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Él y yo, la luna
Me abraza la vida,
responde el silencio
dame las respuestas
abrazos y besos
devuelve me todo
lo que yo más quiero.
Luna consentida
guardián de los sueños
dile mi secreto
dile que le amo
dile que le espero.
Luna de poetas
dale mi ternura
dale de mi aliento
dibuja en el cielo
un corazón inmenso
para que lo vea con sus
ojos negros.
Él y yo, la luna
canciones y versos
pese a la distancia
más allá del tiempo.
Se juntan las almas
en un mismo cielo
bendita la luna
siempre en silencio
guardará el secreto
de este amor tan nuestro.
Ancestras
No gastaré energía
en llantos ni juramentos,
ni me detendré en caminos
que para mi sean tormento,
soy como el ave fénix
y estoy feliz en mi vuelo.
LECTURAS
Ojeando un trabajo que lo escribí cuando era estudiante de la carrera de Educador Social, me
permito compartir con uds. como forma de mostrar que diferentes son las realidades de chicos
que quieren abrirse camino en la vida, frente a obstáculos adversos.
Como educadora de un centro de INAU pude experimentar en carne propia lo que es carecer de
afectividad, de un entorno familiar, de no tener para el sustento diario, de un desarraigo del seno
familiar para vivir en un centro con personas diferentes que rotan cada ocho horas. No todas son
iguales, no todas los tratan de la misma manera, no con todas se sienten contenidos, y son
chicos que recién salen a la vida.
Debo aclarar que siempre trabajé con adolescentes femeninos y masculinos. Sentí que no podía
trabajar con más pequeños. No podía lidiar con esas personitas me sentía muy vulnerable. Me
resistía creer que fueran depositados por sus padres, en una institución, desentendiéndose
muchas veces de sus deberes como progenitores. No en todos los casos, a veces la necesidad los
obligaba.
Cuando transitan la adolescencia es diferente y sus historias se desarrollan en un centro, muchas
veces buscando la apoyatura de la institución que deben abandonar cuando llegan su mayoría de
edad. Cumplíamos el rol de educadores en lo cotidiano, nuestra tarea era un acompañamiento en
los diferentes procesos que viven, en ese período de la vida. Procesos a veces difíciles por su
situación económica o psicológica. Para el común de la gente, es normal que el chico concurra a
la escuela, luego la secundaria, estudie algunas de las áreas de administración o informática
para posteriormente ingresar al mercado laboral. Esto tan normal a los educadores de INAU,
nos costaba mucho tiempo de diálogos, marchas y contramarchas, sin respuestas que a veces
terminaba en una deserción de la educación formal. Esta población se caracteriza por la
inmediatez “el aquí y ahora” y “ahora” significaba en una serie de solicitudes, que no podíamos
dar y su accionar va en dirección contraria, a las propuestas nuestras, o lo que la institución
podía brindar. Demandaban más allá de las posibilidades. En sus hogares no existen “espacios
físicos” para ellos y a veces no hay un “espacio afectivo” con marcada de límites que a esa edad
lo necesitan. Lo que hacía específica nuestra acción educativa, es la transmisión de hábitos y
costumbres, tareas del cotidiano que posibilitaran una convivencia posterior a futuro. El
principal objetivo era prepararlos para el egreso, que terminaran el ciclo escolar y la secundaria.
Esa tarea nos resultaba tan difícil. En su mayoría no lograban terminar el liceo.
Necesitaba hacer esta introducción para poder entender lo que voy a narrar.
Mi historia es la de una chica, que llegó a nuestro centro con un vínculo muy malo con su
madre. Habían tenido varios episodios de enfrentamiento en la justicia a raíz del maltrato que
recibía de parte de su progenitora, ella y su hermanita. Los enfrentamientos siempre terminaban
en la seccional por denuncias de su madre. Desde un principio se mostró muy inteligente, en
nuestros diálogos evidenciaba una sed de superación y un deseo enorme de seguir estudiando.
Su objetivo era conseguir un buen trabajo y liberar a su hermanita de su madre. Fue líder en su
grupo, quería que sus pares estudiaran también, aprovecharan el amparo de la institución, que
les brindaba todo, techo, alimentación, libros, boletos. Así como lo decía lo llevaba a la práctica
pregonaba con el ejemplo.
