una elevada eficacia aunque por
su potencial de producir efectos secundarios como sedación, sequedad de boca,
estreñimiento, temblores, hipotensión, etc. se recomienda iniciarlos a dosis bajas e ir
aumentando en función de la tolerancia del paciente y del efecto antidepresivo, hasta
conseguir la dosis que equilibre la mayor eficacia posible con los menores efectos secundarios.
Se tienden a utilizar en casos graves de depresión. Por su perfil sedante, alguno de ellos se
indica también en depresión con elevado nivel de ansiedad.

INHIBIDORES SELECTIVOS DE LA RECAPTACIÓN DE SEROTONINA Y/O NORADRENALINA


De introducción reciente en los últimos diez años. Se ha extendido mucho su uso. Por tener un
mecanismo de acción más selectivo, son fármacos con un perfil de efectos secundarios mejor
tolerados que los clásicos fármacos tricíclicos y por lo tanto pueden empezar a tomarse a la
dosis normalmente efectiva. Al poder indicarse desde el primer día a dosis terapéuticas es
posible que necesiten menor tiempo de inicio de la acción antidepresiva.

INHIBIDORES DE MONOAMINOXIDASA (IMAO)


Fármacos de última elección. Hay un pequeño grupo de personas que no responden a los
antidepresivos usados más comúnmente (tricíclicos, ISRS y otros antidepresivos nuevos) y para
las cuales los IMAO son el mejor tratamiento. Las personas que están tomando esta clase de
antidepresivos deben evitar determinados alimentos. Ciertos alimentos contienen niveles
elevados de la sustancia llamada tiramina (la que normalmente se encuentra en quesos
fermentados, vinos y encurtidos o alimentos en conserva de vinagre). Cuando el paciente toma
un IMAO, estos alimentos deben ser estrictamente evitados, al igual que algunos
medicamentos como los descongestionantes que se toman para los resfriados y algunas
alergias. La interacción de la tiramina con los IMAO puede ocasionar una crisis hipertensiva
que puede llevar a un accidente cerebro-vascular. El médico debe proporcionar al paciente
una lista completa de los alimentos prohibidos. El paciente debe llevar la lista consigo en todo
momento.

Es posible que el paciente se sienta tentado a dejar de tomar el medicamento


prematuramente. Él puede sentirse mejor y pensar que ya no lo necesita. O puede pensar que
el medicamento no le está ayudando en absoluto. Es importante seguir tomando el
medicamento hasta que éste tenga oportunidad de actuar en el organismo. Algunos efectos
secundarios pueden aparecer incluso antes de que se produzca el efecto antidepresivo. Una

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vez que el paciente se sienta mejor, es importante continuar el medicamento por 4 a 9 meses
para prevenir una recaída de la depresión. Algunos medicamentos deben dejar de tomarse
gradualmente (es decir reduciendo la dosis poco a poco) para dar tiempo a que el organismo
se adapte y para prevenir síntomas de abstinencia, los que se producen cuando algunos
medicamentos se descontinúan abruptamente. En los casos de trastorno bipolar y depresión
severa crónica o recurrente, es posible que el paciente tenga que tomar el medicamento por
un tiempo indefinido.
Al contrario de lo que algunas personas creen, los medicamentos antidepresivos no crean
hábito. Sin embargo, como sucede con cualquier tipo de medicamento recetado por periodos
prolongados, los antidepresivos deben ser supervisados cuidadosamente por el médico para
determinar si se están dando en una dosis correcta. El médico debe verificar la dosificación y la
efectividad del tratamiento en forma periódica.

 FÁRMACOS REGULADORES DEL HUMOR


El litio ha sido por muchos años el tratamiento de elección para el trastorno bipolar por su
efectividad para prevenir los extremos del estado de ánimo comunes en este trastorno. Su uso
debe ser supervisado cuidadosamente por el médico, ya que hay poca diferencia entre las
dosis efectivas y las tóxicas. Si una persona tiene un trastorno preexistente de tiroides, renal,
cardíaco o epilepsia, el litio puede no ser recomendable. Afortunadamente, otros
medicamentos han demostrado ser útiles para controlar cambios de ánimo extremos. Entre
estos se encuentran dos anticonvulsivos: la carbamazepina (Tegretol®) y el ácido valproico
(Depakote®). Ambos medicamentos han tienen una aceptación amplia en la práctica clínica..
Otros anticonvulsivos que se empezaron a utilizar más recientemente son la lamotrigina
(Lamictal®) y la gabapentina (Neurontin®).

La mayoría de las personas con trastorno bipolar toman más de un medicamento. Junto con el
litio y un anticonvulsivo, el paciente puede necesitar un medicamento para otros síntomas que
se asocian frecuentemente con la bipolaridad: agitación, ansiedad, depresión e insomnio. Es
de vital importancia encontrar la mejor combinación posible de estos medicamentos para cada
paciente. Para esto se requiere que el médico supervise el tratamiento cuidadosamente.

