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IMPORTANCIA DE LAS RELACIONES ECOLÓGICAS EN EL PROCESO DE COEVOLUCIÓN Y

EVOLUCIÓN

En los últimos años se ha intentado comprender las relaciones ecológicas entre las especies
que comparten un determinado hábitat, así como, su relación con los procesos de evolución
y coevolución. Para ello, los investigadores se han centrado en entender las relaciones
bióticas y exponer el concepto de nicho ecológico.
En las relaciones bióticas se encuentran vinculada la competencia de dos o más individuos
de la misma población (intraespecíficas) o de poblaciones distintas (interespecíficas), por
los diferentes recursos y condiciones de un hábitat, que son fundamentales para la
supervivencia y reproducción. Además, involucra el concepto de nicho ecológico, como el
espacio determinado por las condiciones óptimas (bióticas y abióticas) que actúan sobre un
organismo y son importantes para su subsistencia y desarrollo. Se divide en nicho
fundamental (las posibles condiciones abióticas) y realizado (restringido por las
interrelaciones bióticas). (Vargas et al., 2019)
Aquellas relaciones ecológicas mencionadas anteriormente, han perdurado en los procesos
evolutivos y coevolutivos, como mecanismos fundamentales que permiten la coexistencia
entre especies de un determinado hábitat. Puesto que, cada una de las especies tiene un
nicho realizado, el cual reduce de una u otra manera la competencia con otras especies y el
traslape de nicho, para así asegurar su subsistencia. Es decir, que cada especie utiliza el
hábitat de manera diferente como, por ejemplo, alimentándose de diferentes especies, en
distintas proporciones (Leon Eolisa et al., 2010).
También, las especies presentan características fisiológicas que se trasmiten a la
descendencia, manteniendo así las características del nicho ecológico. Sim embargo, el
nicho está influenciado por las condiciones ambientales, así pues, las especies que
presentan un amplio gradiente de tolerancia ambiental poseen mayores probabilidades de
sobrevivir y reproducirse cuando se produzcan cambios abruptos. Puesto que, dentro del
rango se seleccionarán aquellas caracterizas fisiológicas adaptables y serán trasmitidas de
generación en generación, con lo cual, el nicho evoluciona con el tiempo, ocupando nuevas
condiciones (Leon Eolisa et al., 2010).

Bibliografía
Leon Eolisa, H. R., Montes Nieto, A., & Carbaja Navarrol, C. (2010). Conservadurismo
filogenético del nicho ecológico un enfoque integral de la evolución. Revista Ciencias,
98, 64–69.
Vargas, C. M., Luévano, A. E., Ortega Andrade, H. M., Prieto Torres, D. A., Peña Peniche, A.,
& Rojas Soto, O. R. (2019). Una breve introducción a los modelos de nicho ecológico.
In La biodiversidad en un mundo cambiante: Fundamentos teóricos y metodológicos
para su estudio (Moreno CE, Issue December, pp. 39–63). Universidad Autónoma del
Estado de Hidalgo/Libermex.

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