Introducción 6

Para la medición de la velocidad del agua en una tubería y el volumen de agua

que pasa por ahí durante cierto tiempo se utilizan medidores que contienen
pequeños dispositivos que aprovechan el principio de inducción electromagnética,
esta es la creación de una corriente eléctrica en un conductor que se mueve a
través de un campo magnético.

El fenómeno de inducción electromagnética fue estudiado y explicado por Michael

Faraday, incluso existe una unidad de medida en su honor (farad) que se usa para
medir la capacidad eléctrica. La inducción electromagnética tiene muchas
aplicaciones en la vida contemporánea y los medidores de agua son una de ellas.

Para que funcionen los medidores debe existir una fuente de electricidad y agua
en las tuberías. Para medir el flujo por inducción electromagnética se utiliza la
ecuación de Faraday que en pocas palabras nos indica que mientras más voltaje
sea inducido en el aparato registrador, significa que está circulando más agua.
Este tipo de medidores suelen tener mejor precisión en comparación con otros.

Algunas ventajas que tienen estos medidores son: no posee partes móviles en
contacto con el agua, aplicaciones en agua limpia y en aguas residuales, perdida
de carga ínfima, entre otras. Y algunas desventajas respecto a otros medidores de
flujo: alto costo inicial, necesidad de mano de obre especializada para su
instalación y mantenimiento, necesidad de mantenimiento periódico en los
electrodos pues las partículas metálicas que son arrastradas por el agua se van
depositando allí, requiere cuidados con respecto a las fuentes de energía externa,
entre otras.