Está en la página 1de 3

El invencible verano de Liliana y la visibilidad del feminicidio en

los últimos años.


Acosta García Pedro Damián

En abril de este mismo año, la escritora mexicana Christina Rivera Garza sorprendió a la
comunidad de lectores hispanohablantes, especialmente los de su propio país: México, con
su más reciente obra “El invencible verano de Liliana”. Con este libro la escritora no sólo
llamó la atención de los aficionados de la literatura en el país, sino que atrajo a un sector
específico de la población, refiriéndome a las personas que están adentradas en el tema de
los movimientos feministas y más específicamente en los relacionados con los feminicidios
que son tan frecuentes en México. Esto es gracias a la premisa misma de su novela, la cual
es acerca de su investigación independiente acerca del asesinato de su propia hermana, la
cual en el momento en que ocurrió, no fue considerada un feminicidio o acto de odio hacia
la mujer, sino como un homicidio común y corriente, o un “crimen pasional” más.

Para entender la razón por la que este libro llamó tanto la atención es importante conocer en
este caso que es una novela basada en una historia real, específicamente en la experiencia
de la propia autora que tuvo al investigar el caso del asesinato de su hermana, que
mencioné hace poco. Este factor es sumamente importante porque si bien, contiene
elementos ficticios por el bien de la calidad de la obra, estos son mínimos, así que por así
decirlo los lectores pueden leer esta obra como una especie de documental, un documental
donde pueden conocer la perspectiva de una mujer que perdió a su hermana a causa de un
feminicidio, que no consideraron como tal, y por tanto, el asesino que en este caso era el
exnovio de Liliana, y en el caso del asesinato en general, no hayan tenido el trato que
debieron haber tenido mediáticamente, ya que por ejemplo, si hubiera sido un crimen
cometido en la actualidad, los medios lo considerarían como lo que en verdad es: un crimen
de odio hacia la mujer.

Para ayudarnos a entender mejor el trasfondo en el que vivía Liliana, Christina se apoya de
las cartas que va encontrando mientras busca pistas acerca de los acontecimientos, y si bien
como he mencionado antes, el libro contiene partes ficticias para hacerlo más interesante
para el lector, la historia principal es respetada, y esto ayuda a que cualquier persona,
especialmente una mujer, pueda sentirse identificada con las situaciones que ocurren tanto a
Christina como a su hermana Liliana, ya que estamos en un país en que este tipo de
crímenes e injusticias son desafortunadamente algo de todos los días. También es relevante
que la historia en cierto punto se vuelve muy atrapante y sobre todo, la manera en que es
contada hace que los lectores entiendan más el punto de vista de ambas, cuenta hasta la más
mínima experiencia o detalle de lo que ocurre. Como ejemplo de lo anterior podemos tomar
el cómo las cartas que va recolectando Christina, la autora, describen muy bien y nos
ayudan a tener claro el cómo se sentía su hermana Liliana en cada momento, el cuánto
sufría, y los problemas cotidianos que tenía, sus deseos, sus metas a futuro, sus amistades,
cómo se llevaba con sus seres queridos, lo que en cada momento de la lectura nos recuerda
que hablamos de algo que no solo es real, sino que ocurre todos los días en este país, llena
especialmente a las lectoras de miedo, de que algo así les pueda ocurrir, a ellas o a alguien
cercana, ya que el libro también se encarga de reflejar los sentimientos de la escritora,
contando el punto de vista de los familiares de las víctimas.

Sí bien es verdad que la obra en ciertos puntos narra los acontecimientos y/o lugares
bastante a detalle, o cuenta partes que no parecen ser relevantes, o al menos en lo que
respecta al tema que nos corresponde que es el de los feminicidios y la visibilidad que
tenían atrás, en los años 90. Nos cuenta lo suficiente para que el lector tenga muy en claro
que lo que ocurrió fue efectivamente un feminicidio, un acto de odio que su expareja, (o al
menos así lo pensaba él) fue desarrollando hacia Liliana por ser mujer que lo terminó
llevando a cometer el crimen. Todos los detalles que se van revelando mientras Christina
investiga más y más nos hacen notar este detalle a la vez que nos sigue poniendo en el lugar
de la víctima, haciendo que, nuevamente, veamos este fenómeno como algo no sólo algo
más real, que lo es, sino también como algo muy grave que le puede pasar a cualquiera sin
tener realmente la culpa de absolutamente, sólo ser víctima de algo que nos decidieron
como lo es su género.

Al final del día, esta novela nos deja muy en claro una cosa, y es que la investigación del
asesinato de Liliana no había sido tomada con la seriedad que debía, y el crimen no fue
catalogado como lo que fue, debido al año en que ocurrió, donde nadie le daba importancia
a este tipo de crímenes debido a que los medios no lo hacían ver como algo relevante, pero
también nos hace notar el cambio que ha ocurrido a lo largo de todos estos años, ahora la
sociedad por fin sabe que los feminicidios son algo real, que ocurre todos los días y que es
un problema cultural muy grave, sabemos que tenemos un caso de desigualdad social muy
grave, lo cual es un avance, porque reconocer una problemática es el primer paso para
corregirla. Pienso que así como de los noventas a la actualidad la concientización del tema
ha aumentado, dentro de unos años esta misma resultará en un esfuerzo por eliminar la
desigualdad de género y por lo tanto, los crímenes de odio como los feminicidios.

También podría gustarte