La concentricidad en nuestro

planeta
Ing. Karla Astrid Flores García

Seguramente hemos leído o escuchado el termino concentricidad en alguna

revista, en clase de geometría o incluso en una conversación tratando de
describir algún objeto, pero, ¿qué es la concentricidad?, la real academia
española nos marca que la concentricidad es un cuerpo o figura que tiene el
mismo centro que otro (RAE,2014), en términos geométricos se utiliza para
calificar a una figura que dispone del mismo centro que otra.
Una vez entendida la definición, ¿En qué se relaciona la concentricidad con el
planeta que habitamos? Pues bien, nuestro planeta se encuentra
estrechamente relacionado con este término pues desde el momento de su
creación ha manifestado esta condición, un ejemplo de ello se puede observar
en la estructura interna de la tierra. Con el paso del tiempo y debido a los
cambios que experimentaron ciertos componentes que se encontraban
fundidos (gases, minerales, polvo), el planeta se fue enfriando. Esto hizo que
se formaran las tres capas principales de la Tierra. Los elementos metálicos y
más pesados se trasladaron a las capas más profundas, mientras que los
elementos más ligeros, como el agua y los gases, se acumularon en las capas
externas. Dicho de otra manera, nuestro planeta está formado por tres capas
concéntricas de diferente composición, dinámica y estado físico las cuales se
dividen en corteza, manto y núcleo dando como resultado nuestra geosfera.
La primera capa denominada corteza se divide en corteza continental y
oceánica, la primera tiene un grosor medio de entre 35 y 40 km y puede
superar los 70 km en algunas regiones montañosas, tiene una composición
media de roca granítica, mientras que la segunda tiene alrededor de 7 km de
grosor y está compuesta por basaltos. Ambas cortezas se encuentran en la
litosfera la cual significa esfera de roca.
La segunda capa es una envoltura rocosa sólida que se extiende a una
profundidad de 2.900 km, ocupa el 82% del volumen de la Tierra y se llama
astenosfera que significa esfera débil, en esta se encuentra el manto el cual se
divide en superior e inferior a este último también se le conoce como mesosfera
o esfera media.
La tercera capa es el núcleo, está formado principalmente por hierro, que
constituye un estimado del 85% de su peso y níquel, que representa
aproximadamente el 10%, este se divide en: núcleo externo e interno. El núcleo
externo tiene un estado físico líquido de 2.270 km de grosor, en esta zona se
presentan corrientes convectivas del hierro metálico que generan el campo
magnético de la Tierra. El núcleo interno es una esfera con un radio de 1.216
km. A pesar de su temperatura más elevada, el material del núcleo interno es
más resistente que el del núcleo externo (debido a la presión) y se comporta
como un sólido.
Y bien, no solo la estructura interna de la tierra es concéntrica, sino que
también se tienen otros ejemplos como lo son la hidrósfera y la atmósfera.

La hidrósfera abarca la totalidad del agua de nuestro planeta, incluye el agua

de la superficie, la que se encuentra bajo tierra y la que circula en el aire como
vapor de agua. Esta se formó debido a que la Tierra tenía una actividad
volcánica muy elevada y entre los gases que emitían estos volcanes se
encontraba el vapor de agua. Con el paso del tiempo el planeta se enfrió y este
vapor de agua se condensó, formando así los océanos primitivos.

La hidrósfera es de vital importancia para la vida en el planeta puesto que

solo el 3% del volumen de agua existente en el planeta es agua dulce y de este
porcentaje solo el 1% se encuentra en estado líquido. El 2% restante del agua
se encuentra en estado sólido, formando los polos. La hidrología de nuestro
planeta se encuentra distribuida en: agua salada (océanos), agua dulce, agua
superficial (ríos, lagos y arroyos), agua subterránea (agua retenida en el
subsuelo), agua glacial (agua derretida de los polos) y vapor de agua
atmosférico (nubes y niebla).

