Está en la página 1de 1

NUEVO DECÁLOGO DE LA MODISTA

Primero.- La carrera que he escogido esta repleta de oportunidades, me prepararé a


tiempo completo y desarrollaré mi vocación por la Alta Costura.

Segundo.- Adquiriré los conocimientos, practicaré mis tareas con responsabilidad,


repitiendo tantas veces como sea necesario, hasta alcanzar la maestría suficiente.

Tercero.- De hoy en adelante, trataré a todas las personas con amor, porque este va a
ser mi secreto para alcanzar el éxito en esta mi nueva empresa.

Cuarto.- La perseverancia y la fuerza de voluntad me hará alcanzar el éxito, los


premios de la vida se encuentran al fin de cada jornada y no cerca del comienzo.

Quinto.- De aquí en adelante pasaré por alto los obstáculos, jamás tendré en mi mente
palabras como: no puedo, imposible, irrealizable, impráctico, porque son palabras
necias, no permitiré jamás que ningún día termine en fracaso.

Sexto.- Persistiré lo suficiente hasta alcanzar la victoria, jamás quedaré satisfecha con
los éxitos, así como tampoco me alabaré por hechos que en realidad son pequeños
aun para ser reconocidos.

Sétimo.- De aquí en adelante dedicaré todos mis esfuerzos a practicar y mejorar y


pulir, porque es así como edificaré mi carrera, he venido a este mundo con ojos para
que vea y una mente para que piense y dos manos para dar forma y crear.

Octavo.- Saludo este nuevo amanecer con exclamaciones de gozo, alzo mis brazos y
agradezco el nuevo día. Los deberes de hoy los cumpliré hoy, aprovecharé todas las
horas hasta su máximo, con más ahínco que nunca.

Noveno.- Dominaré todas mis emociones y haré que los días sean felices y
productivos:
Si estoy deprimida, cantaré.
Si estoy triste, reiré.
Si tengo temor, daré un paso adelante.
Si me siento pequeñita, recordaré mis metas.
Trabajaré con mucho empeño para no estar triste, seré feliz, el éxito me sonreirá.

Décimo.- Debo adquirir habilidad, debo prosperar con amor, asignarme tareas y
desempeñarlas hasta alcanzar el éxito, tendré la disciplina y adquiriré el hábito de no
cejar nunca; llegaré a hacer todo lo que tengo planeado, porque la semilla está
plantada y germinará en la Viña del Señor.
¡ Bendición Dios mío ¡

También podría gustarte