Terapia naturista
En los últimos años, el uso de hierbas para el tratamiento tanto de la depresión como de la
ansiedad ha generado un gran interés. La hierba de San Juan o Corazoncillo es una hierba muy
utilizada para el tratamiento de la depresión moderada. Es una planta muy bonita y de
crecimiento lento que se cubre de flores amarillas en el verano, ha sido usada durante siglos
en muchos remedios naturales y populares. En Alemania, el Hypericum se utiliza actualmente
para el tratamiento de la depresión más que cualquier otro antidepresivo. Sin embargo, la
eficacia de esta hierba no se ha aclarado por que los estudios científicos que se han llevado a
cabo fueron a corto plazo y utilizaron varias dosis diferentes.

La hierba de San Juan parece utilizar una de los procesos metabólicos usados por muchos otros
medicamentos. Por ejemplo varios de los medicamentos que se recetan para tratar problemas
tales como las enfermedades del corazón, la depresión, las convulsiones, ciertos cánceres y
para prevenir los rechazos de transplantes. Por lo tanto, los médicos deben alertar a sus
pacientes acerca de estas posibles interacciones farmacológicas. Cualquier suplemento
naturista se debe tomar únicamente después de consultar con el médico u otro profesional de
salud capacitado

Psicoterapia
Muchas formas de psicoterapia, incluso algunas terapias a corto plazo (10-20 semanas),
pueden ser útiles para los pacientes deprimidos. Las terapias ayudan a los pacientes a analizar

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sus problemas y a resolverlos, a través de un intercambio verbal con el terapeuta. Estas
sesiones se combinan con "tareas para hacer en casa" entre una sesión y otra. Los
profesionales de la psicoterapia que utilizan una terapia "de comportamiento" procuran
ayudar a que el paciente encuentre la forma de obtener más satisfacción a través de sus
propias acciones. También guían al paciente para que abandone patrones de conducta que
contribuyen a su depresión o que son consecuencia de su depresión.

Estudios de investigación han comprobado que dos psicoterapias a corto plazo son útiles para
algunas formas de depresión. Se trata de la terapia interpersonal y de la cognitiva-conductual.
Los terapeutas interpersonales se concentran en los problemas en las relaciones con los otros
que causan y agravan la depresión. Los terapeutas cognitivo-conductuales ayudan a los
pacientes a cambiar los estilos negativos de pensamiento y comportamiento que se asocian
con la depresión.

Los trastornos depresivos hacen que uno se sienta exhausto, inútil, desesperanzado y
desamparado. Esas maneras negativas de pensar y sentirse hacen que las personas quieran
darse por vencidas. Es importante ser consciente de que las maneras negativas de ver las cosas
son parte de la depresión. Estas son distorsiones que, por lo general, no se basan en
circunstancias reales. Los pensamientos negativos desaparecen cuando el tratamiento empieza
a hacer efecto. Mientras tanto se debe recomendar:
- Fíjese metas realistas, tomando en cuenta la depresión, y no trate de asumir una
cantidad excesiva de responsabilidades.
- Divida las metas en partes pequeñas, establezca prioridades y haga lo que pueda
cuando pueda.
- Trate de estar acompañado y de confiar en alguna persona; siempre es mejor que
estar solo y no hablar con nadie.
- Tome parte en actividades que le ayuden a sentirse mejor.
- Haga ejercicio liviano, vaya al cine, vaya a un juego deportivo, o participe en
actividades recreativas, religiosas, sociales o de otro tipo. Todo eso puede ayudar.
- No espere que su estado de ánimo mejore de inmediato, sino gradualmente. Sentirse
mejor necesita tiempo.
- Es aconsejable que posponga las decisiones importantes hasta que la depresión
mejore. Antes de hacer cambios importantes, como cambiar de trabajo, casarse o
divorciarse, consulte con personas que lo conozcan bien y tengan una visión más
objetiva de su situación.
- La gente rara vez sale de una depresión de un día para el otro. Pero se puede sentir un
poco mejor cada día.
- Los patrones positivos de pensamiento van a reemplazar a los pensamientos negativos
que son parte de la depresión si se realiza psicoterapia. Los patrones negativos van a
desaparecer tan pronto la depresión responda al tratamiento. Los pensamientos
negativos van a ser reemplazados por pensamientos positivos.

Deje que sus familiares y amigos le ayuden.