Un ejemplo más de la concentricidad en la tierra y que no es muy perceptible

es nuestra atmosfera. Es una capa gaseosa que envuelve la Tierra y que se
mantiene unida al planeta por la fuerza de la gravedad. Entre sus funciones nos
provee de gases imprescindibles (oxígeno) para la vida en la Tierra, forma
parte del ciclo hidrológico, nos sirve de protección frente a los rayos cósmicos y
distribuye la energía del sol por toda la Tierra. Tiene un espesor 1000
kilómetros y se divide en varias capas concéntricas sucesivas, que se
extienden desde la superficie del planeta hacia el espacio exterior y las
podemos dividir en: troposfera, estratosfera, mesosfera y termosfera, todas
estas se clasifican en función de la distribución de su temperatura y altura.

La troposfera se extiende desde la superficie hasta unos 10-15 kilómetros de

altitud, contiene el 75% de la masa de gases totales que componen la
atmósfera, su temperatura disminuye con la altitud. Cada 100 m de ascenso
disminuye la temperatura 0.64 ºC, se puede considerar que tiene una mezcla
continua de gases debido a las diferencias de presiones, las cuales originan
una circulación global de masas de aire en la Tierra. En esta capa se producen
los movimientos de las masas de aire (vientos), se dispersan la mayor parte de
los contaminantes y es donde se desarrollan los fenómenos meteorológicos. En
el extremo superior de la capa se encuentra la tropopausa, una superficie ideal
que marca el principio de la estratosfera donde la temperatura llega
aproximadamente a los -57ºC.

Después se encuenta la estratosfera, que se extiende desde la tropopausa (15

km de altitud) hasta la estratopausa (50 km de altitud). En ella podemos
distinguir dos partes: la estratosfera inferior, en la que la temperatura se
mantiene constante, y la estratosfera superior, en la que la temperatura va
aumentando conforme ascendemos, pudiendo llegar a alcanzar 60ºC en su
punto más alto, al cual se le denomina estratopausa. El aumento de
temperatura en la estratosfera se debe a la presencia de ozono (O3). Éste se
localiza a un intervalo de altura de 20 a 40 kilómetros y tiene la propiedad de
absorber gran parte de las radiaciones ultravioletas, de esta manera se
produce ese efecto de calentamiento.

Por encima de la estratopausa se encuentra la mesosfera, esta capa se

extiende por 50 kilómetros, aquí la temperatura vuelve a descender hasta un
mínimo de 85ºC a una altura de 80 kilómetros en este punto se encuentra la
mesopausa.
 
Posteriormente nos encontramos con la termosfera, se extiende desde 90 km
hasta 1.000 km de altura, su espesor varía desde 400-900 km. Sus
temperaturas pueden oscilar entre 500°C y 2.000°C, convirtiéndola en la capa
más caliente de la atmósfera. Se sabe que la termosfera suele ser 200°C más
caliente durante el día que por la noche y tiene una densidad del aire tan baja
que a menudo se considera parte del espacio exterior. De hecho, la estación y
el transbordador internacional espacial que orbitan la Tierra (Telescopio
espacial Hubble) se encuentran en esta capa.

Y por último tenemos la exósfera que es la capa más externa de  la atmósfera,
comienza en el límite superior de la termosfera, a una distancia de 500-1000
km desde la superficie de la Tierra y termina a 10,000 km de la superficie, la
temperatura varía dramáticamente, ya que puede oscilar entre 0°C - 1700°C,
las temperaturas descienden en la noche y aumentan durante el día. La
exósfera contiene el 1% de la masa total de la atmósfera y sus gases están en
estado atómico extendiéndose hasta los 1200 Km.

En conclusión, la concentricidad con la que se presenta la estructura interna y

externa de nuestro planeta nos permite poder desarrollar la vida de una manera
equilibrada, estructurada y diseñada para formar la biosfera tal y como la
conocemos hoy en día.

Referencias bibliográficas

https://agroambient.gva.es/es/web/calidad-ambiental/la-atmosfera-y-sus-capas

https://www.capasdelatierra.org

https://dle.rae.es/concentrico La 23.ª edición (2014 )

https://www.areaciencias.com/geologia/las-capas-de-la-tierra/