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DESCRIPCIÓN DE LA ACTIVIDAD
Estimado estudiante, en la presente guía (N°8) desarrolla los siguientes puntos
Es el periodo que se extiende desde la aparición de los primeros seres humanos, hasta el
surgimiento de la escritura en el año 3500 a. de C., aproximadamente. Todo lo que se conoce
sobre este periodo está basado en los hallazgos arqueológicos. A partir de los fósiles humanos, las
herramientas, las pinturas y la organización de los poblamientos, ha podido reconstruirse esta
etapa de la historia, de la que no existen documentos escritos.
La historia antes de la escritura se divide en dos etapas: la Edad de Piedra y la Edad de los
Metales.
• La Edad de Piedra está formada por tres
periodos: el Paleolítico (piedra tallada), el
Mesolítico (piedra media) y el Neolítico (piedra
nueva o piedra pulida).
• La Edad de los Metales se desarrolló en tres
etapas: la Edad del Cobre, la Edad del Bronce y
la Edad del Hierro.
• En el Paleolítico, los seres humanos de ese
entonces (Homo habilis, Homo erectus y Homo
sapiens) fueron nómadas; es decir, viajaron en
grupos de un lugar a otro, llevando consigo
todas sus pertenencias. Los seres de este periodo se organizaron en grupos (primero hordas y
después tribus) para abastecerse de alimentos mediante la caza y la recolección de frutos. Crearon
las primeras sepulturas y las pinturas rupestres e hicieron grabados en hueso y estatuillas de piedra.
• El Mesolítico es un periodo de transición entre el Paleolítico y el Neolítico en Europa. Coincidió
con la etapa final de una glaciación que influyó en la aparición de nuevas especies animales y
vegetales. Los seres humanos crearon pequeños instrumentos y herramientas elaboradas con
sílex, continuaron practicando la caza y la recolección y se avanzó en la domesticación de
animales, como la cabra y la oveja, y el cultivo de algunas plantas. Mediante la práctica de la
caza, los grupos humanos avanzaron hacia los territorios del continente asiático y de América.
• En el Neolítico, se dio el paso del nomadismo al sedentarismo, a partir de la consolidación de
la agricultura. Como consecuencia, la población creció y aparecieron sociedades más
complejas. El ser humano conoció el cobre, un metal blando y fácil de conseguir con el que se
fabricaron nuevas herramientas. También, aparecieron la rueda, el ladrillo y el torno del
alfarero, que facilitaron la creación de la cerámica, permitiendo la elaboración de recipientes
para acumular los granos, los frutos y las semillas.
• La población, ocupada en tareas como la agricultura, la artesanía y la ganadería, condujo a
una división del trabajo, que facilitó la posibilidad de conservar excedentes de producción.
Estos excedentes comenzaron a intercambiarse y así nació el comercio.
• En el Neolítico, surgieron las primeras ciudades en Mesopotamia, en los ríos Tigris y Éufrates;
en África, en el Nilo; en India, en el río Indo y en China, en el río Huang Ho,