Concurrió a División Educación de INAU, y realizó el ciclo secundario en un período menor de
tiempo, allí había profesores de todas las materias, y tenía una atención personalizada. Siempre
se destacó por su firmeza en las convicciones, nada ni nadie la hacía cambiar de idea, tenía un
objetivo y haría todo lo posible para lograrlo. Cada materia que salvaba, venía muy feliz a
compartirlo con los educadores. Era diferente al resto del grupo, que eran apáticas con poca
atracción al estudio.
La educación consistía que se convirtieran en jóvenes con autonomía, que respeten al otro y a sí
mismas, que exijan respeto, que su autoestima tan disminuída vaya en aumento.
En la carrera de Educador Social uno de las reglas es “la distancia óptima” Y ¿Qué es la
distancia óptima? Es una dimensión imprecisa de la relación educativa, la distancia imaginaria
que debe existir entre educador y educando para que se permita operativizar el hecho educativo.
Es diferente para cada educador y cada educando, diferente de acuerdo a los contextos. Es el
lugar donde el educador debe ser libre, se acerca y se aleja tratando de posicionarse en el mejor
lugar que le permita concretar el hecho educativo. En esta distancia debe estar el límite, que se
debe establecer relacionado con la afectividad. No debemos involucrarnos afectivamente con el
educando. No se niega la afectividad, expresar lo que se siente en ese momento, en ese
encuentro con el otro, pero no permitir que esos sentimientos nos dominen. Después de estas
precisiones acerca de la relación educativa, para culminar el final de la historia.
La chica terminó sus estudios, cumplió su objetivo, casi sin obstáculos, impulsada por el
enorme deseo que tenía de hacerlo.
No salía de mi asombro y alegría cuando luego de dar un examen de ingreso en la policía, fue al
centro a compartir conmigo ese éxito, ese su éxito. Me abrazó, me dijo que quería compartir
conmigo su alegría, según ella yo había contribuido a ese logro. Desde otro ángulo, otra
perspectiva, otro entorno, sea un hecho sin trascendencia. Sentí una enorme satisfacción, y no
puedo establecer la distancia óptima porque soy humana y tengo sentimientos. Quedará en mi
memoria que una de nuestras chicas culminó sus estudios, cumplió su objetivo se puede
sostener laboralmente. Para esta población tan carente de afectividad, de un sostén económico,
obtener esto es uno de los pasos más importantes en su vida.
Maria J. Duarte
Articulos y Conferencias
Si bien es el título que he elegido para esta presentación, “Egipto, Tierra de Faraones”,
es una película estadounidense de 1955, dirigida por Howard Hawks, ambientada en
el antiguo Egipto.
Mi pasión por Egipto data del colegio; en aquella época hice un trabajo sobre la tumba
de Tutankamón; y hoy, repetimos.
La tumba KV62, situada en el Valle de los Reyes, es una tumba real egipcia, que
contiene a la momia de Tutankamón. Fue descubierta en 1922 por Howard Carter bajo
los restos de las viviendas de los trabajadores de la época ramésida (XIX Dinastía de
Egipto), lo que la salvó de los saqueos de ese período.
Como dato curioso Carter logró fotografiar algunas ofrendas florales, que se
desintegraron al tocarlas.
La tumba consta de cuatro salas, y estaba llena de objetos, pero en desorden. Debido a
su estado y al método meticuloso de estudio de Carter, se tardó ocho años en vaciarla y
trasladar al Museo Egipcio de El Cairo todo lo encontrado; más de 5000 piezas,
incluida la máscara funeraria de Tutankamón, de oro macizo.
Se dice a menudo que la tumba de Tutankamón nunca fue saqueada, pero esto no es
exacto: lo fue por lo menos dos veces, de hecho; no mucho después del entierro, ya que
hay evidencias de que en las puertas selladas se practicó una abertura en las esquinas
superiores, que luego fue precintada más adelante.