 Cómo pueden los familiares y amigos ayudar a la persona deprimida


Lo más importante que alguien puede hacer por la persona deprimida es ayudarle a que reciba
el diagnóstico y tratamiento adecuados. Esto tal vez implique que tenga que aconsejar al
paciente para que no deje el tratamiento antes de que los síntomas puedan empezar a
aliviarse (varias semanas). Tal vez implique ayudarle a obtener un tratamiento diferente, si no
se observa ninguna mejoría con el primer tratamiento. En ocasiones puede requerir que el
familiar o amigo haga una cita y acompañe a la persona deprimida al médico. A veces es
necesario asegurarse que la persona deprimida esté tomando el medicamento. A la persona

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deprimida se le debe recordar que obedezca las órdenes médicas con respecto a beber
bebidas alcohólicas mientras está medicado. Otra cosa muy importante es dar apoyo
emocional. Esto implica comprensión, paciencia, afecto y estímulo. Busque la forma de
conversar con la persona deprimida y escucharla con atención. No minimice los sentimientos
que el paciente expresa pero señale la realidad y ofrezca esperanza. No ignore comentarios o
alusiones al suicidio. Informe al terapeuta si la persona deprimida hace comentarios sobre la
muerte o el suicidio. Invite a la persona deprimida a caminar, pasear, ir al cine y a otras
actividades. Persista con delicadeza si su invitación es rechazada. Fomente la participación del
paciente en actividades que antes le daban placer, como pasatiempos, deportes, actividades
religiosas o culturales, pero no fuerce a la persona deprimida a hacer demasiadas cosas
demasiado pronto. La persona deprimida necesita diversión y compañía, pero demasiadas
exigencias pueden aumentar sus sentimientos de fracaso.
No acuse a la persona deprimida de simular enfermedad o ser perezosa, ni espere que salga de
esa situación de un día para el otro. Con tratamiento, la mayoría de las personas mejora.
Tenga eso presente y continúe repitiéndole a la persona deprimida que con tiempo y ayuda va
a sentirse mejor.

ACTUACIONES DE ENFERMERÍA
Áreas de Cuidados más relevantes en el paciente depresivo (no olvidar que deben evaluarse
todas, de forma individual para cada paciente concreto)

SEGURIDAD: riesgo suicidio (preservar integridad)


- Detección de ideas de muerte
- Custodiar psicofármacos / Asegurar un entorno sin peligros
- Aplicar medidas de urgencia frente a tentativas de suicidio
RESPIRACION: superficial (normalizar patrón respiratorio)
- Enseñar la respiración abdominal profunda
ALIMENTACIÓN: anorexia, desnutrición, deshidratación (normalizar patrón ingesta)
- Vigilar la ingesta de líquidos y sólidos (cuantificarla)
- Vigilar trastornos cualitativos de la alimentación
- Garantizar la nutrición
ELIMINACIÓN: eliminación urinaria y fecal pueden estar comprometidas (normalizar patrón
eliminación)
- Asegurar aporte de fibra, sondaje o enemas
ASEO PERSONAL: abandono del aspecto personal (lograr autocuidados en higiene y
vestimenta)
- Prestar ayuda en el aseo, afeitado, baño (sólo al principio)
ACTIVIDADES GENERALES Y EJERCICIO: desinterés, inactividad (estimular la movilidad general)
- Estructurar entorno
- Propiciar salidas al exterior
- Llevar a cabo cambios posturales
COMUNICACIÓN: dificultades (Cuidar calidad relación sanitario- paciente)
- Empatizar, saber escuchar
- Dialogar
- Animar a expresar sentimientos y emociones
DIMENSIÓN AFECTIVO-SEXUAL: desinterés, culpa (mejorar relación afectivo-sexual)
- Desculpabilizar
- Educar
SUEÑO: insomnio, hipersomnia (normalizar patrón sueño)
- Asegurar medidas higiénicas
- Si persiste insomnio, comunicarlo al psiquiatra (hipnóticos)

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ASPECTOS LEGALES: ingreso involuntario, pacientes judiciales o incapacitados civilmente
(garantizar medidas legales)
- Asumir responsabilidad delegada
- Circunstancias que rodean la muerte: reacción de duelo en familiares/allegados
- Prestar apoyo físico y psicológico
ÁREAS DE CUIDADOS MÁS IMPORTANTES EN EL PACIENTE MANIACO
En general son superponibles al depresivo, con algunas peculiaridades

SEGURIDAD  hetero/autoagresividad (preservar integridad)


- Prevenir agresiones (reducir estímulos, facilitar expresión sentimientos hostiles)
- Evitar confrontaciones, pero poner límites al comportamiento
- Si agitación psicomotriz, reducción y sujeción mecánica
ACTIVIDADES GENERALES Y EJERCICIO
- Hiperactividad (contenerla)
- Controlar la actividad física y limitar el espacio
- Proteger a los demás pacientes
- Asegurar la toma de la medicación
- Mantener mismas pautas por parte de todo el Equipo
- Reforzar conductas de autocontrol
DIMENSIÓN AFECTO-SEXUALpromiscuidad (proteger a los demás pacientes)
- Evitar abusos y promiscuidad

No olvidar:
- Psicoeducación
- Continuidad de cuidados

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