Porque no parece haber sido diseñada para un faraón; parece la de un noble que haya
sido adaptada de forma precipitada, como indica el hecho de que sólo fueron pintadas
las paredes de la cámara del sarcófago, a diferencia de otras tumbas reales en que
todos sus muros tienen escenas del Libro de los Muertos.
El Libro de los Muertos era parte de una tradición de textos funeraria iniciada por los
más antiguos textos de las pirámides y textos de los sarcófagos que se inscribían sobre
muros de tumbas o en los féretros y no sobre papiros.
Alguno de los sortilegios del libro de los muertos fueron extraídos de estos textos
antiguos y datan del III milenio antes de Cristo. El Libro de los Muertos se introducía
en el sarcófago o en la cámara sepulcral del fallecido.
No existía un único y canónico Libro de los Muertos, sino que hay una variada
selección de textos religiosos y mágicos y difieren notablemente en sus ilustraciones.
Acceso
La escalera de acceso parte de una pequeña plataforma y consta de 16 escalones que
llevan a la primera puerta sellada y enyesada, con muestras de haber sido violada y
vuelta a sellar en dos ocasiones.
Corredor y antecámara
Más allá del primer umbral, un pasillo descendente conduce a una segunda puerta
sellada, y tras ella a la sala que Carter llamó «antecámara». Fue utilizada originalmente
para depositar el material del embalsamamiento del rey, que tras los robos fue
trasladado al interior de la tumba o a la KV54.
Las paredes están sin decorar; Carter la describió como «un caos organizado».
Contenía más de 600 objetos entre los que había tres camas fúnebres, placas con forma
de hipopótamo representando a Tueris, de vaca (Hathor) y de leopardo. También se
encontraban cuatro carros desmontados, uno para caza, otro de guerra y dos
destinados a los desfiles.
Sobre la pared derecha, al fondo, rastros de excavación abandonada indican que se
pensaba ampliar hacia el norte unos dos metros. Al principio de esta pared se
encuentra acceso a la cámara funeraria, cuyas características informan también de la
apertura proyectada.
Anexo
A la izquierda de la pared del fondo de la antecámara, hay un pequeño paso, rodeado
con trazos negros que delimitan la apertura que habría de tener la puerta una vez
terminada, que permite el acceso a otra habitación cuyo suelo tiene un nivel de 90 cm
por debajo de la anterior. Llamada «anexo» por Carter, este describió la existencia de
trazos rojos sobre las paredes. Contenía, en desorden, cestas, jarras de vino, una vajilla
de calcita, perfumes, maquetas de barcos y ushebtis: 280 grupos de objetos que
sumaban en total dos mil piezas.
Cámara de Tutankamón
Otra pequeña habitación, llamada «cámara del tesoro» por Carter, contenía alrededor
de 500 objetos.
Explicaciones de la maldición
La explicación más común a la maldición de los faraones es que fue una creación de la
prensa sensacionalista de la época. Un estudio mostró que, de las 58 personas que
estuvieron presentes cuando la tumba y el sarcófago de Tutankamón fueron abiertos,
sólo ocho murieron en los siguientes doce años. Todos los demás vivieron más tiempo,
incluyendo al propio Howard Carter que murió en 1939. El médico que hizo la
autopsia a la momia de Tutankamon vivió hasta los 75 años.
Algunos han especulado con que un hongo mortal podría haber crecido en las tumbas
cerradas y haber sido liberado cuando se abrieron al aire. Arthur Conan Doyle, autor
de las novelas detectivescas de Sherlock Holmes, fomentó esta idea y especuló con que
el moho tóxico había sido puesto deliberadamente en las tumbas para castigar a
los ladrones de tumbas.
Aunque no hay pruebas de que tales patógenos fuesen responsables de la muerte de
Lord Carnarvon, y recordemos que en esa época se moría de cualquier infección al no
existir los antibióticos, tampoco hay duda de que sustancias peligrosas pueden
acumularse en tumbas antiguas. Estudios recientes de antiguas tumbas egipcias
abiertas en la actualidad que no han estado expuestas a los contaminantes modernos
hallaron bacterias patógenas de los géneros Staphylococcus y Pseudomonas, así como los
mohos Aspergillus niger y Aspergillus flavus. Además, las tumbas recién abiertas se
convierten a menudo en refugio para los murciélagos, cuyo guano puede transmitir
la histoplasmosis. Sin embargo, a las concentraciones halladas típicamente, estos
patógenos sólo suelen ser peligrosos para personas con sistemas
inmunológicos debilitados. Las muestras de aire tomadas del interior de
un sarcófago sellado mediante un agujero perforado, tenían altos niveles
de amoníaco, formaldehído y ácido sulfhídrico que, si bien son gases tóxicos, también
resultan fáciles de detectar en concentraciones peligrosas por su fuerte olor.
Howard Carter, el principal «implicado», murió el 2 de marzo de 1939 a los 64 años, de
muerte natural, 17 años después. Su frase preferida cuando le hablaban de la
«maldición», era: «Todo espíritu de comprensión inteligente se halla ausente de esas
estúpidas ideas.» Y añadía:
Los antiguos egipcios, en lugar de maldecir a quienes se ocupasen de ellos, pedían que
se los bendijera y dirigiesen al muerto deseos piadosos y benévolos... Estas historias de
maldiciones, son una degeneración actualizada de las trasnochadas leyendas de
fantasmas... El investigador se dispone a su trabajo con todo respeto y con una
seriedad profesional sagrada, pero libre de ese temor misterioso, tan grato al
supersticioso espíritu de la multitud ansiosa de sensaciones.
Elizabeth Batista
La cúrcuma
Historia
Las propiedades de la cúrcuma fueron utilizadas por primera vez en
la India entre 610 a. C. y 320 a. C. En aquella época se utilizaba como colorante para
la lana. A lo largo de la historia se ha empleado para colorear partes del cuerpo, pero
su uso más extendido ha sido el de colorante textil. Se emplea para
teñir algodón, lana, seda, cuero, papel, lacas, barniz, ceras, tintes, etc.
Gastronomía
Cúrcuma en polvo.
Es una de las especias más usadas en la gastronomía de la India como colorante
alimentario para el arroz, carne y diversos platos. Actualmente se comercializa como
el aditivo alimentario E100 o cúrcuma. Es el componente que le da el color amarillo
intenso característico a la mostaza preparada tipo americano (la usada en perritos
calientes, hamburguesas, sándwiches, etc.).
Según investigaciones de Germán Fuertes Otero, en algunos países de Hispanoamérica
es conocida como palillo, y en algunos países como Colombia se le conoce
como azafrán de raíz. Es un condimento muy utilizado en la cocina tradicional y se
comercializa tanto la raíz como el polvo.
También se emplea mucho en Okinawa, Japón, donde se sirve junto con el té.
Posibles usos medicinales
Se han hecho investigaciones sobre los fitoquímicos contenidos en la cúrcuma en busca
de potenciales efectos en enfermedades tales como cáncer, artritis, diabetes y otros
desórdenes químicos. Como ejemplo de los resultados de esta investigación básica, la
cúrcuma redujo en ratones la gravedad de los daños en los pulmones como
consecuencia de enfermedades pancreáticas. Existe información circunstancial que la
cúrcuma podría mejorar las condiciones mentales de adultos mayores.
De acuerdo con un informe, se está incrementando la actividad investigadora en la
cúrcuma y la curcumina. A fecha de septiembre de 2012, los Institutos Nacionales de
Salud de Estados Unidos han registrado setenta y un ensayos clínicos terminados o en
proceso para estudiar el uso de curcumina dietética en varios desórdenes clínicos.
Algunos estudios muestran que ciertos compuestos de la cúrcuma tienen propiedades
anti-fúngicas y anti-bacterianas, pero la curcumina no es uno de ellos. Sin embargo, se
ha demostrado que la curcumina es un potente antioxidante y puede neutralizar
radicales libres.
En otro estudio preliminar, se está analizando la curcumina para saber si altera la
respuesta a la quimioterapia en pacientes con cáncer de intestino avanzado, tal como
demuestra un estudio en laboratorio. Sin embargo, existe evidencia disponible donde
se establece que la ingesta oral de curcumina contribuyó positivamente en la reducción
de lesiones en cáncer de colon en fumadores.
Asimismo, estudios animales han demostrado que la curcumina podría aumentar los
niveles cerebrales de BDNF (representa la neurotrofina de mayor expresión en el
sistema nervioso central de los mamíferos, desempeña un papel importante en la
proliferación, diferenciación y supervivencia de las neuronas). La acción de la
curcumina también ha sido comparada con el uso de fluoxetina en el tratamiento de la
depresión, encontrándose mejoras equiparables entre ambos.
Por otro lado, en un estudio realizado en pacientes con artritis reumatoide, el consumo
de curcumina resultó ser más efectiva que los fármacos antiinflamatorios. Además,
gracias a su acción terapéutica, la cúrcuma ha sido usada en la medicina tradicional
china y ayurvédica en el tratamiento de la artritis.
Otros usos
La cúrcuma también se utiliza para la formulación de algunos cosméticos. Se emplea
en algunos protectores solares, y las mujeres hindúes la usan como fijador de cabello.
Además, el gobierno tailandés está participando en un proyecto para aislar un
compuesto de la cúrcuma llamado tetrahidrocurcuminoide (THC). El THC es una
sustancia incolora que tiene propiedades antioxidantes y puede tratar algunas
inflamaciones de la piel. Esto hace que sea ingrediente de muchos cosméticos.
Además, un papel impregnado en cúrcuma se emplea en la detección de boro.
La cúrcuma no es de fácil absorción para el organismo humano (2 gramos de cúrcuma
no se detectan en el suero tras ser ingerida).
Biodisponibilidad
Los beneficios terapéuticos de la cúrcuma pueden verse afectados por la baja absorción
y solubilidad de la curcumina (uno de sus componentes más estudiados). Esto afecta
de manera directa su biodisponibilidad, es decir, la capacidad de la cúrcuma de llegar
al tejido diana en la cantidad adecuada y poder ejercer la acción terapéutica deseada.
Buscando mejorar la biodisponibilidad de la curcumina, el principal componente
utilizado en complementos alimenticios con fines terapéuticos, diversas empresas
farmacéuticas han optado por mezclar la curcumina con otros componentes como la
piperina, fosfolípidos, aceites esenciales de cúrcuma, y otros aditivos.
Los fenicios
Los fenicios fueron el primer pueblo de la Antigüedad en establecer un mercado de
especias. Tiro, una de las ciudades más importantes de su imperio, fue el centro
comercial de las especias en el Mediterráneo; se convirtió en el punto de encuentro de
mercaderes de todo el mundo conocido para conseguir dicha mercancía. También fue
ese pueblo el que estableció la conocida Ruta de las Especias. El destino final de la ruta
era el golfo Pérsico, desde el cual se embarcaban los convoyes hasta la costa malabar.
Para llegar hasta allí, desde la costa mediterránea existían dos recorridos, el primero
rodeaba la península arábiga por el mar Rojo y el segundo era a través
de Antioquía para llegar a Babilonia; desde allí seguía el curso de los
ríos Tigris o Éufrates.
Este monopolio fue debido a que los fenicios fueron los únicos que conocían la
procedencia de tan preciado bien, secreto que era celosamente guardado ante las
insistentes preguntas del resto de los mercaderes. Sin embargo, no pudieron impedir
que al conquistar Alejandro Magno su imperio, se hiciese éste con el control del
mercado de las especias, hacia el siglo IV a. C. Tras la fundación, en territorio egipcio,
de Alejandría, el imperio alejandrino obtuvo una de las bases económicas para su
prosperidad, desplazando a Tiro como centro del comercio del Mediterráneo.
Roma
El imperio romano recogió la herencia helena. Abriendo una nueva ruta por mar,
partían desde Egipto hasta las islas Molucas; para esta labor se servían del viento de
los monzones. Así, poco a poco, fueron cayendo en desuso las largas y costosas rutas
terrestres y se estableció una ruta anual que partía en abril para aprovechar los
monzones del sudoeste, regresando en octubre, época de los monzones del nordeste.
Dicho convoy surtía a Roma de especias, tanto para cocina
(canela, comino, cúrcuma, jengibre o pimienta, principalmente), como para aceites,
cosméticos y perfumes. La principal fuente donde están descritos los usos culinarios,
medicinales y cosméticos de los romanos es un tratado de recetas que todavía se
conserva, escrito e ilustrado por Apicio.
Cuando las oleadas de los bárbaros germánicos desbordaron los límites del imperio
romano, el comercio de las especias se desplazó a la capital oriental del
imperio, Constantinopla, el relevo lógico de la ciudad del Tíber, por su mayor cercanía
a ruta de la seda. El floreciente comercio oriental hizo que disminuyese
considerablemente la cantidad de especias que llegaban a Europa. Durante esa época,
aparecieron dos nuevas especias que rápidamente se convirtieron en las preferidas de
los constantinopolitanos: el clavo y la nuez moscada, ambas procedentes de Indonesia
y que eran compradas a un elevado precio a mercaderes hindúes.
La Edad Media
Tras la conquista de Alejandría por los otomanos en el año 641, comenzó un declive en
el uso de especias en el mundo cristiano. Las razones fueron el férreo control que
realizaban los árabes, motivando la ausencia de contactos comerciales entre Occidente
y China. Las pocas especias que llegaban eran vendidas a precios desorbitados y solo
al alcance de las clases más pudientes. Ello propició que se comenzasen a cultivar en
los propios territorios para poder continuar con la costumbre de los ciudadanos
europeos de tener las despensas surtidas con todo tipo de especias. Son destacables las
labores realizadas en ese sentido por determinados monasterios en sus huertos y
jardines; al principio los motivos fueron para fines medicinales, pero la escasez hizo
que se terminasen cultivando para proveer a los mercados urbanos. Con motivo
del comienzo de las Cruzadas (1096), el comercio con los árabes se recuperó.
Las principales ciudades en este nuevo intercambio comercial fueron las
italianas Génova y Venecia. Se logró que de nuevo llegasen a Europa la pimienta,
el cardamomo, la canela, la nuez moscada y el azafrán. Gran parte de la prosperidad
de las ciudades italianas en esa época fue debida al comercio de las especias.
Alrededor del siglo XIV era rara la cocina occidental en la que no se condimentaba la
comida, si se exceptúan los más viejos reinos cristianos del norte de la península
ibérica, donde hacer las comidas muy especiadas era considerado uso de moros (las
cocinas de reinos conquistados con posterioridad, al sur del Tajo, sí mantuvieron el
uso). Entre las hierbas y especias más cultivadas en el territorio estaban el comino,
el hinojo, la menta, la salvia, el cilantro, el ajo, el eneldo, la adormidera y,
especialmente, las preferidas en Europa: clavo de olor, macis, azafrán y pimienta. Se
han encontrado registros de la abadía de Norwich que permiten saber que entre 1346 y
1350, estas últimas especias tuvieron un gran valor como mercancía de pago, al igual
que había ocurrido con la sal en la Antigüedad.
Elizabeth Batista.
Fui al jardín de infantes evangélico de Br. Artigas y Gral. Flores y concurrí por tres meses al
Sagrado Corazón, para cursar primero de escuela.
En ese momento emigré junto con mi familia a España; en primer lugar Lejona, (Vizcaya),
Pamplona y Vitoria.
Cursé allí, a partir de 2º de escuela y hasta 4º año de liceo, en diferentes colegios, liceos o
institutos.
Allí cursé hasta 1993 en el que abandoné para dedicarme a dar clases particulares, actividad que
llevé a cabo durante más de una década, para finalmente concurrir al Instituto de Profesores de
Treinta y Tres durante el breve período en el que radiqué en esa ciudad.
Mi primer empleo fue en 1989, promocionando una base de datos para “Ingeniería de
Sistemas”, y actualmente, y desde 2014, trabajo en DNI (Dirección Nacional de Industrias, del
Ministerio de Industria, Energía y Minería).
Escribo desde los quince años, habiendo publicado mi primera obra “Sólo Palabras”, hace poco
más de un año.
Integro el grupo cultural Abrace y soy colaboradora en el programa “Con Aroma de Café”.
MUNDO